Sistema para el trabajo metodológico en Disciplinas Docentes Complejas

Desde el curso 2005 – 2006, esta autora ha venido observando, que si bien está legislado que el trabajo metodológico se realice en todos los niveles (carrera, disciplina, año y asignatura), y en todas las estructuras institucionales (Facultades, departamentos y CUM), no se ha logrado aun, que a la preparación metodológica de los colectivos de disciplinas docente, que se realizan en la sede central, se integren los profesores a tiempo parcial.

Ocurre, además, que en los CUM no se ha materializado al 100%, esta labor ya que, en estos centros solo se realiza la preparación, pero solo a nivel de la carrera, pues la realidad pedagógica ha demostrado que un profesor de una carrera, imparte más de una asignatura de esa carrera en diferentes grupos, en el mismo semestre y a la vez imparte diferentes asignaturas en otras carreras.

Esta problemática ha traído como consecuencia, que no se ha logrado incidir:

• En una gestión eficiente del proceso docente educativo en todos los niveles y en su calidad.

• En el diseño y preparación del programa de la asignatura (fundamentalmente en la semipresencialidad).

• En la planificación del sistema de clases de la asignatura, así como en su revisión y control.

• En el dominio y aplicación de los profesores de la metodológica de la clase encuentro para su materialización en las modalidades de estudio semipresencial.

• En la preparación de la asignatura a partir de su relación con otras asignaturas, tanto dentro, como fuera de la disciplinas.

• En los resultados docentes alcanzados en los últimos cursos y el trabajo metodológico realizado a todos los niveles.

Puede sintetizarse entonces que se esta manifestando la contradicción de que:

En la realidad pedagógica actual no se logra perfeccionar el proceso docente educativo, desde el trabajo metodológico disciplinar, porque si bien es cierto que las asignaturas presenciales y semipresenciales se relacionan, aun no se logra integrar a los profesores de tiempo parcial con los profesores de tiempo completo, las modalidades de estudio y las materias de enseñanza.

Se nos da, entonces la necesidad de que el trabajo metodológico debe ser coordinado en los colectivos de carrera, disciplina, asignatura y año, y en este particular, desde las peculiaridades que presentan las disciplinas docentes complejas, teniendo como finalidad elevar la calidad del desempeño de los docentes en la dirección del Proceso Docente Educativo.

Surge así la interrogante principal (problema) que dinamiza esta investigación:

¿Cómo contribuir desde la semipresencialidad, a que el trabajo metodológico en las Disciplinas Docentes Complejas en la UPR, desarrolle con un carácter sistémico y desde la integración de las tipologías de profesores, las modalidades de estudio y las relaciones entre materias, un proceso de preparación metodológica que tribute a una gestión eficiente del proceso docente educativo?

Es el objeto: El trabajo metodológico en las disciplinas docentes complejas en la UPR.

Se traza como objetivo:

Fundamentar un sistema par el trabajo metodológico en las disciplinas docentes complejas en la UPR, de tal manera que permita su implementación mediante una estrategia en la disciplina Contabilidad, en la carrera Contabilidad y Finanzas.

Para dar respuesta a la interrogante principal que mueve la investigación y modelar el objeto, esta aspirante se adentró en el estudio de diversos referentes teóricos y bases teóricas que la llevaron a comprender que:

La disciplina docente, desde el punto de vista epistemológico, es donde se aprende lo que se debe aprender, que esta conformada por diversas asignaturas que son importadas por diversos profesores.

En la práctica educativa de hoy, se esta observando, a partir de la incorporación al proceso docente de nuevas tipologías de estudiantes (TS, CSIP, IA, Diferidos, etc.), agrupadas en dos modalidades, presencial y semipresencial (CE, CPT, ED), que existe un incremento de la participación de los profesores a tiempo parcial en el proceso docente, por cuanto existen profesores, tanto de tiempo parcial, como de tiempo completo, que trabajan en todas las frecuencias y con todas las modalidades de estudio, esto conlleva a que la preparación de estos profesores tenga que ser mayor, puesto que deben preparar su asignatura, tanta veces , como clases tenga con toda la tipología de estudiantes.

Es así que una misma materia de enseñanza es derivada en si misma, en tantas ocasiones como veces tenga que ser impartida en las dos modalidades de estudio, por lo que ya no se trataría del mismo programa, ni del mismo sistema de clases que tendría que preparar el profesor, pues la diferencia en esta preparación no debería solo atender al número de horas que tiene el profesor frente al estudiante, sino que tiene que tener presente, a que "tipo" de estudiante se "enfrenta". No debe olvidarse que no todos los estudiantes que hoy ingresan a nuestras aulas son recién graduados de un PRE o un politécnico, sino que muchas de ellos (sobre todo en la ED), pueden ser considerados "profesionales de la práctica", y llegan a nuestras aulas en busca de la "teoría" necesaria para hacer más eficiente su práctica productiva.

Se hace necesario entonces, que la preparación de los programas de esa misma asignatura, debe tener en cuenta, a partir del mismo contenido, que parte diferenciada de este necesita uno y cual el otro, atendiendo no al tiempo de permanencia en el aula, sino a las habilidades que se necesita formar en esos estudiantes, que métodos utilizar y con qué medios se puede facilitar este trabajo.

Sucede además que estos mismos profesores deben impartir esta misma asignatura, ya derivada, en otras carreras, pues el perfil del profesional que ahí se forma necesita de los conocimientos, habilidades y valores que esa materia de enseñanza puede aportar; se hace necesario entonces que ese mismo profesor que ya preparó su asignatura para las dos modalidades de estudio, teniendo en cuenta sus peculiaridades, tenga que preparar nuevamente su asignatura, pero ahora, no solo teniendo en cuenta lo anteriormente explicado, sino además, el modelo del profesional al que se enfrenta y los objetivos del año por el que transita ese estudiante.

Es decir que sintetizando lo anteriormente expuesto, estamos en presencia de una disciplina que se complejiza en su accionar al converger en ella, interactuar e interrelacionarse, diferentes tipos de profesores (llamémosle tipología de profesores), modalidades de estudio y materias de enseñanza, complejizándose más cuando se vuelven a interrelacionar al prestar servicio a otra carrera.

Estamos diciendo entonces, que esta disciplina adquiere una nueva cualidad, que es la de ser compleja. No compleja en ella como subsistema de un sistema mayor, que es el de la carrera en el proceso de formación de profesionales, sino compleja en su estructura, a partir de las relaciones que se dan en ella.

Es pues la Disciplina Docente Compleja una estructura curricular, subsistema de la carrera en el proceso de formación de profesionales, donde se aprende lo que se debe aprender, que tiene como particularidades en el análisis y relaciones didácticas, interacciones de diversos tipos: las que se establecen entre las modalidades de estudio, la tipología de profesores y las materias de enseñanza y otras dadas, además, por su presencialidad en otras carreras, para dotar a los sujetos de conocimiento, habilidades y valores en su formación profesional y que se enfrenten desde el modelo del profesional bajo el cual se forman, a los problemas propios de su profesión y sean capaces de resolverlos de manera competente.

Pero, son todas las disciplinas docentes, ¿complejas? No.

La Disciplina Docente Compleja esta presente en aquellas carreras donde las disciplinas tengan las siguientes características:

• Es conducida tanto por profesores a tiempo completo como profesores tiempo parcial.

• Se imparte en todas las modalidades de estudio.

• Contiene más de una asignatura.

• Tienen presencialidad en más de una carrera.

• Sea una disciplina básica o básica específica de la carrera.

Presenta además los siguientes grados de complejidad:

1. Se da en las disciplinas donde estén presentes toda la tipología de profesores, las modalidades de estudio y las relaciones entre materias.

2. Se imparta una o más asignaturas en otras carreras y otras modalidades de estudio.

3. Se manifiesta cuando se integran dos o más disciplinas o asignaturas y conforman una nueva asignatura o disciplina que se imparte en otras carreras y en todas las modalidades de estudio.

Teniendo en cuenta lo anterior, se ha podido constatar, que tanto los profesores a tiempo parciales, como los a tiempo completos, presentan dificultades con el trabajo docente en esta modalidad, se propone entonces la preparación del claustro de profesores perteneciente a esta estructura curricular tomando como base la semipresencialidad y las relaciones intermaterias, pues esto propiciaría que el profesor en la misma medida que va impartiendo docencia va siendo preparado, guiado y evaluado atendiendo no solo a las deficiencias y problemas que se le han detectado en el control al proceso docente de la materia que imparte, sino también teniendo en cuenta las características esenciales de la modalidad a la que pertenece y en las que imparte docencia.

Se necesita entonces que el profesor sea capaz de dominar tanto la materia que imparte como la didáctica, es necesario pues que se acompañe al profesor en este proceso garantizando el dominio y la aplicación de la metodología de las formas del trabajo docente en estas condiciones, lo cual, a juicio de la autora, propiciaría un acercamiento continuo al trabajo en esta modalidad.

Se hace necesario que la preparación metodológica de los profesores en esta disciplina lleve implícita:

• 1- Las formas fundamentales del trabajo docente metodológico.

• 2- Las formas fundamentales el trabajo científico metodológico.

• 3- El conocimiento por parte del profesor del perfil del profesional que se está formando.

¿Dónde se pone de manifiesto lo anterior?

De la práctica pedagógica actual, se conoce que al trabajo colectivo integrado que se realiza en función de la autopreparación del profesor para que tribute a un autoaprendizaje eficiente de los estudiantes, se le denomina trabajo metodológico.

Se conoce, que el trabajo metodológico es un proceso de gestión de la didáctica, en el que intervienen los sujetos personales del proceso (profesores y estudiantes), que tiene dos dimensiones, una didáctica (donde se dan los procesos de instrucción y desarrollo) y una administrativa (donde se ponen de manifiesto las funciones de la gestión).

Tiene como vías fundamentales: el trabajo docente metodológico y el trabajo científico metodológico y estas se materializan en el proceso de preparación metodológica de los profesores.

El proceso de preparación metodológica de los profesores tiene como formas la preparación general e individual de los profesores.

La preparación individual está presente:

La autosuperación: Para que los profesores adquieran, además de los elementos fundamentales para la realización de un trabajo eficiente, una visión más profunda y sólida sobre diferentes aspectos de la ciencia que imparten.

La autopreparación del profesor: Para dirigir acertadamente el proceso docente educativo y posibilitar las condiciones necesarias para obtener resultados positivos.

La preparación general es la preparación del colectivo a través de las formas del trabajo metodológico, es decir, las formas del TDM y el TCM.

Hoy una de las cuestiones más debatidas en nuestra tipología de instituciones de Educación Superior, es lo concerniente a la manera de preparar metodológicamente a los profesores. Existen algunos autores que consideran "muy tradicional" y "tecnicista" el ciclo metodológico que hoy se realiza en los niveles de carrera, disciplina docente y año académico y proponen la implementación en esta preparación del llamado "blended learning" o el aprendizaje "on-line" como también se le llama, alegando que la preparación metodológica que se realiza en estos colectivos es ineficiente, razón de peso que implica que una de las falencias que hoy se presenta en la práctica pedagógica actual es que: el trabajo metodológico no tributa a una gestión eficiente del proceso docente educativo.

Esto es cierto, pero a juicio de la autora, no todo el problema es la consideración de que el ciclo metodológico que hoy se aplica sea tradicional o no, sino que el problema está centrado en la planificación, organización y ejecución que se hace del ciclo en cuestión, ciclo que se realiza año, tras año, semestre tras semestre, sin embargo la realidad impone que los profesores, continúan con dificultades, en el diseño del programa de la asignatura, en la planificación del sistema de clases (que en ocasiones no se confecciona), en la metodología de la clase encuentro y en la implementación de las formas del trabajo docente en la semipresencialidad, en la selección de los métodos y medios en relación directa con el contenido y la habilidad que se quiere formar, que no siempre esta presente todo el colectivo de profesores, en tanto no se logra la participación y permanencia de los profesores en el momento de la reunión, no existe flexibilidad a la hora de seleccionar con que formas debe realizarse el tratamiento metodológico, no se realiza el ciclo atendiendo a los problemas individuales de cada profesor.

Se conoce que el ciclo metodológico actual, es:

• Autopreparación del profesor.

• Preparación de la disciplina- asignatura.

• Reunión metodológica.

• Clase metodológica.

• Clase abierta.

• Clase de comprobación.

• Control a la actividad docente.

Puede preguntarse entonces, ¿en qué momento del ciclo, puede determinar el jefe de disciplina docente compleja, donde radica la causa de los problemas que hoy presenta su colectivo?.

¿Qué forma de trabajo metodológico puede permitirle, determinar, cómo realizar una planificación que vaya de lo general a lo individual, teniendo en cuenta las dificultades detectadas?

¿En qué forma de trabajo metodológico, desde un trabajo que parta de lo general hacia lo individual, integrar a los PTC con los PTP?

Atendiendo a lo anterior y tomando en consideración las interrogantes planteadas, se propone como una forma de trabajo docente, que permite determinar al jefe de disciplina docente compleja, donde radica la causa de los problemas que hoy presenta su colectivo desde lo general a lo individual al diagnóstico metodológico o diagnóstico de los problemas metodológicos.

Para muchos autores, de la esfera de las ciencias sociales, el diagnóstico ha sido considerado como un conjunto de instrumentos que se utilizan para la constatación de un problema científico, social, económico, es decir de cualquier rama de la ciencia en general. Para otros es un proceso, en tanto para las ciencias médicas es la manera de enseñar al médico cual es el origen del dolor del paciente.

La importancia que tendría entonces el diagnóstico en el trabajo metodológico de las Disciplinas Docentes Complejas, y en particular para la gestión del jefe de Disciplina Docente Compleja, es esencial, en tanto permitiría conocer las particularidades de un sujeto en un momento (o período) determinado, las causas de sus dificultades e insuficiencias, sus potencialidades, nos permite caracterizarlo desde el punto de vista de su desenvolvimiento docente, científico y en general.

Es decir que desde el punto de vista metodológico el diagnóstico se realiza para poder gestionar más eficientemente el modo de actuación del docente, y en sentido más amplio, la preparación metodológica del profesor, de acuerdo a sus necesidades docentes, científicas e investigativas, tanto generales como individuales. Este es su objetivo fundamental.

Sí se realiza un análisis casuístico de las regularidades que se presentan en el proceso docente educativo, puede observarse que si bien se realiza el control al proceso docente educativo de una manera sistémica, este de por sí no garantiza el conocimiento de donde y por qué presentan problemas los profesores, pues no se le da seguimiento y no se realiza un análisis derivado de este control, una veces por desconocimiento (tanto del jefe de carrera o del jefe de disciplina), o por no dominio de cómo tiene que realizarse el análisis y seguimiento de las dificultades detectadas, toda vez que tampoco sabe que hacer con ellas.

Por lo tanto no puede realizarse fructíferamente la dirección y control del proceso docente educativo y por ende el trabajo metodológico en las disciplinas docentes complejas, así como perfeccionar este proceso sin el análisis individual del trabajo del profesor.

Es entonces que si la eficiencia del trabajo del profesor se comprueba por la calidad de los conocimientos, hábitos y habilidades de los estudiantes en un periodo de tiempo determinado, su criterio de medida fundamental estriba en los resultados docentes y educativos a los objetivos de los mismos plasmados en el programa. Cabe preguntarse entonces, ¿cómo encontrar el eslabón débil en el trabajo del profesor?

El análisis del trabajo de un profesor debe realizarse durante un periodo de tiempo determinado, periodo que brinde una noción lo suficientemente completa de su sistema de trabajo, que posibilite a su vez un análisis del programa confeccionado por el profesor, ya que sólo en el estudio de los temas del programa de la asignatura se puede obtener una noción sobre el sistema de métodos que domina y utiliza el profesor, sobre su habilidad de promover la actividad cognoscitiva de los estudiantes, sobre los procedimientos de control de los conocimientos adquiridos y las habilidades desarrolladas en las diferentes formas del proceso docente.

La planificación es una de las funciones primordiales en el trabajo del profesor; el estudio de toda la planificación realizada permite al jefe de disciplina conocer los hábitos y habilidades en el diseño y planificación de toda la actividad docente, su capacidad para crear el modelo para sus actividades y prever todas las variantes posibles a aplicar en dependencia de los niveles alcanzados por sus estudiantes.

Se hace muy difícil realizar en una clase o en un encuentro, la observación directa y completa que requiere un análisis individual del trabajo del profesor ya que esta tendría que abarcar muchos aspectos y problemas que necesitan ser observados en diversas clases, es decir, no debe realizarse un control a clases solamente cumpliendo una meta o realizando una guía de innumerables preguntas a responder solo por cumplir, sino que debe realizarse un verdadero análisis donde se ponga de manifiesto, desde la preparación demostrada por el profesor hasta el nivel de conocimientos hábitos y habilidades alcanzado por los estudiantes; por ello debe hacerse una planificación de este control teniendo en cuenta el conocimiento previo de cuales son aquello profesores que más atención necesitan, por la gravedad de los problemas que han presentado, así como los profesores noveles que recién se incorporan.

Conforme al resultado del análisis del sistema de las clases del profesor se revela un cuadro detallado y completo de cómo el profesor gestiona el proceso docente educativo, cómo se realiza en su actividad el requisito fundamental ante el proceso que se da en la relación enseñanza – aprendizaje – educación – desarrollo. Los resultados del trabajo del profesor por un tema completo posibilitan hacer las conclusiones concretas sobre los meritos y deficiencias en el trabajo del profesor y definir concretamente qué hay que hacer para superar esas deficiencias.

Puede considerarse entonces el diagnóstico metodológico como una forma de trabajo metodológico en las disciplinas docentes complejas, en tanto

Al decir del Doctor Carlos Álvarez de Zayas la forma es el componente operacional que configura y organiza externamente un proceso, por lo que el diagnóstico metodológico o diagnóstico de los problemas metodológicos puede ser considerado como forma, pues le permite al jefe de disciplina docente compleja configurar, organizar y diseñar el proceso de preparación metodológica de los profesores atendiendo a sus resultados, porque él escoge, que forma de trabajo docente metodológico, tanto para los problemas generales como para los problemas individuales, se va a poner en práctica en el ciclo de trabajo metodológico.

Quiere decir esto que el ciclo que se propone, no tiene que darse por completo, sino que es atendiendo, a esa generalidad y a esa individualidad que forma de trabajo docente metodológica se debe poner en práctica.

• Puede ser planificado, organizado y controlado, es decir esta en relación directa con la gestión que realiza el jefe de disciplina docente compleja.

• Se realiza tanto de manera individual como colectiva.

• Puede ser realizado de manera tutorial, en la que un profesor con falencias metodológicas es atendido tanto por el jefe de disciplina docente compleja como por un experto, o en forma grupal cuando el problema metodológico se manifiesta de manera general.

• Puede realizarse, si se quiere, en dos momentos o simultáneamente, uno con los profesores a tiempo completo y otro con los profesores a tiempo parcial o indistintamente, atendiendo a las particularidades y características de la tipología de profesores que inciden en la disciplina docente compleja y el tiempo de que dispone cada miembro del colectivo.

• Tiene relación directa con el resto de las formas que componen el ciclo propuesto.

El entrenamiento metodológico conjunto: Se constituye con el objetivo de preparar a los profesores en el diseño y organización del sistema de clases a partir de la confección del programa de la asignatura, partiendo de realizar un diagnóstico, que determine donde radican las principales dificultades en la planeación de ese sistema y que involucre responsablemente a toda la tipología de profesores

Gestionar científicamente significa partir de un conocimiento profundo del objeto de dirección, es decir, de la personalidad y el profesionalismo de cada uno de los integrantes del sistema; conjugar sus intereses individuales y colectivos con los institucionales y sociales; ser capaz de revelar las tendencias progresivas de su desarrollo; planificar, organizar, regular y controlar su movimiento en correspondencia con tales tendencias; descubrir a tiempo sus contradicciones internas y facilitar su solución; superar los obstáculos que se presentan en el camino; asegurar la unidad del sistema que se dirige; y garantizar que cada uno de sus componentes cumpla su papel en consonancia con los objetivos planteados.

Para lograrlo, estamos compulsados a instaurar una forma de gestión que permita conjugar sistémicamente tales elementos; lo cual es perfectamente realizable en la actualidad.

Objetivos generales entrenamiento:

•  Elevar la calidad del proceso docente-educativo y de todo el trabajo del profesor, a partir de una planificación consciente y sistémica.

* Analizar y valorar el sistema de clase de la asignatura a partir del diseño del programa de la asignatura.

•  Lograr la capacitación en la práctica, de manera sistémica y sistemática, de toda la tipología de profesores.

•  Asegurar la idoneidad de todos los docentes en ejercicio.

En esta forma de TDM puede ponerse en práctica los llamados métodos de aprendizaje en el puesto de trabajo.

Encuentros metodológicos: Constituye la orientación a los profesores un tema de la Disciplina o en su defecto una Unidad del Programa, relacionado no solo con una disciplina en específico, sino con otras disciplinas o ciencias. Ofreciendo en su desarrollo la información más reciente relacionada con esta ciencia para proponer cuales son los métodos, medios y formas del proceso de enseñanza aprendizaje que se utilizarán en el tratamiento de estos contenidos.

Tiene como finalidad:

• Definir el enfoque que se le debe dar a un Tema de la Disciplina o a una Unidad de un Programa.

• Orientar el sistema de clase.

• Orientar a los profesores en relación a los métodos y medios más recomendables para el desarrollo de las clases.

• Analizar el enfoque científico que la unidad debe tener.

• Destacar los contenidos que puedan presentar dificultades para los estudiantes y el tratamiento requerido.

• Definir los medios convenientes para apoyar la acción del método en desarrollo de la clase.

• Orientar las diferentes formas de control que se pueden aplicar.

La preparación para el desarrollo de esta actividad debe realizarse mediante un estudio previo y profundo (diagnóstico), por parte del Jefe de Disciplina, o el profesor seleccionado a tal efecto, del Tema de la Disciplina o Unidad del Programa en cuestión, que se debe realizar durante el periodo intensivo de preparación metodológica (Semana Introductoria) y reforzar este estudio (diseño y Planificación) en los días previstos en el plan de trabajo metodológico de la disciplina docente compleja.

Consulta metodológica: Es la forma fundamental del trabajo metodológico que permite un acercamiento más directo entre profesor y jefe de disciplina docente compleja, en tanto, en ella los profesores pueden aclarar las dudas que les han surgido en el proceso de enseñanza – aprendizaje, tanto de carácter pedagógico y didáctico como de un contenido específico de una disciplina dada.

Propicia además la posibilidad de ser una vía de control sobre la marcha de la aplicación de la estrategia metodológica, el plan de trabajo metodológico de la carrera, el plan de trabajo metodológico de la disciplina docente compleja, los programas de las disciplinas, los programas de las asignaturas, entre otros. Es decir son como un "termómetro" que posibilitará, con su información las medidas a tomar por el coordinador de la disciplina así como la determinación de generalizar un planteamiento o no.

Pueden ser por escrito o personales, previa solicitud y con carácter mediato o inmediato. Ha de diseñarse y planificarse siempre por el jefe de Disciplina Docente Compleja que día y en que horario puede realizar la misma, no obstante puede utilizarse el procedimiento de citar directamente a los profesores cuando por razones de la carrera o del resto de las disciplinas, se considere necesario utilizar está vía a fin de evacuar dudas y obtener un control, de cómo marcha su actividad pedagógica.

Es necesario tener en cuenta una adecuada planificación del horario de consultas, de manera que exista la posibilidad real de que asista todo el que realmente la necesite y de que pueda ser atendido sin afectar sus funciones docentes.

Dentro de la consulta pueden considerarse una de las técnicas del diagnóstico, el muestreo de documentos, que posee la ventaja de obtener información válida y con economía de tiempo; se basa en la revisión de la planificación y preparación de las clases de un profesor o sea su autopreparación, así como la proyección de preguntas escritas y proyectos de prueba, la revisión de pruebas ya aplicadas, esto en mayor medida nos propicia un conocimiento del dominio del contenido que tienen los estudiantes y las insuficiencias que aún existen, lo que posibilita trazar acciones de trabajo metodológico en la disciplina. De esta manera se evalúa la eficiencia y preparación de los profesores en relación al dominio que tienen los mismos del tema que están trabajando y los conocimientos y los objetivos que de él poseen. Cuando se revisan los resultados de los exámenes estamos realizando una evaluación el desempeño de los profesores y de los estudiantes.

Tutoría Metodológica: Debe partir de la caracterización de los docentes con el objetivo de conocer que necesitan para llevar a cabo un eficiente trabajo docente educativo. Debe tenerse en cuenta en esta tutoría el dominio de los profesores designados como tutores, deben ser profesores con mayor categoría docente y en lo posible un elevado grado científico.

El tutor, previo consenso con el profesor tutelado, analizará aquellos Temas o Unidades donde se centran las mayores dificultades que presenta su tutelado, para guiarle tanto en su autopreparación como en su autosuperación, indicándole las fuentes bibliográficas fundamentales y complementarias en las que se puede apoyar.

El tutor y el/los tutelado (s) deben llevara cabo un plan de trabajo acorde con las necesidades objetivas de los segundos, que puede ser confeccionados por etapas, previa indicación por parte de éste de las cuestiones a resolver en cada etapa.

Estás indicaciones serán siempre bien precisas y de carácter individual, el tema a tratar, que puede ser analizado en una consulta previamente acordada, puede estar dividido en subtemas.

La naturaleza de esta tutoría puede estar relacionada con un intercambio de opiniones, donde al profesor se le debe brindar la mayor independencia posible para la realización de su trabajo docente, independientemente del control que se realice sobre el mismo.

Esta tutoría puede considerarse optativa, es decir, no es una imposición del colectivo, sino una opción a considerar, sobre todo para los nuevos profesores instructores que se insertan en el proceso.

Es decir que el tutor metodológico es aquel profesor responsable y capaz de integrar los sistemas de conocimientos de las disciplinas docentes complejas en cada carrera, con suficientes conocimientos pedagógicos y didácticos, cuyos modos de actuación se identifican con la consulta metodológica, promoviendo la autopreparación y superación del tutelado a quien acompaña durante todo el proceso docente educativo, hasta el logro de los objetivos propuestos por parte del tutelado.

Clase – Encuentros metodológicos abiertos: Es quien completa el ciclo de las formas utilizadas en el desarrollo de la preparación metodológica, decimos ciclo por la estrecha relación que existe entre el entrenamiento metodológico, la clases – encuentro metodológico y la clase – encuentro abierta.

Generalmente la clase – encuentro abierta se prepara en función de uno de los Temas o Unidades tratados en la Clase – Encuentro Metodológico, pero puede darse el caso que por necesidades del colectivo de disciplina, se diseñe una clase de un Tema o Unidad no analizada con anterioridad.

Tiene como objetivo proporcionar ayuda a los profesores que participan, ejemplificando el desarrollo del encuentro en todos sus aspectos.

Para la selección del contenido a desarrollar en la Clase (Encuentro) abierta, desempeña un papel trascendental la necesidad que tenga el colectivo de disciplina docente compleja, de estudiar determinado contenido y desarrollarlo con los profesores; su grado de complejidad, el uso requerimiento del uso de determinados métodos, medios en el proceso de enseñanza – aprendizaje y en general hace suyos las experiencias o posibilidades de algunos profesores en el desarrollo del contenido y el tratamiento metodológico de dicho tema.

Para la organización de está actividad debe tenerse en cuenta su ubicación en el Plan de Trabajo Metodológico de la Disciplina Docente Compleja y el horario en que se ofrecerá con vistas a lograr la mayor participación de profesores.

La planificación de la clase presupone: ver el programa, las orientaciones metodológicas y toda la bibliografía necesaria. Es incorrecto ir a observar una clase abierta, con sólo conocer de antemano, el día, la hora y el lugar.

Es el jefe de disciplina docente compleja quien debe seleccionar quien ejecutara esta clase (encuentro), cuyos resultados de trabajo constituyen un logro en el proceso docente educativo y su experiencia pueda ser un aporte eficaz a la preparación para el resto de los profesores del colectivo.

Esta clase abierta no cumplirá su objetivo, sino se lleva a cabo un análisis objetivo de lo acontecido en la misma, durante el tiempo planificado para ello.

Este análisis debe partir del autoanálisis del profesor que la desarrolló, para posteriormente analizar con el colectivo de profesores que participó, realizando un análisis profundo, buscando la respuesta a los objetivos del encuentro, la correspondencia con lo planteado en el plan metodológico de la disciplina, haciendo los señalamientos necesarios. Debe derivarse de este análisis, las conclusiones referidas a los aspectos que se considerarán para el futuro.

Control al proceso docente metodológico: Es la forma que cierra el ciclo de trabajo docente metodológico, es la forma que permite comprobar y supervisar cómo se cumplen la orientaciones metodológicas sobre la planificación, organización y desarrollo del proceso docente educativo e implica el análisis de las causas de las desviaciones y la determinación de las medidas a tomar para su rectificación.

Debe tenerse en cuenta que controlar no significa solo descubrir defectos y problemas, sino también, revelar las mejores experiencias con el fin de divulgarlas y generalizarlas.

El control debe ser sistemático, continuo y dinámico y debe abarcar todas las esferas de la actividad objeto de control. Su fuerza consiste precisamente en que este ayuda a acumular las experiencias de avanzadas, encuentra los métodos y las vías más eficiente del mejoramiento del trabajo del colectivo. Es además un medio de educación de fortalecimiento de la disciplina docente compleja.

Fig. 1 El ciclo de trabajo docente metodológico. Fuente: elaboración propia de la autora.

Puede combinarse en este ciclo una formas con otra, por ejemplo, puede darse en un entrenamiento como en un encuentro una consulta o una clase metodológica, o puede darse en un encuentro o un entrenamiento.

Formas de trabajo científico metodológico

Trabajo científico metodológico del profesor. Se refiere a la actividad investigativa que desarrolla el docente en el campo de la didáctica. Su concreción se manifiesta en los resultados obtenidos, que posibiliten la introducción de los mismos, en la práctica educativa, con el fin de su perfeccionamiento. Las vías de manifestación pueden ser: artículos, ponencias para eventos científicos, libros de texto, perfeccionamiento de los diseños curriculares, entre otras.

Seminario científico metodológico. Es una reunión de carácter científico investigativo, cuyo contenido responde, fundamentalmente, a los lineamientos, problemas o temas de investigación, planificado en la instancia que lo realiza.

La superación metodológica es aquella que se programa a través de cursos de postgrado, cursos de superación, diplomados, maestrías y otras vías de superación postgraduada y que se relacionan directamente con el problema objeto de trabajo metodológico.

El trabajo metodológico no programado, es aquel que desarrollan los docentes de la escuela y no aparece registrado en los documentos de trabajo sino que se realiza según sus necesidades y está integrado por: la autosuperación metodológica, la preparación de la asignatura y el sistema de clases y el incidental metodológico.

Se dice entonces que el proceso de preparación metodológica de los profesores(dimensión didáctica) es

El proceso que garantiza desde la integración de los profesores a tiempo completo, los profesores a tiempo parcial, las modalidades de estudios y las materias de enseñanza, teniendo como centro, las relaciones intermaterias, la preparación general e individual de los profesores, tributando así a resolver la contradicción ciencia – profesión que se da en el proceso docente educativo de las disciplinas docentes complejas, propiciando en los estudiantes la realización de un eficiente estudio independiente que tributa a su formación como profesional general e integral.

Siendo la dimensión administrativa la labor que realiza el jefe de disciplina para gestionar el proceso de preparación metodológica del colectivo de Disciplina Docente Compleja hacia su autopreparación en función del autoaprendizaje de los estudiantes que propicie la formación de uno o varios objetivos del modelo de profesional que se está formando, permitiendo resolver la contradicción ciencia – profesión que se efectúa en el proceso docente educativo de las disciplinas docentes complejas.

Puede conceptualizarse entones el Trabajo Metodológico en las Disciplinas Docentes Complejas como el proceso de gestión que desde la Didáctica realiza el jefe de la Disciplina Docente Compleja en función del proceso de preparación metodológica, teniendo como base las relaciones intermaterias a partir de cuya relación se logra la integración de la tipología de profesores, las modalidades de estudios y las materias de enseñanza, en aras de lograr un autoaprendizaje de los estudiantes que conduzca a la formación de un profesional competente, según el modelo del profesional que se forma y propicie a su vez la construcción de las didácticas específicas.

Cuando nos referimos al trabajo metodológico como un proceso de gestión de la didáctica, se está reflexionando en que este debe ser concebido como una sucesión de etapas en la que los docentes, a partir de los resultados de un análisis previo, se ha podido determinar cuáles son aquellos problemas metodológicos que enfrentan y atentan contra el desarrollo exitoso del proceso de enseñanza – aprendizaje en cual se involucran, con el fin de cumplir el objetivo de formación que se propone el proceso docente educativo dándole solución a través de sus acciones al problema social que genera la formación de hombres capaces, con alto nivel científico-técnico y con consecuente conciencia ética (Díaz Domínguez, (1998)). Proceso que debe ser diseñado, planificado y organizado desde una gestión de conocimientos, no solo pedagógicos, sino además, conocimientos prácticos a partir de las relaciones entre las materias de enseñanzas que se trabajen.

Es en la secuenciación de estas etapas donde debe prepararse al profesor a partir de toda la experiencia, pedagógica y científica conocida, mediante un aprendizaje organizacional planificado que permita compartir nuevas experiencias o conocimientos adquiridos por distintas vías o problemas no previstos, que resultan del elevado nivel de contingencialidad de toda acción educativa.

Por tanto, el problema no está, en la conceptualización del término, llevada esta a una "teoría tecnicista", sino que el problema radica, en que, se ha "encasillado" el trabajo metodológico en la elaboración de un "plan de trabajo metodológico", que en muchas ocasiones no se cumple o es una "adaptación" del plan del centro o el departamento, cuando lo que se debería realizar sería, el diseño y planificación de un sistema de actividades que transite de lo general a lo individual, haciendo énfasis en la necesidad de la preparación del trabajo individual de los profesores y que transite desde lo docente, lo investigativo, lo científico, a partir de una gestión de conocimiento didáctica o pedagógica como pieza clave de una autopreparación eficiente de los profesores.

Tiene como base las relaciones intermaterias, en tanto, es a partir de sus siete líneas directrices done se puede conjugar e interrelacionar entre los docentes el trabajo con la formación de hábitos, habilidades, valores, que se forman y perfeccionan mediante el entrenamiento continuo y por lo general, no aparecen aislados sino integrados en sistema.