La planificación convencional y la contemporánea y su influencia en los resultados deportivos (página 2)
Enviado por jose carlos burgueño
Unas boyas situadas cerca del final del segmento indican que el triatleta puede desplazarse andando sobre el fondo. El segmento de natación finaliza cuando el triatleta sale del medio acuático y comienza el segmento de ciclismo. Nada más salir del agua, el triatleta debe quitarse el gorro y tirarlo en unos cubos o al suelo, se quitará las gafas de agua, correrá rápido hasta la zona de boxes, concretamente a su espacio asignado, se colocará a la derecha de la bicicleta, se pondrá el casco y se lo abrochará y cogerá la bicicleta por la tija del sillín y se subirá en ella a partir de la zona indicada por los jueces en las que se permite circular encima de la bicicleta. Realizará los primeros metros con los pies encima de las zapatillas de ciclismo sin calzar. Una vez que el triatleta ha acelerado se agachará y se ayudará de las manos para calzarse las zapatillas.
La transición del ciclismo al atletismo
El reglamento de competición de la ITU (International Triathlon Union) define la transición ciclismo-carrera a pie "al espacio que delimita la zona de boxes, es decir, a partir del momento en que el triatleta está obligado a bajarse de la bicicleta hasta el momento en que, corriendo a pie, sale de la zona de boxes". Este tiempo suele comprender un 0'8-1'3% del tiempo total que dura la competición.
Para algunos científicos, la transición comprende desde el último kilómetro de ciclismo hasta el kilómetro 1 de la carrera a pie (Millet y Vleck, 2000).
Todo atleta que decide enfrentarse a una competencia de Triatlón quiere demostrar en la misma todo su arsenal físico o lo mejor de sí, al igual que todo entrenador quiere que sus atletas expresen sus mayores facultades competitivas.
Desarrollo
El primer intento para diseñar un sistema válido de entrenamiento anual estuvo basado sobre la experiencia deportiva en la década entre 1920 y 1930.
Este sistema abogaba por el "trabajo general" en invierno para desarrollar la fuerza y la resistencia, y el trabajo especial en la primavera y el verano incluyendo la competición.
Posteriores propuestas teórico-prácticas de periodización han cuestionado, a los primeros autores, superando los planteamientos de diluir la carga, y separar de los contenidos principales de la misma.
EL DISEÑO CONVENCIONAL
Hace ya más de 30 años, cuando el teórico soviético Lev Matveev presentó el concepto de "forma deportiva", que fue definido como el nivel más elevado de estado de preparación atlética para tomar parte en competición. Según este autor, este estado puede ser alcanzado en cada ciclo de entrenamiento como resultado de una preparación sistemática. Según este concepto, se deben distinguir tres fases de desarrollo: (1) adquisición; (2) estabilización; y (3) pérdida temporal de la forma deportiva.
Según el concepto general de Matveev, estas fases sirven como condiciones previas para la periodización de su ciclo de entrenamiento. Es decir, que ciertos períodos de entrenamiento deben corresponder a cada fase de desarrollo de la forma deportiva. A este sistema de planificación le denominaremos, a partir de ahora, como el diseño convencional.
La distribución de los contenidos de entrenamiento correspondientes al nivel básico, específico y competitivo de la disciplina deportiva se llevan a cabo de forma distribuida y regular a lo largo de los distintos períodos y fases del ciclo, mientras la carga total del trabajo aumenta gradualmente a lo largo del ciclo, con un mayor énfasis en el volumen durante la fase general del período preparatorio, y en la intensidad durante la fase específica del período preparatorio y en el período competitivo.
La distribución de los contenidos de entrenamiento a lo largo de toda la temporada se aplican de forma regular, con mayor o menor énfasis, en función de las características de las etapas o períodos de entrenamiento. El rendimiento mejora gradualmente hasta un cierto punto donde la continuidad en la aplicación de las cargas puede afectar negativamente al rendimiento.
La distribución de los contenidos de entrenamiento en períodos prolongados obliga a que coincidan, simultáneamente determinados, contenidos de diferente orientación (Figura 2), pudiendo verse afectado el rendimiento por la interacción entre ellos. Es por ello que el diseño convencional de periodización se suele emplear, en mayor medida, en deportistas jóvenes y en deportes de resistencia de larga duración donde las capacidades determinantes de rendimiento son pocas y están estrechamente relacionadas.
Sin embargo, la aplicación de la periodización convencional implica notables inconvenientes para el logro de elevado rendimiento en el deporte de alto nivel actual. Estos inconvenientes se centran especialmente en:
Un desarrollo complejo de muchas capacidades al mismo tiempo
El sistema convencional aboga por el desarrollo complejo de muchas capacidades a través de la orientación general del entrenamiento en varias direcciones. Por ejemplo, en deportes individuales de resistencia, el entrenamiento en el período preparatorio está dirigido a la resistencia aeróbica, aeróbica-anaeróbica, la fuerza máxima, la resistencia de fuerza y el acondicionamiento general. Como es usual, estos tipos de entrenamiento se utilizan dentro de cada mesociclo en distintas proporciones. La misma situación es típica para el período competitivo de acuerdo con otra serie de metas que incluyen las capacidades anaeróbica alactácida, la resistencia anaeróbica, la resistencia de fuerza específica, la técnica y la táctica competitiva, etc.
La formulación compleja de un programa de entrenamiento que simultáneamente desarrolla muchas capacidades motoras produce una superposición negativa del efecto de entrenamiento. Más aún, para obtener una ganancia real de alguna capacidad en los deportistas de élite, es necesario facilitar una concentración suficiente y énfasis sobre cargas de entrenamiento concretas. Un programa complejo restringe esta posibilidad.
PERIODOS PROLONGADOS DE ENTRENAMIENTO DE FORMA MONÓTONA Y POCO ATRACTIVA.
Esta posición se basa en el empleo rutinario de períodos prolongados de entrenamiento que involucran las mismas tareas y/o contenidos de forma monótona. Usualmente, los períodos duran de dos a tres meses. La principal consecuencia de este entrenamiento es que la adaptación a un estímulo habitual reduce las posibilidades de ganancias en la preparación. Junto a ello, un período prolongado de trabajo extensivo en los períodos preparatorios, como puede ser el caso en los deportes de resistencia, conduce al desentrenamiento de la velocidad y a la alteración de la técnica según el "estilo extensivo".
DIFICULTAD PARA REALIZAR LOS CONTENIDOS DE ENTRENAMIENTO DEL NIVEL ESPECÍFICO DE PREPARACIÓN DURANTE EL PERÍODO PREPARATORIO (VELOCIDAD, POTENCIA ANAERÓBICA LACTÁCIDA, TÉCNICA COMPETITIVA, ETC.), Y PARA RETENER CAPACIDADES BÁSICAS MÁS GENERALIZADAS DURANTE EL PERÍODO COMPETITIVO (RESISTENCIA AERÓBICA, CAPACIDADES DE FUERZA).
La prolongación de un trabajo determinado con unas características concretas durante los distintos períodos puede provocar efectos negativos. Es bien conocido que la capacidad para desarrollar velocidad máxima y potencia puede disminuir debido a un alto volumen de entrenamiento, como causa de la adaptación morfológica y biomecánica de los músculos. Por esta razón se puede llegar a una pérdida de velocidad y capacidad anaeróbica lactácida muy estable. Un efecto negativo adicional puede ser la alteración de la técnica de movimiento. Bajo condiciones de trabajo extensivo prolongado, la técnica cambia hacia un modelo de coordinación predominante (por ejemplo, movimientos lentos por demasiado trabajo aeróbico), y esta transformación puede llegar a ser también muy estable. Como un punto más añadido a este apartado, la prolongación del período competitivo no permite al deportista sostener el nivel de las capacidades básicas, como la resistencia aeróbica y la fuerza máxima para nadadores, piragüistas y remeros. Incluso la masa muscular se ve disminuida, muy a menudo, días antes de las competiciones principales.
Limitaciones para tomar parte en competiciones durante todo el ciclo de preparación
Es común en el deporte contemporáneo de alto rendimiento tomar parte en competiciones, no solamente durante el período competitivo, sino también durante el período preparatorio. La estructura convencional de preparación no ofrece la oportunidad para seguir esta práctica, debido a la escasez de situaciones competitivas que se presentan durante el período preparatorio de entrenamiento. La acumulación de carga y una motivación baja para tomar parte en la competición (debido a la falta de preparación) hace que la misma competición, en este tiempo, sea poco factible.
Estas desventajas de la periodización convencional han hecho que científicos y entrenadores intenten nuevas perspectivas que se encaminen hacia la búsqueda de una periodización alternativa que elimine o reduzca las contradicciones y limitaciones del sistema convencional.
Los modelos alternativos han sustituido la utilización de cargas regulares, es decir, la distribución uniforme de cargas a través de la temporada, basada en un sistema complejo de entrenamiento, en el que se enfatiza en un desarrollo multilateral o paralelo de las capacidades físicas por la concentración de cargas basadas en una organización de las mismas, de desarrollo sucesivo de capacidades físicas. Las cargas concentradas se aplican en espacios más cortos, concentrando la carga en mayor medida que en las cargas acentuadas, el volumen y la intensidad de trabajo sobre una orientación definida de carga. La secuencia metodológica es muy importante en la aplicación de cargas con diversa orientación. Debido a la fuerte estimulación de las cargas concentradas sobre el organismo, se produce durante su aplicación un descenso de los índices funcionales del deportista, produciéndose de forma retardada el crecimiento de los mismos, que deberán coincidir en su conjunto al final del macrociclo con un aumento significativo del rendimiento competitivo. Si bien se empezó aplicando especialmente en deportes de fuerza explosiva (Verjoshanskij, 1990), actualmente se encuentran modelos para prácticamente todas las disciplinas, si bien es manifiesto que su aplicación debe llevarse a cabo con deportistas de élite y con un alto grado de entrenamiento.
Clasificación de las fases y periodos según el modelo de planificación convencional
Periodo preparatorio: La dirección básica de entrenamiento en este periodo es la formación de condiciones básicas para la preparación posterior, más especializada y concentrada. Dicho periodo se divide en:
Fase de preparación general: El propósito fundamental de esta fase es asegurar una base funcional general para otros entrenamientos más específicos lo que puede traducirse en mejor condición física. El contenido del entrenamiento incluye generalmente ejercicios aeróbicos específicos y no específicos.
Fase de preparación específica: Persigue crear las bases de las capacidades motoras y técnicas de acuerdo con los requerimientos específicos de cada deporte.
Periodo competitivo: El entrenamiento en este periodo está dirigido al desarrollo del rendimiento deportivo mediante competencias, variaciones y modelajes de la situación específica de competición.
Puede dividirse a su vez en:
Fase competitiva temprana: Se busca desarrollar las capacidades específicas motoras y técnicas. Se sugiere que el deportista participe en un buen número de competiciones.
Fase de competiciones principales: El entrenamiento debe caracterizarse por elevados niveles de intensidad y el modelaje competitivo aunque no se exige lo obtención de resultados "picos".
Periodo de transición: El propósito de este periodo es la renovación de las reservas de adaptación del deportista, esto se logra por la interrupción del entrenamiento que involucre cargas elevadas y facilitando los medios oportunos de recuperación.
CLASIFICACIÓN DE LOS MESOCICLOS Y MICROCICLOS SEGÚN EL MODELO DE PLANIFICACIÓN CONVENCIONAL
Mesociclo entrante o introductorio: está compuesto por 2-4 semanas, habitualmente con esta estructura se inicia el periodo preparatorio del ciclo grande, el nivel general de las cargas en este meso es inferior que el resto de los principales del periodo preparatorio pero el volumen de las cargas puede alcanzar valores significativos, la composición de los medios de entrenamiento se caracteriza por el elevado peso de los ejercicios de carácter general.
Mesociclo básico desarrollador: está compuesto por 4-10 semanas, desempeña un papel muy importante cuando el deportista pasa a un nivel nuevo de la capacidad de trabajo y existe un considerable aumento de las cargas acumuladas de entrenamiento lo cual se alterna con los mesociclos básicos de carácter estabilizador.
Mesociclo preparatorio y de control: está compuesto por 2-4 semanas, este tipo de ciclo medio representa la forma de transición entre los básicos y los de entrenamiento, se combinan con series de competencia que adquieren un sentido de control. En ellos también se cumplen tareas de la preparación del deportista para el certamen fundamental.
Mesociclo básico estabilizador: está compuesto de 2-6 semanas, se caracteriza porque en combinación con el desarrollador interrumpe temporalmente el crecimiento de las cargas en los niveles alcanzados lo que posibilita la adaptación a las exigencias del entrenamiento presentadas en el desarrollador.
Mesociclo de pre competición: está compuesto por 2-6 semanas, estos ciclos son típicos de la preparación inmediata al torneo fundamental, la particularidad fundamental que adquiere el entrenamiento con estos mesos está determinada por el hecho de que es este es necesario modelar lo más posible la situación competitiva a la que se enfrentará el deportista, creando de esta forma una mejor preparación para el enfrentamiento o competencia.
Mesociclo de competición: está compuesto por 1-10 semanas, la planificación del mismo estará en dependencia de las características de la disciplina, las exigencias del calendario competitivo, el número de salidas del deportista durante la competencia.
Mesociclo de restablecimiento mantenedor: está compuesto por 4-6 semanas, se caracteriza por entrenamientos suaves y de carácter general y especial con el objetivo de lograr alivios en las exigencias de las cargas dirigidos a mantener e incrementar el nivel de entrenamiento especial lo que asegura una descarga relativa en la forma de descanso activo.
Mesociclo de recuperación: está compuesto por 2-6 semanas, es similar al mesociclo básico pero incluye una cantidad mayor de micros de recuperación que es su principal objetivo al final del ciclo grande de entrenamiento.
Microciclos corrientes: se caracterizan por el crecimiento uniforme de la carga, por un volumen considerable y por su nivel limitado de intensidad en la mayoría de las sesiones, son propios de la preparación general y especial.
Microciclos de choque: se caracterizan porque a la par del volumen creciente de las cargas se dé una alta intensidad, en particular concentrando las sesiones en el tiempo, hecho que caracteriza la preparación especial y en ocasiones la general.
El diseño ATR o el modelo de planificación contemporáneo
La esencia del concepto alternativo de periodización radica en la periodicidad y la permutación de la orientación preferencial del entrenamiento. Esta permutación se logra alternando con tres tipos de mesociclos: de acumulación (A), de transformación (T) y de realización (R)
Las características y la orientación de estos mesociclos es un reflejo de su denominación. Así, el mesociclo de acumulación se realiza con la finalidad de aumentar el potencial motor del deportista y crear una reserva de cualidades básicas; es, por decirlo de otro de modo, todo el mesociclo preparatorio en miniatura. En el mesociclo de transformación ese potencial se convierte en preparación especial; sobre la base de la fuerza desarrollada, aumenta la resistencia de fuerza, y sobre la base del desarrollo aeróbico se perfecciona el abastecimiento energético mixto – aeróbico y anaeróbico- y se incrementa la resistencia especial y de velocidad. Por último, el mesociclo de realización crea premisas para que en las competiciones cristalicen los potenciales motores acumulados y transformados.
Debido a las diferencias entre las clasificaciones convencionales y alternativas, deben considerarse algunas particularidades esenciales de esta nueva representación.
Se renuncia al entrenamiento simultáneo de muchas cualidades y se concentra el efecto del entrenamiento y una orientación definida en un menor número de capacidades.
Como unidad estructural de entrenamiento, los mesociclos deben poseer una duración lo suficientemente larga para alcanzar los cambios morfológicos energéticos y coordinativos que sean necesarios. Los mesociclos duran de 14 a 28 días. En estos plazos, la realización de estos cambios en deportistas altamente entrenados exige una atención preferente al entrenamiento de determinadas capacidades. Esta elevada concentración de cargas de entrenamiento requiere una reducción del número de capacidades para su desarrollo simultáneo.
El entrenamiento consecutivo de acumulación, transformación y realización es la mejor forma para obtener una concentración más elevada de cargas de entrenamiento. Más aún; este diseño de entrenamiento hace más fácil planificar e interpretar la preparación de acuerdo al repertorio de ejercicios, programa de evaluación, empleo de los medios de recuperación y condiciones de nutrición.
Se alternan con más frecuencia la orientación del entrenamiento y sus contenidos, lo que hace que la preparación llegue a ser de mayor interés, más motivante y atractiva para los deportistas.
Aumenta la eficacia en el control del entrenamiento, puesto que el objetivo sobre el que actúa el entrenamiento se restringe en cada mesociclo, registrando los cambios justamente en las capacidades sobre las cuales se actúa preferentemente.
Sin embargo, se pueden constatar ciertos problemas en este sistema. Al elaborar el plan anual, por regla general hay que adaptarlo al calendario de las competiciones. En el momento cumbre de competiciones, con pequeños intervalos entre ellas, la duración entre las mismas no es suficiente para ubicar tres mesociclos, aunque los mismos se acorten. Debido a ello, es preciso programar la participación en competiciones como mesociclos de transformación, o variar la mesoestructura en el período competitivo.
CARACTERISTICAS DE LA MESOESTRUCTURA EN LA PERIODIZACION CONCENTRADA DEL MODELO ATR
CONTENIDOS DE ENTRENAMIENTO DE LOS MESOCICLOS
Mesociclo de acumulación
Los ejercicios de fuerza máxima son la base del programa de entrenamiento especializado posterior (mejora de la fuerza explosiva, resistencia de fuerza). Además, sirven para estimular la hipertrofia muscular, lo cual es a veces necesario. Sin embargo, el programa de fuerza debe ser suplementado por el trabajo aeróbico debido a que el entrenamiento acumulativo debería mejorar los potenciales oxidativos y contráctiles de los músculos. Este trabajo simultáneo es compatible con períodos de perfeccionamiento técnico, la eliminación de errores, etc. De este modo, el programa de entrenamiento completo en un mesociclo acumulativo incluye una cantidad sustancial de trabajo aeróbico y técnico. Por el contrario, el programa de fuerza debe utilizar ejercicios de alta carga para afectar los mecanismos nerviosos e hipertróficos de mejoría de la fuerza.
Mesociclo de transformación
La mayoría de las competiciones deportivas requieren o involucran resistencia aeróbica y aeróbica-anaeróbica, así como resistencia de fuerza específica. De este modo, el mejor formato de entrenamiento combina la mejora simultánea de estas capacidades dentro de un mesociclo. Sin embargo, este entrenamiento de gran demanda, intenso, necesariamente afecta a la estabilidad y causa fatiga que, a su vez, estorba a la técnica. Este tipo de mesociclo está caracterizado por máxima carga y acumulación de fatiga; una cantidad esencial de este entrenamiento debe ser ejecutada en un estado fatigado.
Mesociclo de realización
El entrenamiento principal (meta) en este mesociclo es la condición física integrada que, típicamente, incluye trabajo de velocidad y tácticas competitivas. De acuerdo con ello, la mayoría del entrenamiento comprende la modelación de la actividad competitiva con las correspondientes referencias tácticas y técnicas. Adicionalmente, el entrenamiento incluye los ejercicios anaeróbico-alactácidos. La experiencia de los deportistas de élite ha demostrado que la modelación de la actividad competitiva y el trabajo anaeróbico alactácido es una forma muy efectiva y compatible para alcanzar la preparación específica para las competiciones próximas. Para estimular las capacidades de velocidad y de condición física integrada, los atletas deberían entrenarse en un estado bien descansado.
ORDENAMIENTO DE LOS MESOCICLOS
En lugar del diseño típico de mesociclo, este sistema contemporáneo sugiere un ordenamiento de los mesociclos basados en la relación entre las distintas capacidades-objetivos.
Es obvio que la mejoría de una capacidad requiere la elevación de otra capacidad relacionada por medio del entrenamiento concentrado en un mesociclo consecutivo. Así, un mesociclo acumulativo con trabajo generalizado extensivo debe preceder al trabajo intensivo más especializado del mesociclo de transformación. Este, a su vez, debe facilitar las bases para los ejercicios muy especializados competitivos y el entrenamiento concentrado de velocidad en el mesociclo de realización.
También puede usarse una combinación consecutiva de dos mesociclos de acumulación, y dos de transformación. No obstante, el programa acumulativo debe preceder al entrenamiento de transformación, el cual, a su vez, debe preceder al mesociclo de realización. Este principio de ordenamiento debería también ser utilizado cuando se diseñan los programas anuales de entrenamiento.
DURACION ÓPTIMA DE LOS MESOCICLOS
La duración del mesociclo depende de tres factores principales: a) el tiempo necesario para obtener la mejoría de determinadas capacidades; b) el ritmo de mejoría; c) las condiciones externas que afectan al diseño del entrenamiento; la duración de las competiciones, la duración de las concentraciones de entrenamiento, etc.
El entrenamiento concentrado provee una oportunidad excelente para obtener un progreso sustancial. Se debe poner atención a la mejoría de la magnitud y al ritmo de mejoría. Es sabido, por la experiencia y por investigaciones, que el entrenamiento con mayor énfasis en determinadas capacidades motoras causa un ritmo de mejoría más elevado que el entrenamiento complejo. Las razones por las que se consigue un ritmo de mejora más elevado con el entrenamiento concentrado son:
Contraste con el entrenamiento del mesociclo previo (novedad de estímulos de entrenamiento y ejercicios)
Concentración alta de cargas de entrenamiento especializadas.
Más alta motivación de los deportistas ante un programa de entrenamiento inusual y más atractivo.
En función de lo expresado se desprende que la duración óptima de los mesociclos para deportistas calificados debe ser diferente según el programa de entrenamiento sea concentrado o complejo.
Otros factores externos, como las duraciones de las competiciones y la duración de las concentraciones de entrenamiento pueden determinar también la duración del mesociclo. A menudo, estas influencias acortan la duración del mesociclo. En casos extremos, un mesociclo puede durar 14 o incluso 12 días. Usualmente, el acortamiento de la duración del mesociclo provoca el uso de un entrenamiento más concentrado con un énfasis más elevado sobre varias capacidades.
LAS CARACTERISTICAS BASICAS DEL DISEÑO A.T.R.
La idea general del concepto alternativo se basa en dos puntos fundamentales del diseño de entrenamiento:
La concentración de cargas de entrenamiento sobre capacidades específicas u objetivos concretos de entrenamiento (capacidades/objetivos).
El desarrollo sucesivo de ciertas capacidades/ objetivos en bloques de entrenamiento especializados o mesociclos.
LA CONCENTRACION DE CARGAS DE ENTRENAMIENTO
El diseño tradicional de entrenamiento se basa principalmente en formulaciones complejas. Sin embargo, la concentración de carga de entrenamiento pone un mayor énfasis sobre los contenidos de un tipo de entrenamiento específico. Esta posición está basada en el hecho bien conocido de que las capacidades motoras y técnico-tácticas en deportistas experimentados y de buena calificación tienen difícil progresión. Las mejorías de las capacidades motoras son más bajas con un entrenamiento complejo que cuando se compara con un entrenamiento concentrado.
Esta concentración de cargas de entrenamiento produce al menos tres consecuencias:
El número de capacidades/objetivos que se pueden entrenar simultáneamente dentro de un mesociclo debe reducirse.
Es obvio que se puede asegurar la aplicación de una alta concentración de cargas de entrenamiento solamente si se restringe el número de tipos de entrenamiento. La experiencia en la preparación de deportistas de élite soviéticos (lanzadores, nadadores, kayakistas y piragüistas) muestra que el número óptimo de capacidades/objetivos que pueden ser simultáneamente desarrolladas incluye dos capacidades motoras y una peculiaridad esencial de técnica (economización, estabilización del movimiento y tolerancia a la fatiga, etc.).
Más aún; datos científicos señalan que al menos el 70-80 % del trabajo total dentro del mesociclo especializado se debe dirigir hacia el desarrollo de dos capacidades motoras. El entrenamiento restante es gastado usualmente en otras capacidades, recuperación activa, etc. (Verjoshanskij, 1990).
Las capacidades/objetivos deben ser compatibles para un desarrollo simultáneo dentro del mesociclo.
Esta necesidad viene condicionada por la interacción de efectos inmediatos de entrenamiento después de tareas y sesiones. Efectivamente, si se reduce el número de capacidades/objetivos es posible conseguir una mejor interacción entre cargas de entrenamiento diferentes.
La división lógica de los distintos tipos de mesociclos (acumulación, transformación y realización) facilita las condiciones para reunir sesiones de diferentes tipos de entrenamiento según los objetivos del mesociclo, tal cómo:
Elevación del potencial técnico y físico.
Transformación del potencial de las capacidades físicas y técnicas en preparación específica.
Logro de resultados máximos dentro del tiempo disponible de preparación.
El empleo de los mesociclos debe atender a una duración óptima.
Es obvio que en el entrenamiento altamente concentrado sobre un número limitado de capacidades/ objetivos se deben utilizar períodos de tiempo más cortos que cuando se emplean métodos de entrenamiento complejos. Su justificación está en el hecho de que períodos más cortos de entrenamiento concentrado maximizan el ritmo de crecimiento de las capacidades/objetivos.
Otras argumentaciones adicionales se relacionan con el desarrollo consecutivo de diversas capacidades y se verán a continuación.
Desarrollo sucesivo de ciertas capacidades/objetivos
El entrenamiento convencional asume una alteración de las direcciones de entrenamiento de fase a fase y de período preparatorio a período competitivo con peculiaridades de entrenamiento predominantemente complejas. El sistema contemporáneo requiere una formulación más dinámica del entrenamiento de un mesociclo a otro dentro de cada fase. Este diseño de programa consecutivo determina las siguientes características:
El ordenamiento de los mesociclos, basada en los efectos residuales de entrenamiento del trabajo precedente.
Es obvio que el ordenamiento óptimo de los mesociclos debe basarse en los términos y efectos de la superposición de los efectos residuales de entrenamiento. Como sea que el entrenamiento aeróbico y de fuerza máxima poseen el mayor efecto residual, estos tipos de entrenamiento deben ser la base para una intensificación posterior. Según ello, el estado de entrenamiento debe empezar con el trabajo que desarrolle las capacidades con el efecto residual mayor (fuerza máxima, resistencia aeróbica). El siguiente mesociclo debe centrarse en las capacidades/objetivos con efectos residuales medios (fuerza-resistencia y capacidad glucolítica anaeróbica), y el mesociclo final, antes de la competición, debe utilizar los ejercicios con los efectos residuales más pequeños (entrenamiento anaeróbico alactácido, modelación de entrenamiento de situaciones competitivas, tácticas concretas, etc.). Esta explicación aporta argumentos adicionales y finales para la secuencia de los mesociclos previamente presentados, es decir, de acumulación, transformación y realización.
La conjunción de distintos mesociclos en los diversos macrociclos.
En el sistema contemporáneo, el macrociclo, como una unidad de entrenamiento, tiene mucho mas importancia que laque tiene en el sistema convencional.
El macrociclo ATR afecta a todos los aspectos fundamentales de la preparación deportiva. En efecto, es similar al ciclo anual, solamente que en versión miniatura. No obstante, la estructura y contenido del entrenamiento varía dependiendo de:
La posición dentro de la temporada;
La calificación de los deportistas;
La especificidad de los deportes.
La distribución de los macrociclos dentro del ciclo anual.
En la práctica contemporánea, esta distribución depende del momento e importancia de las competiciones dentro del ciclo anual, del nivel de calificación del deportista y de las peculiaridades del deporte.
Siguiendo al sentido común, el momento ideal para competir debe ser al final del ciclo de preparación. De allí que la distribución de los macrociclos no-convencionales dentro de la temporada deba hacerse poniendo la principal atención en los momentos e importancia de las competiciones. Por tanto, los macrociclos deben planificarse de modo que las principales competiciones se sitúen al final de los mesociclos de realización. Las competiciones adicionales pueden ser distribuidas dentro de los mesociclos de realización, e incluso de transformación. Sin embargo, la posibilidad de llevar a cabo la preparación y obtener máximos resultados no será tan grande. No obstante, estas competiciones adicionales son de gran importancia para chequear varios puntos técnicos y tácticos, mientras que a la vez, se facilitan los medios para entrenar con alta intensidad y motivación.
Debido a que el número de competiciones a principio del ciclo de entrenamiento es mucho menor y el entrenamiento adquiere un carácter de mayor atención a la formación de los fundamentos básicos de la preparación, la duración de primeros macrociclos del ciclo de preparación debería ser de mayor duración (alargando especialmente el mesociclo de acumulación).
Dependiendo del nivel de calificación deportiva, la distribución de los macrociclos puede también ser diferente. Una característica particular del deporte de élite moderno es la participación en muchas competiciones durante una gran parte de la temporada. Esta es una de las razones por la que los deportistas de clase mundial usualmente tienen más macrociclos que los de clase media. Otra razón es que] os deportistas de clase media y baja realizan un entrenamiento más generalizado y menos concentrado que requiere períodos más prolongados de adaptación. En consecuencia, sus macrociclos son más largos y su número en una temporada es mucho menor.
Atendiendo a las peculiaridades de diferentes deportes, se debe poner atención en la formulación y distribución de los macrociclos durante los períodos competitivos, como puede ser en los deportes colectivos. Por ejemplo, la práctica de torneos en fútbol y en baloncesto requiere una duración más prolongada de los macrociclos en el período competitivo.
Clasificación de los microciclos según el diseño de planificación contemporáneo
Microciclos de aproximación: se organizan atendiendo a la proximidad de las competencias, las estructuras son planificadas para modelar varios elementos del régimen y el programa de próximos certámenes.
Microciclos de ajustes: duran de 4-7 días, se caracterizan por un nivel medio de la carga total de trabajo con disminución de la intensidad, se diseña con el fin de preparar al deportista para el siguiente estado de entrenamiento.
Microciclos de cargas: duran 6-7 días, se caracterizan por un nivel importante de la carga de trabajo sin llegar a agotar el nivel medio de reservas del deportista, el volumen de la carga debe ser suficiente para estimular una mejora en la preparación.
Microciclos de impacto: duran 6-7 días, se utilizan para estimular el nivel más alto de adaptación de un deportista a nuevas cargas de entrenamiento, se caracteriza por una concentración máxima de sesiones de desarrollo una máxima acumulación de fatiga y ausencia de recuperación total en el microciclo
Microciclos de activación: duran de 5-7 días, facilitan la preparación inmediata del deportista para la competición, se sitúan antes de la competición y deben asegurar la recuperación total del deportista después de microciclos de carga e impacto, tiene como principal característica la modelación de las situaciones de competencia.
Microciclos de competición: duran de 3-9 días, tienen como objetivo organizar actividades inmediatamente antes o después de una competición, esto implica las actividades un día antes de la competición, el día de esta y los siguientes días de recuperación, la planificación del micro es individual y dependerá de las características específicas de la competencia.
Microciclos de recuperación: duran de 3-7 días y promueven la regeneración psicofisiológica del deportista y suceden a duros periodos de entrenamiento y competición. Por lo tanto pretenden crear las mejores condiciones posibles para la recuperación.
ORDENAMIENTO DE LOS MICROCICLOS SEGÚN EL DISEÑO DE PLANIFICACIÓN CONTEMPORÁNEO
Análisis de los resultados
La comparación de los resultados se realiza analizando las marcas de los atletas al someterse a los diferentes modelos de planificación.
Se utilizaron las pruebas de 400 metros en la natación y de 1Km en el atletismo pues las mismas son las distancias que mide la Federación Nacional de Triatlón en Cuba para conocer el nivel de los atletas.
En el caso de la natación siempre se desarrolló en piscina de 50 metros u olímpica y el atletismo en una pista de rekortan de 400 metros oficial, con el mismo cronómetro y en fechas similares de un año con respecto al otro. La única diferencia existente fue precisamente el diseño de panificación empleado en cada macrociclo.
En el diseño convencional se emplearon un total de 36 semanas y se trató de alcanzar la forma deportiva en 1 sola ocasión.
En el diseño contemporáneo se tomó la segunda cima o búsqueda de forma deportiva pues era en la que mejores resultados se perseguían.
En ambos casos se tomaron los valores de los resultados en la competencia fundamental.
Conclusiones
Con la planificación contemporánea del entrenamiento deportivo se alcanzan mejores resultados deportivos y en este tipo de deporte que resulta verdaderamente fuerte para el ser humano se preserva la integridad del mismo. Hemos visto como el triatleta se mantiene en condiciones de enfrentarse a cualquier tipo de competición en cualquier época del año valga la redundancia, en la mejor forma posible, además de la visible motivación hacia las actividades y tareas planteadas dentro del programa de entrenamiento.
Por lo que coincidimos con el criterio de varios autores consultados acerca de la efectividad del mismo.
Bibliografía
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Harre D. (1973). Teoría del entrenamiento deportivo. Editorial CientíficoTécnica, La Habana.
Kotsa A.M. (1986). Fisiología deportiva. Editorial Fisicultura y Deportes, Moscú.
Matveev L. (1977). Periodización del entrenamiento deportivo. Editorial Raduga, Moscú.
Matveev L. (1983). Fundamentos del entrenamiento deportivo. Editorial Raduga, Moscú.
Autor:
Lic. José Carlos Burgueño Pons
Entrenador Selección de Triatlón
Las Tunas
Cuba
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