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Países Comunistas

Enviado por rochi_vic


    Cuando las divisiones rusas alcanzaron la Europa a través de Polonia, establecieron gobiernos provisionales de matiz comunista en Rumania, Bulgaria, Hungría, Yugoslavia, Albania y Polonia. Todos estos territorios, excepto Yugoslavia, fueron ocupados por el Ejército Rojo al término de la contienda. Los tratados de paz prometían elecciones libres mediante las cuales aquellos pueblos eligirían su propio gobierno, pero estas promesas no se cumplieron. Cada uno de estos países tenía un gobierno de coalición en el que estaban incluidos los comunistas. Trabajando desde el interior con su táctica acostumbrada, los comunistas liquidaron toda la oposición. En 1947 cada uno de estos Estados se había declarado una República Democrática Popular. Estas "democracias populares" no eran más que un eufemismo tras el que se ocultaban sendas dictaduras comunistas.

    También se les llamó en seguida los "Estados Satélites", ya que actuaban tanto en cuestiones internas como externas, según los dictados de otro Estado más poderoso, Rusia soviética.

    Durante 1947 la antigua organización comunista por otra parte, fue resucitada de nuevo, pues había sido disuelta en 1943. El nombre que entonces adoptó la Internacional Comunista fue el de Kominform (Oficina de Información Comunista). Exteriormente su finalidad era sólo informativa pero en la realidad era en medio de mantener la unión entre Rusia, sus países satélites, y los partidos comunistas de otros países.

    Así se vio claramente que Rusia practicaba una política doble. En los países ocupados por el Ejército Rojo, la dictadura comunista fue establecida con todas las características de un Estado policíaco. La realidad de todo ello era que Rusia había extendido sus fronteras hasta el corazón de la Europa occidental, pues los gobernantes comunistas de los Estados satélites eran simples marionetas movidas por Rusia. El otro filo del arma era la Kominform. Su finalidad era la de fomentarla agitación y las revoluciones en los países que no se hallaban bajo el dominio directo con el Ejército Rojo, utilizando los partidos comunistas locales como dóciles instrumentos.

    Al término de la guerra, Polonia quedó ocupada por el ejército soviético por lo tanto los comunistas no tuvieron dificultad en tomar el poder. Todos los no-comunistas, inclusive los líderes de la resistencia, fueron arrestados y juzgados, sin posibilidad de defenderse ya que el ejército, la policía, la prensa y la radio, estaban controlados por los comunistas. En febrero de 1947, asume como presidente el veterano comunista Bierut, con lo que el proceso de sovietización se agudizó. También la Iglesia Católica sufrió persecuciones culminando con el arresto del Cardenal Wyszynski en 1953.

    Aproximadamente por 1948, Checoslovaquia cae en manos del comunismo. La Checoslovaquia de antes de la guerra se había distinguido como el país más democrático de todos los Estados de Europa Central. El gobierno de la postguerra también fue democrático, aunque con una fuerte representación comunista. Checoslovaquia se hallaba en una situación muy complicada. Si bien no estaba ocupada por las divisiones soviéticas, tenía fronteras comunes con la Polonia ocupada, la Alemania Oriental, Hungría e incluso con la propia Unión Soviética. A causa de ello, el Gobierno checo trató de realizar una política muy difícil, actuando como puente entre el Este y el Oeste. Se esforzaron por mantener por mantener relaciones amistosas con las democracias occidentales y con el bloque comunista.

    Las elecciones demostraron que la fuerza del comunismo en Checoslovaquia iba en disminución. Faltaba poco tiempo para las nuevas elecciones cuando los dirigentes comunistas checos fabricaron una "crisis" y se apoderaron del gobierno. Cuando llegó el momento de las elecciones, se creó una lista única de candidatos, todos ellos elegidos por los comunistas. El ministro de Asuntos Exteriores de la infortunada nación checa, Jan Masaryk, se suicidó. El presidente Benes presentó la dimisión, siendo sustituido por un jerifalte comunista. Así, contra su voluntad, la culta y democrática Checoslovaquia, se convirtió en un Estado satélite.

    La implantación del régimen comunista de Hungría se llevó a cabo igualmente. En las elecciones de noviembre de 1945, el partido campesino de Ferenc Nagy, obtuvo amplia mayoría parlamentaria, pero los comunistas pusieron dificultades insuperables a Nagy como primer ministro. Ferenc Nagy fue procesado por las autoridades soviéticas, que lo acusaron al antiguo secretario del partido campesino, de haber hecho espionaje contra el ejército rojo, manteniendo relaciones con las "fuerzas reaccionarias" establecidas en el extranjero. Nagy dimitió el 29 de Mayo de 1947, imponiéndose en Hungría el comunismo.

    Al finalizar la II Guerra Mundial, Rumania fue ocupada por las tropas soviéticas> formándose un gobierno de coalición dominado por los comunistas y que fue confirmado por vía electoral. Petru Goza, jefe del gobierno desde 1945, asumió la presidencia de la República en 1952, y se aprobó una nueva constitución, institucionalizándose la República Democrática Popular Socialista. Prosiguieron las estratificaciones y se pusieron en marcha proyectos de gran envergadura que en pocos anos transformaron el aspecto del país.

    En 1958 Gheorge Maurer sucedió a Goza. En 1961> ascendió a la presidencia Gheorghiu Dej, que desarrolló una política relativamente independiente de la URSS. Esta política nacionalista fue proseguida por Nicolae Ceausescu, secretario gral. del Partido Comunista en 1965 y jefe del Estado desde 1967. En 1974 una enmienda. constitucional amplió los poderes de Ceausescu, que desde entonces ocupó el cargo de presidente de la República.

    Bulgaria tras el referéndum del 8 de Septiembre de 1946, elaboró una nueva constitución por la que se declaraba República Popular. Fue designado jefe del gobierno el comunista Georgi Dimitrov, que murió tres anos más tarde. Hasta el año 1956, la política tuvo un carácter estrictamente estanilista. A partir de entonces, paralelamente a la evolución de la Unión soviética, el régimen comenzó a liberarse aunque Bulgaria sigue siendo uno de los países de Europa Oriental más acordes con el modelo soviético en todos los campos.

    Después de la Segunda Guerra Mundial, Alemania fue dividida en 4 zonas: los rusos al este, los ingleses al noroeste, los norteamericanos al sur y los franceses al sudeste. Al propio tiempo se preparaba un reparto cuartripartido de la ciudad de Berlín, rodeada por la zona soviética de ocupación.

    Toda la centralización a través de la proyectada autoridad conjunta, demostró ser un auténtico mito, ya que nadie consideraba la Alemania dividida como una unidad política o económica; al contrario, cada ocupante pretendía administrar la zona que le había "correspondido" según sus propios conceptos. Los rusos transformaron sistemáticamente su zona de ocupación en una democracia popular, mientras que los norteamericanos los franceses y en menor escala los ingleses, favorecían la implantación de un sistema en cierto modo federalista, pero que restablecía con la ayuda económica norteamericana el surgimiento de una Alemania potente, lo cual no hizo más que aumentar el recelo de los rusos y países vecinos víctimas del nazismo.

    En 1948 la situación en Alemania había alcanzado un punto en el que se había hecho totalmente imposible la continuidad de la administración conjunta. La situación económica de la nación alemana inspiraba serias inquietudes. En las zonas occidentales el problema se veía complicado por la afluencia continuada de los refugiados procedentes de la zona rusa.

    Las tres potencias occidentales ocupantes decidieron unir económicamente sus zonas con la esperanza de resolver este difícil problema. Declararon que si Alemania no se unía bajo un tratado de paz, permitirían que los alemanes de sus respectivas zonas se diesen una constitución y estableciesen un gobierno democrático. Los alemanes occidentales celebraron una asamblea constitucional en Bonn, de la que salió la República Federal Alemana, puesta todavía bajo la autoridad de las potencias occidentales de ocupación. Dichas potencias también unieron sus zonas en Berlín, permitiendo que se celebrasen elecciones para que el Berlín occidental tuviese un gobierno municipal democrático.

    Los rusos dieron entonces 2 pasos: primeramente establecieron un gobierno comunista en la Alemania oriental, incluyendo el Berlín oriental. luego, interrumpieron todo el tráfico terrestre y fluvial en dirección a Berlín desde el Oeste. Esto fue el famoso "bloqueo de Berlín" que duró desde junio de 1948 hasta mayo de 1949. No había duda que su verdadero objetivo era el de obligar a las potencias occidentales a que abandonasen Berlín. No obstante, Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña montaron un impresionante y muy costoso "puente aéreo" para abastecer, con combustibles y alimentos, a esa ciudad.

    Esa división de la ciudad en 2 sectores se agudizó aún más en la noche del 12 al 13 de Agosto de 1961: al amanecer aparecieron alambradas, colocadas por la Unión Soviética, que impedían a los berlineses orientales pasar al sector occidental de la ciudad. A poco las alambradas fueron reemplazadas por un muro de aproximadamente 2 metros de alto y por construcciones complementarias (barricadas, torres de vigilancia, fortines, etc.) que impedían cualquier fuga.

    A pesar de todas las medidas adoptadas muchos alemanes orientales escaparon a la República Federal Alemana, utilizando los más extravagantes artefactos (avionetas minisubmarinos propulsados a pedal, automóviles con doble fondo, etc.). Lamentablemente no todos los intentos de fuga fueron exitosos y se ignora la cantidad de alemanes orientales que han perdido la vida en fallidos intentos.

    Rompimientos, disturbios, levantamientos

    Es fácil incurrir en el error de pensar en el bloque comunista como si fuese un grupo de Estados sólidamente unidos. Los países satélites eran Estados Nacionales, algunos de los cuales poseían una gloriosa tradición de libertad e independencia, junto con sus héroes nacionales y una historia que no podía desaparecer de la noche a la mañana. Polonia y Hungría, por ejemplo, eran enemigos tradicionales de Rusia. La política comunista de colectivización agraria, de la industrialización y de exportación de los productos del país a la Unión Soviética, no podía por menos de producir reacciones hostiles. De vez en cuando saltaba un chispazo que recordaba al mundo que la unidad del bloque comunista estaba impuesta desde arriba, y que en el fondo de los países satélites bullían anhelos de libertad.

    El primer suceso de esta índole se produjo en 1948, cuando la Yugoslavia de Tito, a pesar de que seguía siendo un Estado comunista, rompió con Moscú. A partir de entonces Yugoslavia practicaba una política independiente, hecho que sin duda despertó la envidia de los países satélites y la ira del Kremblin. En 1953, los obreros la Alemania oriental se alzaron contra sus jefes comunistas. La revuelta fue sofocada por tropas soviéticas.

    A continuación se produjeron disturbios en Polonia, debido a que los polacos exigieron el derecho de adoptar una política nacional, como había hecho Yugoslavia. Desafiando las iras del Kremblin, eligieron a Gomulka, un comunista en desgracia. Gomulka advirtió a Moscú que accediese a las demandas polacas si quería que cesase el creciente descontento que cundía por el país. Aunque parezca extraño, los dirigentes soviéticos cedieron>, e inmediatamente se restableció el orden. Desde ese momento, las relaciones entre Polonia y la URSS fueron muy tensas. Gomulka sabía que si iba demasiado lejos en su política independiente, los rusos aplastarían a Polonia por la fuerza. o dejarían a las industrias polacas sin materias primas ni mercados. El Kremblin sabía por su parte que si se mostraba demasiado exigente, los patriotas polacos se alzarían en una revuelta genera.

    El siguiente levantamiento tuvo lugar en Hungría. Los estudiantes y los obreros manifestaron abiertamente sus simpatías por los polacos, mediante demostraciones callejeras. En octubre de 1956, la policía comunista disparó contra un grupo de manifestantes. Inmediatamente se organizó una manifestación monstruosa de protesta. Las tropas húngaras enviadas para disolver la manifestación, se unieron a ésta. Al poco tiempo, los rebeldes dominaban toda la parte occidental. El levantamiento patriótico puso en el gobierno a otro dirigente, Imre Nagy. Dicho política se vio obligado a adoptar muchas medidas anti-soviéticas. Prometió elecciones libres, en las que estaría permitidos los partidos de la oposición. Anunció que Hungría se retiraba del Pacto de Varsovia. Solicitó la ayuda de las Naciones Unidas. Entretanto, los revoltosos perseguían y acosaban implacablemente a la odiada policía secreta, que fue casi totalmente exterminada. Exigieron la retirada total de las tropas rusas estacionadas en Hungría. Los batallones soviéticos que guarnecían Budapest, se retiraron, en efecto. Pero tras recibir refuerzos, penetraron nuevamente en la ciudad, detuvieron a Nagy y a casi todo su gabinete, e instalaron un nuevo gobierno presidido por Janos Kadar, un hombre de confianza de los rusos. Los húngaros trataron de oponerse a estas medidas, apelando primero a la resistencia pasiva y la huelga general, y después a la violencia y la lucha callejera. Pidieron ayuda a las potencias occidentales y a la ONU. Para vergüenza de Occidente, dicha ayuda no llegó. Los valientes húngaros pagaron muy caro su espíritu de rebeldía e independencia. El Ejército Rojo aplastó la rebelión entre ríos de sangre.

    La inquietud reinante en los países satélites parece demostrar varias cosas. En primer lugar, los países satélites aceptan a regañadientes sus Gobiernos comunistas y la dominación soviética. No obstante, era muy dudoso que pudiesen conseguir la independencia sin ayuda exterior. En segundo lugar, la forma brutal como fueron aplastadas las rebeliones de la Alemania oriental y de Hungría mostró al mundo la verdadera cara del Gobierno soviético, implacable y determinado a conservar su imperio a toda costa.

    ACTUALIDAD EN LOS PAISES

    URSS (unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas):

    Después de la guerra fría, la economía se estancó y el país fue minado por las cargas de un imperio empobrecido y sobreextendido. Brezhnev (líder entre 1964 y 1982) revocó el breve deshielo que se había experimentado bajo Krushev (líder entre 1956-64) y la reforma de gran alcance tuvo que esperar la política de Gorvachov después de 1985.

    Enfrentado con graves reformas económicas, Gorvachov intentó introducir la reconstrucción (perestroika) y con grandes aperturas (glasnost) realizando reformas sociales, económicas e industriales. Una importante reforma de la constitución llevó a elecciones más libres> y el Partido comunista abandonó su papel dirigente. El abandono de la doctrina Brezhnev- el derecho de la URSS a intervenir en los asuntos de otros países del Pacto de Varsovia (como había hecho militarmente en Hungría en 1956 y en Checoslovaquia en 1968-promovió un cambio rápido en la Europa Oriental, donde uno tras otro los estados satélites renunciaron al comunismo y empezaron a restaurar sistemas multipartidistas.

    En 1991, la iniciativa de Gorvachov había pasado a Yeltsin (presidente ruso), que fue el instrumento que estableció la Comunidad de Estados Independientes (CEI), un grupo militar y económico de estados soberanos que incluye todas las repúblicas de la antigua unión excepto Georgia y los estados bálticos.

    En 1994, la política ha sido más relajada. Rusia ha incrementado su presencia en antiguas repúblicas soviéticas, como el caso de Chechenia. La crisis económica permanente, el ascenso imparable del poder mafioso, el ultranacionalismo, las periódicas crisis con Ucrania por la soberanía sobre Crimea o sobre la flota del Mar Negro y el descontento militar son otros tantos problemas que empañan el futuro inmediato de Rusia.

    Polonia:

    En 1980, tras la caída del sucesor de Gomulka, un período de inquietud llevó al nacimiento del sindicato obrero independiente Solidaridad, dirigido por Lech Walesa.. La ley marcial fue declarada por el general Jaruzelslki en 1981 en un intento de restaurar la autoridad comunista. Solidaridad fue prohibida y sus líderes fueron detenidos, pero la inquietud pública y las dificultades económicas continuaron. En 1989 Solidaridad fue legalizada y se alcanzó el acuerdo sobre la reforma política. Solidaridad ganó las elecciones libres al nuevo senado y con el apoyo de los antiguos aliados de los comunistas obtuvieron suficientes escaños para lograr la mayoría en la dieta y formar gobierno. El líder de Solidaridad Walesa accedió a la presidencia en 1990. Desde que se celebraron elecciones generales para la dieta en 1991, gobernaron algunas coaliciones de corta vida hasta que en 1993, en las segundas elecciones, volvieron al poder los antiguos comunistas reconvertidos a la social democracia.

    Checoslovaquia:

    A fines de 1987, los movimientos de protesta arreciaron y también la represión. En noviembre de 1989, la oposición se organizó en el Fórum Cívico, que dirigió una huelga general. El presidente del gobierno y el presidente de la República> dimitieron. Dando paso a un gobierno no comunista. En junio de 1990 el Fórum Cívico obtuvo la mayoría absoluta en las elecciones. En 1991 ingresó en el Consejo de Europa.

    El 1 de enero de 1993 nacieron la República Checa y Eslovaquia. En realidad Checoslovaquia dejó de existir en junio del año anterior> cuando el primer ministro Kaus y el líder eslovaco Meciar se pusieron de acuerdo con la división.

    Hungría:

    La caída de Kadar en 1988, aceleró los cambios democráticos. En 1989> una nueva constitución estableció el fin del Partido comunista y el establecimiento de una democracia de tipo parlamentario. En las elecciones de 1990 se impuso el Foro Democrático Húngaro, de corte democristiano.

    Rumania:

    La implantación de un régimen cada vez más represivo desembocó en una sublevación popular en diciembre de 1989. Ceausescu fue detenido, y luego de ser juzgado por un tribunal militar, ejecutado. Se formó un Consejo Provisional que dirigió el país hasta la celebración de elecciones (1990). Iliescu, líder del frente de Salvación Nacional (ex-comunistas), fue elegido presidente de la República y Petre Roman, del mismo partido, fue nombrado primer ministro.

    Alemania:

    A finales de los años 80, los crecientes "conflictos interétnicos" internos, la insuficiente producción de alimentos, la necesidad de acceder a la tecnología occidental, las manifestaciones masivas a favor de la reforma, etc. llevó a la República Democrática Alemana a un cambio en el gobierno y la apertura del muro de Berlín (noviembre de 1989), permitiendo el paso entre oriente y occidente. Continuaron las manifestaciones en favor a un cambio más radical y se designó un gobierno de coalición en la República Democrática Alemana. Cuando la economía de esta colapsó, la RFA propuso la unión monetaria y el proceso de la reunificación Alemana se hizo imparable. En 1994 se retiraron las tropas rusas del territorio de la antigua RDA y todos los soldados de las potencias vencedoras de la guerra Francia, Reino Unido, EUA y Rusia) abandonaron Berlín, consagrando así la plena devolución de la soberanía a Alemania.

     

     

    Autor:

    Rocio

    rochi_vic[arroba]stones.com

    una_argentina4u[arroba]hotmail.com