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Actividades psicofísicas para fortalecer el estado de salud de las embarazadas


  1. Resumen
  2. Introducción
  3. Caracterización de la comunidad
  4. Caracterización psicológica en las embarazadas

Resumen

La presente tesis ofrece una propuesta de actividades psicofísicas para el fortalecimiento del estado de salud de la mujer embarazada, en el contexto comunitario. Para la realización de dicha propuesta se parte de la fundamentación teórica, desde las dimensiones filosófica, sociológica, psicológica y pedagógica del campo de acción en su objeto de estudio en los que se enmarca la investigación. Para ello se emplearon métodos de nivel teórico como el histórico-lógico, el análisissíntesis, el inductivo – deductivo. También se consideró un estado de partida, en el que se diagnosticó el estado actual de la salud física y mental de la mujer embarazada. Se diseñaron, entonces, las actividades. Se realizó la intervención recreativa-pedagógica y se constató el estado final deseado, en cuanto al fortalecimiento del estado integral de dichas mujeres pertenecientes a la comunidad de Santa Rosa del Estado Bolívar en Venezuela. Para todo este proceso empírico se utilizaron métodos como la observación, la percepción y la entrevista.

Introducción

El embarazo es un periodo de grandes modificaciones metabólicas, hormonales e inmunológicas, considerablemente perceptibles por la mujer desde el inicio de la gestación. Desde el punto de vista psicológico, la gestación supone un importante paso en la vida de la mujer, y se deben emplear todos los recursos posibles para que la madre pueda enfrentarse a los cambios del embarazo y del nacimiento y elabore estrategias para llevar a cabo el cuidado del recién nacido, facilitando el vínculo que establecerá con el nuevo hijo. Diferentes investigaciones han analizado en qué medida los múltiples aspectos fisiológicos, psicológicos y sociales, influyen en cómo se desarrolla el embarazo, el parto, el puerperio, la maternidad y el vínculo afectivo, siendo aún escasos los estudios que profundizan en el área psicológica.

El embarazo es un proceso fisiológico que desarrolla la mujer y que tiene un tiempo de duración aproximada de 40 semanas.

Durante mucho tiempo, la mujer embarazada fue considerada como una enferma y tratada como tal; la gestación devenía pretexto más que suficiente, para que guardara reposo físico y sexual hasta tanto diera a luz. Sin embargo, a principios del siglo XX, los especialistas en Obstetricia; no tardaron en comprobar la certeza de la observación hecha por Aristóteles, quien expuso que las mujeres que mantenían una vida activa durante el embarazo, tenían partos más fáciles.

Muchas de las manifestaciones de las adaptaciones fisiológicas normales del embarazo se reconocen con facilidad permitiendo el diagnóstico de éste en el que la mujer se acomoda fisiológicamente al crecimiento, maduración y función del útero y el producto de la concepción.

Todos los profesionales deberían estar al tanto del impacto que los procesos biológicos de la reproducción tienen sobre el bienestar físico y mental de la embarazada. Tal como ocurre con las hembras de todas las especies de mamíferos, la mujer es el recurso que limita la reproducción humana, pero el desgaste fisiológico al que está involuntariamente obligada para asegurar la perpetuación de la raza humana es inmenso.

Dentro de las variables psicológicas que van a influir en la manera de responder de la mujer frente al embarazo, se encuentra la personalidad. La personalidad de la mujer va a determinar en gran medida la forma en que se va a afrontar esta nueva condición. Pocos trabajos se han centrado en la evaluación de la personalidad de las mujeres embarazadas y en las relaciones que pueden tener estas características con el desarrollo del embarazo, con el control del dolor durante el parto y con los resultados del mismo. Las características propias de la personalidad de las mujeres embarazadas, van a influir de manera distinta en la forma en que se va a afrontar la transición a la maternidad y los cambios que esta acarrea.

    Partimos de concebir la preparación psicofísica de la embarazada, como un proceso médico-pedagógico y por tanto, para recomendar actividad física durante el embarazo, tiene que establecerse un criterio de individualidad. Es necesario tener adecuada y completa valoración médica por el obstetra; además de la edad, ocupación laboral, antecedentes obstétricos, el tiempo de embarazo, estado nutricional, nivel de estado físico, condiciones psicosociales, así como las aptitudes, preferencias, disposición, facilidades y las motivaciones con que cuenta la embarazada, esenciales para la programación de dicho ejercicio.

    Al concebir la preparación psicofísica de la embarazada como un proceso médico-pedagógico, consideramos que se hace necesario aportar a la embarazada, los conocimientos elementales sobre lo que ocurre con su cuerpo durante la gestación, los cambios anatomofisiológicos normales y las molestias que ellos pueden ocasionar, las formas de evitar los trastornos más frecuentes o de atenuar sus efectos a través, entre otras acciones, de las actividades físicas. Orientar a las gestantes, para que sean capaces de identificar los signos de alarma durante la gestación y la actitud que deben asumir ante ellos. Aportarle los recursos psicosomáticos, especialmente respiración y relajación, con el objetivo de que sean capaces de controlar el estrés que todo embarazo implica. Familiarizarlas con el crecimiento y desarrollo del feto, la necesidad de estimularlo; así como a partir de cuándo y cómo hacerlo (estimulación prenatal). Instruirlas sobre los beneficios de la lactancia materna exclusiva para su propia recuperación y para el desarrollo y crecimiento del bebé. Adiestrarlas sobre el cuidado y manejo del niño. Las actividades psicofísicas para mujeres embarazadas constituyen una opción recreativa de carácter físico y mental que contribuye a preparar a las embarazadas para un parto feliz.

Al diseñar un programa de actividades psicofísicas para mujeres embarazadas hay que tener en cuenta las características fisiológicas del embarazo, las características individuales de la madre y su experiencia anterior en la actividad física, así como el tiempo de embarazo y hasta el lugar donde se realizaran los ejercicios, además de tener una referencia del médico tratante.

Durante el periodo de gestación el cuerpo de la mujer se transforma para poder tener un buen funcionamiento, estos cambios son notables ya que todos los sistemas del cuerpo varían en su funcionamiento (sistema respiratorio, sistema óseo, sistema muscular, sistema glandular, sistema cardiovascular, sistema digestivo) y el metabólico.

Sobre los ejercicios para mujeres embarazadas se han publicado algunos trabajos como: PREPARACIÓN PSICOFÍSICA DE LAS EMBARAZADAS (Ramiro Peña Romero), PROGRAMA DE EJERCICIOS FÍSICOS PARA EMBARAZADAS (Babi Center en Español 2012). Estos antecedentes históricos tienen como limitación específicamente la combinación de actividades físicas y psíquicas que ayuden a contribuir al mantenimiento del estado de salud de la mujer embarazada de la comunidad de Santa Rosa.

Ahora bien unida a los sustentos teóricos y los métodos de investigación aplicados se detectaron las siguientes insuficiencias.

  • No existe un programa que indique el tratamiento psicofísico para el fortalecimiento del estado de salud en la mujer embarazada en la comunidad.

  • Las mujeres embarazadas desconocen la importancia que tiene la práctica de los ejercicios físicos para el fortalecimiento de su salud psicofísica.

  • La no existencia de áreas deportivas y de recreación para la práctica de actividades físico recreativas con las mujeres

Partiendo de la anteriores insuficiencias el autor considera el hecho de que la mujer cuando se embaraza tiende a ser sedentaria y a veces hasta cree que su estado es una enfermedad por consiguiente incide de forma negativa ya que esta actitud va unida al aumento de peso, alteración de los valores, cansancio continuo, inflamación de las extremidades, estrés entre otras. Derivada de esta situación el autor plantea la solución del siguiente.

Problema científico: ¿Cómo fortalecer a través de las actividades psicofísicas la salud de las embarazadas en la comunidad de Santa Rosa de la Parroquia Unare en el Municipio Caroní?

Objetivo General: Elaborar actividades psicofísicas para el fortalecimiento de la salud en la mujer embarazada en la comunidad de Santa Rosa del Municipio Caroní.

Se propone como Objeto de Estudio: el proceso de la recreación física comunitaria.

Campo de Acción: fortalecimiento del estado de salud en la mujer embarazada de la comunidad de Santa Rosa.

Para el desarrollo de la investigación el autor se plantea las siguientes Preguntas Científicas:

  • 1. ¿Qué fundamentos teórico-metodológicos sustentan el proceso de la recreación física comunitaria?

  • 2. ¿Cuál es el estado actual que presenta el fortalecimiento de la salud en la mujer embarazada de la comunidad de Santa Rosa?

  • 3. ¿Cómo elaborar un sistema de actividades psicofísicas para fortalecimiento del estado de salud de las embarazadas en la comunidad de Santa Rosa?

  • 4. ¿Cómo evaluar la factibilidad del sistema de actividades psicofísicas en el fortalecimiento de la salud en las embarazadas en la comunidad de Santa Rosa?

En correspondencia con las cuales se realizarán las siguientes Tareas Científicas:

  • 1. Sistematización de los fundamentos teórico-metodológicos que sustentan el proceso de la recreación física comunitaria.

  • 2. Diagnosticar el estado actual que presenta el fortalecimiento de la salud en la mujer embarazada de en comunidad de Santa Rosa.

  • 3. Elaboración de un sistema de actividades psicofísicas para el fortalecimiento de salud en las embarazadas en la comunidad de Santa Rosa.

  • 4. Valoración de la factibilidad del sistema de actividades psicofísicas para el fortalecimiento de la salud en las embarazadas en la comunidad de Santa Rosa.

Se utilizaron los siguientes métodos científicos.

Nivel teórico.

Histórico- Lógico: Con él se establece el estudio y antecedentes de los fenómenos objeto de investigación en su devenir histórico.

Inducción- Deducción: Se emplea para establecer generalizaciones y llegar a deducir las características más generales. Teniendo en cuenta el objetivo propuesto y a partir de los aspectos más generales se elaboraran criterios que permitirán arribar a conclusiones.

Análisis y Síntesis: Se utiliza para analizar minuciosamente los contenidos de varias bibliografías especializadas sobre el tema y luego sintetizarlos para enriquecer el estudio del tema en cuestión.

En el nivel Empírico:

La Observación: Se utiliza para revelar el comportamiento sistemático y evolutivo de las mujeres embarazadas bajo la influencia de los ejercicios físicos.

Encuesta: Se aplica con el objetivo de conocer el comportamiento de los indicadores relacionados con el funcionamiento de la dinámica familiar de las embarazadas.

Entrevista: Se realizaran conversaciones con los médicos, promotores de la Actividad Física Comunitaria, Especialistas y familiares, para determinar la situación integral que gira en torno a la embarazada.

Población y muestra.

Para este trabajo de investigación se tomó como población 100 mujeres embarazadas y como muestra intencional el 30%, que corresponde al 0.63% de la población de la comunidad de Santa Rosa.

La comunidad de Santa Rosa está ubicada en la parroquia Unare del Municipio Caroní, limita por el Norte con la Avenida Atlántico por el Sur con el Rio Caroní por el Este con la Urbanización Lomas del Caroní y por el Oeste con el Sector Villa Bahía. La comunidad de santa Rosa tiene una población de aproximadamente 1900 habitantes.

Esta investigación tendrá beneficiarios internos: Embarazadas, familia, comunidad y externos: Ministerio de Sanidad y Asistencia Social y Consejo Comunal.

Los resultados que se esperan permitirán mejorar la calidad de vida de la mujer embarazada desde una perspectiva integral debido a que se verán afectadas de manera positiva el estilo de vida que incluye desde la alimentación, actividad física de la embarazada, y la parte afectiva.

.Aporte practico: Consiste en preparar física y psicológicamente a la embarazada a través de actividades psicofísica que permitan el fortalecimiento del estado de salud, para que formen parte activa y consciente de la necesidad de estimular a su hijo cuando todavía pertenece a su vientre; entrenarla durante el embarazo para que afronte el parto como un proceso fisiológico y sin complicaciones, constituyen un gran reto para la medicina y para todas las instituciones y entidades que procuren la promoción de salud, por lo tanto, separar la preparación física y psíquica del embarazo es un lamentable error.

Novedad científica: Aprovechar las capacidades de los profesionales que están participando de la investigación y la documentación correspondiente para la preparación psicofísica de las mujeres embarazadas de la comunidad de Santa Rosa

Caracterización de la comunidad

La comunidad de Santa Rosa está ubicada en la parroquia Unare del Municipio Caroní, limita por el Norte con la Avenida Atlántico por el Sur con el Rio Caroní por el Este con la Urbanización Lomas del Caroní y por el Oeste con el Sector Villa Bahía. La comunidad de Santa Rosa tiene una población de aproximadamente 1900 habitantes.

Esta investigación tendrá beneficiarios internos: Embarazadas, familia, comunidad y externos: Ministerio de Sanidad y Asistencia Social y Consejo Comunal.

En el proceso de gravidez tienen lugar modificaciones fisiológicas que propician el desarrollo normal del feto y prepara el organismo de la mujer para el parto. Estas modificaciones son reguladas por el sistema nervioso central. Desde los primeros meses del embarazo aumenta la necesidad de oxígeno en el organismo de la mujer y el feto. A partir de las 20 semanas de gestación se produce un incremento del gasto cardiaco y del consumo de oxigeno que comienza a reducirse aproximadamente a las 38 semanas de embarazo.

El embarazo tiende a incrementarse el gasto de energía en las actividades diarias y comunes. Los altos gastos energéticos de las embarazadas son debidos a la combinación de cumplir las necesidades energéticas por el concepto de la tasa metabólica basal incrementada en el gasto del movimiento de una mayor masa del cuerpo incrementada, de ahí que los organismos maternos y fetal deben recibir suficiente cantidad de proteínasgrasas, hidratos de carbono, sales minerales y vitaminas.

Caracterización psicológica en las embarazadas

 El embarazo se caracteriza por cambios hormonales radicales en los que tanto los niveles de estrógenos como los de progesterona son elevados. Al principio del embarazo, el responsable de esta producción es el cuerpo lúteo, pero, más tarde, la placenta constituye la fuente principal de ambas hormonas.

Parece que el estado emocional está relacionado con la etapa en que se halle el embarazo. Durante los tres primeros meses, pueden aparecer depresión y fatiga. En el segundo trimestre las emociones de la mujer suelen ser más positivas (del cuarto al sexto mes, ambos inclusive). El último trimestre puede resultar más estresante y ansiógeno, a medida que la mujer empieza a plantearse cómo transcurrirá el parto, si el bebé estará sano y otras cuestiones semejantes. La incidencia de la depresión aumenta durante el tercer trimestre. Respecto al estado emocional en el embarazo, el peso de las pruebas indica que no suele ser un período de especial bienestar. No obstante, en algunas mujeres, sí aparecen esas sensaciones hacia la mitad del embarazo y puede darse una disminución de las reacciones psicóticas durante el mismo.

Sin embargo, en las seis últimas semanas, sobre todo, aumentan los trastornos emocionales más benignos. El embarazo, en vez de ser una época de calma y felicidad, es un período difícil y turbulento. Los cambios emocionales habidos durante el embarazo y después de dar a luz están muy relacionados con el apoyo emocional y la ayuda que la mujer reciba de su marido. Por regla general, las mujeres suelen experimentar cambios de humor y mostrar ansiedad. En concreto, durante el primer trimestre, esta ansiedad se centraba en la posibilidad del aborto.

Generalmente en ese período, en un estudio sólo las 4 mujeres cuyo embarazo había sido imprevisto manifestaron emociones negativas. Las de las demás mujeres eran positivas o ambivalentes. El segundo trimestre representa la época más positiva, desde el punto de vista psicológico: en él se alcanza la máxima felicidad y el mayor orgullo por el embarazo. Los temores de abortar van disminuyendo a medida que las mujeres sientan que el feto se mueva, y se produce una intensa sensación de alivio al saber que está vivo. Durante el tercer trimestre, aumenta la ansiedad ante el parto y sobre las posibles deformaciones del bebé.

En resumen, no todas las mujeres embarazadas son maravillosamente felices. El estado psicológico de una mujer depende de diversos factores: que el bebé sea querido, la fase del embarazo, la comodidad o incomodidad física y distintos factores sociales, como el apoyo del marido o de sus amigos. Pasado un par de días después del alumbramiento, muchas mujeres experimentan depresiones y períodos de llanto. Estas oscilaciones del estado de ánimo pueden variar entre leves y graves. En el tipo más leve (la melancolía tras el nacimiento), las mujeres sienten tristeza y tienen períodos de llanto, pero este estado de ánimo dura entre 24 y 48 horas. Entre el 50 y el 80% de las mujeres experimenta algún tipo de melancolía leve posparto. El 20%, más o menos, padece una depresión posparto moderada, que suele durar entre seis y ocho semanas. La depresión posparto se caracteriza por el ánimo deprimido, insomnio, llantinas, sentimientos de ineptitud e incapacidad para superar la situación, irritabilidad y fatiga. Por último, el trastorno más grave es la psicosis depresiva posparto; afortunadamente, es rara y afecta sólo al 0,01% de las mujeres que han dado a luz

Hay que señalar las influencias psicológicas y sociales sobre los síntomas de los períodos de embarazo. Nuestra cultura está llena de estereotipos sobre las características psicológicas de las mujeres embarazadas: el resplandor de la alegría radiante, el deseo de salazones y de helados. La conducta adecuada en el embarazo se aprende mediante el proceso de socialización respecto de los papeles propios del género, y las conductas correspondientes se ponen en práctica en su momento. Los estados de ánimo positivos se relacionan con un fuerte deseo del hijo. Los negativos con la ausencia de este deseo, el temor a los riesgos del parto o a la responsabilidad que supone el nacimiento.

Aunque tal vez los cambios físicos son los más notorios, la mujer experimenta distintos sentimientos a lo largo de la espera del nacimiento de su hijo.

Así como el bebé, después de la concepción, necesita destruir tejido materno para anidarse y la madre acepta físicamente al nuevo ser, también es necesaria la aceptación emocional y psíquica del embarazo por parte de la futura mamá. La mujer vive profundos cambios en el embarazo. Los físicos son los más notorios, pero no son los únicos importantes. Adaptarse psicológicamente al embarazo lleva su tiempo y cada trimestre tiene sus características en este aspecto."Una madre tiene que nacer psicológicamente, tal como su bebé nace en forma física", dice la psicóloga Inés Dibártolo.

Pero, ¿cómo surge esta nueva identidad de la mujer? "Surge gradualmente a través del trabajo acumulativo de los meses que preceden y siguen al nacimiento físico del bebé", aclara la profesional.

Entonces, convertirse en madre es un proceso mediante el cual una mujer adopta una actitud mental diferente a la que había tenido hasta ese momento: se reorganizan sus intereses y prioridades y descubre nuevas inquietudes. En el embarazo se provocan muchos cambios emocionales en la mujer y al mismo tiempo la psicología particular de cada mujer afecta su embarazo. Muchas mujeres perciben el embarazo en forma inconsciente. Cierto desasosiego, unidos a síntomas físicos "raros" -cansancio, sueño, malestar en las mamas- le pueden advertir que algo está pasando. Después, la falta menstrual y el test que mide la hormona gonadotrofina coriónica humana (GCH) se lo confirman.

En el primer trimestre, el sueño es una manifestación física de que la futura mamá está intentando reacomodarse a su nueva realidad psíquica: se retrae sobre sí misma y busca descansar a solas, lo que le permite ir elaborando paulatinamente los cambios que sobrevendrán. El hijo en esta etapa es una mezcla entre realidad y fantasía, porque, lo cierto es que su presencia física todavía no se advierte en el volumen de la panza o en sus movimientos. "El sueño que se siente es como meterse hacia adentro e identificarse con el bebé que se está engendrando, y si bien los otros síntomas tienen su base fisiológica, también manifiestan el conflicto y la ambivalencia que siente toda embarazada: quiero este embarazo, pero también me asusta el cambio en mi vida", explica Brígida Morgenroth, especialista en grupos de preparación para el parto.

La hipersensibilidad de la mujer, el humor cambiante y la irritabilidad -el nivel de hormonas también lo desencadena- es una de las características del embarazo y se expresa también en los sentimientos ambivalentes que experimenta: por un lado, se siente muy vulnerable y, por el otro, muy fuerte. "El embarazo es un cambio fenomenal y hay poca cosa firme de qué sostenerse", dice la psicóloga Aixa Ezcurra, que coordina grupos de embarazadas.

"En el primer trimestre el temor fundamental es el de perder el bebé", dice Dibártolo, "y es posible que la futura mamá revise su deseo de tener un hijo y puede pasar un período de dudas y replanteos: "¿Podré cuidarlo? ¿Seré capaz de darle un lugar en mi vida?" ".El miedo a las malformaciones es una de las mayores preocupaciones de la mamá en el segundo trimestre. La presencia del bebé ya es una realidad y se manifiesta cuando la embarazada comienza a sentir sus movimientos.

"En el segundo trimestre, la embarazada se siente activa y con muchas ganas de encarar sus tareas; el embarazo es una realidad", dice Morgenroth. "En el tercer trimestre en cambio, hay que dar mucho hacia adentro, alimentar y oxigenar a ese bebé que presiona contra otros órganos y las costillas, sintiéndose las molestias del final del embarazo", agrega. La futura mamá tiene sentimientos ambivalentes: quiere que su hijo nazca pronto pero, a la vez, teme el parto o, ante la inminencia de grandes cambios en su vida, manifiesta deseos de que todo siga igual.

"El parto constituye una prueba no sólo física: tal vez la madre no se sienta segura de poder seguir dando al bebé todo lo que le ha dado hasta ese momento dentro de su panza, ni de poder reorganizar su vida, incluyéndolo", explica Dibártolo.

 

 

Autor:

Williams Jose Aguilera Zapata