Resumen
Los juegos son un goce sencillo que se convierte en un recuerdo atesorado de la infancia, nos enseñan a compartir y quedan como un bonito recuerdo de la infancia que aun de adultos añoramos esos momentos que fueron especiales.
No obstante los juegos son importantes para el desarrollo delas capacidades físicas y mentales, constituyen verdaderas herramientas para socializar, crear y fortalecer valores individuales y colectivos
Reflexionar sobre este tema constituye el propósito fundamental del trabajo que hoy ponemos a su consideración para intentar conciliar vocaciones en torno revitalizar e implementar en los espacio comunitaritos los juegos populares y tradicionales.
Por tanto, el juego es un instrumento que facilita y crea lazos interpersonales, sin importar raza, edad, sexo, condición social entre otros; una fuente generadora de salud; una ayuda para mejorar las destrezas motoras, cognitivas y emocionales; un medio para fomentar la creatividad, despertar la imaginación, desarrollar el sentido del ritmo; su objetivo es el bienestar personal; un estímulo para liberar tensiones y energía acumulada, así como para salir de la rutina diaria y un puente para el aprendizaje de si mismo, del entorno, de valores, costumbres y tradiciones.
Introducción
Dentro del ambiente de preocupaciones por los estudios sobre la recreación física y aprovechamiento del tiempo libre no cabe duda que los juegos y su papel en el desarrollo físico del ser humano ha atrapado la atención de muchos estudiosos.
Si bien ha resultado objetos de múltiples estudios el presente tema, consideramos que el mismo no ha sido agotado en sus diversas manifestaciones; aún quedan aspectos por dilucidar que requieren de nuestra atención, no solo las raíces históricas que posibilitaron su surgimiento, la ubicación y el impacto en los diferentes grupos etarios, también resulta necesario insistir sobre determinados factores protagónicos que influyen en la implementación y desarrollo normal de las capacidades físicas del ser humano, en el periodo de desarrollo de la globalización neoliberal como fenómenos de proporciones internacionales.
Desarrollo
Destacaba el más universal de todos los cubanos, José Martí en unos de sus escritos ¨ Ha de tenerse alma robusta en cuerpo robusto ¨ y más adelante agregaría la necesidad capital en la educación de los niños y lo primero que les enseñaría con más ardor, sería en desarrollo de sus músculos y cuanto dependen de un buen desarrollo muscular cualidades tan preciosas como la abnegación, el dominio de sí propio y la serenidad en las desgracias.
En similar sentido destacaría Vladimir I. Lenin la juventud necesitaba lozanía, rigor, gimnasia, natación, excursiones, ejercicios físicos de todo tipo.
Sin lugar a dudas los juegos son un goce sencillo que se convierte en un recuerdo atesorado de la infancia, nos enseñan a compartir y quedan como un bonito recuerdo de la infancia que aun de adultos añoramos esos momentos que fueron especiales.
Todos tenemos del juego alguna idea más o menos acabada, podríamos hasta ensayar alguna aproximación basada ya sea en nuestras vivencias infantiles, juveniles y adultas o en alguna lectura que hayamos hecho sobre el tema. Este fenómeno es tan inherente al hombre, que todos hemos tenido alguna experiencia aunque sea mínima, si bien, en la mayoría de los casos –y por lo menos en cuanto a la infancia se trata- bastante más que mínima.
Cuando le preguntamos a alguien sobre el juego, inmediatamente se remonta a un tiempo y espacio diferente, recordando una serie de vivencias positivas y aún negativas. No hay hombre sin juego ni juego sin el hombre. Las características de los juegos que hemos jugado podrán ser diferentes, de intensidades diversas, de momentos evolutivos distintos, pero aun así podremos encontrar elementos en común, más allá de nuestra cultura. El juego es aquella dimensión del hombre que lo remonta a un mundo diferente, con otras reglas, donde se muestra la esencia de cada uno de nosotros, sin máscaras ni caretas, donde todo – o casi todo – se puede, es el sueño hecho realidad, todo se transforma según nuestro deseo y el hombre se remonta a lo más profundo de su ser.
Diversos teóricos de diferentes latitudes, representantes de las más diversas disciplinas, a lo largo de la historia han intentado definir el juego, encontrándose con las consecuentes limitaciones al pretender encerrar en pocas palabras una dimensión casi inabarcable del ser humano. Así podremos encontrar posturas psicológicas, pedagógicas, filosóficas, biológicas, históricas, antropológicas, etc. En cada una de ellas hallaremos una óptica del juego, pero que no deja de ser una óptica parcial. En relación a esto Buland escribe: "El concepto de juego, como objeto de la investigación científica del juego no debe ser definido, debería permanecer siendo un concepto pre científico." (Buland, 1996) Y más adelante continúa: "La pregunta por la esencia del juego lleva a una cortada, contrariamente sería mucho más rico, agrupar los juegos y preguntar por semejanzas." (Buland, 1996)
A pesar de ello igualmente podremos hallar puntos en común que se pueden hallar prácticamente en todas las expresiones lúdicas. Se podría sintetizar de alguna manera que es un fenómeno/una actividad que transcurre en un tiempo y espacio diferente al de la vida cotidiana, tiene reglas propias y se desarrolla en un "como sí". Otro aspecto importante es la libertad, entendida la misma desde una actividad "libremente" aceptada, libertad en tanto y en cuanto el jugador elige jugar o no, y elige el tema y material de juego. Tanto el "como sí", como la libertad, fueron aspectos cuestionados por otros investigadores más modernos.
En síntesis, podemos señalar que existen diferentes postulados al respecto. La Real Academia Española lo define como: La acción de jugar, pasatiempo o diversión, su definición es algo no definida, ya que es una actividad principalmente bajo su aspecto ocio.
Desde el punto de vista psicológico es considerado como la actividad espontánea y desinteresada que exige una regla libremente escogida que cumplir o un obstáculo deliberadamente puesto que vencer. El juego tiene como función esencial procurar al niño el placer moral del triunfo que al aumentar su personalidad, la sitúa ante sus propios ojos y ante los demás. (Guy Jacquir)
Arnolf Russell define el juego dentro de lo psicológico como: una actividad generadora de placer que no se realiza con una finalidad exterior a ella; sino por sí misma.
Desde el punto de vista sociológico se define el juego como actividad una ocupación voluntaria que se realiza dentro de cierto límite establecido de espacio y tiempo, atendiendo a reglas libremente aceptados. (J. Huizinga)
De cualquier manera, más allá de los cuestionamientos de estos autores y otros que no hemos mencionado, consideramos que las diferentes definiciones del juego coinciden en los aspectos indistintamente tratados. Lo que si resulta cierto es que el juego es un motor para la extensión del hombre en lo material como en lo espiritual.
Si realizamos nuestro análisis desde el ámbito sociocultural nos podremos percatar de que el contexto lúdico-recreativo constituye un componente de excelencia para la trasmisión de la herencia cultural de una generación a otra, que permanece viva y se reproduce constantemente, sin embargo en el orden personal este representa una actividad primordial que se apoya en la necesidad de movimiento del hombre, de sus intereses y estados anímicos que ayudan a la formación de hábitos, habilidades, y destrezas.
Está demostrado que el juego, es en esencia una de las manifestaciones humanas más importantes en el desarrollo integral de la infancia; es decir, el juego y de manera particular los juegos tradicionales han sido una realidad que acompaña al hombre desde que este existe. Jugar es la principal actividad de los niños y responde a la necesidad de actuar libremente con su propio cuerpo, y hacer suyo el mundo que le rodea.
Al jugar el niño estará en condiciones de lograr un aumento en el nivel de desarrollo de las capacidades físicas, como son la fuerza, la resistencia, equilibrio, orientación espacial, agilidad y coordinación de los movimientos, en similar sentido sentirán placer así como también desarrollaran cualidades morales y sociales de la personalidad.
Un mejor proceso de desarrollo de la capacidad física implica, sin duda una mejor cantera para el posterior desarrollo de las demás capacidades necesarias para la vida del individuo.
Teniendo en cuenta los elementos expuestos no es casual que exista un profundo interés a nivel mundial por rescatar los juegos en las escuelas y comunidades, juegos populares y tradicionales que enfrenten la gran oleada de videos juegos que saturan nuestros hogares y tributan al sedentarismo y la obesidad.
Sin lugar a dudas la familia y la comunidad constituyen elementos protagónicos en la transmisión, fomento y rescate de las formas tradicionales lúdicas, dada la influencia que estas llegan a ejercer en cada uno de los miembros. Es precisamente la comunidad quien debe proporcionar a sus miembros espacios gratos para reunirse, alternar, jugar, bailar, cantar, pintar, esculpir, hacer deporte; en su conjunto grupos de actividades físicas sistemáticas de acondicionamiento físico, actividades físicas en pleno contacto con la naturaleza es decir ser mucho más que un conglomerado de hogares y vías que posibilite desarrollo personal como principio de las actividades físico recreativas.
En otras palabras el juego sano en las comunidades debe de estar orientado a satisfacer las necesidades de movimiento del hombre para lograr como resultado de esta influencia, salud, alegría, comunicación social, relaciones sociales, habilidades físico – motoras, capacidades físicas, rendimiento físico en la formación multilateral de su personalidad.
El hecho de reactivar los juegos populares y tradicionales no es un grito desesperado de melancolía por un pasado que no vuelve, sino que implica ahondar y profundizar en nuestras raíces para poder comprender así mejor nuestro pasado Hemos estado realizando algunas reflexiones sobre la importancia de los juegos en el desarrollo de las capacidades físicas ,con el propósito de intentamos conciliar vocaciones en la aproximación al conocimiento exhaustivo del papel que desempeñan estos juegos y sus efectos en la formación del hombre nuevo.
No olvidemos que el juego es un rescate de recuerdos, de volver a vivir la infancia, las travesuras, la aventura y la alegría y un medio de compartir con la familia o el entorno, que muchas veces hemos abandonado.
Conclusiones
-Los juegos durante la recreación física condicionan lograr un aumento en el nivel de desarrollo de las capacidades físicas, como son la fuerza, la resistencia, equilibrio, orientación espacial, agilidad y coordinación de los movimientos.
– La implementación de los juegos va a contribuir a satisfacer las necesidades de movimiento del hombre para lograr como resultado de esta influencia, salud, alegría, comunicación social, relaciones sociales en la formación multilateral de su personalidad.
– La familia y la comunidad constituyen elementos protagónicos en la transmisión, fomento y rescate de las formas tradicionales lúdicas, dada la influencia que estas llegan a ejercer en cada uno de los miembros.
Bibliografía
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Autor:
Lic. Carmen Eulalia Laurel Villa