Exigencias de un enfoque profesionalizado en la enseñanza aprendizaje del inglés para maestros
Enviado por Orlando Rodriguez
Este trabajo aborda las exigencias que conlleva conferirle un enfoque profesionalizado al proceso de enseñanza aprendizaje del inglés para futuros maestros en las universidades de ciencias pedagógicas de Cuba, específicamente en la "José Martí" de Camagüey. El tratamiento al enfoque profesionalizado en el aprendizaje generalmente se ha relacionado con carreras técnicas dentro de la enseñanza técnico profesional. Este enfoque debe contextualizarse en las diferentes carreras o disciplinas de la educación superior con el propósito de lograr las metas que le plantea la sociedad al desempeño profesional de los egresados de ese nivel de enseñanza en sus contextos laborales. El profesor de inglés como lengua extranjera no escapa a esas exigencias.
Palabras claves: enfoque profesionalizado, competencia profesional, usuario, analista, profesor
Abstract
This article deals with the demands for giving a professionalized approach to the English teaching-learning process for future teachers at the universities of pedagogical sciences of Cuba, specifically at "Jose Marti" University of Camagüey. The treatment to the professionalized learning approach has generally been related to technical courses in the technical professional teaching. This approach needs contextualizing in the different courses or disciplines of higher education with the purpose of achieving the goal demanded by society of graduated teachers from higher education at their working scenarios. The teacher of English is no exception to this demand.
Key words: professionalized approach, professional competence, user, analyst, teacher
Los problemas de la práctica educativa actual demandan soluciones contextualizadas en correspondencia con el contexto particular en que se presentan y los objetivos instructivos y formativos que exige el nivel escolar en el que se actúa. Las instituciones educacionales en general deben preparar al hombre para la vida, por tal razón, se requiere individuos preparados para enfrentar los problemas que emergen en su práctica laboral o profesional y los resuelva.
Para que un individuo se considere preparado es necesario que se haya apropiado de parte de la cultura precedente y, consecuentemente, conozca una profesión, que sea instruido, y como resultado de esa apropiación, que desarrolle sus potencialidades funcionales, tanto físicas como espirituales, las cuales deben ser apoyadas por el conocimiento de una rama del saber humano.
La instrucción y el desarrollo se forman juntos e interactuando, aunque ambos mantienen una relativa autonomía y personalidad propia. Además de estos dos aspectos, hay que formar en el estudiante los valores y sentimientos propios del hombre como ser social, hay que educarlo.
Estos tres procesos, instrucción, desarrollo y educación, deben confluir armónicamente en el proceso formativo como un proceso totalizador, cuyo objetivo es preparar al hombre integralmente para la vida.
La enseñanza de lenguas extranjeras para fines de formación profesional demanda profesionales más competentes, no solo en cuanto al desarrollo de competencias propias del desarrollo lingüístico, sino de aquellas que constituyen herramientas para un desempeño profesional y laboral de mayor calidad.
El objetivo de este artículo es hacer una reflexión sobre la necesidad de conferirle un enfoque profesionalizado a la enseñanza aprendizaje del inglés para los futuros profesores de ese idioma extranjero en las universidades de ciencias pedagógicas de Cuba, y específicamente en la "José Martí" de Camagüey.
El desarrollo vertiginoso de la ciencia, la tecnología y las comunicaciones inciden en el proceso de formación imponiendo exigencias de estrategias que propicien la integración de conocimientos y habilidades conducentes al desarrollo de competencias y capacidades de los educandos dentro del proceso de enseñanza aprendizaje. No se debe olvidar que este surge como tal para satisfacer un encargo social, un problema, es decir, la necesidad de la preparación de los ciudadanos de un país, de las nuevas generaciones, que es sin dudas, de naturaleza social.
Por ello, el proceso de enseñanza aprendizaje del inglés en la disciplina Práctica Integral de la Lengua Inglesa, en lo adelante PILI, como eje central en la formación de los futuros profesores de ese idioma en la Universidad de Ciencias Pedagógicas "José Martí" de Camagüey, requiere propiciar la integración de conocimientos, habilidades, valores y actitudes en los maestros en formación de manera que puedan enfrentar sus responsabilidades profesionales y sociales con mayor eficiencia. Por lo que se requiere un aprendizaje desarrollador que potencie en los estudiantes la apropiación activa y creadora de la cultura, y los conduzca al desarrollo de actitudes, motivaciones, así como de las herramientas necesarias para aprender a aprender, y aprender a crecer de manera permanente.
La disciplina aludida anteriormente, PILI, tiene como meta principal contribuir al a la competencia comunicativa de los maestros en formación apoyándose en el desarrollo de las cuatro habilidades básicas: expresión escrita y oral, comprensión auditiva y comprensión lectora. Para ello, debe propiciar en el maestro en formación aquellos conocimientos y habilidades lingüísticas y didácticas que lo forme y desarrolle como un buen usuario de la lengua extranjera que le permita ser un comunicador eficiente, como profesor del idioma, y como explorador o analista de la estructura de ese idioma y demás aspectos lingüísticos (fonéticos, lexicales, etc.), que le permita enriquecer y desempeñar con mayor eficiencia las dos actuaciones aludidas anteriormente: usuario y profesor. La aspiración de ser buen usuario y profesor de la lengua extranjera también lo motiva a desarrollarse como buen analista de ella, por lo que existe una estrecha interrelación entre estos tres desempeños del maestro en formación.
Concebir la enseñanza aprendizaje teniendo en cuenta estos tres desempeños del maestro en formación desde la misma clase, y no solo horizontalmente de acuerdo al plan de estudios, significa tener un mayor acercamiento a sus necesidades profesionales desde su formación inicial, por lo que se debe propiciar un enfoque profesionalizado tanto a la enseñanza como al aprendizaje de este futuro profesional, para que pueda cumplir con mayor eficiencia sus tareas académicas, laborales e investigativas.
Existen tres tendencias bien marcadas en relación al tratamiento dado a la profesionalización desde basamentos pedagógicos[1]la primera de ellas la considera una categoría general dentro de la pedagogía, donde se destacan autores como Abreu (1993), Torres Carrillo (2002) y Maury (2005), la UNESCO (1993). Otro grupo de autores (Añorga Morales (1999), Pérez García (2001), Addine Fátima (s/f), González Gaudiano (1998)) la conciben como un proceso; mientras otros[2]la consideran como un principio que exige ciertas regularidades a los procesos de formación y desarrollo que ocurren en los escenarios escolares.
Los autores de este artículo asumen la profesionalización como un proceso, donde el futuro profesional transita por una serie de etapas, destacándose la formación inicial (en pregrado), la de recién graduado, y la formación continua, a través de las cuales se alcanza la eficiencia en la adquisición y desarrollo de las competencias requeridas por el modelo del profesional, y las aspiraciones individuales y sociales. Esto no implica ignorar ciertas consideraciones sobre la profesionalización como categoría y principio en el proceso pedagógico.
Considerada como proceso, A. Pérez[3]valora la profesionalización a través de tres dimensiones: el dominio profundo de conocimientos teóricos que sustentan la profesión, una relación dialéctica entre el pensar y el hacer y una sólida independencia cognoscitiva. En el caso de los estudiantes que se están formando como profesores del inglés como idioma extranjero, la primera dimensión debe apuntar hacia el dominio de las habilidades básicas por el educando que le permitan usar esa lengua extranjera como medio de comunicación y cognición de la cultura en sentido general, como también al dominio de los contenidos teóricos específicos de la ciencia en cuestión, la lingüística; es decir, este estudiante debe aprender el idioma y sobre el idioma.
Es precisamente en este sentido donde, a juicio de los autores, se establece una de las contradicciones dialécticas en el proceso de enseñanza aprendizaje del inglés de los futuros maestros de ese idioma. Las contradicciones de este proceso se enmarcan en los siguientes aspectos:
Relación desproporcionada entre el aprender el idioma y aprender sobre el idioma.
Desbalance entre el desarrollo de habilidades del maestro en formación como usuario, analista y profesor del idioma extranjero.
La búsqueda de vías para el acercamiento entre los aspectos en contradicción debe conducir, a consideración de los autores, a condiciones favorables para el proceso de profesionalización de la enseñanza aprendizaje del inglés, que tiene como unos de los momentos importantes, la formación inicial o de pre-grado en las universidades de ciencias pedagógicas.
Si, como apuntan Añorga Morales y Varcárcel Izquierdo[4]la profesionalización del maestro se expresa a través de tres dimensiones: la dimensión pedagógica, la técnica y profesional, y la humana; entonces, la didáctica de la enseñanza del inglés como lengua extranjera para futuros profesores en las universidades pedagógicas debe dirigir sus objetivos, métodos y procedimientos en el proceso de enseñanza aprendizaje de esa lengua en esas direcciones, lo que exige una secuencia de actividades diversificadas en cada clase y sistema de clases que sustenten y sean coherentes con el desarrollo de esas dimensiones en el maestro en formación.
Esa secuencia de actividades diversificadas debe favorecer, entre otros aspectos, el desarrollo de una habilidad básica determinada en el futuro profesional del idioma extranjero, la apropiación de conceptos lingüísticos relacionados que permitan regular tanto la interpretación y producción del discurso como su representación didáctica, y la apropiación de estrategias de aprendizaje que le permita lograr lo apuntado. Estas también deben permitirle desarrollar la capacidad de reflexión, orientada a la indagación y asimilación consciente del contenido de aprendizaje, y caracterizada por la estrecha relación entre pensamiento y acción, relaciones sociales en el proceso de cognición, intereses humanos, políticos, culturales y sociales.
Cabe destacar, según lo acotado en el párrafo anterior, que la formación científica del futuro maestro en la rama del saber específico debe acompañarse de un saber pedagógico, que le posibilite:
Dirigir el proceso de enseñanza aprendizaje de la disciplina que desarrollan.
Investigar el propio proceso para su perfeccionamiento.
Incrementar su autonomía y control del propio trabajo.
Según Abreu Regueiro[5]un docente se considera profesionalizado cuando posee las siguientes características:
Trabajar despojando lo no esencial de su labor, lo que significa fundamentalizarla.
Alta formación psico – pedagógica y técnica tanto teórica como práctica.
Desempeño pleno de sus tres roles tradicionales y más generales:
Instructivo.
Formativo profesional.
Formativo personal.
Ser un investigador activo desde su disciplina o asignatura.
Integral, flexible, polivalente en su acción educativa".
Todo ello implica el desarrollo de la competencia profesional en el maestro en formación, lo cual, según Santos Baranda[6]es "Un sistema de conocimientos, habilidades, valores y cualidades de la personalidad que se movilizan en función de las necesidades individuales y sociales, así como de los motivos, intereses y actitudes del profesional, que permiten el desempeño satisfactorio en el ejercicio de la profesión." Como es sabido, ella se constata en el desempeño profesional y se desarrolla en el proceso de profesionalización, que, como apunta la autora mencionada, comienza en la etapa de pregrado y continúa como un proceso dialéctico a un segundo nivel cualitativamente superior en su desempeño profesional.
Se puede inferir de lo planteado arriba que esa competencia profesional debe abarcar, en el caso de los futuros profesores de inglés, otras competencias que les permitan el desempeño exitoso de la profesión, como lo es la comunicativa y todas aquellas que la componen, específicamente, la lingüística, la estratégica, la sociolingüística, y la discursiva.
Es válido recordar que los estudiantes que se preparan para formarse como profesores de una lengua extranjera, están en el proceso de aprender el idioma foráneo, por lo que están involucrados en la apropiación de los recursos lingüísticos (lexicales, fonéticos, gramaticales y semánticos) para poder interpretar y producir enunciados en esa lengua, pero al mismo tiempo deben ir apropiándose de los conocimientos teóricos y metodológicos relacionado con la lingüística y la metodología que le permitan ser mejores conocedores del idioma que aprenden y deben enseñar posteriormente.
Por todo ello es que cobra importancia el aprendizaje significativo como medio de procesamiento y almacenamiento de información para la consiguiente resolución de problemas a los que se puede enfrentar un individuo en su interacción con la realidad. Los maestros en formación deben estar motivados a la realización de los aprendizajes significativos, facilitando de esta manera la adquisición de conocimientos y la sistematización de los mismos, sin ignorar o restar importancia a aspectos lingüísticos, metodológicos, o pedagógicos que implican esta actividad, y necesarios para su quehacer fundamental: la enseñanza, lo cual exige un enfoque profesionalizado del proceso de enseñanza aprendizaje del inglés para futuros profesores de ese idioma en las universidades pedagógicas.
En este sentido, los autores definen el enfoque profesionalizado del proceso de enseñanza aprendizaje del inglés para futuros maestros de ese idioma como un proceso cognitivo-afectivo donde se produce la apropiación y sistematización de la cultura lingüística, comunicativa y pedagógica del maestro en formación, propiciando el desarrollo tanto de su experiencia como de su competencia profesional, de manera que le permita transformar la realidad en la cual debe desempeñarse en función de las necesidades y su encargo social.
Entonces, sería válido preguntarse qué peculiaridades exige este proceso marcado por la profesionalización, no solo en el aprendizaje, sino también en la enseñanza, qué transformación se espera en el que aprende. Las respuestas lógicamente esperadas estarían centradas en las vías metodológicas y procedimientos mediante los cuales se produce el cambio del que aprende, su rol protagónico, entre otras condiciones.
En el enfoque profesionalizado aludido en el párrafo anterior, destaca el desarrollo de la competencia profesional de los educandos que, en el caso que aborda este escrito, se forman como profesionales de la educación en la especialidad de inglés. Por ello, se han de tener en cuenta algunas cualidades relacionadas con la educación que se apoya en el desarrollo de competencias como lo es el principio de transferibilidad, el cual se refiere a la transferencia de habilidades y conocimientos adquiridos por el futuro profesional en su contexto académico a los escenarios de trabajo, de manera creativa y eficiente. Otro rasgo relacionado es la multirreferencialidad,[7] la cual alude a la necesidad de orientar las acciones educativas en función de las características de los diferentes contextos profesionales, lo que trata de estrechar las necesidades sociales reales con la formación de los estudiantes universitarios.
Otra cualidad de la formación de profesionales sustentado en competencias se refiere a la concepción del aprendizaje como un proceso abierto, flexible y permanente, por lo que se trata de combinar acertadamente momentos del aprendizaje académico con situaciones de la realidad profesional, de manera que el maestro en formación establezca los nexos necesarios entre su práctica profesional y la formación académica.
Todo ello apunta hacia el desarrollo de competencias básicas, genéricas y específicas[8]que conforman niveles esenciales en la integralidad de la competencia profesional a la que se aspira en los maestros en formación de la especialidad de Lengua Inglesa.
Esta idea reitera y confirma lo planteado en los inicios de este artículo en cuanto a la necesidad de concebir en la didáctica de la enseñanza del inglés a estudiantes de las universidades pedagógicas el desempeño de ellos como usuarios, analistas de la estructura del idioma, y profesores del mismo. En consecuencia, todo el accionar didáctico, metodológico, académico e investigativo debe ser coherente con los mismos, lo que implica la integración de saberes prácticos, teóricos y valorativos, recordando que los primeros incluyen los saberes técnicos (conocimientos disciplinares) y metodológicos; los teóricos definen los conocimientos conceptuales que se adquieren en relación a una o varias disciplinas; y los valorativos se relacionan con las actitudes en torno a la predisposición y motivación para el autoaprendizaje (querer hacer), y los valores asociados al establecimiento y desarrollo de relaciones sociales (saber convivir).
En opinión de los autores de este escrito, todo lo apuntado hasta aquí se enmarca dentro de un proceso de profesionalización tanto de la enseñanza como del aprendizaje del inglés como lengua extranjera en las universidades pedagógicas del país.
Huerta Amezola, Jesús y otros. Cualidades de la educación por competencias profesionales. Disponible en http://educacion.jalisco.gob.mx/consulta/educar/13/13Huerta.html (18-10-10)
León Hernández, Vicente Eugenio. La profesionalización, análisis tendencial dentro del cuerpo categorial de la pedagogía y la didáctica. Disponible en
http://www.monografias.com/trabajos33/profesionalizacion/profesionalizacion?monosearch
(25-9-09).
Pérez, A. Propuesta de estrategia metodológica para la profesionalización del maestro de Literatura y Español. Tesis en opción al Master en Educación de Avanzada. ISPEJV. C de La Habana, 2001.
Santos Baranda, Janette. Modelo Pedagógico para el mejoramiento del desempeño pedagógico profesional de los profesores de Agronomía de los Institutos Politécnicos Agropecuarios. Tesis en opción al grado científico de Doctor en Ciencias Pedagógicas. Ciudad de la Habana, 2005.
Autor:
DrC. Orlando Rodríguez Díaz, Profesor Asistente
Lic. Maritza Ledo Nogueira
Lic. Yasnivy Fernández Suárez
Facultad de Humanidades
Departamento de Inglés
2011
Universidad de Ciencias Pedagógicas
"José Martí"
Camagüey
[1] Vicente Eugenio Le?n Hern?ndez. La profesionalizaci?n, an?lisis tendencial dentro del cuerpo categorial de la pedagog?a y la did?ctica.
[2] Arias Garc?a (1999), Correderas Molina (1999), Torres Mart?nez (1999), Corrales I, (1999), Pati?o (1996), Sogari (2000), Pages Santacana (2000), Jim?nez Vielsa (2000), Rumbe (1992) y Vogel (2002).
[3] A. P?rez. Propuesta de estrategia metodol?gica para la profesionalizaci?n del maestro de Literatura y Espa?ol.
[4] Cf. Santos Baranda, Janette. Modelo Pedag?gico para el mejoramiento del desempe?o pedag?gico profesional de los profesores de Agronom?a de los Institutos Polit?cnicos Agropecuarios.
[5] ?dem, p. 47.
[6] ?dem, p. 51.
[7] Jes?s Huerta Amezola y otros. Cualidades de la educaci?n por competencias profesionales.
[8] Jes?s Huerta ob. cit.