Descargar

Caracterización de pacientes con úlcera por presión


Partes: 1, 2

  1. Resumen
  2. Introducción
  3. Bases para el diagnóstico
  4. Análisis y discusión de los resultados
  5. Conclusiones
  6. Referencias bibliográficas

Resumen

El objetivo principal del estudio es conocer el riesgo de úlceras por presión en una Unidad de Cuidados Intensivos, siguiendo la escala Braden, relacionarlo con los principales diagnósticos de enfermería encontrados y visualizar dicho riesgo con las variables de carácter demográfico y de carácter clínico. Como objetivos secundarios se persigue conocer qué ítems de la escala de Braden predominan en la valoración del riesgo total de los pacientes estudiados y la prevalencia e incidencia de úlceras por presión en el período de estudio. El diseño de esta investigación corresponde a un estudio descriptivo, observacional y transversal. Una vez realizado, pudimos constatar que más de la mitad de los pacientes que ingresaron presentó riesgo de desarrollo de úlceras por presión y que éste aumentó con la edad y con las patologías médicas relacionadas con el déficit o alteración de la movilidad.

Introducción

Las úlceras por presión se han descrito en la literatura médica desde que aparecieron los primeros tratados de medicina y probablemente han existido desde los inicios de la humanidad, pues han sido halladas en momias egipcias no enterradas.1

Hoy en día, las úlceras por presión constituyen un importante problema de salud pública por sus repercusiones en diferentes ámbitos, tales como el nivel de salud de quienes las padecen, la calidad de vida de los pacientes y su entorno y el consumo de recursos para el sistema de salud, provocando incluso consecuencias legales en situaciones muchas veces evitables. La mayoría de las úlceras por presión pueden prevenirse (95% son evitables: Hibbs P. 1987, Waterlow J. 1996), por lo que es importante disponer de estrategias de educación y prevención integradas dentro de guías de práctica clínica interdisciplinarias que contemplen los distintos niveles asistenciales2.

Las úlceras por presión son una consecuencia del aplastamiento tisular entre dos planos, uno perteneciente al paciente y otro externo a él, siendo las partes más afectadas los talones, el sacro y los trocánteres.

Puede definirse según la publicada por Almendráis (1999): "la Ulcera por Presión es una lesión de origen isquémico localizada en la piel y tejidos subyacentes con pérdida de sustancia cutánea producida por presión prolongada o fricción entre dos planos duros". Así, además de considerarse el origen y la localización de las lesiones, se valoran las fuerzas de fricción como otra posible causa de las UPP.3 También existe una definición basada en la evolución de estas lesiones: "la UPP es una lesión de la piel, producida secundariamente a un proceso de Isquemia, que puede afectar a la dermis, epidermis y tejido subcutáneo, pudiendo llegar a destruir el músculo hasta alcanzar el hueso" (Gallart et al, 2001).4

La utilización de una taxonomía diagnóstica (diagnósticos de enfermería) beneficia en todos los aspectos el desarrollo disciplinario, incrementa la responsabilidad profesional, proporciona una estructura para estudio de casos e investigación y a la vez facilita un plan de cuidado óptimo. En la evaluación del plan de cuidado de úlceras, se analizarán las diferentes variables que intervienen en la aparición y evolución de las mismas.

La Escala de Norton modificada y los cambios de posición juegan un papel importante dentro de estos. Los cambios posturales se deben realizar cada dos horas y de manera cíclica durante las 24 horas del día, los cuales serán aplicados y registrados en el plan de cuidado. En el caso de los pacientes en sedestación los puntos de apoyo deberán modificarse con la misma frecuencia que en los encamados.

1.1.- FORMAS DE PRESENTACIÓN

Las úlceras por presión, habitualmente son detectadas en revisiones de rutina o bien las personas encargadas del cuidado del paciente llaman la atención sobre ellas. Es frecuente que pasen inadvertidas debido al temor de mover al paciente por la idea errónea de que al movilizarlo puede provocar problemas de salud.

Las úlceras por presión son habitualmente clasificadas en grados o estadios según sistemas de clasificación que se basan en la profundidad de la destrucción del tejido:

Estadío I.

Eritema no blanqueante de la piel intacta (no está rota la piel) que constituye el antecedente de la ulceración. Pueden ser también indicadores el aumento de temperatura, el edema, el endurecimiento y en individuos de piel oscura la decoloración de la piel.

Estadío II.

Pérdida parcial del grosor de la piel que involucra la epidermis, la dermis o ambas La úlcera es superficial y se presenta clínicamente como una abrasión, ampollas o cráteres pocos profundos, superficial.

Estadío III.

Pérdida total del grosor de la piel con daños del tejido sub.-cutáneo o necrosis del mismo. El daño no se extiende hasta la fascia. Clínicamente la úlcera aparece como un cráter profundo. Pueden presentarse excavaciones en el tejido adyacentes.

Estadío IV.

Pérdida total del grosor de la piel, con destrucción extensiva del tejido subcutáneo que puede involucrar capas musculares, articulaciones y/o huesos. Pueden presentarse como un cráter profundo con excavaciones, y pueden incluir la presencia de tejido necrótico. 8

Evolución Anatomopatológica.

Inicialmente isquemia por compresión más o menos irreversible.

Endarteritis local progresiva e irreversible.

Necrosis profunda (formación de la escara fuertemente adherida a los tejidos profundos).

Ulceración posterior a la eliminación de la escara con infección secundaria.

Formación de un tejido granulación más o menos exuberante.

Proliferación epitelial periférica y fibrosa en el lecho de la úlcera.

Retracción cicatricial con ulceración persistente y aparente estabilización de la lesión.

.Causas:

Directa:

  • La presión.

Indirectas:

  • Contrapresión.

  • Deficiencia sensorial.

  • Deficiencias motoras.

  • Fricción de las partes blandas.

  • Presión de corte.

  • Espasticidad, humedad e infección.

  • Factores psicosociales

  • Anemia e hipoalbuminemia.

Bases para el diagnóstico

2.1.- PRINCIPALES CAUSAS

El factor causal más importante es la presión, sin embargo la humedad, el escoriamiento de la piel y el desgarro de los vasos capilares que la nutren contribuyen para aumentar el riesgo. El tiempo de inmovilidad no necesita ser demasiado largo, inclusive el tiempo que se pasa sobre la mesa de cirugía puede ser causa de la aparición de estas úlceras. Se ha calculado que el tiempo mínimo para la aparición es de 2 horas. Sin embargo, no todos los adultos mayores inmovilizados desarrollan úlceras por presión. Habitualmente las úlceras aparecen en adultos mayores debilitados por una enfermedad intercurrente.

2.2.- FACTORES DE RIESGO

Desnutrición.

• Hipoproteinemia.

Anemia.

• Alteraciones neurológicas y circulatorias.

Sin embargo, se debe reconocer que la presión sobre las prominencias óseas, es la condición sin la cual no se producirían estas úlceras. Por lo tanto, se puede considerar que la inmovilidad, es la causa última de su formación. 5

La presencia de úlceras por presión supone un fracaso para el sistema de salud, ya que la denominada "epidemia bajo las sábanas" es prevenible en casi la totalidad de los casos. Lo más dramático es que un 95% de estas úlceras por presión son evitables, de lo que se derivan importantes implicaciones socioeconómicas, éticas y, últimamente, legales.6-7 Las áreas comúnmente afectadas son el cóccix, los omoplatos, las rodillas, los calcáneos, occipital de la cabeza y trocantéricas.

Existen dos hipótesis que tratan de explicar la etiología de la úlcera por presión.

  • La primera plantea que, debido a la isquemia provocada por la presión sobre las paredes de los vasos sanguíneos y linfáticos, la cual sobrepasa la presión de sus fluidos, se producen efectos anóxicos locales, así como la acumulación de metabolitos tóxicos en los tejidos locales provocada por la mala perfusión venosa. Se desarrolla además, un edema que empeora la nutrición de los tejidos.

  • La segunda considera que los cambios en la síntesis del colágeno producen una disminución de la resistencia al flujo del fluido intersticial. El fluido intersticial se detiene y se produce la necrosis, debido a la acumulación de productos en descomposición del metabolismo anaeróbico y de la incapacidad de su eliminación.

El "costo" de una ulcera por presión en las Unidades de Terapia Intensiva es elevado, tanto desde el punto de vista de recursos como asistencial. La prevención de las ulceras por presión requieren de estándares multidisciplinarios de asistencia que reconozcan la posibilidad de que todos los enfermos críticos puedan desarrollar esta complicación9. Este tipo de lesiones acarrean importantes repercusiones, tanto al paciente y su entorno familiar como al sistema sanitario. Al paciente le disminuye su calidad de vida, le aumenta el riesgo de infecciones e incluso le puede llevar a la muerte. El entorno familiar se ve comprometido debido a un accidente que podía haberse evitado en la mayor parte de los casos. En cuanto al sistema sanitario, las úlceras por presión le acarrean un consumo importante de recursos, un aumento considerable de días de ingreso hospitalario.

Según datos del primer estudio nacional de prevalencia de úlceras por presión realizado en España por el Grupo Nacional para el Estudio y Asesoramiento en úlceras por Presión y Heridas Crónicas (GNEAUPP) en 2002 las cifras actuales de prevalencia de úlceras por presión en hospitales son (en unidades de cuidados intensivos) del 13,16%. La prevalencia de úlceras por presión en unidades de cuidados intensivos es elevada al igual que ocurre en otros países desarrollados. Así en Estados Unidos esta prevalencia oscila entre el 3,5% y el 29,5%, en Holanda se sitúa en el 28,7.10

En nuestro país se realizó un estudio en pacientes graves del Hospital Naval "Dr. Luís Díaz Soto", donde la Licenciada Martínez logró determinar que: El deterioro del estado nutricional influye en la aparición de úlceras por presión.11Por otra parte la Lic. Zamora ha realizado un estudio con resultados satisfactorios donde utiliza el empleo de sacarosa en el tratamiento de la ulcera por presión.11

La profesión enfermera centra su trabajo en los cuidados, y dentro de éstos una parte importante son los cuidados de la piel. La alta presencia de esta complicación en pacientes graves y sobre todo en las unidades de cuidados intensivos, donde constituye una causa importante de morbilidad y mortalidad con un costo económico elevado. No existen muchos estudios que aborden el tema de manera integral ni que hagan referencia a su profilaxis, esta problemática nos ha motivado a la realización de este trabajo.

Objetivos.

  • 1. Precisar variables demográficas y clínicas relacionadas con la población objeto de estudio.

  • 2. Identificar factores de riesgo presentes relacionados con la incidencia de ulceras por presión.

Método

Se realizó una investigación observacional, descriptiva y transversal en el periodo comprendido entre septiembre del 2010 a mayo de 2011, en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Provincial Clínico Quirúrgico Docente "Saturnino Lora Torres" de la ciudad de Santiago de Cuba, en pacientes que desarrollaron ulceras por presión.

Bioética de la investigación:

Cumpliendo con los principios de la Bioética, se procedió a recopilar toda la información necesaria para la realización de este trabajo, realizándolo de manera cautelosa y privada para evitar causar inconvenientes a los familiares de aquellos pacientes seleccionados para integrar la población objeto de estudio. (Anexo 1)

Universo:

El Universo estuvo identificado por todos los pacientes ingresados en la unidad de cuidados intensivos polivalente del Hospital Provincial Docente "Saturnino Lora" que desarrollaron ulceras por presión, en el periodo comprendido de septiembre del 2010 a diciembre del 2011.

Criterios de inclusión:

La totalidad de pacientes que desarrollo UPP en la sala de cuidados intensivos en el periodo señalado.

Criterios de exclusión:

  • Pacientes que tenían ulceras por presión al ser admitido en el servicio.

Se seleccionó una muestra mínima de forma aleatoria simple, con los criterios de un muestreo probabilístico, la misma se calculó con la fórmula para población finita (< 100, 000 unidades de análisis).

edu.red

Operacionalización de variables:

edu.rededu.red

Técnicas y procedimientos:

  • a) Recolección de la información.

Se realizó una extensa y exhaustiva revisión bibliográfica sobre el tema, coordinada conjuntamente con expertos en la materia, mediante la cooperación permanente con el Centro Provincial de Información de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Se propició el acceso a los sistemas computarizados MEDLINE, GOOGLE, LILACS para recopilación de la bibliografía nacional e internacional actualizada en el tema en cuestión, así como la utilización de la Biblioteca Médica del Hospital Provincial "Saturnino Lora Torres" y del Hospital General Docente "Dr. Juan Bruno Zayas Alfonso", así como Trabajos de Terminación de Residencia en Medicina intensiva y Emergencias realizados en la provincia, que sirvieron de apoyo para la creación del marco teórico-conceptual del presente estudio.

Se revisaron las historias clínicas de los pacientes y la base de datos del hospital de los que se extrajo información epidemiológica de interés. Se aplicó además una encuesta para caracterizar los aspectos demográficos, epidemiológicos y asistenciales de la muestra de pacientes a estudiar. (Anexo 2).

  • b) Procesamiento de la información.

El análisis estadístico se realizó con el programa informático SPSS. Las variables cuantitativas se describieron con la media y la desviación estándar y las cualitativas con el porcentaje de distribución de cada una de las categorías. La comparación de medias se realizó mediante el t de Student. La asociación entre dos variables cualitativas se realizó mediante la prueba de Chi cuadrado y el test de Fisher. Las correlaciones se calcularon con el coeficiente de correlación de Spearman.

Toda la información recogida se procesó en una computadora Pentium IV utilizando el paquete estadístico SPSS versión 15.0, empleando además el Microsoft Excel de Office para la confección de las tablas y gráficos; así como Microsoft Word para la confección del presente proyecto y del Informe Final.

La información obtenida se consolidó en tablas y gráficos, los cuales fueron analizados y comparados con otros estudios previos realizados, permitiendo llegar a conclusiones y emitir las recomendaciones pertinentes.

Análisis y discusión de los resultados

Cuadro. 1: Distribución de pacientes según grupos de edad y sexo.

edu.red

Fuente: Planilla de vaciamiento.

En el cuadro 1 vemos que a mayor edad aumentó la frecuencia de aparición de las UPP, siendo el grupo de más de 65 años el que aportó el 43 % del total, esto siempre se refiere en toda la literatura revisada como María de la Luz, Martínez-Cuervo F, Escobar MA y otras (13); con respecto al sexo, vemos una ligera prevalencia del sexo femenino, esto no coincide con las literaturas revisadas, internacionalmente, pero consideramos que no tiene relevancia, pues no se describe predominio de ningún sexo en ninguna de la literatura revisada, Dr. Juan Carlos Alfonso Coto, Dr. José Cairos Báez y Dra. Luz Divina López Cabrera(23), tampoco encontraron esta diferencia en su trabajo, sino que lo consideramos como resultado de la composición de la muestra tomada en nuestro estudio, donde el sexo femenino tuvo una mayor representación y no fue un factor a tener en cuenta dentro de la discusión ya que no influye en la evolución favorable o no de la entidad, así tampoco como en su conducta terapéutica.

Grafico 1: Distribución de pacientes según diagnósticos médicos de las enfermedades de base.

edu.red

Fuente: Planilla de vaciamiento.

El primer gráfico expresa la asociación de enfermedades graves que disminuyen el nivel de conciencia y de movilidad del paciente notablemente y que se asocian con frecuencia con las UPP, donde la sepsis respiratoria grave ocupa el primer lugar con 6 casos para el 21.4 %, seguidas muy de cerca por los ACV con 5 casos para 17.8 % y los grandes politraumatizados Tambié con 5 pacientes para 17.8 %.

En las bibliografías internacionales revisadas, estas patologías se asocian con frecuencia a la aparición de UPP, lo que coincide con lo reportado por Allman RM, Verdú Soriano J, López Casanova P, Fuentes Pagés G, Torra i Bou JE, aunque el orden de prioridad no es exactamente el mismo, pero las variaciones no son significativas, como lo reportado por González JM et al, Jiménez M, en Cuba Martínez et al. También encontraron una relación con iguales patologías que deterioran la capacidad de movilización del paciente y esto también se encontró en un estudio realizado en nuestro hospital.

Gráfico 2: Factores predisponentes de las úlceras por presión detectados.

edu.red

Fuente: Planilla de vaciamiento.

Los principales factores predisponentes encontrados en orden fueron, las alteraciones neurológicas con disminución importante del estado de conciencia en 19 casos para un 67.8 %, seguidos de la desnutrición con 18 casos para (64.2%), la anemia con 17 casos para (60.7%), las alteraciones circulatorias 16 casos (57.1%) y otros con menos representación; en muchos de los pacientes se encontraron más de un factor predisponente; estos y otros factores son descritos en asociación con la aparición de las UPP en la bibliografía revisada como: Escobar MA (16), Jiménez M(18) y Soldevilla JJ(19), Torra JE(21); en el mundo, en Cuba Martínez et al., Zamora y colb. (10,11) encontraron similar asociación con estos factores predisponentes y en nuestro Hospital la asociación fue muy parecida (24); lo cual nos lleva a pensar y actuar en la prevención de la aparición de las UPP siempre que se asocien estos factores en un paciente de riesgo para actuar y modificar oportunamente los mismos lográndose la prevención en la aparición de tan temible complicación.

Cuadro No. 2: Distribución de las úlceras por presión según localización topográfica.

edu.red

Fuente: Planilla de vaciamiento.

En el cuadro 2. Vemos que la localización sacra fue la más frecuente con 12 casos para el 44 %, seguida de la del calcáneo y glútea con 7 y 6 para 24 y 22 % respectivamente, en tanto la localización en los trocánter y occipital fue menos frecuente, similares patrones de distribución se encuentra en la bibliografía revisada: Segovia T, Bermejo M, Molina R, Rueda J, Torra J; Silvestre C, Doménech L, Elizondo A, Erro JI, Esparza C, Merino A et al (21, 22).; en Cuba fue muy parecida la distribución de las localizaciones en los estudios realizados en otros centros como lo reportado por Dr. Juan Carlos Alfonso Coto, Dr. José Cairos Báez y Dra. Luz Divina López Cabrera (24), Alvarez Acosta, R (26) y en nuestro centro igual distribución según localización fue reportado por Lic. Susana Zamora Castro, Lic. Maria J. Flamana Franco y Lic.Yolaisy Rivero Acosta (25)

Cuadro No. 3: Distribución de pacientes según tiempo de aparición de la UPP

edu.red

Fuente: Planilla de vaciamiento.

El cuadro 3. Demuestra como a mayor tiempo de exposición del paciente al riesgo es más frecuente la aparición de las UPP, en los trabajos revisados también fue el mayor tiempo el que más se asoció con esta patología: Torra JE; Silvestre C, Doménech L, Elizondo A, Erro JI, Esparza C, Merino A et (21, 22). Tuvieron al tiempo de exposición al riesgo también como un factor a tener en cuenta para la aparición de las ulceras por presión. Otros como J. E. Suen; J. Folgueras; T. Simón; M. R. Carrasco;3 F. de A. Rosell2 y L. Suárez(27), no tuvieron en cuenta dicha asociación y en nuestro centro Lic. Susana Zamora Castro, Lic. Maria J. Flamana Franco y Lic. Yolaisy Rivero Acosta (25), no tuvieron en cuenta estos parámetros al realizar su estudio, por lo que no podemos realizar una comparación al respecto.

Cuadro No. 4: Distribución de pacientes según Ítems de la escala de Braden.

edu.red

Fuente: Planilla de vaciamiento.

Los ítems de la escala Braden que tienen mayor implicación en el riesgo son los relacionados con la presión (actividad y movilidad) y roce y peligro de lesión.

En el análisis interno de la propia escala de Braden hemos encontrado que aquellos ítems que se relacionan con la presión (actividad y movilidad) pesan más en la puntuación para generar riesgo que los ítems que se relacionan con la tolerancia de los tejidos (humedad, nutrición).

La prevalencia de úlceras por presión encontrada en nuestra investigación tiene cifras similares a las encontradas para centros de parecidas características, tanto en estudios locales como nacionales y que oscilan entre el 6,3% y 20,6%, García Duque O., Torra JE, Rueda J, Soldevilla JJ, Martínez F, Verdú J, Silvestre C, Doménech L, Elizondo A, Erro JI, Esparza C, Merino A et al(2, 21-23).

En este apartado nos encontramos con una gran dificultad para las comparaciones directas dada la gran variabilidad en la clasificación de los centros en los distintos estudios (hospitales de larga estancia, centros sociosanitarios y de convalecencia, instituciones sociosanitarias).

La incidencia aparecida en nuestro estudio, al contrario de lo que ocurre en la prevalencia, muestra cifras inferiores a las de otros estudios, que varían entre el 5,7% y el 11. Al igual que en lo aportado anterior, hemos encontrado muchas dificultades en la comparación directa de los centros Casimiro, (C. García-de-Lorenzo, A. Usan, L, Martínez et al., Zamora y colb. (10, 11,13)) pero a grandes rasgos coinciden con los encontrados en nuestro estudio y confirman como estos parámetros o ítems de la escala de Braden se relacionan con la aparición de las ulceras por presión, al explorar las principales causas de estas.

Cuadro No. 5: Relación diagnósticos de enfermería y riesgo de Braden.

edu.red

Fuente: Planilla de vaciamiento.

Este cuadro 5, en cuanto a los diagnósticos de enfermería que hemos seleccionado, consideramos que son de valoración necesaria en todo paciente. Estos diagnósticos pertenecen al patrón de actividad y ejercicio, excepto el riesgo de deterioro de la integridad cutánea, que pertenece al patrón nutricional y metabólico (Diosdado MT 20). Lo que evidencian estos diagnósticos en los pacientes que presentan úlceras es un elevado nivel de dependencia para las actividades básicas de la vida diaria, ya que predominan los diagnósticos de déficit de autocuidado, lo que es lógico, teniendo en cuenta que al presentar los pacientes estas dificultades, es expresión de que su alteración fisiológica o patología es más invalidante. .

La valoración de estos diagnósticos en nuestro estudio nos sirve como herramienta para conocer la situación actual de un problema de salud importante como son las UPP en las Unidades de Cuidados Intensivos. En nuestra investigación podemos incluir los siguientes hallazgos:

• Más de las 2/3 partes de los pacientes que ingresaron presentó riesgo de desarrollo de úlceras por presión.

• El riesgo aumentó con la edad y con las patologías médicas relacionadas con el déficit o alteración de la movilidad.

• Una menor puntuación de la escala tiene una relación directa con la aparición de úlceras.

• Los ítems de la escala Braden que tienen mayor implicación en el riesgo son los relacionados con la presión (actividad y movilidad).

• Los diagnósticos de enfermería más frecuentes en los pacientes que presentaron úlceras por presión fueron los relacionados con los déficits de autocuidado y por consiguiente los implicados en la dependencia.

Todo lo anteriormente expuesto nos indica que la valoración del riesgo al ingreso es necesaria para desarrollar acciones preventivas acorde a las características del paciente, así como el empleo adecuado de los recursos materiales y humanos. Estas acciones deben establecerse como un protocolo de actuación que nos facilite el camino para la pronta detección del riesgo y la rápida intervención de enfermería.

Nuestros resultados coincide casi totalmente con las bibliografías revisadas: Lago González, Mª de la Luz, Martínez-Cuervo F, Martínez-Cuervo F, Escobar MA, González JM, Blanco JM, Ayuso E, Recuero E, Cantero M, Sainz E, Peláez R, Jiménez M, Soldevilla JJ, Torra JE, Diosdado MT, Torra JE, Rueda J, Soldevilla JJ, Martínez F, Verdú J, Segovia T, Bermejo M, Molina R, Rueda J, Torra J, Silvestre C, Doménech L, Elizondo A, Erro JI, Esparza C, Merino A et al, Grupo Nacional para el Estudio y Asesoramiento de las Úlceras por Presión y Heridas Crónicas (GNEAUPP), Dr. Juan Carlos Alfonso Coto, Dr. José Cairos Báez y Dra. Luz Divina López Cabrera, Lic. Susana Zamora Castro, Lic. Maria J. Flamana Franco y Lic.Yolaisy Rivero Acosta, Alvarez Acosta,R (14-27).

Gráfico 3: Resultado al egreso de los pacientes estudiados con UPP.

edu.red

Fuente: Planilla de vaciamiento.

  • El Gráfico 3. Muestra como se asocia la UPP con el fallecimiento de los pacientes así en 17 (60.7%) pacientes el resultado al alta fue el fallecimiento, una cifra muy alta y significativa; esto demuestra que esta entidad es grave y condiciona la evolución desfavorable en estos pacientes, de ahí la importancia de la prevención y detección temprana para instaurar un rápido tratamiento, para incidir en una mejor evolución y resultado al egreso. Iguales asociaciones encontraron otros autores en la literatura internacional revisada, entre ellos: Martínez F, Verdú J, Segovia T, Bermejo M, Molina R, Rueda J, Torra J, Silvestre C, Doménech L, Elizondo A, Erro JI, Esparza C, Merino A et al, Grupo Nacional para el Estudio y Asesoramiento de las Úlceras por Presión y Heridas Crónicas (GNEAUPP), Dr. Juan Carlos Alfonso Coto, Dr. José Cairos Báez y Dra. Luz Divina López Cabrera(18-27) aunque con valores disímiles entre cada uno de ellos, en Cuba Dr. Juan Carlos Alfonso Coto, Dr. José Cairos Báez y Dra. Luz Divina López Cabrera; Álvarez Acosta, R; J. E. Suen; J. Folgueras; T. Simón; M. R. Carrasco, F. de A. Rosell y L. Suárez (24, 26 y 27), también encontraron que la evolución hacía la muerte fue frecuente en los paciente con ulceras por presión, esto pudiera estar condicionado por las alteraciones previas de estos pacientes que condicionan tanto la inactividad y por ende el desarrollo de esta entidad, en nuestro centro el trabaja de Lic. Susana Zamora Castro, Lic. Maria J. Flamana Franco y Lic.Yolaisy Rivero Acosta (25) también mostró que un numero elevado de pacientes evolucionó hacia la muerte a pesar de mejorar o no el estado de las lesiones de ulcera por presión de los pacientes.

Conclusiones

La valoración de los resultados de nuestro estudio nos sirve como herramienta para conocer la situación actual de un problema de salud importante como son las UPP en las Unidades Cuidados Intensivos. En nuestra investigación podemos concluir con los siguientes hallazgos: Más de la mitad de los pacientes que ingresaron presentaron riesgo de desarrollo de úlceras por presión. El riesgo aumentó con la edad y con las patologías médicas relacionadas con el déficit o alteración de la movilidad y el deterioro de la Integridad cutánea. Una menor puntuación de la escala tiene una relación directa con la aparición de úlceras. Casi la mitad de los pacientes de alto riesgo presentó UPP. Los ítems de la escala Braden que tienen mayor implicación en el riesgo son los relacionados con la presión (roce y peligro de lesión, actividad y movilidad). Los diagnósticos de enfermería que más se realizaron fueron deterioro de la integridad cutánea, deterioro de la movilidad física y déficit de auto cuidado.

Referencias bibliográficas

  • 1. López-Ambit M.J. Úlceras de presión. Geriátrika, 2004;10 (7):341-348.

  • 2. García Duque O. Úlceras por presión. En: Manual de Cirugía Plástica [en línea] 2005; Disponible en: http://www.secpre.org/

  • 3. García Fernández FP, Pancorbo Hidalgo PL, Laguna Parras JM. Guía para el cuidado del paciente con úlceras por presión con riesgo de desarrollarlas. Jaén: Hospital Universitario Princesa de España. Consejería de Salud. Junta de Andalucía; 2001.

  • 4. Jastremski CA. Pressure relief bedding to prevent pressure ulcer development in critical care. J Crit Care 2002; 17(2):122-125

  • 5. Allman RM. Pressure ulcers among the elderly. New Engl J Med 2009; 320:850-853

  • 6. Verdú Soriano J, López Casanova P, Fuentes Pagés G, Torra i Bou JE. Evaluación sobre el impacto clínico y económico de un protocolo de prevención de UPP en los talones en una unidad de medicina interna. Rev ROL Enferm 2004; 27(9):60-64.

  • 7. Papanikolau P, Clark M, Lyne PA. Improving the accuracy of pressure ulcer risk calculators: some preliminary evidence. Int J Nurs Stud 2008; 39:187-194.

  • 8. Keller BP, Wille J, Van Ramshorst B, Van der Werken C. Pressure ulcers in intensive care patients: a review of risk and prevention. Intensive Care Med 2002; 28(10):1379-1388.

  • 9. Tepee RG, Koebrugge EJ, Lowik CW, Petit PL, Bosboom RW, Twiss IM et al. Cytotoxic effects of topical antimicrobial and antiseptic agents on human keratinocytes in vitro. J Trauma 1993; 35(1):8-19

  • 10. Casimiro, C. Garcia-de-Lorenzo, A. Usan, L. Prevalence of decubitus ulcer and associated risk factors in an institutionalised Spanish elderly population. Nutrición. 2002 Vol. 18(5).

  • 11. Martínez et al. Ulcera por presión y estado nutricional en el paciente grave en el Hospital Naval. Revista Cubana de Medicina Intensiva y Emergencias 2008;7(1

  • 12. Zamora y colb. Experiencia en la cura de úlceras por presión con sacarosa. Rev Cubana Enfermer 2009;22(3)

  • 13. García de Lorenzo.Scores Pronósticos y criterios diagnósticos en el paciente critico.2da Edición 2006 Ediciones Ergon, S.A. C/ Arboleda, 1. 28220 Majadahonda (Madrid)

  • 14. Lago González, Mª de la Luz. Valoración del riesgo de úlceras por presión en una Unidad de geriatría. 2009Trabajo de Tesis.

  • 15. Martínez-Cuervo F. Las úlceras por presión: una problemática prevenible. Rev. Esp Geriatr Gerontol 2007; 39 (Supl 4): 25-34.

  • 16. Escobar MA. Úlceras por Presión en atención primaria: frecuencia y características. Rev. ROL Enferm 1998 (237): 55-8.        

  • 17. González JM, Blanco JM, Ayuso E, Recuero E, Cantero M, Sainz E, Peláez R. Epidemiología de las úlceras por presión en un hospital de agudos. Rev Calid asist 2008; 18 (3): 173-7.        

  • 18. Jiménez M. Prevalencia y factores de riesgo de úlceras por presión. Aten Prim 2008; 30 (6): 357-62. 

  • 19. Soldevilla JJ, Torra JE. Atención Integral de las Heridas Crónicas. Madrid: Edic. SPA, 2009; 209-26. 

  • 20. Diosdado MT. Indicadores de calidad de atención en enfermería geriátrica. Rev Esp Geriatr Gerontol 2008; 39 (Supl 4): 11-8.

  • 21. Torra JE, Rueda J, Soldevilla JJ, Martínez F, Verdú J. 1er Estudio Nacional de Prevalencia de Úlceras por Presión en España. Epidemiología y variables definitorias de las lesiones y pacientes. Gerokomos 2003; 14 (1): 37-47.        

  • 22. Segovia T, Bermejo M, Molina R, Rueda J, Torra J. Estudio de diferentes variables relacionadas con el estado nutricional y la presencia de úlceras por presión en pacientes mayores de 65 años con riesgo de desarrollar úlceras por presión ingresados en una Unidad de Enfermería de Medicina Interna. Gerokomos 2006; 12 (3): 121-31.        

  • 23. Silvestre C, Doménech L, Elizondo A, Erro JI, Esparza C, Merino A et al. Evolución de la prevalencia de úlceras por presión en el Hospital de Navarra. Anales Sis San Navarra 1999; 22 (3): 401-6. 

  • 24. Grupo Nacional para el Estudio y Asesoramiento de las Úlceras por Presión y Heridas Crónicas (GNEAUPP). Directrices Generales sobre Prevención de Úlceras por Presión. Logroño: GNEAUPP, 2007.

  • 25. Dr. Juan Carlos Alfonso Coto, Dr. José Cairos Báez y Dra. Luz Divina López Cabrera. Cirugía reconstructiva de las úlceras por presión. Rev Cubana Cir 2007; 46 (3)

  • 26. Lic. Susana Zamora Castro, Lic. Maria J. Flamana Franco y Lic.Yolaisy Rivero Acosta. Experiencia en la cura de úlceras por presión con sacarosa. Rev Cubana Enfermer 2006;22(3)

  • 27. AlvarezAcosta,R,http://www.sld.cu/galerias/pdf/sitios/rehabilitacion/manejo_integral_paciente_ulceras.pdf

  • 28. J. E. Suen; J. Folgueras; T. Simón; M. R. Carrasco;3 F. de A. Rosell2 y L. Suárez

  • 29. http://www.cujae.edu.cu/ediciones/Revistas/Electronica/Vol-XXVI/1-2005/03-7-Resultadosfinalesdelaaplicacion.pdf.

Bibliografía revisada.

  • 1. López-Ambit M.J. Úlceras de presión. Geriátrika, 2004;10 (7):341-348.

  • 2. García Duque O. Úlceras por presión. En: Manual de Cirugía Plástica [en línea] 2005; Disponible en: http://www.secpre.org/  

Zamora Castro, S. Experiencia en la cura de úlceras por presión con sacarosa. Rev Cubana Enfermer 2006; 22(3)

  • 3. Casimiro, C. Garcia-de-Lorenzo, A. Usan, L. Prevalence of decubitus ulcer and associated risk factors in an institutionalised Spanish elderly population. Nutrition. 2002 Vol. 18(5).

  • 4. Bours GJ, De Laat E, Halfens RJ, Lubbers M. Prevalence, risk factors and prevention of pressure ulcers in Dutch Intensive Care Units. Results of a cross-sectional survey. Intensive Care Med 2001; 27(10):1599-1605.

  • 5. Agencia de Evaluación de Tecnologías Sanitarias (AETS). Efectividad de los apósitos especiales en el tratamiento de las úlceras por presión y vasculares. Madrid: AETS. Instituto de Salud Carlos III. Ministerio de Sanidad y Consumo; 2001.

  • 6. Aguiló Sánchez S, Figueiras Mareque L, Quintilla Gatnau A, Veiga Bogo L. ¿Apósitos tradicionales o cura en ambiente húmedo? Eficacia y coste de ambos tratamientos en úlceras crónicas. Rev ROL Enferm 2001; 24(12):866-870.

  • 7. Armendáriz Alonso MJ. Úlceras por presión en Heridas crónicas y agudas Madrid: EDIMSA; 1999.

  • 8. Gago Fornells M, García González RF, Gaztelu Valdés V, Roces Menéndez A. Protector cutáneo no irritante. Rev ROL Enferm 2002; 25(5):333-337.

  • 9. García Ruiz-Rozas J, Martín Mateo A, Herrero Ballestar JV, Pomer Monferrer M, Masoliver Forés A, Lizán Tudela L. Úlceras por presión. Cad Aten Primaria 2004; 11(2):87-94.

  • 10. García Fernández FP, Pancorbo Hidalgo PL, Laguna Parras JM. Guía para el cuidado del paciente con úlceras por presión con riesgo de desarrollarlas. Jaén: Hospital Universitario Princesa de España. Consejería de Salud. Junta de Andalucía; 2001.

  • 11. Jastremski CA. Pressure relief bedding to prevent pressure ulcer development in critical care. J Crit Care 2002; 17(2):122-125

  • 12. Keller BP, Wille J, Van Ramshorst B, Van der Werken C. Pressure ulcers in intensive care patients: a review of risk and prevention. Intensive Care Med 2002; 28(10):1379-1388.

  • 13. López Casanova P, Fuentes Pagés G, Ruiz López AI, Verdú Soriano J, Torra i Bou JE. Estudio para determinar la incidencia de UPP en pacientes a quienes no se les pueden practicar cambios posturales. Actas del V Simposio Nacional sobre Úlceras por Presión. Oviedo: Convatec SA; 2004.

  • 14. Verdú Soriano J, López Casanova P, Fuentes Pagés G, Torra i Bou JE. Evaluación sobre el impacto clínico y económico de un protocolo de prevención de UPP en los talones en una unidad de medicina interna. Rev ROL Enferm 2004; 27(9):60-64.

  • 15. Thomas D. Prevention and treatment of pressure ulcers: what works? What doesn't? Cleveland Clin J Med 2001; 68:704-722.

  • 16. Papanikolau P, Clark M, Lyne PA. Improving the accuracy of pressure ulcer risk calculators: some preliminary evidence. Int J Nurs Stud 2002; 39:187-194.

  • 17. Kronde M, Lau D, Eoleman P, Stocker G. Tailoring of nutritional support for older adults in the community. J Nutr Elder 2003; 23 (2):17-32.

  • Partes: 1, 2
Página siguiente