Fortalecimiento de la autoestima y calidad de vida en discapacitados utilizando el ejemplo de cinco paradigmas contemporáneos

2. Desarrollo
3. Autoestima
4. Calidad de vida
5. Discapacidad
6. Rehabilitación
7. Paradigmas
8. Acciones
9. Resultados
10. Conclusiones
11. Bibliografía

Introducción

La relación del hombre con su medio contribuye de manera significativa al desarrollo de la personalidad y es el medio ambiente con su expresión cultural el que define el comportamiento del grupo acorde a la inteligencia y creatividad expresada en la solución de los problemas que el individuo va identificando en sus relaciones sociales. Resulta imposible para los seres humanos vivir ajenos o alejados de los diferentes grupos que conforman la escala social.

En estos grupos existen líderes comunitarios de corte positivo o negativo que influyen sobre el resto de los convivientes de la comunidad y la familia debe estar atenta ya que tiene la primera responsabilidad de establecer límites en el comportamiento de sus miembros más jóvenes orientando hacia el ejemplo de paradigmas que expresen los valores universales en la comunidad y en la escuela. De manera que su accionar se revierte en mejores personas, preparadas para afrontar los sucesos indeseables que se presentan en la vida.

Las personas con alguna discapacidad pueden ser vulnerables a las influencias negativas de miembros del grupo y ello consigue influir sobre su autoestima y sobre la calidad de vida.

Mediante un estudio exploratorio se pudo definir algunos indicadores de baja autoestima en discapacitados del área de salud Previsora, que relacionaban con problemas económicos y relaciones disfuncionales en la familia y comunidad.

Desarrollo

Los aspectos más importantes de la autoestima y de la discapacidad fueron valorados en el área de salud Previsora en Camagüey donde un equipo de trabajo viene desarrollando un proyecto de investigación en la población de discapacitados con el propósito de identificar aspectos que inciden en la autoestima y calidad de vida.

Para hacer el diagnóstico de la muestra, se utilizó la escala de Autoestima de Cooersmith y el cuestionario de calidad de vida general SF36

Por otro lado los investigadores realizaron una intervención con acciones encaminadas a fortalecerla, consistente en difundir los valores humanos de Fernando, Ramón, Rene, Antonio y Gerardo, utilizando los sistemas de comunicación y charlas educativas donde el dialogo con la historia se llevo al debate en talleres.

Autoestima

Se define como el conjunto de vivencias, ideas, opiniones, sentimientos y actitudes hacia nosotros mismos. Es la imagen que el sujeto se forma de su propia persona en la que se refleja, en síntesis, todo lo que ha hecho y ha sido, con todo lo que es y hace y además con lo que quiere hacer y ser.

La formación del concepto y valoración de sí mismo empieza temprano en la niñez, de una manera vaga, imprecisa, indefinida, como reflejo de la opinión y valoración social de las personas cercanas significativas (padres, parientes, maestros, amigos).

La autoestima la define Branden, N. (2004) como la confianza en nuestra capacidad de pensar, en la capacidad de enfrentarnos a los desafíos básicos de la vida, la confianza en nuestro derecho a triunfar y ser felices; el sentimiento de ser respetables, de ser dignos, y de tener derecho a afirmar nuestras necesidades y carencias, a alcanzar nuestros principios morales y a gozar del fruto de nuestros esfuerzos.

Hacia la adolescencia se desarrolla un nivel superior de conocimiento y valoración de sí mismo cuando el joven, motivado por la necesidad de saber quién es y quién quiere ser, elabora una opinión y estimación propia, independiente de su propia persona, basada en la autorreflexión sobre sus vivencias, experiencias y actividades. Otra fuente importante que influye en el concepto y valoración de sí mismo es la observación y valoración que hacemos de los demás y la comparación de ellos con uno mismo.

¿Qué se entiende realmente por autoestima?

Lo primero que hacemos en el mundo es estimar, valorar, apreciar las cosas que encontramos como buenas o malas, bellas o feas, amables u aborrecibles, etc. Y lo primero que estimamos en el mundo es nuestra propia persona, que es lo que llamamos autoestima y así nos estimamos a nosotros mismos como inteligentes o torpes, emotivos o controlados, persistentes o inconstantes, etc.

Quizás el aspecto más importante de la personalidad de cada uno es el concepto y valoración que tenemos de nosotros mismos, el que influye mucho en nuestra vida y conducta. El mejoramiento de uno mismo empina por el mejoramiento del concepto y la valoración que tengamos de nosotros mismos. (Torroella, 2008)