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Como llevar la rehabilitación a domicilio a través de un programa de ejercicios (página 2)


Partes: 1, 2

-Produce, asimismo, un aumento del volumen muscular por hipertrofia de las fibras y/o aumento de la red capilar.

-Las contracciones musculares provocan la combustión del glucógeno y un mayor aflujo de sangre al músculo (hiperemia), lo que le confiere mayor amplitud funcional y aumento de la contractilidad.

-Los movimientos activos fortalecen los músculos y su resistencia, y favorecen la potencia muscular.

-Los movimientos pasivos pueden distender estructuras fibrosas que pudieran estar acortadas o retraídas.

-Las articulaciones se ven también favorecidas por ejercicios ya que el estiramiento de cápsulas y ligamentos, junto a un estímulo de la secreción sinovial, hace más fácil la realización de los movimientos.

-Los nervios periféricos se ven también favorecidos por las movilizaciones, ya que su estiramiento estimula su funcionamiento y la transmisión del impulso nervioso a la placa motora, lo que se traduce en una mejora en el equilibrio y la coordinación de los movimientos.

B) Efectos generales

-El ejercicio produce un aumento del trabajo cardíaco, que puede conducir a una mejor vascularización e hipertrofia.

– Si los movimientos son generalizados y de suficiente intensidad, puede aumentarse la circulación general por una disminución de la resistencia periférica, lo que favorece el intercambio tisular.

– La actividad muscular activa la termogénesis, lo se traduce en una elevación de la temperatura.

– El ejercicio conlleva efectos psíquicos favorables y conduce a un estado físico satisfactorio, factor importante por sus repercusiones en el deseo de recuperación de los enfermos.

FINALIDADES Y OBJETIVOS GENERALES

Son fundamentalmente:

— Mantener o aumentar el trofismo y la potencia muscular.

— Evitar la retracción de estructuras blandas articulares y periarticulares, y distender las estructuras retraídas.

— Prevenir las rigidez articulares y mejorar la amplitud de la movilidad de las articulaciones limitadas.

— Corregir actitudes viciosas y deformidades.

— Facilitar estímulos nerviosos que permitan conseguir la relajación y evitar o disminuir el dolor.

— Ante un período de inmovilización de una articulación:

• preservar la función muscular,

• prevenir la atrofia muscular,

• prevenir la fibrosis,

• prevenir el éstasis venoso y linfático, y

• mantener la movilidad articular por encima y por debajo de la articulación inmovilizada

Clasificación

Según la mayor o menor participación del paciente en la ejecución de los movimientos y la ayuda o resistencia aplicada, manual o por mecanismos externos diversos, la cinesiterapia puede clasificarse en:

1. PASIVA:

– Movilizaciones.

– Posturas.

– Tracciones articulares.

– Estiramientos musculotendinosos.

– Manipulaciones.

2. ACTIVA:

– Cinesiterapia activa asistida o antigravitacional.

– Cinesiterapia activa libre o gravitacional.

– Cinesiterapia activa resistida.

CINESITERAPIA PASIVA

Concepto

Comprende el conjunto de técnicas que se aplican sobre las estructuras afectadas, sin que el paciente realice ningún movimiento voluntario de la zona que hay que tratar. El paciente no interviene en absoluto, no presenta ni ayuda ni resistencia en la realización de los ejercicios, aunque su pasividad es —en cierto modo— relativa, ya que está presente y debe ser consciente del movimiento que se le efectúa.

Objetivos y finalidades

Los objetivos de este tipo de cinesiterapia, que se realiza mediante la aplicación de fuerzas externas, serán fundamentalmente:

– Prevenir la aparición de deformidades y evitar rigidez y anquilosis en posiciones viciosas.

– Mejorar la nutrición muscular y favorecer la circulación sanguínea y linfática.

– Preparar el músculo para un mejor trabajo activo, mediante estiramientos y acortamientos repetidos.

– Prevenir adherencias y contracturas de los diversos planos tisulares, manteniendo su elasticidad.

– Mantener la movilidad articular o restablecer la movilidad de las articulaciones que presentan limitaciones de movilidad.

– Estimular psíquicamente al paciente, incapaz de realizar movimientos por sí mismo.

– Despertar los reflejos propioceptivos y la conciencia del movimiento, y contribuir a conservar o crear las imágenes periféricas del esquema corporal y espacial.

Clasificación

Dentro de la cinesiterapia pasiva incluimos técnicas como las movilizaciones pasivas, las posturas, las tracciones articulares, los estiramientos musculotendinosos y las manipulaciones.

Antes de referirnos a cada una de ellas, vamos a hacer alusión a otra clasificación de este tipo de cinesiterapia, seguida por diversos autores y que es necesario conocer. Incluyen en ella:

— la cinesiterapia pasiva relajada, y

— la cinesiterapia pasiva forzada.

La cinesiterapía pasiva relajada se lleva a cabo en los casos en que las articulaciones están libres y no existe causa alguna que les impida el movimiento. No hay adherencias, ni retracciones, ni contracturas espásticas, ni dolor que se opongan a la movilización.

La cinesiterapia pasiva forzada se utiliza en los casos contrarios, es decir, en aquellas situaciones en que las articulaciones no están libres, por existir adherencias o retracciones que impiden total o parcialmente su movilización, o espasmos o contracturas que se oponen al movimiento. Este tipo de movilización corresponde a las movilizaciones pasivas forzadas y puede llevarse a cabo de forma momentánea o mantenida.

La forma más conocida de movilización pasiva momentánea son las manipulaciones, consistentes en maniobras muy rápidas, que se realizan enérgicamente y que no están exentas de peligros si no se llevan a cabo con los suficientes conocimientos y experiencia.

La movilización pasiva mantenida supone una acción continua sobre la articulación utilizando fuerzas exteriores, que pueden ser las manos del fisioterapeuta, la acción de la gravedad o medios mecánicos, como poleas o férulas mecánicas. Dentro de esta modalidad se enmarcan las tracciones, cuyo estudio y el de las manipulaciones se realiza en el capítulo siguiente.

Movilizaciones pasivas

Con estas técnicas se ponen en movimiento los músculos y las articulaciones del paciente. Para producir la movilización actúa exclusivamente una fuerza exterior al paciente.

Según la fuerza exterior aplicada, distinguimos:

1.1. Movilización pasiva asistida, cuando la realiza el fisioterapeuta de forma manual o bien por medios mecánicos.

1.2. Movilización auto pasiva, cuando es el propio paciente el que la realiza de modo manual o mediante poleas.

Las movilizaciones pasivas asistidas pueden ser analíticas o globales. En el primer caso, la movilización tiende a dirigirse a una sola articulación, mientras que la movilización global va dirigida a diferentes articulaciones.

La movilización pasiva que utilicemos en cada caso estará en función de la finalidad que pretendamos. Ésta dependerá, asimismo, de si actuamos sobre una articulación que esté libre y en la que no existe déficit muscular o si lo hacemos sobre una articulación limitada en su amplitud de movimientos.

En el primer caso (movilización simple), la finalidad será preventiva, intentaremos evitar la aparición de rigidez en mala posición; el fisioterapeuta actuará sobre cada articulación en sentido ordinario y normal de los movimientos acostumbrados, respetando la fisiología articular y proponiéndose mantener el recorrido articular sin pretender aumentar su amplitud. Las movilizaciones serán, en este caso, de pequeña intensidad, progresivas, no traumáticas e indoloras.

Es necesario seguir unas normas básicas en la aplicación de las movilizaciones pasivas manuales, si queramos realizar una técnica correcta. Así:

— Se partirá de la posición de reposo sujetando con una mano el segmento proximal de la articulación (contratoma) y con la otra (toma), que es la que imprime el movimiento, el segmento distal (fig. 3.2)

— Se realizarán, en principio, movimientos regulares simples, a un ritmo relativamente lento, según los diferentes planos perpendiculares al centro de la articulación, para seguir posteriormente con movimientos complejos mixtos, respetando siempre tanto los planos de movimiento como las amplitudes articulares fisiológicas y procurando no sobrepasar el umbral doloroso.

En el segundo caso (movilización específica), la finalidad será curativa, ya que actuamos sobre una articulación que no está libre y es necesario vencer sus adherencias o limitaciones con el objetivo de recuperar su movilidad. En este caso, se solicitan los movimientos de deslizamiento, rodadura y descompresión, según las características biomecánicas de la articulación. Puede realizarse la movilización ejerciendo pequeños estiramientos suaves y progresivos, para aumentar el grado de movilidad. En estos casos, resulta útil combinar la movilización con el calentamiento de la articulación, para lo cual se utilizará la modalidad de termoterapia más apropiada.

— Cuando la movilización la realiza el propio paciente (movilización autopasiva), puede llevarse a cabo de forma manual, mediante la articulación sana, o con ayuda de aparatos que él moviliza activamente, mediante el lado sano sobre el afectado o mediante movilizaciones activas de las articulaciones vecinas que en ciertas posiciones causan la movilización de la articulación afectada.

Posturas

Mediante esta técnica, que puede incluirse en la cinesiterapia pasiva mantenida, se impone a una o varias articulaciones una posición determinada, a fin de prevenir posibles alteraciones o corregir las ya existentes. Mediante la puesta en tensión de los elementos constituyentes de la articulación, adoptamos su posición adecuada.

Al igual que en otras modalidades, han de cumplirse ciertas normas básicas: progresión, respetar ejes, planos articulares y amplitud fisiológica, y evitar la aparición de dolor

Indicaciones y contraindicaciones generales de la cinesiterapia pasiva

La cinesiterapia pasiva puede indicarse:

— Como terapéutica previa a otros tipos de movilizaciones, como sucede en las paresias o debilidad muscular y en los pacientes débiles o cardíacos que no toleran los ejercicios activos

— En parálisis flácida; en este caso es la terapia de elección.

— En contracturas de origen central, por su efecto relajante.

– Como terapéutica preventiva en ciertos procesos, a fin de:

• conservar la movilidad,

• evitar rigideces articulares y limitaciones,

• evitar retracciones conservando la longitud muscular, y

• evitar anquilosis en posiciones viciosas.

– En afecciones traumáticas y ortopédicas que cursen con:

• bloqueos articulares,

• trastornos mecánicos raquídeos o articulares,

• rigideces articulares,

• retracción de partes blandas,

• dolores radiculares rebeldes a otros tratamientos,

• desviaciones de columna vertebral, etc.

– En procesos vasculares periféricos y respiratorios.

Los mayores peligros de la cinesiterapia pasiva son su incorrecta indicación y su mala ejecución. Por lo tanto, es necesario, sobre todo en las técnicas más agresivas, un perfecto conocimiento de sus fundamentos, de la base de su utilización, de las técnicas de realización y de sus posibles riesgos.

La cinesiterapia pasiva está contraindicada en:

— Aquellos casos en que no se tiene la seguridad de su indicación y/o del modo de llevarla a cabo.

— Procesos inflamatorios o infecciosos agudos.

— Fracturas en su período de consolidación.

— Osteotomías o artrodesis.

— Articulaciones muy dolorosas.

— Derrames articulares

— Rigideces articulares postraumáticas.

— Hiperlaxitud articular, con la excepción de la parálisis flácida.

— Anquilosis establecida.

— Los procesos especificados en los diferentes tipos de movilizaciones pasivas, como en los tumores óseos o medulares, en la osteoporosis infecciosa e inflamatoria en el caso de las manipulaciones, o en los que no se ha descartado la presencia de metástasis óseas de localización vertebral, en el caso de las tracciones vertebrales.

Cinesiterapia activa

Concepto

Este apartado incluye el conjunto de ejercicios, analíticos o globales, realizados por el mismo paciente con sus propias fuerzas, de forma voluntaria o autorefleja, y controlados, corregidos o ayudados por el fisioterapeuta.

En este tipo de cinesiterapia, el paciente pone en juego la actividad

muscular de forma voluntaria, lo que requiere la sistema nervioso, el encargado de enviar los impulsos nerviosos para que el participación del ejercicio se

Objetivos y finalidades

Recuperar o mantener la función muscular y facilitar los movimientos articulares integrándolos en el esquema corporal son los objetivos generales fundamentales de la cinesiterapia activa. Para conseguirlos será necesario, según los casos:

– Recuperar o mantener el tono muscular.

  • Evitar la atrofia muscular.

  • Incrementar la potencia muscular, lo que llevará a su hipertrofia.

– Aumentar la resistencia muscular mediante ejercicios repetitivos, que no sobrepasen el esfuerzo máximo.

– Mantener o recuperar el trofiismo muscular lo que se consigue manteniendo el buen estado de la circulación arteriolar y capilar, así como su metabolismo.

– Reforzar los movimientos articulares, conservando o recuperando al máximo su amplitud.

– Evitar las grandes rigideces articulares.

– Mejorar la coordinación neuromuscular.

– Aumentar la destreza y la velocidad del movimiento en las fases avanzadas del proceso rehabilitador.

De los componentes de la articulación, merece especial consideración el cartílago articular.

Las articulaciones según su función respectiva, las podemos clasificar en tres grandes grupos:

  • 1)  Sinartrosis, articulaciones llamadas inmóviles, las que podemos encontrar en la unión de los huesos del cráneo entre sí. Estas articulaciones se conocen también como articulaciones fibrosas atendiendo al tipo de tejido. Otro ejemplo sería el de las articulaciones tibioperonea distal.

  • 2)  Anfiartrosis, semimóviles, cuyo tipo se encuentra a nivel de los cuerpos vertebrales o también a nivel de las articulaciones sacroilíacas y en las sínfisis púbica. Según el tipo de tejido se clasifican como cartilaginosas.

  • 3)  Otras por fin son móviles, con diversos grados: son estas las Diartrosis, que se encuentran especialmente a nivel de los miembros (articulaciones de los diferentes segmentos entre sí, del miembro superior y del inferior), o bien a nivel del arco posterior de la columna vertebral (articulaciones de las apófisis vertebrales entre sí, de las articulaciones temporo-maxilares o de las articulaciones del cráneo con la parte superior de la columna vertebral cervical).

Según el desplazamiento en los ejes: Las articulaciones se pueden clasificar en:

Uniaxiales: son las articulaciones que tienen la posibilidad de realizar su movimiento en una dirección, ejecutándose la acción sobre un plano y un eje.

Biaxiales: Son las articulaciones que tienen la posibilidad de realizar el movimiento en dos direcciones diferentes, por lo que su acción se ejecuta sobre dos planos y dos ejes.

Poliaxiales: Son aquellas articulaciones que realizan sus movimientos sobre diferentes planos y varios ejes, por lo que su acción es muy amplia.

En el primer caso podemos señalar las articulaciones interfalángicas. En el segundo caso, podemos citar las articulaciones de las muñecas. En el tercer caso, podemos mencionar las articulaciones de las caderas y los hombros.

AMPLITUD DEL MOVIMIENTO ARTICULAR:

Como amplitud del movimiento articular, distinguimos el desplazamiento de una articulación a través del arco articular. Este desplazamiento es medible en grados y cuando la amplitud articular es completa, el movimiento se realiza en todo el recorrido del arco articular, pero esta amplitud puede ser limitada por diversos motivos, en este caso, estamos en presencia de una amplitud articular reducida.

Desde el punto de vista funcional, una articulación se considera en toda su amplitud, cuando cumple el o los recorridos normales de los arcos articulares para los que ha sido creada

Fisioterapia Respiratoria.

Anatomía del aparato respiratorio

Inspiración / Espiración

Entre los músculos inspiratorios, responsables por tanto de la inspiración, destaca el músculo diafragma. Es, por méritos propios, el músculo más importante de toda la respiración. Está inervado por el nervio frénico procedente de la raíz IV cervical. Forma dos cúpulas con forma abovedada que se insertan en el esternón, costillas inferiores y vértebras lumbares superiores. El movimiento de este músculo es responsable del 65% de la inspiración normal.

Podemos observar su amplio desplazamiento en la imagen lateral en una Inspiración (figura superior) y en una espiración (figura inferior).

Otros músculos auxiliares y accesorios de la inspiración son los intercostales Externos, esternocleidomastoideo, escalenos, trapecio, pectoral mayor y menor, serrato anterior y dorsal ancho. El tipo normal de respiración es la diafragmáticacostal inferior. Durante la inspiración el diafragma se contrae y se aplana, los abdominales permanecen relajados y las costillas inferiores se proyectan en sentido antero-superior. La cavidad torácica y los pulmones aumentan de volumen al máximo.

Normalmente en estado de reposo, la espiración es pasiva, y algo más prolongada que la inspiración. En una espiración forzada, sin embargo, intervienen los músculos abdominales, intercostales internos y serrato postero-inferior; las costillas inferiores se deprimen y la parte superior del tórax desciende ligeramente, disminuyendo así el volumen de los pulmones al máximo.

Función respiratoria

La función primaria del aparato respiratorio es el intercambio de gases

entre el aire inspirado y la sangre capilar alveolar. Devolverá a la sangre venosa eloxígeno que han cedido a los tejidos y depurará el exceso de anhídrido carbónico.

Este intercambio se realiza mediante la ventilación, distribución, perfusión pulmonar y difusión.

La ventilación es el proceso de movilización del aire inspirado en el compartimento del gas alveolar. En una respiración normal el volumen de ventilación es de medio litro. Sin embargo, debido a que el volumen de las vías

aéreas es de 150 ml (espacio muerto anatómico), solo 350 ml. Alcanzan los alvéolos. Siendo la frecuencia respiratoria normal de 15 veces por minuto, el volumen-minuto respiratorio es aproximadamente de 5 litros.

La ventilación está regulada por el centro respiratorio, situado en la protuberancia y bulbo, y éste es muy sensible a la composición química de la sangre, es decir al contenido de oxígeno y anhídrido carbónico. Dicho centro respiratorio se excita por:

· Aumento de anhídrido carbónico en sangre (ésta es la causa más importante).

· Disminución de oxígeno en sangre.

· Disminución de PH (acidosis).

· Aumento de la temperatura corporal.

· Aumento consciente o artificial ejerciendo una presión positiva desde el exterior por medio de un ventilador o por presión ejercida en el tórax por el fisioterapeuta.

  • . Ejercicios respiratorios

  • Estos ejercicios pretenden facilitar la ventilación pulmonar debido a que van a poner en movimiento el tórax. Los ejercicios comprenden respiración diafragmática y expansión costal:

  • · Técnicas de relajación: Para decontracturar y distender grupos musculares determinados, induciendo un estado de relajación durante la sesión de tratamiento.

  • · Ejercicios de respiración diafragmática: Este ejercicio representa una ampliación de la respiración diafragmática normal. El paciente realiza una inspiración lenta y profunda por la nariz, tratando rítmicamente de elevar el abdomen; a continuación espira con los labios entreabiertos, comprobando como va descendiendo el abdomen. Estos ejercicios pueden hacerse contra resistencia, o sin ella, en distintas posturas.

  • · Ejercicios de expansión torácica: Son ejercicios localizados en distintas partes, aplicando presión en áreas apropiadas de la pared del tórax y utilizando

  • estímulos propioceptivos para obtener una expansión más eficiente de estas áreas. Al inicio de la inspiración se aplica la mano en la zona a tratar y ya en plena inspiración se relaja la presión; durante la espiración se dirige el movimiento.

Objetivos de la Fisioterapia Respiratoria.

Facilitar la eliminación de secreciones.

Disminuir las resistencias bronquiales y el trabajo respiratorio

Prevenir complicaciones pulmonares

Mejorar el patrón ventilatorio.

Aumentar movilidad diafragmática y costal

Disminuir la sensación de disnea

Mejorar la fuerza y resistencia

Mejorar la calidad de vida y tolerancia al ejercicio

FISIOTERAPIA RESPIRATORIA EN ENCAMADOS

La fisioterapia respiratoria en pacientes encamados tiene como objetivo drenar las vías respiratorias dado que el acúmulo de secreciones aun no teniendo ninguna patología respiratoria será abundante (por el inmovilismo y la poca expectoración) y también movilizar las vías respiratorias para evitar obstrucciones.

Por tanto realizaremos:

· Cambios posturales frecuentes: sobre todo si son pacientes encamados o pacientes que no se mueven de forma voluntaria, para evitar el acúmulo de secreciones en una misma zona pulmonar y también las úlceras por presión.

Valoración técnico-económica

  • Evitar el traslado de profesores a nivel de Municipio lo que conlleva a gastos innecesario desde el punto de vista personal, lo que puede ser solucionado a través de los profesores capacitados en el propio Combinado.

  • Evitar el traslado de los pacientes bajo prescripción facultativa al Gimnasio del área comunitaria, teniendo en cuenta la situación de transporte, y económica-monetaria.

Conclusiones

Si aplicamos una correcta capacitación a los técnicos que atienden estos pacientes se le facilitaría a través del programa creado una vía eficiente para desarrollar su trabajo y obtener los resultados esperados.

Recomendaciones

  • Poner en practica el programa creado y hacerlo extensivo a las demás comunidades del Municipio.

  • Que los profesores capacitados desarrollen la superación del personal a través de la Preparación Metodológica y otras vías.

Bibliografía

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  • Vademécum de Kinesioterapia y Reeducación Funcional. El Ateneo. Buenos Aires. 1983.

  • Genot. Kinesioterapia. Panamericana. Buenos Aires. 1988.

  • Kaltemborn. Fisioterapia Manual. Columna. McGraw-Hill. Madrid. 2000.

  • Kaltemborn.Fisioterapia Manual. Extremidades. McGraw-Hill. Madrid. 2001.

  • Chaitow: Terapia Manual: Valoración y Diagnostico. McGraw-Hill. Madrid. 1993.

  • Neiger. Estiramientos analíticos manuales. Panamericana. Madrid. 1998.

  • Kapandji. Cuadernos de fisiología articular. Masson. Barcelona. 2000.

  • Kendall. Músculos, pruebas y funciones. Jims. Jims. 1985.

  • Igual/ Muñoz/ Aramburu. Fisioterapia General: Cinesiterapia. Síntesis. Madrid. 1996.

  • Fundamentos de Fisioterapia. Síntesis. Madrid. 1995.

  • Esnault. La marcha humana. Masson. Madrid. 2001.

  • Krusen. Medicina Fisica y Rehabilitación. Philadelphia. 1993.

  • Auriol. Introducción a las técnicas de relajación. Mandala. Madrid. 1992.

  • Meadows. Diagnostico Diferencial en Fisioterapia. Madrid. 2003.

  • Busquet. Cadenas Musculares. Paidotribo. Barcelona. 1995.

Anexos

Anexo 1

Cantidad de pacientes encamados o con alguna deficiencia, cantidad de profesores que los atiende, nivel cultural, y capacitados en la actividad.

Pacientes

Cantidad de Prof.

Licenciados

Estudiando

Capacitados

No Capac.

80

21

15

6

4

17

Anexo 2

  • Ejercicios Respiratorios

  • Dosificación por semanas

EJERCICIOS RESPIRATORIOS CLÁSICOS

Número 1

POSICIÓN:

Decúbito Supino con una almohada en la región poplitea y otra de 5 libras en el abdomen.

INSPIRACIÓN: Toma el aire y protruye el abdomen.

ESPIRACIÓN: Introduce el abdomen y emite un sonido con los labios fruncidos en F o S prolongando la salida del aire.

Número 2

POSICIÓN:

Decúbito Supino con una almohada en la región poplitea y otra de 5 libras en el abdomen.

INSPIRACIÓN: Toma el aire y protruye el abdomen, elevando los brazos en 180 grados.

ESPIRACIÓN: Igual que el anterior regresando los brazos a la posición original.

Número 3

POSICIÓN: Igual que la anterior.

INSPIRACIÓN: Toma el aire y protruye el abdomen elevando los hombros.

ESPIRACIÓN: Igual que el anterior, regresando los hombros a la posición inicial.

Número 4

POSICIÓN: Igual que las anteriores con las manos detrás de la nuca y los codos unidos (En aducción horizontal)

INSPIRACIÓN: Toma el aire, protruye el abdomen y realiza abducción horizontal de los hombros.

ESPIRACIÓN. Igual que las anteriores llevando los hombros a la posición inicial.

Número 5

POSICIÓN: Paciente en decúbito supino con las piernas flexionadas.

INSPIRACIÓN: Toma el aire y protruye el abdomen.

ESPIRACIÓN: Igual que el anterior y flexiona la cadera, auxiliándose con las manos comprime el muslo al abdomen. (Alternar con ambos miembros inferiores )

Número 6

POSICIÓN. Igual que el anterior.

INSPIRACIÓN: Toma el aire y protruye el abdomen.

ESPIRACIÓN: Igual que el anterior flexionando ambas caderas a la vez.

Número 7

POSICIÓN: Paciente en decúbito supino.

INSPIRACIÓN: Toma el aire y protruye el abdomen con elevación de los brazos.

ESPIRACIÓN: Expulsa el aire e introduce el abdomen, flexionando el tronco 90 grados, tratando de tocar los pies con las manos. (fijar los tobillos)

Número 8

POSICIÓN: Paciente sentado, manos en los hombros, con los brazos cruzados sobre el tórax.

INSPIRACIÓN: Toma el aire y protruye el abdomen abriendo los brazos en abducción horizontal.

ESPIRACIÓN: Expulsa el aire e introduce el abdomen, llevando los brazos a la posición inicial.

Número 9

POSICIÓN: Paciente sentado, mano debajo de las últimas costillas hacia el esternón y la otra en forma de cono sobre la boca.

INSPIRACIÓN: Toma el aire y protruye el abdomen.

ESPIRACIÓN: Expulsa el aire como si fuera a inflar un globo y flexiona el tronco, presionando el abdomen con la mano.

Número l0

POSICIÓN: Paciente sentado, manos debajo de las costillas.

INSPIRACIÓN: Toma el aire y protruye el abdomen, rotando el tronco primero a un lado y después al otro.

ESPIRACIÓN: Expulsa el aire haciendo presión hacia arriba y adentro, a la vez que vuelve el tronco a la posición inicial.

NOTA: En el enfisematoso, los ejercicios 8, 9 y 10 se hacen sentados para que disminuya el espacio diafragmático. En el resto de los pacientes estos ejercicios se realizan de pie.

Dosificación por semanas.

Respiratoirio No 1

-Ejercicios respiratorios clásicos del 1 al 6.

  • 6 repeticiones de c/u la lera semana.

  • 8  repeticiones de c/u la 2da semana.

  • 10  repeticiones de c/u la 3era semana.

Respiratorios no 2

Ejercicios respiratorios clásicos, el programa completo (10).

  • 6 repeticiones de cada uno la lra semana.

  • 8 repeticiones de cada uno la 2da semana.

  • 10 repeticiones de cada uno la 3ra semana.

Anexo 3.

  • Movilizaciones Pasivas.

  • Dosificación por semanas.

Movimientos articulares

.Articulación

Movimientos

Hombro

Flexión

Extensión

Aducción

Abducción

Rotación interna

Rotación externa

Codo

Flexión

Extensión

Antebrazo

Pronación

Supinación

Muñeca

Flexión

Extensión

Abducción

Aducción

Cadera

Flexión

Extensión

Abducción

Aducción

Rotación interna

Rotación externa

Rodilla

Flexión

Extensión

Tobillo

Flexión

Extensión

Pie

Inversión

Eversión

Dosificación por semanas.

  • 6 Repeticiones de c/u 1ra y 2da semana.

  • Repeticiones de c/u 3ra semana

Anexo 4.

Equilibrio.

  • De acuerdo al fortalecimiento muscular, movilidad articular según valoración del profesor comenzar con la Sedestacion

  • 1. Sentarse en la cama hasta los 70 grados con ayuda.

  • 2. Sentarse en la cama hasta los 90 grados con ayuda y hacer algunos balanceos del cuerpo al empuje.

  • 3. Sentado en el borde de la cama con los pies apoyados en el piso.

 

 

 

 

 

 

 

Autor:

Jorge Ortega Fernández

Curso: 2009-2010.

Enviado por:

María Juana Espinosa Rodríguez

Partes: 1, 2
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