Efectos adversos del progreso tecno-científico: una breve pincelada (página 2)
Enviado por Ruperto González Amador
Esto demuestra que la ciencia como actividad tiene su propio proceso de desarrollo, su dinámica y su integración dentro del sistema total de las actividades sociales, de manera que se debe tener en cuenta la manifestación en primer plano de los nexos ciencia-política, ciencia-ideología, ciencia-producción y en general ciencia-sociedad. La ciencia como producción, difusión y aplicación de conocimientos es una actividad humana y no se puede dar al margen de las relaciones sociales, sino penetrada de determinaciones práctico-materiales e ideológico-valorativas, tipo de actividad en las que ella influye considerablemente.
La tecnología, en estrecha e indisoluble fusión con la ciencia y la técnica, tiene también una alta carga de entrelazamiento con los fenómenos sociales, especialmente los políticos ideológicos y su carácter clasista y partidista. La tecnología no se identifica con productos ni tampoco con la ciencia aplicada. (Jover. P. 43) Hay manifestaciones propiamente tecnológicas que se determinan por circunstancias sociales o por decisiones políticas, por racionalidades económicas, valores e intereses. Las relaciones de la tecnología con la sociedad son muy complejas y no hay dudas de que está sujeta a un cierto determinismo social. "La evidencia de que ella es movida por intereses sociales parece un argumento sólido para apoyar la idea de que la tecnología está socialmente moldeada". (Jover. P.43). y esta debe ser vista como un proceso social, que integra factores psicológicos, sociales, económicos, políticos, culturales; siempre influido por valores, intereses y necesidades. (p. 45).
En la medida en que el progreso científico técnico se ha acelerado en los últimos años, se ha ido afirmando la interdependencia de la ciencia, la técnica y la tecnología. Aparece necesariamente un nuevo término, la tecnociencia: una solución idiomática para expresar la íntima relación entre ciencia y tecnología y la depreciación progresiva de sus límites o fronteras, sin hacer desaparecer las identidades o peculiaridades entre una y otra. Para enfoques más modernos o contemporáneos el interés fundamental se desplaza hacia la interrelación ciencia-tecnología y de estas con la sociedad.
Es muy importante a esta instancia tener presente el condicionamiento del desarrollo tecnocientífico por fines, intereses y valores de los actores sociales, es decir; clases, grupos, empresas, grupos de presión, cárteles, consorcios…. que están en capacidad de tomar decisiones financieras y políticas y desdeñar intereses vitales de los pueblos o la sociedad. Esto es un punto de apoyo para comprender el grado de compromiso intelectual y ético que le corresponde a dichos actores y estructuras influyentes o determinantes en las políticas científicas. (p.122)
El desarrollo tecnocientífico depende de decisiones humanas, por lo que no se puede valorar en abstracto la maldad o bondad de la ciencia y la tecnología y pueden ser condenables o no según los fines que pretendan y los resultados que produzcan a las personas, a la naturaleza o a la sociedad; esto demuestra que todo sistema tecnocientífico está sujeto a evaluaciones morales. (p.126)
Existe una correspondencia directa entre el desarrollo tecnocientífico y la polarización económico-financiera. Evaluado este fenómeno a partir de los indicadores de calidad de vida, tiene un efecto evidentemente negativo con relación al bienestar de buena parte de la población mundial, a decir; el capital de las tres personas más ricas del mundo, es superior al PIB de los 48 países menos desarrollados. El 20% más rico tiene el 93% de INTERNET, igual que ocurre con la biotecnología aplicada a la medicina y la agricultura. (L. Bombino. P.129) Un pequeño párrafo que utiliza el Dr. L. Bombino en su obra "El Saber Ético de Ayer a Hoy" (T1. p.129) del Informe de Desarrollo Humano de la ONU dice: "al definir agendas de investigación, y en las discusiones sobre el dinero de los productos cosméticos innecesarios y los tomates de maduración lenta, van más arriba en la lista que los cultivos resistentes a la sequía o una vacuna contra la malaria". Más de tres cuartas partes de los usuarios de INTERNET viven en países desarrollados que cuentan con el 14% de la población mundial. (p.129).
El capitalismo ha reaccionado en este proceso creando mecanismos de privatización del conocimiento, reforzando la propiedad intelectual, desplazando el financiamiento y la ejecución de las investigaciones hacia el sector empresarial privado y con mayor selectividad del personal calificado. (L. Bombino. P.130)
Cuán peligroso y nefasto se proyecta la concentración de recursos tecnocientíficos en manos de unos pocos. ¿Qué tratamiento y perspectiva tendrá el respeto por la dignidad y la igualdad de todos los seres humanos? Sin embargo es escasa la atención al uso del conocimiento científico como forma de incrementar las desigualdades sociales; fenómeno que no es esporádico, es bien cotidiano y creciente, es una vía de agresión y neocolonización, es un proceso de mutilación de culturas e identidades nacionales, étnicas, razas, credo y no parece existir una conciencia ética sobre ello y tal parece que el fenómeno se diluye en la compleja madeja político económica en que está envuelto el mundo y la humanidad.
A esto se suma que el conocimiento, la ciencia y la tecnología ejercen también una influencia cultural enorme, generando nuevos símbolos, valores, modificando los estilos de pensamiento, transformando nuestras condiciones de vida.
Cuba construye su sociedad socialista realizando un importante esfuerzo de universalización del conocimiento que permita su más amplia apropiación social de modo que el conocimiento pueda desarrollar entre nosotros la función social transformadora, enriquecedora de los seres humanos que todos deseamos
Forman parte de esta problemática cuestiones que inquietan cada vez más a la humanidad como: la protección del medio ambiente, la utilización racional de los recursos naturales, el abastecimiento de productos alimenticios, la búsqueda de nuevas fuentes de energía, la potencialidad del océano y del cosmos, la organización de la sanidad, las prevenciones de la guerra mundial termonuclear. ¿Y qué decir de la agresión mediática respaldada por los avances más sofisticados de la tecnociencia en la informática y los medios de comunicación masiva?, entre otros. Los Estados Unidos, nuestro principal, sino único enemigo, es el principal poseedor de los recursos tecnológicos, científicos y financieros que pone al servicio de la agresión a nuestro pueblo, y también de otros pueblos progresistas, a través de la subversión interna y la agresión externa radial, televisiva, y propagandística en todas las direcciones. Es una práctica arraigada del imperio la manipulación de las masas, de la opinión pública, de los deseos y necesidades de las personas. Pero en esa dirección de manipulación de las masas, desde hace muchos años, ¿Qué ha cambiado en la actualidad?, fundamentalmente dos cosas: la irrupción de Internet y la nueva ofensiva cultural norteamericana. "Totalmente desconocido hace apenas diez años, Internet está en camino de cambiar, no solo el campo de la comunicación, sino también el de la economía. Y sin duda, de forma progresiva, el de amplios aspectos de nuestras sociedades". (Ramonet. 1998).
"Internet es la tercera revolución industrial". "Una revolución industrial no solo se mide por el desarrollo de una tecnología más, se trata de un cambio rotundo en nuestra manera de producir y de consumir…". Afirmó el historiador Francois Caron, profesor emérito de la Sorbona. (Caron. 2000). Siguiendo las ideas planteadas en los análisis precedentes, ninguna tecnología por eficaz y sofisticada que sea es neutral y esta que impone Internet está muy cargada de ideología.
Es una realidad que en nuestro país, no es masivo aun el acceso a Internet para la mayoría de la población y que por diversas razones tiene sus limitaciones y medidas de seguridad, pero existe y es una necesidad cada vez más creciente. La televisión enemiga, que ha fracasado en su intento de regalarnos su veneno, no deja de llegar por diferentes vías, maneras y medios y es muy prolífera, para no hablar de masiva, la tenencia de equipos receptores y trasmisores de ese mundo como lo son los sistemas de antenas clandestinas, los videos y las diversas generaciones de reproductores de discos compactos. Es necesario reconocer que en buena medida opaca y hasta sustituye la televisión, la radio y el cine cubanos. Los bancos de distribución y comercialización de cassett y discos compactos, portadores del cine y la televisión ajena cada vez tienen más poder y recursos, manifestándose un proceso de acumulación originaria.
Un breve comentario sobre el más poderoso de esos medios es necesario: La televisión tiene tres funciones; informar. Educar y distraer, pero la distracción "…puede convertirse en alienación, cretinización y embrutecimiento; y pudiera conducir al descerebramiento colectivo, a la domesticación de las almas, al condicionamiento de las masas y a la manipulación de las mentes" (Ramonet. P. 23). Con Internet esas tres funciones principales se convierten en vigilar, anunciar y vender. Todo lo anterior tiene su canal en la espectacularidad y el sensacionalismo a toda costa que puede llegar a la aberración, a la mentira y al trucaje, todo en beneficio de las manipulaciones psicológicas. (1998) Está claro que ya los medios no se dirigen a sus consumidores para trasmitir información objetiva sino para conquistar las mentes, los espíritus. Después de la conquista viene el control de las mentes, del pensamiento y es mucho más efectivo si el conquistado se mantiene inconsciente de ello, por eso es tan importante la propaganda secreta y se emplea como un arma infalible en la manipulación a la vez de los individuos y de las masas. Es increíble que todo esto se desarrolla tras la pantalla de la democracia, del libre pensamiento, de la libertad de prensa, de la libertad de expresión, en fin, tras una infinita hipocresía preñada de engaños y mentiras, pero es mucho más triste y preocupante desde todos los ángulos y especialmente el ideológico, reconocer que esa manipulación tiene éxitos en muchos de nuestros estudiantes universitarios y de otras enseñanzas y que las posibilidades reales de contrarrestar ese mal, en alguna medida, son limitadas.
Nuestra sociedad vive su realidad, impuesta por los efectos del subdesarrollo, de la resistencia al bloqueo económico más fuerte y brutal conocido en la historia de la humanidad, de los efectos del derrumbe del socialismo europeo del este especialmente de la Unión Soviética, de las amenazas imperiales, de los mercenarios internos y externos, cuestiones que no están en el reconocimiento de los conquistados, como no está el reconocimiento de las bondades de nuestro sistema social y de las garantía para sus propias existencias. Esto desemboca en todo un conjunto de dificultades reales y limitaciones económicas, de recursos de toda índole que afecta las condiciones de vida y el modo de vida y que al final también chocan con el sentido de la vida.
Veamos, para esos conquistados, por ejemplo, los lujos se convierten en necesidades que tanto hombres como mujeres deben adquirir para no perder el estatus en el mercado competitivo, en el trabajo o en los momentos de expansión, todo lo cual lo lleva a la perpetuación de una existencia condenada a actuaciones enajenantes, deshumanizadas, condenada a la obligación de lograr un poder adquisitivo mediante un empleo que reproduce la esclavitud. (Ramonet. P.27) O sencillamente, con la renuncia al empleo y la recurrencia a la ilegalidad y el abrazos a la corrupción o la simple dependencia de las remesas. Todo esto tiende al aislamiento o separación del proceso productivo y creador del hombre.
"Apoyándose en el poder de la información, del saber y las tecnologías, Estados Unidos divulga la ; de esta forma establece con la complicidad pasiva de los dominados, lo que se podría llamar una opresión afable o un delicioso despotismo; sobre todo cuando ese dulce poder va acompañado del control de las industrias culturales y de la imaginación de nuestro imaginario". (p. 30)
Se va perdiendo progresivamente el equilibrio entre realidad y posibilidad, entre necesidades e intereses, se va sustituyendo el ser por el tener. Se crea un grupo de aspiraciones, deseos y voluntades cada vez más distantes de las realidades materiales y productivas, es un proceso de enajenación espiritual donde la realidad se va convirtiendo en abstracta o ilusoria, se pierden los sentimientos y los afectos y la actividad valorativa se distorsiona. Esto es bien sabido por los científicos de la manipulación. El individuo deja de parecerse a sus padres, a sus hermanos o conciudadanos, deja de parecerse a su tiempo, para parecerse a los superhéroes, para parecerse a lo inalcanzable. Se crea un espacio tan notable entre el ser y el querer ser, entre la aspiración y la posibilidad que aparece un notable nivel de desinterés por los fines reales, se pierden objetivos sustentables a lograr con el esfuerzo y el intelecto, la desilusión se ampara en la insatisfacción y triunfa la existencia enajenada, se pierde el sentido de la vida objetiva, perspectiva y construible, ese espacio entre un rango y otro se manifiesta como un vacío existencial. La existencia se sustenta en la materialidad y en la espiritualidad, si la primera pierde su sentido prioritario en la alimentación de la segunda, esta se transfigura en fatua, se queda vacía.
Una acotación más puede enriquecer la reflexión anterior. La existencia humana se expresa en un consorcio discreto de aspiraciones y necesidades. Las aspiraciones elevan al hombre, lo convierten en un luchador por ideales, en un constante impositor de metas. Cuando éstas están en el rango de las posibilidades reales son progresistas, son alentadoras y estimuladoras, pero cuando rebasan este marco y entran en el rango de las posibilidades ideales, se pierde el sentido orientador y las aspiraciones se transforman en decepciones, la espiritualidad se vacía. Las necesidades siempre transcurren en el espectro de lo biológico material y lo espiritual y alimentan las aspiraciones y tienden a rebasar al hombre por ser siempre crecientes. La satisfacción de necesidades generan nuevas necesidades y nuevas aspiraciones; eso es un ciclo infinito y cuando se rompa deja de existir el hombre; esas necesidades son de subsistencia, de seguridad, de pertenencia, de reconocimiento, de autorrealización y de equidad, que a nuestro juicio se manifiestan en un múltiple y complejo sistema que requieren de una adecuada relación entre los medios y los fines, entre lo útil y lo menos útil o inútil; en el balance adecuado de estos contrarios está la objetividad del hombre en la proyección de su vida, en el sentido de su vida, cuando ese balance se pierde, se diluye, se produce el vacío existencial que en esencia se manifiesta como vacío espiritual.
Nuestros estudiantes universitarios y también de las otras enseñanzas desarrollan su vida en estas contradicciones cotidianas, por lo que el proceso docente educativo tiene que ser cada vez más particularizado y personalizado. Las ciencias pedagógicas no pueden estar ajenas a tal fenómeno, las ciencias políticas han de sufrir de desvelos, los medios de lucha también han de estar al nivel de tales complejidades.
Todo el conjunto de las cuestiones antes mencionadas posee una interconexión dialéctica y compleja, y en este conglomerado de asuntos de difícil solución se distinguen los de aristas jurídicas y legales, científico-técnicas, las histórico-culturales, las educacionales, las comunitarias y las que revisten carácter humanistas y morales. Estos asuntos no presentan un carácter catastrófico y fatal, como a veces se ha argumentado, pues pueden ser resueltos sobre una base social adecuada si es que se canalizan de modo racional y armónico los recursos disponibles a nivel de sociedad, de ministerio, de territorio y si se llega a una unidad de acción por todos los factores que tienen incidencia en la existencia material y espiritual de los individuos.
En este sentido, la responsabilidad social de los políticos, educadores y científicos es imprescindible y por tal se entiende el conjunto de cualidades profesionales: morales, políticas, cívicas, así como los puntos de vista y los actos del científico, el político o el educador, encaminados al desarrollo de la ciencia y la utilización de sus resultados en beneficio de la sociedad y de la humanidad en su conjunto y específicamente en la formación y protección de nuestros estudiante y jóvenes. La responsabilidad social no es una cualidad permanente del individuo; esta se puede desarrollar a medida que evoluciona la sociedad, que se hacen más complicados los vínculos de la ciencia y la tecnología, a la vez que aumentan la envergadura y profundidad de las consecuencias de los descubrimientos científicos y la utilización que se hace de estos en beneficio o en contra de la humanidad.
Las condiciones actuales generan crisis sociales y de valores cuyas consecuencias tienen una repercusión directa en los destinos de las grandes masas de la población y, en ocasiones determinadas, representan un peligro de carácter global, depositando una gran responsabilidad en la ciencia como medio que incide, en mayor o menor medida, en el surgimiento de semejantes situaciones y en los artífices de ésta, o sea, sobre los científicos, tecnólogos y otros profesionales y trabajadores asociados al proceso de investigación, generalización y aplicación de la ciencia y en el proceso educativo como proceso eminentemente científico y práctico.
El conjunto de estas cuestiones ha constituido un importante estímulo para el desarrollo actual de las relaciones científicas nacionales y también internacionales, es decir, asuntos de tal nivel que si bien resultan de vital interés para toda la humanidad, en principio no pueden resolverse con los esfuerzos de un país aislado ni incluso con los de más desarrollo, pues exigen la unificación del potencial científico y técnico de todos los países y pueblos del mundo, lo que significa que por su esencia misma recaban concentrar los esfuerzos no solo en el marco nacional o regional, sino también, a escala planetaria.
Como se ha puesto de manifiesto, el desarrollo científico tecnológico ha alcanzado en los últimos tiempos un avance vertiginoso, abarca e interactúa con todas las esferas de la vida de la sociedad, el pensamiento y la naturaleza, penetra en la organización política de la sociedad y sus efectos positivos o negativos son manejados por los políticos, las instituciones de poder y responden siempre a los intereses clasitas y partidistas. Ese poderío tecnocientífico en manos de una potencia imperial con espíritu prepotente, arrogante y dominante es un peligro real para la humanidad. Hemos tratado de demostrar muy sucintamente, que es una realidad innegable la utilización de los progresos tecnológicos en la guerra ideológica contra nuestra sociedad y especialmente contra los jóvenes universitarios. El empleo de los avances científicos en nuestra sociedad para el perfeccionamiento de nuestro sistema y el fortalecimiento de la ideología revolucionaria en todas las esfera es impostergable y en nuestras aulas el combate ciencia-ideología para la sustentabilidad de nuestro sistema socio político es tarea de primer orden. Damos por sentada la posibilidad de la existencia de cierto vacío existencial-espiritual en determinados fragmentos o partículas de nuestra sociedad y específicamente en nuestros jóvenes universitarios, problema que requiere de un profundo trabajo científico desde el punto de vista de la pedagogía, la política, la economía, la psicología, la organización social, la enseñanza, las comunicaciones, la cultura y la actividad partidista.
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Autor:
MSc. Ruperto Gonz?lez Amador
MSc. Rosa Odalys L?pez Yera
Sede Universitaria Municipal. Col?n., Calle Pelayo Villanueva
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