Las escuelas fábricas constituyen un importante avance; a través de decretos (14.538/45 originario de la ley nº 12.921 y el 6648/45, modificatorio del anterior) se crea y se pone en marcha la comisión de Aprendizaje y Orientación profesional. Donde los jóvenes se orientan y perfeccionan en las diversas técnicas industriales. No sólo constituyen centros docentes de múltiples oficios artesanales, sino que los alumnos reciben desayuno, almuerzo, herramientas, libros, elementos de estudio y vestimenta de trabajo. Evidentemente, fue una gran obra en materia de enseñanza con rápida salida laboral y se articuló notablemente con los incentivos a la industria, por estar generando mano de obra especializada.
La reforma Universitaria
Refiriéndose a la reforma universitaria, Perón articula estas palabras dentro un discurso en Del libro habla Perón, Ediciones Realidad Política:
La universidad Argentina del porvenir no será ya una fábrica al por mayor de títulos facultativos, sino verdadero centro de investigación científica y altos estudios. Ese sentido se advierte ya en la determinación de las funciones que el artículo de la nueva ley atribuye a la Universidad, no limitándola a la preparación para el ejercicio de las profesiones libres, sino extendiéndola a afirmar y desarrollar una conciencia nacional histórica. A organizar la investigación científica, para que se dediquen a ella quienes tengan vocación y capacidad de investigadores. A elaborar y difundir el saber y la cultura. A estimular el desarrollo de la ciencia aplicada y las creaciones técnicas, a formar un cuerpo docente dedicado exclusivamente a la vida científica universitaria, a pronunciar y a establecer la docencia libre A crear y sostener institutos de investigación y cursos de perfeccionamiento y especialización. A divulgar las investigaciones científicas y a fomentar el desarrollo de publicaciones y actividades científicas, sociales, jurídicas, económicas, literarias y artísticas.
De la serie de artículos escritos por Perón y publicados por la prensa mundial. Junio de 1948.
Pero es en la Constitución de la República Argentina (sancionada por la Convención Nacional Constituyente el 11 de marzo de 1949, Primera Parte, Capítulo III, Artículo 37,IV, De la educación y la cultura,4) donde se expone claramente lo que se pretende conseguir en las facultades: "Las universidades tienen el derecho de gobernarse con autonomía, dentro de los límites establecidos por una ley especial que reglamentará su organización y funcionamiento." "Las universidades establecerán cursos obligatorios y comunes destinados a los estudiantes de todas las facultades para su formación política, con el propósito de que cada alumno conozca la esencia de lo argentina, la realidad espiritual, económica, social y política de su país, la evolución y la misión histórica de la República Argentina".
A partir del discurso de Perón y de los dos fragmentos extraídos de la constitución se ve con mucha claridad la falta de autonomía que se instala en las facultades y el intervencionismo universitario que impone el gobierno de turno. Este factor, a nuestro entender, incorpora un problema en la educación en los años peronistas; ya que la falta de libertad en la enseñanza hace que los conceptos pierdan riqueza cultual y cosmovisión.
El ministerio de Educación
Durante el gobierno peronista hubo dos ministros de educación: Gaché Pirán (cuyo secretario fue Pedro Arizaga) y Oscar Ivanissevich.
En "Debe educarse y no sólo instruirse a la juventud" conferencia pronunciada por El señor secretario de Educación Doctor Oscar Ivanissevich; encontramos la posición tomada por el gobierno peronista en cuanto a los programas educativos. La reducción de los mismos, fue la política impulsada en este período histórico para "mejorar" la educación. "Estamos empeñados en la simplificación de los planes de estudio y en la reducción de los programas…los jóvenes sabrán poco pero bien. Esta doctrina está escrita en el MANUAL DEL PERONISTA que todos los habitantes de la República deben leer….El trabajo, el ejemplo y la verdad son sus piedras sillares."
La Moral peronista
Ivanissevich incorpora en su discurso el concepto de "la primera impresión"; explicando la manera en la que hay que comportarse en un mundo donde "vivimos en la superficie y la mayoría de las personas nos juzgan superficialmente". "Es menester tener presente que la primera impresión es trascendente y perdurable" y continúa "hay que aprovechar ese único contacto para dejar la mejor impresión, para que esa fugitiva visita se recuerde con placer y con respeto". A simple vista este puede parecer un discurso del buen comportamiento que cada individuo debe tener para vivir más armónicamente en sociedad. Pero si uno va más allá, puede traslucirse una intención de generar una visión conformista de la realidad, y además incorpora un atenuante "psicológico" que es el qué dirán (por el que todos nos vemos influenciados en mayor o en menor medida). Notablemente el objetivo final de estas palabras, es impedir el surgimiento de cualquier tipo de conflicto social, aunque bien sea porque cada sujeto quiere "dejar la mejor impresión". En las palabras de Perón también se vislumbra está ideología "no puede haber una grande Argentina si todos sus hijos no están perfectamente unidos".
¿Educar o instruir?
De acuerdo con el discurso antes mencionado y pronunciado el 26 de noviembre de 1948 pudimos entrever con claridad la ideología del gobierno de turno. El hilo conductor de la conferencia y con el que culmina su explicación es la diferenciación entre el significado de la palabra "educar" y la palabra "instruir" ("Educar es dar calidades y es dar forma humana al animal hombre, e instruirlo es verter dentro de esa forma las informaciones, los conocimientos") a medida que avanza el discurso, comienza a notarse con mayor claridad: "en esta lucha que nos encontramos no hay más que dos bandos: que cada uno tome el que prefiera." Y esta idea de los dos bandos es muy utilizada por Perón en sus discursos, y es claramente una simplificación; porque evidentemente en ningún campo se puede decir que haya dos versiones y totalmente opuestas de una misma problemática.
Pero la figura de Ivanissevich termina de hundirse cuando cita a Montaigne "Antes de llenar la cabeza de nuestro alumno hay que formarla". Cavó su propia fosa al metaforizar la mente del estudiante con un recipiente en el cual se introducen ideas, como si fuese cuasi una máquina, o la herramienta perfecta para materializar sus grandes ambiciones.
La Pedagogía según Jorge Pedro Arizaga
En su discurso "Hacia una Educación Nacional Argentina" de 1949, el secretario de Gaché Pirán (ministro de educación) expone cual es su idea de la pedagogía. "La Pedagogía no puede ser sino nacional y ciencia y arte de conducción. Y el sistema de fines que lo informa, emerge, como ideal político, inexorablemente político, de la realidad nacional." "Una Pedagogía que capte lo argentino y se rija por instancias propias de lo que constituye la personalidad de una nación autónoma y soberana." "El error del sistema escolar argentino, que en la literatura oficial pregonó la formación del ciudadano, consistió en desestimar esos contenidos preexistentes de la vida nacional en obsequio de las novedades importadas en fórmulas hechas para otros pueblos de origen, estilo de vida e ideales distintos".
Lo propuesto por Arizaga, es en un punto muy positivo: propone no perder las raíces y tener conciencia de lo nuestro, lo argentino. Pero el problema es ¿Qué es lo argentino? ¿Es lo que la clase gobernante dice que es argentino?; ahí viene el inconveniente y donde se ve claramente la intención de imponer una concepción uniforme de lo correcto y lo incorrecto. Una cosa es preservar lo nacional y otra cosa es encerrarse en eso y no ver que sucede en el resto del mundo, al que también pertenecemos y del que nos vemos influidos inexorablemente.
Bibliografía
- Arizaga, Jorge Pedro. Hacia una Educación Nacional Argentina. Conferencia pronunciada en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas de Madrid, el 17 de noviembre de 1948. Bs As 1949. (pág 3-22).
- Corbiére, Emilio J, Mamá me mima, Evita me ama. La educación argentina en la encrucijada. Bs As, Sudamericana, 1999.
- Ivanissevich, Oscar. Debe educarse y no sólo instruirse a la juventud. Conferencia pronunciada en el Círculo de Aeronáutica, el 26 de noviembre de 1948. Bs As 1948. (pág 7-31)
- Puiggrós, A. Discursos pedagógicos e imaginario social en el peronismo (1945-1955). Buenos Aires, Galerna, 1995.
- Constitución de la República Argentina sancionada por la Convención Nacional Constituyente el 11 de marzo de 1949, Primera Parte, Capítulo III, Artículo 37,IV, De la educación y la cultura, 4.
Páginas de internet consultadas:
- es.wikipedia.org/wiki/Peronismo
- www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/libros/10-875-2003-12-28.html
Autor:
Agustín Garrido
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