Conversaciones con el señor Agustín Peinate en Carayaca Registro Cerrado del Conversatorio Popular (2)
Registro Cerrado
Actividad: Conversatorio Popular.
Lugar: Casa del señor Agustín Péinate, Calle "Tamanaco" Parroquia Carayaca, Municipio Vargas, del Edo. Vargas.
Fecha: Sábado, 06/05/2.006.
Hora: 10:00 a.m. a 02:00 p.m.
Cultor Popular | Activadores (as) |
Agustín Peinate | María Alejandra Díaz Rángel |
Tirsa León | |
Facilitadora | León Manuel Morales |
Ada Bello Iriarte | Manuel Felipe Carapaica González |
Alida Marina Carapaica González | |
Miriam Carussi | |
Luís Pérez Evora | |
Francis Romero de Camacho | |
Yaileth Andreina Morales Kienzler | |
Sora Ferrer Hernández | |
Teresina Grillo Aguilar | |
Magaly Bello |
Construcción de la bomba de gasolina en Carayaca, sitio de La Cruz Verde
Los señores Domingo Meza Vegas y Darío Trujillo
Definición de la actividad:
Conversatorio con el señor Agustín Peinate, cultor popular nacido en el pueblo de Tarmas en el año 1.916, con muchos años viviendo en el pueblo de Carayaca en donde ha combinado su vida de arriero, agricultor, panadero y político. Además, de ser un gran conocedor de los aspectos políticos, económicos, sociales y culturales de nuestra parroquia.
La coordinación de la actividad estuvo a cargo de la activadora María Alejandra Díaz Rángel.
El registro cerrado fue llevado por el activador León Manuel Morales.
El registro abierto fue realizado por la activadora Francis Romero de Camacho.
La actividad se llevó con puntualidad y se respetó la metodología discutida en reunión previa al conversatorio.
Conversatorio Popular con el cultor Agustín Peinate
Mis antepasados eran de apellido Peinate y vinieron desde la Isla de Curazao arrastrados por los mismos hechos que originaron la Guerra Federal en Venezuela. Mis abuelos se vinieron de esas tierras a partir del año 1.850, quienes después de tantas escaramuzas, combates y luchas, conjuntamente con varias familias corianas como los Chirinos, Salas y Calazán que al fin llegaron al pueblo de Carayaca.
El origen de mi familia lo conocí en 1.948 y eso fue cuando saqué la patente que dio inicio a este negocio que hoy tengo aquí, cuando la autoridad del pueblo era el Teniente Loreto Loreto; quién cuando oyó que mi apellido era Peinate, se sorprendió diciéndome: ¿Es usted venezolano?
Y yo le respondí, que si.
Y más luego le pregunté: ¿Por qué usted me hace esa pregunta, Teniente Loreto?
Y él me dijo: "Por el apellido".
El Teniente Loreto Loreto me dijo que mi apellido no era venezolano, que era de Curazao; y que como una aventura, desde la Isla de Curazao se pasa a través del agua en una concha de coco al Edo. Falcón. Mi abuelo en sus andanzas se pasó a uno de los grupos en conflictos, y de esa manera fue a parar a El Güire, en donde se residenció con mi abuela Hemenegilda Lozano, eso sería entre los años 1.860 y 1.870. Mis abuelos tuvieron 12 hijos y mi mamá era Leoncia Peinate. Ella nació en el año 1.883 y era una de las menores.
Mapa territorial de Venezuela
Hasta el año 1.941
Los generales de antes eran de moño. Mis tíos fueron: Ildefonso Peinate (quién era el mayor de todos sus hermanos y hermanas), Lope Peinate, Agustín Peinate, Melecio Peinate. Además, también habían 6 hembras: Yo conocí a una de ellas llamada Luisa Peinate.
Yo nací en el año 1.916, en un campito cercano al pueblo de Tarmas llamado Bachaquero, cerca de la Hacienda "Anare"; y con muy poca edad nos mudamos para acá en Carayaca. Yo tenía para esa entonces, 8 años de edad. Yo fui bautizado por la madre de Nolberta, Magdalena, Visitación y Pedro José Hidalgo Arias; ya que ellos eran hijos e hijas del Comisario Pedro Hidalgo Lozano en Tarmas.
Pueblo de Tarmas, año 1.928
Tierra natal del señor Agustín Peinate
Esa era una época muy dura, donde uno se tenía que mover a buscar líos de leña, para nosotros no era nada natural tener que ir a Corralito en épocas de recolección de café; también había que sacar algunas tareas y jalar escardilla; esas fueron las vivencias de mi infancia.
A los 12 años me mandan a un campito de Carayaca; específicamente, a la familia del General Juan Rodríguez; ya que mi mamá vivía en Caripoto, cerca de Tarmas.
El General Juan Rodríguez le enviaba las totumas y un fuerte (cinco bolívares). Luego nos radicamos aquí en este ranchito. Mi madre fue una mujer muy honesta. Yo fui vecino, panadero, jornalero y ganadero aquí con mi pariente Luís Pérez Padilla, con una punta de ganado durante 30 meses, donde se ventilaban de manera fraccionada los potreros; ese tiempo se llamó la época de la Electricidad de Caracas, donde habían sitios como La Virgencita y La Hiérbera, que eran propiedad de la misma empresa eléctrica.
Antigua casa de habitación de la familia Pedrón en Carayaca,
Hoy derrumbada, estaba cerca de El Almendrón
(Foto de los años treinta del Siglo XX)
El dique de Petáquire fue construido por esa empresa eléctrica entre los años 1.920 y 1.925. Siempre lo iban reforzando hasta que construyeron la planta de El Peñón; allí trabajaron muchos obreros echando pico y pala.
La planta eléctrica de Marapa se construyó en el año 1.933. Esa tecnología era una gran ayuda y después se construyó la planta de Mamo. Allí trabajaron Justo León (padre de la señora Epifanía Mayora en el pueblo de Tarmas), Mercedes León (familia de Nicanor León Mayora en Tarmas), los Mayora.
Mis tíos Lope e Ildefonso Peinate formaron familia, todos ellos murieron. Mi madrina era Lucha Quintero quién está vinculada con la familia Peinate Cedeño. Yo recuerdo cuando mi tía Petronila murió. Ella tenía 116 años de edad para esa entonces.
Dique de Petáquire, año 2.005
Entre mis familiares estaban Paula Bello de Peinate quién nació el 12 de octubre de 1.902 y falleció el 21 de mayo de 1.981. Su hija Miguelina Peinate nació el 29 de septiembre de 1.926 y murió el 28 de febrero de 1.964. Ellas están sepultadas en el cementerio de Maiquetía y muy cerca donde está sepultado mi amigo Francisco José Luy Acosta quien murió el 14 de marzo de 1.960, hermano de los difuntos Ricardito, Encarnación, Lola y Sara Luy Acosta; todos sobrinos de la reverenda monja Dolores Luy Urbano, quién fuera colaboradora de la Madre Emilia de San José y del padre Santiago Machado en Maiquetía.
Resulta, que mi tío Lope Peinate en su primera mujer Petronila Cedeño tuvo 14 hijos, y más luego se casó con Paula Bello de Péinate, con quien tuvo varios hijos. Entre ellos a Guillermina y a Melecio. Francisco José Luy Acosta fue el capatáz de las cuadrillas que trabajaron en la construcción de la carretera de Carayaca a Catia la Mar hace muchísimos años atrás. Él era hermano de las difuntas Lola, Sara, Encarnación y de Ricardito Luy Acosta. Sus padres fueron Ricardo Luy y Dorotea Acosta.
Casa del General Juan Rodríguez
Lola Luy Acosta era la esposa del difunto Magdaleno Rodríguez quién murió lanzando petardos en el Cerro la "O", en las cercanías del Puerto de Carayaca. La casa del General Juan Rodríguez quedaba en donde hoy está la casa que fue sede de los partidos COPEI y del MVR en Carayaca. Allí funcionó la jefatura civil y en uno de sus cuartos vivió el General Juan Rodríguez; la misma tenía un patio que daba con la Hacienda "El Añil".
A los 17 años de edad, yo era el matarife o sacrificador de reses, donde tenía a mí cargo 6 hombres. Yo recuerdo que cuando se beneficiaban a las reses se mataban de acuerdo a las épocas. Específicamente, si había algunas fiestas en el pueblo, en semana santa, en pascuas o cuando pedían aumento de producción.
Los precios de la carne en esa época eran entre los 2 o 4 bolívares por kilo; de acuerdo a la carne seleccionada. Por ejemplo, la pulpa negra depende de la capacidad de la res; la cual una pieza de 4 kilos para los hacendados; lo que eran las viseras, cabeza, extremidades y miembros eran desechadas en los mataderos; y en mucho de los casos se les regalaba a la gente o se vendían por 2 bolívares.
General en Jefe Juan Vicente Gómez Chacón
En la mayoría de las veces se tenía que salar la carne, porque en muchas ocasiones no se llegaba ni a vender y eso era pérdida para el dueño; así fue como se levantó la Venezuela rural de esa época.
Ya que desde el año 1.910, así contaba mamá, eran las vicisitudes de la vida; hasta que vino el año 1.914. Así fue cuando el General Juan Vicente Gómez comenzó a modernizar el país; trayendo cosas desde Francia y así fue como de comenzó a construir la Academia Militar en el cerro de La Planicie en Caracas, cuyo constructor fue el arquitecto Chataing.
La Guerra Federal fue un parásito que destruyó el país., Venezuela tenía 3.300.000 habitantes en el año 1.930; en donde las enfermedades endémicas destruían a la población, tales como: la fiebre y los parásitos.
El agua tenía parásitos en los tanques, filtros y ollas; así era como se almacenaba el agua en las casas en esos tiempos; quienes no tenían los conocimientos la conservaban a base de azufre; de esta manera se evitaba que los parásitos siguieran haciendo daño en las personas; usándose la piedra de pilar o las tinajas para conservar el agua.
Combate en Maiquetía, año 1.859
La mayoría de las personas eran isleñas de Canarias. Yo recuerdo que mi abuelo era isleño legítimo. Ellos temían esas cosas y en las vegas tenían una piedra de destilar agua.
En esos tiempos las personas eran más abiertas y los que tenían menos capacidad huían de la civilización de la ciudad; en verdad uno vivía aislado. Yo conocí personas en Caripote metidos en faldas y no salían nunca del pueblo, tenían miedo, porque en lo social, los comisarios cuando veían personas extrañas en el pueblo se preguntaban: ¿Esa persona es extraña por aquí?
¿Qué está haciendo aquí?
La Batalla de la San Pablera en Caracas, 2 de agosto de 1.859 (Guerra Federal), en donde combatieron los oficiales tarmeños Mauricio Mayora y Elías León
Una vez que lo había identificado, entonces actuaba en contra de esa persona o terminaban aceptándolo en el pueblo. Sin embargo, excepto Pío Rengifo quién le dio lucidez a este pueblo. Él era de El Guapo en el Edo. Miranda.
Señora Emma Díaz
Hija del poeta Pío Rengifo
Pío Rengifo era el padre de Emma Díaz y abuelo del maestro Raúl Díaz. Él se nacionalizó tarmero y él era muy fácil de mente; yo no lo conocí. Él murió en 1.914 o 1.915.
Yo tuve en mis manos un cuaderno que era de Pío Rengifo. Él tenía una gran capacidad imaginativa para escribir, dejando un legado de conocimientos. Él tenía otro hermano llamado Manuel Rengifo quién estaba casado con una señora de apellido Huizi en Tarmas.
Poeta Pío Rengifo y su casa natal
(* 1.864 Tarmas – + 1.917 Paracotos)
Pío Rengifo en un viaje que hizo y en un homenaje que le hicieron en su estado natal; él iba en representación de estas tierras a un banquete que se hacía en su honor, donde iba a dar a conocer sus saberes; cayéndose murió en el camino de regreso al pueblo de Tarmas. Hay quienes dicen que le hizo daño una comida. Yo creo que fue a causa de una intoxicación.
La actividad económica en esa época era dramática; ya que se trabajaba con bestias para Caracas, Los Teques y La Guaira; cuando esto era parte del Distrito Aguado; también habían relaciones con los valles del Tuy.
Los productos agrícolas y el carbón vegetal eran el punto fundamental durante el resto del año; ya que no había traslado de la producción de carbón de los Padilla y los González para La Guaira; el cual era exportado para las Antillas y Alemania.
La tercera hacienda de la República estaba en Carayaca y era propiedad de Alfredo Jahn Hartmann; ya que la primera era la del General Juan Vicente Gómez y la segunda estaba ubicada en Valencia, la cual era propiedad del General Pimentel. Yo fui amigo de Gustavo Jahn.
En esos tiempos existían las balandras, las cuales eran barcos grandes de tres palos que desde estas costas llevaban el carbón y los productos a La Guaira; y desde las costas de Aragua lo llevaban para Turiamo, que era propiedad del General Juan Vicente Gómez. Desde allí lo llevaban para las islas de Trinidad, Haití y República Dominicana; ya que el comercio se movía por Guiria.
Mulas cargadas en los viejos caminos a La Guaira
El carbón se procesaba de Uricao hasta Arrecifes y se sacaba del cují, el cual era una madera fuerte; también del guayacán y de otras vegetaciones bajas que eran muy fuertes. El precio del café en el año 1.912, llegó el quintal a cotizarse en pergamino.
El quintal era 57,5 kilos y costaba 200 bolívares. En ese tiempo se conseguían muchos productos y los productores de café pensaron en producir más. Pero, esa gente empezó a darles créditos a los pequeños campesinos y productores; y estos comenzaron a sembrar café y les decían a la gente: "Yo te pago el patrón y en 2 años te pago a locha la mata".
De esa forma, trataban ellos de incrementar la producción del café en estas tierras de Carayaca. Pero, el año 1.914, fue un total fracaso para los productores; ya que se presentó la primera guerra mundial.
Francisco Santiago Sánchez Aranguren, Zago Benítez León, hermanos Pedrón (Dionisio, Juancito y Ruperto) y Javier Iriarte en una balandra
De Uricao a Chichiriviche, año 1.946
Esa conflagración bélica descontroló todo en América; originando una gran crisis, que hizo que las haciendas se perdieran con el Banco Agrícola y Pecuario (BAP); debido a que grandes hacendados como: los Padilla, Cruzco (Nicolás y Antonio Cruzco, eran hermanos); por allá, los López, en El Lirial; los Oropeza (Ramón Oropeza estaba casado con una tarmeña), tenían haciendas que producían entre los 500 y 1.000 quintales; y los Soriano en La California.
Ingeniero Alfredo Jahn Hartmann
El café de Carayaca era reconocido por el sitió; ya que tenía mejor aroma. Nuestro café era mejor cotizado en Alemania; así incesantemente se fue desarrollando la parroquia. La Hacienda "El Limón" fue reconocida por su producción cafetalera; ya que el Dr. Alfredo Jahn Hartman era muy reconocido como productor de café en esos tiempos.
Al igual que el Dr. Vollmer en La Peñita y los Padilla juntaron la producción de café que sacaban de sus haciendas de Curiana y Jesús, cerca del pueblo de Tarmas. Ellos producían café, pero también compraban la producción de los demás productores que había en toda Carayaca.
Yo recuerdo que Indalecio Padilla y su padre Eduardo Padilla, si se quiere, conjuntamente con Florencio Hernández (el padre de Hermenegildo Hernández) en Boquerón; José del Carmen Suárez y Tomás Hügle en Petáquire fueron los pioneros en lo relacionado con la producción, compra y venta del café en esos tiempos.
Yo conocí a mucha de esa gente, como a los difuntos José de la Cruz Hügle; ya que ellos eran los dueños de Petáquire y eran cinco hermanos. Entre ellos estaba Emiliano Hügle; debo recordar que Bernardino Hügle era primo hermano de ellos. A pesar de que en Petáquire había un señor llamado Bernardino Arrieta quién era matador de ganado. José de la Cruz Hügle era hijo de Maximiliano Hügle y de Ángela Torres, y era hermano de Julián Sandoval por parte de madre. Debido a que Maximiliano Hügle era hermano de Justina Hügle.
José de la Cruz Hügle (izq. A derecha, atrás), José Ramos, Teodoro Ramos, Francisco Sánchez Jiménez "Pancho"; Jesús "Chucho" Padilla Rodríguez y Julián Sandoval (adelante); Iglesia San José de Carayaca, año 1.940.
El Güire fue de los Naranjo y los Quintero; esas eran pequeñas haciendas de 200 hectáreas; ya que entre todos los grupos sumaban alrededor de 1.000 hectáreas. Los Cedros era de José Boccardo, eso era un consorcio.
Carayaca siempre ha sido un sitio de gran actividad agrícola; en la Hacienda "Tarma Abajo" se producía gran cantidad de hortalizas, tales como: cebolla, tomate y papa.
En la Hacienda "Curiana" se producía mucha hortaliza y quién más producía allí era el viejo Luís Pérez Conde, el padre de Luís Pérez Padilla; al extremo, que después del café hacían viajes y más viajes.
El isleño de Canarias, Luís Pérez Conde
Padre del señor Luís Pérez Padilla
Mientras, que aquí la producción era nada, se aserraban puertas de madera, y las bestias salían cargadas para Caracas. En esa época la situación política era más critica y la viví a la edad de 8 años; era el fermento de las guerrillas, llamadas volantes; que no era otra cosa que grupos armados con escopetas, machetes y muy maltrechos, quienes a su paso vivían preguntándole a la gente que si no había pasado el ejército por esos lugares.
Mi madre en muchas ocasiones, les decía: "Por aquí no ha pasado nadie".
Ella vivía en un ranchito de cogollo y recuerdo que se apareció uno de esos grupos y trataron de obligarla a que dijera algo; al fin le robaron sus gallinitas. Pasando un día, al otro día pasó otro grupo y entre ellos iba una persona conocida; ese era Pedro Bruno, el padre de Jesús María.
Él era guerrillero y revolucionario de la época. Ellos iban por los caminos de Aragua a Los Teques; los cuales eran muy precarios y críticos y se caminaba entre canjilones hasta los caminos de la fila de Jesús en Tarmas, pasando por Curiana, Píritu. Luego se tomaba la subida de El Cimarrón hasta llegar al pueblo de Tarmas; después se seguía por el camino de Tirima hasta llegar a la Cruz de Tarmas en El Arenal; hoy en día no se conserva nada de eso.
En Tarmas, por cualquier lado hay una trocha. La Hacienda "Anare" era de Quirico Tortoza y para el año 1.934, pasó a manos de Rafael Silverio quién descendía directamente del viejo General en Jefe Carlos Silverio, héroe de la Batalla de Santa Inés el 10 de diciembre de 1.859, combatiendo bajo las inmediatas órdenes del Generalísimo Ezequiel Zamora Correa en la Guerra Federal, de quién puedo aportar los siguientes datos sobre su vida militar y política, que en algunas ocasiones oí de los viejos ancianos en los pueblos de Tarmas, Carayaca y en La Victoria.
Sobre los orígenes de la familia Silverio en la Parroquia Carayaca puedo decir que ciertamente vienen de la simiente del coriano General en Jefe Carlos Silverio; ya que originariamente el apellido como que era Silvereaux, debido a que ellos provenían de Francia y se habían establecido en la isla de Haití en el Mar Caribe.
La gran mayoría de las familias francesas en Venezuela castellanizaron sus apellidos en nuestro país, como los Rivecheau o Rivodó en Carayaca y de igual manera sucedió con Silvereaux o Silverio; en La Guaira con los Moureau o Muró, en Caracas con los Blandain o Blandín, y en el oriente venezolano con los Toussaint o Tussentt.
Según tengo entendido y si más no recuerdo, que el General Carlos Silverio nació en Coro el año 1.844 y murió a la edad de 70 años en la Caracas de 1.914. Él era parte de esa gran cantidad de oficiales corianos y larenses que vinieron por estas tierras en los tiempos de esa nefasta guerra conocida como la Guerra Federal; con él vinieron los Yépez, Ramírez, Chirinos, Colina, Péinate.
Él parece que fue reclutado muy jovencito en Coro por las fuerzas del General Ezequiel Zamora en 1.859. No hay dudas, los comentarios que hacían la gente de antes, era que el General Silverio fue siempre un hombre valiente, de cobarde nada tenía. Parece ser que él participó en muchas acciones militares después de mediados del Siglo XIX y a comienzo del Siglo XX. Él solo es conocido dentro del seno de su familia en Carayaca, pero nadie más sabe sobre él; esa es la mera verdad.
Yo debo decir, que sé algo sobre él, ya que nací en fechas muy cercanas a las vividas por el General Silverio. Una vez muerto el General Ezequiel Zamora en San Carlos en 1.860, él combatío bajo el mando del General Juan Crisóstomo Falcón en la batalla de Coplé el 17 de febrero de 1.860. Allí le dieron una pela dura a los federales.
El General Carlos Silverio en defensa del gobierno del Mariscal de Campo Juan Crisóstomo Falcón tuvo que combatir a las fuerzas del General José Ruperto Monagas en la Revolución de los Azules en 1.868. De igual manera, participó en la Revolución Liberal de Abril de 1.870, al lado de su máximo líder el General en Jefe Antonio Guzmán Blanco.
General en Jefe Ramón Guerra
Más luego estuvo en la defensa de la plaza de Tinaquillo en mayo de 1.872, combatiendo al francmasón, maestro de escuela y General en Jefe Matías Salazar "El Carbonero". Él realizó la campaña de Coro en contra del alzamiento de su paisano el General en Jefe León Colina en 1.874.
Propiamente dicho, él aparece en estas tierras de Carayaca es a partir del año 1.879, cuando le tocó combatir a favor del gobierno del General en Jefe Francisco Linares Alcántara, quién era el papá del negro Tiburcio Mayora en Chichiriviche de la Costa.
En esa ocasión, él estaba unido a las fuerzas del General Sebastián Casañas, quienes conjuntamente pelearon contra las fuerzas de la Revolución Legalista acaudillada por el General en Jefe Joaquín Crespo en 1.892. Después le tocó atacar al General en Jefe Ramón Guerra Bonilla como segundo jefe del ejército al mando del General Antonio Fernández en 1.898.
Caramba vale, el General Ramón Guerra Bonilla era muy conocido en estas tierras, porque él era nativo de San Casimiro en tierras de los valles de Aragua; y aquí sabíamos que él perteneció a la guardia personal del General José Antonio Páez, y siempre fue un hombre perteneciente al Partido Conservador, ya que tenía fama de hombre valiente y batallador. Yo creo que ese hombre participó en todas esas batallas y combates.
Luego en ese mismo año, el General Carlos Silverio fue enviado como jefe militar a Ciudad Bolívar por órdenes expresas del General en Jefe Ignacio Andrade Troconis, para esa entonces Presidente de la República de Venezuela; quién meses después lo envía a los Andes tachirense a combatir al alzado General en Jefe Cipriano Castro Ruiz, líder de la Revolución Liberal Restauradora, con quién se enfrenta en la Batalla del Paramo de Zumbador el 11 de junio de 1.899, en donde cayó como prisionero de las fuerzas revolucionarias.
Al llegar los restauradores a Caracas y al tomar el control del país, el General Carlos Silverio fue puesto en libertad; exilándose a finales de ese año en la Isla de Curazao. Poco tiempo después, regresó a nuestra patria; en donde se puso a las órdenes del gobierno del General Cipriano Castro Ruíz.
Claro está, en esos tiempos el General en Jefe José Manuel Hernández conocido como "El Mocho" Hernández, andaba alzado en armas en contra del nuevo gobierno liberal restaurador, tocándole al General Silverio tener que combatirlo en los combates de Tocuyito y el Alto de Uslar, en el mes de diciembre de 1.899.
En verdad, el General Carlos Silverio conocía muy bien a todos los jefes y oficiales que hacían armas en contra del General Cipriano Castro en todos los rincones del país; encomendándosele el mando de dos batallones de soldados tachirenses para combatir a las fuerzas invasores del General en Jefe Carlos Rangel Garbiras en 1.901, quién era el abuelo del Dr. José Vicente Rangel Vale, mi amigo personal; ya que ambos militamos en el partido Unión Republicana Democrática (URD) bajo la sabia conducción del Dr. Jóvito Villalba y del periodista Fabricio Ojeda.
A él le tocó dirigir la Campaña en Sinamaica y en la Guajira colombiana en ese año, en donde el jefe de suministro era el Oficial Carmelo Castro Gómez, quién era hermano por parte de padre del General Cipriano Castro y quién describió la derrota que en esa zona colombiana tuvieron, y que años después registró muy minuciosamente, falleciendo en la ciudad de Caracas en 1.957.
El General en Jefe Carlos Silverio, siendo comandante de un batallón del ejército restaurador del General en Jefe Cipriano Castro Ruiz hizo presos a los coroneles Leopoldo Tailhardart y Víctor Sáa, el 28 de diciembre de 1.901. Enviándole un telegrama al General en Jefe Juan Vicente Gómez Chacón anunciándole el éxito de las operaciones militares en el pueblo de Parapara en los llanos del Guárico y la entrega de esos importantes jefes al gobierno nacional, el 29 de diciembre de ese mismo año.
Cuando se dieron los ataques de las potencias extranjeras como Inglaterra, Alemania e Italia en contra de nuestra patria en 1.902, en verdad el General Cipriano Castro contaba en Puerto Cabello en esos cruciales momentos con 4 generales de gran talla guerrera, como los fueron: General Vicente Emilio Mora, gobernador de Puerto Cabello; General Secundino Torres, comandante de la Plaza; General Carlos Silverio, comandante del Fortín Solano; y el General Julio Bello Rodríguez, comandante del Castillo San Felipe.
El comodoro inglés Montgomery estaba presto a atacar el puerto y los generales venezolanos responsable de la defensa de Puerto Cabello estaban dispuestos a conversar con él. Sin embargo, el General Cipriano Castro no se sintió bien por la actitud tomada por sus comandantes, quién estando enterado de la situación por el colombiano Eustorgio Arrieta, le comisionó a que no se entablara ningún tipo de conversaciones con los comandantes de las fuerzas invasoras a nuestra patria en esos cruciales momentos de nuestra vida política y militar a comienzos del Siglo XX.
Al sonar los primeros disparos d las fuerzas enemigas extranjeras, tres de los generales salieron corriendo del lugar. Quedando en la defensa el General Vicente Emilio Mora con gran gallardía y valor. Mientras que el General Carlos Silverio abandonó el fortín solano y con mil milicianos se internaron en los montes aledaños a Puerto Cabello.
Los entendidos decían que el cónsul norteamericano H.W. Volkmer andaba del timbo al tambo viendo como jugaba de lejos a los toros, para más luego por telegrama enviar los acontecimientos que se daban en esa zona, a fin de que su país interviniera en el conflicto, que de hecho fue así a través de la Doctrina Drago, bajo el concepto de: "América para los americanos".
El General Carlos Silverio también estuvo bajo las órdenes inmediatas de los generales en jefe Juan Vicente Gómez Chacón y Rafael González Pacheco defendió la administración del General Cipriano Castro en contra de los jefes y líderes de la Revolución Libertadora entre los años 1.901 y 1.903.
Hay comentarios veraces de antiguos ancianos quienes alegaban que los generales Carlos Silverio y Julio Bello Rodríguez hacían oscuros negocios en las prisiones o cárceles de esa época gomecista. Siempre contando con la ayuda del cabo de presos Nereo Pacheco, hombre temible de la época en la cárcel de La Rotunda; las comidas las vendían a los presos de acuerdo a la calidad de la misma, hay que ver que esas prácticas aún no han cambiado en nuestro tiempo.
Durante el gobierno del General Cipriano Castro ocupó otros cargos importantes, debido a su condición de militar heroico y aguerrido, siendo gobernador del Territorio Federal Cristóbal Colón en 1.905. Luego fue nombrado comandante militar de la plaza de La Guaira desde el 13 de noviembre de 1.905 hasta el 8 de mayo de 1.907, pasando después a ser comandante del Fortín Solano y del Castillo Libertador en Puerto Cabello, desde 1.907 hasta 1.908.
He allí contada la vida del General Carlos Silverio en base a lo que hay conservado en mi modesta memoria; ya que él tiene descendientes en estas tierras de Carayaca, conformadas por familias de sobrada solvencia moral, una de sus descendientes es Alba Yépez quién es hermana de los Silverio por parte de padre. Pero bueno, sigamos con otras cosas que tienen que ver con el conversatorio que llevamos sobre materia cultural en este pueblo de Carayaca.
Santísima Cruz de Mayo en Tarmas, mayo 2.005
Los velorios de la Cruz de Mayo y las imágenes tenían su forma; ya que el mes de mayo era el mes de la Santísima Cruz de Mayo; en el mes de julio se celebraba la festividad en honor a la Virgen de El Carmen.
Pero, anteriormente le celebraban sus fiestas era en el mes de agosto y en el mes de febrero le celebraban las fiestas a la Virgen de la Candelaria; y en el 1° del mes de noviembre se adoraban y se le rendían culto a los muertos; en este día se sentía un gran sentimiento hacia los muertos; pasaba el mes y luego venía la navidad; empezaban a cantas las fulías en los cafetales.
Este pueblo es dicharachero; ya que esas ideas cambiaron parte de la historia, porque en todos los meses había paralizaciones. Entonces, todo era diferente, a pesar de que había personas que eran muy conservadoras. Las fiestas que tenían más profundidad eran las religiosas; otros eran más abiertos, o en algunos casos inventaban que les salían las Ánimas, entre otros.
Me acuerdo my bien de todos los hechos que contribuyeron a tumbar el gobierno del General de División Isaías Medina Angarita el 18 de octubre de 1.945. Claro está, allí hubo plomo parejo; ya que el General Medina había puesto resistencia al embate de los militares alzados con la gente de Acción Democrática (AD).
Promoción del General Isaías Medina Angarita en 1.914
En el mundo militar los adecos contaron con las traiciones de los tenientes Juan Camargo Mora (Promoción 1.938) y Eleazar Sanguino Useche (Promoción 1.938), y el Subteniente Gustavo Pardi Dávila (Promoción "Caracas"-1.944). Hay que destacar que en esos momentos en que se estaba dando la revolución de Octubre, hubo una fuerte discrepancia entre el General Isaías Medina Angarita y el Mayor (Ej.) Santiago Ochoa Briceño, quién era el Comandante de la Policía de Caracas.
La situación se tornaba difícil a las fuerzas leales al gobierno del General de División (Ej.) Medina Angarita; debido a que el Alférez Mayor Porras Porras quién era nativo del oriente del país, con una ametralladora pesada en sus manos, desde La Escuela Militar de La Planicie en Caracas le produjo cuantiosas bajas a las fuerzas del gobierno nacional; ya que él fue un buen francotirador.
Maestro Luís Beltrán Prieto Figueroa
El Mayor (Ej.) Santiago Ochoa Briceño estaba presto a atacar al alma mater de su fuerza en La Planicie, y el General Medina tenazmente se lo opuso; ya que él fue Comandante que fue de la Compañía de Cadetes y había sido profesor de planta por casi 15 años en la Escuela Militar de La Planicie. Los militares que dieron ese golpe pertenecían a la Unión Patriótica Militar (UPM).
Esa escuela fue atacada por el lado oeste, por soldados del Batallón "Rangel", la Compañía Autónoma de Ocumare del Tuy, Compañía de Transmisiones del Batallón de Ingenieros "Francisco Avendaño". Y en la noche del mismo día 18 de octubre de 1.945, la Compañía de Cadetes de la Guardia Nacional al mando del Capitán Manuel Ojeda Guía ocupó el Observatorio de Cajigal, dando de baja al Alférez Porras Porras; acabándosele el parque a las fuerzas del gobierno.
Yo conocí a un primo hermano por parte de madre del General (Ej.) Isaías Medina Angarita que se graduó con él en la Escuela Militar de La Planicie en Caracas. Ese hombre era el Mayor (Ej.) Francisco Angarita Arvelo quién sí estuvo metido en esos líos militares que se dieron en el año 1.928 en contra del General en Jefe Juan Vicente Gómez Chacón.
Mayor (Ej.) Francisco Angarita Arvelo
(*San Cristóbal, 31-12-1.893 / + San Cristóbal, 18-8-1.949)
El Mayor (Ej.) Francisco Angarita Arvelo fue Presidente del Edo. Táchira en el mandato de su primo Medina Angarita, entre los años 1.941 y 1.945. Ese hombre se fue exilado del país al caer el gobierno de su primo, y luego regresó cuando tumbaron al Presidente Rómulo Gallegos, y si más no recuerdo, yo creo que él falleció en su tierra tachirense en 1.949. Ya que el General Esteban Chalbaud Dávila fue su compañero de curso en esa vieja Escuela Militar.
Lo más curioso de esas cosas, es que el General de División (Ej.) Isaías Medina Angarita fue alumno de doña María Regina Mujica Acevedo de Velásquez en la Escuela Municipal Nº 3 en San Cristóbal en el Edo. Táchira en 1.903. Tan honorable dama andina era nada más y nada menos, que la madre del escritor e historiador Ramón J. Velásquez, quién llegara a ser Presidente de la República de Venezuela en el año 1.993.
María Regina Mujica Acevedo de Velásquez
Lo que yo sé de esa época, es que doña María Regina de Velásquez nació en San Cristóbal el 6 de abril de 1.874. Ella era hija de José María Mujica y Rufina Acevedo, y más luego se casó con el maestro colombiano don Ramón Velásquez Ordóñez el 26 de octubre de 1.915, y de esa unión vino al mundo su único hijo el Dr. Ramón José Velásquez Mujica quién nació el 28 de diciembre de 1.916, y es casi contemporáneo conmigo.
Doña María Regina trabajó en Caracas con el Dr. Luis Beltrán Prieto Figueroa en la Sociedad de Maestros. Yo creo que ella como que falleció en esa ciudad en 1.938. Ya que en los corrillos caraqueños se decía que el papá de Ramón J. Velásquez y que había estudiado para cura en su patria, Colombia. Yo paso a creer que ella fue una de las creadoras de las Escuelas de Artes y Oficios que fue conocida como la Escuela Pública de Labores, y fue una de las mujeres baluartes en la enseñanza comercial en Venezuela.
Página siguiente |