En una forma lo más breve posible, este estudio dará al traste a una serie de planteamientos que se hicieron respecto a si los niños y adolescentes del municipio de Puerto Padre padecían de alguna deficiencia motriz por el mal uso de los ejercicios físicos, nuestro eslavón principal está en demostrar las ventajas que tiene el ejercicio físico en ellos, ya que la principal estructura que carga y soporta con todas las actividades es el aparato locomotor, sin dejar al descuido que los órganos y estructuras que conforman al ser humano son objetos también de cambios significativos a nivel celular y estructural, el desarrollo de la condición física en edad escolar, creemos está justificado, además de por los beneficios concretos en la salud del individuo, porque le capacita para una buena ejecución de las tareas deportivas y las destrezas motrices. Ahora bien, debemosasumir que el ejercicio no será nunca neutral, sino que influirá en el desarrollo de los niños, beneficiándoles o perjudicándoles.
Palabras clave
Condición física, actividad física, programas deportivos, capacidades físicas.
Cuantas más horas pase un niño o adolescente frente al televisor, menos tiempo tendrá para jugar y correr. Por eso los padres deben limitar esta actividad, así como los juegos de vídeo y el uso de las computadoras. Por su parte, ellos mismos deben dar el ejemplo, manteniéndose activos o haciendo ejercicios juntos, lo que suele ser divertido para todos. La práctica de la actividad física en forma sistemática y regular debe tomarse como un elemento significativo en la prevención, desarrollo y rehabilitación de la salud, mejoría de la posición corporal por el fortalecimiento de los músculos lumbares, prevención de enfermedades como la diabetes, la hipertensión arterial, la osteoporosis, cáncer de colon, lumbalgias, etc. En general, los efectos benéficos de la actividad física se pueden ver en los siguientes aspectos: A nivel orgánico: aumento de la elasticidad y movilidad articular. Mayor coordinación, habilidad y capacidad de reacción. Ganancia muscular la cual se traduce en el aumento del metabolismo, que a su vez produce una disminución de la grasa corporal (prevención de la obesidad y sus consecuencias). Aumento de la resistencia a la fatiga corporal (cansancio). A nivel cardíaco: se aprecia un aumento de la resistencia orgánica, mejoría de la circulación, regulación del pulso y disminución de la presión arterial. A nivel pulmonar: se aprecia mejoría de la capacidad pulmonar y consiguiente oxigenación. También la práctica regular del ejercicio conlleva a hábitos sanos de alimentación, disminuye la percepción del esfuerzo físico, mejora la resistencia. Además, estudios científicos han demostrado su efecto positivo en la prevención del cáncer de seno y como ayuda en el tratamiento del tabaquismo. Es decir que el ejercicio regular causa cambios en el estilo de vida de la persona.
El ejercicio no tiene por qué ser complicado; un niño puede mantenerse activo simplemente caminando o yendo a la escuela en bicicleta, saltando a la cuerda, jugando en un parque o participando en programas deportivos, programas, que dentro de los sistemas de la Cultura Física y Deporte se planifican para los diferentes grupos de edades; estos programas dentro de sus objetivos está el de ser un programa dinámico y cumplir con una serie de funciones especiales, una de estas funciones estarán encaminadas a un mejor funcionamiento, planificación y control de la vida diaria de estos niños y adolescentes, pero como parte de la dinámica deportiva, los centros de Alto Rendimiento no escapan de estas funciones, los atletas son objeto de constante preparación física con el objetivo de buscar una dinámica entre la actividad física y el buen funcionamiento mecánico de sus diferentes órganos y estructuras de su organismo, aspectos bien definidos en los Programas de Preparación del Deportista. Dentro de la balanza del Alto Rendimiento existen también anomalías con respecto a si los ejercicios planificados, dosificados y bien implementados mantienen y elevan el estado físico completo de los atletas, diferentes autores plantean sus hipótesis, pero la nuestra es completamente verídica y bien fundamentada en la base de "Mente sana en cuerpo sano".
A través del método de estudio de Clínica Observacional: constatar el buen estado físico de los niños y adolescentes del municipio de Puerto Padre.
Estadístico: para la interpretación y procesamiento de la información obtenida.
Niños y adolescentes del Reparto Médico, Zona 1, Circunscripción 125.
30 niños del Reparto Médico entre 6 y 9 años, y 30 adolescentes del Reparto Médico, entre 12 y 15 años.
A través del estudio mediante técnicas de Clínica Observacional, pudimos constatar que el 95% de los (niños y adolescentes), de esta comunidad mantienen una regular preparación física, factor poco preponderante con los objetivos de los Programas de Recreación Física, que son las que se ofertan en las diferentes áreas especiales y los gimnasios al aire libre, los estudios arrojaron que en las primeras investigaciones sobre los efectos del ejercicio físico en niños y adolescentes notificaron mejorías importantes de la fuerza muscular. Sin embargo, en estos estudios existieron varios problemas metodológicos en relación con el orden del ejercicio y con el ritmo de ensayo empleado para valorar el programa de preparación. En concreto, estos estudios utilizaron bajas intensidades de ejercicios y evaluaron un programa de acciones dinámicas mediante pruebas de fuerza y destreza física. En estudios posteriores en los que se analizó el rendimiento de fuerza de niños, después de la participación en un programa de entrenamiento de la fuerza y destreza, se ha sugerido que cuando se incorpora un programa apropiado de ejercicio con una supervisión adecuada, pueden lograrse mejorías importantes de las capacidades físicas sin lesiones esqueléticas. En otros estudios se han comunicado también mejorías significativas de la fuerza (5%-40%) tanto en niños como en adolescentes que ejercitaban 2-3 veces a la semana. Parece que los niños responden de forma similar que los adolescentes a los cambios en las variables agudas de los programas (p. Ej. intensidad, volumen y frecuencia de preparación). Además, la mejoría de las diferentes capacidades físicas depende también de la experiencia en el adiestramiento de los niños y adolescentes. Los niños que son levantadores novatos obtendrán mayores ganancias de fuerza que los adolescentes con entrenamiento previo de la resistencia (debido a un efecto de aprendizaje). En las comparaciones entre las respuestas al ejercicio de niños y adolescentes, se observa un mayor aumento absoluto de la fuerza en los adolescentes. Sin embargo, los aumentos relativos de la fuerza (cambio porcentual respecto al nivel inicial) parecen ser mayores en niños.
El principal objetivo del programa de ejercicio para los niños y adolescentes de esta comunidad es mejorar el rendimiento atlético. Considerando los requisitos intensos y físicamente exigentes a que se someten los niños y adolescentes que practican los diversos ejercicios, parece que el entrenamiento de fuerza es mucho más beneficioso para mejorar el rendimiento atlético. Sin embargo, en muy pocos estudios se ha examinado el efecto del entrenamiento de fuerza sobre la mejoría del rendimiento atlético en niños y adolescentes. En el estudio realizado no se encontró una diferencia significativa en la velocidad de ejecución de los diferentes ejercicios después de un programa de acciones preparatorias. El contraste entre estos estudios destaca la importancia de un orden adecuado del ejercicio. Para optimizar el "traslado" de la mejoría de la fuerza desde la comunidad al gimnasio o área deportiva, los programas de ejercicio deben incorporar movimientos que sean similares a los empleados por el joven practicante en el campo o en las diferentes partes donde los niños y adolescentes practican deporte y ejercicios físicos. Se observaron mejorías significativas en el volumen de la masa muscular, se ha sugerido que el entrenamiento de fuerza tiene un papel en la prevención de lesiones, que se observa generalmente por disminución en la tasa de distensiones, en la gravedad de las fracturas o en el dolor articular. Además, este ejercicio parece reducir el tiempo de rehabilitación desde la luxación. Las investigaciones científicas en las que se ha examinado la relación o los mecanismos del entrenamiento de resistencia y la prevención de las lesiones son muy limitadas. Sin embargo, se piensa que la mejoría de la fuerza del tejido conjuntivo podría contribuir a una reducción de la tasa de contusiones en individuos adiestrados para resistencia y fuerza.
Los programas de preparación de fuerza que se realizan sin una supervisión adecuada aumentan el riesgo de traumatismos músculo esquelético tanto en niños como en adolescentes. El entrenamiento sin supervisión puede aumentar la probabilidad de fracturas de la placa epifisaria, rotura de discos herniarios y lesiones lumbares. Durante los programas de ejercicio supervisado, la incidencia de traumatismos de tejidos blandos no parece ser mayor durante el adiestramiento de resistencia que en cualquier otro juego. Aunque se ha sugerido que las excoriaciones lumbares son más prevalentes entre los levantadores de peso de competición que en los deportistas de Alto Rendimiento como en el Remo y el Kayac, ya que estos solamente son proclives a lesiones y desviaciones de la columna vertebral y a padecer deficiencias circulatorias; en investigaciones recientes se ha comunicado que la frecuencia de lesiones en los levantadores de peso de competición es menor que en la mayoría de las demás especialidades deportivas. No hay pruebas científicas en la literatura en que se comunique un mayor riesgo de lesiones músculos esqueléticos en niños o adolescentes que participen en un programa de ejercicio, en comparación con otras actividades físicas.
Cuando los niños y adolescentes realizan al menos una hora de actividad física diariamente:
Se sienten menos estresados.
Se sienten más seguros de sí mismos.
Están mejor preparados para estudiar y aprender.
Mantienen un peso saludable.
Desarrollan músculos, huesos y articulaciones fuertes.
Duermen mejor.
Esta actividad física atenúa la sensación de fatiga, baja los niveles de colesterolemia, y refuerza la capacidad de la sangre para disolver los coágulos que pueden conducir a una trombosis. Es, asimismo, sumamente eficaz en trastornos psicológicos ligados con emociones depresivas.
Libera endorfinas, secreciones semejantes a la morfina, producidas por el cerebro; las endorfinas amortiguan dolores en el plano corporal y facilitan sentimientos de placer y hasta de euforia.
Las personas que han adoptado como estilo de vida la gimnasia deportiva, generalmente duermen mejor, tienen menores ansiedades y tensiones. Están prácticamente inmunizados contra el estrés.
El ejercicio regular, más que las dietas, ayudan a la caída en el sobrepeso. Factor de longevidad comprobado, contribuye a la calidad de vida en la vejez.
Los grupos de ejercicios o actividades pueden ordenarse en tres categorías. Para el sistema cardiorrespiratorio se recomienda el aerobismo. Para el refuerzo de articulaciones y musculatura, está prescripta la calistenia y, de modo más avanzado, para la incrementación de la fuerza, los ejercicios con aparatos y pesas. Para un buen ejercicio no se recomienda realizar más de 20 minutos las primeras semanas. A medida de que el cuerpo tome como hábito el ejercicio físico, podrá irse agregando más tiempo de ejercicio.
Aunque al ejercicio físico se le considera un fenómeno positivo y saludable, hay que plantearse cuánto ejercicio físico es sano para la salud y cuál es el ejercicio que se debe practicar. Una idea generalizada bastante incorrecta que se tiene de la práctica del ejercicio físico, que parece desprenderse a veces de forma implícita de los beneficios que se proclaman a nivel popular sobre la salud, es la de que dichos efectos positivos se producen meramente por su práctica, sin explicar con precisión cuáles deben ser los contenidos, volumen e intensidad de dicha práctica, de acuerdo a las características y circunstancias del individuo, que son los factores que deben ser concretados en una prescripción. De forma simplista, existe la creencia de que cuanto más ejercicio físico se realicen mayores serán los beneficios en cuanto a salud e imagen corporal. Se han creado por tanto unos tópicos incorrectos como deporte.
En líneas generales, para conseguir adecuadas respuestas de adaptación al ejercicio en los niños y adolescentes es preciso tener presente que los estímulos mínimos no producen adaptación, los intermedios proporcionan respuestas óptimas y los máximos pueden conllevar situaciones peligrosas. En la planificación de ejercicio físico deben desarrollarse todos los aspectos, pero atendiendo preferentemente al desarrollo de la resistencia, flexibilidad, coordinación y acondicionamiento muscular. Puede ser conveniente potenciar algún grupo muscular deficitario al comienzo del acondicionamiento aeróbico. No rehabilitar adecuadamente los músculos necesarios puede conllevar lesiones recidivantes y el abandono de los programas del acondicionamiento físico. Cuando el individuo lleve tiempo sin realizar una actividad deportiva o no la haya hecho nunca, se tendrá prudencia al principio del acondicionamiento, recomendando intensidades de esfuerzo suaves, con ligeros aumentos cada 3 ó 4 semanas. La supervisión por un profesional especializado es necesaria en este grupo de individuos. Tanto si las recomendaciones se realizan por personal técnico a individuos considerados aisladamente, como si se hace desde los servicios de salud pública por medio de campañas o programas de educación sanitaria, es necesario que se definan claramente los objetivos que se pretenden conseguir, el tipo de ejercicio recomendado y la intensidad, la frecuencia y la duración del mismo. El programa aconsejado siempre se adecuará a la edad, sexo, estado de salud, constitución, forma física e interés personal. Al indicar un programa de ejercicio físico es necesario tener en cuenta algunas variables fundamentales en orden a la adecuada realización de la actividad.
La investigación realizada me permite arribar a las conclusiones siguientes:
Los niños y adolescentes del Reparto Médico, Zona 1, Circunscripción 125, del municipio de Puerto Padre mantienen un nivel de adiestramiento y preparación estrechamente acorde a las normas establecidas para los diferentes tipos de ejercicios y actividades, el desarrollo del aparato osteomeoarticular está bien definido, las diferentes capacidades físicas mantienen un nivel acorde a los objetivos del programa de ejercicios y acciones, principalmente los juegos, la flexibilidad, la fuerza y la resistencia, de esta manera el sistema cardiovascular aumenta su capacidad de impulso y mantiene los niveles de oxígeno acordes a las exigencias de las células musculares y nerviosas, el aumento del volumen muscular (hipertrofia) del tejido musculoso esquelético están acordes a los parámetros antropométricos en los muchachos, pero no en la mayoría de los niños, debido a que estos chicos no deben practicar ejercicios físicos de gran intensidad, preferiblemente juegos de participación y recreativos; aunque no debemos dar por sentado que siempre se observaron deficiencias en la mayoría de los ejercicios con los adolescentes, como por ejemplo, no se conservaba un nivel de hidratación adecuado, no se ingería agua antes, durante y después del ejercicio. Debe saberse que la tasa de absorción del intestino es de unos 200 ml (vaso de agua) cada cuarto de hora. (Beber mucha agua en un periodo corto de tiempo puede generar molestias intestinales típico dolor del costado). Para alcanzar buenos resultados, la duración de la rutina debe ser de al menos de una hora, que realicen un calentamiento previo de alrededor de 10 minutos para evitar lesiones musculares. Llevar ropa holgada (preferentemente de algodón) y utilicen calzado cómodo, utilizaban ropa calurosa para sudar, como faja y bolsas de plástico en el cuerpo pues lo único que les ocasionarían es deshidratarse sin llegar a quemar grasa para convertirla en músculo.
Autor:
Lic. Profesor Instructor. Oscar Alberto Martínez Barrera
M. Sc. Profesor Asistente. Yordanis Tamayo Alvares
Universidad de Las Tunas. Facultad de Cultura Física
Diciembre de 2016