Diagnostico de la no incidencia de violencia en la familia (página 4)
Enviado por Ing.Licdo. Yunior Andrés Castillo Silverio
3ª. Cerrar el paso a la autocomplacencia. Un factor que promueve enormemente la violencia, y es un obstáculo formidable para responder a ella, es la autocomplacencia. Así ocurre, en particular, con la actitud que considera la violencia como algo que siempre ha estado presente en la familia, por lo que siempre seguirá existiendo. Sin duda que este prejuicio es un dique que imposibilita, o al menos retarda, la construcción de la paz, la armonía y la concordia en el hogar.
Al describir algunos elementos que crean una cultura de paz y unidad a lo largo del reporte, se ha hecho hincapié en que dicha cultura debe estar respaldada por actitudes propositivas. Resultará difícil reducir significativamente la violencia doméstica si no llega a erradicarse la desesperanza y la autocomplacencia hacia ella.
4ª. Participación de quienes toman decisiones. Si bien es mucho lo que pueden hacer las instituciones gubernamentales para la construcción de una cultura de paz en las familias, gran parte del éxito sucesivo depende en último término del compromiso político, en virtud de que los programas y acciones cobran mayor legitimidad y adquieren mayor importancia en la conciencia política. Este compromiso es tan importante en el ámbito estatal, donde se adoptan las decisiones políticas y legislativas, como en el municipal, donde se controla la aplicación diaria de muchos programas.
Además de trabajar en su propio ámbito de competencia, los diversos estamentos de la sociedad –medios de comunicación, organizaciones comunitarias, asociaciones profesionales, sindicatos, instituciones religiosas, etc.- tienen grandes conocimientos y pueden aportar años de experiencia al respecto. El fuerte compromiso necesario para construir esta cultura será la resultante de los esfuerzos continuados de muchos sectores de la sociedad.
5ª. Generar políticas públicas que fortalezcan la familia. La familia es una comunidad de personas, la célula social más pequeña y, como tal, es una institución fundamental para la vida de toda sociedad.
Ante el Estado, la familia tiene su propio vínculo. No obstante que el Estado está organizado según un sistema político y de forma burocrática tiene, en cierto modo, su «alma» (lo que lo anima, mueve) en la respuesta a su naturaleza de comunidad política jurídicamente ordenada al bien común. Esta «alma» establece una relación estrecha entre la familia y el Estado, precisamente en virtud del principio de subsidiariedad.
En efecto, la familia es una realidad social que no dispone de todos los medios necesarios para realizar sus propios fines de manera que el Estado está llamado entonces a intervenir en virtud del mencionado principio: allí donde la familia es autosuficiente, hay que dejarla actuar autónomamente; una excesiva intervención del Estado resultaría perjudicial, además de irrespetuosa, y constituiría una violación patente de los derechos de la familia; sólo allí donde la familia no es autosuficiente, el Estado tiene la facultad y el deber de intervenir.
La ayuda estatal se realiza, por ejemplo, en las instituciones que se preocupan de salvaguardar la vida y la salud de los ciudadanos y supone un reto para la política del Estado.
Conviene, pues, hacer realmente todos los esfuerzos posibles para que la familia sea fortalecida. Su fortalecimiento es indispensable para el bien de la sociedad. Un Estado verdaderamente fuerte está formado siempre por familias fuertes, conscientes de su vocación y de su misión en la historia. La familia está en el centro de todos estos problemas y cometidos: relegarla a un papel subalterno y secundario, excluyéndola del lugar que le compete en la sociedad, significa causar un grave daño al auténtico crecimiento de todo el cuerpo social.
Criterios para el diseño de un modelo de atención a mujeres que padecen violencia.
Por supuesto que, aunque ubicua, la violencia doméstica no forma parte inevitable de la condición humana, ni constituye un problema de la vida moderna que no pueda ser tratado mediante la decisión e inventiva social, antes bien son la armonía, la paz y la concordia características connaturales a la persona. Los criterios siguientes pretenden orientar el diseño de un modelo de atención a los hogares que padecen violencia.
1º. Atender la rehumanización de las víctimas de violencia. Nadie se acuesta pacífico y se levanta violento. Cuando la familia entra al mundo de la violencia lo hace de manera progresiva y acumulativa. La conducta violenta crece a medida que aumenta el aislamiento dentro del mismo núcleo familiar, a medida que se adopta una actitud hostil ante el agresor y a medida que se erosiona la confianza mutua de los esposos /pareja.
Si desde el primer momento se entiende que la conducta violenta es el síntoma de un profundo vacío existencial previo, la prioridad es la persona y su rehumanización, no las contabilización de hechos violentos ó la consignación penal del victimario.
La rehabilitación de personas violentas se orienta hacia el abandono de las conductas violentas, mientras que la rehumanización, además de partir de ese abandono, se dirige a transformar las actitudes personales que provocan la esclavitud de la violencia. Por eso, las acciones de combate a la violencia en la familia deben orientarse a proporcionar una sólida formación a ambos -víctima y victimario- que consiga cambios duraderos en las personas. No se sale de la violencia hablando de los hechos violentos sino de las personas que los padecen.
Las conductas violentas, en general son una salida a la fatiga de vivir, un intento de huir de la realidad. Está claro que la violencia en la familia es un problema social, pero si la lucha en contra tiene poco éxito es porque no se abordan los factores vitales de las personas. Si se quiere superar la orientación punitiva del tratamiento de la violencia en la familia que predomina en la sociedad actual, hay que ir más lejos. Con independencia de que pueda haber unas circunstancias sociales o ambientales más o menos estresantes, la causa profunda hay que buscarla en el vacío existencial de la familia y el sin sentido de una vida carente de objetivos e ilusiones.
2º. Educar para y hacia la plenitud de vida. En las familias sin violencia, se percibe el interés por vivir una vida plena y vivida a fondo, basada en la autenticidad de la persona al relacionarse con los otros, en la disponibilidad a asumir al otro como aquello que es valioso y que merece estar atento a sus necesidades y en la empatía que permita ser alguien capaz de establecer la sintonía con quienes le rodean.
Con base en los resultados, se puede afirmar que el modelo debe favorecer que los hijos aprendan a:
ver a las personas como iguales en dignidad aunque diferentes en sus peculiaridades,
cultivar el respeto y la paciencia,
construir el carácter,
conocer las emociones y dominar los sentimientos que provocan,
asumir y canalizar positivamente los afectos.
3º. Construir una nueva perspectiva de matrimonio. Si como resultado de la investigación se quiere elaborar un modelo de atención a hogares que padecen violencia, éste tiene que incluir:
la recomendación de que la relación de matrimonio hunda sus raíces en el respeto, el cariño, la voluntad de entregarse mutuamente desde la libertad, porque el otro es lo más importante de la propia vida, en la sinceridad, la cooperación, la fidelidad de un hombre y una mujer desde la igualdad.
la convicción de que la relación entre los hombres y las mujeres se vive cualitativamente enriquecida cuando se busca la experiencia de darse y llegar hasta la plenitud desde la complementariedad y el respeto,
la persuasión de que el matrimonio es indisociable de una serie de exigentes expectativas sobre la responsabilidad, la fidelidad, la exclusividad, la durabilidad y la intimidad.
la urgencia de dejar de considerar a la mujer como un objeto y superar la cosificación que de ella se hace,
la insistencia en vivir de una manera diferente, fundamentada en descontaminar la familia del consumo de alcohol y de otras drogas,
Así, la familia podrá experimentar la vida desde la vivencia de una entrega que traspasa la mera "funcionalidad" y se convertirá en espacio abierto de dedicación de unos a los otros, instaurándose en auténtica comunidad generadora de vida de todo tipo.
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Anexo 1: Instrumento de medición
Anexo 2: Evaluación de indicadores
1. La técnica de construcción de la variable "Ambiente de seguridad y tranquilidad en el hogar según condición de violencia" (Tabla 17) considera los siguientes indicadores:
Dígame por favor, con qué frecuencia se siente ud. . . . .
3.17 Descansada, tranquila, cuando está en su casa
3.19 Segura, confiada cuando está con su familia
Para el cálculo se asignó valores de 0 a 1, según la presencia o ausencia del indicador, p.e.:
Una vez que se establecieron estos valores, se calculó la media aritmética global de la variable. Habiendo determinado cuales serían los valores, la diferencia entre ellos determinó tres rangos que describen tres niveles de evaluación:
2. La técnica de construcción de la variable "Ayudan los hombres a las actividades del hogar según condición de violencia" (Tabla 20) considera los siguientes indicadores:
Dígame por favor, con qué frecuencia. . . . .
4.1 En este hogar los hombres ayudan a barrer, trapear, sacudir, lavar
4.2 Cuando es necesario los hombres se meten a ayudar a la cocina
Para el cálculo se asignó valores de 0 a 1, según la presencia o ausencia del indicador, p.e.:
Una vez que se establecieron estos valores, se calculó la media aritmética global de la variable. Habiendo determinado cuales serían los valores, la diferencia entre ellos determinó tres rangos que describen tres niveles de evaluación:
3. La técnica de construcción de la variable "Realizan actividades en familia según condición de violencia" (Tabla 21) considera los siguientes indicadores:
Dígame por favor, con qué frecuencia. . . . .
4.4 Ustedes salen en familia a divertirse
4.5 En la familia hacen planes sobre lo que harán en el futuro
4.6 Cuando ustedes tiene una fiesta ó reunión, entre todos la organizan
Para el cálculo se asignó valores de 0 a 1, según la presencia o ausencia del indicador, p.e.:
Una vez que se establecieron estos valores, se calculó la media aritmética global de la variable. Habiendo determinado cuales serían los valores, la diferencia entre ellos determinó tres rangos que describen tres niveles de evaluación:
4. La técnica de construcción de la variable "Comunicación y diálogo familiar según condición de violencia" (Tabla 22) considera los siguientes indicadores:
Dígame por favor, con qué frecuencia. . . . .
4.8 En la familia cuando alguien está hablando los demás escuchan
4.9 En la familia respetan el punto de vista de cada quien aunque algunos no estén de acuerdo
Para el cálculo se asignó valores de 0 a 1, según la presencia o ausencia del indicador, p.e.:
Una vez que se establecieron estos valores, se calculó la media aritmética global de la variable. Habiendo determinado cuales serían los valores, la diferencia entre ellos determinó tres rangos que describen tres niveles de evaluación:
5. La técnica de construcción de la variable "Acciones solidarias en la familia según condición de violencia" (Tabla 23) considera los siguientes indicadores:
Dígame por favor, con qué frecuencia. . . . .
4.3 Cuando algún miembro de la familia está enfermo, los demás ayudan en lo que se necesita.
4.7 A Uds les da gusto y se sienten orgullosos cuando alguien de la familia hace algo bien.
4.10 En la familia tienen paciencia cuando alguien comete un error.
Para el cálculo se asignó valores de 0 a 1, según la presencia o ausencia del indicador, p.e.:
Una vez que se establecieron estos valores, se calculó la media aritmética global de la variable. Habiendo determinado cuales serían los valores, la diferencia entre ellos determinó tres rangos que describen tres niveles de evaluación:
6. La técnica de construcción de la variable "Afinidades del matrimonio /pareja según condición de violencia" (Tabla 24) considera los siguientes indicadores:
Dígame por favor si es cierto ó falso que. . . . .
5.1 Ud y su esposo /pareja pertenecen al mismo medio social
5.2 Ud y su esposo /pareja comparten las mismas creencias religiosas
Para el cálculo se asignó valores de 0 a 1, según la presencia o ausencia del indicador, p.e.:
Una vez que se establecieron estos valores, se calculó la media aritmética global de la variable. Habiendo determinado cuales serían los valores, la diferencia entre ellos determinó tres rangos que describen tres niveles de evaluación:
7. La técnica de construcción de la variable "Comunicación en el matrimonio /pareja según condición de violencia" (Tabla 29) considera los siguientes indicadores:
Dígame por favor con que frecuencia. . . . .
5.8 Ud y su esposo /pareja se ponen de acuerdo en cuestiones políticas
5.9 Ud y su esposo /pareja están dispuestos a discutir los problemas que surgen entre marido y mujer
5.10 Antes de dormir, usted y su esposo /pareja platican de lo que hicieron en el día.
Para el cálculo se asignó valores de 0 a 1, según la presencia o ausencia del indicador, p.e.:
Una vez que se establecieron estos valores, se calculó la media aritmética global de la variable. Habiendo determinado cuales serían los valores, la diferencia entre ellos determinó tres rangos que describen tres niveles de evaluación:
8. La técnica de construcción de la variable "Diálogo de los padres con los hijos según condición de violencia" (Tabla 32) considera los siguientes indicadores:
Dígame por favor si es cierto o falso que. . . . .
6.5 Ud ó su esposo /pareja platican con los hijos cuando ellos están tristes o preocupados por algo
6.7 Usted o su esposo /pareja felicitan a los hijos cuando ellos hacen algo bien
Para el cálculo se asignó valores de 0 a 1, según la presencia o ausencia del indicador, p.e.:
Una vez que se establecieron estos valores, se calculó la media aritmética global de la variable. Habiendo determinado cuales serían los valores, la diferencia entre ellos determinó tres rangos que describen tres niveles de evaluación:
9. La técnica de construcción de la variable "Enseñanzas de los padres a los hijos según condición de violencia" (Tabla 33) considera los siguientes indicadores:
Dígame por favor si es cierto o falso que. . . . .
6.6 Usted o su esposo /pareja han enseñado a los hijos a buscar soluciones a los problemas
6.8 En esta casa existen normas de conducta.
Para el cálculo se asignó valores de 0 a 1, según la presencia o ausencia del indicador, p.e.:
Una vez que se establecieron estos valores, se calculó la media aritmética global de la variable. Habiendo determinado cuales serían los valores, la diferencia entre ellos determinó tres rangos que describen tres niveles de evaluación:
10. La técnica de construcción de la variable "Acciones de urbanidad en el hogar según condición de violencia" (Tabla 35) considera los siguientes indicadores:
Dígame por favor con que frecuencia. . . . .
7.1 En esta casa hablan bien de los demás
7.5 Quienes viven aquí se saludan cuando llegan de la calle.
Para el cálculo se asignó valores de 0 a 1, según la presencia o ausencia del indicador, p.e.:
Una vez que se establecieron estos valores, se calculó la media aritmética global de la variable. Habiendo determinado cuales serían los valores, la diferencia entre ellos determinó tres rangos que describen tres niveles de evaluación:
11. La técnica de construcción de la variable "Acciones de ayuda mutua en el hogar según condición de violencia" (Tabla 37) considera los siguientes indicadores:
Dígame por favor con que frecuencia. . . . .
7.3 En esta casa cuando alguien dice "quién me ayuda", siempre hay alguien que se ofrece.
7.4 Cuando hay un problema en la familia, se ponen de acuerdo para solucionarlo.
Para el cálculo se asignó valores de 0 a 1, según la presencia o ausencia del indicador, p.e.:
Una vez que se establecieron estos valores, se calculó la media aritmética global de la variable. Habiendo determinado cuales serían los valores, la diferencia entre ellos determinó tres rangos que describen tres niveles de evaluación:
12. La técnica de construcción de la variable "Presiones económicas según condición de violencia" (Tabla 56) considera los siguientes indicadores:
13.1 Considerando a todos los que aportan al gasto de la casa, dígame por favor, aproximadamente cuanto dinero ingresa a la casa MENSUALMENTE 13.2 Ahora dígame por favor, aproximadamente a cuanto asciende el gasto MENSUAL de la casa, incluyendo todo: alimentos, luz, agua, renta, abonos, educación de los hijos, atención de enfermedades, etc.
Para el cálculo se consideró:
Si Ingreso = 0 ó Gasto = 0 entonces "No especificado"
Si Ingreso = Gasto entonces "Al día en el gasto"
Si Ingreso > Gasto entonces "Sin presiones"
Si Ingreso < Gasto entonces "Con presiones"
Enviado por:
Ing.+Lic. Yunior Andrés Castillo S.
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Santiago de los Caballeros,
República Dominicana,
2015.
"DIOS, JUAN PABLO DUARTE Y JUAN BOSCH – POR SIEMPRE"®
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