Rafael Alberti (1902-1999)
Rafael Alberti es el poeta de esta generación de mayor variedad en cuanto a temas, tonos y estilos. Su primer libro, Marinero en tierra (1925), recoge temas populares y formas tomadas de la tradición literaria culta de la Edad Media y el Renacimiento (Marqués de Santillana, Gil Vicente). Escribe al modo surrealista en Sobre los ángeles (1929) y en la guerra civil, como Miguel Hernández, se sirve de la poesía como un arma más de combate (Poeta en la calle, 1936). Finalizada la contienda, sigue publicando profusamente; toda su obra revela a un virtuoso de la forma, que puede abordar casi cualquier empresa.
Si mi voz muriera en tierra, llevadla al nivel del mar y dejadla en la ribera.
Llevadla al nivel del mar y nombradla capitana de un blanco bajel de guerra.
¡Oh mi voz condecorada con la insignia marinera: sobre el corazón un ancla y sobre el ancla una estrella y sobre la estrella el viento y sobre el viento la vela!
Marinero en tierra (1925) | "Si mi voz muriera en tierra…" (neopo-pularismo)
El poema arranca como una soleá (copla andaluza de raíz popular utilizada también por los poetas cultos). Luego, a partir del verso 7, los versos van entrelazándose, por medio de una concatenación que acumula elementos dispares -aunque pertenecientes al campo semántico del mar- en un orden irracional. Tras una hipótesis inicial (fíjate en que lo que muere no es el poeta, sino la voz. Coméntalo) se expresa una especie de testamento. Analiza y comenta las formas verbales. Tras la muerte, el poeta no parece desear el entierro, sino más bien otra cosa. Coméntalo y explica el valor simbólico y romántico de ese "capitana de un blanco bajel de guerra". Explica el efecto que producen la suma de concatenación, anáfora y polisíndeton en los vv. 9-12. |
LOS DOS ÁNGELES Ángel de luz, ardiendo, ¡oh, ven!, y con tu espada incendia los abismos donde yace mi subterráneo ángel de las nieblas.
¡Oh espadazo en las sombras! Chispas múltiples, Clavándose en mi cuerpo, en mis alas sin plumas, en lo que nadie ve, vida.
Me estás quemando vivo. Vuela ya de mí, oscuro Luzbel de las canteras sin auroras, de los pozos sin agua, de las simas sin sueño ya carbón del espíritu, sol, luna.
Me duelen los cabellos Y las ansias. ¡Oh, quémame! ¡Más, más, sí, sí, más! ¡Quémame!
¡Quémalo, ángel de la luz, custodio mío, tú que andabas llorando por las nubes, tú, sin mí, tú, por mí, ángel frío de polvo, ya sin gloria, volcado en las tinieblas! ¡Quémalo, ángel de luz, quémame y huye! | "Los dos ángeles" |
CANCIÓN 5
Hoy las nubes me trajeron,
volando, el mapa de España.
¡Qué pequeño sobre el río,
y qué grande sobre el pasto
la sombra que proyectaba!
Se le llenó de caballos
la sombra que proyectaba.
Yo, a caballo, por su sombra
busqué mi pueblo y mi casa.
Entré en el patio que un día
fuera una fuente con agua.
Aunque no estaba la fuente,
la fuente siempre sonaba.
Y el agua que no corría
volvió para darme agua.
Baladas y canciones del Paraná (1953)
"Canción 5"
(exilio)
El exilio le provoca el recuerdo doloroso de la patria perdida y la guerra fratricida. Junto a su anhelo por volver, su voz clama por la reconciliación.
En Baladas y canciones del Paraná sus versos vuelven a traernos la fragancia de la lírica tradicional, con la que expresa la pura nostalgia. El poema se basa en la delicadísima confusión entre elementos reales e imaginarios. Explícala. Comenta el valor de la "fuente del patio".
Vicente Aleixandre (1898-1984)
Vicente Aleixandre, Premio Nobel en 1978, representa para los poetas de los años 40 y 50 la voz que mejor sabe expresar los impulsos elementales del amor y de la vida. En La destrucción o el amor (1932-1933), el sentimiento amoroso es visto como una fuerza destructiva, anuncio de una muerte que permite la definitiva integración del hombre en el Universo. Con Sombra del paraíso (1939-1943), obra influida tardíamente por el Surrealismo, aparece una poesía de tono más relajado, en la que se configura un mundo perfecto, no contaminado por el hombre. A partir de Historia del corazón (1954) y En un vasto dominio (1962) ese nivel cósmico de la poesía de Aleixandre se completa con una mayor atención a los problemas sociales y personales.
UNIDAD EN ELLA Cuerpo feliz que fluye entre mis manos, rostro amado donde contemplo el mundo, donde graciosos pájaros se copian fugitivos, volando a la región donde nada se olvida.
Tu forma externa, diamante o rubí duro, brillo de un sol que entre mis manos deslumbra, cráter que me convoca con su música íntima, con esa indescifrable llamada de tus dientes.
Muero porque me arrojo, porque quiero morir, porque quiero vivir en el fuego, porque este aire de fuera no es mío, sino el caliente aliento que si me acerco quema y dora mis labios desde un fondo.
Deja, deja que mire, teñido del amor, enrojecido el rostro por tu purpúrea vida, deja que mire el hondo clamor de tus entrañas donde muero y renuncio a vivir para siempre.
Quiero amor o la muerte, quiero morir del todo, quiero ser tú, tu sangre, esa lava rugiente que regando encerrada bellos miembros extremos siente así los hermosos límites de la vida.
Este beso en tus labios como una lenta espina, como un mar que voló hecho un espejo, como el brillo de un ala, es todavía unas manos, un repasar de tu crujiente pelo, un crepitar de la luz vengadora, luz o espada mortal que sobre mi cuello amenaza, pero que nunca podrá destruir la unidad de este mundo.
La destrucción o el amor (1932-33) | Unidad en ella (neorromanticismo)
Por la misma época en la que comienza a sentirse la influencia surrealista -desde 1927-, los poetas se muestran muy influidos también por la poesía de Bécquer, que trae a la lírica una carga de emotividad mayor que la que se percibía en la poesía pura, al tiempo que justifica la presencia creciente de las preocupaciones personales. Comienza, así, una segunda vía de rehumanización de la poesía, que alcanzará su máxima expresión en la lírica intimista de Luis Cernuda y de Vicente Aleixandre. La destrucción o el amor contiene algunos de los poemas amorosos más intensos escritos en castellano. En ellos la pasión amorosa se confunda con la pasión por una muerte liberadora. En esta primera etapa Aleixandre ofrece una visión del hombre radicalmente pesimista. "Unidad en ella" identifica amor y muerte. La amada se identifica con el Universo (explica las imágenes -algunas de carácter irracional- que se van encadenando y que describen al ser amado, "cuerpo feliz", con rasgos telúricos) de modo que amar es como morir disolviéndose en la naturaleza. Observa la mezcla de versículos y alejandrinos. |
MANO ENTREGADA Pero otro día toco tu mano. Mano tibia. Tu delicada mano silente. A veces cierro mis ojos y toco leve tu mano, leve toque que comprueba su forma, que tienta su estructura, sintiendo bajo la piel alada el duro hueso insobornable, el triste hueso adonde no llega nunca el amor. Oh carne dulce, que sí se empapa del amor hermoso.
Es por la piel secreta, secretamente abierta, invisiblemente entreabierta, por donde el calor tibio propaga su voz, su afán dulce; por donde mi voz penetra hasta tus venas tibias, para rodar por ellas en tu escondida sangre, como otra sangre que sonara oscura, que dulcemente oscura te besara por dentro, recorriendo despacio como sonido puro ese cuerpo, que ahora resuena mío, mío poblado de mis voces profundas, oh resonando cuerpo de mi amor, oh poseído cuerpo, oh cuerpo sólo sonido de mi voz poseyéndole,
Por eso cuando acaricio tu mano, sé que sólo el hueso rehúsa mi amor –el nunca incandescente hueso del hombre-. Y que una zona triste de tu ser se rehúsa, mientras tu carne entera llega un instante lúcido en que total flamea, por virtud de ese lento contacto de tu mano, de tu porosa mano suavísima que gime, tu delicada mano silente, por donde entro despacio, despacísimo, secretamente en tu vida, hasta tus venas hondas totales donde bogo, donde te pueblo y canto completo entre tu carne.
Historia del corazón (1954) | "Mano entregada" (Compromiso social)
Ahora el hombre es mirado positivamente. Sigue siendo una criatura desvalida, que sufre, pero ahora el poeta se solidariza con él y admira su "quehacer valiente y doloroso". Expresa el gozo de amar y sus límites (oposición simbólica carne/hueso). Observa cómo se demora el poema para expresar el demorado contacto amoroso (tres estrofas paralelas, versículos plagados de reiteraciones…)
|
Luis Cernuda, tras unos comienzos experimentales, se decanta, a partir de 1930, hacia una lírica basada en la experiencia personal, más honda y auténtica, en la que la imagen pierde también su carácter decorativo y colorista para hacerse más sobria, más intensa y más conceptual y afectiva, al servicio de la expresión de alegrías profundas y desgarros íntimos. A partir de 1938, trabaja en varias universidades británicas, estadounidenses y mexicanas. Su producción poética esencial está compilada en La realidad y el deseo (1936-1962) que, como se puede apreciar, fue escrita después de la Guerra. Destaca también su libro de prosa poética Ocnos (1942).
DONDE HABITE EL OLVIDO Donde habite el olvido, en los vastos jardines sin aurora; donde yo sólo sea memoria de una piedra sepultada entre ortigas sobre la cual el viento escapa a sus insomnios.
Donde mi nombre deje al cuerpo que designa en brazos de los siglos, donde el deseo no exista.
En esa gran región donde al amor, ángel terrible, no esconda como acero en mi pecho su ala, sonriendo lleno de gracia aérea mientras crece el tormento. Allá donde termine este afán que exige un dueño a imagen suya, sometiendo a otra vida su vida, sin más horizonte que otros ojos frente a frente.
Donde penas y dichas no sean más que nombres, cielo y tierra nativos en torno de un recuerdo; donde al fin quede libre sin saberlo yo mismo, disuelto en niebla, ausencia, ausencia leve como carne de niño.
Allá, allá lejos; donde habite el olvido.
Donde habite el olvido (1932-33) | "Donde habite el olvido" (neorromanticismo).
Cernuda hace una poesía dolorida que pone de manifiesto, una y otra vez, su rebeldía y su incapacidad para adaptarse a las normas establecidas, desde su condición de homosexual. En este poema el autor comienza aludiendo al desconocimiento y el deseo, por medio del subjuntivo (habite). Este verso, que encabeza el poema, ha sido tomado de una composición de Bécquer. A continuación, va enumerando los rasgos de un mundo imaginario donde quedarían abolidas todas las cosas negativas de su vida; un reino donde el poeta no existirá más que como memoria impasible, fría e indiferente. En las imágenes del olvido utilizadas por Cernuda -misteriosas e irracionales- se advierte la influencia del Surrealismo. El símbolo del amor, por el contrario, recuerda a Bécquer: El amor es un ángel terrible que sonríe desde sus alturas aéreas mientras el hombre sufre terriblemente. El poeta hace una especie de valoración de sus pasadas experiencias amorosas y las examina de manera retrospectiva. Relee la Rima LXVI de Bécquer de la que toma el primer verso de este poema. Fíjate que Cernuda elabora su poema como una sucesión de oraciones subordinadas en las que falta la oración principal. ¿Cuál imaginas que podría ser? ¿La misma que en la rima de Bécquer? ¿Qué sentimientos sobre el amor expresa en los vv. 9 y siguientes? ¿Qué anhelos hay en el poeta? |
SI EL HOMBRE PUDIERA DECIR Si el hombre pudiera decir lo que ama, si el hombre pudiera levantar su voz por el cielo como una nube en la luz; si como muros que se derrumban para saludar la verdad erguida en medio, pudiera derrumbar su cuerpo, dejando sólo la verdad de su amor, la verdad de sí mismo, que no se llama gloria, fortuna o ambición, sino amor o deseo, yo sería aquel que imaginaba; aquel que con su lengua, sus ojos y sus manos proclama ante los hombres la verdad ignorada, la verdad de su amor verdadero.
Libertad no conozco sino la libertad de estar preso en alguien cuyo nombre no puedo oír sin escalofrío; alguien por quien me olvido de esta existencia mezquina, por quien el día y la noche son para mí lo que quiera, y mi cuerpo y espíritu flotan en su cuerpo y espíritu como leños perdidos que el mar anega o levanta libremente, con la libertad del amor, la única libertad que me exalta, la única libertad por que muero.
Tú justificas mi existencia: Si no te conozco, no he vivido; si muero sin conocerte, no muero, porque no he vivido.
Los placeres prohibidos (1931) | "Si el hombre pudiera decir" (Surrealismo)
El amor y sus límites encuentran, en estos versículos perfectamente modulados, un acento de contenido patetismo. La dificultad de encontrar el significado estriba los largos periodos oracionales y en lo lejos que queda la oración principal. Interpreta las comparaciones y también la paradoja final. Analiza la raigambre romántica de la concepción del amor cernudiano (anhelo romántico de amor pleno y libre que choca con las barreras que le pone la realidad).
|
D. | Direcciones de internet |
http://web.educastur.princast.es/ies/carrenom/lengua/index.htm
http://roble.pntic.mec.es/~msanto1/lengua/2g27.htm
http://www.residencia.csic.es/pres/presenta.htm
http://comunidad-escolar.pntic.mec.es/documentos/introduc/lectura.html
http://www.mundolatino.org/cultura/alberti6.htm
http://www.vicentellop.com/TEXTOS/lorca/garcialorca.htm
http://www.wikio.es/cultura/literatura/generacion_del_27
Enviado por:
Eugenia Sol
Página anterior | Volver al principio del trabajo | Página siguiente |