Los sistemas satelitales dentro del modelo de comunicaciones móviles de tercera generación
Enviado por gvillalbos
- Resumen
- Sistemas en órbitas no geosincrónica
- Sistemas de órbita geosincrónica
- El modelo IMT2000
- Componente satelital del modelo UMTS/IMT2000 (S-UMTS)
- Limitaciones del componente satelital
- Conclusión
En este documento se presenta la importancia de las tecnologías satelitales dentro de los sistemas de comunicaciones móviles de tercera generación como elementos fundamentales en la búsqueda de cobertura global. Se examinan los sistemas basados en orbita geosincrónica y no geosincrónica con el objetivo de establecer un diagnóstico comparativo que permita identificar las fortalezas y debilidades de estos respecto de los requerimientos del modelo IMT2000/UMTS. Finalmente se analizan las dificultades para incluir el componente satelital (S-UMTS) con total compatibilidad con el componente terreno (T-UMTS).
Abstract
In this document the satellite system importance is presented among third generation mobile communications systems as fundamental elements in the aim of a global coverage. The geosynchronous and non geosynchronous based systems are checked up to establish a comparative assessment to identify their skills and weakness regarded to IMT2000/UMTS model requirements. Finally difficulties related to satellite UMTS component (S-UMTS ) with total compatibility inclusion with terrestrial component (T-UMTS) are analyzed.
El concepto de tercera generación identifica a los sistemas de telecomunicaciones móviles que operan en bandas de frecuencias comunes en todos los países alrededor de 2GHz, permitiendo roaming internacional y ofreciendo servicios multimediales en tiempo real, incluidos el video de alta definición y soporte IP para el acceso a Internet y transferencia de datos bajo un modelo de asignación dinámica de ancho de banda de acuerdo a la aplicación, logrando velocidades de 154Kbps en alta movilidad, 384Kbps en espacios abiertos y más de 2Mbps para escasa movilidad en cualquier parte y a cualquier hora, a través de un mismo dispositivo móvil.
De acuerdo a la definición anterior, estos sistemas requieren de cobertura global y esto a su vez, considerando solamente las tecnologías celulares, estaciones base en todos los rincones del mundo, lo cual es imposible técnica y económicamente, primero por las condiciones orográficas de algunas regiones y segundo, porque la expansión de las redes terrenas de comunicaciones móviles representan para los proveedores de servicios cuantiosas inversiones, representadas en nueva planeación, infraestructura y equipos. La dificultad de ampliar las zonas de cobertura para ofrecer los servicios con la misma calidad, pero a una mayor cantidad de usuarios con la misma infraestructura, es una característica inherente a estos sistemas que deriva principalmente de la frecuencia en que operan.
Actualmente, la congestión existente en las frecuencias bajas del espectro, ha conducido a que los servicios de tercera generación sean ofrecidos en bandas de alta frecuencia, lo que se traduce en mayores perdidas por espacio libre y alta susceptibilidad al desvanecimiento por multitrayectos de la señal radioeléctrica. La tendencia es compensar estos efectos a través de múltiples celdas pequeñas entre 2 y 5 Km, lo cual no constituye un modelo atractivo técnicamente porque aumenta la complejidad del sistema de gestión de usuarios por la cantidad de hadovers que deben realizarse para un usuario desplazándose rápidamente y tampoco económicamente, pues la expansión solo es atractiva para regiones donde la densidad poblacional potencialmente demandante garantiza una tasa de retorno de la inversión dentro de periodos convenientes para el operador. Ampliar la red hacia regiones de poca densidad implica el aumento de las tarifas de servicio en zonas de alta densidad, lo que se traduce en disminución de la capacidad competitiva por precios en el escenario multioperador.
Este tropiezo, dio origen en la década de los noventa a una generación de comunicaciones móviles a través de sistemas satelitales, explotando la capacidad de estos para ofrecer cobertura global, no obstante, la compatibilidad con los sistemas terrenos existentes en la época no se consideró, lo que produjo sistemas aislados incompatibles aún entre ellos, complicando aún más el escenario en cuanto a la cantidad de operadores en el mercado.
Sistemas en órbitas no geosincrónica
Los sistemas satelitales de orbitas bajas (Low Earth Orbit, LEO), es decir orbitando entre 700 y 1500 Kilómetros de altura respecto de la superficie de la Tierra, fueron la primera opción en los sistemas de comunicaciones móviles por satélite, gracias a que la distancia entre los terminales y el satélite eran relativamente cortas y las comunicaciones requerían niveles de potencia de transmisión alcanzables a través de baterías, lo que permitía la movilidad de los terminales y además, el retado de la señal radioeléctrica en subir y bajar del satélite era imperceptible en los servicios de voz (0.02 seg). Sin embargo la baja altura de los satélites también representada un área de cobertura tal, que se requieren de varios de estos (constelaciones) para ofrecer cobertura global lo cuál elevaba en gran media la inversión inicial y dificultaba la recuperación del capital en periodos cortos.
Uno de los aspectos de mayor complejidad en este tipo de sistemas es el movimiento de los satélites respecto de los usuarios en tierra. Las velocidades alcanzadas por cada satélite son muy elevadas, como en el caso de Iridium donde estos se desplazan a 27000 Km/h y en consecuencia, solo pueden ofrecer servicio a un usuario durante lapsos muy cortos (alrededor de10 minutos), luego debe hacerse un "handover" a otro satélite de la constelación para mantener el servicio. Aun cuando el usuario está estático debe realizarse esta operación, pues la constelación siempre esta en movimiento. Por otra parte, esta condición es una garantía de diversidad de espacio en la componente satelital, pues en determinadas regiones la constelación puede ofrecer hasta tres satélites visibles para el mismo usuario, no obstante la complejidad del diseño de la constelación y los procesos de "handover" entre satélites obligan a los terminales a tener una capacidad de procesamiento adicional. Esta situación se presenta en la figura 1.
Para reducir la cantidad de satélites y con ello los costos del sistema se pensó en elevar la altura hasta la orbita media (Medium Earth Orbit, MEO), entre los 6000 y 10000 kilómetros, teniendo en cuenta que entre los 1500 y 6000 kilómetros se encuentra el primer cinturón de radiación de Van Allen, que puede ser altamente dañino para los satélites. Esta posición aunque aumentaba el retardo de la señal, lo mantenía dentro de márgenes tolerables y reducía el número de satélites en un factor de cinco.
Figura 1: Diversidad de Satélites en Constelaciones de Orbitas no Geoestacionarias
Dentro de esta clasificación de servicios móviles se incluyen los sistemas GlobalStart que utiliza una constelación de 48 satélites de órbita baja a una altura de 1414 kilómetros sobre la Tierra, con el énfasis en comunicaciones con áreas rurales. Usa la técnica de acceso CDMA y se propopuso el uso de sistemas duales (AMPS/Globalstar;
GSM/Globalstar) con conmutación automática. No obstante los lanzamientos de los primeros satélites fueron fallidos y condujeron a la compañía a serios problemas económicos.
Figura 2: Constelación del Sistema Ellipso
Al igual que GlobalStar pueden citarse Iridium, Teledesic, SkyBridge, ICO y Ellipso que incorpora satélites en orbitas inclinadas como muestra la figura 2,
Sistemas de Orbita Geosincrónica
Desde sus inicios, los usuarios de satélites de orbita geosincrónica (Geosynchronous Earth Orbit) han sido grandes operadores de telefonía y de distribución de televisión que requerían de servicios de transporte intercontinentales para conectarse con otras redes, no obstante la aparición de la fibra óptica, redujo considerablemente el tráfico potencial de telefonía y datos que se podía cursar a través de estos sistemas con los despliegues transnacionales alrededor y entre los continentes, cambiando las proyecciones de demanda para esta industria que debía enfrentar un competidor que golpeó fuertemente en sus inicios y obligó a explorar en nuevos nichos de mercado, dado que el transporte punto a punto estaba siendo invadido rápidamente por la fibra. Como resultado, las nuevas flotas debieron adaptarse para competir en escenarios diferentes, en la actualidad la industria satelital se ha concentrado en mercados muy cerca del usuario final a través de servicios como Directo Al Hogar (Direct To Home DTH) en sus presentaciones de Difusión de Video Digital (Digital Video Broadcasting DVB) y Difusión Digital de Multimedia por Satélite (Digital Multimedia Broadcast by Satellite) gracias a que las nuevas flotas cuentan con capacidades de procesamiento a bordo, haces direccionables y mayores potencias de transmisión que han permitido reducir considerablemente las instalaciones del usuario.
Este avance en la manufactura de satélites GEO, llevó a diferentes empresas a pensar en ofrecer servicios de comunicaciones móviles soportadas en esta clase de aparatos que podían cubrir con un haz de 17.5 grados la tercera parte del globo terrestre excepto en latitudes muy superiores, cerca de los polos. Si embargo, el empleo de este tipo de satélites en sistemas móviles de comunicaciones se restringe en la medida que existe un retardo de propagación muy considerable (0.5 seg) debido a la distancia que debe recorrer la señal radioeléctrica (36000Km) teniendo presente que esta característica constituye un obstáculo para el funcionamiento de las comunicaciones de voz, multimediales interactivas y tareas de enrutamiento del protocolo TCP/IP.
Pese al retardo de propagación, el cual puede ser enmascarado con tasas de velocidad de transmisión muy altas, los satélites también enfrentan perdidas de propagación considerables y deben compensarlas con complejas cargas de comunicaciones que incluyen amplificadores de muy alta potencia (HPAs) y antenas muy grandes que una vez extendidas exceden los 12 metros, como muestra la figura 3. En consecuencia son satélites muy pesados (entre 4 y 5 toneladas) cuyo período de fabricación es muy largo y su costo de lanzamiento muy elevado.
Para ver el gráfico seleccione la opción "Descargar" del menú superior
Figura 3: Satélite GEO de Thuraya Systems
Dentro de esta categoría se destaca el sistema Thuraya que ofrece cobertura con una flota de tres satélites Geosincrónicos de muy alta potencia diseñados con capacidad de 13750 canales telefónicos para Europa, África central y del norte, Medio Oeste, Asia central y del Sur con servicios en donde las redes terrenas no pueden ofrecer servicios.
El ánimo de ITU (International Telecommunication Union) por realizar un esfuerzo entre gobiernos de todo el mundo para establecer los parámetros de referencia y armonizar el desarrollo de los futuros sistemas de telecomunicaciones, condujo en 1985 a la construcción del modelo FPLMTS (Future Public Land Mobile Telecommunication System), conocido actualmente como IMT2000 (International Mobile Telecommunications for the year 2000) el cual, es sinónimo de tercera generación, pues constituye un estándar internacional para el despliegue de estos sistemas.
Además del modelo de ITU, existe una propuesta europea conocida como UMTS (Universal Mobile Telecommunication System) propuesto por ETSI y acogido por ITU como parte del estándar IMT2000, dejando entre ver que el actual modelo corresponde al trabajo logrado por los grupos de trabajo de radiocomunicaciones y telecomunicaciones de ITU, ITU-R y ITU-D respectivamente, además de las contribuciones hechas por otros organismos entre los cuales se pueden citar 3GPP (3G Partners Projects), IETF (Internet Engineering Task Force), ARIB y otros.
Para la implementación de IMT2000, desde 1992 se han propuesto las bandas de frecuencias mostradas en la figura 4, donde se realiza una comparación con la situación de países como Estados Unidos de América que han hospedado otros servicios diferentes al estándar en cuestión dentro la banda propuesta.
Para ver el gráfico seleccione la opción "Descargar" del menú superior
Figura 4: Propuesta de ITU para las Bandas de Frecuencias de IMT2000
Uno de los aspectos más destacables del estándar es la variedad de interfaces de radio (Radio Transmision Technology RTT) que han sido acogidas, la figura 5 muestra cada una de estas tecnologías. Las diversidad obedece a que la tercera generación será alcanzada a través de evoluciones de los sistemas actuales de 2 y 2.5G, donde cada una ha conservando las interfaces de radio de los antiguos estándares que alcanzaron mayor penetración en el mercado. Más adelante se verán la influencia de este hecho sobre los sistemas satelitales de comunicaciones móviles.
Para ver el gráfico seleccione la opción "Descargar" del menú superior
Figura 5: Interfaces de Radio de IMT2000
COMPONENTE SATELITAL DEL MODELO UMTS/IMT2000 (S-UMTS)
Ahora, a diferencia de la generación anterior de servicios móviles por satélite, como se comentó en la sección anterior, estos son reconocidos como parte integral de la red de comunicaciones en virtud de su capacidad de proveer amplia cobertura, facilitado el verdadero roaming global y la difusión de información. Por esta razón se ha considerado además del componente terreno (T-UMTS), la inclusión de otro componente basado en sistemas satelitales (S-UMTS), ambos compatibles entre ellos, como muestra la figura 6.
Figura 6: Arquitectura de los Componentes Terrestre/Satelital del Modelo UMTS
En un primer momento, los servicios ofrecidos por los sistemas satelitales, serán solamente un subconjunto del total ofrecidos por la red terrestre, debido a que hasta ahora se enfrenta la necesidad de incorporar los satélites al modelo de comunicaciones de tercera generación, por tanto este componente no tiene una reglamentación internacional que permita un rápido desarrollo, como si lo tiene el componente terrestre, el cual fue el primero en desarrollarse y cuenta con estandarización internacional. La tendencia para superar este contratiempo es desarrollar interfaces de radio lo más compatibles con el componente terreno para aplicarlas al componente satelital, aprovechando además el hecho de tener adyacentes las bandas para S-UMTS y T- UMTS, por lo menos en Europa, como muestra la figura 8, y con ello evitar los terminales duales que son desfavorables en tamaño y costo.
Figura 7: Asignación de Frecuencias para UMTS Terrestre y Satelital en Europa
La componente satelital puede verse como un elemento complementario de la red terrestre, el cual permite ofrecer servicios en regiones donde no existe cobertura terrestre o no es rentable hacerlo. En este caso la componente satelital esta en capacidad de ofrecer los mismos servicios que su homologa terrestre, pero, por otro lado puede verse como un elemento cooperativo adicional, el cual esta centrado en los servicios de difusión de multimedia y no en servicios interactivos donde se considera la componente terrestre es más efectiva. Desde esta perspectiva se exige una mayor interoperabilidad pues se trata de una interacción constante entre el usuario, su estación base y el satélite, de manera que la expansión de la red a través de los satélites no es el punto fundamental.
De acuerdo a la perspectiva cooperativa comentada anteriormente, existen diferentes escenarios donde la presencia de los satélites adquiere una necesidad fundamental, en el primero de ellos, mostrado en la figura 9, el componente S-UMTS se emplea para difusión de diferentes servicios de entretenimiento, control de flotas, información general, noticias y estado del tiempo, como un servicio paralelo al ofrecido por la red terrestre. Este tipo de arquitecturas ha dado lugar a sistemas como Difusión Digital de Multimedia por Satélite (Satelllite Digital Multimedia Broadcast S-DMB) que están orientados al mercado punto-multipunto dentro del esquema de tercera generación a través de sistemas GEO de alta potencia que emplean un canal de difusión para un gran número de usuarios.
Para ver el gráfico seleccione la opción "Descargar" del menú superior
Figura 8: Escenario de Difusión de Información
Es probable también la necesidad de distribución asimétrica de datos, donde el canal hacia delante que requiere de mayor tráfico, es cursado a través de un canal del satélite, entre tanto el tráfico hacia atrás es cursado por la red terrena de UMTS, como muestra la figura 10. Esta arquitectura permite mejor utilización de los recursos de radio del componente terreno en caso de no ser suficientes cuando existe alta demanda.
Para ver el gráfico seleccione la opción "Descargar" del menú superior
Figura 9: Escenario Híbrido para Servicios Asimétricos
Otra tarea importante que ha sido otorgada a los satélites es la interconexión del núcleo de red del sistema, para esto el satélite conecta estaciones base que se encuentran muy dispersas simulando un canal de transmisión físico sobre el cual se cursa tráfico de usuarios y señalización como muestra la figura 11.
Para ver el gráfico seleccione la opción "Descargar" del menú superior
Figura 10: Interconexión del Núcleo de la red UMTS
El canal de retorno del terminal móvil directamente al satélite se considera exclusivamente sino existe cobertura del componente terreno, esto es entonces, una perspectiva de complemento geográfico, donde el terminal debería transmitir con mayor potencia de la habitual para lograr una comunicación exitosa con la infraestructura en el espacio, lo que representa menor duración de las baterías, por esta razón se considera fundamental el desarrollo de tecnologías en la interfaz de radio que favorezcan el consumo de potencia del terminal y mantengan la tasa de transmisión en rangos aceptables.
El diseño de S-UMTS puede incorporar diferentes tipos de constelaciones de satélites LEO, MEO e incluso GEO de acuerdo a los requerimientos de los servicios. Por ejemplo, los servicios de alta velocidad se adaptan mejor a equipos de poca movilidad y antenas activas altamente directivas, para lo cual los sistemas geoestacionarios son las soluciones más atractivas, entre tanto, los servicios de tasas de transmisión inferiores son asociados a terminales móviles con restricciones de potencia de transmisión y desplazamientos rápidos, para lo cuál requieren de soluciones en orbitas no geoestacionarias. Por esta razón las interfaces de radio deben ser independientes de la orbita del satélite para hacerlo tan flexibles como sea posible y puedan constituirse como un estándar internacional.
Las interfaces de radio para la componente satelital del modelo, se presentan en la siguiente tabla.
Propuesta | Descripción | Fuente |
Sat-CDMA | 49 satélites en 7 planos orbitales a 2000 Km. | South Korea TTA |
SW-CDMA | Satellite Wideband CDMA | ARIB de Japón |
Horizons | Horizons Satellite System | Inmarsat |
ICO | 10 Satélites MEO en dos planes orbitales a 10390 Km. | ICO Global Communication |
Tabla 1: Propuestas de Interfaces de Radio para el Componente Satelital
LIMITACIONES DEL COMPONENTE SATELITAL
Características del Medio de Propagación
Las inclemencias del medio de propagación con la señal radioeléctrica hacia o desde el satélite, afectan en mayor proporción a los sistemas GEO que a los LEO debido a la diferencia de distancias entre los terminales y los satélites en ambas orbitas. Por esta razón las comunicaciones móviles exigen la condición de línea de vista para mantener velocidades adecuadas, en este caso, el multitrayecto no puede usarse como mecanismo para ofrecer servicio en interiores teniendo en cuenta que estas componentes no podrían tener la potencia suficiente, aún usando receptores tipo Rake y amplificadores de alta potencia así como antenas de gran ganancia en el satélite.
Efecto Dopler
La velocidad de los satélites en orbitas bajas respecto de las antenas en tierra, involucra el efecto dopler, el cual consiste en un aumento o disminución de la frecuencia recibida respecto de la transmitida por efecto del desplazamiento entre receptor y transmisor. No obstante este hecho puede corregirse en el segmento terreno debido a que la posición y velocidad de cada satélite es bien conocida, luego puede predecirse con alguna capacidad de procesamiento añadida a los equipos del usuario o bien por un mecanismo de exploración alrededor de la frecuencia estimada antes de establecer la comunicación. Debe aclararse que este fenómeno no afecta a los satélites en órbita geosincrónica debido a que estos permanecen aparentemente estáticos para las antenas dispuestas en tierra.
Diversidad de Satélites.
La diversidad de satélites, es la facultad ofrecida exclusivamente por los sistemas de orbitas no geosincrónicas para permitir que un usuario pueda "ver" varios satélites en un mismo momento. Esta condición reduce las posibilidades de bloqueo de la señal, pues permite el cambio de satélite a conveniencia del usuario e incluso podría aumentar la capacidad si establece comunicación con varios de ellos.
La probabilidad de bloqueo se relaciona directamente con el ángulo de elevación y con la cantidad de satélites visibles, al respecto la ventaja es de los sistemas no Geosincrónicos pues las constelaciones están diseñadas para ofrecer, dependiendo de la posición del usuario entre uno y tres satélites, mientras que los GEO, por su condición de amplia cobertura un usuario solo puede "ver" un satélite siempre.
Control de Potencia
Esta capacidad ha sido considerada principalmente para los sistemas S-WCDMA, en los cuales el control de potencia es necesario para no desperdiciar potencia valiosa en el lado del usuario y para proteger la capacidad del sistema. Esta es una gran ventaja, más notable para las constelaciones LEO, ateniendo a que la condiciones de desvanecimiento y perdidas de propagación son variables, tanto por el moviendo del usuario como del satélite. Dentro de este contexto se tienen lazos abiertos y cerrados de control, no obstante los retardos de propagación hacen que estos sean menos dinámicos y su respuesta más lenta que en los sistemas del componente terrestre.
Canales Piloto
Los canales piloto son muy útiles tanto en el enlace de subida como de bajada. En el primer caso se requiere para mitigar el efecto Dopler a través del seguimiento de este canal por parte de los terminales y con ello favorecer las comunicaciones, por otra parte este canal puede usarse para realizar detección coherente, ajustar los niveles de potencia para el canal de retorno (control de lazo abierto) y además, si se incluyen símbolos piloto multiplexados en el dominio del tiempo (time-domain multiplexing of pilot symbols TDMP) en intervalos preasignados, podría soportar el control de antenas adaptativas. En el segundo caso, los canales piloto en el canal de subida, están relacionados con información de señalización.
Modulaciones Digitales
Los avances en los esquemas de modulación ha permitido enviar varios bits de información por cada hertz de ancho de banda disponible, es decir, han aumentado la eficiencia espectral, la cual se expresa como la relación existente entre la capacidad del canal y el ancho de banda, en unidades de bit/hertz. No obstante la complejidad del esquema de modulación se puede aumentar tanto como la potencia y medio de transmisión permita una detección exitosa en el receptor, dado que durante el trayecto y por las alinealidades de los amplificadores de potencia estos estados de amplitud y/o fase de la portadora que identifican combinaciones de bits de la información, sufren distorsiones que aumentan la probabilidad de confundirlos con otros estados o de no detectarlos. El efecto de aumentar la eficiencia espectral de las modulaciones en sistemas satelitales puede verse en la figura 12.
Figura 11: Distorsión del esquema de modulación 64QAM
Los sistemas satelitales deben enfrentar esta dificultad que cobra mayor importancia para los sistemas Geosincrónicos por la mayor hostilidad del medio de transmisión, no obstane para la tercera generación se proponen esquemas que no necesariamente son nuevos para la industria satelital como son QPSK, BPSK y dual-BPSK para la interfaz de radio S-WCDMA.
Asignación de Recursos
El establecimiento de estrategias para asignar recursos del espectro radioeléctrico bajo la consigna de efectivo uso del espectro, pone en discusión tres consideraciones diferentes para asignar frecuencias a los canales de bajada desde el satélite. El primero de ellos es evitar el reuso de frecuencias entre satélites muy próximos usando sistemas combinados de FDMA, lo que disminuye en gran medida la probabilidad de interferencia entre satélites a costa de un ancho de banda subutilizado. La siguiente propuesta es un completo reuso de frecuencias dentro de todos los haces del satélite sin aplicar diversidad de satélites de manera permanente, lo cual aumenta la eficiencia en el uso del ancho de banda pero incrementa la probabilidad de interferencia incluso entre haces del mismo satélite sino se adoptan transmisiones ortogonales. La tercera propuesta consiste en un completo reuso de frecuencia entre haces del satélite con diversidad permanente de satélites, lo cual es una ampliación de la anterior propuesta.
Para cada una de las orbitas donde se encuentre el sistema de satélites, cada una de las propuestas puede o no presentar ventajas de acuerdo a los servicios requeridos. Lo que queda claro después de esta discusión es la complejidad del diseño de la estrategia de asignación de recursos radioeléctricos al los cuales están enfrentados los desarrolladores de los estándares de la componente satelital de UMTS
Los sistemas satelitales son tanto para la tercera generación como para las próximas, elementos fundamentales para efectos de ofrecer un complemento de cobertura donde las redes terrenas no ofrecen servicio, no obstante en este campo la industria satelital enfrenta un lento desarrollo debido a que los estándares internacionales no están definidos al detalle como en el caso del componente terreno y además porque no quedó un buen sabor después de los despliegues hechos para ofrecer servicios móviles por satélite, por parte de GlobalStart e Iridium considerados hoy como fracasos comerciales. Por otra parte la posibilidad de satélites a diferentes alturas que ofrecen ventajas y desventajas inevadibles e inherentes a su constitución, desvían las decisiones hacia consideraciones económicas más que a consideraciones técnicas, pues esta dicho que cada servicio requiere de condiciones que solo ofrece determinada orbita y que si el análisis de costo definen otra elección, solo queda mitigar sus efectos adversos hasta el punto donde sea rentable para el operador hacerlo.
REFERENCIAS
[1] "Wide-band CDMA for the UMTS/IMT2000 Satellite Componet"; IEEE transactions on Vehicular Technology, Vol. 52 No. 2. March 2002
[2] N. Chuberre y otros.. "Satellite Digital Multimedia Broadcasting for 3G and Beyond 3G Systems" ALCATEL Space.
[3] N. Lugil, L. Philips y otros. "CDMAx: A 3G Baseband Solution with S-UMTS and Navigation Capabilities" SIRUS COMMUNICATIONS
[4] B.G. Evans y otros. "Satellie-UMTS IP-Based Network (SATIN)" Universidad de Surrey.
[5] MOHAMED IBNKAHLA. "High-Speed Satellite Mobile Communications: Technologies and Challenges" IEEE
[6] Quintero Florez, Victor "Sistemas Celulares" Presentación en Universidad del Cauca. 2004
[7] R J Finean y A El-Hoiydi. "SATELLITE UMTS NETWORK ARCHITECTURE". BT Laboratories. Suiza
[8] P. I. Philippopoulos y otros, "The Role of S-UMTS in Future 3G Markets". Universidad de Bolonia
[10] www.teledesic.com
[11] www.orbcomm.com
[12] www.thuraya.com
Samir Medina Perlaza
Gustavo Villalobos Caviedes
Universidad del Cauca
Facultad de Ingeniería Electrónica y Telecomunicaciones
Departamento de Telecomunicaciones
Popayán, agosto de 2004