Papel de los medios de comunicación públicos, alternativos y comunitarios en el desmontaje de la guerra económica
Enviado por Argenis Rafael Vargas Poliquet
- Preámbulo
- Actores de la guerra económica venezolana
- La política económica del gobierno revolucionario de Nicolás Maduro
- Referencias bibliográficas
Preámbulo
Es conveniente que en este conversatorio se analice desde una perspectiva crítica–ética y sistémica algunos de los elementos que explican la complejidad de la economía venezolana en el contexto de la denominada Guerra Económica que vive la revolución bolivariana desde sus inicios.
Necesitamos respuestas contundentes, frontales, valientes, radicales en este contexto un tanto borroso en materia económica. El pueblo venezolano esperó tanto por una revolución de la mano del pensamiento bolivariano, y el máximo líder, Hugo Chávez Frías, interpretó esa necesidad. Pero la contrarrevolución, chantajista, expoliadora histórica de la renta petrolera, representada por Fedecámaras, Consecomercio, Venemcham, entre otros sectores de la burguesía tradicional, aún siguen en la ofensiva y en sus ansias de derrocar la revolución. ¡Es hora de enfrentarlos con más contundencia!
Hay que discutir los problemas fundamentales que nos siguen afectando como economía rentista, con este informe se presenta una primera aproximación a la comprensión de esa realidad, pues se identifican algunos elementos políticos, económicos y sociales que explican esa Guerra Económica.
Entre esos elementos, se analiza:
· El perfil de los sectores productivos nacionales tradicionales y su alta dependencia de las importaciones;
· El Ahorro nacional como una de las variables claves a considerar y atender de manera urgente;
· Los problemas existentes en el control de cambio y su influencia en la economía
Es pertinente el análisis del proceso de la economía venezolana en los tiempos actuales motivado al llamado que hiciera el Ministro de finanzas Nelson Merentes de investigar las causas de la inflación en el país. La invitación la hizo el Ministro en su discurso ante la Asamblea Nacional para presentar los proyectos de Ley de Presupuesto y de Endeudamiento para el ejercicio fiscal 2014, en los siguientes términos: "La inflación está fuera de todo rango en los últimos años. Hay que buscar las causas de este terrible mal".
Pues, es considerada la inflación y su vinculación con la política monetaria y fiscal, la variable más perjudicial de la economía y de cualquier sociedad a escala planetaria, porque empobrece a todos por igual, tanto a ricos como a pobres.
Actores de la guerra económica venezolana
Si planteamos la situación económica como una guerra, entonces como en cualquier guerra, hay actores y hay estrategias:
Por un lado el Gobierno Nacional, como el actor responsable que la economía funcione, es decir, que la dinámica económica alcance los objetivos fundamentales que permitan satisfacer las necesidades de la población expresada en bienes y servicios, empleos, control de la inflación, control del tipo de cambio, y disminución del déficit fiscal, entre otros. Al mismo tiempo, debe administrar los recursos estratégicos de la Nación como los recursos naturales de propiedad común de todos los venezolanos y aplicar los controles y correctivos para que los sectores no gubernamentales (privados) se desarrollen.
Otro actor de la guerra económica son los sectores productivos privados, que dentro del sistema económico rentista que aún predomina en el país, buscan generar ganancias, acumularlas y sobrevivir en un marco de libertad económica y libre competencia, pues los mueve el afán de lucro, especulando y trasladando los costos de la guerra económica al precio final de los bienes y servicios, desfavoreciendo a los pobres.
El último actor son los consumidores o las familias, que en tiempos de una ola inflacionaria como la actual afecta a todos por igual, sin embargo, impacta más a los segmentos de menores niveles de ingresos, que configuran los estratos sociales D y E, 38% y 42% de la población, respectivamente, y representa la mayor parte de los que apoyan al gobierno revolucionario.
La guerra económica es la misma que ha vivido el gobierno revolucionario desde que llegó al poder en 1999, y que tuvo su alto nivel de intensidad o conflictividad en tiempos del golpe de Estado y el paro petrolero. Recordemos que los sectores productivos aliados a Fedecámaras, Consecomercio, Venemcham, Fedenaga, entre otros, fueron los que auparon y financiaron, con apoyo del Gobierno de Bush, la conspiración que derrotó al presidente Chávez en abril de 2002 y que el pueblo venezolano restituyo en el poder en menos de 48 horas.
Esos mismos actores, las mismas empresas con otros líderes al frente, mantienen las mismas ideas de luchar contra el nuevo modelo de desarrollo económico y social del país, impulsado por la revolución bolivariana rumbo al socialismo.
Es una guerra continuada con los mismos actores. Lo único que ha cambiado son las estrategias. En este caso el sector empresarial privado está atacando sigilosamente la economía, por medio de la estrategia de la especulación, acaparamiento, disminución de la capacidad de producción, sin pensar en el país y sus habitantes, sin embargo el gobierno bolivariano a pesar de las disminución de la renta petrolera continua favoreciendo al pueblo permitido la inyección de capitales e inversiones pública con fines de estimular el empleo y el consumo de la familia venezolana.
La política económica del gobierno revolucionario de Nicolás Maduro
Se basa en seis grandes estrategias:
1- Política expansiva del Gasto Público: las compras y transferencias por parte del Estado de bienes y servicios inciden en las rentas familiares.
2- Política monetaria expansiva caracterizada por inyección de dinero en la economía y estímulo al sector bancario para incrementar política crediticia.
3- Incremento del poder adquisitivo de la población (cuantitativo y cualitativamente)
a. Cuantitativamente: intenta reducir los efectos inflacionarios con aumento de sueldos y salarios.
b. Cualitativamente: incremento de la producción de servicios del gobierno tales como (educación, salud y seguridad social) y mejoramiento de los servicios públicos existentes; incrementando los servicios comunitarios sociales y personales (Consejos Comunales, cooperativas, etc.).
4- Política Cambiaria: regida por un control de cambio desde febrero de 2003.
5- Política petrolera: defensa de la OPEP, de los precios del petróleo en el mercado internacional, diversificación de los mercados distintos a los EEUU, estrategia de desarrollo e inversión en la faja petrolífera del Orinoco, impulso del proceso de integración regional gracias a las potencialidades petroleras de Venezuela (primera reserva petrolera mundial).
6- Socialización del capital: reinyectar los recursos provenientes del petróleo y de otros fondos especiales en la economía nacional, fundamentalmente para impulsar proyectos de inversión social sobre la base de nuestras necesidades más inmediata (vivienda, agroindustria y alimentación), que en el 2013 supera el 60% del presupuesto nacional, que contrasta con el 37% invertido en los gobiernos anteriores (IV República). Según Nelson Merentes: La pobreza estaba en 1998 en 50,4% ahora es 23,4%, la pobreza extrema que estaba en 20,3% ahora es de 5,5%, y la mortalidad infantil que se encontraba en 26,5% ahora es de 17% y se continua haciendo esfuerzo por disminuirla, con una esperanza de vida de 79,3años. Podemos validar que se han cumplido las metas del milenio.
Como podemos observar son muchos los aciertos de la revolución bolivariana, los cuales merecen socializarlos con los venezolanos, utilizando para ello los medios de comunicación oficiales, alternativos y comunitarios.
Durante los 15 años de la Revolución Bolivariana, los venezolanos y venezolanas hemos observado y seguido de cerca el papel que han desempeñado los medios de comunicación públicos y privados en el país.
En principio, voy a centrarme en expresar el papel de los medios de comunicación privados del país impresos y audiovisuales, que desde antes que llegara la Revolución Bolivariana al Poder Político, ya estigmatizaban al Presidente Chávez como dictador, tirano, represivo, etc., manteniendo una política editorial a favor de la Oligarquía venezolana.
En la actualidad esa política de estos medios a arreciado tomando una actitud completamente conspirativa, que ha influido en movimientos desestabilizadores, golpes de estados, insurrección e incluso llamado a magnicidio, sin que hasta la fecha haya habido una sanción, determinante, excepto la sanciones administrativas al canal RCTV que aseste un verdadero orden en la labor de la información venezolana de manera veraz y oportuna como lo contempla nuestra Carta Maga.
Los medios de comunicación privados se han caracterizado por tergiversar la realidad nacional, situación aprovechada por sectores radicales de la oposición venezolana, con apoyo de países aliados a los intereses norteamericanos e inclusive la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, organización dominada por los Estados Unidos para contribuir con el proceso desestabilizador sembrando temor en la población diciendo que Venezuela va camino a una dictadura o a un totalitarismo.
La guerra mediática por parte de los medios privados al gobierno nacional es constante, sin tregua, cada minuto y segundo son atacadas las políticas gubernamentales o algún representante del Gobierno Nacional. Su línea editorial ha consistido en tergiversar la información mediante manipulaciones o medias verdades con un contenido político, destinado a confundir a los venezolanos al señalar que la población tendría que esperar que haya un cambio en la direccionalidad política de nuestro Gobierno Bolivariano para que los grupos empresariales se pongan a trabajar, crear empleos y duplicar la producción de bienes y servicios, manifestaciones que están muy lejos de la realidad por el desprecio de estos sectores hacia el pueblo pobre..
Ahora bien, en contrapartida a esa avalancha de falacias informativas y pretensiones golpistas, existe el trabajo informativo de los medios de comunicación públicos, alternativos y comunitarios, quienes han trabajado arduamente en contrarrestar la guerra mediática, presentada por los medios privados con ciertas limitaciones.
Para lo cual fue necesaria la reconstrucción del canal del Estado "Venezolana de Televisión", canal que estuvo en completo abandono por parte de los gobiernos de la cuarta república, creación de 327 medios alternativos impresos y audiovisuales, fortalecer las emisoras comunitarias, destinadas a informar el trabajo gubernamental, cultural, político, económico financiero, deportivo, social que ha venido desempeñando el proceso Revolucionario, de las cuales 17 de ellas están en el estado Bolívar.
Dichos medios gubernamentales, alternativos y comunitarios, han sido, en muchos casos, amenazados, golpeados y vilipendiados por sectores de la derecha venezolana, que automáticamente reflejan un gran odio por ver que el poder político informativo, ya no es solamente dominado por los grupos de poder económico del país, sino que existen corrientes alternativas que poco a poco han ido calando en la opinión pública venezolana.
Los medios de comunicación privados se han creado como meta desprestigiar y desestabilizar al Gobierno Nacional, sembrando zozobra en la sociedad venezolana, de hecho, no le paran al ente administrativo rector, que le adelanta procedimientos administrativos por el incumplimiento de la Ley de Responsabilidad Social de Radio y Televisión, y continúan con la guerra mediática, llamando al magnicidio inclusive.
Hablar de contrarrestar esa guerra mediática de manera flexible en dar a conocer las políticas sociales del gobierno bolivariano a través la prensa escrita, radios comunitarias y de los canales del Estado, como el canal 8, es bien inocente, pues la oposición lo que hace es conspirar contra la revolución, por tanto alerta y rodilla en tierra.
Creemos en la pluralidad, en la diversidad de pensamiento, pero no podemos permitir libertinaje ni atropellos. En Venezuela está en marcha un proceso Revolucionario que nos ha costado mucho trabajo, que poco a poco ha ido construyendo valores éticos de solidaridad humanitaria e igualdad social, incluyendo a sectores de la población que habían sido marginados por años.
No podemos permitir que grupos oligárquicos del pasado pretendan quitarnos o arrebatarnos nuestro sueño de ver a una Venezuela verdaderamente libre.
Hasta la Victoria Siempre… Patria socialista…
Entre Vencer o morir, necesario es vencer. Viva Chávez.
1.- Edgardo Alfonso Toro Carreño, 2.009
2.- Andrés Giussepe Ávalo, 2.013
3.- Instituto Nacional de Estadística, 2.014
4.- Ley Orgánica de Planificación Pública y Popular, 2.010
5.- Ley Orgánica del Sistema Económico Comunal, 2.010
6.- Ley Orgánica de las Comunas, 2.010
7.- Ley del Plan de la Patria, 2.013-2.019
Autor:
Dr. C. Argenis Rafael Vargas Poliquet
(Docente de la UBV- Bolívar)