El cerebro se construyó de adentro a fuera, a partir de la autocreación de organelas: receptores externos, los cuales resultaron como respuesta a los diferentes estímulos con que el medio ambiente exterior bombardeaba insistentemente a este incipiente "proyecto viscero/orgánico". Herramientas que posteriormente se fueron especializando a la medida en que cada uno de éstos, se dedicó a manipular y procesar tan solo un particular estímulo, cuyos impactos persistentes y continuados determinó que por su propia dinámica, se fuera canalizando y ensamblando, de manera centrípeta las diferentes vías sensoriales, las cuales terminaron conectando la perifería apropiadamente con la intimidad visceral, proyecto primogénito de los agentes de la evolución, proceso parecido a la gota de agua que termina horadando la roca.
El humano desde que nace, automáticamente está imbuido dentro de esta especial programación, que consiste en estar copiando planos de forma impositiva y continua, desde todos los ángulos y perspectivas, de la realidad ambiental concreta que nos rodea y, ya terminada esta carrera cuando adulto, somos una armadura vital moldead, adecuadamente organizada y amaestrada para seguir respondiendo a las exigencias que nos impone esta realidad tridimensional, a la manera de un arquitecto graduado, quien primeramente se le enseñó a imaginar el tipo de edificación que va crear, lo plasma sobre un papel en plano bidimensional y, finalmente este individuo especializado, por el "lavado de cerebro" que le hizo el medio ambiente universitario, procesa y traduce estos garabatos y, finalmente levanta una obra tridimensional: la materialización de un edificio, producto de una conducta tal cual lo enseñaron su maestros., con el añadido de su particular creatividad, por supuesto.
Somos natos exploradores instintivos desde que nacemos, desconocedores del ambiente cultural, lingüístico y del cosmo que nos rodea, aprendiendo en minúscula pausadamente para luego potencialmente comprender y hasta integrarnos al macrocosmos que nos intriga y nos apabulla. Y dentro de esta escuela, nuestra primera tarea es copiar los movimientos que hacen los padres frente a cada situación, lo que dicen cuando hablan, lo que ven cuando miran, lo que oyen y üelen cuando husmean.
El concretamiento pausado pero continuado del cerebro hasta adquirir la herramienta inteligente, determinó a su vez en paralelo, el paulatino ensamblamiento refinado y plástico de las partes del cuerpo humano, de acuerdo a las exigencias medioambientales y a las conveniencias internas biológicas, psicológicas y de relaciones con los demás individuos de la comunidad y, finalmente su armonía, funcionalidad y confort siguen siendo objeto de un proceso perpetuo de especialización Dios nos dió la magnánime oportunidad de autogestionar nuestro propio origen, crecer, multiplicarnos y finalmente desarrollar una inteligencia, la cual es la gran joya de la corona del proceso evolutivo hasta hoy día, con lo cual concretó su autoexigencia de tener a un individuo con raciocinio que atestigua su fantástica creación del Universo, y al mismo tiempo la propia existencia del CREADOR, porque todo su hechura se reducía hasta ese momento "a una nada cerodimensional laberínticamente imaginable".
La estructura cerebral está integrada principalmente por neuronas, pero tiene además glándulas como la hipófisis y la pineal, condición que lo cataloga naturalmente como órgano visceral. El cerebro tiene tentáculos neuronales que los ha labrado a través de agujeros en la envoltura ósea craneana que lo encierra, con funciones receptoras mediante los cuales, de manera continuada y centrípeta se informa de la existencia y de los cambios que se suceden en el medio ambiente exterior o la falta de éstos, los Son los órganos de los sentidos: piel, ojos, gusto y oídos, todos los cuales conducen sus específicos estímulos hasta el núcleo basal del cerebro, el tálamo óptico, que luego de integrarlos y procesarlos selectivamente atendiendo a su prioridad, los envía a través de sinapsis tálamo/corticales a las respectivas neuronas aferentes de las zonas corticales correspondientes: a la occipital los estímulos visuales; a la parietal los gustativos. Los correspondientes a la sensibilidad general provenientes desde toda la superficie dérmica corporal, junto con los gustativos a las parietal, Tan solo los estímulos olfatorios van directamente a la corteza temporal, sin hacer sinapxis en el tálamo.
Las células inteligentes neuronales han sido clasificadas desde el comienzo de las investigaciones sobre el cerebro, tan solo tomando en cuenta su unifuncionalidad, es decir, su actividad sobresaliente que ejecutan en menoscabo de otras ., pero estas células son por demás complejas, por lo que cualquier detalle adicional es digno de ser tomado en consideración al momento de clasificarlas. Aunque esta clasificación histórica deber seguirse respetando, en señal de agradecimiento a los Distinguidos Investigadores que aportaron su experiencia y su raciocinio creador, para generosamente entregar didácticamente comprensible el producto de su grandísimo esfuerzo agotador, por lo que con todo respeto, a esta clasificación histórica le agrego detalles funciones ignorados hasta ahora, en cada de las neuronas involucradas en esta original clasificación, todos los cuales son de suma importancia. Estas células tradicionalmente han sido encerradas y clasificadas como:
a) Neurona SENSITIVA (AFERENTE).
b) Neurona ASOCIASTIVA .(PROCESADORA).
c) Neurona MOTORA (EFERENTE).
Esta clasificación hermética luce desbordada modernamente, puesto que estas particulares unidades citológicas, aunque sigamos manteniéndolas dentro de esta clasificación básica, es menester que sean promocionadas de manera más pormenorizada, eliminando la rigidez del criterio unifuncional que se les ha impuesto.
El núcleo talámico es por excelencia la puerta de entrada ancha al estilo de un embudo por donde penetra la información perceptiva medioambiental propiamente dicha a la intimidad del cerebro, canalizada por los órganos de los sentidos (piel, ojos, gusto y oidos, y la sensibilidad interna), por lo que la comunidad de neuronas aferentes/procesadoras talámicas, son la encargadas de cumplir el rol específico de recibir en cada momento vital al grupo de estímulos visitantes, procedentes desde todos los puntos cardinales extracerebrales (receptores periféricos) a los que integra, los identifica y, a la velocidad electrofótica que caracteriza este tránsito, de manera selectiva y específica los descarga direccionalmente sobre el grupo correspondiente de neuronas SENSITIVAS corticales, conformando de esta manera el tramo TALAMO/CORTICAL, que se alinea en dirección centrípeta, parecida a imanes, ajenos a la forzada continuidad unidireccional impuesta por una cadena por supuesto de aros entrelazados y, acto seguido, el estímulo es trasnferido dentro de la misma corteza a las neuronas ASOCIATIVAS procesadoras, conformándose el segundo tramo centrípedo CORTICOAFERENTE/CORTICOASOCIATIVO, que tiene el obligante trabajo de recibir, manipular y elaborar una respuesta apropiada, la cual una vez elaborada, seguidamente es canalizada mediante el tramo último CORTICO/EFECTOR de neuronas MOTORAS, que descargan finalmente esta respuesta en el órgano efector muscular correspondiente, provocando por ejemplo una contractura apropiada. Por lo visto, ES POR DEMÁS ENTENDIBLE, que esta alineación de unidades neuronales canalizan la información, la procesan y seguidamente descargan una respuesta específica, por lo que naturalmente cualquiera sea la neurona en estudio, tan solo con un argumento raquítico, se puede seguir sosteniendo su MONOFUNCIONALIDAD, puesto que se entiende, que alternativamente estas células les entra información multisináptica (hasta por muchísimos puntos receptivos, sensitivos) y por otros tantísimos emisivos (emisores) la sacan, con lo cual hay fundamento para distribuir equitativamente sus actividades y con mayor precisión ajustarlas a la realidad, por ahora mediante cálculo elástico por intuitivo, tomando en consideración que el tránsito de la información mantenga su fluidez natural correspondiente, por lo que es pertinentemente lógico entender que las puertas de entrada y de salida entre un tramo sectorial y el siguiente, deben guardar dimensiones proporcionales, lo que asegura el fluir natural incesante de la MENTE propia del cerebro sano.
Por lo que algunos procesos degenerativos como psiconeurosis, Alzeimer, etc., pueden tener su explicación, ya por la ausencia o déficit o la acumulación de una sustancia específica dada o, en su lugar otra irritante ya bioquímica, medicamentos o tóxica extraña, cuya presencia a nivel de los puntos sinápticos puede producir cuellos de botellas en estas interfaces y, llevar a un enlentecimiento del tránsito mental, o a su apertura inoportuna por imprecisa, por lo que invito a los respetables colegas neurólogos y psiquiátras a considerar estos naturales puntos físicos coyunturales, como generadores potenciales de disturbios del tránsito mental.
Categorización neurofuncional de las neuronas
1) NEURONA SENSITIVA, de función MIXTA: 80% receptiva y, 20% emisora.
2) NEURONA ASOCIATIVA, de función TRIPLE: 20% receptiva, 60% procesadora y, 20% emisora.
3) NEURONA MOTORA, de función MIXTA: 20% receptiva y 80% emisora.
Por lo que la alineación de las neuronas para formar segmentaciones grupales lineales (potencialmente multiparalelas por su condición multisináptica) ya en dirección centrípeta y centrifuga sería lo naturalmente inteligente, para entender la dinámica de este proceso circulatorio, sin rigideces monolineales que impidan el cabalgamiento del mismo estímulo sobre las neuronas colaterales solidarias, lo cual asegura el reforzamiento de su constante fluir, en busca de alcanzar su meta específica, tránsito que se inicia en el punto estímulo y termina arropándolo.
Cuando el estímulo es de naturaleza cognitiva, se pone en relieve la capacidad creadora, y cada individuo dentro de su elástica sabiduría inteligente, utiliza su estímulo perceptivo, lo desmenuza mediante su particular raciocinio y logra finalmente una circunstancial o temporaria respuesta feliz, o infeliz o finalmente ..una de carácter política.
LA EVOLUCION FIOLOGENETICA DEL CEREBRO se ha cumplido quemando estadios sucesivos, científicamente establecidos de esta manera:
A) Primer Estadio, PREVISCERAL (vegeto/animal),
cuando tan solo era un tallo vegeto/neural, tiempo de transición de lo vegetal a lo animal, (75%o vegetal y ya 25% de animal/básico). Luego, con el transcurrir de milmillones de siglos terrestres (?), apareció "un follaje" coronando la cima de este tallo, la organela LÓBULO LÍMBICO, y con esta creación, el proceso evolutivo forzó su entrada y alcanzó su ..
B) Segundo Estadio, "VISCERAL",
conquista evolutiva por supuesto de mayor complejidad neuronal jerárquica, decididamente proanimal, agregado estructural anatómico que cobija, encierra y potencia significativamente el estadio primario vegeto/animal anterior. Y finalmente ya con este incipiente pero significativo "arbusto neural", más animal que vegetal (75%/25%), este cerebrito primitivo sigue su proceso creador de exitosa transformación y . otros tantos milmillones de siglos después, aparece una nueva organela arborescente, LA CORTEZA, la cual engloba y deja oculta a la estructura visceral anterior, ganancia que reforza, repotencia y promueve total y definitivamente ya, a este órgano neural como una superestructura psiconeurológica, con lo que termina encumbrándose como el más grande trofeo producto del proceso evolutivo universal, con lo que alcanza el
C)Tercer Estadio, "CEREBRAL" y, ya de esta manera, estructurado finalmente como órgano jerárquico, con lo que potencialmente se encumbra por encima de la seudointeligencia animal conviviente, ya mentalmente regimentado por una conducta moderna que resulta de la suma de: SENTIMIENTOSs (unidades básicas EMOCIONALES previsceral), sumada a los RECUERDOS (conducta básica de MEMORIA) propia de esta etapa intermedia visceral, lo cual determina una conducta integrada, mezcla de SENTIMIENTOS Y RECUERDOS (propia del estadio animal), la cual regimenta adecuada y naturalmente el comportamiento primitivo animal. Amalgama conductual de raices por supuesto animalesca, que aún persiste y convive en paralelo como coprotagonista de nuestra actual conducta Moderna Inteligente y Creadora, conjunto de matices que de ordinario conforman unidades de carácter, que puede ser canalizado "inteligente y apropiadamente" en cada circunstancia, hasta prudentemente mediante el libre albedrio, aderezado con el refinamiento cultural, por lo que ya no es sorprendente por lo cotidiano, las salidas muchas veces viscerales (animalescas) y, otras veces, inteligentes por oportunas, complejas, calculadas y hasta impredecibles, que exhibe el individuo humano para solventar lo más pragmáticamente posible los obstáculos que nos retan y finalmente, cada triunfo que el hombre suma, estimula su capacidad creadora, enrumbamiento plausible que sublimiza y enriquece su autoestima, para proseguir el viaje hacia lo desconocido, figura caricaturizada apropiada y artisticamente sobre un "potro" de comportamiento variable: unas veces salvaje, indómito y violento, intranquilo (visceral-emocional), otras veces tomados por las riendas: pacífico, solidario, predispuesto e impredecible (cerebral).
Registros psíquicos productos de fluctuaciones de la balanza, por el agregado unas veces de mayor peso en el extremo FUNCIO-VISCERO-PRECONCIENTE o, en otras en el extremo FUNCIO-CONCIIENTE, conductas variopintas, producto de la dinámica competencia entre esta trinidad conductual (emocional/memoria/cortical), que aún sobreviven en contigüidad simbiótica dentro de un frágil equilibrio, variaciones o fluctuaciones de nuestro aún inmaduro carácter, que se puede graficar como "el jinete humano cabalgando sobre el potro (lo inteligente) y . otras veces, la arista animalesca: el potro cabalgando al desbocado humano", virtudes, defectos, debilidades y desequilibrios propios de los tropiezos sobre este camino aún empedrado de la evolución, que nos alienta a pensar que la meta final aún está en el horizonte distante, con las aulas de las escuelas despejadas, con la esperanza de una oportuna educación enaltecedora, por lo que
LA INTELIGENCIA DEL CEREBRO HUMANO .Ha sido finalmente posible a partir de haber creado, conquistado y superado las etapas funcionales EMOCIONAL y MEMORIA , proezas que se siguen reforzando con el trascurrir del tiempo, concretadas luego de haber puesto en marcha su proyecto autoconstructor y ensamblador de organelas y consiguientemente de órganos de mayor envergadura, condicionamiento forzado por el procesos evolutivos como mecanismo proactivos de sobrevivencia, frente a las exigencias medioambiental, adquisiciones que hicieron posible finalmente su encumbramiento ONTOGENICO jerárquico.
Herramientas neurológicas funcionales que posteriormente fueron sometidas naturalmente al proceso de especialización, es decir, su adaptación y complementación a medida en que se familiarizaban con el estímulo inicialmente atropellador .. porque desde luego, en las etapas iniciales, la función fue precursora de las organelas, por lo que con mediano esfuerzo de nuestra maquinaria de la comprensión, se pueden encerrar estas herramientas FUNCIONALES sucesivas, dentro de tres compartimientos temporarios evolutivos, lineal y jerárquicamente ascendentes:
No. 1) Etapa de FUNCION V I S C E R A L (auspiciante de las EMOCIONES);
No. 2) Etapa de FUNCION P R E C O NC I E N C I A (auspiciante de la MEMORIA) y, estas dos etapas básicas a su vez, potenciaron finalmente esta tercera contemporánea:
No. 3) La etapa FUNCION C O N C I E N C I A (auspiciante de la INTELIGENCIA y de la CREATIVIDAD).
Son estos peldaños FUNCIONALES de esta escalera ancestral, que nos ha permitido llegar al posicionamiento actual como ANIMAL INTELIGENTE. El primero trayecto funcional EMOCIONAL y el segundo de MEMORIA (recuerdos) rigen la conducta animalesca naturalmente, desde el primogénito virus hasta el mayor corpulento de los cetáceos, e incluyendo al animal hombre por supuesto, por lo que las consideraciones sobre nuestra conducta general homo sapiens, deben de hacerse sobre esta base tripartita originaria, comportamientos frecuentes con picos sobresalientes de una de una de estas tres conductas básicas, las cuales nos afloran generalmente mezcladas entre sí y, las exhibimos a diario con toda naturalidad, pocas veces refinadamente. Simbiosis conductual solidaria e inseparable que fluye como comportamiento auténticamente personalizado, vehiculizado novedosamente por nuestro cerebro inteligente, repito, tienen que hacerse, tomando en cuenta obligadamente estas raíces ancestrales ontogénicas originarias.
Si bien se ha estudiado y establecido el progresivo agrandamiento del volumen, peso, y forma del cerebro, por las adquisiciones finalmente de nuevas herramientas anatómicas concretas y complejas, es completamente novedoso y oportuno abordar a este particular órgano, EL CEREBRO HUMANO, mediante el ESCRUTINIO CONDUCTUAL, es decir, encuadrarlo dentro de las diferentes modalidades FUNCIONALES protagónicas, que lo ha caracterizado en las diferentes etapas temporarias por las que ha transcurrido su ascenso jerárquico hasta nuestros días.
El cerebro funcional. Su categorización moderna
Tan solo quiero en adelante considerar el DESENVOLVIMIENTO FUNCIONAL del CEREBRO dentro de su proceso evolutivo ONTOGÉNICO, recorrido ascendente que ha protagonizado haciendo alarde de sus HERRAMIENTAS PREORGANICAS.
Desde este punto de vista funcional, el cerebro en esta actual y contemporánea ETAPA FUNCIONAL TERCERA de su desempeño evolutivo, se encuentra equipado con el pensamiento inteligente y hasta creador, en compañía simbiótica por supuesto de las otras dos etapas funcionales previas: la VISCERAL (Emocional) y PRECONCIENTE (Memoria). Este transcurrir lento, pero incesante y enriquecedor de nuestro cerebro, lo podemos encerrar dentro de PARAMETROS FUNCIONALES, (independientemente del protagonismo de los cambios morfológicos generales que por fuerza FILOGENETICA se han producidos, ya explicados arriba), representativos de las diferentes etapas cronológicas que se han superpuestos para conducir el ascenso jerárquico encumbrado de este particular animal bípedo. Repito, tan solo tomando en cuenta sus jerárquicos ASCENSOS FUNCIONALES hasta nuestros días, es posible separar este proceso autocreador en tres etapas funcionales, las cuales tienen que ser vistas como pilares básicos, donde la primera siguió (ó aún sigue ?) en paralelo desarrollándose junto a las siguientes, continuadamente hasta más allá de muchísimas generaciones nuestras aún, en procura de una mayor e incesante especialización. Así resultan tres categorías funciones ontogénicas originarias:
1.-FUNCION VISCERAL.
2.-FUNCION PRECONCIENTE y
3.-FUNCION CONCIENTE.
1. LA ETAPA FUNCIONAL VISCERAL, de condición vegetativa, sus huellas permanecen indelebles. Su reminiscencia es visible al instante de poner nuestra mente en blanco, es decir, cuando desalojamos la unidad mental presente que ocupa nuestra atención, liberándola bajo su completa horfandad autonómica (fuera de nuestro control voluntario), dando lugar inmediatamente a la contemplación de escenas abstractas, figurativas, etc., de imágenes en blanco y negro, dinámicas y con libre automatismo, que cambian y se transmutan incesantemente, (por ahora, suficiente para iniciarse en esta práctica mental, todo similar a la visión frente a la pantalla de tv antigua (blanco y negro) ., tan solo ponga su visión psíquica en acción. Esta herramienta funcional visual primogénita, propia de la etapa inicial del cerebro primitivo, en retrospectiva, carente por su puesto de tan siquiera una organela sensorial básica, nos permite aproximarnos a como fue el comienzo "embrionario" de este ensamblaje neurofuncional específico. La etapa FUNCIONAL VISCERAL, es el primer peldaño ontogénico en el ascenso jerárquico y se caracteriza porque exhibe una incipiente y básica CONDUCTA EMOCIONAL. Para afirmar esta teoría traigo a colación el siguiente argumento:
En el registro ancestral FILOGENETICO de cada neurona humana, en la intimidad de su arquitectura biológica, están encrustradas aproximadamente 1.000 secuencias genéticas virales, partículas sobrevivientes de fósiles virales ancestrales conquistadas, digeridas y asimiladas, que atestigüan la histórica "simbiosis" entre estas dos entidades convivientes singulares, que finalmente por motivos de sobrevivencia tal vez, confrontaron fratricidamente, condición de enemistad que aún se sucede y seguirán por siempre, debido al arrebato o pérdida del territorio primitivo, hecho confirmado a diario por la afinidad de los virus patógenos por el tejido neural general, competencia mortal donde la neurona de mayor jerarquía inteligente, sigue rigiendo la natural biofuncionalidad del sistema nervioso global.
Ambas entidades microbiológicas se asemejan en sus funciones a escala básica, puesto que reciben información (estímulo), lo procesan y emiten una respuesta. Esta capacidad es la que utilizo para ensamblar la MEDICINA SONICA ANTIVIRAL para su creación, someto a estos elementales ultramicroscópicos virales a condiciones extrema de sobrevivencia, capto sus increibles emisiones "sonoras" en un receptor, manipulo estas emisiones y, se las reenvío. La respuesta que consigo es la erradicación del proceso enfermante viral, en pocos días. Como ejemplo, la aplicación de 1 hora/día de esta "sonoridad", en cinco días se cura el chikungunya, dengue, etc., etc
Esta desaparición abismalmente sorprendente de cualquier síndrome de etiología viral, luego de estas aplicaciones sonoras, solo es posible explicarla, porque es producto del PÁNICO, reacción extrema de naturaleza EMOCIONAL, protagonizada, evidenciada misteriosamente por una incipiente entidad comunal de convivientes microrgánicos virales, mancomunidad provista aparentemente de una herramienta neurológica concreta, una ultramicro/organela límbica, de naturaleza tal vez electromagnética ó (¿?). Con la ayuda del pensamiento recreador, se puede traer a colación, el ancestral inicio de esta competencia en paralelo, entre virus y neuronas:
Un grupito rudimentario de neuronas sobreviviente, probadamente exitosas frente al hostil ambiente, inicialmente incipientes por supuesto, tal vez en simbiótico esfuerzo con virus en lineamiento de perfil ascendente proactivo, coincidieron casualmente y emprendieron la construcción de una seudoestructura citoarquitectónica embrionaria y su esfuerzos logró ensamblar una víscera rudimentaria por supuesto (un seudocerebrito). Con el transcurrir del tiempo y por imposición de los agentes de la evolución, esta comuna primogénita citológica neuronal quedó armada finalmente como organela (el sistema límbico de nuestro actual cerebro).
Al contrario, los virus menos corpulentos y inteligentes que su contraparte, fueron controlados y hasta ahora se mantienen como entidades individuales separadas, lo que sugiere que han quedado a la vera del camino evolutivo y, hasta ahora aún, se encuentran en el rudimentario inicio "pre-visceral", puesto que aún no han podido constituirse en una masa social homogéneamente compacta pluricelular, con lo cual alcanzar la categoría de organela visceral, como sí lo concretaron las neuronas.
Estos microbios obviamente no poseen organelas sensoriales, por lo que su conducta "misteriosamente sonora", es por demás sorprendente y, expresa un alto grado de jerarquía evolutiva al compararla con el comportamiento de sus gigantones compañeros de farra sordomudos: hongos y bacterias.
Lo megaimpresionante de estas partículas vivientes aparentemente elementales, es la materialización de una conducta de PÁNICO, básicamente similar a la exhibida y publicitada por el animal contemporáneo humano superior, quien posee un cerebro ultramoderno, equipado con las herramientas de la conducta INTELIGENTE, complementada con la conducta EMOCIONAL ( el sistema Límbico, que es la parte de la corteza cerebral de mayor jerarquía dentro de esfera emocional, cuya función es agregar un apropiado porcentaje de emocionalidad a la conducta exhibida por el hombre en cada una de sus múltiples actuaciones diarias, conducta muchas veces animalesca fuera de todo control, puesta en evidencia por esta "máquina humana", al enfrentarse muchas veces a situaciones inesperadas, que hasta pueden llevarlo al suicidio involuntario.
Lo esperable naturalmente es una reacción conductual consensuada entre lo emocional y lo inteligente, es decir, lo visceral tamizado por la función superior CONCIENTE (inteligente) de más reciente adquisición. No sorprende para nada, por lo necesariamente lógico/natural que se produzca esta respuesta emocional frente a momentos peligrosos que ponen a prueba la sobrevivencia del individuo y por supuesto de la especie, como podría ser el hecho amenazador y de alta peligrosidad en su desenrrollo inminente como: FUEGO, ATAQUE TERRORISTA, NAUFRAGIO, TERREMOTO, etc.,., pero es el colmo que esta actuación incontrolable de PANICO sea desencadenada en una gran cantidad de veces, tan solo con el anuncio verbal de la mera palabra anunciante de .. FUEGO!!!!! por ejemplo, sin tan siquiera la presencia de un rayo inteligente para confirmar consiguientemente si el anuncio de alerta es cierto, pandemonio que confirma que hasta el final del mundo, esta conducta del "homo sapiens", tal vez con tan solo modificaciones de forma, como producto potencial de un alto refinamiento cultural, por lo que la caricatura de este comportamiento desinteligente sobresalientemente visceral, nos perseguirá por siempre como un individuo bípedo jineteado por su desbocado cuadrúpedo, figura que se mantiene inmodificada hasta ahora, que exhibe una publicidad penosa y retrógrada, como la persistencia del individuo en la etapa visceral. Si en estos 3.000 millones de años que se citan ha consumido este trayecto evolutivo hasta hoy día, dificilmente habrá en el futuro previsible mejoramiento de este comportamiento, por lo que esta condición de dualidad de carácter inteligente y animal, esta condición nos seguirá delatando por siempre como seres muy particulares.
Finalmente, dentro del marco de la inteligencia, si tomamos en consideración la afinidad funcional y su convivencia simbiótica ancestral, cabría la siguiente preguntita:¿¿¿ Quién fué el precursor de la inteligencia : el VIRUS o la NEURONA humana???. Para negar categóricamente que no fueron los virus los primeros, hay que tomar en cuenta, que luego de una catástrofe estelar, solo quedan piedras y hasta lodo congelado. Los virus tienen la capacidad de cristalizarse, potencialidad que los sitúa como entes intermedios: viviente (animal) y cristalizados (mineral) y, de esta última manera solapada, "como muertos", meten su metabolismos en hibernadero, y con esta herramienta metamorfósica se transmutan apropiadamente en "cosmonautas" y, dentro de las piedras estelares transcurre su existencia vagabunda y cósmica, en busca de la circunstancia apropiada que le brinde la oportunidad de cabalgar sobre una cualquiera célula viva rudimentaria por supuesto al final de su prolongado viaje, con lo que le aseguraría su potencial desarrollo inteligente (¿?)..
2. LA ETAPA FUNCIONAL PRECONCIENTE, es por supuesto de condición también vegetativa. Transcurrió dentro de una ambientación dominada por la oscurantana hibernante de la inconciencia, etapa cronológica durante la cual se mantuvo en incógnita el ensamblaje de la construcción de todos los circuitos neuronales intrínsecos de este proyecto de cerebro: de recepción o aferencia, de procesamiento y los eferentes o motores y los psicológicos, porque esta víscera está en "este momento" en plena esfervescencia proactiva, creando las líneas sinápticas que finalmente terminaron ensamblando las vías sensoriales, a partir de la dinámica de los estímulos con que el medio ambiente lo bombardeaba en cada instante, lo cual en primer lugar dio origen a la primogénita vía olfativa, herramienta con la que ya este básico y rudimentario animalito alcanzó la capacidad de acercarse a la pareja, alimentos o distanciarse oportunamente del depredador.
Retrospectivamente recreamos esta vivencia preconciente, en las horas diarias que nos OCUPA EL SUEÑO, inducida naturalmente por el apagón del tinglado de todo el conjunto de circuitos sinápticos del encéfalo, con excepción del S.N.A….. Reminiscencia naturalmente obligante por necesaria, con la que apropiadamente nos transportamos dentro de este entreparéntesis etario geológico, de suma importancia como peldaño indispensable para el encumbramiento de nuestra funcionalidad conciente moderna. Esta ambientación circunstancial de íntimo recogimiento reparador, reserva espacio para la actividad onírica, precursora de la herramienta MEMORIA. El recuerdo onírico tan solo es realmente posible (sine qua non), si el ensueño queda anclado en la estela del recuerdo, el cual subyace dentro de la inconciencia. La necesidad real de degustar, de revivir la experiencia onírica fue la condición estimulante para que esta víscera reforzara y repotenciara los recuerdos, esfuerzo ensamblador que concretó la siguiente herramienta jerárquica:
LA MEMORIA.. Esta función memoria guarda una separación importante de carácter virtual dentro de su estrecha relación conviviente permanente, de simbiosis indisoluble con la INTELIGENCIA, por lo que ambas capacidades se evidencian casi siempre transparentadas una con la otra, por lo que muchísimas veces a ésta la adjetivan como "inteligencia" cuando tan solo es la otra cara de una misma moneda, la memoria. Esta última, contribuyó fundamentalmente en la construcción psico/arquitectónica del cerebro, evitando indevidamente la repetición de ensayos y errores, lo cual deja despejado el camino para que la esponja absorvente de la corteza cerebral, siga curioseando y continúe contactando la problemática específica de reciente aparición, en cada instante y .. en paralelo ir aprendiendo a aprender sus apropiadas soluciones e ir guardando consigientemente en los núcleos basales encefálicos, la memoria de las respectivas experiencias,
La memoria es la herramienta indispensable donde se acumulan y se depositan las experiencias como tesoros conquistados, reservas que con toda facilidad son prolongadamente disponibles e indefinidamente reutilizables en beneficio de un mejoramiento de la calidad de vida. Es sorprendente evidente, el inmenso depósito de la memoria de condición innata en muchas personas, por supuesto para almacenar recuerdos, los propios y los correspondientes a experiencias ajenas, incorporados oportunamente y con poco esfuerzo, con atención y modesto trabajo como leer, escuchar y ver, lo cual a su vez demuestra condición neurológica excelente, pero esta capacidad muy apreciada a primera vista, es una herramienta innata, es decir, sin que su propietario haya tenido protagonismo conciente en su adquisición.
La incorporación dentro de la memoria de las experiencias ajenas son legal y culturalmente aceptada por la sociedad, por lo que el cerebro de un summa cum laude por ejemplo, es el máximo representante de este talento, que muchas veces se pasa de listo al opacar a su propia inteligencia, por lo que sus "propietarios" en oportunidades, tienen que muy humildemente exhibirla y administrarla "inteligentemente" . por lo que los aplausos emocionales circunstanciales del ahora, con justicia apropiadamente los deberán de recibir los afortunados summa, apropiadamente en el futuro, luego de cada una de las obligadas creaciones inteligentes, producto ahora sí, de su propio esfuerzo conciente, sudoroso, que entregan construcciones creativas significativas, frutos de haber aprendido a aprender, aportes a los cuales están particularmente exigidos por la Universidad de la Vida, con mayor compromiso que los graduados con notas promedios, aplausos ahora sí, de verdad merecidos, por haber superado la "caletrera" condición intelectual, propia de la Etapa Funcional Memoria (preconciente).
3. LA ETEPA FUNCIONAL CONCIENCIA, está regentada militantemente por la actividad incansable del núcleo TALAMO OPTICO, organela imprescindible de alta jerarquía evolutiva, cuya particular actividad deja poco espacio para su descanso, cuyo funcionamiento por demás dinámico mantiene permanentemente relumbrada la corteza cerebral, constituyéndose en su antesala, ya que identifica y dosifica de manera direccional a cada estímulo recienllegado, enviándolo con particular exaptitud, a la zona cortical correspondiente para su procesamiento y respuesta apropiada. La corteza cerebral es el sustrato anatómico multipotencial para emprender la labor estelar de aprender a aprender, al curiosear el individuo frente al medio ambiente desconocido, para lo cual cuenta con la atenta colaboración supervisora de este núcleo basal, quien la sujeta firme y atentamente al frente de cada tarea específica que de ordinario la ocupa, emplaza y reta al hombre en cada circunstancia existencial.
Luego del largo trecho sumergido dentro de la "nada adimensional preconciente", que negaba la existencia del propio individuo y del mismísimo universo, podemos regresivamente reeditar el transcurrir de esta caminata intemporial de la PRECONCIENCIA y su empalme con la etapa de funcionalidad CONCIENTE, (por megamagnanimidad del Creador). Para traer a colación el inicio o este empalme, seré algo así como el protagonista en el siguiente "video", buscando la ayuda fantasiosa de algo que sirva de aproximación: Seré en esta "comedia" una persona a quien secuestran en una noche oscura, me encapuchan, me transportan, me drogan previa anestesia y me dddeeeessssspppppiiiieeeerrrrttttttoooooooooo al término de una indefinida larga pasantía dentro de un "túnel" por demás oscuro, al cual entré por la puerta animalesca de la inconciencia y me encuentro saliendo por un portón amplio, a un mundo desconocido, frente a una luz tibia que me acaricia y——tardo un incalculado, pero larguísimo tiempo en ir dándome cuenta del pequeño mundo a Mí entorno -
Este protagonismo superior evolutivo nuestro, dentro de esta etapa CONCIENTE, se consume rutinariamente entre estas dos condiciones funcionales: La VIGILIA, por demás activa y energizada durante dos tercios del día, estimulada por la presencia de la luz solar y, . el tercio restante, de funcionalidad aparente pasiva por inconciente dentro del SUEÑO, pero intrínsecamente dinámica por recuperadora y reparadora, que guarda espacio para el obligado descanso físico orgánico general y psicológico. Alternancia regular y rítmica que nos impone nuestra condición natural biológica. Vigilia dinámica por vigilante, la cual llega a su máxima expresión durante el momento de una suprema ATENCION (conciencia, más interés, más memora), circunstancia conductual puntual, producto reforzado de la conducta FORMAL, resultado simbiótico de las esferas: cortical inteligente, más la visceral emocional, más preconciente memoria, acontecimiento indispensable para el aprendizaje, de forma aguda y su anclaje profundamente en el recuerdo.
La FORMALIDAD, es una refinada postura de alta jerarquía inteligente, que facilita al devoto individuo, aferrarse a principios y valores que concurren linealmente hasta alcanzar una personalidad virtuosa. El desarrollo de la conducta formal acusa una actuación inteligente, porque posibilita el deslinde de conductas impropias e inconvenientes dentro del variado campo en el cual se moviliza y se interrelaciona el individuo. Es por lo tanto una conducta permanentemente exigente, que auspicia un gradiente ascenso en la valoración de la autoestima. Por ejemplo, un personaje que nació en el silvestre monte como cualquiera otro, pero que persistió dentro de una programación sistemática, cultivarse intelectual y profesionalmente, y ya graduado como ginecólogo, la conducta formal oportuna y apropiada, la cual empuña y reforza principios y valores, concientemente lo impone y lo acredita primero que todo como ciudadano y al mismo tiempo, como individuo profesional íntegro, condicionamiento inteligente repito, que deja velada su condición neta masculina, potenciación que lo aleja significativamente de cometer actos lascivos, al manipular la pelvis de una atractiva dama, tan solo como ejemplo.
LA CONCIENCIA: Es, la fotocopia abstracto/psíquica del universo material y, en estricto es, la unidad mental y/o verbal que ocupa nuestra atención en cualquier momento de nuestra condición de vigilia, por lo que en un instante podemos reconocer con alegría o tristeza (emoción), nuestro propia existencia (memoria), y la forma de comportarnos dentro del ambiente que nos rodea (conciencia). Por lo que finalmente la conciencia es, el grado de conocimiento y desempeño de nuestras capacidades frente a una problemática dada, pero también conciencia es, reconoce oportuna e inteligentemente con toda humildad, nuestras limitaciones.
Esta condición conciente, es producto de la actividad básica electroquímica del cerebro, la cual se plasma como un punto luminoso asentado en la intimidad del núcleo TALAMO OPTICO, cuando llega a su expresión de máxima ATENCIÓN. Organela sobre el que obligadamente convergen y se integran, todos los estímulos externos ambientales (excepto los olfatorios), y los de origen interno que de manera conjunta y continuamente transitan aferentemente por las vías: óptica, auditiva, gustativa, de la sensibilidad general y psíquicos, todos los cuales abruptamente terminan en este núcleo. De esta manera, el punto central de la atención, es producto del protagonismo resaltante del estímulo prioritario, el cual es impuesto automático, oportuno y ejecutivamente en la pantalla de la corteza cerebral específica, la cual, consiguientemente se encarga de activar la trama de sinapxis intracortical, que pone la palabra finalmente en la boca del individuo, cuando el estímulo exige una respuesta verbal, por ejemplo.
Este núcleo tiene la potestad autónoma de INTEGRAR el conjunto de estímulos que nos salpican en cada instante.
Tan solo como ejemplo: en este momento estoy concentrado, metido en la intimidad de esta sustancia nuclear talámica, y es caudaloso el rio de información que me inunda, del cual no había caído en cuenta, con información diversa como: el esfuerzo creativo de las frases y oraciones correspondiente a este último párrafo que me ocupa; la pantalla iluminada de la computadora; el signo negro de cada letra, de cada palabra; la luz y la temperatura ambiental; el mosquito en vuelo y el sonido de mi repelente de mosquitos; los colores suaves de las paredes de esta ambiente; el posicionamiento cambiante de mis dedeos sobre el tablero; mi estómago me pide el desayuno; suena el timbre . basta ya!!!! .ya!!. Y, por estar atento, sacándole punta al tema, ignoraba por completo todo este embrollo existencialista que me rodea. Frente a todo este enjambre de estímulos que me siguen salpicando comunalmente, mi ATENCION (interés más pasión) me sigue manteniendo fijo, cabalgando sobre la arista de esta temática en cuestión. La CONCIENCIA es por supuesto una función dinámica de la CORTEZA CEREBRAL, pero su punto de máxima expresión, la ATENCIÓN, es apropiadamente aportado, como producto superespecializado de esta organela subcortical cerebral: EL NUCLEO .. TALAMO OPTICO
Por todo lo antes expuesto, el síndrome de "DEFICET DE ATENCION Y DE APRENDIZAJE E HIPERACTIVIDAD", provocado por la irritación de toxinas bacterianas hiperabundantes de la SINUSITIS, conjuntamente con las toxinas PARASITARIAS, terminan dislocando la funcionalidad TALAMICA .. Sine qua non, si no hay ATENCION (interés y pasión) no habrá en consecuencia APRENDIZAJE; por lo que la denominación de este sufrimiento debe ser "FALTA DE ATENCION , DEFICIT DE APRENDIZAJE E HIPERACTIVIDAD", puesto que no puede haber déficit, donde por lo general, nunca ha habido ATENCION. Esta condición simbiótica bacterio /parasitaria, es propia del proceso SINUSITIS, puesto que su mucopurulencia hiperprotéica persistentemente tragada, sirve de excelente nutriente, que mantiene y refuerza la presencia y multiplicación de la fauna intestinal. La experiencia exitosa al tratar este proceso de etiología mixta, confirma que esta problemática, es solo de origen bioquímico, lejos de consideraciones patológicas mentales o psicológicas.
Autor:
Dr. Virgilio Blanco M.. Médico
ORL. y NEUROANATOMISTA.-