El lenguaje oral de los deportistas: mito o realidad (página 2)

Nadie como nuestro país para eliminar esta gran dificultad en el lenguaje, más cuando el comandante en jefe Fidel Castro, lleva a cabo una batalla sin fronteras, por la cultura general de todos los cubanos, basándose y siguiendo el ejemplo de nuestro inolvidable José Martí cuando expresó: Ser culto es el único modo de ser libres, o sea como vamos a ser libres, a tener dignidad si ni siquiera utilizamos correctamente nuestra lengua.

No hay cultura posible si nuestra lengua oral que es la base de la escrita está en deterioro.

Tenemos que perfeccionar en primer lugar la lengua oral, para poder pensar en cultivarnos, ya que está es el eslabón fundamental de la lectura, expresividad, intelecto y riqueza de espíritu en general.

La expresión oral de nuestros atletas, debe ser tarea prioritaria, para que en los próximos años el país ostente un grupo de deportistas mejor preparados y con mayores posibilidades expresivas, aportando así un granito de arena a la labor que estamos enfrascados constructores comprometidos en hacer de Cuba el país más culto del mundo.

Mediante la comunicación oral se satisfacen las necesidades elementales humanas, tanto materiales como espirituales.

El uso correcto de la lengua, en las actuales generaciones de deportistas garantiza que las venideras las hereden con toda su originalidad y riqueza, desechando vocablos vulgares o extranjerizantes, así como también favoreciendo la correcta pronunciación, lo que facilita el proceso de comunicación interpersonal y da cuenta de la preparación cultural de nuestros estudiantes.

Nos corresponde a nosotros vanguardias en la lucha por la emancipación cultural de los ciudadanos, estimular el uso correcto de la lengua materna, en la propia actividad docente y hasta en los intercambios que tenemos con los jóvenes en los marcos fuera del aula. Solo así los atletas podrán pronunciarse en defensa de la patria de forma coherente, locuaz y culta en cada rincón del mundo, demostrando en cada frase la preparación cultural de los deportistas cubanos.

Sabemos que la tarea es bien difícil, pero para nada utópica. Es seguro de que sembrando los frutos hoy, recogeremos una rica cosecha en el futuro, con la que podamos alcanzar un equilibrio entre la cultura del deporte y la lengua materna.

Por su carácter cotidiano, la mayoría de los hablantes no le conceden al lenguaje la importancia que en todo sentido tiene. Tampoco se percatan de las infinitas posibilidades que brinda, ni de que a veces se utiliza erróneamente y mucho menos de que esto es susceptible de mejoramiento continuo, empleando la practica sistemática, orientada y consciente.

La lengua es un producto eminentemente social, cambiante, dinámico y esencialmente humano, todo código de comunicación no es una entidad aislada, ni desvinculada de la realidad social en la que está inmersa, todo sistema lingüístico participa completamente en la problemática social a la vez que es un instrumento de comunicación de los individuos que lo utilizan. El sistema lingüístico no lo podemos disociar de los problemas culturales, ideológicos y económicos.

Descartamos del lenguaje verbal, como sistema cerrado y autosuficiente; si bien es cierto que el lenguaje es arbitrario y convencional, queremos destacar la idea de que el lenguaje es esencialmente social, y que al estudiarlo solo desde el punto de vista de su estructura y funcionamiento, hacemos del lenguaje una entidad deshumanizada lo damos por seguro.

Disociar al lenguaje de la problemática social – de su función social – es olvidar que es precisamente el lenguaje, el que define y separa al hombre de la naturaleza.

El lenguaje es cultura, pero también es ideología de clases, es ideología política, y en última instancia, es ideología económica, es decir, que el lenguaje no es solo un instrumento de comunicación entre los interlocutores, es un sistema que también se ve involucrado, como por ejemplo los sistemas políticos y religiosos en la lucha de clases por el poder político y económico.

Así se ha llegado a decir."No se explica la invención del lenguaje sin el lenguaje". Y tan potente es la utilidad del lenguaje, que los psicólogos lo consideran en su tests, como uno de los índices más seguros para determinar la capacidad del desarrollo mental de un individuo

"Vida y palabra, pensamiento y palabra son inseparables". "Pensar y saber es querer decir y poder decir" Estas palabras nos condicionan la importancia del decir para los seres humanos, sino podemos decir, nunca podremos desarrollar a plenitud el pensamiento y los conocimientos.

Pero el uso del lenguaje del que todos tenemos un conocimiento práctico, es un fenómeno complejo, no es tan fácil como se cree el hablar con corrección. "El lenguaje- dice Rafael Seco- es el gran instrumento de comunicación de que dispone la Humanidad, íntimamente ligado a la civilización, hasta tal punto que se ha llegado a discutir si fue el lenguaje el que nació de la sociedad o fue la sociedad la que nació del lenguaje"[1]

Verdad es que no todas las personas poseen el mismo caudal lingüístico, pero no cabe duda de que las ventajas estarán de parte de aquellos en que ese caudal sea más preciso. Todo el mundo sabe que el que concibe hacerse entender mejor, el que se expresa con mayor calidad y precisión, es dueño de recursos poderosos para abrirse camino en el trato con sus semejantes: "El arte de hablar y de escribir es el arte de persuadir".

Autores:

MSc María Matilde Fuertes Porben

Lic. Raidelín hernández posraspita

Lic. Zuleida Rodríguez Díaz