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Resumen del libro ¡Bien Hecho!

Enviado por Nelson Ramos


  1. Introducción
  2. Visita al Zoológico Marino de Sea World
  3. Conferencia en Atlanta
  4. Encuentro personal con Anne Marie Butler
  5. La respuesta ¡BIEN HECHO! puesta en marcha en el trabajo
  6. Reunión familiar e implantación del método ¡BIEN HECHO! en la familia
  7. El método ¡BIEN HECHO! aplicado a superiores y compañeros
  8. Conclusión
  9. Recomendación
  10. Bibliografía

Introducción

Este resumen del libro: ¡Bien Hecho! Lo realizamos como trabajo final de la material "Estrategia Empresarial".

En el libro "Bien Hecho", Ken Blanchard, coautor del libro, desarrolla como aparece en su contraportada, "una analogía entre la esencia del comportamiento humano y el de las ballenas asesinas del Sea World".

En este pequeño libro, Ken Blanchard, usando un estilo ya familiar a sus lectores, nos presenta un poderoso método para lograr un positivo y eficaz compromiso con los demás en las relaciones laborales y personales; nos enseñas como obtener mejores resultados mediante el reconocimiento de las cosas que hacen bien los otros, en vez de poner énfasis en "pescar a los demás haciendo algo malo y criticarlos por ello.

Esta parábola, empieza cuando Wes Kingsley, un gerente de venta poco amable, desilusionado con las relaciones que ha desarrollado tanto en su trabajo como en su cas, trata de descubrir que es lo que hacen los entrenadores de las orcas en el Sea World para lograr tan extraordinario desempeño de parte de esos aparentemente indómitos animales.

¿Quién pensaría que muchos de nuestros problemas puedan tener soluciones aprendiendo de seres que consideramos muchas veces "inferiores" comparados con nosotros; que muchos de nuestros problemas son provocados por nosotros y por tanto tenemos la capacidad de solucionarlos? En este libro, el autor nos demuestra que esto es así, y nos da soluciones sencillas al problema.

Finalmente, y con el ánimo de ser más práctico, ha sido nuestra intención tomar cada capítulo y hacer una breve descripción de los aspectos mas relevantes, en nuestra opinión, dentro de ese capitulo para así poder tomar a sorbos el aprendizaje que nos da el autor acerca de esta forma de hacer las cosas bien.

Objetivos

Objetivo General

Demostrar la importancia de motivar a los demás a través del reconocimiento y la retroalimentación positiva, método usado por los entrenadores de las ballenas asesinas del Sea World para enseñar a esos animales piruetas maravillosas y que funciona muy bien para cambiar el comportamiento humano.

Objetivos Específicos

  • 1. Explicar en que consiste el método ¡BIEN HECHO!

  • 2. Describir como se puede aplicar el método ¡BIEN HECHO! tanto en el trabajo, como en la familia y con las amistades

  • 3. Entender el impacto que una relación positiva puede tener en uno mismo, la familia, los miembros de un equipo de trabajo y la organización

  • 4. Ejemplarizar la puesta en marcha el método ¡BIEN HECHO! en los diferentes escenarios de la vida

Capítulo uno

Visita al Zoológico Marino de Sea World

Todo empieza cuando Wes Kingsley, nuestro personaje principal de esta parábola, viaja a Orlando para acudir a una reunión de negocios. Tenía tiempo libre, así que decide descansar o relajarse visitando lugares agradables, así que va al mundialmente famoso Sea World de Disney World queriendo que ese espectáculo le dé respiro de los problemas que tenía en su empresa e incluso en casa. Más tarde se daría cuenta de que había tomado la mejor decisión.

Kingsley se sintió realmente impresionado con el espectáculo de tres ballenas asesinas que realizan maravillosas e increíbles piruetas. Cuando éste acabó y las tres ballenas asesinas que protagonizaban la función, saludaban al público, ya tenía en su mente una serie de inquietudes acerca de la forma en que se lograba esa respuesta de tan tremendos animales. El se preguntaba: ¿Cómo lo hacen? ¿Cómo pueden entrenar estos animales gigantes a hacer esas piruetas?

Sin perdida de tiempo, bajó hasta la piscina y comenzó a preguntarle al entrenador, incluso ofreciéndole dinero (que no fue aceptado), cómo era que lograban hacer ese trabajo con las ballenas. Dave Yardley, el entrenador, explicaba que no se les puede castigar y luego pretender trabajar con ellas. Primero debían ganarse su confianza. Kingsley argumentaba "me ha costado trabajo hacer que mis subalternos trabajen bien. Y ni qué decir de lograr que mis hijas ayuden en las labores de la casa y tengan un mejor desempeño escolar".

Yardley enfatizaba que la confianza y la amistad eran la base del espectáculo y que las ballenas no eran tan diferentes de las personas en ese y otros sentidos. Así que lo que procuraban era poner énfasis en lo positivo, no en lo negativo. Prestar mucha atención cuando el animal hace lo que le piden y realiza bien una tarea. En caso contrario, cuando hace algo mal o malo, se pasa por alto lo que hizo mal e inmediatamente se redirecciona su comportamiento hacia otra cosa. Se trata de construir un entorno de confianza. Idea que se puede trasladar a la oficina o al hogar.

Es clave tener en cuenta que lo importante es en lo que uno se concentra, aquello en lo que más se enfoca, de modo que administrando de una manera más sana e inteligente la energía que se emplea, la forma en que se controla la propia atención (que al principio no es fácil porque se tienen que cambiar actitudes, formas de pensar, de reaccionar, es un autoentrenamiento) y se orienta hacia lo positivo, lograremos grandes cambios. Por supuesto que tampoco podemos esperar que todo marche perfectamente desde el principio. Pero sí se deben buscar motivantes distintos a una recompensa física como sería la comida en los peces o el dinero en los humanos, para así crear el deseo interno de hacer mejor las cosas cada día.

Hasta aquí podemos anotar como claves:

  • Construir confianza.

  • Enfatizar lo positivo.

  • Cuando se cometen errores, recanalizar la energía.

Capítulo dos

Conferencia en Atlanta

El lunes siguiente, luego de regresar de su viaje de negocios a Orlando donde visito el Sea World y el espectáculo de las ballenas asesinas, Wes Kinsgley se dirigió a un hotel del centro de Atlanta, ciudad donde vivía y trabajaba, donde Anne Marie Butler, persona bastante conocida como consultora de temas empresariales y escritora dictaría un seminario, al cual el ya había sido invitado y en el que ella trataría temas de liderazgo y motivación humana.

Uno de los aspectos importante que Anne Marie mostró durante la conferencia fueron los tres puntos fundamentales del desempeño:

1. Activador: Lo que indica a la gente lo que se quiere que hagan, lo que pone en marcha el desempeño, lo que estimula el comportamiento o el desempeño que usted desea, el cual comienza con metas claras.

2. Comportamiento: Observar el desempeño que sigue después de asignar metas

3. Consecuencia: Su respuesta al desempeño, lo que sucede después de obtener un comportamiento esperado o no esperado.

Esto nos lleva a cuatro tipos de consecuencias o respuestas de parte de los gerentes

  • 1. Ausencia de respuesta:

La respuesta más frecuente que recibe la gente por su buen desempeño es una ausencia de respuesta. Nadie nota ni comenta la actuación

2. Respuesta negativa:

Nadie nota ni comenta la actuación sino cuando las cosas salen mal.

3. Redireccionamiento:

  • Describa el error o el problema lo más pronto posible, claramente y sin buscar culpables.

  • Muestre su impacto negativo.

  • Si es del caso, asuma la culpa por no haber explicado con claridad la tarea.

  • Revise la tarea en detalle y cerciórese de que se entendió muy bien.

  • Exprese la fe y la confianza que le merece la persona.

4. Respuesta positiva:

Cuando un buen desempeño recibe una reacción positiva, es lógico que las personas quieran continuar comportándose de esa manera. La intención del Redireccionamiento es poder generar una respuesta positiva, que es de gran valor ya que así como se generan ambientes tensos cuando se recalca solo lo negativo, también se crean ciclos benéficos al poner énfasis en lo positivo.

Otro aspecto importante que se trató en la charla de Butler fue el hecho de que no se debe esperar un comportamiento perfectamente correcto antes de responder positivamente, pues de lo contrario uno podría quedarse aguardando para siempre. "Elogie el progreso. Es un blanco móvil". Se debe mirar con interés cuando se está mejorando, aunque los resultados no sean de un 100%, porque el avance progresivo también es digno y necesario de elogiar, es la cuota de impulso que debemos aportar, además es gratis, no nos cuesta nada y podemos obtener "grandes dividendos".

Anne Marie explico en su charla que, debemos enfrentar los problemas que implica un cambio de forma diferente a lo que acostumbramos, porque ciertamente nos resulta muchas veces más fácil detectar y hacer notar lo malo que hacen los demás en vez de lo bueno. Anne Marie se refirió a esta forma de actuar con el nombre del método ¡Te agarre! Agarrar a la gente cuando hace mal las cosas. Explico que esta es, aunque la forma usual de hacer las cosas, la forma mal de corregir y vigilar el desempeño, ya que solo crea resentimiento y desgano de parte del subalterno.

Explico que es más productivo mantener fluyendo las respuestas positivas, dar palmaditas en la espalda y decir frases como ¡BIEN HECHO! ¡BUEN TRABAJO!, pero la verdadera respuesta ¡BIEN HECHO! Es más que eso, es una respuesta genuina y completa que incluye varios pasos:

  • Elogio a las personas de inmediato

  • Decir específicamente que hicieron bien o casi bien

  • Compartir sus sentimientos positivos sobre lo que hicieron

  • Alentar para que sigan haciendo las cosas bien.

Dijo, la conferencista que, preocuparse por decir algo positivo y sincero con la práctica se convertirá en un sano hábito que no hará la vida perfecta pero sí puede darle una notable mejoría a sus relaciones personales y laborales.

Y finalizo diciendo que con respecto al comportamiento inaceptable o un mal desempeño en el trabajo, lo acertado sería, el redireccionamiento y hacer entender a los demás que no se busca fastidiarlos o juzgarlos a ellos sino a su comportamiento.

Capítulo Tres

Encuentro personal con Anne Marie Butler

Como ya había sido previamente convenido, Wes Kingsley y Anne Marie Butler se encontraron en un lugar aparte en el hotel en que se celebró la conferencia para charlar con respecto a la forma de conseguir como las personas a nuestro alrededor (subalternos, cónyuges, hijos y otros), se motiven a hacer las cosas como nosotros queremos que las hagan. Decía Anne Marie "Cada vez que entro a un almacén o a un restaurant o cualquier negocio y veo vida y pasión y chispa en el lugar, quiero saber por qué. Me pregunto que creó ese fabuloso ambiente en donde las personas se sienten genuinamente emocionadas con el trabajo que realizan.

Anne Marie le explico a Wes, que los principios de entrenamientos que se utilizan con las ballenas de Sea World resultan ser los mismos que se utilizan en entrenar a las persona, estos principios se basan en "NO HACER DAÑO" es decir, crear relaciones positivas y de confianza con ellos y que las respuestas positivas, y en especial la respuesta ¡BIEN HECHO!, son esenciales. Pero el concepto que realmente funciona es el de la respuesta de redireccionamiento. Esa es la que mas le va a interesar a la gente, porque despeja sus dudas sobre como abordar los comportamientos inapropiados o el desempeño inaceptable.

Continuó Anne Marie diciéndole a Wes, lo ideal es que la gente haga lo correcto porque disfruta haciéndolo, "como esas ballenas que vio en el espectáculo de las ballenas asesinas, que tanto se divierten actuando ante todo ese publico". La meta ultima de la respuesta ¡BIEN HECHO! Es ayudarle a la gente a motivarse por si misma. Es decir que las respuestas ¡BIEN HECHO! provengan de su interior

Decía Anne Marie que lo ideal es que la gente comience a "agarrarse a si misma haciendo las cosas bien y que actué de acuerdo con eso. Eso se logra después de haberle nosotros dado muchas respuestas ¡BIEN HECHO! ; de haberle hechos comentarios como: "Apuesto a que se sintió muy bien cuando termino ese proyecto antes de la fecha limite", o: "Debe sentirse orgulloso de lo que hizo con ese informe".

Recuerde, dijo Anne Marie a Wes, la respuesta ¡BIEN HECHO! no es un fin en si mismo. Es algo que conduce a la meta ultima de ayudar a la gente a "agarrarse" a si misma haciendo las cosas bien.

Nunca suponga que motiva a una persona, digo Anne Marie a Wes con respecto a la motivación. No olvide que los individuos se sienten motivados por diferentes factores. La respuesta ¡BIEN HECHO! es un buen comienzo para motivar a una persona, pero al cabo de un tiempo puede parecer hueca. Saber que cosas en particular motivan e impulsan a cada persona le ayudara a potenciar su motivación.

Wes entonces le pregunta a Anne Marie, ¿debo preguntarles a mis subalternos que los motiva?

Si. Dígales: "Se que están haciendo un muy buen trabajo con ese problema de inventario. ¿Cuál seria la mejor manera de reconocer sus esfuerzos, a corto y a largo plazo?" o sea, a diario y a mas largo tiempo. Recuerde no presuma de que sabe lo que el otro piensa o necesita para motivarlo.

También recuerde Wes, dijo Anne Marie, La respuesta ¡BIEN HECHO! funciona cuando uno es sincero y honesto al darla. Uno no debe dar una respuesta ¡BIEN HECHO! mecánicamente. Si utiliza frases mecánicas, como "Muy bien, Ana, siga así", la persona sabrá que no esta siendo sincero. La gente capta de inmediato las alabanzas falsas.

Wes le explica a Anne Marie que en su vida empresarial y personal el tiene un largo historial de respuestas ¡Te agarre! Con la gente y el pregunta, ¿Qué pasará si de repente cambio y comienzo a poner énfasis en lo positivo?

La respuesta de Anne fue sencilla: Si sospecha que su gente piensa que sus respuestas positivas no son sinceras, tómese el tiempo necesario para demostrar lo contrario. Admita que ha sido demasiado negativo y que quiere cambiar de actitud. Comparta el método ¡BIEN HECHO! con ellos y pídales que lo ayuden.

Capítulo cuatro

La respuesta ¡BIEN HECHO! puesta en marcha en el trabajo

En el trabajo, Wes Kingsley, se atrevió a ensayar el método ¡BIEN HECHO! Con una compañera de trabajo y le fue bien; más tarde hablaría de ello incluso con sus otros colaboradores en una reunión. Obviamente no todos quedaron muy convencidos, incluso algunos mostrarían resistencia sin decir lo que en realidad querían decir.

Por la tarde de su primer día en el trabajo, después de recopilar cualquier cosa positiva que hubiera ocurrido desde su viaje a la Florida, utilizando esa información positiva que encontró sobre Merideth Smalley, líder de uno de sus equipos de contabilidad con quien el había tenido serios problemas en el pasado, y esta en el punto de que casi no se hablaban, salió a buscarla.

Mientras caminaba por un pasillo, Wes vio a Merideth aproximarse. Al verlo ella apuro el paso, pero Wes la detuvo.

Disculpe Meredith. Necesito hablar un momento con usted.

No tengo mucho tiempo –murmuro Merideth echándole un vistazo al reloj.

Deliberadamente, Wes no se apresuro. Su voz sonaba relajada y amigable cuando dijo: "Me siento muy impresionado de la manera como usted ha estado tratando con nuestros proveedores

¿De veras? Dijo Merideth, sin mirarlo a los ojos y con un tono de voz que dejaba percibir su suspicacia.

He tenido problemas con algunas de esas personas por los retrasos en los pedidos, pero la verdad es que no he podido solucionarlos, dijo Wes. , pero la verdad es que no he podido solucionarlos, dijo Wes. Pero de alguna manera usted si lo ha logrado.

El rostro de Merideth se ilumino con una sonrisa imposible de ocultar. No estaba acostumbrada a recibir cumplidos, pero lo que decía Wes era cierto y no cabía duda de su sinceridad.

De repente, Merideth actuaba como si tuviera todo el día para conversar.

Le confiare algo, interrumpió Wes, June y Edmundo también han estado luchando con este proveedor. Necesitan entrenamiento. ¿Podría ayudarles? Podrían aprender mucho de usted.

Claro que si, dijo Merideth entusiasmada. Con gusto.

Al regresar a la oficina, Wes analizo lo que había pasado, Definitivamente la actitud de Merideth había cambiado, así como su voluntad de cooperar con el. El se pregunto, ¿Había sido sincera? Sintió como si le hubieran quitado un peso de los hombros, pero no sabia que hacer. Todo parecía muy fácil.

En la casa, a su regreso de la Florida, Wes intento compartir son su esposa, Joy, lo que había aprendido de Dave Yardley y Anne Marie Butler. Sin embargo, era evidente que ella no estaba lista para escucharlo. Las cosas no iban bien en lo que respecta a su relación de esposos y su hija adolescente le estaba dando bastantes problemas.

Una noche, cuando Wes llego a casa del trabajo, se le presento una oportunidad inesperada de abordar nuevamente el tema. Wes entro a la casa y escucho a Joy discutiendo con Allie, su hija de catorce años.

Cuando Joy vio a Wes que acababa de llegar, se le acerco y comenzó a llorar. Wes la tomo en sus brazos y la consoló hasta que se hubo colmado. Luego dijo:

"Se que últimamente las cosas han sido difíciles por aquí. También a mi me ha costado trabajo tener una buena relación con Allie. Las niñas pelean mucho, y tú y yo siempre nos crispamos los nervios mutuamente. Creo que es hora de tomarnos un fin de semana largo y viajar a la Florida.

Ya en la Florida, Wes llevo a la familia a visitar Sea World, su amigo Dave y la entrenadora Pam, quienes explicaron con lujo de detalle el método ¡BIEN HECHO! a Joy y las niñas, quienes quedaron encantado y prometieron aplicarlo en sus relaciones con la familia y amistades.

Capítulo cinco

Reunión familiar e implantación del método ¡BIEN HECHO! en la familia

Al regresar de la Florida, Wes y Joy convocaron de inmediato una reunión familiar, en esta reunión de familia, era el propósito de Wes y Joy buscar la forma de reemplazar algunos de los métodos que solían utilizar como padres por métodos ¡BIEN HECHO!, métodos estos que habían sido explicado a ellas, en forma alegórica, por la entrenadora de ballenas de Sea Word, Pam,

Wes comenzó diciendo lo siguiente: Su mamá y yo no estamos muy orgullosos de la manera como hemos actuado con ustedes. Hemos prestado mucha mas atención a las veces en que han sido desobedientes que a todos esos momentos en que han hecho lo que les pedimos que hicieran.

Añadió Joy, reconocemos que somos culpables. Queremos hacer bien las cosas, pero para poder cambiar primero tenemos que llegar a unos acuerdos. Luego podremos darnos entre todos respuestas ¡BIEN HECHO! cada vez que los cumplamos.

Meg, la hija menor, comenzó diciendo: yo me comprometo a mantener mi habitación arreglada, estoy harta de que me griten.

Por su parte Allie, la hija mayor, dijo: yo también me comprometo a mantener mi habitación limpia y en orden. Y también dejaré en orden la cocina cuando mis amigos vengan a merendar a la casa.

La madre le respondió diciéndoosle que eso seria maravilloso y que tanto su padre Wes como ella procurarían darles respuestas ¡BIEN HECHO! a cualquier mejora que haya en la cas.

Por su parte Wes les propuso que como recompensa acordaran que quien ayude a preparar la comida y a poner la mesa no tenga que lavar la loza después.

Con esto, la familia, utilizando los pasos esenciales del método ¡BIEN HECHO! comienza el camino de la mejora un sus relaciones.

Algunas noches después de la reunión con sus hijas, Wes sugirió a su esposa que tal vez necesitaban aplicar el método ¡BIEN HECHO! a su propia relación. Joy, su esposo, estuvo de acuerdo y admitió que la verdad era que, cuando hablo con Dave, el entrenador de ballenas en Sea Word, había caído en cuenta de que estaba utilizando muchas respuestas "TE AGARRE" con el.

Wes sonrió y le expresó a su esposa que el tampoco se había esmerado en acentuar lo positivo con ella.

Ambos acordaron llamar por teléfono a la conferencista Anne Marie Butler y pedirle consejos en como aplicar el sistema ¡BIEN HECHO! en su vida conyugar. Dijo Joy: "has hablado tanto sobre lo que aprendiste con ella que me gustaría conocerla, aunque sea por teléfono. Tal vez nos pueda orientar sobre como comenzar a mejorar nuestra relación.

Después que Wes pudo localizar a Anne Marie y explicarle lo que tenían en mente, esta le explico con un ejemplo el porque las parejas se desilusionan y hasta se separan.

Les contó Anne Marie la siguiente anécdota de algo que vio en un restaurant de lujo. Sucedió que vio dos parejas en mesas cercanas. De un había dos personas que evidentemente estaban enamoradas. Cuando una de ellas hablaba, ¿Qué creen que hacia la otra? Escuchaba. Sonreía. Le acariciaba la mano a su pareja. Le prestaba toda su atención.

Del otro lado había otras dos personas que obviamente estaban muy aburridas. No tenían nada que decirse. Ni siquiera se miraban. Actuaban como si la única razón por la cual estaban allí juntas era porque nade mas la había querido acompañar.

¿Como pasa uno de un entusiasmo desbordante a no tener nada que decirse? Es la frecuencia con que uno "agarra" a otro haciendo algo bien. Cuando uno se enamora solo ve lo positivo, y se lo dice a su pareja. Uno no nota lo negativo, o si lo nota no le da importancia y redirecciona las energías. Solo cuando uno se casa y comienza a vivir con su pareja empieza a notar todas esas cosas en el otro que antes el amor impedía observar. Muy pronto uno comienza a concentrar su atención en esos comportamientos y a dar respuestas negativas. Incluso si la pareja trata de cambiar, uno no se da cuenta de ese progreso ni lo reconoce. Ambos comienzan a gritarse, aun por cosas sin importancia.

En ese instante, tanto Wes como Joy se dieron cuenta de cuan importante era el utilizar el método ¡BIEN HECHO! para mantener una relación de pareja viva y saludable. Recuerden, les dijo Anne Marie, las respuestas positivas motivan a la gente a seguir haciendo cosas positivas.

Finalmente, afirmo Anne Marie, Si Wes y Joy querían que su relación se enderezara, debían ser honestos y no solo intentar hacer bien las cosas. Si solo se hace el intento no habrá una entrega real al fin que se persigue "porque la relación sigue estando a prueba".

Capítulo seis

El método ¡BIEN HECHO! aplicado a superiores y compañeros

Jim Barnes, jefe de Wes le llamó la atención por el método que estaba empleando y que según él, solo lograban distraer a la gente de sus responsabilidades.

Decía Barnes a Wes ¡Y me he enterado del nuevo lenguaje que está utilizando! Te agarre; ¡BIEN HECHO! ¿De qué se trata todo eso?

Wes trato de explicarle a su jefe que se trataba de una técnica sencilla y básica. Tiene que ver con responder positivamente, en vez de negativamente, al comportamiento de los demás. Yo solía criticar duramente a mis subalternos cuando cometían un error y lo daba por sentado, haciendo caso omiso, cada vez que hacían bien las cosas. Ahora les doy respuesta positiva a sus buenas acciones y les dijo ¡BIEN HECHO! Me llevo mucho mejor con todos y espero, que con este método gerencial pueda levantar la moral y el desempeño de mis subalternos.

Barnes, no dio crédito a Wes, y le advirtió que cuando se realizara la evaluación de desempeño de su personal en los próximos meses esperaba que no se le diera una calificación de excelente a todo el mundo, ya que la política de la compañía, o se a como funcionaba el sistema en la compañía, era clasificar el personal dentro de un desempeño bueno, promedio o deficiente.

Al salir de la oficina de su jefe, Wes reconoció a dos de sus compañeros como las personas que estaban dándole. A su espalda, información calumniosa acerca de el y su nuevo sistema !BIEN HECHO! a su jefe. Se sintió mal, pero ya sabia como afrontar situaciones difíciles utilizando el nuevo método aprendido a través de las ballenas asesina de Sea Word y sus entrenadores y decidió utilizarlo.

Mas tarde, sabiendo que sus compañeros soplones, Harvey y Gus, estaban juntos en el salón de receso. Wes fue a verlos.

Hola muchachos. ¿Tienen un par de minutos? Me preguntaba si podrían ayudarme. A ustedes dos los considero líderes en nuestro equipo y la influencia que ejercen sobre los demás es importante. Las ventas han bajado, y podemos recuperarlas si no nos estorbamos unos a otros.

¡Te agarre! dijo Harvey.

Ignorando el cinismo obvio de Harvey, Wes continuo diciendo:

Les propongo un trato. Durante los siguientes seis meses, necesito que ustedes cooperen conmigo y apoyen los cambios que estoy tratando de hacer… y también que tomen las cosas con calma y no se empeñen en criticar mi estilo gerencial. Si nuestros resultados y nuestras relaciones no mejoran al cabo de ese tiempo, abandonaré el método ¡BIEN HECHO! ¿Qué me dicen?

Los dos hombres se miraron con expresión dudosa, pero finalmente accedieron a regañadientes.

Wes estaba seguro que, en el plano laboral, si se tiene un buen ambiente de trabajo, la innovación y creatividad tienen mayor oportunidad de salir a flote, aparte de que se puede inspirar a otros a seguir el ejemplo creando un compromiso serio, sincero, para el alcance de las metas, pero con la reacción negativa de su jefe y sus dos compañeros, no estaba seguro de que el plan iba a funcionar.

Al día siguiente, Wes telefoneo a Anne Marie Butler para darle en informe de lo que había pasado y pedirle su opinión. Wes le conto sobre la reunión con su jefe el día anterior, incluida la advertencia de su jefe Barnes sobre la evaluación de desempeño y la necesidad de calificar a su gente según una curva de distribución normal. También le contó sobre su confrontación con sus compañeros Harvey y Gus.

Anne Marie le contesto de la siguiente manera: Mi consejo es que persevere. Muchos tratarán de obstruir sus esfuerzos. Incluso es posible que algo de eso sea necesario. He descubierto que muchas veces las personas que se oponen al cambio solo están siendo cautelosas al comienzo. Sin embargo, una vez se convencen de las bondades, son quienes mas apoyan el proyecto. Confié en su gente. Persevere en su empeño y mantenga informado a su jefe. El método ¡BIEN HECHO! va a funcionar.

Wes colgó el teléfono y se sumio en sus pensamientos. Aunque apreciaba la ayuda y la energía incesante de su amiga, seguía sintiéndose un poco perdido. Luego, el próximo día, temprano en la mañana se encontró con Merideth, la compañera con quien primero Wes utilizo el método ¡BIEN HECHO! en el trabajo quien le dijo: Bueno, es verdad que la situación esta difícil, pero le diré algo, si ha pensado en acabar con el programa ¡BIEN HECHO!, ni se le ocurra. Sus elogios y sus estimulo son las únicas cosas positivas en esta empres, salvo cuando los otros supervisores y yo seguimos su ejemplo y también procuramos animar a nuestra gente. Se que le parecerá raro que yo diga esto, pero es en serio.

Wes sintió una oleada de energía. Las palabras de aliento de Anne Marie, unidas a los comentarios de Merideth, cambiaron su respectiva nuevamente, y una vez más se sintió seguro de que debía continuar con el método ¡BIEN HECHO! Ya sin pensar en darse por vencido, resolvió mantener su compromiso con el compromiso.

Conclusión

Estamos de acuerdo en que las cosas pueden resultar mejor cuando se acentúa lo positivo. ¡Bien Hecho! Es una parábola muy amena, donde se nos muestran con gran claridad las técnicas y los fundamentos para obtener de cada una de las personas con las cuales interactuamos lo mejor que pueden dar y hacerlo con amor y alegría. La parábola nos enseñas a focalizar nuestra energía sobre los resultados positivos y nos nuestra como redirigir las acciones que han llevado al error o al fracaso; al hacer esto, motivamos a los demás a hacer las cosas de la mejor manera posible, ayudándoles al mismo tiempo a sentirse orgullos y complacidos de lo que hacen.

Recomendación

Invitamos a cada uno de ustedes a comenzar a utilizar este enfoque hoy mismo, o esta noche cuando llegue a sus casas. Propónganse responder positivamente a todos los que los rodean. Una vez se embarquen en este viaje, y sobre todo después de haber presenciado algunos éxitos, verán cómo dinamizan sus relaciones. Y así querrán seguir empleando este método. A veces, desde luego, se les va a olvidar utilizarlo y reaccionarán negativamente. Tendrán un mal día, irán a casa y perderán los estribos con alguien. Pero si se esfuerzan conscientemente por poner énfasis en lo positivo en todas sus relaciones, finalmente se convertirá en hábito. Y ni se alcanzan a imaginar las recompensas que obtendrán.

Bibliografía

Libro:

¡Bien Hecho! Blanchard, Ken, et al. Grupo Editorial Noma. Barcelona…

Los autores:

1. Ken Blanchard es director espiritual y presidente de la junta directiva de su propia compañía, "Ken Blanchard Companies. Ha sido autor y coautor de decenas de libro de autoayuda que han sido éxito de librería, entre ellos se pueden contar: ¡A la carga!, Administración por valores y Empowerment, entre otros.

2. Thad Lacinak es vicepresidente y director nacional de entrenamiento de animales en Busch Entertaiment Corporation, con más de veintiocho años de experiencia en el adiestramiento de mamíferos marinos.

3. Chuck Tompkins es vicepresidente y director de entrenamiento de animales en el Sea World de Orlando, Florida.

4. Jim Ballard es educador, entrenador en empresas y escritor, además ha trabajado

Estrechamente con Ken Blanchard en tres libros: Mission Imposible, Everyone"s a Coach y Managing by Values.

Los cuatro autores de este libre tienen amplia experiencia como conferencistas y en la dirección de seminarios, así como en servicios de consultoría, asesoría y entrenamiento en administración, trabajo en equipo, servicio al cliente, liderazgo, desempeño administrativo y calidad.

 

Enviado por:

Nelson Ramos