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Acercamiento al análisis de las transformaciones en los medios de comunicación de masas


    En los medios de comunicación de masas de los últimos cincuenta años se ha ido transformando tanto el contenido de los mensajes, así como la velocidad de transmisión de los mismos, a partir del desarrollo de nuevos modelos de la información.

    " Si para la teoría de la información son importantes los aspectos vinculados al significante, a sus características – especialmente la resistencia a la distorsión provocada por el ruido", la facilidad de codificación y descodificación, la velocidad de transmisión, para todo lo que se refiere al aspecto comunicacional, no se puede prescindir de la observación de que " el mensaje, para el destinatario humano adquiere su significado y puede tener muchos sentidos posibles"[1]

    Las transformaciones que se llevaron a cabo mediante la utilización del modelo al que estamos haciendo referencia y "que( Eco –Fabri, 1978) llaman el modelo semiótico informacional, plantean que la diferencia más importante con el esquema anterior es que ahora la linealidad de la transmisión va unida al funcionamiento de los factores semánticos, introducidos mediante el concepto de código. Es decir, se pasa de la acepción de comunicación como transferencia de información a la de transformación de un sistema en otro.

    El código garantiza la posibilidad de dicha transformación"[2]

    Lo que pretendo abordar con algunas otras propuestas respecto al papel de los medios de comunicación en los últimos años ( haciendo énfasis en las nuevas tecnologías de la información), es que cada día más el poderoso imperio de la comunicación social aplasta a los ciudadanos de todo el mundo con el inmenso bombardeo de las informaciones que ellos determinan que debe conocer una persona y cuales no debe saber, omisiones de mensajes de hechos relevantes para el mundo o una determinada área geográfica, o la mentira burda o bien elaborada, pero a la larga se trata de la manipulación a escala global.

    Otros modelos como el semiótico – textual "representan un instrumento más adecuado para interpretar problemas específicos de la comunicación de masas. En particular, a diferencia de antes, ahora se subraya que: hablar de un mensaje que llega, formulado sobre la base de un determinado código, y que es descodificado sobre la base de los códigos de los destinatarios, constituye una simplificación terminológica que puede inducir a error. En efecto, la situación es la siguiente:

    • a) Los destinatarios no reciben mensajes particulares reconocibles, sino conjuntos textuales.

    • b) Los destinatarios no compran los mensajes con códigos reconocibles como tales, sino con conjuntos de prácticas textuales, depositados.

    • c) Los destinatarios no reciben nunca un único mensaje: reciben muchos, tanto en sentido sincrónico como en sentido diacrónico. (Eco- Fabri, 1978)[3]

    Estos modelos de comunicación de masas, se van superando unos a otros, se van complejizando y lo podemos constatar desde el surgimiento de la Teoría Hipodérmica, el Paradigma de Lasswell, la superación de este paradigma, y otras teorías que surgieron más tarde, en las décadas de los 30, 40, 50 del siglo pasado, como la Teoría Psicológica, la Teoría Sociológica, la Teoría Culturológica, la Teoría Crítica y las que he presentado muy brevemente.

    Con este enunciado de las Teorías Sociológicas de la Comunicación que se estudian en las carreras de Sociología, Comunicación Social y Estudios Socioculturales, entre otras afines, pretendemos hacer énfasis en la evolución y las transformaciones que han ocurrido en las últimas décadas, como hemos señalado, y a las que se suman la Teoría de las Mediaciones, Teoría de la Recepción Activa y otras, que permiten ir desentrañando la complejidad que tiene todo el sistema de comunicación social.

    El estudio sistemático de las diferentes teorías y modelos de la comunicación social es lo que permitiría realizar el desmantelamiento de los planteamientos políticos, económicos, sociales, tecnológicos, religiosos, culturales y otros, con los que los grandes grupos monopólicos de la comunicación social inundan al mundo de hoy.

    La posición defendida desde los grandes grupos de poder en los Estados Unidos y de los distintos centros de investigaciones occidentales, es la del libre flujo de la comunicación, es decir, dejar hacer, del liberalismo económico, político hasta la regulación de casi toda la información del mundo.

    Otras posiciones en diferentes áreas geográficas defienden la soberanía nacional frente a la avalancha de la información que se recibe de los grandes centros de poder capitalistas. Se busca y se defiende, por parte de la mayoría de los países pobres, un nuevo orden internacional de la información.

    Sobre estos temas la UNESCO como otros centros de estudios acerca de los medios de comunicación, y varios autores latinoamericanos, africanos y asiáticos han contribuido al debate de estas posiciones.

    El estudio sobre la credibilidad del Emisor es un aspecto de suma importancia en las relaciones económicas y políticas internacionales.

    Cuando una marca de determinado producto que se comercializa en el mercado mundial, tiene determinada calidad, buen precio y buena presentación -sin llegar a la excelencia del producto en cuestión- las cadenas de televisión, las vallas anunciadoras, los eventos deportivos, las pantallas gigantes o móviles, se encargan de dar publicidad y que ese producto ocupe un lugar cimero en la selección de los posibles clientes. Es natural ya ver en las pantallas de la televisión en los actuales juegos de fútbol, voleibol y de otras disciplinas deportivas, los anuncios con innumerables productos que se promueven por esas vías donde la competitividad de las grandes trasnacionales aplasta a los medianos y pequeños productores de cualquier producción nacional de países pobres y hasta no tan pobres.

    El ciudadano de pocos recursos económicos es manipulado por los medios de comunicación de masas para que "entre" al mercado a comprar a "como dé lugar", junto con los de alta y mediana capacidad económica, aunque esto no siempre puede suceder.

    Los precios de los automóviles son bien diferenciables entre los ricos y los de la clase media y otros que poseen menos poder económico, también las en las compras de las viviendas y en muchos productos esenciales de la vida cotidiana.

    Debe destacarse el papel activo de los medios de comunicación masiva y la puesta en práctica de todas las teorías y metodologías de venta y de persuasión para ampliar la masa de posibles consumidores y sus relaciones con los grandes bancos, para solicitar los créditos necesarios y entonces endeudarse para obtener sus sueños y tratar de emparejar al pobre, trabajador, con el de la clase media y a este tratar de igualarlo a sus jefes, los dueños de los medios de producción y de prestación de los servicios. Es un espejismo cotidiano pero es real y de todas formas las crisis económicas, políticas y de valores siguen presentes en un mundo cada vez más complejo y convulso.

    Los medios de comunicación de masas, desde los centros de poder de los grandes países capitalistas, participan haciendo las guerras modernas, creando caos, conflictos, engaños, suprimiendo informaciones veraces, etc.

    Pero debemos destacar que en los años 80 y 90 del pasado siglo se han ido desarrollando, en casi todos los países de América Latina, centros de estudios sobre los medios de comunicación, en las universidades y centros especializados vinculados al periodismo, para la formación de comunicadores, sociólogos y otros especialistas que pudieran estudiar el fenómeno de los medios de comunicación de masas.

    Las propuestas presentadas por la UNESCO desde la década del 50, han sido tomadas en consideración, respecto a la creación y desarrollo de instituciones que pudieran hacer estudios sobre los medios de comunicación en América Latina.

    En nuestra región latinoamericana la preparación académica, especializada en los medios de comunicación, ha tenido la influencia de las escuelas de pensamiento positivista, funcionalista, estructuralista y semiótico de la citada época. El investigador E. Beltran ( 1978) "ha destacado tres aspectos del desajuste teórico que se derivan de la implantación de los esquemas de la investigación norteamericana clásica en la realidad comunicativa latinoamericana:

    • 1. En primer lugar, destaca la creencia equívoca de que la comunicación, por sí misma, puede generar desarrollo, independientemente de las condiciones socioeconómicas y políticas.

    • 2. En segundo lugar se supone falsamente que el incremento de la producción, el consumo de bienes y servicios, constituyen la esencia del desarrollo y que, a su debido tiempo se derivará necesariamente de ello una distribución justa del ingreso y de las oportunidades.

    • 3. En tercer lugar, se da a entender que la clave del incremento de la productividad reside en la inovación tecnológica.[4]

    La práctica histórica ha demostrado que estos conceptos tienen un velo ideológico que justifica los intereses de las potencias extranjeras en la región.

    En el transcurso de los últimos 30 años se ha ido profundizando en al evolución histórica de la comunicación de masas en América Latina, pasando por la Teoría de la Dependencia hasta una posición de la investigación crítica y de soberanía nacional que demuestra cierto carácter progresista de muchos de los investigadores y académicos latinoamericanos.

    Todas estas posiciones tuvieron sus encontronazos con las políticas públicas y los dueños de los principales medios de comunicación, pues pudieran poner en tela de juicio las políticas comunicacionales que les proporcionaban jugosas ganancias.

    "La historia de la investigación de la comunicación de masas reproduce, paso a paso, la huelal marcada por la historia del poder comunicativo, ¿cómo extrañarse de ello?.

    El sector de las comunicaciones– ha dicho Pasquali- que hoy ejerce su poder global sobre el conjunto de la difusión, divulgación y diseminación de mensajes, modelos, conocimientos y valores ( bienes no asimilables a ningún otro en que predominen los componentes materia/ energía, ha pasado a ser, de veras y para siempre, el cuarto poder en cierta ocasión profetizado…siendo efectivamente así…¿cómo extrañarse de que genere y financie una poderosa ideolgía de respaldo, infiltrada en la obra filosófica y en la investigación empírica, en la universidad y entre los líderes de opinión?"[5]

    Es natural que a una comunicación de dependencia tenga que corresponderle una Teoría de la Comunicación de la Dependencia, por lo tanto debería desarrollarse en los centros de investigación y universidades estudios autóctonos, que respalden los procesos comunicativos de emancipación.

    El criterio de comunicación alternativa ha tenido mucho auge en las comunidades rurales y en los movimientos sociales en la región, y ellos está ligado a los procesos de alfabetización y superación permanente de las comunidades como una forma de comprensión de los mensajes de elevación de la cultura política y la independencia social.

    Con el desarrollo del siglo XXI, las comunicaciones se han desarrollado vertiginosamente, el perfeccionamiento de los satélites, los videos, los teletextos, la telefonía móvil, la internet y el twiter, entre otras formas de comunicación en tiempo real, han acercado los acontecimientos a las casas o al interior de las mismas. Los espacios comunes de la sociedad, como aeropuertos, parques, stadiums, y otros han tomado una conotación política masiva; la televisión los utiliza en las campañas electorales, propagandísticas, comerciales y otras.

    El flujo de la información es increíble, la alta velocidad de las transmisiones, la calidad de los textos y las imágenes son fantásticas.

    El bombardeo de las informaciones es aplastante. De alguna manera ha habido personas, funcionarios que han puesto al descubierto millones de informaciones secretas del gobierno de los Estados Unidos como el caso de Assange y del exanalista norteamericano E. Snowden, ambos perseguidos por el gobierno norteamericano.

    Ellos han llegado a denunciar el espionaje telefónico del gobierno de Estados Unidos a sus propios aliados, de Alemania, España y otros países y se han creado conflictos políticos de gran envergadura. Es decir, las comunicaciones de hoy, también necesitan de nuevas teorías de las comunicaciones que las sustenten en el proceso de dominación imperialista y también deben de desarrollarse los estudios para su conocimiento y maneras de contrarrestarlas.

    Por todo esto es que se trabaja denodadamente en la creación de un nuevo orden de información internacional, respetuoso de las leyes internacionales y de la ética de la profesión. Solo he querido iniciar la posibilidad de la continuación del debate sobre estos temas en los centros de educación superior y otros centros de estudios afines, para poder contribuir al esclarecimiento de las posiciones de estudiosos sobre estos aspectos teóricos, metodológicos, políticos y prácticos. Por eso, para investigar hay que tener en consideración:

    • 1. El análisis crítico de las principales teorías.

    • 2. Los modelos más importantes elaborados en la investigación sobre los medios de comunicación de masas.

    • 3. El contexto histórico, económico, político y social en que se desarrollan estos estudios.

    La Habana, miércoles 21 de mayo de 2014.

     

    Bibliografía:

    • 1. Aguirre, J.M. (1980) " Comunicación ideológica y formación crítica de la conciencia de clase", en Comunicación No 28- 29, Caracas.

    • 2. De Moragas Spá, Miguel, " Teorías de la Comunicación", Edit. G. Gili, S.A. de C.V. 1991.

    • 3. Ramos, Suyo Juan A. " Sociología de la Comunicación e Información", Edit. Pablo de la Torriente, La Habana, 1990.

    • 4. Watzlawick, Paul y otros, " Teoría de la Comunicación Humana", Edit. Herder, S.A. Barcelona, 1997.

    • 5. Wolf, Mauro, "La investigación de la Comunicación de Masas", Edit. Félix Varela, La Habana, 2007.

     

     

    Autor:

    Tomás Vázquez Betancourt

    Profesor Auxiliar.

    Universidad de La Habana. Facultad de Filosofía e Historia.Departamento de Sociología.

    [1] Wolf, Mauro. “ La Investigación de la comunicación de masas” Edit. Félix Varela. La Habana, 2007. Pág 70.

    [2] Ídem

    [3] Ídem

    [4] De Moragas Spá, Miguel: Teorías de la Comunicación.Edit G, Gili. S.A de C.V, México, 1991.

    [5] IDEM