El objetivo con el que se realice la lectura y el tipo de texto también influirá en la fluidez. No se leerá de igual forma un texto de carácter científico o histórico que un cuento o un poema. El ritmo que alcance la lectura de los alumnos no depende solamente de la corrección, sino también de la posibilidad de comprender lo leído para evidenciar las diferencias necesarias provocadas por las emociones y sentimientos que surgen al leer el texto y que son determinantes en la fluidez.
3. Cuando se hace referencia a la lectura comprensiva se alude a que la lectura consciente requiere la comprensión de las palabras, de las frases, la apreciación de imágenes características, la valoración de acciones y personajes, la explicación de hechos, la aprehensión del mensaje del texto, el disfrute.
Así por ejemplo, desde los primeros grados el escolar deberá distinguir cuándo se enfrenta a un poema, a un cuento, a un texto sobre temas relativos a la historia, la cultura, la ciencia, etc. de ello dependerá la actitud que asuma ante él.
4. La expresividad de la lectura se sustenta en la comprensión del texto y a través de ella se manifiestan la corrección y la fluidez. Permite comunicar los sentimientos y emociones del autor y las que provoca en el lector a la vez que transmite el goce estético.
No puede existir una lectura expresiva si el texto no se ha comprendido bien ni son adecuadas su pronunciación y fluidez.
En su ejecución es necesario que el alumno realice las pausas que indican los signos de puntuación y entonación, que sepa manejar adecuadamente el aire que recoge en sus pulmones, que emplee el tono de voz adecuada y el ritmo que exige la lectura.
El abandono de alguno de estos aspectos incidirá negativamente en la calidad de la lectura de los alumnos pues todos se hallan estrechamente relacionados y una deficiencia en uno de ellos afectará el logro de los demás, por ello, al planificar cada clase debe determinarse las actividades necesarias para cada uno.
QUE ES COMPRENSIÓN DE LECTORA
Las investigaciones llevadas a cabo por Collins, Smith y Solé (1990-1997) revelan que "Las definiciones de los docentes sobre lo que es aprender a leer, como las actividades que se llevan a cabo en las aulas no incluyen aspectos relacionados con la comprensión de textos. Esto pone de manifiesto que los docentes comparten mayoritariamente la visión de la lectura que corresponde a los modelos de procesamiento, según los cuales la comprensión va asociada a la correcta oralización del texto, lo entenderá; porque sabe hablar y entender la lengua oral".[3]
Esta teoría tuvo tanto arraigo que aun hoy día los sistemas escolares basan en ella la enseñanza de la comprensión lectora. Nuestro país no es una excepción a manera de ejemplo, al echar un vistazo a las guías curriculares de los programas de español y a los libros de texto existentes, se encuentran un sinnúmero de recomendaciones y ejercicios que solo pretenden que los estudiantes extraigan el significado del texto.
El proceso de la lectura es uno interno, inconsciente, del que no tenemos prueba hasta que nuestras predicciones no se cumplen; es decir, hasta que comprobamos que en el texto no está lo que esperamos leer.
Este proceso debe asegurar que el lector comprende el texto y que puede ir construyendo ideas sobre el contenido extrayendo de él aquello que le interesa, esto sólo puede hacerlo mediante una lectura individual, precisa, que le permite avanzar y retroceder, que le permita detenerse, pensar, recapitular, relacionar la información nueva con el conocimiento previo que posee. Además deberá tener la oportunidad de plantearse preguntas, decir qué es lo importante y qué es secundario, en un proceso de carácter interno.
De acuerdo a Solé, el proceso de la lectura tiene tres momentos claves, antes de la lectura, durante la lectura y después de la lectura, donde resulta conveniente que el lector realice cuestionamientos y actividades que lo guíen en dicho proceso. A continuación presento los elementos identificados para cada momento:
Antes de la lectura:
¿Para qué voy a leer? (Determinar los objetivos de la lectura)
1.- Para aprender
2.- Para presentar una ponencia
3.- Para obtener información precisa
4.- Para practicar la lectura en voz alta
5.- Para seguir instrucciones
6.- Para revisar un escrito
7.- Por placer
8.- Para demostrar que se ha comprendido
¿Qué se de este texto? (Activar el conocimiento previo)
¿De qué trata este texto? ¿Qué me dice su estructura? Formular hipótesis y hacer predicciones sobre el texto.
Durante la lectura.
1.- Formular hipótesis y hacer predicciones sobre el texto
2.- Formular preguntas sobre lo leído
3.- Aclarar posibles dudas acerca del texto
4.- Resumir el texto
5.- Releer partes confusas
6.- Consultar el diccionario
7.- Pensar en voz alta para asegurar la comprensión
8.- Crear imágenes mentales para visualizar descripciones vagas.
Después de la lectura.
1.- Hacer resúmenes
2.- Formular y responder preguntas
3.- Recontar
4.- Utilizar organizadores gráficos
En las investigaciones que hicieron: Pearson, Roehler y Duffy en 1992 se precisa que "el concepto de comprensión basado en la teoría del esquema ha sido la base de la mayor parte de su trabajo sobre el proceso de comprensión que utilizan los lectores competentes ó expertos. Los factores que separan los expertos de los principiantes y los métodos que utilizan los docentes para promover o mejorar la comprensión. Sus investigaciones han demostrado que los lectores competentes poseen características bien definidas". [4]
La comprensión de lo leído es un proceso mental muy complejo que abarca, al menos cuatro aspectos básicos: INTERPRETAR, RETENER, ORGANIZAR Y VALORAR, cada uno de ellos supone el desarrollo de habilidades diferentes.
ORGANIZAR CONSISTE EN: Establecer consecuencias
Seguir instrucciones
Esquematizar
Resumir y generalizar
HAY QUE RETENER: Conceptos fundamentales
Datos para responder a preguntas
Detalles aislados
Detalles coordinados
INTERPRETAR ES: Formarse una opinión
Sacar ideas centrales
Deducir conclusiones
Predecir
Consecuencias
PARA VALORAR HAY QUE: Captar el sentido de lo leído
Establecer relaciones causa-efecto
Separar hechos de las opiniones
Diferenciar lo verdadero de lo falso
Diferenciar lo real de lo imaginario
Los datos de que disponemos ahora permiten sostener claramente la idea de que la comprensión es un proceso interactivo entre el lector y el texto que puede potenciarse si al enseñar la comprensión lectora se manejan con los alumnos estrategias y se desarrollan habilidades para ayudarles a que aprovechen al máximo dicho proceso interactivo.
a continuación en esta tabla pretendo dar un bosquejo del paradigma liberador mediante el cual he dirigido mi objeto de estudio teniendo como principal impulsor a Paulo Freire Reglus Naves. Sin perder de vista que en cuanto a campo disciplinar estoy centrando mi investigación en el paradigma didáctico.
PAULO FREIRE |
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CONCLUSIÓN
Para concluir este artículo cabe destacar el hecho de la importancia que tiene esta competencia para la vida y sobre todo la responsabilidad que se tiene como docente para que los alumnos salgan con el perfil de egreso necesario y sustentable para que estos estén aptos para seguir con su desarrollo de su formación educativa, así pues debemos de tomar conciencia para que con las diferentes estrategias podamos aplicarlas y llegar a desarrollar en los alumnos el ímpetu de la lectura como herramienta para que los alumnos puedan familiarizarse con la lectura y de esta manera perciban con mayor factibilidad la lectura y logren la comprensión lectora.
BIBLIOGRAFIA
Almendros, Herminio, 1985, "Algunas consideraciones acerca de la enseñanza del Español" Ministerio de Educación, Cuba.
Aráus Miriam del Carmen. año 2004, "Cómo orientar trabajos escritos". Nicaragua.
Ávila Raúl 1996, "Lengua y Cultura" Editorial Trillas México.
Secretaria de Educación Pública. "Análisis en el proceso de aprendizaje de la lecto-escritura" 1992.
Paulo Freire, 2006, "pedagogía de la autonomía" siglo XXl editores, México D.F.
[1] Freire paulo.pedagogia de la autonomía. siglo XXl editores México D.F.2006 p.24
[2] Diccionario de la Lengua Española, Nauta, Barcelona, 1982, p.261.
[3] Secretaría de Educación Pública. “Para darle sentido a la lectura” 1990
[4] Secretaria de Educación Pública. “Análisis en el proceso de aprendizaje de la lecto-escritura” 1992.
Autor:
Genaro Priego Roque
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