- Resumen
- El compromiso es iniciar la carrera contra el tiempo, en algún momento, en algún lugar
- Muchas leyes proteccionistas y poca luz sobre el túnel sin salida
- El aprendizaje de valores desde la psicología
- La responsabilidad de autoridades y líderes políticos
Resumen
En esta segunda parte, presentamos un bosquejo general de lo que debiéramos hacer en cuanto al rol del psicólogo comprometido en asuntos medioambientales, especialmente en lo referente a las acciones de prevención en torno al exceso de comportamientos humanos que llegan a contaminar el agua, el aire y el suelo.
El ideal fincado en la promoción de comportamientos pro ecológicos ( ambientales), es una responsabilidad social y técnica profesional de la ciencias del comportamiento y muy en particular de la psicología, por tener en sus manos, los instrumentos de cómo mejorar el desarrollo de los valores de amor al ambiente no humano y ser expertos en la aplicación de leyes y principios del desarrollo y aprendizaje en niños, adolescentes y adultos con una perspectiva de ir reduciendo los diversos modos de vida altamente contaminantes que tenemos en la actualidad a nivel planetario.
Se auna a esta segunda parte, Gloria Inés Vargas Sota, quien por su interés y dedicación a nuestras actividades preactivas ha deseado intervenir con sus aportes y comentarios muy atinados a esta aventura contra el tiempo.
Término ejes: Comportamiento, ecología, medio ambiente,
Psicología social comunitaria en
Latinoamérica
El compromiso es iniciar la carrera contra el tiempo, en algún momento, en algún lugar
1.1. Un primer acercamiento :
Estamos concientes que la primera gran tarea y de mucha trascendencia es el de lograr sensibilizar y entrenar a pequeños grupos ( líderes comunales) y a grandes grupos poblacionales organizados en sectores, barrios, fabelas, centros poblados, comunidades urbanas, urbana marginales, rurales, etnias nativas y mestizas, en diversos aspectos relacionados con el cuidado y protección del ambiente no humano, específicamente del aire, el agua y el suelo fértil para el cultivo diverso de productos naturales y mejorados para la alimentación humana.
Qué estrategias presentar para de un modo u otro, lograr extinguir comportamientos violentos y depredadores de estos elementos vitales para la vida de organismos vivos en el planeta. O cómo reducir o disminuir las actitudes de rechazo y aversión generalizada frente a los recursos naturales que de un modo conciente o no, se los va depredando o destruyendo allí donde se hace presente la vida de seres humanos. En muchas culturas, incluso se ha llegado a institucionalizar nombres que refuerzan esta actitud violenta cuando se dice por ejemplo que un contingente de personas ha movilizado sus enseres y demás modus vivendi a una zona natural, libre o de propiedad privada o del estado para convertirse en colonos o conquistadores que en algunas culturas hasta se los gratifica con financiamientos para la explotación, extracción y depredación de los recursos naturales en la zona donde se asientan a vivir.
O en otros casos, como en los alrededores de grandes ciudades urbanas, se les denomina "asentamientos humanos" (en Perú),(fabelas en Brazil) de manera formal legalizando una serie de mecanismos que más tarde serán definidos como verdaderos contaminadores o depredadores de las zonas donde se asentaron. Contradictoriamente no se trabaja en absoluto el hecho de estar reforzando comportamientos contranatura y que conduce a la contaminación del habitat donde llegan a ocupar.
En muchos estudios y tratados sobre el tema, se justifica que este tipo de invasiones de terrestres a lugares terrestres ( En muchos países, se les denomina así a grupos humanos cual bandada (grupos) (o vándalos) o como aves de rapiña se organizan y de modo violento o en aparente tranquilidad, invanden y se hacen "dueños" de un espacio territorial para vivir, por una necesidad imperiosa de tener su propio territorio y algunos otros los justifican como un factor de aumento o hacinamiento poblacional en lugares más saludables para la vida humana, sin tener en cuenta el quiebre del habitat para otros seres vivos. Tenemos culturas con un exceso poblacional en territorios demasiado reducidos, como China, Japón, pero que de un modo u otro, esas culturas han logrado aprender a vivir y convivir de modo menos contaminante del agua, aire y suelo, como lo son, a diferencia, otros países altamente desarrollados industrialmente pero poco cuidadosos del problema contaminador como USA que ocupa el primer lugar en la contaminación del aire. En síntesis el aspecto poblacional tiene que ser analizado bajo otra característica como es por ejemplo el valor y grado de aceptación y protección a otros seres vivos que colaboran para el equilibrio ecosistémico y la responsabilidad de cuidar los elementos principales y esenciales para la vida misma como es el agua, el aire y el suelo de calidad. Aspectos que muy bien son trabajados por la psicología ambiental en cuanto a cómo promover comportamientos psicológicos proactivos en esta defensa y cambio de actitud frente a la naturaleza no humana del planeta.
Entre 1996 y 1998, aplicamos en la zona de San Martín (Perú), el diseño de un programa de psicología social comunitaria bajo la sigla de ENCOPARA:
EN LA COMUNIDAD
CON LA COMUNIDAD
PARA LA COMUNIDAD, siglas que de alguna manera orientó nuestro interés por conocer algunas de las comunidades de esa zona como las de EL DORADO. Pero de un modo vivencial, el aspecto de promoción de nuevos comportamientos proambientales, estaba dirigido a trasladar los diversos conocimientos de estas poblaciones nativas a un medio más urbano y de corte occidental en los modos de vivir. A partir de 1999, y tomando la experiencia anterior, y los trabajos iniciales del nuevo programa de bachillerato, postulamos un nuevo esquema de trabajo de promoción ambiental bajo el nombre de psicopedagogía ambiental, fundamentado en el criterio de que sólo mejorando la calidad en la educación formal en relación al interés y nivel de protección al ambiente natural no humano, podríamos alcanzar a promover algunos valores proambientales en niños y jóvenes y que estos a su vez fuesen modelos interactuantes de comportamiento proambientales tal como el control de desechos sólidos, el trabajo de reciclaje en la institución educativa. Esto es, que se prevea un programa de modificación comportamental en los valores culturales frente a la percepción y nivel de conocimientos en asuntos medioambientales.
En el 2006, volvimos a la zona de Morales ( San Martín) para trabajar un nuevo programa bajo el nombre de FOPACO ( Fortalecimiento de las Organizaciones de Defensa Civil, que incluí el asunto ambiental y que fuera auspiciado por el INDECI ( Instituto Nacional de Defensa Civil – Lima – Perú. En este contexto, fue el tratar de comprometer de modo responsable a diversas organizaciones sociales de base y formar comités vecinales para realizar acciones de prevención de emergencias y desastres naturales. El resultado fue el de permitir que los mismos pobladores se comprometan a desarrollar diversos programas de protección de la naturaleza no humana.
En este año, 2009, con el auspicio del Colegio de Psicólogos Cusco, (Perú), llevamos a cabo durante 4 meses ( Febrero a Mayo), el primer curso sobre Intervención en Crisis, en Emergencias y Desastres, donde se ha logrado mejorar el aspecto de lo que los psicólogos emergencistas pueden aportar en lo relacionado al asunto de la contaminación ambiental y la protección de los recursos elementales para la vida (agua, aire y suelo). Se espera que estos primeros pasos mejoren y permitan tener cada vez más psicólogos trabajando en estos aspectos.
Muchas leyes proteccionistas y poca luz sobre el túnel sin salida
En el Perú, y en muchas culturas latinoamericanas, conforme a sus políticas de estado, se tienen una serie de dispositivos jurídicos que describen las normas de defensa del ambiente no humano. Existen Ministerios del Ambiente, Consejos Consultivos en temas ambientales, códigos, reglamentos que conforme a sus aplicaciones se hacen esfuerzos para lograr desarrollar una política ambiental tendente a llevar a cabo proyectos, obras y programas de desarrollo, sustentados en estudios de impacto ambiental ( EIA), así como sus consiguientes análisis a fin de tener un mejor control del ambiente especialmente con programas relacionados con : El control de los centros de producción
Depuración de aguas servidas
Depuración de desechos sólidos
Reemplazo de plaguicidas por control
Biológico.
Protección de suelos mediante
Reforestación.
Declaración de zonas protegidas o
Intangibles.
Entre algunas de las normas reglamentadas.
De otro lado, a nivel de la educación formal se tienen también como ejes transversales de los programas educacionales, aspectos referidos al ambiente no humano y su cuidado. De alguna manera se levantan gigantografías, spots radiales y televisivos, así como la gestión financiera para obras de prevención frente a problemas ambientales.
Algunos aspectos generales de estas medidas que muchas organizaciones lo tienen como parte de sus planes de trabajo son :
No arrojar aguas del desague a los ríos, lagunas o lagos
No arrojar los desechos sólidos al suelo, parques, pendientes, barrancos, etc.
No lavar vestidos o vehículos en ríos, quebradas, cuencas, lagunas y lagos.
No arrojar sustancias o industriales a ríos, lagos y lagunas.
No utilizar sustancias tóxicas o explosivos para la pesca
Mantener limpio los servicios higiénicos
No quemar malezas naturales o bosques
Evitar que los vehículos produzcan gases tóxicos
No quemar la basura doméstica.
Entre algunas de las medidas que si bien la buena voluntad de autoridades y líderes comunales, está presente para llevar adelante estas orientaciones a grandes sectores poblacionales, en la práctica, tanto en lo formal como en lo informal, no se logra concretizar y que el ciudadano asuma su parte de responsabilidad para actuar y comportarse acorde a estas normas. Y es que tampoco se llevan a cabo controles o evaluaciones sobre los impactos luego de una sensibilización sea formal o informal del valor trascendental de estas medidas preventivas.
Pero es cierto también que de las diversas leyes proteccionistas también existen, de modo contradictorio, otras normas jurídicas que de modo directo o indirecto, refuerzan las acciones contamindoras y depredadoras de diversos recursos naturales que en más de las veces no compensan los terribles daños ecológicos que generan, tal como ocurre con las empresas mineras, las empresas de tala de maderas en Africa y América principalmente. Se observa el caso curioso que en estos últimos años, pese a que en la Cumbre de Río de Janeiro ( Agenda 21 de la ONU)(1992), se estableciera una serie de controles y medidas frente a la contaminación planetaria y la deforestación, en los últimos diez años, se ha incrementado la tala de árboles y muchas zonas de bosque natural han desaparecido y si hoy existe madera es por un sistema de tratamiento humano y con plantas que en un promedio alcanzan una vida de 20 años para luego ser talado, a diferencia de los bosques naturales de hace 100 años que tenían un promedio de vida de 150 a 300 años. Pocos lugares tienen este privilegio de guardar bosques con árboles milenarios.
De acuerdo a estudios del empleo del agua, mientras se pregona a nivel mundial, que hay que cuidar el agua dulce de nuestras montañas ( nevados), de otro se continúan con la cada vez mayor carga de empleo de combustible fósil que al no tener un buen uso, se ha convertido en el mayor contaminador del aire ( monóxido de carbono principalmente) y de otro las empresas mineras del planeta son los que mayor consumo de agua realizan y sobretodo son los que mayor contaminación de aguas y suelos producen. Pero quizá el mayor problema está en la contradicción de que no es la solución final el que se difunda la norma : " economizar agua " a nivel planetario, porque el gran problema está no en el consumo de agua dulce, si no más bien en la contaminación ambiental que es la que está produciendo la desglaciación y el efecto invernadero con el impacto del calentamiento global que hoy por hoy, lo estamos observando con diversos cambios climáticos y sus efectos desfavorables para la vida misma y frente a ello no se hace mucho para disminuirla. Ese es el reto de las ciencias del comportamiento a fin de alcanzar a desarrollar programas proecológicos. Una verdadera ecología cultural que pueda mejorar la interacción de los seres humanos con los ecosistemas naturales no humanos. Ecología cultural,que primero cambie patrones de comportamiento no acordes a valores preactivos para defender los habitats. Una estrategia cultural que extinguiendo comportamientos violentos en contra de los elementos naturales del ambiente y que a la inversa se pueda llegar a que las gentes adquieran comportamiento valorativos de los tres elementos vitales para la vida en el planeta (agua, aire y suelo).
El aprendizaje de valores desde la psicología
El mejor aporte q puede Hacer la psicología ambiental es precisamente el promover diseños educativos considerando los cuatro contenidos (cognitivo, procedimental, actitudinal y condicional)para promover competencias pro ambientales que simultáneamente sean aperacionalizados como verdaderos valores preventivos por ejemplo: a nivel educacional frente al problema de los desechos sólidos debemos destacar para que el valor de las campañas de limpieza sean procedidas con campañas de no ensuciar de tal manera que el ciudadano de cualquier centro poblado valorice el comportamiento de mantener limpio el entorno donde interactúa con el ambiente sea este natural o humano y eso es un problema educativo cultural.
De otro lado en los programas educacionales junto a las normas jurídicas que se difunden en las leyes códigos y reglamentos sobre el ambiente y los recursos naturales debe también promoverse el deber y la responsabilidad personal y social para que las personas cuiden y protejan de manera permanente y sostenible los ecosistemas especialmente los ambientes naturales no humanos y ese es un trabajo también de socialización y aprendizaje que la psicología puede ayudar técnica y profesionalmente.
Esa labor esta basada en diversos principios y leyes del desarrollo psicológico del aprendizaje en lo que algunos autores lo denominaran ingeniería comportamental. Así por ejemplo las diversas técnicas de modificación del comportamiento no es mas que el diseño y arreglo del ecosistema para producir cambios comportamentales de modo personal y productivo.
En psicología ambiental también podemos aportar con estrategias para mejorar la condición de vida de los seres humanos y de los otros seres vivos del habitad promoviendo una mejor percepción de la bondades que ofrece el medio natural para beneficio y la salud física y mental de los seres vivos. Solo así estaríamos otorgando una verdadera retroalimentación que como un valor agregado se pudiera destacar en cualquiera de los elementos del medio natural no humano (agua, aire, suelo).
Desde Lugo que resulta importante en psicología ambiental determinar el grado o nivel de este valor agregado: por ejemplo el preguntar a las personas de cuanta belleza observa y percibe en alguno de estos tres elementos o si en algún momento se ha detenido a deleitar o gozar percibiendo el valor y la importancia de uno d estos elementos.
La responsabilidad de autoridades y líderes políticos
En muchas culturas se coincide con diversos términos referidos al ambiente natural no humano y en consecuencia para establecer un nivel de trabajo desde la perspectiva psicológica en primer lugar describiremos a continuación un listado de alguno de estos términos comunes:
Auditor ambiental
Autoridad ambiental competente
Código del medio ambiente
Ley del medio ambiente
Ley sobre los recursos naturales
Ley sobre los recursos hídricos
Consultor ambiental
Contaminación ambiental
Contaminante ambiental
Control de la contaminación
Declararon de impacto ambiental
Diagnostico ambiental preliminar
Estudio de impacto ambiental
Guía de manejo ambiental
Informe ambiental
Instrumentos ambiéntales
Polución del aire
Polución por ruidos
Limite máximo permisible
Patrones ambientales
Plan de cierre ambiental
Programa de adecuación y manejo ambiental
Programa de seguridad y control ambiental
Protocolos de evaluación y monitoreo ambiental
Reciclaje y reutilización
Residuos peligrosos, etc.
De otro lado la psicología ambiental puede apoyar a esta gran tarea de reducir los impactos de la contaminación ambiental considerando los tres momentos en el que puede intervenir en la gestión de riesgos frente a emergencias y desastres debido a factores naturales y antrópicos. En el primer momento su tarea esta directamente relacionado con el diseño de las mejores estrategias para la evaluación de riesgos de tipo ambiental, análisis de las vulnerabilidades psicosociales y el establecimiento de medidas de prevención frente a posibles impactos en la salud física y mental en el momento de la emergencia y o desastre ambiental la psicología ofrece un conjunto de técnicas de auxilio , y soporte emocional e intervención terapéutica para la rehabilitación correspondiente y en el tercer momento la psicología ambiental elabora un conjunto de sugerencias en base a las lecciones aprendidas para sensibilizar y mejorar la capacidad de respuesta frente a futuros impactos ambientales negativos.
Considerando el aspecto de la evaluación de riesgos Ambientales la psicología interviene de acuerdo a los Impactos posibles siguientes:
Daño a la salud física o mental
Daño a la seguridad personal y colectiva
Efectos adversos sobre la cantidad o calidad de los recursos naturales en uso
Efectos adversos sobre los ecosistemas y su alteración
Alteración del paisaje o valor turístico
Alteración del valor antropológico, arqueológico, histórico, geodinámico, del patrimonio natural y cultural.
Efectos adversos en servicios básicos, etc.
Del mismo modo en la evaluación de riesgos es importante considerar el análisis de las vulnerabilidades psicosociales y esto se realiza estudiando las condiciones de vida de la población que directa o indirectamente impactan negativamente en el ambiente en general, alterándola o contaminándola. En este sentido es importante estudiar por ejemplo las características psicológicas de las personas especialmente sus valores, normas de comportamiento frente al habitad y sus actitudes en relación a su interacción con los elementos vitales para la vida( agua, aire y suelo), económicas (niveles de pobreza y extrema pobreza), políticas , educativas y culturales que de un modo u otro condicionan el comportamiento preventivo y las capacidades de respuesta para atender los diversos modos d interacción con los ecosistemas. Por lo general la vulnerabilidad psicosocial se establece de acuerdo al los niveles de:
Pobreza en general
Incremento demográfico
Urbanización acelerada y sin planificación
Industrias y irresponsables y con impactos negativos sobre el ambiente, etc.
De la misma manera en el estudio de las vulnerabilidades psicosociales es conveniente destacar que los mas vulnerables en orden d prioridad son los niños, las mujeres, ancianos y discapacitados por lo que los diversos diseños o planes de desarrollo tiene que especificar esta prioridad.
Así mismo para reducir la vulnerabilidad psicosocial, la psicología ambiental, sugiere combatir poblacionalmente:
La indiferencia
La ignorancia
La desidia
Carencia de recursos y pobreza.
A nivel ambiental las vulnerabilidades a considerar están relacionadas con la pobreza que es considerada como el mayor desastre de la humanidad y entre otras vulnerabilidades importantes están: la contaminación, deforestación, desertificación, incendios, erosión de suelos, infertilidad de suelos, entre otros.
La psicología ambiental también ofrece su asesora a las autoridades y lideres políticos para tratar desde el punto de vista psicosocial los diversos problemas de las poblaciones pobres, los valores y las costumbres culturales que contaminan el ambiente, el problema de la ignorancia en medidas preventivas, asunto de los asentamientos humanos en zonas de alto riesgo, la construcción de viviendas precarias o improvisadas, la movilidad social casi permanente, la desorganización y falta de liderazgo socio político, la no planificación urbana y los pocos recursos disponibles en zonas de sobrepoblacion.
Finalmente un trabajo importante de la psicología ambiental esta referida a los hábitos y estilos de vida de grandes sectores poblacionales que de un modo directo o indirecto contribuyen a la deforestación y la contaminación ambiental. Por ejemplo para citar un solo habito negativo que es el la adicción al tabaco que conforme a estudios científicos que el hecho de reducir drásticamente esta adicción tendríamos una recuperación de aire puro hasta del 20% de aire puro y consecuentemente de la reducción del hueco d ozono que contribuye al calentamiento global con sus efectos climáticos adversos.
Autor:
Psic Jorge Elías Cuarto Silva Sifuentes
DIRECTOR DEL CENTRO DE TRATAMIENTO ECOSISTEMICO CODE1- CUSCO – PERU
Bach en Psicología: Gloria Inés Vargas Sota
(27 JULIO 2009)
Documento en exclusividad para Monografías.com.