- Introducción
- ¿Qué es considerado Derechos Humanos de Cuarta Generación?
- ¿En qué escenarios de la vida cobran vigencia los derechos humanos de Cuarta Generación?
- ¿Qué opinión han reflejado los derechos de cuarta generación para los organismos internacionales y la opinión pública?
- En su opinión que impacto tienen y pueden llegar a tener en el mundo los derechos de cuarta generación tras su consolidación
Introducción
Evidentemente las "generaciones" de los derechos humanos son tan sólo un criterio clasificatorio de los mismos, del que su denotada utilidad lo ha asentado válidamente como dominante en los estudios actuales que atienden a la esencia natural humana erigida en normas y principios ideales, pautas estimativas y criterios valorativos.
"Derechos humanos" o "derechos del hombre", son paradigmáticas exposiciones de equivocidad filológica, sobrepuestas por una significancia ya institucionalizada culturalmente por su asistencia intrínseca al desarrollo de la humanidad.
Los hitos evolutivos de los derechos humanos son los mismos de la historia de la humanidad civilizada, y es que derechos humanos son humanidad y civilidad amalgamadas por la historia.
En este sentido se puede decir que los derechos que hoy tenemos no son eternos. Por el contrario, son derechos frágiles que se deben defender constantemente. Conocerlos es el primer paso para asumir esa defensa. Así, la protección efectiva de los derechos humanos es un instrumento para defenderse de los abusos de los gobernantes, ya que los derechos humanos son uno de los más destacados productos civilizados.
Las violaciones a los derechos humanos son las acciones llevadas a cabo por algún elemento del poder del Estado, en contra de la dignidad humana y cuando las autoridades actúan con impunidad en la investigación y/o castigo de las violaciones a los Derecho Humanos.
¿Qué es considerado Derechos Humanos de Cuarta Generación?
En todas las sociedades han existido personas altruistas que han tenido el pensamiento de que todas las personas deben ser respetadas y que esto debe hacerse sin importar las creencias, la sexualidad, el partido político o el color de piel que tienen.
Los Derechos Humanos nacen de la necesidad de convivir con otras personas, para lograr la convivencia se crean unas normas que le garantizan a las personas la forma en que deberán ser tratados y trataran a las demás personas.
Por lo tanto el derecho humano de cuarta generación se encuentra enfocado en la sociedad de la información es decir consiste en los impactos que las tecnologías de punta de finales de siglo producen en la existencia humana. Sin embargo existen jurista o autores que señalan que esta generación también esta abordada por la gestión de nuevos actores y movimientos sociales, aquellos que no se encuentran reconocidos como sujetos sociales. Aquí, se puede mencionar al movimiento lésbico-gay, cuyos derechos no han sido reconocidos sus derechos humanos a pesar de no ser un movimiento reciente.
En tal sentido Benavides (1998) señala que estos nuevos derechos pretendidos canalizar en una nueva generación, son todos, por ahora, nuevas manifestaciones de los derechos de primera, segunda y tercera generaciones; con otras palabras, son los mismos derechos de las generaciones indicadas; pero, en nuevos entornos o frente a nuevas amenazas, por lo que este autor considera que el criterio generacional de los derechos humanos debe atender al surgimiento de estos (derechos humanos) bajo una inspiración ideal o valorativa transformadora del rumbo de la humanidad en procura de mejorar su grado de civilidad, no de sus diversas expresiones o manifestaciones referidas a nuevas formas de amenaza de los ya establecidos.
En consecuencia considero que el desarrollo de las nuevas tecnologías vinculas a la revolución de las telecomunicaciones ha planteado una nueva problemática, las denominadas Tic´s han penetrado nuestras relaciones sociales de un modo tan acelerado, que han producido una autentica revolución de la información, del mismo modo que en su momento fue la revolución industrial, amenazando con transformar por completo nuestra idea de sociedad y de las estructuras que la conforman.
Principales características
Reconoce explícitamente la discriminación contra la mujer como un problema socio-cultural que requiere solución.
La capacidad de disfrutar de una vida sexual satisfactoria y sin riesgos.
El derecho a procrear o no.
La libertad para decidir el número y espaciamiento de los hijos.
El derecho a obtener información que posibilite la toma de decisiones libres e informadas sin sufrir discriminación, coerción ni violencia.
La eliminación de la violencia doméstica y sexual que afecta la integridad y la salud.
El acceso a servicios y programas de calidad para la promoción, detección, prevención y atención de todos los eventos relacionados con la sexualidad y la reproducción, (independientemente del sexo, edad, etnia, orientación sexual o estado civil).
En esta misma plataforma se establece también que las relaciones iguales entre mujeres y hombres en los asuntos relacionados con la sexualidad incluyendo el absoluto respeto de la integralidad de la persona requieren respeto mutuo, consentimiento y distribución de las responsabilidades sobre el comportamiento sexual y sus consecuencias.
La trascendental aparición del ciberespacio como nuevo universo donde crear, desarrollarse, comunicarse, trabajar, pensar y en definitiva vivir no puede quedar ajeno a estas reclamaciones.
La tecnología, como informatización del mundo, se inserta en todos los contextos, y no deja dimensión humana indiferente.
Reediciones de las antiguas libertades pero aplicadas al mundo virtual, pues es muy sencillo reconocerlos cuando no hay potencial para ejercerlos.
La libertad de expresión y pensamiento, conjugada con la posibilidad de cualquiera de transmitir mensajes a gran escala que supone un verdadero reto para lo que llamamos Democracia, donde todas las ideas tienen cabida", donde no debería de haber miedo a la proliferación de la palabra.
Al uso de los avances de la ciencia y de la tecnología.
¿En qué escenarios de la vida cobran vigencia los derechos humanos de Cuarta Generación?
Paralelamente al desarrollo sociocultural de los seres humanos, se han ido reconociendo distintas "oleadas" de derechos, individuales, colectivos y globales.Actualmente, la trascendental aparición del ciberespacio como nuevo universo donde crear, desarrollarse, comunicarse, trabajar, pensar y en definitiva vivir no puede quedar ajeno a estas reclamaciones. Nadie puede discutir que la humanidad se encuentra en un nuevo período inédito en su historia: la era de la información. La tecnología, como informatización del mundo, se inserta en todos los contextos, y no deja dimensión humana indiferente.
De esta forma, han surgido numerosas voces reclamando una cuarta generación de derechos humanos, los ciberderechos. En su mayoría, son reediciones de las antiguas libertades pero aplicadas al mundo virtual, pues es muy sencillo reconocerlos cuando no hay potencial para ejercerlos. Pero es ahora, cuando la libertad de expresión y pensamiento, conjugada con la posibilidad de cualquiera de transmitir mensajes a gran escala, que supone un verdadero reto para lo que llamamos Democracia, "donde todas las ideas tienen cabida", donde no debería de haber miedo a la proliferación de la palabra. Es ahora cuando su reconocimiento internacional supondría una altitud moral incuestionable.
¿Qué opinión han reflejado los derechos de cuarta generación para los organismos internacionales y la opinión pública?
Numerosas ONG en el mundo se dedican a la defensa y promoción de los derechos humanos en el mundo, en la imagen logo de Human Rights Watch.
Los derechos humanos tienen una creciente fuerza jurídica, en tanto que se integran en las constituciones y, en general, en el ordenamiento jurídico de los Estados. También, en el ámbito de la comunidad internacional, por su reconocimiento en numerosos tratados internacionales tanto de carácter general como sectorial; universal y regional y por la creación de órganos jurisdiccionales, cuasi jurisdiccionales o de otro tipo para su defensa, promoción y garantía.
Además, debido a su aceptación, diversos derechos humanos se consideran parte del Derecho internacional consuetudinario y algunos incluso normas de ius cogens, tal y como han afirmado órganos internacionales como el Comité de Derechos Humanos o la Corte Internacional de Justicia. Entre ellos se encuentran la prohibición de la tortura y de la privación arbitraria de la vida o el acceso a unas mínimas garantías procesales y la prohibición de detención arbitraria.
Autores como David Vallespín Pérez, Franz Matcher, Antonio Pérez Luño, Augusto Mario Morello, Robert B. Gelman y Javier Bustamante Donas afirman que está surgiendo una cuarta generación de derechos humanos. No obstante, el contenido de la misma no es claro, y estos autores no presentan una propuesta única. Normalmente toman algunos derechos de la tercera generación y los incluyen en la cuarta, como el derecho al medio ambiente o aspectos relacionados con la bioética.
Javier Bustamante afirma que la cuarta generación viene dada por los derechos humanos en relación con las nuevas tecnologías; otros, que el elemento diferenciador sería que, mientras las tres primeras generaciones se refieren al ser humano como miembro de la sociedad, los derechos de la cuarta harían referencia al ser humano en tanto que especie.
Tal idea había quedado acordada en la Carta de las Naciones Unidas cuando en su preámbulo se escribió, " nosotros los Pueblos de las Naciones Unidas resueltos … a reafirmar la fe en los derechos fundamentales del hombre, en la dignidad y el valor de la persona humana, en la igualdad de derechos de hombres y mujeres y de las naciones grandes y pequeñas… hemos decidido sumar nuestros esfuerzos para realizar estos designios" y luego de manera más explícita, cuando expresaron entre sus propósitos el siguiente " realizar la cooperación internacional en la solución de problemas internacionales de carácter económico, social, cultural o humanitario, y en el desarrollo y estímulo del respeto de los derechos humanos y a las libertades fundamentales de todos, sin hacer distinción por motivos de raza, sexo, idioma, religión.
En su opinión que impacto tienen y pueden llegar a tener en el mundo los derechos de cuarta generación tras su consolidación
¿Y qué impacto tienen o no pueden llegar a tener en nuestra sociedad venezolana actual y la del futuro la consolidación de los derechos de cuarta generación. Argumente y de ejemplos (2 páginas).
No podemos separar las potencialidades de la tecnología de las voluntades de las personas que la promueven. Por esta razón, las expectativas una mayor democratización de la sociedad requieren una inteligente utilización de los medios a nuestro alcance. Por otro lado, una utilización perversa de dicha tecnología tendría una traducción directa en el menoscabo de las libertades públicas civiles, en la disminución de los estándares de vida, y en un desequilibrio cada vez mayor entre poder personal y poder institucional.
Por tanto, debemos observar que, al lado de dinámicas positivas, también surgen mecanismos de dominación y ataques a los derechos humanos en este ciberespacio que tienen que ver con la limitación del acceso a las condiciones técnicas, económicas o culturales que permitirían el desarrollo de formas más avanzadas de participación pública y de intercambio y libre expresión de las ideas y creencias.
En el mundo real, los ataques a los derechos humanos en forma de acciones políticas tienen una traducción casi inmediata en términos de hambre, tortura, discriminación, flujos migratorios o de refugiados, recorte de libertades civiles, etc.
En el ciberespacio, dichas acciones cobran un cierto carácter de invisibilidad frente al escrutinio público y, por tanto, la aparente inmaterialidad e invisibilidad de los ataques precisa nuevas formas de análisis.
Si analizamos la historia de la tecnología, es probable que veamos cómo habitualmente en su evolución ha jugado a favor de los poderes constituidos. Como encarnación de los intereses de aquellos que la promueven, se podría decir que la tecnología ha sido siempre, al igual que la guerra, una prolongación de la política por otros medios.
Sin embargo, la democratización de la tecnología informática y el constante descenso del coste de acceso la misma han permitido que la tecnología se encuentre por una vez más cerca del individuo. Aunque no le guste al poder, el ciudadano de la nueva telépolis se beneficia tanto como las instituciones del avance tecnológico. Por primera vez contamos con vías de acceso a la información que con una inversión mínima permiten un alcance máximo.
Esto no supone de manera automática un elemento democratizador, pero no cabe duda de que es una dinámica que cambia la orientación concentrada y centralizadora que ha caracterizado hasta el momento a gran parte del desarrollo tecnológico. Ahora es posible establecer prácticas comunicativas que derrumban los muros de la antigua polis.
Este cambio cualitativo trae consigo nuevas oportunidades de autogestión social, control social horizontal y de participación ciudadana, en pro de una mayor transparencia social. La Red aparece así como uno de los escenarios donde se dirime una de las más decisivas batallas por la libertad de expresión y, por ende, por los derechos humanos en general.
Las redes telemáticas tienen además una notable capacidad metafórica, una fuerza basada en su carácter sugerente, en su capacidad de actuar como modelo de formas y comportamientos sociales. Internet es, por una parte, un mosaico de oportunidades y riesgos para la ética civil y para los derechos humanos, una propuesta que reclama respuestas jurídicas y políticas. Por otro lado, establece también unas expectativas de calidad de vida y de disfrute de la existencia no contempladas por las generaciones anteriores.
El Internet es la estructura social más democrática y participativa que las nuevas tecnologías de la comunicación hayan traído a un mundo que contempla a cincuenta años de distancia la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Ahora que acabamos de dar la vuelta a la esquina la llegada de un nuevo siglo, no será el mundo físico el único escenario bélico donde se libren en las guerras del futuro, donde se diriman las disputas de poder en todas las esferas.
Ni el concepto de invasión ni el de esclavitud seguirán siendo los mismos. No será necesario invadir un país, ni tampoco poner grilletes en muñecas y tobillos atar las manos a sus ciudadanos, si podemos reeducar el deseo, convertirlos en consumidores, colonizar las conciencias a través de valores implícitos en los productos audiovisuales.
En esencia, los mecanismos de dominación y de limitación de los derechos humanos en este nuevo espacio de información o ciberespacio tienen más que ver con la limitación del acceso a las condiciones necesarias (ya sean técnicas, económicas o culturales) que permitirían el desarrollo de formas más avanzadas de participación pública y de intercambio y libre expresión de ideas y creencias.
El gran atractivo de Internet es su naturaleza abierta. Los intentos de restringir el libre flujo de información en Internet, así como los intentos de restringir lo que puede decirse por el teléfono, supondrían una limitación onerosa y nada razonable de los bien establecidos principios de privacidad y libertad de expresión. La aparente inmaterialidad de los ataques precisa otras formas de análisis. En el mundo real, los ataques a los derechos humanos en forma de acciones políticas tienen una traducción casi inmediata en términos de hambre, discriminación, flujos migratorios o de refugiados, recorte de libertades civiles, etc.
La influencia de la tecnología informática y el mundo de la cultura presento diferentes dimensiones, y puede además dotar de significado a un conjunto de principios que sin ella acabarían siendo poco más que una voluntariosa declaración de intenciones.
Si se ha defendido tradicionalmente que las ideas caminan mundo, también debemos tener en cuenta que los gobiernos y las empresas que definan los estándares de comunicación de Internet, la telefonía móvil global y la televisión vía satélite, tendrán en su poder una de las claves fundamentales del poder futuro.
Por otro lado, los regímenes democráticos también han percibido que Internet aparece como uno de los foros públicos donde los ciudadanos tienen una mayor capacidad de organización horizontal, donde pueden quedar en entredicho los tradicionales intereses de los actores sociales que han monopolizado habitualmente el acceso a los medios de comunicación, e intentan actuar en consecuencia para mantener su influencia social.
En este caso no nos encontramos con medidas empresariales o gubernamentales abiertamente contrarias al derecho a la libre expresión de las ideas, pero sí con campañas de sensibilización social sobre una serie de conductas delictivas llevadas a cabo a través de Interne pornografía infantil, propaganda racista, apología del terrorismo y la violencia, etc que parecen pedir a gritos la censura previa y la catalogación de los contenidos de las páginas Web en supuesta defensa de los valores morales.
Autor:
Pedro Sánchez Sánchez
MSc. En Gerencia Pública
Docente UNESR Núcleo San Carlos
REPÚBLICA BOLIVARIA DE VENEZUELA
UNIVERSIDAD JOSÉ ANTONIO PÁEZ
FACULTAD DE CIENCIAS JURICAS Y POLITICAS
CARRERA DE DERECHO
San Diego, Septiembre de 2011