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Poesía chilena (página 2)

Enviado por jaijune


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5. Epílogo

Como hemos visto a lo largo de todo el análisis, los textos elegidos están absolutamente influenciados por la biografía, es decir, la experiencia personal de Raúl Zurita. Vemos como el Golpe Militar y sus consecuencias, tanto físicas (tortura, hacinamiento, etc.) como psicológicas (pérdida de un sueño, el derrumbe de lo establecido y conocido, el exilio), configuran en Zurita algo así como un detonante, el despertar del poeta. Se podría decir, y hasta el mismo Zurita lo afirma, que la poesía fue la salvación de éste. Gracias a ella sobrevivió, pudo sacar esos "malos pensamientos" de la cabeza. También vemos como su enfermedad influye, en cierta medida, en su obra, y como la obra misma describe las etapas de vida de Zurita. De hecho, al final del libro "Anteparaíso" hay un escrito de Diamela Eltit, una de las esposas de Zurita, la cual vivió toda esa época con él y que dice está feliz, porque el mismo Zurita que escribió "Purgatorio", el mismo Zurita que se cortó la mejilla, se cegó con ácido y creyó que en este mundo no había lugar para la alegría, fue capaz de escribir "Anteparaíso".

Es importante destacar el abismo que hay entre "Purgatorio" y "Anteparaíso" en cuanto a sentimientos. Es decir, el estilo es similar, la tristeza, en algunos casos, también, pero "Purgatorio", tal como su nombre lo indica, habla del horror, la locura y la perdición, dejando al final una gotita de esperanza o luz. En cambio "Anteparaíso", mucho más extenso también, pasa por el dolor, pasa por el sufrimiento, pero llega a la salvación total, a la luz total, a la alegría total.

Además "Purgatorio" se refiere al autor, a Zurita, en cambio "Anteparaíso" habla de Chile y de Latinoamérica. Para finalizar queremos decir que encontramos la poesía de Raúl Zurita fascinante, es toda una experiencia leerlo. Es pasar por la locura, la desesperación, la tristeza, la angustia, etc. Es sentir a los torturados, a los que sufrieron, a los muertos, a todos los chilenos junto a uno. Es llenarse luego de esperanza y júbilo, al ver florecer los pastizales. Es incluso cortarse la mejilla y cegarse con ácido. Uno puede ver e imaginarse todo. Zurita saca al lector de lo normal, de lo corriente. Nos muestra una nueva forma de escribir, casi plástica, porque a medida que uno lee va construyendo, pintando, armando, las imágenes en su cabeza.

Hay un solo punto que creemos es criticable. A nuestro juicio Zurita escribe sólo para un pequeño grupo de personas. No cualquiera lo entiende, partiendo por el hecho de que ni siquiera usa comas, hay que imaginárselas o ponerlas donde uno crea más conveniente. Además para entenderlo hay que saber su historia personal, la historia de Chile en un momento histórico determinado y conocer o saber algo de Chile. Es decir su poesía no es Universal, no es para cualquiera. Para finalizar creemos que es importante mencionar el uso que hace Zurita de los paisajes. En "Anteparaíso", sobre todo, los usa como escenario y como personajes principales. Cada paisaje es un sentimiento, una etapa, un símbolo.

El presente análisis nos sumergió en un mundo para nosotros desconocido. Conocimos otras facetas de la poesía, probamos su intensidad y la fuerza que ésta puede llegar a alcanzar. Hasta cierto punto nos volvimos un poco locos, palpamos la desesperación, sentimos la angustia. Pero luego vimos la luz, la esperanza, la alegría. Creemos que Zurita es un poeta que debe ser leído, su mensaje es un mensaje por la vida, por la esperanza, siempre por la luz.

6. Bibliografía

Internet:

  • www.angelfire.com/nj/poesia/prznac/rzurita.html
  • www.letras.s5.com/archivozurita.htm
  • www.geocities.com/invasorcl/pages/zurita/articulo.htm
  • www.chilepoesia.uchile.cl/zuritapoema2.html
  • http://galeon.hispavista.com/espartako/poetas/

– "ANTEPARAÍSO", Raúl Zurita, Editores Asociados, Santiago de Chile, 1982. – "PURGATORIO", Raúl Zurita, Editores Asociados, Santiago de Chile, 1979.

7. Anexos

1.) Poemas Las Cordilleras del Duce Frente a la cordillera de los Andes Desde el oeste como la noche Las cordilleras del Duce avanzando i. No son blancas las cordilleras del Duce ii. La nieve no alcanza a cubrir esas montañas del oeste

Detenidas frente a la cordillera de los Andes aguardando como un cordón negro que esperara la subida final de todas ellas allá en el oeste solas agrupándose tras la noche

iii. Porque frente a los Andes se iban agrupando como la noche del oeste

iv. Por eso la nieve no cubre las cordilleras del Duce Sus cumbres son la noche de las montañas Ciñéndose de negro frente a las nieves de Chile como si los nevados no fueran otra cosa que espinas hiriendo la noche y ellas pusieran entonces la corona sangrante de los Andes

v. Por eso de sangre fue la nieve que coronó las cumbres andinas

vi. Porque sólo la muerte fue la corono ciñó de sangre el horizonte

vii. Y entonces ya coronados todos vieron las cordilleras del Duce ceñirse sobre Chile sangrantes despejadas como una bandera negra envolviéndonos desde el poniente Aunque No Sea Más Que Una Quimera

i. Y quién diría si enverdecen de nuevo las llanuras

ii. Quién si cantaran de un nuevo verdor estos pastos Porque quién diría si los quemados pastos florecieran con los valles y los valles con Chile entero cantaran entonces la gloria que deslumbra los paisajes: la quimera de estos pastos

iii. Chile florecería así la quimera sobre sus pastos

iv. Todos se verían escuchando entonces la gloria que les cantó por las llanuras Porque muriendo verían taparse los valles con las glorias que cantaban y todos resonarían entonces como una quimera que les floreciese cubriendo estos paisajes: el cantar de las llanuras

v. Chile escucharía entonces cantar los pastos de las llanuras

vi. Hasta las piedras se abrazarían allí embelesadas sobre el pasto

vii. Y quién diría entonces que no florecen de nuevo los pastos de nuestra vida aunque no sea más que una quimera cantándose todos de gloria la reverdecida

2.) ¿Qué Es El Paraíso? ¿Qué Es El Paraíso? No es un poema,..sin duda no es Dios ni imágenes proyectadas. Sientan los ruidos de la calle el Paraíso no es un libro ni una presentación de sueños de fe o de religión. ¿Qué es el Paraíso? Gentes de Hiroshima: …………… ¿Qué es el Paraíso? Trabajadores chilenos: ………….. ¿Que es el Paraíso? Naciones de la tierra: ……………. ¿Qué es el Paraíso? Desde los lugares de este exilio sudamericano, como uno repetido, te hablo del trabajo de asumir en los límites de nuestra vida la construcción del Paraíso. Yo soy un hambriento, esto es, uno repetido en el hambre. Yo sufro, esto es, uno repetido en el sufrimiento. Yo tal vez esté condenado, esto es, uno repetido en la condena. Yo soy un trabajador del arte y moriré, pero el trabajo del que te hablo no e una preparación para morir, escuchen el latido de sus propios corazones. Yo trabajo en la obra del Paraíso, pero como uno más en el recorrido de su propia vida, lo que no es trabajar con el cuerpo o con el cerebro únicamente. Trabajar con la vida que uno es significa la proposición de un recorrido de experiencia para el arte, porque nada del arte o de esa forma de arte que es la religión ha estado por la elaboración concreta de vida, sino siempre han sido operaciones proyectadas sobre la muerte. Y trabajar con la vida que uno es tampoco significa su clausura en imágenes y conceptos como en Platón, escucha; es trabajar con la corrección sistemática de la propia experiencia asumida como un borrador de la experiencia que será, de la vida que alguna vez será. Es un proyecto de construcción de un nuevo contenido y de una nueva forma social de experiencia. Así, cuando en estos páramos sudamericanos alguien es privado del sustento o es inducido a la muerte por terror o inanición estamos haciendo vida, te digo, dolorosamente, pero estamos preparando un modo distinto de trabajo o que es hacer de la corrección de la práctica en la vida una práctica de arte para la vida. Entonces el trabajo en la obra del Paraíso no es sólo un trabajo sino mira, no es sólo un trabajo de arte sino de corrección del dolor de la propia experiencia. Yo persisto en ello, pero no como un escritor o un artista, te digo, no como eso solamente, sino más bien como un obrero de la experiencia; como un obrero que penosamente trata de ir corrigiendo los borradores de su propio camino en la experiencia. Como uno cualquiera que en su práctica individual quisiera, de manera perentoria, impugnar el individualismo y las ganancias lícitas de los individualistas. El individualismo es la plusvalía que el terror frente a la muerte le saca al terror frente a la vida per me si va tra la perduta gente. Tan muerte como la escultura de La Pietá. El individualismo sólo proyecta ficción, es vida produciendo ficción. Te hablo de esto que a la inversa es producir, desde las grandes ficciones colectivas: desde la utopía, toda esa superposición oculta de proyectos que es nuestro propio camino en la experiencia. Vida produciendo ficción es finalmente lo que tu conoces como Historia del Arte o bajo la forma de los Grandes Textos literarios de arte. Ficción produciendo vida esa es una práctica nueva, no para el arte en el arte sino para el arte en la vida, te digo, es una actividad productora de un nuevo sentido de belleza en la vida. Entendamos entonces nuestra propia actividad productora como una práctica para el Paraíso. Como una práctica que asumida desde el dolor de la propia experiencia, transforme la experiencia del dolor en la construcción colectiva de un nuevo significado. Porque tal como las obras individuales de arte son, en el arte, modos psicológicos de exterminio de la actividad productora en la ficción; la soledad, el terror, el hambre, son -en estos pobres poblados- modos físicos de exterminio de la actividad productora en la experiencia. Entonces asumir en los límites de nuestra vida la construcción del Paraíso, significa asumir conscientemente el trabajo real del dolor, escúchame: significa asumir los contenidos concretos del dolor como una forma de corrección de la experiencia e base a un proyecto socialmente significativo de vida humana. Entender que es la vida de todos, es entonces dar por concluidas las peores formas de la antigüedad para hacer de cada práctica de arte como un trabajo más, de cada trabajo como una obra de arte, una aplicación activa, propagandística, de nuestras opciones colectivas. Te digo, es confirmar en nuestros caminos todos los posibles de estampar una nueva marca sobre estos lugares sudamericanos. Esa marca es lo que la antigüedad olvidó de la belleza y nosotros, estos cabezas negras, afirmamos nuestro derecho a un trabajo en la belleza. Esa es finalmente la teoría del sueño del Paraíso. ¿Qué es entonces el Paraíso? El cielo es el lugar que hemos ido llenando siempre con las carencias de la vida. Como tantos, despojado, el año 1975 inicié mi propio trabajo entendido como una práctica para el Paraíso, no para el cielo vacío. El inicio de su camino se abre con el acto de haber marcado mi cara porque todavía no era posible marcar el cielo con el hecho corregido de nuestras vidas, pero en el documento de esa quemada se relaciona este acto autodoloroso con la noche estrellada. Yo sé (y mis amigos también) que cuando podamos rediseñar nuestros trabajos y por ende romper con cualquier obligación al servilismo físico o mental, todos -muertos y vivos- podremos por fin, con el producto de nuestra práctica aquí -no con nuestro desvarío, revertir nuestras carencias y por ende corregir el cielo. Ese es el camino de mi vida, como uno más repetido, el Infierno, el Purgatorio y el Paradiso del Mein Kampf de Raúl Zurita, y este título es apenas una pequeña, ínfima metáfora del inferno. Allí también se menciona el amor, aunque creo que es mejor no insistir en esa palabra, a lo menos por ahora. Pero la nueva marca en el cielo, no en la cara, ese será el Paraíso.

 "Mein Kampf" de Raúl Zurita Fuente: Internet

4.) El "Todo" De Zurita "Cada vez creo más que no es uno el que habla, que 'se' escribe y que a todos, no solamente al poeta, nos ha tocado ser los intermediarios de un diálogo que nos sobrepasa infinitamente. Es el diálogo de Dios consigo mismo, que habla a través de todas las cosas, a través de las estrellas… A nosotros, hombres de esta tierra, nos ha tocado ser los intermediarios de una parte muy pequeña de esa conversación general de todas las cosas. Probablemente son los poetas a quienes les ha tocado verbalizar ese diálogo, ese monólogo, pero es muy poco lo que alcanzamos a entender. En realidad mi nombre, mi voluntad, todo lo que yo entienda por inteligencia, son banalidades. Esta conversación general nos sobrepasa y nos trasciende" Raúl Zurita

5.) El Por Qué De Las Frases Esas frases que pusimos a lo largo del análisis de "Purgatorio" están ahí, porque quisimos ponerle al mismo trabajo un poco del estilo de Zurita. Esas son las frases que escribió en el cielo de Nueva York. A lo largo de "Anteparaíso" aparecen las fotografías de lo escrito en el cielo, entre los capítulos. Nosotros decidimos incluir la que más nos gustó o impresionó de cada "intermedio" entre capítulos, entre los mismos análisis de los poemas.

6.) Primera Página "Purgatorio"

 

7.) Diagnóstico Psiquiátrico

8.) Fotos de Raúl Zurita

 

 

 

 

  

 

 

Autor:

Colombina Schaeffer, Tatiana Romero, Jaime Jünemann

Partes: 1, 2
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