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Análisis del consumo de cine infantil de animación 3D

Enviado por Natalia Carpegna


Partes: 1, 2, 3
Monografía destacada
  1. Abstract
  2. Introducción
  3. Marco metodológico
  4. Marco Teórico
  5. Contexto social-histórico: La expansión del mercado neoliberal. El papel de los medios de comunicación
  6. Nuevo tratamiento de la infancia
  7. De la historieta a la animación por computadora
  8. Las nuevas películas de animación infantiles en 3D: la ampliación de las fronteras
  9. Historias de ayer, hoy y ¿siempre? Transformaciones visuales y narrativas en el cine en 3D
  10. Conclusiones
  11. Anexo
  12. Bibliografía

Abstract

El tema elegido para la presente tesina son las nuevas formas de consumo del cine de animación en 3D. La novedad reside en que históricamente estas producciones fueron consumidas por niños y actualmente entre sus espectadores se incluyen adolescentes y adultos.

Con el objetivo de analizar el contexto de consumo de dichas películas analizaré los cambios sociales, políticos y culturales que producen la constitución subjetiva dominante en nuestra sociedad. Al respecto el concepto de consumidor será clave para entender la interacción de los espectadores con las producciones cinematográficas citadas. Por su parte la categoría de infancia será repensada en las actuales condiciones sociales, al tiempo que se ahondará en las modificaciones de las pautas del consumo adulto.

A través de un recorrido histórico por las producciones cinematográficas de animación, los dibujos animados televisivos -infantiles y adultos- y la incipiente industria de cine animación en 3D, se rastrearán las continuidades y rupturas entre los diversos formatos, así como la consolidación del espectador adulto como destinatario de dichos films.

Para comprender el fenómeno de recepción simultánea de estas películas por parte de niños y adultos se llevará a cabo un análisis de las características que poseen los nuevos relatos, tomando como contrapunto la filmografía clásica de Disney, pionera en la producción de cine y televisión para niños. Los cambios a considerar en los films actuales serán los que involucren a las operaciones narrativas, las temáticas y la construcción de personajes.

Palabras claves.

CINE DE ANIMACION 3D- INFANCIA – MERCADO – PAUTAS DE CONSUMO – DIBUJOS ANIMADOS.

Introducción

El tema abordado en la presente tesina son las nuevas formas de consumo del cine de animación infantil en 3D. Tal como lo determina su nombre, dicho segmento, al interior de la producción cinematográfica, ha sido clasificado históricamente como perteneciente al género infantil. En la actualidad, sin embargo, convoca a espectadores de diversas edades. La novedad que motiva entonces mi análisis es que exista un consumo simultáneo de este tipo de películas por parte de dos tipos de espectadores aparentemente contrapuestos, históricamente concebidos como disímiles: niños y adultos.

Ante dicha innovación es pertinente indagar de qué modo y bajo qué circunstancias culturales, políticas, sociales, económicas, subjetivas, tuvo lugar una modificación de esta índole. A partir de dicho objetivo, será preciso rastrear y analizar las transformaciones que han experimentado las películas propiamente dichas pero también, claro está, estos públicos que acabo de mencionar. Se tratan de niños y adultos que consumen, como no ocurre en otras dimensiones de la vida cotidiana, el mismo objeto.

En principio, si afirmo que los niños pueden consumir la misma película que los adultos, ese fenómeno da indicios de un cambio sustancial en el estatuto mismo de la infancia. En forma paralela, si los adultos pueden consumir las mismas películas que los niños, estamos en presencia de una modificación radical en las pautas del consumo adulto.

De manera tal que la modalidad del análisis que llevaré adelante incluirá un recorrido histórico que así como indagará cambios sociales, políticos y culturales, también dará cuenta de aspectos técnicos, estéticos y narrativos.

En la medida en que el cine es un medio masivo de comunicación por excelencia, considero que indagar sus manifestaciones contemporáneas y la reconfiguración y construcción de nuevos públicos, es una tarea pertinente para quienes nos formamos en la carrera de comunicación social. Este tipo de producciones que me propongo investigar no sólo incluye cambios en la manera de narrar las historias y construir sus personajes, sino que asume nuevos modos de comunicación –mediáticos, publicitarios, afectivos- cuyo objetivo es captar nuevos espectadores y producir una amplia gama de consumos (merchandising, alimentos, indumentaria, etc.) que se construyen desde el seno mismo de la industria del entretenimiento.

En tal sentido, a lo largo de la tesina trataré de abarcar exhaustivamente los elementos presentes en el cine infantil de animación desde el punto de vista de la interrelación entre emisor, mensaje, receptor, la producción de sentidos, todas estas categorías clásicas del campo de estudios sobre la comunicación.

Si me dispuse investigar esta problemática es porque, en principio, quien escribe esta tesis forma parte de esa platea adulta que consume series animadas televisivas para adultos, animaciones y cine de animación 3D. La atracción por estas producciones, me permitió detectar en diálogos o en personajes de los nuevos films -destinados a un supuesto público infantil- claras alusiones a temáticas actuales (políticas, sociales, culturales, etc.) que me atrajeron y cautivaron. Dichas películas produjeron una ruptura en mis propios recuerdos sobre los dibujos animados al observar, por ejemplo, cómo la vida de los animales antropomórficos, característicos de estas producciones, hablaban y daban cuenta de los cambios en la sociedad actual. A partir de la construcción de simpáticos dibujos animados se suelen poner de manifiesto aspectos socio-económicos o tabúes sociales. La serie televisiva Los Simpson y su versión cinematográfica es un ejemplo paradigmático al respecto.

En los films de animación se pone en juego un vaivén constante entre recursos nuevos y clásicos que exaltan elementos propios de nuestro imaginario social. Asimismo, dan lugar a la creación de fantasías que siempre sirven para alimentar a nuestro niño interior. Sin recurrir a la magia ni pidiéndole deseos a un genio, recursos de las películas infantiles clásicas, en estas nuevas producciones se pueden encontrar situaciones de colaboración, de apoyo y de confraternidad entre sus personajes, que nos permiten identificarnos con situaciones que deseamos para nuestras vidas personales.

A lo largo de esta tesis, la pregunta que intentaré responder es la siguiente: ¿Qué características tiene estas producciones cinematográficas para que puedan ser consumidas y elegidas por receptores de diversas edades?.

En principio, para comenzar a responderla, mi objetivo será rastrear el estatuto actual de infancia. La idea de niño que puede captar un relato que también atrae a un adulto plantea un interrogante esencial: ¿Qué es la infancia hoy?.

En los capítulos destinados a pensar esta problemática, analizaré las características de las nuevas subjetividades interpeladas por las películas de animación 3D.

Retomando el interrogante central antes planteado, es necesario conocer las continuidades y rupturas entre la filmografía de Disney, pionera en la industria de dibujos animados, y lo que se define como el nuevo cine de animación 3D. Además, es preciso encontrar las características propias de estos relatos a través de las historias que cuentan y de los personajes que participan en ellas.

Por otra parte, como todo producto mercantil, los films se sostienen a partir de una precisa estructura y mecanismo de promoción y distribución. Las estrategias de marketing y comunicación, con capacidad para construir un mundo de consumo que excede la mera presencia en una sala cinematográfica, son un elemento clave en su funcionamiento.

A continuación detallo cada uno de los cinco capítulos que van a conformar la tesina.

En el Capítulo 1, cuyo título es "La expansión del mercado neoliberal. El papel de los medios de comunicación", me propongo indagar el contexto social histórico en el que se producen las transformaciones en la industria cinematográfica y las nuevas producciones de subjetividad contemporáneas. Analizaré la importancia que adquiere el mercado en el curso de las dinámicas y relaciones sociales a partir del advenimiento y consolidación del neoliberalismo, así como el desarrollo de los medios masivos de comunicación. En este capítulo analizaré una figura preponderante en las sociedades de mercado: el consumidor.

El Capítulo 2, "Nuevo tratamiento de la infancia", estará orientado a caracterizar la concepción de niñez vigente en la sociedad contemporánea. La infancia es una categoría que se corresponde con las condiciones sociales, culturales e institucionales de cada época. La hipótesis de este capítulo afirma que existe un tipo específico de infancia, concebida en lo que podemos denominar como la época moderna, que está en crisis y que, incluso, se encontraría acabada. Esto no implica que no existan más los chicos sino que las instituciones (familia, escuela, etc.) que giraban en torno a la infancia y las características propias que se les atribuían a los infantes, sufrieron transformaciones esenciales ante el advenimiento de las sociedades de mercado. En tal sentido, a diferencia de las sociedades disciplinarias, para el mercado neoliberal no se torna necesaria la distinción entre niños y adultos. Se tratan simplemente de diferentes segmentos de consumo. El niño consumidor, lejos de la imagen de un niño dependiente, carente, es un consumidor ya pleno, que no requiere de un desarrollo para llegar a una época adulta que le otorgue autonomía.

En el Capítulo 3, "De la historieta a la animación por computadora", realizaré un recorrido histórico a partir de las técnicas y productos masivos que dieron origen al actual cine de animación 3D. Será fundamental, en tal sentido, remontarme a la empresa Walt Disney debido a sus decisivos aportes técnicos, estéticos y narrativos en la producción de historietas, series animadas televisivas y películas para niños. Al mismo tiempo, el papel de la televisión por cable y la masividad de las animaciones para adultos serán analizadas en torno a su relación con la incipiente industria cinematográfica de animación en 3D.

En el Capítulo 4, "Las nuevas películas de animación infantiles en 3D: la ampliación de las fronteras", haré referencia a las primeras películas realizadas completamente con dicha técnica. En este capítulo indagaré la relación del espectador adulto con este nuevo tipo de producciones.

El Capítulo 5, "Historias de ayer, hoy y ¿siempre? Transformaciones visuales y narrativas en el cine en 3D", se centrará en las variaciones en los guiones de los films infantiles, tomando como contrapunto la filmografía clásica de Walt Disney y los actuales. Los elementos de análisis a considerar serán las operaciones narrativas, la construcción de personajes y de temáticas.

Marco metodológico

Los aspectos metodológicos de una investigación se vinculan con una serie de saberes y procedimientos que no se encuentran aislados del tipo de proceso social analizado y de los interrogantes teóricos entrecruzados en éste. El proceso de recolección de la información, elaboración de datos e interpretación, más allá de sus reglas y técnicas específicas, deberá ser dinámico y flexible, a fin de propiciar su revisión y ajuste a partir de los diferentes resultados parciales obtenidos en el campo de estudio.

En este capítulo se tiene como objetivo poner de manifiesto los fundamentos metodológicos implicados en esta tesina.

Esta investigación se fundamenta en un estudio de tipo cualitativo. Basándome en las afirmaciones de Mason (En Vasilachis, 2007: 24) la investigación cualitativa está "a) fundada en una posición filosófica que es ampliamente interpretativa en el sentido de que se interesa en las formas en las que el mundo social es interpretado, comprendido, experimentado y producido, b) basada en métodos de generación de datos flexibles y sensibles al contexto social en el que se producen, y c) sostenida por métodos de análisis y explicación que abarcan la comprensión de la complejidad, el detalle y el contexto".

El presente estudio se sustenta a partir de dos fuentes de información: la recolección y análisis de bibliografía vinculada a la problemática investigada y el análisis de películas de animación en 3D.

La investigación se encuentra circunscripta al análisis de películas de animación infantiles en 3D. Se tratan de filmes producidos y realizados íntegramente a través de animación computarizada. Situamos como primer caso la película "Toy Story", realizada en el año 1995.

Las películas y series analizadas fueron las siguientes:

  • Abra-Catástrofe (Abra-Catastrophe). Película para la serie de TV "Los Padrinos Mágicos" (The Fairly OddParents). Director Butch Hartman. DVD. Productora Frederator Incorporated, 2003.

  • La Era del Hielo (Ice Age). Directores Chris Wedge y Carlos Saldanha. Productora Blue Sky Studios. DVD. Distribuidora 20th Century Fox, 2002.

  • La Era del Hielo II (Ice Age: The Meltdown). Director Carlos Saldanha. Productora Blue Sky Studios. DVD. Distribuidora 20th Century Fox, 2006.

  • La Era del Hielo III (Ice Age: Dawn of the Dinosaurs). Director Carlos Saldanha. Productora Blue Sky Studios. DVD. Distribuidora 20th Century Fox, 2009.

  • Shrek. Directores Andrew Adamson y Vicky Jenson. DVD. Productora DreamWorks, 2001.

  • Shrek II. Directores Andrew Adamson, Kelly Asbury y Conrad Vernon. DVD. Productora DreamWorks SKG, 2004.

  • Shrek III (Shrek The Third). Directores Chris Miller y Raman Hui. DVD. Productora DreamWorks SKG, 2007.

  • Wall-E. Director Andrew Stanton. Productora Pixar Animation Studios. DVD. Distribuidora Walt Disney Studios, 2008.

  • Vecinos Invasores (Over the Hedge). Directores Tim Johnson y Karey Kirkpatrick. DVD. Productora DreamWorks SKG, 2006.

  • Los Increíbles (The Incredibles). Director Brad Bird. Productora Pixar. DVD. Distribuidora Walt Disney Pictures, 2004.

  • La película de Los Simpsons (The Simpsons Movie). Director David Silverman. Productores Matt Groening, James L. Brooks, Mike Scully, Al Jean y Richard Sakai. DVD. Distribuidora 20th Century Fox, 2007.

  • Ratatouille. Directores Brad Bird y Jan Pinkava. Productora Pixar Animation Studios. DVD. Distribuidora Walt Disney Pictures, 2007.

  • Bob Esponja: Perdidos en el Tiempo (SpongeBob SquarePants: Lost in Time). Película para la serie de TV "Bob Esponja" (SpongeBob SquarePants). Director Stephen Hillenburg. DVD. Paramount Spain S.L. Home Entertainment, 1999.

  • Toy Story. Director John Lasseter. Productores Bonnie Arnold y Ralph Guggenheim. DVD. Distribuidora Walt Disney Pictures, 1995.

  • Toy Story II . Director John Lasseter. Productores Helene Plotkin y Karen Robert Jackson. DVD. Distribuidora Walt Disney Pictures, 1999.

  • Toy Story III. Director Lee Unkrich. Productores John Lasseter y Darla K. Anderson. DVD. Distribuidora Walt Disney Pictures, 2010.

  • Lo que el agua se llevó (Flushed Away). Directores David Bowers y Sam Fell. Co-producción entre Aardman Animations y DreamWorks Animation. DVD. Distribuidora Paramount Pictures, 2006.

  • La verdadera historia de Caperucita Roja (Hoodwinked). Directores Cory EdwardsTodd Edwards y Tony Leeck. DVD. Productora Manga Films, 2005.

  • Padre de Familia (Family Guy). Serie televisiva temporada nº 1. Director: Dan Povenmire. DVD. Productora 20th Century Fox Television, 1999.

  • Los Simpsons. Serie televisiva temporada nº 5. Productor David Mirkin. DVD. Productora 20th Century Fox Television, 1993.

  • Colorín Colorado este cuento no ha acabado (Happily N'Ever After). Directores Paul Bolger y Yvette Kaplan. Distribuidora Lions Gate Entertainment Corporation, 2007.

  • South Park. Serie televisiva temporada nº 7. Director Trey Parker. DVD. Distribuidora Viacom, 2003.

En primer lugar, las dimensiones indagadas en la bibliografía recolectada sobre el contexto social, político, cultural, y económico fueron las siguientes:

  • Del EstadoNación al Mercado: cambios en la lógica dominante.

  • La destitución del ciudadano.

  • El consumidor como figura.

  • La sociedad del consumo generalizado.

  • El papel de los medios de comunicación.

  • La teoría de la manipulación, influencia y producción de subjetividad

  • El discurso massmediático: información y velocidad.

En una segunda etapa, las dimensiones indagadas en la bibliografía recolectada sobre la problemática fueron las siguientes:

  • Cambios en la industria de los dibujos animados: la televisión infantil.

  • La TV infantil de los años 80: programas y dibujos animados.

  • La TV por cable de los años 90: nacimiento de los canales exclusivos para niños.

  • Cambios en la industria de los dibujos animados II: el adulto como nuevo segmento.

  • Investigaciones de mercado: incorporar a los adultos.

  • La industria de la animación para adultos: historia y características.

  • Variaciones en la industria del cine de animación: la irrupción de la tecnología y nuevas lógicas de mercado.

  • Historia de los orígenes del cine de animación.

  • La época dorada de Disney.

  • Las ventajas de las nuevas tecnologías.

  • Los estudios de animación en 3D: nuevos mercados y fusiones.

  • Las nuevas producciones de animación en 3D: la ampliación de las fronteras.

  • Las estrategias de comunicación y marketing de los nuevos films.

  • El imaginario social y el cine infantil: nuevas consideraciones.

  • La expansión del cine en nuevos segmentos del mercado: de las salas a los hogares.

En una tercera etapa, se procedió a relevar las siguientes dimensiones en los filmes de animación:

  • Cambios en la industria de los dibujos animados II: el adulto como nuevo segmento.

  • Un dibujo animado para adultos: Los Simpsons.

  • La intertextualidad como recurso.

  • Humor político y social.

  • Transformaciones a nivel estético y en los modos del relato.

  • La parodia como recurso narrativo.

  • La utilización del humor para unir generaciones.

  • La construcción de contextos más realistas.

  • Nuevos parámetros en los diálogos en los films infantiles.

  • Transformaciones al nivel del contenido.

  • La reutilización de los cuentos infantiles clásicos.

  • Las relaciones entre los contenidos televisivos y cinematográficos infantiles.

  • El tratamiento de la actualidad en las temáticas.

  • Los personajes: estereotipos y novedades.

  • Resignificación del papel del "villano".

  • Cambios en la utilización del humor y la ironía.

  • Los elementos discursivos y visuales pensados para chicos y aquellos pensados para grandes.

Marco Teórico

Todo trabajo de investigación cuenta con un marco teórico que "tiene como función iluminar conceptualmente aspectos relevantes de los datos o fenómenos sociales, y la dirección de sus posibles relaciones, que de otro modo podrían pasar inadvertidas o no ser comprendidas" (En Vasilachis, 2007: 76). En tal sentido, para Mendizábal (En Vasilachis, 2007: 76 y 77), el marco teórico se elabora a partir de diversas fuentes o recursos, bajo los siguientes criterios: "1) la experiencia vital del investigador y sus propias especulaciones o ideas; 2) el conocimiento y dominio de las tradiciones teóricas referidas a la temática estudiada, y el análisis crítico de la bibliografía pertinente y relevante, tarea que se denomina, curiosamente, estado del arte; 3) los estudios o investigaciones anteriores".

El trabajo con teorías implica, necesariamente, conocer la teoría disciplinar y también la vinculada a la problemática específica que se decide abordar, tanto en los casos en los que uno se propone llevar a cabo una investigación en otro contexto para ampliar el alcance de la teoría, como en aquellos en los que hay motivaciones para enriquecer conceptos e ir más allá de los existentes. De manera tal que llevar a cabo un análisis crítico, y no simplemente instrumental, de la bibliografía permite hallar inconsistencias, vacíos, brechas en el conocimiento, así como contradicciones, vínculos no apropiados o no realizados.

Sobre la base de estas elaboraciones en relación a la bibliografía, a continuación comenzaremos a desandar los conceptos que conforman el corpus teórico de la tesis.

Un concepto vital que se abordará será el de subjetividad. En principio, nos apoyaremos en el concepto de subjetividad propuesto por Ana María Fernández (2006), en tanto éste plantea que la subjetividad es una producción y no una estructura o entidad instituida que, ante determinados procesos, sufriría una serie de cambios y transformaciones. Más que pensar entonces a partir de rupturas en la subjetividad o en la identidad, el punto de partida es el siguiente: la subjetividad es una instancia procesual, abierta, en permanente devenir de acuerdo a las dinámicas de afectación entre los cuerpos (individuales y colectivos) y las mutaciones del campo social e histórico. Así define Ana María Fernández la producción de subjetividad (2006:9): "Con la noción de producción de subjetividad aludimos a una subjetividad que no es sinónimo de sujeto psíquico, que no es meramente mental o discursiva sino que engloba las acciones y las prácticas, los cuerpos y sus intensidades; que se produce en el entre con otros y que es, por tanto, un nudo de múltiples inscripciones deseantes, históricas, políticas, económicas, simbólicas, psíquicas, sexuales, etc. Con el término producción aludimos a considerar lo subjetivo básicamente como proceso, como devenir en permanente transformación y no como algo ya dado. (…) No se trata de un sujeto interior y un social histórico exterior a los que habría que tratar de poner en relación. Se trata de pensar la dimensión subjetiva que se produce en acto y que construye sus potencias en su propio accionar".

Asimismo, en la tesis utilizaré la noción de dispositivos productores de subjetividad. Básicamente, de acuerdo a mi objeto de estudio, concibo a los medios de comunicación como los dispositivos fundamentales en la producción de la figura del consumidor. Así lo define Ignacio Lewkowicz (1999, 211): "Las prácticas productoras de subjetividad son las prácticas que instauran unas operaciones en la carne humana. Las prácticas productoras de subjetividad, si se estandarizan, dan lugar a lo que llamamos dispositivos de producción de subjetividad. Las operaciones que instaura un dispositivo no son la que él mismo hace. Son las que obligan a hacer a un individuo para permanecer, para pertenecer, para ser un habitante de un dispositivo. La pura existencia del dispositivo exige una serie de operaciones subjetivas para habitarlo". Esta definición permite incluir también una concepción de los medios de comunicación en tanto máquinas discursivas o dispositivos de enunciación que nos obligan a realizar determinadas operaciones para habitarlos. Esas operaciones que estamos obligados hacer, porque de lo contrario nos quedamos por fuera del discurso (mediático)[1], por fuera del lazo, nos constituyen subjetivamente" (Corea, 2000: 5). Con discurso, en este trabajo, se "designa el conjunto de prácticas comunicativas, comerciales y técnicas que funcionan como condiciones de producción de los medios masivos. Tales prácticas instituyen unas condiciones de recepción específicas del discurso. Para entrar en ese universo de discurso, los sujetos están obligados a realizar una serie de operaciones. Esas operaciones producen un tipo de subjetividad específica: la del espectador o consumidor" (Corea, 1999: 53).

Otro concepto primordial que sustenta este trabajo es el de infancia. Para definirla y comprender los alcances de la transformación de ésta en las últimas décadas recurro a los planteos de Cristina Corea (1999, 13): "La niñez es un invento moderno: es el resultado histórico de un conjunto de prácticas promovidas desde el Estado burgués que, a su vez, lo sustentaron. Las prácticas de conservación de los hijos, el higienismo, la filantropía y el control de la población dieron lugar a la familia burguesa, espacio privilegiado, durante la modernidad, de contención de niños. La escuela y el juzgado, la primera educando la conciencia del hombre futuro; el segundo, promoviendo la figura del padre en el lugar de la ley, como sostén simbólico de la familia. (…) cuando hablamos de la infancia hablamos de un conjunto de significaciones que las prácticas estatales burguesas instituyeron sobre el cuerpo del niño, producido como dócil, durante casi tres siglos. Tales prácticas produjeron unas significaciones con las que la modernidad trató, educó, y produjo niños: la idea de inocencia, la idea de docilidad, la idea de latencia o espera".

Respecto a la crisis de la soberanía del estado-nación y el advenimiento de las sociedades de mercado, utilizo los planteos de Miguel Benasayag (2001: 54): "La economía, las llamadas "ciencias económicas", como es sabido, no existen en todas las culturas y civilizaciones. Por supuesto que podemos identificar en casi todas las culturales, a través de la historia, lo que más bien podríamos llamar "hechos económicos". Estos engloban la existencia, precoz y permanente, de un mercado, o incluso de intercambios más o menos complejos, que incluyen, a menudo, la mediación y, por ende, la existencia de la moneda. (…) La existencia de mercados no puede identificarse con la emergencia "del mercado" centralizado y liberal, tal como lo conoce nuestra civilización. Entre hechos económicos y "economía", entre mercados e intercambios y "sociedad de mercado", existe un "momento", un espacio: el momento histórico y el espacio de la profunda separación de lo económico con respecto a la sociedad, hasta devenir un hecho o un conjunto de hechos autónomos de la sociedad que Polanyi describe como des-socialización de la economía".

A partir de este planteo, Miguel Benasayag (2001) realiza una diferencia entre las sociedades con mercado y las sociedades de mercado. Si se efectúa un rastreo a lo largo de la historia se puede determinar, más allá de las diferencias de época, que los hechos económicos fueron tratados a través de estructuras y modos de organización al interior de lo social de cada cultura. La gran reformulación de nuestra época, señala Benasayag, se desencadena cuando lo económico se autonomiza de la sociedad para sobrevolarla y determinarla. El hombre queda reducido a la esfera económica, y ya entonces no se trata de una sociedad que organiza intercambios económicos mediante un mercado, sino de una sociedad regida por los imperativos de un mercado global.

Estrechamente vinculada con la crisis de la hegemonía del Estado, en la tesis se utilizará la noción de meta-institución. Así es definida: ¿Qué significa que el Estado haya sido una meta-institución? "Significa que es condición de existencia institucional, principio general de consistencia, articulador simbólico que dona sentido a las situaciones que son parte de esa lógica. Si el Estado-Nación es condición de existencia institucional, principio de consistencia, y articulador simbólico, implica que el Estado es el marco organizativo donde la transcurre la vida. En la lógica nacional, fuera de ese universo meta-institucional, no hay existencia socialmente instituida." (Lewkowicz, 2003: 38)

En relación a las crisis de las sociedades disciplinarias y la destitución de una concepción específica de infancia, sostendré la conceptualización que realiza el Colectivo Situaciones (2002: 24) de este tipo de sociedades en base a los planteos de Michel Foucault. "Las sociedades disciplinarias estaban signadas por la existencia de un conjunto de instituciones cuya tarea fundamental era la de producir un tipo de hombre adecuado a la norma productivista dominante, y educar y corregir los desvíos que lo volvían opaca, improductivo y deforme. Las escuelas, las cárceles, las universidades, los hospitales y el ejército, entre otras, conformaron una trama de instituciones que funcionaban -y funcionan- como sitios en los que se encierra y disciplina la subjetividad del individuo. Una coherencia fundamental, sustentada por el estado nacional, aseguraba la interacción entre estas instituciones disciplinarias para producir una subjetividad ciudadana fundada en la adecuación del cuerpo a la producción y en la conciencia como espacio a moldear a través del discurso ideológico".

Finalmente, para poder pensar el cambio en el estatuto de la infancia y los nuevos patrones de consumo de las películas de animación en 3D, analizo la destitución de la figura del ciudadano y el advenimiento del consumidor como figura subjetiva dominante en la sociedad actual. Para distinguir ambas figuras, utilizo el planteo de Ignacio Lewkowicz (2004, 25): Al ciudadano "se lo puede definir como sujeto de la conciencia: de la conciencia política, de la conciencia moral, de la conciencia jurídica, en definitiva, sujeto de la conciencia nacional. El ciudadano es el sujeto instituido por las prácticas propias de los estados nacionales: escolares, electorales, de comunicación. (…) El ciudadano, entonces, se establece como el soporte subjetivo de los estados nacionales. El Estado se apoya sobre la nación que se apoya sobre los ciudadanos". Por su parte, respecto al consumidor, Lewkowicz (2004: 36 y 37) plantea lo siguiente: "La ley fundamentada en un pueblo de ciudadanos ya es ficticia. Emerge una ley fundada en otra ficción naciente pero oscura, que retroactivamente vuelve ficticia la legitimidad nacional de la legalidad constitucional. En el agotamiento ficticio de la verdad del ciudadano, el consumidor aparece como nueva fuente de razón y justicia. (…) La soberanía no emana ya del pueblo sino de la gente. La gente ya no son los ciudadanos sino los consumidores. Si el consumidor se inviste como soberano, la ley será la ley de consumo".

***

En este capítulo se han expuesto las principales etapas y características metodológicas que permitieron la realización de esta tesina. Al mismo tiempo, se introdujeron y analizaron los conceptos claves de esta tesis, comenzaré a desandar el primer capítulo, cuyo nombre es "La expansión del mercado neoliberal. El papel de los medios de comunicación", a fin de analizar el contexto social, político, cultural y económico en el que se circunscriben los procesos que desarrollará e indagará esta tesina.

CAPITULO 1:

Contexto social-histórico: La expansión del mercado neoliberal. El papel de los medios de comunicación

"La relación social ya no se establece entre ciudadanos

que comparten una historia, sino entre consumidores

que intercambian productos"

Ignacio Lewkowicz (2003) "Del Fragmento a la Situación.

Notas sobre la subjetividad contemporánea".

1.1 De la sociedad de estado a la sociedad de mercado.

Para poder iniciar cualquier tipo de análisis es indispensable poder describir el contexto dentro del cual tiene lugar el fenómeno en cuestión. Cada fenómeno es, a la vez, productor y producto de las condiciones sociales, económicas, políticas y culturales de la sociedad en la que se desarrolla.

Desde este punto de vista, es necesario conocer cuáles son las lógicas que rigen la sociedad para poder esclarecer el lugar y el funcionamiento de las prácticas y discursos cinematográficos a los cuales me referiré en los siguientes capítulos.

El pasaje anunciado en este punto retoma las investigaciones del historiador Ignacio Lewkowicz (2003) que afirma el agotamiento del Estado Nación como práctica dominante, soberana, en la sociedad actual. Poder pensar a partir de dicho agotamiento la irrupción de las dinámicas del mercado neoliberal permite construir el marco en el que se constituyen en la actualidad los sujetos y procesos sociales.

Lewkowicz (2003) sostiene que para pensar las transformaciones actuales en la subjetividad, se torna indispensable postular el agotamiento del Estado Nación como esa meta-institución donadora de sentido de la vida social. Para este autor el Estado-nación era el organizador y el regulador de la vida. Se trató de una lógica dominante de la sociedad durante los siglos XIX y XX. En los estados nacionales el individuo se constituía como ciudadano, es decir, era instituido por las prácticas propias de las instituciones estatales: escolares, electorales, de comunicación. El ciudadano, entonces, se inscribía como el soporte subjetivo de los Estados nacionales" (Lewkowicz, 2004).

El Estado-Nación es una meta-institución en tanto actuaba como una articuladora simbólica de la sociedad. En tal sentido, Lewkowicz (2003: 45) afirma lo siguiente: "En los Estados Nacionales, la existencia es existencia institucional, y el paradigma de funcionamiento son las instituciones disciplinarias. En este sentido, la vida individual y social transcurre en este tipo de organizaciones. Entre otras: familia, escuela, fábrica, hospital, cuartel, prisión, etc. Ahora bien, estas instituciones se apoyan en la meta-institución Estado Nación, y ese apoyo es el que les provee sentido y consistencia integral".

El Estado, en tanto meta-institución, se materializa en las instituciones encargadas de reproducir su lógica. Para poder lograr sus objetivos cada institución de la modernidad -familia, escuela, fábrica, cárcel, hospitales, etc.- exige la puesta en acto de un conjunto de operaciones indispensables para formar parte de su lógica. Su finalidad es "producir una subjetividad ciudadana fundada en la adecuación del cuerpo a la producción y en la conciencia como espacio a moldear a través del discurso ideológico" (Situaciones, 2002: 24).

Los mandatos familiares, la autoridad paternal, los horarios y calificaciones escolares, el funcionamiento de la ley, son operaciones que los ciudadanos están exigidos a cumplir para poder forma parte de la sociedad. Un ciudadano es una persona que posee derechos y deberes enmarcados en las legislaciones vigentes, cuya máxima expresión es la Constitución Nacional. Los mecanismos de representación por medio del voto electoral son los encargados de expresar la voluntad popular y de velar por los intereses sociales. Las cárceles son el lugar de aquellos que atentaron contra la legalidad instituida. Los niños, al interior de este esquema social, son los futuros ciudadanos y las escuelas son espacios en los que se trasmiten los valores, derechos y deberes de la nación.

El paso por cada una de estas instituciones disciplinarias produce la subjetividad ciudadana.

Dentro de la lógica estatal la igualdad ante la ley es el principio que provee consistencia a los lazos sociales. Así lo manifiesta Duschatzky y Corea (2002: 25): "El semejante no es una construcción espontánea que nace del vínculo entre dos sujetos. El semejante es siempre igual a otro, ante y mediante un tercero". Y ese tercero es la ley estatal.

Al existir una relación analógica entre las instituciones, los individuos pueden pasar de una a otra realizando siempre las mismas operaciones. Cada una trabaja sobre la base provista por la institución precedente.

Las instituciones se apoyan en un suelo estatal en el que encuentran un sentido y una orientación para su existencia y funcionamiento. El Estado, insisto con ello, en tanto meta institución desempeña el papel de articulador simbólico de las instituciones.

Ignacio Lewkowicz (2003) afirma que en las sociedades existen lógicas activas y lógicas agotadas. Cuando una sociedad funciona de acuerdo a lo establecido por una lógica dominante nos encontramos en presencia de una lógica activa. Es activa porque puede significar y orientar a los habitantes de dicha organización social. Pero una lógica está agotada cuando sus mecanismos de reproducción devienen obsoletos y ya no sirven de guía -aún cuando existan formalmente- a los sujetos que integran esa institución.

Asimismo, Lewkowicz (2003: 39) afirma que "la muerte del Estado no implica la extenuación de todo tipo de estatalidad, sino la desaparición del Estado como práctica dominante". Las instituciones disciplinarias tampoco desaparecen ni mucho menos sino que pierden su capacidad de dejar marcas decisivas en los cuerpos de los sujetos. O para decirlo en otras palabras: ya no logran orientar y producir como antaño la vida de los sujetos. Existen otras instancias, que mencionaré más adelante, que producen y modelan la subjetividad contemporánea.

El Estado-nación si bien no desaparece, es incapaz de regular los flujos económicos, informacionales y demográficos. Al respecto, Matellanes (en Situaciones, 2002: 22) afirma lo siguiente: "El régimen político deja de ser clave en los devenires sociales. En este sentido, desde la perspectiva estatal se abre ahora un proceso de des-socialización (desarticulación de la socialización que se desprendía de la vigencia de los estados nacionales). Ya nada asegura el vínculo ciudadano".

Aquello que viene a poner en crisis la soberanía del Estado-nación es el advenimiento de las dinámicas propias del mercado neoliberal. En el próximo apartado detallaré las características de dichas lógicas y de esa nueva figura subjetiva que produce el mercado: el consumidor.

1.2 El consumidor como figura.

Desde sus inicios, la vida social se caracterizó por entablar relaciones mercantiles, desde el trueque hasta la acuñación de monedas, desde las civilizaciones nómades hasta los conglomerados urbanos, la esfera económica siempre fue parte de la sociedad. Miguel Benasayag (2001) realiza una diferencia entre las sociedades con mercado y las sociedades de mercado. Si se efectúa un rastreo a lo largo de la historia se puede determinar, más allá de las diferencias de época, que los hechos económicos fueron tratados a través de estructuras y modos de organización al interior de lo social de cada cultura. La gran reformulación de nuestra época, señala Benasayag, se desencadena cuando lo económico se autonomiza de la sociedad para sobrevolarla y determinarla. El hombre queda reducido a la esfera económica, entonces no se trata ya de una sociedad que organiza intercambios económicos mediante un mercado, sino de una sociedad regida por los imperativos del mercado, es decir, modulada por la operatoria de los flujos económicos.

Partes: 1, 2, 3
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