Una característica básica de las emociones; es el respeto, el cual comienza en el cerebro individual. El reconocimiento del otro como entidad; es fundamental para la especie. La importancia del respeto por los formadores de opinión en nuestro caso; como especie cognitiva, radica en que; descubren posibilidades, y accesos emocionales; que de otra forma no podríamos tener.
"La disponibilidad emocional; nos permite, aceptar las propias carencias, y respetar las diferencias"
Actualizar el conocimiento del cerebro en cuanto a su funcionamiento; puede ser procedente, empero; controlar el poder perverso, y letal que tienen las emociones en estos tiempos; verdaderamente seria revolucionario. No obstante; definir las emociones, con mi modesto conocimiento; seguirá siendo un afán presuntuoso, y nada más; lo que si no es presuntuoso, es, asegura que; la especie se hará perversa, y brutal por la competencia, además; la necesidad, y el hacinamiento; la harán letal en todo el orbe.
"No existe mayor tormento que el hallado; en las propias emociones"
"El cerebro humano puede adaptarse a una brújula moral, empero; no puede adaptarse a una brújula emocional; tenemos que guiarlo, toda la vida, empero; en estos tiempos; una tecnología del yo como proyecto especie; puede ayudarnos a conseguirlo"
El tallo cerebral, el cerebelo y el cerebro propiamente dicho (tallo encefálico), el cual se encuentra en la base del cerebro, controla las funciones vitales como el ritmo cardíaco, la digestión, la respiración, la presión arterial. Además, comunica o conecta el cerebro con el resto del cuerpo por medio de la médula espinal. El campo unificado del conocimiento científico que estudian la estructura, la función, el desarrollo de la bioquímica, la farmacología y la patología del sistema nervioso, y de cómo sus diferentes elementos interactúan; dando lugar a las bases de la conducta, lleva por nombre –neurociencia–
Para estudiar el cerebro se precisa de un área multidisciplinar, y aun así; no se puede dar acabada cuenta del estudio de cerebro, aún hoy; ninguna ciencia puede decir, desentrañe el cerebro. Tenemos algunas formas de entender las funciones del cerebro; por ejemplo, la neurociencia cognitiva proporciona una manera de entender el cerebro, y la conciencia; basándose en la neurobiología, la psicobiologia, y los procesos cognitivos. Un hecho que con seguridad nos permitirá entender con más facilidad el cerebro; no son tanto sus bases biológicas sino los procesos ambientales al que se ve expuesto; porque son estos los que obligan al cerebro a incursionar en procesos nuevos de conciencia, involucrando con ello nuevas conductas, y nuevas adaptaciones.
La cultura dogmática le da forma a la conciencia psicosocial; los estados emocionales alterados la hacen perversa; no obstante, son los estados alterados; los que propician la evolución del cerebro. Nada altera más a la conciencia que la competencia; por la súper-vivencia.
El hecho de ser individuales nos dota de la capacidad de elección; empero, somos animales sociales que precisamos de espacio propio, reconocimiento, y de igual forma; precisamos de modelos para orientar las conductas. Vale mencionar que; a medida que aumentamos en número, más desorientados nos sentiremos; porque las necesidades, seguirán siendo igualmente individuales dando por hecho que la conducta, igual que la conciencia; son psicosocialmente disfrutadas, placenteras, y en muchas ocasiones son destructivas por las carencias, los deseos, los apetitos, la perversidad, y las competencias que suelen ser, o no; desleales por cuenta propia comúnmente.
A falta de certezas; buenas resultan las especulaciones.
Las emociones; son reacciones psicofisiológicas que representan modos de adaptación a ciertos estímulos que se detonan una vez que se percibe un objeto, una persona, un lugar, un acontecimiento; que puede o no ser importante, la idea es que se impacta el cerebro por la razón que fuere, y esto da paso a que se originen respuestas orgánicas. Psicológicamente alteran el estado de atención provocando una respuesta memorativa; en primera instancia, luego dan paso a los sentimientos que son un poco más duraderos en el tiempo; incitando en algunos casos la verbalización de la emoción. Las emociones organizan rápidamente las respuestas para tener un comportamiento que podemos llamar optimo, o si se quiere; propio de cerebros altamente funcionales, vienen pautadas por los neurotransmisores; dando origen a los sentimientos, y al lenguaje.
Las emociones también son pautadas por procesos culturales; de ahí la variación de conductas, y conciencia frente al entorno, el moldeamiento cultural determina la conciencia. Las respuestas de los individuos frente a las exigencias; hacen parte de sus necesidades individuales, las sobre exigencias adaptativas, y los faltantes de orden afectivo; hacen al cerebro reactivo.
Los actos violentos son faltantes afectivos de pertenencia, y reconocimiento; enraizados en el cerebro del niño; como improntas, acuerdan las respuestas e indican hacia dónde dirigirse, y cómo enfrentar los requerimientos de un entorno que puede ser percibido como catastrófico, y/o amenazante; mediado por las emociones de que se dispone internamente, o por imaginarios perversos inducidos; son las únicas formas de adaptación, y respuesta a un entorno que puede, o no; ser percibido como hostil, además; los estados emocionales violentos pueden ser pasajeros o permanentes; esto depende de los recursos cognitivos, y de la cultura dogmática de que se disponga.
Todos los seres humanos; somos inequívocamente emocionales, y las primeras expresiones que las manifiestan son faciales, percibimos el entorno de acuerdo a la historia emocional-cultural, y a los refuerzos que nos soporta de manera permanente; la conducta pueden ser alterna, o continua en cada caso.
Los estados cognoscitivos, y emocionales, como son: (la tristeza, la felicidad, el miedo, el odio, la envidia, la ira, la sorpresa, la repugnancia, el miedo al disfrute, el miedo a estar bien, el resentimiento, la venganza, la perversidad, etc.,) a muchas personas les lastima hondamente; hacen parte de su sentir cotidiano, y obedeciendo a ellos determinan su visión del mundo, además; todo lo que produzca alguna forma de paz interior es tazada desde esta perspectiva; conformándose las más de la veces parte de una cultura dogmática fácil de entender, empero; difícil de evitar, la bondad ideológica radica en que estas emociones se pueden programar; con un nuevo orden que involucre a toda la especie, es decir; –si todos lo hacemos; está bien– Lo que puede devastar el estado emocional de forma definitiva; es el sometimiento, la carencia, y las multitudes que limitan las oportunidades de especie, una especie sin espacio, y disponiendo de emociones perversas; se hace brutalmente letal.
Los seres humanos estamos dotados de emociones evolutivamente; empero, son las culturas las que las modelan, o las hacen arquetipos. La biología nos dota, la presión socio-cultural nos hace funcionales, los estudios psicológicos nos interpretan, y es a eso a lo que llámanos; estudiarnos a nosotros mismos, empero; en mi modesta forma de ver la realidad que nos asiste hoy día; estudiarnos a nosotros mismos sin tener en cuenta el hábitat que nos circunda; no se constituye en asombro; ni avance alguno.
Si bien universalmente disponemos de emociones; estas son desordenadas, y no son genuinas; tienen sesgos culturales, y dogmáticos; la relación con el hábitat no puede serlo, si nos relacionamos emocionalmente con el entorno alejados de dogmas culturales; encontraremos otros significados, y otros campos de estudio que se constituirán revolucionarios radicalmente; es la forma en que seremos verdaderamente inteligentes emocionalmente. La experiencia emocional humana; no puede estar alejada de la experiencia ambiental. Tenemos un corto período de tiempo para hacer correcciones, y educar a la especie; de lo contrario, es posible que desaparezcamos, y no sin razón aparente, o identificable.
"El cerebro evoluciono para tener, los lujos de ayer; son las necesidades de hoy, a mayor número, más necesidades; menos lujos. El consumo brutal; es producto del mal ejemplo, y del abandono de los formadores de opinión"
Las emociones siempre han cautivado a pensadores, y científicos, empero aun; hoy día, no contamos con respuestas concluyentes que nos permitan explicarlas; existen aproximaciones novedosas; fundamentadas en nuevas ciencias, empero; nada concluyentes. Para descifrar las emociones; debemos primero, descifrar a la humanidad, y descifrar las cargas emocionales letales que la han acompañado, teniendo en cuenta que; aún no hemos podido descifrar el tema de la violencia; solo podemos decir que es un componente evolutivo que se detona cuando nos vemos enfrentados a situaciones de gran exigencia, empero; esta tesis, es difícil de concretar debido en parte a que; la falta de tenencia, y el número creciente de individuos; son elementos altamente exigentes para la emocionalidad humana en estos tiempos de globalización, y consumo violento, y feroz, además; esta "violencia" la vemos en las demás familias evolutivas debido al número, y los recursos exiguos, la violencia en ese estado; es un principio creativo del cerebro.
La violencia es un adefesio emocional; ejercido en casa primeramente debido en parte a que, su fundamento está; en el número, en los suministros que afectan notablemente la economía familiar; que para una inmensa mayoría de miembros de la especie es endeble, y detonante. La violencia se gesta en el nido, en la cueva, en casa, en fin
La violencia; es un universo congénito, hallada en el cerebro de las especies, empero; en los mamíferos como en el hombre; no obstante; la violencia se puede hacer perversamente letal, empero; se puede prevenir con un alfabetismo emocional. La incapacidad para controlar las emociones produce violencia.
"La violencia como principio creativo del cerebro; subyace en los genes, la violencia letal; es programada, y subyace en las emociones; formadas en el entorno, reforzadas por el fundamento epistémico, dogmático, y cultural"
Si reducimos nuestra evolución únicamente a la familia mamífera; descubrimos que; en todas, existe (el colapso del hábitat, la guerra, el infanticidio, el canibalismo, la segregación por el número, las disputas territoriales, las jerarquías, el poder, y la sumisión) luego entonces; la violencia, es una emoción detonada por el ansia de respeto implícito en el poder congénito del cerebro, es decir; está en las emociones de las especies como componente creativo de supervivencia, similitud social, y jerarquía, empero; si se me permite decirlo; en todas las especies existe el respeto por la jerarquía, y la subordinación igualmente se constituye en componente genético; del cual no está desprovista la especie humana, empero; la individualidad, la necesidad de notoriedad, y la competencia; hacen que el ser humano, pierda el respeto por sus congéneres, y aún por sí mismo, y como el cerebro necesita de dogma; le transfiere el respeto, y el poder, a Dios, constituyéndose en la falacia emocional necesaria; para el desarrollo de las sociedades humanas, y su posterior deterioro.
Las emociones son altamente violentas, y feroces cuando tienen el aval de un dogma, de ahí podemos extractar que, la normatividad del cerebro; se puede alterar, y modificar con una tecnología transpersonal; diseñada en laboratorio, el cerebro experimenta con las emociones, y muta de acuerdo a ellas, empero; es solo una de sus infinitas capacidades; en ese orden no es cuantificable la capacidad cerebral. Controlar las mutaciones logradas por las emociones, y re-orientar el cerebro; será verdaderamente el ejercicio neuro-científico del siglo (XXI).
Nutrir el dogma con nuevo conocimiento, y nuevos pedimentos; no es nada del otro mundo; basta el interés, empero; lo que sí es de este mundo; son las trabas que le ponemos a las iniciativas de control dogmático, y poblacional. Un dogma tecnificado arrodilla a la especie, que no se pierda el temor, el respeto; que se racionalice en todo el orbe. El cerebro esta para ser activado, además; hay cúmulos de genes en espera de ser activados, esa es la verdadera tarea neuro-científica; de estos tiempos. Si logramos orientar las emociones, lo demás vendrá por añadidura; somos animales emocionalmente evolucionados.
Las emociones parecen más importantes que el gen altruista, solo es qué; lo permitimos, con una nueva normatividad; el gen se proyectara, y nada más. Para lograr que las emociones sigan un nuevo derrotero; solo necesitamos divulgación.
"A todo aquel a quien Dios, no le da hijos; le da fortuna, y los placeres de este mundo no le son negados. El éxito va por cuenta propia; ni siquiera deudas acumula, y cuanto menos para la otra vida, las emociones violentas no le atormentan"
"La horrorosa especie sapiens, sapiens; se hace emocionalmente violenta, la violencia letal no existe en los genes; existe en las emociones, las demás lacras que la adornan; también residen allí. El cerebro es cuantitativo; las emociones cualitativas; eso hace del hombre; una especie odiosa, y agresiva; psicosocialmente programada para violentar"
No obstante, son las emociones las que nos permitirán sobrevivir con algún decoro, es decir; lo importante no es la presencia, o ausencia de individuos si no las posibilidades de sobrevivencia, y de existo; de acuerdo a un mandato emocional, y medioambiental; como expresión de vida o muerte, la variable es cuantitativa, y la expresión será cualitativamente violenta; será letal para asegurar emocionalmente la supervivencia; de una especie que se desfaso debido al número, y al dogma, además; cuando conectemos el cerebro al internet; nos haremos gélidos, pondremos las emociones en la dirección que deseemos, y a nuestros congéneres en el lugar que se "merecen"; sea de su gusto, o no.
Las emociones nos permitieron hacernos cognitivos, la cognición la llenamos de conmiseración, y permisividad dogmática; esto contribuyo grandemente a la pobreza, al número, a la desigualdad, y a la violencia psicosocial que vemos en todo el orbe, empero; el cambio evolutivo reciente del cerebro, nos dice que; hemos de estar preparados para acomodarnos a las nuevas circunstancias. La globalización actual, y otros factores; iluminaron el cerebro, lo hicieron mutar; de ahí la importancia de un nuevo orden mundial como responsabilidad de especie, la evolución del cerebro siempre está ligada a los cambios, y a los nuevos retos que supone un nuevo entorno emocional.
Esto es un indicativo de que las emociones tienen un componente evolutivo altamente significativo en nuestra especie, posiblemente porque las heredamos de una especie ancestral, empero; las emociones siempre han sido variables; para la muestra tenemos nuestro devenir histórico. Hoy, un cambio en el orden mundial; será aceptable emocionalmente si somos menos, y tenemos más, en definitiva; las emociones nos permiten acceder a opciones, y selecciones.
Son precisamente las emociones; las que nos permiten aceptar, o rechazar guerras, estilos de vida, gustos, y preferencias. El nuevo orden, no podrá pasar por alto la emocionalidad humana; es más, será la emocionalidad quien lo legitimara a nivel global, el cerebro identifica, las emociones; eligen, y lo hacen mutar.
En la medida en que el cerebro se hace complejo; desarrolla emociones letales, la complejidad del cerebro radica en la emocionalidad; en ese orden, las especies se hacen letales para sus propios congéneres. Las oportunidades, los suministros, los accesos, los espacios, la tenencia, el ascenso, y el control numérico; disminuyen la emocionalidad letal en las especies mamíferas.
Las emociones son rasgos; variables, y primordiales en el ser humano, por esta razón; el nuevo orden que desarrollemos puede modificarlas, las interpretaciones en términos culturales no vienen a lugar, la razón es simple; los cambios evolutivo-emocionales que presenta la especie en estos momentos son relativamente recientes, son recientes en nuestra especie, y nada más. Puede que se me acuse de pecar de ingenuo, empero; por lo menos pienso en el devenir de la especie en términos entendibles, y favorecedores pacíficos de los conflictos reproductivo-ambientales que enfrentaremos muy pronto; sin descontar la gran preocupación humanista por, el irrespeto por lo humano, el terrorismo, el hambre, la desocupación, y la orfandad de futuro que padece nuestra especie; en todo el orbe.
"Las emociones siempre estarán por encima de la ciencia, imposible es explicarlas; lo que si puede ser posible es; intervenirlas, pronosticarlas, controlarlas y programarlas en nombre de la supervivencia de la especie"
El acelerado modo de vida que hemos ostentado desde principios de la década (1980), abrió los horizontes emocionales que aceleraron el desarrollo de una nueva cognición; esto detono la capacidad evolutiva del cerebro.
El impacto psicológico que le produjo al cerebro de la especie; el (9-11), facilito definitivamente el cambio evolutivo del cerebro; sin dejar a un lado la tecnología, y el marketing; que convirtieron al hombre en una maquina brutalmente consumidora, y escudriñadora, horriblemente huérfana e indefensa; poseedora de una tecnología que puede hacerla letal; debido a las emociones que no puede controlar, y la programan para estar en búsqueda de algo más.
"El apetito por el sobre-consumo; es una forma de violencia emocional programada; psicosocialmente aceptada, y generalizada"
Si hoy nos enfrentamos a las emociones letales, y a un imaginario colectivo perverso; no es gratuito, la razón es simplemente la corrupción, la permisividad, el descuido, las políticas pro-natalistas, la pobreza, el consumo desmedido de recursos, el descuido del medio-ambiente, el abandono del esfuerzo, el facilismo, el colapso en el sistema de derecho, y otras lacras. Los responsables del fracaso son; la vieja educación, el viejo dogma, y la vieja cognición que tiene implícita la idea del fin de los tiempos, la culpa, y el castigo; como recurso emocional, y romántico para la especie; adefesios terribles que inutilizaron las humanidades. Estos son los tiempos del cambio evolutivo reciente en el cerebro; donde el viejo dogma, nos sigue proveyendo de cuantos adefesios emocionales necesitemos –odiaos los unos a los otros, empero; no olvides pedir perdón-, son estos adefesios dogmáticos quienes sesgan las emociones, y las hacen letales; si no los controlamos, le pondrán fin a la existencia de la especie; será el fin de los tiempos.
¿Qué es; o que pondría ser, el fin de los tiempos?
Existen numerosas teorías; y son respetables todas, además al cerebro; le encantan las epopeyas. Por exigencia de este ensayo; les diré que, los tiempos terminan cuando nada pueda tenerlos en cuenta; no obstante, el concepto de vida; es diferente, el (ADN) planetario; es cósmico. Si desaparecemos como especie; la vida indudablemente continuará de alguna forma; en el planeta, y en el cosmos, la actividad biológica, y la actividad geológica; son indudablemente vida; sembrada en todo el cosmos; por siempre jamás.
Las emociones perversas, y letales; como vemos en estos tiempos; le pondrán fin a la especie, es decir; el fin está en la grafía mágica llamada emocionalidad; hallada en el poderoso cerebro humano, aún sin inaugurar; después del cambio evolutivo que acaeció recientemente.
Hoy no sabemos qué significa llevar una vida con valor, no sabemos cómo justificar la presencia en el mundo con algo que no sea la tenencia generosa, y algo más. Perdimos el norte; si bien el cerebro es moral, la conducta no lo es; lo único que sabemos hoy, es que; la emoción predominante en la especie es el temor. Las emociones son más poderosas que un ataque masivo al sistema inmune de la especie, son más poderosas que un patógeno desconocido. Cuando las emociones perciben que no pertenecen a algo enorme; a algo global, se desvían; haciéndose letalmente violentas para la existencia. La nueva evolución del cerebro de estos tiempos, potencia; un nuevo estado emocional, dando por confusas, y obsoletas las ideologías que nos han formado como especie; si perdemos la identidad de especie; desviamos totalmente las emociones, seremos entes brutales por el número, y las necesidades agobiantes. Los conceptos de imparcialidad, y conocimiento; son absolutamente innegables, son muy poderosos para el cerebro, y para las emociones, debemos incursionar en una nueva educación, rescatando todo lo que aún podemos llamar bueno, y procedente.
Una nueva formación educativa que tenga en cuenta las emociones; es procedente en estos tiempos de multitudes, y barbarie tecnológica, es posible lograr el desempeño armónico con el entorno; a pesar de la diversidad cultural. Una nueva propuesta; fortalecida por el inconsciente colectivo; puede lograr más de lo que logran los estudios de los iniciados. Toda información, y toda formación nueva; despiertan la capacidad volitiva del cerebro sin importar la cultura, la razón es simple; la cultura es un patrimonio emocional de la especie; es susceptible de ser cambiada, modificada, combinada, extensiva; basta el interés, y la conveniencia del nuevo orden emocional.
Es importante la nueva educación; es compatible con las exigencias del entorno actual, y no ha de constituirse en exigencia académica, y emocional de gran inversión solo para elegidos, es para todos los sapiens. Es imprescindiblemente necesario formar en políticas de control poblacional, y emocional. Implica la revisión juiciosa del sistema educativo global, preservando en cada lugar el patrimonio emocional que no amerite cambio, y su metodología, la finalidad será acordar unos mínimos conductuales en la especie; fáciles de implantar, empero; no desconozco que pueden ser difíciles de aceptar, no obstante; hemos de hacerlo, si presumimos de ser la especie que controla la biosfera, con cuanta mayor razón; podemos controlar las emociones; sin que esto se constituya en una presunción; o en un disparate.
El reto ha de ser universal, es un giro idiosincrático en la especie; toda vez que, al involucrar la emocionalidad en el proceso de enseñanza; el cambio se constituirá en el fundamento actitudinal normativo real objetivo, esto puede acercarnos a el objetivo trascendental de preservar la especie, y el hábitat planetario.
Conseguir una transformación emocional; cuya meta sea el altruismo reproductivo, es decir; la reproducción de los más aptos; dejando de lado las capacidades innatas que poseemos a favor de la alteridad; seria procedente en estos tiempos, es la procreación del más apto; la que determinara que tanto ha evolucionado el cerebro humano, el entorno actual; conspira para que sea así.
Las emociones no son malas, ni son buenas; son el principio creativo del cerebro, las emociones hicieron posible a Dios, el alma y todas las historias alucinantes de dioses, demonios, salvaciones, limbos, condenas, perdones, paraísos e infiernos.
Todo lo que hemos creado sobre nuestro devenir histórico trascendental; por desgracia es de carácter negativo, sufriente y cargado de culpa; he ahí los grandes adefesios emocionales que nos adornan, en fin… es por esta razón que en algunas culturas; las emociones tienden más a la tristeza que a la alegría, al auto agresión, a la ira, a la negación del disfrute, es la culpa, es el castigo, es el premio por medio del dolor sufriente, y el temor que produce el desamparo, es el miedo que produce el concepto del yo; inmerso en un dogma que niega la posibilidad del éxito por miedo a la condena.
Si educamos las emociones podremos disfrutar el hecho de estar vivos, el hombre de hoy; necesita re-orientar las emociones, debe tener nueva formación, nueva información, nuevo itinerario.
La ira, y el temor; son emociones poderosas; evolucionaron conjuntamente, las respuestas conductuales obedecen a estas dos emociones, el temor activa los mecanismos de defensa en el cerebro de los mamíferos, en el caso del hombre; la ira activa los mecanismos de agresión, por esta razón sabemos qué; el cerebro, no puede ser imperturbable. No existen los estoicos, esta doctrina filosófica basada en el dominio y control de los hechos, cosas, pasiones; que es igual a decir emociones, y circunstancias, además; alejada de los bienes, resulta hoy día; bastante controvertible sobre todo para las jóvenes generaciones. El cerebro mamífero siempre está presto, y en el hombre evoluciono para tener; el problema radica en no saber cuánto es suficiente, y en estos tiempos de emocionalidad perversa, y letal; si la tenencia es producto del poco esfuerzo; cuanto mejor, he ahí el origen de la corrupción que azota las instituciones globales; como un virus letal; es de esta forma que se degeneran las emociones humanas, y se pervierten dando por excelsa la brutalidad de especie, y el desconocimiento del otro como fundamento social, en fin la corrupción; es una patología emocional que se puede corregir.
Ser apto significará algo distinto para cada cerebro; para algunos una economía saludable hace a los más aptos; re-aptos, no obstante, no se trata de ser el más bello, ni el más fuerte, ni el más listo, ni de estar en mejor forma física, ni ser el más alto, ni el más divino, ni el más espiritual, a veces es mejor ser obsceno and pútrido, y decir no, en fin la idea tiene que ser racionalmente impuesta, los dogmas emocionales nos llenaron de conmiseración, y temor, empero; no de respeto por las condiciones de vida de la especie poseedora de la razón. No podemos condenar a la especia a adaptarse al hambre, la miseria, la desocupación, tenemos que hablarle con la verdad, y cambiar la mentalidad global; porque las emociones nos harán brutales por la necesidad de espacio, de tenencia, por la necesidad de la expresión individual; que reclama un mundo propio con sus circunstancias.
No existen pruebas ni reclamos en la naturaleza que registren la necesidad longeva del hombre, ni su existencia, y mucho menos la necesidad de dejar descendencia, y además numerosa, solo es; un componente emocional ideológico enraizado en la cultura potenciado por el dogma, y no está por demás decir que, hoy; se está haciendo letal en nuestra especie. El reforzador sexual; es altamente poderoso en las especies, empero; en nuestra especie, existe la racionalidad emotiva, la planificación, la vasectomía, la esterilización, la abstinencia, y si se quiere; hay más fuentes que nos permiten superar los instintos reproductivos; sin abandonar el reforzador que resulta emocionalmente insuperable en la especie.
"Se os dijo; creced, y multiplicaos; empero hoy, se os dice; planificad, y preservaos"
¿Vive el hombre solo para dejar descendencia, o existe la posibilidad de causar un impacto razonablemente bueno; aún sin descendencia?
Las emociones nos permiten descubrir qué; el éxito, es el rasgo más poderoso que tiene la especie sapiens, sapiens; esto de alguna forma garantiza una mediana realización con su respectiva felicidad, y un mayor acceso a la selección sexual; aclaro, si fuere eso importante, la emocionalidad perversa del sapiens; anulara toda posibilidad que tenga un posible o real candidato; las emociones hacen daño aún a distancia, empero; lo que definitivamente resultara definitivo, y atractivo para la especie en estos tiempos; es no dejar descendencia, definitivamente el altruismo, y las decisiones; garantizan una mejor economía, e igual un mayor desenvolvimiento psicosocial en estos tiempos, además; las emociones nos permiten descubrir qué; el más apto necesariamente no es el más fuerte, en estos tiempos; el más apto, resulta ser; el que tiene para la compra, y un espacio donde habitar.
No tenemos que ser eruditos, empero; si sensatos para descubrir qué; cuando los recursos son escaso; escasa ha de ser la descendencia, y nada más.
"En las especies sobrevive el más fuerte; en el caso del sapiens; el más apto, y esa condición; viene determinada por el éxito, y las tenencias que habilitan todas las posibilidades habidas, las demás historias; resultan ser románticas heredadas del dogma, y nada más"
La transformación tiene que ser cerebral a nivel global, hemos invertido bastante tiempo en potenciar el desarrollo de la intelectualidad, la memorización, el tecnicismo, la exactitud, y en alguna medida hemos querido crear genios, en fin empero; dejamos de lado las emociones, y estas se han hecho perversas, por el impacto económico, la pobreza, la desocupación, la tecnología, las carencias de todo orden, el viejo dogma, la vieja educación, y el número.
En el orbe históricamente; las sociedades se han hecho poderosa porque han tenido con qué, ha prevalecido la tenencia; la cual garantiza de alguna forma el éxito, y la realización. El conocimiento, la educación, la tecnología, el confort, y la ciencia; no son posibles sin inversión; incluso el acceso a la belleza es costoso.
El poder económico, y el conocimiento; prevalecen sobre la manifestación emocional de la especie; es decir, el intelectual-ismo por en sima del emocional-ismo, y no se necesitan facultades especiales para estar en uno, o en otro lado; basta la oportunidad; esta es la nueva evolución de la idea, solos; somos más pudientes.
El poder del cerebro es el mismo en todos lados, es la carencia, son los desaciertos emocionales, y la falta de formación reproductiva la que no nos permite el ascenso, bastante claro es que; necesitamos un nuevo modelo de pensamiento para concretar un proyecto especie; que nos permita medianamente gozarnos el hecho de estar vivos, y tener acceso a las cosas bonitas.
Las emociones inducen cambios reales en el entorno del hombre, aceleran, y enfocan el proceso de aprendizaje; facilitando el acercamiento al confort, al acceso, y al disfrute dinámico de la existencia.
"Tendrán mayor probabilidad de éxito, y desfrutar el hecho de estar vivos, y además; acceso al confort; todas las personas que decidan no dejar descendencia; esto como modelo altruista para una especie que aduras penas; sobrevive acosada por la pobreza, y el número"
Las emociones nos hacen animales complicados, empero; disponemos del aprendizaje colectivo, y tenemos la posibilidad de entrenarnos emocionalmente, duplicar el conocimiento hoy día, a nivel global; tarda (72) horas, entrar en nuevas disposiciones conductuales (2) años, y si así se hiciere; en (20) años; veremos un gran descenso poblacional en el orbe; por longevidad, por cuestiones relacionadas con la salud, y con las emociones perversas. Si el conocimiento colectivo, los procesos naturales, y el entrenamiento emocional; no nos permiten resolver el problema poblacional; no se quien pueda hacerlo.
La especie está obligada a adaptarse a nuevas circunstancias, a nueva formación, y nueva información, a procesos nuevos de convivencia, a actualizaciones laborales, ocupacionales, políticas y dogmáticas, y lo que resulta más importante; a nuevas estrategias de reproducción, de esta forma; desarrollamos conocimientos que indudablemente beneficiaran a la especie, empero; lo verdaderamente importante, es; estabilizar las emociones que alteran el funcionamiento del cerebro por el bombardeo informático, y la necesidad impuesta de consumo que resulta en muchos casos desleal, cuando no; brutal.
El aprendizaje colectivo de un nuevo modelo reproductivo; beneficiara a la especie en su totalidad, y potenciara las competencias de alta calidad. El dogma, y la vieja educación; nos enseñaron a rezar, y a parir sin responsabilidad, además; a rendirle culto a la pobreza, a la culpa, al castigo, al infierno, etc., ha sido una fuerte convicción ideológica que nos esta llevando al fin de la especie, a la ruina moral, y emocional, al sufrimiento, y a la decadencia sin sentido; de toda la especie. Se nos ofreció un paraíso eterno; a cambio de pasar necesidades sin protestar, y descubrimos que solo son formas de control emocional que hacen sufriente, y dolorosa la existencia humana, y nada más.
Siendo el interés emocional común; podemos con facilidad compartir contenidos, conocimientos, y desarrollar competencias emocionales altamente sensibles con la alteridad; donde las ilusiones, y la felicidad; sea responsabilidades compartidas, reconociendo que las exigencias, las adversidades, el dolor, el hambre, el número, y la miseria; son condiciones emocionales, y psicosociales ignominiosas en la especie, empero; las podemos controlar.
El reconocimiento, y la solidaridad; nos ayudan a superar los momentos más difíciles; disponiendo nuestras emociones para los logros, es así como funcionan; las emociones halladas en el poderoso cerebro del sapiens. No lo olvidemos, todos somos emocionalmente importantes, y vulnerables.
Nuestras necesidades; son reales, son odiosas, son decadentes, son sufrientes, son dolorosas, son inseparables emocionalmente, son responsabilidad nuestra, es decir; somos la inmensa mayoría quienes las soportamos.
Si controlamos la reproducción, y todos participamos; superaremos estos adefesios, sé que las emociones siempre querrán más, empero; en la marcha nos nivelaremos, no pensemos tanto en el fin de los tiempos; pensemos en los tiempos actuales, y hagamos algo; por la especie.
Las mutaciones del cerebro; son reales.
La nueva evolución del cerebro; es real, la evolución del género; también es; real, la catástrofe de la familia humana; es real, en deterioro del medioambiente; es real, el aterrador aumento de la población sin posibilidades; es real, el agotamiento del agua; es real, la desertización y contaminación de los océanos; es real, la evolución de las emociones; es real, y serán letales; si no las controlamos, etc., empero; lo que sigue intacto es el dogma, y la vieja educación; que sin observación alguna; siguen nutriendo, y sustentando la emocionalidad.
Si orientamos las emociones; controlamos las pasiones, las emociones están mutando progresivamente de forma perversa, y letal; debido al número creciente de competidores; sin ninguna opción.
La emocionalidad perversa, y letal; es real en nuestra especie, y nada más.
Que se reproduzca el más apto, y nadie más.
"Que se reproduzcan las emociones psicosociales; del más alto nivel, y los miembros de la especie; más aptos, y nadie más, la reproducción sin control; es el mayor denuesto hecho a la especie sapiens, sapiens, y nada más"
"No será suficiente el dogma, la dadiva; ni la plegaria generosa bastara; pues ciertamente son inicuas para una especie que se niega a planificar su futuro, quien no cree en estos preceptos; no goza de buena salud mental, ni emocional, además; accederá por cuenta propia, a la ruina, la segregación, la hambruna, y a la selección feroz del más apto; en la cual, hemos de incursionar en estos tiempos de acusada demografía, y nada más"
"Ciertamente os he dotado de emociones, y carnes inmundas para la recreación; no para la reproducción, insensato, y pútrido todo aquel que se reproduce sin tener forma de sobrevivir más allá de la conmiseración de sus congéneres; así, convirtiendo las emociones en verdaderas pasiones; alejadas del respeto por los hermanos de especie. Insensato resulta todo aquel que condena la inocencia a la carencia, y le da por herencia el viento. No acudáis a mi cuando comience la selección del más apto; ni toda la plegaria existente, y zalamera; os bastara"
"Oda a la creación; que puso hombres, y mujeres, y hoy; ni somos hombres, ni somos mujeres, somos una plaga que dispone de emociones; que aún mediadas por la distancia; resultan ser letales para nuestro congéneres, y nada más"
Podemos ser mejores organismos; tenemos a nuestro favor, y a disposición; las emociones que nos hacen respetuosos e igualmente letales.
Las emociones son más complejas de lo que podemos explicar e imaginar, la falta de reconocimiento social, y la supervivencia emocional; nos hacen irrespetuosos, e igualmente energúmenos con los demás, no obstante; definir las emociones es como tratar de definir que es la materia oscura.
El respeto es una consideración, y una valoración fundamental para desarrollar emociones equilibradas. Al reconocer por sobre todo el valor especial, e individual que tenemos todas las personas desde niños; potenciamos la autonomía, y la reciprocidad de especie; que da lugar al reconocimiento de, (todas las personas, los objetos, los animales, las costumbres, las culturas, los dogmas, las diferencias, las cuestiones legales, la biosfera, las necesidades de especie, etc.) El entrenamiento positivo emocional; es fundamental para el cerebro, y su desenvolvimiento social.
El respeto es una de las emociones más importantes que posee el cerebro, además; es el fundamento para la reproducción, e interacción social; en estos tiempos de acusada demografía.
Seguir reproduciéndonos sin ningún control; es irrespetarnos como especie.
El respeto es un fundamento importante para la emocionalidad.
Las demás familias que evolucionaron conjuntamente con nosotros; también, tiene una cultura interna, y una emocionalidad que no pueden expresar, el mundo también les corresponde, tenemos todos la obligación de respetarlas y preservarla.
Sinceramente
HERM
BIBLIOGRAFIA
El poder adaptativo by Hugo Edgar Ruiz Monroy
En nueva educación by Hugo Edgar Ruiz Monroy
Psicobioetica, la ética de la especie by Hugo Edgar Ruiz Monroy
Humanismo y terrorismo by Hugo Edgar Ruiz Monroy
Alzados en almas by Hugo Edgar Ruiz Monroy
En nuevo orden moral by Hugo Edgar Ruiz Monroy
Bioética una experiencia fascinante by Hugo Edgar Ruiz Monroy
HUGO EDGAR RUIZ MONROY
Terapeuta psicosocial. Psicoterapeuta. Eticista and Bioeticista.
Breviarios para un mejor entendimiento.
Titulo original (Las emociones)
Agosto (2016)
Autor:
Hugo Edgar Ruiz Monroy