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Administración de Empresas (página 2)

Enviado por Ma. Gabriela Cueva


Partes: 1, 2, 3

Empresas monoproducto. Empresas multiproducto. Empresas producción en serie. Empresas producción por pedido.

Localización

Empresa monoplanta. Empresa multiplanta.

Propiedad del capital

Empresas públicas. Empresas privadas.

Ámbito de competencia

Empresas monomercado. Empresas multimercado. Empresas nacionales. Empresas multinacionales.

Posiblemente el sector económico o la rama de actividad en que se encuentre la empresa es el primer aspecto a considerar. En España existe la norma C.N.A.E.(Clasificación Nacional de Actividades Económicas) que clasifica las empresas en 52 ramas o sectores y todos los estudios macroeconómicos se basan en esta clasificación.

1.3.4. Pequeñas y medianas empresas (PYMES)

 No existe consenso global en la especificación de este tipo de empresa pero, en general, se considera pequeña empresa la que emplea menos de 50 personas, y mediana la que cuenta entre 50 y 250 empleados. Pero hay otras formas de definir lo que es una pequeña empresa. Algunos autores lo hacen según el capital social, otros según la responsabilidad de la dirección dependiendo en todos ellos del sector y del país considerado, es decir, es una clasificación relativa.

En la mayor parte de los países, casi todas las empresas entran en la categoría de pequeñas y medianas. En 1988, más del 90% de los establecimientos industriales españoles tenían menos de 250 empleados, según datos del Registro Industrial del Ministerio de Industria.

El Departamento de Comercio de Estados Unidos da también un porcentaje superior al 90% para las empresas que ocupaban menos de 250 personas.

El siguiente cuadro muestra la distribución de empleo según tamaño y países de las empresas industriales.

Tabla 1.1. Distribución del empleo porcentual según tamaño1.

El examen de las distribuciones del empleo industrial por tramos de tamaños en empresas de diez países de la OCDE permite constatar que presentan grandes diferencias. Considerando la proporción de empleo en empresas pequeñas, el valor máximo lo alcanza Italia, con el 55 por 100, y el mínimo EE.UU. con el 17 por 100. Ambos países ocupan posiciones recíprocas en el tramo de empresas grandes, con porcentajes, respectivamente, del 26 y 69 por 100. Estas diferencias se mantienen, aunque atenuadas en magnitud, para la distribución de tamaños de los establecimientos industriales.

Entre los cambios que se han producido en la actividad industrial, la participación creciente de empresas y establecimientos de dimensión pequeña en el empleo total constituye una de las regularidades empíricas que más atención ha recibido.

Un informe de la OCDE (1985) sobre esta materia, señala como tendencia general para el conjunto de países miembros de la organización, la concentración creciente del empleo en empresas pequeñas, a las que además se atribuye '…un papel especialmente importante en el incremento neto de empleos durante los últimos diez o quince años'.

Los autores Storey y Jhonson (1987) y Loveman ySengenberger (1991) confirman internacionalmente lo que se ha expuesto anteriormente y lo sintetizan en los siguientes cuatro apartados:

1. Las empresas pequeñas han contribuido a la creación neta de empleo con un porcentaje que supera su participación en el empleo total.

2. El mejor comportamiento de las empresas pequeñas en cuanto a creación neta de empleo, se debe, en primer lugar, a una superior (inferior) creación (destrucción) de puestos de trabajo entre las unidades que han permanecido operativas y, en segundo lugar, al mayor número de empleos que generan entre las empresas de nueva creación.

3. Aunque la superior contribución de las empresas pequeñas al aumento de la ocupación es común a un amplio número de actividades industriales, los mejores resultados relativos, en términos de crecimiento de empleo, tienden a concentrarse en sectores en declive.

4. El seguimiento longitudinal de las unidades productivas de nueva creación indica, por último, que es una proporción mínima de empresas, generalmente muy pequeñas, la que contribuye con la ampliación de su volumen de empleo a la mayor parte de la creación de nuevos puestos de trabajo en la industria.

En los establecimientos con menos de 500 empleados existe un diferencial en el valor absoluto de la productividad favorable a las unidades de mayor dimensión. Este patrón se mantiene con una desagregación de actividades. Por otra parte, en los establecimientos situados en el tramo de empleo superior a 500 empleados, no existen diferencias de este signo, de carácter sistemático, respecto a las unidades de empleo inferior.

Entre las explicaciones se pueden citar: una mayor intensidad de capital asociada con la dimensión empresarial, la explotación de economías de escala por parte de las mayores empresas, grados de eficiencia superiores en la utilización de los factores o la existencia de diferentes estructuras de costes.

Suelen ser características principales de las pequeñas y medianas empresas las siguientes:

1. Insuficiencia de tecnicidad en la gestióndebido a una falta de formación básica de sus dirigentes y a la imposibilidad de utilizar ciertas técnicas que precisan una cierta economía de escala.

2. Insuficiencia de capacidad financiera ante la imposibilidad de acceso a los mercados de capitales con que cuentan las empresas de mayor dimensión. Esto supone un freno a la expansión y al crecimiento y una ocupación excesiva de sus dirigentes.

3. Riesgo de alcanzar el nivel de incompetencia a medida que aumentan su dimensión debido a una falta de planificación estratégica adecuada.

4. Riesgo de alcanzar la obsolescenciatecnológica a causa de no disponer de los medios necesarios para realizar una investigación aplicada adecuada.

5. Facilidad en la comunicación interpersonaldebido al reducido equipo humano y a su ámbito geográfico reducido.

6. Facilidad en la toma de decisiones debido al esquema simple en la estructura de poder, en el que existen pocas personas en la dirección.

7. Desarrollo del grado de integración personal debido a la facilidad de armonizar los intereses particulares a causa de su reducido número.

8. Facilidad de ocupar nichos en mercados amplios ocupados por la competencia de empresas de mayores dimensiones.

Otra forma de considerar las empresas, debido a Patrick Liles, establece una clasificación especialmente útil y permite comprender el motivo de la rotación en el mundo empresarial, especialmente debido a que la mayoría de las empresas pertenecen al primer tipo de la clasificación:

1. Empresas marginales. En primer lugar, existe un porcentaje muy elevado, quizás el 80%, de empresas que se denominarán marginales. Se trata de empresas que no poseen ningún rasgo diferencial, ningún asomo de creatividad, nada que les confiera una ventaja competitiva apreciable: por ejemplo, una pequeña empresa de transportes, una empresa de taxis, una peluquería, una tienda de ropa de vestir o una tienda de comestibles. La marginalidad es relativa. Un profesional de alta calificación puede mantenerse en una fácil y cómoda marginalidad, desarrollando una serie de actividades como autónomo o autoempleado.

2. Empresas diferentes. Empresas que sin duda serán pequeñas pero que contienen algo diferencial, una cierta personalidad que les confiere una ventaja competitiva y que garantiza su supervivencia. Generalmente se trata de empresas fundamentadas en la habilidad de una persona o de un reducido número de personas. Por ejemplo: una consulta, una escuela de danza o una empresa de decoración.

Son empresas que tienen el germen de un posible desarrollo. Cuando Gabrielle Chanel abrió su pequeña tienda de sombreros a principios de siglo, en la energía, creatividad y voluntad de la emprendedora estaba la semilla de la futura empresa de moda y perfumes. De la misma forma, cuando Ramón Areces abrió su tienda en Madrid, en el concepto de servicio que empezó a aplicar estaban las raíces del crecimiento espectacular que daría origen al cabo de unos años a la primera cadena de grandes almacenes de España, El Corte Inglés.

3. Empresas con potencial. Son pequeñas empresas pero que tienen un gran futuro. Por ejemplo: Un día Laurent Boix-Vives adquirió una empresa de carpintería y empezó a fabricar esquís, hoy día la marca Rosignol está extendida en todo el mundo y es líder en fabricación de esquís. Otro estudioso del tema, Neil Churchill, llama a estas empresas: gacelas, empresas pequeñas pero que corren mucho.

La dirección de una pequeña empresa de alto rendimiento, empresas que se han denominado de potencial, exige un estilo, una estrategia de dirección determinados. Es referido a esa clase de pequeña empresa que alcanza una identidad distintiva y que crece y se sale de su categoría.

Figura 1.1: Relación de empresas según su potencial2.

Aplicando los ajustes pertinentes, los ocho consejos o criterios que se sugieren a continuación son de utilidad para la dirección de tres tipos de empresas:

– Empresas de nueva creación que contemplan objetivos de alto rendimiento o de gran potencial.

– Empresas que un día fueron exitosas pero que perdieron competitividad y hay que darles la vuelta.

– Empresas que subsisten con bajos rendimientos y que los directivos quieren convertirlas en empresas de gran potencial o alto rendimiento.

1. Realismo frente a romanticismo. Antes de decidir la permanencia o el cambio de actividad, conviene sopesar con gran realismo todos los pros y contras de la nueva situación.

2. Conocimiento de uno mismo. Como parte del análisis de cualquier oportunidad de empresa, hay que incluir un análisis personal del empresario-directivo de la misma.

3. Es esencial disponer de una estrategia.Una pequeña empresa de alto rendimiento o gran potencial, requiere una estrategia distinta, una bien pensada fórmula específica de éxito, porque no hay fórmulas de validez general.

4. Es esencial tener objetivos y planes. Los objetivos deben ser explícitos y claros y los planes sumamente detallados.

5. Es preciso tener una preocupación casi obsesiva por el cash flow. Un cash flow fuerte y positivo puede salvar la empresa de muchas situaciones conflictivas.

6. Hay que tener buenos resultados. Aunque no de la importancia del cash flow, que puede ser de vida o muerte, los resultados permiten afrontar el crecimiento y mantener una solidez empresarial,

7. Es preciso invertir en los recursos humanos de la empresa. Gente capaz, competente y motivada es la mejor inversión de la empresa.

8. Hay que aceptar el cambio. Todas las actividades internas y externas están en constante cambio y es preciso aceptarlo y adaptarse a él.

 

Crear y construir una empresa exitosa requiere, sobre todo, una dirección eficaz del trabajo, de la organización, del personal, de la producción y de las operaciones. Como indica claramente la investigación, la dirección inexperta y deficiente es la causa principal del fracaso de las nuevas empresas; por lo tanto, conocer los principios de la dirección de empresas y su correcta aplicación es un buen comienzo para augurar el éxito de una nueva empresa.

1 Fuente: Ministerio de Industria. 2 Fuente: Patrick Liles.

Sectores económicos y actividad empresarial

1.4.1. Sectores económicos

 Se distinguen los siguientes sectores económicos:

a) Sector primario.

Obtención (captación, extracción, recolección) de forma directa, sin transformaciones, de recursos de la naturaleza para ser usados como materias primeras de la actividad empresarial.

Pesca y Caza / Agricultura / Ganadería y Agropecuaria / Silvicultura.

Minería y energética / Extracción de petróleo.

b) Sector secundario.

Procesado o transformación de las materias primeras procedentes del sector primario para obtener unos bienes capital o unos bienes de consumo. Los bienes capital, también llamados de producción, están formados por las herramientas, maquinaria y sistemas técnicos que se han obtenido al transformar la materia primera, con objeto de que sirvan posteriormente, en nuevos procesos de trabajo, para la producción de bienes de consumo. Los bienes de consumo son aquéllos que desaparecen con el uso y no sirven para obtener con ellos otros productos. Se consiguen por la transformación de las materias primeras a través del elemento humano y de los bienes capital, con objeto de producir artículos que satisfagan las necesidades humanas.

– Procesado de materias primeras / Construcción / Manufactura y Fabricación.

c) Sector terciario.

Procesado de recursos e información para obtener unos servicios indispensables para el buen funcionamiento de terceros y de toda la sociedad en general.

Consultoría y asesoría / Financieras / Comercialización / Transporte / Seguros Sanidad / Inmobiliarias / Ocio / Deportes / Restauración / Turismo / Comunicaciones / entre otras actividades.

1.4.2. Actividad empresarial

 De forma relacional a los sectores económicos se desarrolla la actividad de las distintas empresas según se describe a continuación.

a) Empresa de obtención de recursos:

Son empresas de obtención de recursos las que se dedican a captar, extraer o recoger recursos de la naturaleza. Entre dichas empresas se encuentran las de actividad minera, pesca, agricultura y ganadería. Los recursos que obtienen son, en la mayoría de ocasiones, subproductos para las empresas de procesado o manufactura, para las empresas comercializadoras, para las empresas distribuidoras o para las empresas de servicios.

b) Empresa de procesado o manufactura:

Son empresas de procesado o manufactura cuando a las materias primas se les somete a una serie de procesos de transformación en diversos puestos de trabajo, con objeto de obtener un producto vendible, que constituye el objeto de producción de dichas empresas.

c) Empresa comercializadora:

Son comercializadoras las empresas cuya actividad se limita a operaciones que no impliquen obtención de recursos ni transformación de materias primas, como son las de compraventa.

d) Empresa distribuidora:

Son empresas distribuidoras las que tienen por actividad distribuir materias primas y productos acabados respectivamente a las empresas de procesado o manufactura y a los mercados de consumo.

e) Empresa de servicios:

Son empresas de servicios las que tienen por actividad procesar recursos e información y prestar servicios a sus clientes en vez de productos.

Cabe destacar que existen empresas que llevan a cabo, en ocasiones, varias de las actividades consideradas, de forma integrada. Por ejemplo, existen empresas que además de procesar o manufacturar, también comercializan; otras que además de prestar servicios, también los comercializan; asimismo, en ocasiones, también, existen empresas que además de comercializar distribuyen. En última instancia, cualquiera de las demás combinaciones, pudiera darse, aunque con menor frecuencia.

1.4.3. Localización de la actividad empresarial

 La localización de la actividad de la empresa consiste en la elección del lugar para la implantación o instalación de la misma o parte de ella.

Tras la decisión de crear una empresa, una de las cuestiones fundamentales del éxito de dicha decisión es determinar la ubicación de la misma. El efecto de dicha localización se puede apreciar claramente en el coste de la producción teniendo en cuenta simplemente el precio del transporte, o el de la mano de obra, de aquí la incidencia de dicho factor en el valor del producto acabado y, por lo tanto, en el buen funcionamiento de la empresa.

Por otra parte, dada la gran inversión de capital que supone la instalación de una empresa en un lugar dado, resultaría muy costoso tener que rectificar la decisión, sobre todo una vez realizada la obra de construcción de la unidad de producción.

Estos dos factores hacen que la ubicación de una empresa cuya amortización es a largo plazo sea una cuestión a analizar detenidamente tanto en el espacio físico como en el tiempo.

El objetivo es el estudio de la localización óptima de la empresa en función del principio de economicidad, el cual se puede aplicar a cualquiera de las etapas fundamentales en que se halla dividida la actividad industrial:

– Aprovisionamiento de las materias primas.

– Transformación de los materiales.

– Distribución del producto obtenido.

Aparentemente la elección de la ubicación de la empresa puede parecer evidente; colocarla cerca de la fuente de materias primas, para reducir los costes de transporte. Pero de hecho hay muchas más variables que intervienen en el momento de tomar dicha decisión. Las variables que pueden influir en la localización de una empresa son:

Materias primas: precio coste y lugar de adquisición. Es lógica aquella ubicación que esté cercana a las fuentes de materia prima.

Energía: precio y facilidades de acceso. Ubicación de la industria cerca de puntos de abastecimiento energético.

Mano de obra: especialización, dinamismo. Ubicación de la empresa allí donde encontrar mano de obra especializada, y en los casos de mano de obra no especializada, donde la encuentre a menor coste.

Mercado de consumo: stock necesario, postventa. Una empresa situada cerca del mercado goza de indudables ventajas que son, principalmente, la atracción que se ejerce sobre el mismo y el hecho de hacer llegar la mercancía en el tiempo oportuno y con un menor coste.

Terreno: precio, polígono industrial, comunicaciones. La ubicación en zonas donde hay alta concentración de industrias o zonas destinadas a industria (polígonos industriales) es más rentable, ya que se conjugan a favor de varios factores de infraestructura viaria, energética y de comunicaciones.

Obtención de capital: primera inversión. Es vital una zona donde sea más fácil la atracción de dinero. Una zona de este tipo se encuentra alrededor de las capitales financieras, las cuales ejercen su influencia en las poblaciones colindantes y relativamente cercanas.

Ventajas fiscales. Hay determinadas áreas geográficas que, bajo las directrices de las diversas administraciones, y siguiendo criterios que obviamente consideran válidos e incluso necesarios, gozan de ventajas fiscales y laborales.

Ambiente social. Hay zonas determinadas de la geografía de un país que son más conflictivas laboralmente que otras.

Economías de aglomeración. Las economías de aglomeración son aquellas que se obtienen al establecerse en un área determinada muchas personas y actividades industriales. En esas zonas se tiene más facilidad para encontrar mano de obra ya especializada, se tiene la posibilidad de crear centros de investigación y desarrollo conjuntos, y los mercados son más maduros y las demandas mayores.

Suministro de componentes y existencia de servicios. Para cubrir las necesidades de servicios de la empresa: información, asesoría, publicidad, suministro de componentes, entre otros. La ubicación deberá estar cerca de las personas o entidades que puedan dar solución a los requerimientos, en la medida de la importancia relativa de los mismos.

Eliminación de residuos: infraestructura, vertederos industriales. Ubicación próxima a vertederos o a infraestructuras de tratamiento y eliminación de residuos industriales. En caso de expulsar subproductos desagradables -no contaminantes- se buscará una ubicación alejada de cualquier núcleo urbano. Si el subproducto a expulsar es contaminante, la empresa actuará de acuerdo al imperativo legal vigente.

Dinamismo empresarial. Al igual que 'el dinero genera dinero', una zona con alto dinamismo empresarial desarrolla una gran actividad económica, estas zonas, además gozan de ventajas de infraestructuras y servicios.

Grandes conurbaciones. En un principio las ciudades ofrecían grandes atractivos para el establecimiento de industrias. Sin embargo, factores como inexistencia de materia prima, salarios elevados, solares e inmuebles escasos y caros, causan la migración de las industrias. Actualmente, hay tendencia a una vuelta de las industrias hacia las grandes ciudades, pero sin localizarse en su interior, es decir, las industrias se establecen en el área de influencia de la ciudad. De este modo se goza de las ventajas que ofrece la ciudad y de las ventajas que la 'no ciudad' también ofrece.

Partes: 1, 2, 3
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