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México: tradición milenaria


    Nuestro SOL se ocultó

    Nuestro SOL se perdió de vista

    Y en completa oscuridad

    Nos ha dejado.

    Pero sabemos que otra vez volverá

    Que otra vez saldrá

    Y nuevamente nos alumbrará.

    Pero mientras allá esté en la Mansión del Silencio,

    Muy prontamente reunámonos, estrechémonos,

    Y en el centro de nuestro SER ocultemos

    Todo lo que nuestro corazón ama

    Y que sabemos es gran tesoro.

    Destruyamos nuestros RECINTOS AL PRINCIPIO CREADOR.

    Nuestras Escuelas, nuestros Campos de Pelota.

    Nuestros Recintos para la Juventud.

    Nuestras Casas para el Canto y el Juego.

    Que solo queden nuestros caminos.

    Y que nuestros hogares nos encierren

    Hasta cuando salga nuestro NUEVO SOL.

    Los papacitos y las mamacitas

    Que nunca olviden conducir a sus jóvenes

    Y enseñarles a sus hijos, mientras vivan,

    Cuan buena ha sido

    Hasta ahora, nuestra amada Patria ANAHUAC,

    Al amparo y protección de nuestros DESTINOS.

    Por nuestro gran respeto y buen comportamiento,

    Que recibieron nuestros antepasados

    Y que nuestros papacitos, muy entusiastamente

    sembraron en nuestro SER.

    Ahora nosotros ordenaremos a nuestros hijos

    No olviden informar a sus hijos.

    Cuán buena será, cómo se levantará y alcanzará fuerza.

    Y cuán bien realizará su GRAN DESTINO.

    Esta nuestra Amada

    MADRE TIERRA ANAHUAC.

    Fechada el 12 de agosto de 1521 en México-Tenochtitlán aparece esta consigna, llamada también la Herencia o Testamento de Cuauhtémoc. Escrito anónimo y que la tradición de nuestros ancestros va pasando de mano en mano a todos los que tienen el privilegio de conocerla y leerla.

    En esta consigna o testamento fluye con una gran fuerza el espíritu de nuestra raza, y una esperanzadora invocación para los tiempos nuevos. También se manifiesta la GRAN SABIDURÍA que los animaba y el verdadero conocimiento sobre su destino presente y futuro.

    Sólo quienes ignoran la grandeza del espíritu de nuestros antepasados, piensan que los aztecas eran un pueblo atrasado y primitivo. Al pueblo de México-Tenochtitlán lo animaba una gran fuerza Espiritual, que a su vez era un pálido reflejo de la Gran Sabiduría Olmeca-Maya-Tolteca. Pero ellos eran los que la salvaguardaban, principalmente sus Reyes y Sacerdotes, quienes conociendo como conocían la Naturaleza y el Cosmos eran sus depositarios directos y respetuosos. Ciertamente hubo algunas desviaciones en cuanto a la práctica del ritual porque eran otros tiempos en donde los aspectos Marte-Sol se manifestaban, en ese momento, a través de los diversos tipos de tezcatlipocas adorados por ellos, de ahí su porte guerrero y señorial; de ahí sus Caballeros Tigres y sus Caballeros Águilas Pero sabían que Quetzalcóatl regresaría y regresaría con mayor fuerza y mayor gloria. Porque nuestros ancestros tenían una concepción cósmica y clara de todo lo que ocurría a su alrededor; sabían plenamente que el hombre y su circunstancia eran uno y tenían un mismo origen: Una Fuente Divina. No es cierto que los españoles conquistaran a los aztecas, aun cuando la historia registra hechos y conflictos que parecieran así demostrarlo; lo verdadero es que tanto los Reyes como los Sacerdotes, intérpretes del Cosmos, ante los extraños presagios que testimoniaba el pueblo, sabían que un hecho inusitado se presentaría; un ciclo terminaría y otro comenzaría. Fue así como al llegar los españoles a las costas de México, fueron recibidos con incienso y regalos, pues como instrumentos de fuerzas nefastas, se les trataba de neutralizar con dones, ya que ante el imperativo de una fuerza superior, cósmica y divina, ellos, materialmente, nada podían hacer. Fueron los Ancianos de Sabiduría los que aconsejaron a Kuauktemotzin, águila que desciende, no águila que cae, el abandono de una lucha inútil, ya que si vencían en esa ocasión, otros vendrían, en mayor número y mejor pertrechados, y los muertos serían incontables e innecesarios, era mejor aceptar los designios del "cielo" y no oponerse a ellos. Aquí, sí que realmente, fueron más crímenes del tiempo que de España, sin que tratemos de justificar las actitudes primitivas y bestiales de los españoles que atrás de la Cruz traían la espada asesina y opresora.

    En la península española se había dado cita una mezcla interminable de sangres diversas, lo mismo fenicios que godos, árabes que judíos, entre otros; sin embargo era una mezcla de razas viejas, antiguas, en decadencia permanente. Esta mezcla era ideal para que al cruzarse con otra raza también muy mezclada: Olmecas, Mayas, Toltecas, Incas, etc. diera origen a una nueva raza, para que se cumpliera la ecuación geométrica (- x – = +) menos por menos da más. De este mestizaje surgirá en el próximo milenio la nueva raza; una raza vigorosa, sana de cuerpo, mente y espíritu; será una raza no antropófaga; ovo-lacto-vegetariana, sin vicios de alcohol y tabaco, café, drogas, etc. Una raza de gimnastas y yoguis, de yug, unión con el Universo, con el Cosmos. Debido este determinismo cósmico Estados Unidos nada tiene que hacer en el futuro del continente y del mundo. En el pecado llevan la penitencia; exterminaron a los indígenas, los acorralaron, los aislaron en reservas, los menospreciaron y los humillaron profundamente; no se mezclaron para no rebajar a su raza anglosajona y correrán el mismo destino de los pueblos viejos de Europa: se estancarán y declinarán, porque Estados Unidos es una porción de habitantes europeos emigrados; es una porción de Europa trasplantada.Pero volviendo a nuestros ancestros aborígenes, jamás aceptaremos que los españoles los hubiesen civilizado, los colonizaron eso sí, los explotaron y los fanatizaron en apariencia, pero no los culturizaron. Los aztecas, herederos de la grandeza Tolteca, aun cuando muy disminuida, eran, ellos sí, un pueblo culto, civilizado; un pueblo demuestra que es culto y civilizado cuando es disciplinado, ordenado y místico; y nuestros ancestros eran eso y mucho más. Sus mercados eran limpios, sus dirigentes, reyes y sacerdotes, respetados, sus ancianos, venerados, sus hijos educados " Moctezuma erigiría lo que habría de ser una capital modelo, a partir de cuatro direcciones, entre islas y canales, donde no habría pobreza, abundaban los palacios, y los templos, resplandecía la belleza, la pulcritud de las viviendas y las gentes, la pureza de las aguas; existían acueductos, desarrollaron mercado de copioso abastecimiento, entre ellos el de Tlatelolco, el más rico del mundo según atestiguaron los propios españoles a su llegada. También había educación universal gratuita y obligatoria, escritura, literatura, filosofía, astronomía, calendario, ciencia, culto a un dios supremo, Quetzalcóatl, deidad inspiradora como el ave epónima de la libertad.

    Con razón, a la vista de esta ciudad de México, se asombró el cronista Bernal Díaz del Castillo: " Y desde que vimos tantas ciudades y valles poblados en el agua y en la tierra firme, y otras grandes poblaciones, y aquella calzada tan derecha y a nivel como iba a México , nos quedamos admirados, y decíamos que parecía a las cosas de encantamiento que cuentan en el libro de Amadís, por las grandes torres y edificios que tenían dentro del agua, y todos de cal, y canto, y aún algunos de nuestros soldados decían que si aquello que veían era entre sueños; y no es de maravillar que yo escriba aquí de esta manera, porque hay mucho que ponderar en ella. No es como en los cuentos, veo cosas nunca vistas, ni aún soñadas como veíamos".

    Pensar o afirmar que los españoles eran más cultos y civilizados que nuestros abuelos mexicas, porque traían fusiles, pólvora y cañones, es denostar la verdadera sabiduría por la técnica armamentista de un pueblo primitivo, belicoso y hostil. Ahora, si pensamos en quienes eran los conquistadores, su estructura moral y cívica, encontraremos más argumentos a nuestro favor, ya que en su gran mayoría eran aventureros sin principios, ambiciosos y corruptos, ladrones, pillos sin conciencia y humanismo, beneficiados por un imperio que le urgía nutrir sus ejércitos, de la forma que fuese. Las excepciones como Fray Bartolomé de las Casas o Fray Bernardino de Sahagún confirman la regla. No en balde Inglaterra beneficiada por este forzoso " connubio social " hizo nobles a malandrines y piratas. Punto por punto y analizando sin subjetivismo alguno; nuestros ancestros eran más cultos y más evolucionados. Que hubiesen trastocado en parte la sabiduría Tolteca, sustituyendo a Quetzalcóatl por Huitzilopochtli, también es resultado de otros tiempos, otras influencias cósmicas, que en nada menoscaba sus costumbres sociales, económicas, políticas, jurídicas y religiosas o místicas. Se les puede criticar el procedimiento, más no se les puede objetar el conocimiento. Conocían a la Madre Naturaleza y respetaban el Cosmos vivo y radiante, recordemos que a las estrellas las simbolizaban como un ojo abierto, por esto estaban esencialmente más cerca de Dios que los españoles, los cuales adoraban las formas pero ignoraban la esencia. Los aztecas intuían el espíritu divino en su raza y lo preservaban. La intuición de este espíritu es el que les hace afirmar categóricos:

    Destruyamos nuestros RECINTOS AL PRINCIPIO CREADOR

    Nuestras Escuelas, nuestros Campos de Pelota.

    Nuestros recintos para la Juventud.

    Nuestras Casas para el Canto y el Juego.

    Que solo queden nuestros caminos.

    Y que nuestros hogares nos encierren

    Hasta cuando salga nuestro NUEVO SOL.

    Porque sabían que el espíritu de la Raza, de la Raza Americana divina y esplendorosa, resurgiría a través de los años, porque en otros tiempos este poderoso egregor cósmico, también había animado a Toltecas, Mayas, Olmecas, Incas, etc. y también había desaparecido, para resurgir con mayor fuerza y vigor, a través de los años cuando el " Libro de los Cielos" corriera sus páginas y permitiera que los astros en aspectación positiva influyeran con nuevas vibraciones en la psiquis colectiva, reabriendo la conciencia de los nuevos mexicanos, cuyo espíritu indiano brotaría con mayor gloria y esplendor a la usanza de los antiguos. El ilustre oaxaqueño, de estirpe indígena, José Vasconcelos así lo intuyó en su profético pensamiento:

    "POR MI RAZA HABLARA EL ESPÍRITU "

    Ahora los tiempos están aquí, los signos se están dando, todo presagia nuevos tiempos para el mundo y América, la América cobriza y señorial, no el trasplante anglosajón y europeo, vuelve a influir eternalmente presente…

    Sí, los tiempos están aquí, los signos se están dando, todo presagia la aurora de un nuevo ciclo; ahora, como dijera un MAESTRO DE LUZ Y SABIDURÍA, la "conquista" será de América, no a Europa, sino al mundo, pero será una "conquista", amorosa y espiritual, carente de mezquinos intereses y bastardas ambiciones. Será más que una " conquista", el compartir una Sabiduría Ancestral y un Conocimiento Universal. Conocimiento Universal que viaja de Occidente a Oriente y de Oriente a Occidente, en un permanente devenir tal como lo señala el eminente científico Dr. Serge Raynaud de la Ferriere.

    "Hemos visto que la Joya Esotérica había sido transportada del Occidente al Oriente, el cual ha conservado la supremacía espiritual hasta nuestros días, y en estos últimos tiempos ocurre también un desplazamiento parcial de los depósitos del conocimiento hacia el Oeste. (En particular a Europa, Inglaterra, Alemania y Francia).

    Del Tíbet, detentador de los Altos Santuarios del Saber, se han escapado algunas migajas iniciáticas (por intermedio de instructores secretos que en calidad de Mensajeros las esparcen por el mundo), con el objeto de preparar la difusión de la Joya Eternal (la Santa Verdad).

    Hemos asistido durante estos últimos años a una revitalización de las sociedades místicas, de las asociaciones ocultas, de las fraternidades filosóficas y, en una palabra, el Tíbet había levantado el velo del silencio y podemos ya decir que el Polo Espiritual se ha desplazado.

    Numerosas agrupaciones de ocultismo han abierto sus puertas a todos los que ha ellas se han acercado, lo que permite a muchos emprender una preparación elemental en esoterismo y en cierta espiritualidad, para el mejor provecho de la Humanidad en Evolución.

    El magnetismo espiritual que ha tenido vigencia desde hace siglos sobre el Extremo Oriente, emitió dulcemente sus efluvios sobre Europa donde algunos Maestros, delegados de la Suprema Asamblea de Sabios, prepararon los Instructores para la Nueva Era, la cual demanda Misioneros Activos que pueden educar al mundo llegado el momento. Este momento es la entrada del Sol en la Constelación de Aquarius (Equinoccio de Primavera del año 1948).

    Así, pues, este electro-magnetismo geognóstico, después de haber vibrado en las cadenas de los Himalayas, se desplazó un instante a los Alpes debiendo pasar a la Cordillera de los Andes, y esto únicamente por un largo período en que va a vibrar intensamente el fluido regenerador que ha hecho las grandes civilizaciones de otras épocas.

    Es siempre en las alturas, sobre algunas de las mesetas más altas o en las cimas de las grandes montañas, donde se instalan los Santuarios al abrigo del mundo profano y de la perversión materialista.

    Este desplazamiento del fluido terrestre que ayuda al desenvolvimiento de la espiritualidad, se comprende cuando se sabe que la condensación magnética, en un lugar cualquiera, produce una elevación del nivel tanto psíquico como intelectual porque los efluvios de esta corriente sobrepasan la superficie de la Tierra, se transmiten por el cuerpo de los seres humanos acarreándoles así una cierta iluminación de los centros de poder de su organismo.

    La aglomeración de los nuevos Centros Espirituales (Santuarios, Ashrams, Colegios de Sabiduría) en América (especialmente en el Centro y sobre todo en el continente Sur) no disminuirá en nada el papel cumplido por el Tíbet, sólo que la condensación fluídica desaparecerá más y más a fin de que se cumpla la Ley de evolución en todas las cosas. (El Tíbet se convertirá progresivamente en materialista, en tanto que la América Central y sobre todo la América del Sur, va a espiritualizarse).

    En cada época, en un sitio muy definido del globo se irradian influjos capaces de establecer un cierto equilibrio mínimo para permitir que se perpetúe la Tradición Iniciática, al mismo tiempo que se proyecta en el espacio un magnetismo neutralizador de las fuerzas magnéticas del mal, siempre en acción sobre una superficie máxima.

    Este lugar especial es con frecuencia el mismo sitio que ha presidido el apogeo de una civilización cualquiera, millares de años antes. Los puntos magnéticos del globo (a menos que desaparezcan completamente como los de la Atlántida y la Lemuria) son siempre los mismos, pero iluminándose alternativamente. Se podrá comparar muy bien esto con los Sattvikas que son las instrospecciones que viven en el Yo, y así: Tamas, Rajas y Sattvas son tres cualidades internas y a cada instante una de ellas predomina.

    HENOS AQUÍ PUES UNA VEZ MAS A LAS PUERTAS DE UNA NUEVA GRAN ERA, Y ES EL CONTINENTE AMERICANO EL ELEGIDO PARA VER EL MÁXIMO DE ESTA ÉPOCA FLORECIENTE DONDE, COMO CONTINUACIÓN DE LOS TOLTECAS, MAYAS, INCAS, VENDRÁN A INSCRIBIRSE LOS ACUARIANOS".

    En América tres serán los puntos en los cuales convergerán la Manifestación Cósmica y la Celestial: México, Venezuela y Perú. Un triángulo invisible e imperecedero. Después de esta crisis, crisol, acrisolada; las naciones de América quedaran depuradas y consagradas. En este milenio esta manifestación no tendrá escollo ni obstáculo, todo lo que se oponga será derruido. Las banderas de los seres íntegros, de los Reyes-Sacerdotes, ondearán enhiestas y grandiosas, para admiración de los hombres y la gloria del Gran Arquitecto del Universo; y México, la palabra mágica por excelencia, Mexcico- Mágico, será nuevamente pronunciada con sentido reverencial, al conjuro de su esencia Solar-Lunar, símbolo de nuestro irrecusable destino. Símbolo del espíritu cósmico que anima a esta ancestral nación. México no será una nación pobre jamás, su portento espiritual irá de la mano con el portento material. El prodigio Teotihuacán- México-Tenochtitlán se convertirá en una nueva realidad, en otra época, en otro tiempo, pero no menos maravilloso, no menos subliminal. Si en nombre de Quetzalcóatl (serpiente-águila, lo que se arrastra se eleva), se construyeron los templos fabulosos de la Antigua América. Si en Chi-Chen-Itzá se erigió la computadora cósmica de mayor precisión mundial, la Pirámide de Ku-kul-kán; si Moctezuma siguiendo la tradición Tolteca elevó una ciudad majestuosa y señorial en los nuevos tiempos, todo esto se superará: los conocimientos verdaderos cobrarán inigualable dimensión. Todo resurgirá a mayores alturas; ¡ el mundo se admirará ! En el próximo milenio México y América conocerán una grandeza sin igual. La moral y el espíritu dejarán de ser ideas, abstracciones, adorno social, para convertirse en la razón de ser de todo ciudadano, de todo dirigente mundial. El Minotauro se transmutará y nuevo hombre liberado su laberinto olvidará. Los reyes Minos desaparecerán. Entonces Teotihuacán-México-Tenochtitlán volverá como antaño a su origen cósmico y natural. Viviremos conforme a la naturaleza y no en contra de ella. Por mandato divino la dinastía de los Reyes-Sacerdotes, ungidos, se elevará. Los nuevos guías sociales, por voluntad y esfuerzo propio, más el apoyo celestial, serán dueños de sí mismos; física, emocional y mentalmente se dominarán," recordando, despertando, muriendo y naciendo " en un nuevo ciclo vital.

    Ya no existirá ni improvisación, ni casualidad; las palabras sabias, proféticas y eternales se cumplirán; " de manera que como es cogida la cizaña, y quemada al fuego, así será el fin de este siglo".

    "Enviará el hijo del hombre a sus ángeles, y cogerán de su reino a todos los escándalos y los que hacen iniquidad ".

    "Y los echarán en el horno de fuego: allí será el lloro y el crujir de dientes "

    "Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino de su Padre: el que tiene oídos para oír oiga ".

     

     

    Autor:

    Leoescorpio Joel Hurtado Ramón