Primeros años de Cristina Elisabeth Fernández (1953-1974)

Tolosa

– A principios de los años cincuenta, era un barrio obrero que había empezado a desarrollarse por estar cerca del trabajo del ferrocarril. Cuando Cristina nació, y durante buena parte de su infancia, las calles eran de tierra pero circulaba el tranvía.

– Martín Iraola loteó una fracción de tierras en las "Lomas de Ensenada", lugar donde en breve tiempo se formó un pequeño pueblo al que llamó Tolosa, en recuerdo de la localidad vasca donde había nacido su padre.

– El impulso del ferrocarril al puerto de Ensenada aumentó el movimiento de obreros y la conveniencia de dar albergue a conductores de carretas, pasajeros o hacendados en tránsito.

Familia

Origen de nombres y apellidos

Carlos: Del alemán Karl (hombre) o Kerl (individuo).

Eduardo: Del inglés ead (riqueza) y ward (guardián). Guardián de la riqueza.

Wilhelm: Del alemán Will (atractivo) y Helm (casco).

Ofelia: Del griego socorrista.

Cristina, Crista: Del griego ungida, traducción de Jesús en hebreo.

Elisabeth: Del hebreo Elisheba (juramento de Dios) o del latín Isis bella (Isis bella).

Carlos Wilhelm

– Descendiente de familia alemana inmigrante, probablemente fue obrero ferroviario.

– De su esposa se sabe que fue una española que murió joven, y que trabajaba como doméstica en La Plata.

– Padre de Ofelia y abuelo materno de Cristina también mantuvo una distancia irreconciliable con su yerno Eduardo Fernández. Entre ellos el pasado pesaba.

– Vivió sus últimos años en una construcción en el fondo de la casa de su yerno, en Tolosa, con otra de sus hijas, hermana de Ofelia y tía de Cristina. El día lo pasaba en la vivienda principal con Cristina, pero antes de la llegada de Eduardo, se desplazaba a su vivienda del fondo para no encontrárselo.

– Tal vez por esto, el abuelo Carlos fue la figura masculina de mayor peso en la infancia y juventud de Cristina.

Ofelia Wilhelm

1929. Nació como hija de un descendiente alemán obrero, y una española empleada doméstica.

– Creció huérfana de madre, en Tolosa, bajo la tutela de su padre Carlos Wilhelm y de una tía. Los Wilhelm siempre habían sido pobres.

– Era empleada en AERI (Asociación de Empleados de Rentas e Inmobiliarios), cuando quedó embarazada de Cristina.

1958. Se casó con Eduardo Fernández.

– Simpatizante del club de fútbol de Gimnasia y Esgrima de La Plata, reconocida militante peronista "evitista".

– Después de la muerte de Eduardo Fernández su esposa Ofelia Wilhelm se hizo cargo de su participación en la empresa. Pero nada fue lo mismo. Ofelia no compartía criterios y los socios nunca le perdonaron que no hubiera dejado pasar a algunos ex compañeros al velatorio de Eduardo. Ésta fue una de las causas de la quiebra de la compañía en diciembre de 2004.

– En la casa de Ofelia "volaban los platos", cuando se hablaba de futbol o política porque Eduardo era de Estudiantes y radical, mientras que Ofelia era de Gimnasia y peronista.

Eduardo Fernández

-"Fernández", "Fernán", "Hernando", "Hernández", "Ferrán", provienen del germánico "Frede-nand", "Frid-nand", o "Frið-nanth" (Frei-nannt o Fried-nannt) llamado libre o pacífico.

1921-1982. Descendiente de inmigrantes españoles, sin profesión, terminada la primaria empezó a trabajar.

– Se dedicó a las actividades agropecuarias primero y luego al transporte como miembro de una cooperativa.

– Detrás de la historia de un chofer de colectivos se esconde una relación conflictiva entre padre e hija. Se trata de Eduardo Fernández y Cristina Fernández. En sus primeros años Cristina sentía cierta vergüenza de sus progenitores, por lo que buscó reinventar su historia, evadiendo parte de su pasado.

El padre de la presidenta electa tiene la historia común de un hombre común:

– Con la ayuda de sus padres, Pascasio y Amparo, compró la mitad de un colectivo del Expreso City Bell, la antigua línea 3 que unía esa localidad con La Plata, y se convirtió en el chofer del interno 10.

– Era un hombre blanco, pecoso, de una gran contextura física. El rasgo que más lo apesadumbraba era su tartamudez, por lo que algunos lo llamaban "el tarta". Sin embargo sus compañeros de la línea lo llamaban "el Colorado" por el color de su piel.

– Las jornadas laborales en aquella época eran intensas. Los conductores debían cumplir turnos de hasta 14 horas por día. Al Colorado no lo asustaba trabajar, era súper responsable, siempre llegaba a horario, era un laburante.

– De joven le gustaba salir de noche y tenía éxito con las mujeres.

– Ofelia y Fernández se conocieron en un colectivo que manejaba su hermano.

– Eduardo embarazó a Ofelia dentro de una relación que no le convencía y después terminó casándose por mandato social.

– Fue uno de los 23 socios que dieron inicio a la compañía. Durante muchos años trabajó como chofer, hasta que llegó a ser dueño de tres colectivos y, una vez formada la cooperativa, cobraba además el monto correspondiente a su parte.

– A mediados de 1970, y ya con unos 50 años, la comisión directiva del Expreso, lo eligió jefe de personal, cargo que ocupó hasta su muerte, con unos 61 años, el 26 de abril de 1982.

– Un par de años antes los médicos le habían diagnosticado un cáncer de pulmón. Era un gran fumador, consumía más de un paquete de Jockey largos por día. Cuando se enfermó tuvo que empezar a faltar al trabajo, algo que no había hecho en más de 30 años.

– Vivió inicialmente en la casa de su familia en Tolosa, y finalmente en una casa comprada también en Tolosa, con su suegro, su esposa y sus dos hijas. 

– Era antiperonista acérrimo y festejó cuando derrocaron a Perón. Fue socio del Jockey Club de La Plata.

– Quienes compartieron con él largas horas, en las primeras terminales de la empresa, lo recuerdan como un hombre de carácter fuerte e irritable. No era maleducado, de decir malas palabras, pero sí calentón. Cuando se enojaba podía gritar en el medio de la calle, o agarrarse a trompadas con alguno en el trabajo.

– Mi hermano fue un señor, siempre vivió orgulloso de sus hijas, y se preocupó para que nunca les faltara nada, afirma Sara Fernández, hermana de Eduardo y tía de Cristina.

– Un hijo de uno de los socios de Fernández afirma: Los colectiveros eran todos mujeriegos porque arriba del colectivo era habitual conocer a muchas chicas de la zona que viajaban todos los días. Ninguno tenía una sola mujer. Mi padre, por ejemplo, tuvo cinco esposas, yo soy hijo de una de ellas y mis hermanas de las otras dos. Guardaba códigos de silencio, que ocasionaron que la verdadera historia no fuera transmitida a los hijos, y los viejos se llevaron todos los secretos a la tumba.

1958. Hacia fines de junio:

* Oficializó el casamiento con Ofelia, embarazada ahora de Giselle su segunda hija y quien nació el primer día de 1959.

* Asumió la paternidad de Cristina.

* Y fue a vivir con su esposa Ofelia, sus dos hijas Cristina y Giselle, su suegro Carlos y una hermana de Ofelia, hija de Carlos, a su propia casa.

– Los pocos testigos que conocieron su vida familiar y laboral aseguran que había dos Fernández. Uno era el personaje divertido, que se hacía querer entre sus compañeros y socios colectiveros. Otro el Fernández adentro de su casa, un hombre distante, que parecía más un visitante que un padre de familia.

– Por su trabajo estaba muy poco tiempo en la casa. Se iba a la mañana temprano y volvía justo para cenar. Cuando la familia comía en la cocina, no había demasiado diálogo, el silencio se disimulaba con la televisión, que siempre estaba prendida.

Una niñez y adolescencia con problemas de pobreza

1953. Nació el 19 de febrero al mediodía.

– La comadre vivía a unas pocas cuadras de la precaria vivienda alquilada en la que habitaba la familia de Ofelia Wilhelm.

Su mamá, quien por entonces era una joven de apenas veinticuatro años estaba soltera.

– El embarazo y la maternidad sin casamiento, todavía en los años cincuenta, eran un problema de vergüenza que se vivía como un escándalo y una tragedia.

– Los Fernández tenían vacas y algunas tierras en City Bell, un patrimonio que para los Wilhelm era casi un sinónimo de riqueza.

1957. Eduardo Fernández, que ya era propietario de un colectivo, todo un capital para la época, compró un terreno y construyó una casa en Tolosa.

1959. Estudios primarios. Cristina con casi seis años, comenzó en marzo la primaria en la humilde escuela 102 Dardo Rocha, a tres cuadras de la casa materna, junto con veintinueve chicos más.

1964. Estudios secundarios:

– Asistió al Colegio Comercial San Martín de La Plata (actual Escuela de Educación Media 31).

– Continuó en el Colegio Nuestra Señora de la Misericordia de la ciudad de La Plata, donde cursó cuarto y quinto año de la secundaria, de los 15 a los 18 años.

– Se graduó de perito mercantil. Allí según ella estudió, discutió y se divirtió jugando truco y fumando en horas libres.

1971. Estudios universitarios:

– Al terminar la secundaria Cristina entró en la Universidad Nacional de la Plata donde empezó su militancia política y donde conoció a su futuro esposo Néstor Kirchner en el año 1974.

– Cuando decidió inscribirse en la carrera de Derecho no pudo hacerlo, ya que exigían un bachillerato en Humanidades.

– Cursó un año la carrera de Psicología.

– Finalmente ingresó a la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad Nacional de La Plata.

– En La Plata pasó su infancia, su adolescencia y su primera juventud. .

Vida familiar

– Jamás pudo superar la sensación de que su nacimiento no había sido programado.

– Parece que efectivamente Cristina es fruto de una relación casual de Eduardo Fernández y Ofelia Wilhelm, y que Eduardo se hizo cargo de la familia unos años más tarde, como suele suceder en estos casos.

– No nació en un sanatorio ni en un hospital, sino en la casa de una comadre partera en Tolosa.

– Un compañero contemporáneo de Ofelia Wilhelm afirma: Los chicos que nacían en un sanatorio, tenían suficiente dinero, los que nacían en un hospital público, no lo tenían. A la partera iban los abortos y las madres solteras.

– La relación de sus padres la marcó mucho, padecía por ello y procuraba estar bastante tiempo fuera de su casa.

– Renegaba y le daba vergüenza su familia.

– La incomodaba el barrio humilde donde vivían, la casa adornada con flores de plástico y animalitos de porcelana.

– No mostraba a su familia. Nunca festejó un cumpleaños con amigos en su casa, ni tampoco visitaba a sus parientes.

– La fastidiaba el fanatismo de su madre por el fútbol, y la simpleza de su padre colectivero. No le gustaba hablar con él.

– Por eso desde su adolescencia comenzó a construirse a sí misma, e intentó despegarse de su pasado.

– Era una familia extraña. El que vivieran todos bajo el mismo techo, puertas adentro de su casa en Tolosa, parecía una mera circunstancia. Nunca hubo un clima distendido: Ofelia, Eduardo y Cristina eran más que independientes, Giselle vivía alejada de todo gracias a su inocencia.

– Las relaciones familiares de Cristina fueron explosivas por estos motivos. Cristina afirma que la relación entre ella y su padre siempre había sido conflictiva, distante, al contrario de lo que sucedía con su hermana Giselle y su padre, quienes se adoraban. Que su padre no era físicamente cariñoso, pero si mujeriego.

– El hogar donde creció estaba conformado por sus padres, su hermana, su abuelo Carlos Wilhelm y su tía Noemí Wilhelm.

– Este hogar ampliado permitió que su madre pudiera ejercer su tarea gremial. La relación con su padre siempre fue cercana pero de poco gesto demostrativo.

– Ofelia y Cristina mantenían una relación distante con Eduardo prácticamente lo ignoraban. La única que lo recibía con un abrazo era Giselle. Con ella era más afectuoso, aunque no demasiado demostrativo.

– Muchos describen un hogar manejado por la figura avasallante de Ofelia. Pero pocos explican las circunstancias especiales que hicieron que las cosas se dieran de esa manera.

– Sus padres se casaron cuando ella tenía dos años, antes de que naciera su hermana Giselle.

– Ofelia quedó embarazada de Cristina cuando estaba de novia con Fernández. Eso resultaba un escándalo para la época, que no se resolvió hasta que la pareja formalizó su situación, recién cuando su hija cumplió cinco años.

Este era un tema tabú en la casa. Pero aunque todos intentaban evitarlo, estaba siempre presente:

– Ofelia jamás pudo olvidar la soledad de los primeros años con su hija.

– A Ofelia y Eduardo tampoco los unía demasiado el presente que vivían.

* A Eduardo nunca le interesó demasiado el fútbol ni la política, era antiperonista acérrimo y festejó cuando derrocaron a Perón.

* Ofelia siempre fue fanática de Gimnasia y Esgrima de La Plata y una reconocida militante peronista evitista.

– Más que discusiones, entre ellos reinaba una indiferencia total. Jamás se saludaban con un beso, ni hacían planes juntos.

– La relación entre sus padres era tensa, nunca se llevaron bien y con los años se divorciaron.

Cristina y la política

– En lo político su familia estaba dividida. Su padre era abiertamente antiperonista y su madre peronista. Su abuelo Carlos era del conservadurismo bonaerense, pero luego con las reformas en lo laboral que hizo Juan Domingo Perón se convirtió al peronismo.

1962. Su primer contacto con la política fue de 9 años, cuando Roberto Guaresti, padre de unas amigas del barrio, se candidatizó a intendente de La Plata en las elecciones de ese año.

1968. Cuando tenía quince años se mudaron a la actual casa donde vive su madre, en Tolosa. A esa edad todavía no era una militante peronista, pero ya había comenzado a interesarse en la política.

Primer amor

1969. A los 16 años su primer novio fue Raúl Cafferata, un ex rugbier del club San Luis, cuya familia pertenecía a la burguesía platense. Una pequeña burguesía de empresarios y profesionales con aspiraciones aristocráticas que estaban en la fantasía de familias platenses de estratos sociales más bajos.

– Cristina se afanaba por el ascenso social y el liderazgo.

– De joven tuvo una vida absolutamente normal, de ir a bailar a los boliches de entonces.

– Empezó a codearse con un estrato social hasta entonces desconocido para ella y a hacer ostentación de su novio.

– Cristina y Cafferata tuvieron un noviazgo de cinco años. Fue una relación que significó para Cristina un enorme ascenso social, le abrió las puertas a otro mundo.

– El mejor amigo de Cafferata era y sigue siendo Carlos Bettini entonces el embajador en España. Bettini y Cafferata fueron compañeros en el exclusivo colegio San Luis y también jugaban juntos al rugby en el club del mismo nombre.

– Algunos amigos todavía recuerdan lo que le costó convencer a su padre para que se hiciera socio del exclusivo Jockey Club de La Plata. Sólo si él era aceptado, su mujer e hijas podían ingresar como invitadas. Eduardo no quería, le parecía una tontería. Finalmente accedió, pero jamás pisó el club.

Ingreso a la Universidad

1972. Cuando decidió inscribirse en la carrera de Derecho no pudo hacerlo, ya que exigían un bachillerato en Humanidades, por lo que tuvo que cursar un año en la carrera de Psicología.

1973. Ingresó a sus estudios universitarios en la Facultad de Derecho en la Universidad Nacional de La Plata.

Militancia política

– En las dos décadas que van de 1956 a1976, se intentó eliminar del mapa político argentino al peronismo.

– Hacia 1966 hubo un reagrupamiento de fuerzas peronistas y un enorme impulso a cargo de otra generación. Esto dio origen a agrupaciones como la FURN, que reconstruyeron puentes políticos y culturales.

1972. Cristina había iniciado su vida universitaria en Psicología, donde no había agrupaciones peronistas. Allí advirtió las intrincadas relaciones entre peronismo y la izquierda. No formó parte de la JUP, pero participó en las Mesas de Construcción Nacionales que se hacían en la facultad, y trabajó con la JP de su barrio.

1973. En este mismo año inició su militancia política en el Frente de Agrupaciones Eva Perón (FAEP), una organización estudiantil ligada a las Fuerzas Armadas Revolucionarias, que ese mismo año se fusionó con la Federación Universitaria por la Revolución Nacional (FURN) para constituir la Juventud Universitaria Peronista de la Universidad de La Plata, ligada a la organización terrorista Montoneros.

Fuentes

http://www.taringa.net/posts/noticias/14945876/El-papa-de-cristina-y-su-historia.html

http://www.perfil.com/politica/Los-recuerdos-de-la-pobre-infancia-de-Cristina-Fernandez-20150415-0032.html

http://www.lanacion.com.ar/1712876-vida-y-secretos-de-cristina-kirchner-la-mujer-que-en-la-cima-del-poder-sigue-hablando-desde-tolosa

http://rollongen.blogspot.com/2011/05/genealogia-de-los-kirchner.html

http://es.metapedia.org/wiki/Cristina_Fern%C3%A1ndez_de_Kirchner

Enviado por:

Rafael Bolívar Grimaldos