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Los Diez Mandamientos (página 2)

Enviado por joel ching Meletz


Partes: 1, 2

¿Qué podemos decir de los dioses de la nueva era? ¿De los ídolos de Hollywood? ¿De los líderes políticos? ¿De los líderes religiosos? ¿De nuestra pareja? ¿De nuestros hijos? ¿U objetos materiales o monetarios?, cualquier cosa que sustituya a Dios en nuestra vida es material de idolatría, por lo que hay que descartarla sin ningún atraso, sino inmediatamente.

Nos preguntamos, con lo dicho anteriormente, hoy ¿A quién se le da la gloria, el honor y toda potestad?, veamos a nuestro alrededor y respondámonos. Este mandamiento tiene que ver con el de Deuteronomio 6, "Oye oh Israel.Amaras tu Dios de todo tu corazón, de toda tu alma, y con todas las fuerzas". Nuestro corazón debe estar apegado solamente al Todopoderoso. Si el pecado no puede separarnos del amor de Dios, nada, ni nadie lo podrá hacer. Rm. 8:28. Todo objeto o sujeto que viene a tomar el lugar de Dios en nuestras vidas es asunto de idolatría. Pregúntate honestamente, ¿Qué cosa, o persona, está tomando el lugar de Dios en mi Vida?, Si encuentras respuesta a esa pregunta, lo único que queda por hacer es renunciar a esa actitud, y regresa a tu primer amor que es Dios en la persona de Jesucristo. Apo.2:5.

CAPÍTULO DOS

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No te harás ídolos

  • 1. NO TE HARÁS ÍDOLOS O IMÁGENES PARA POSTRARTE Y ADORARLAS

El anterior mandamiento tiene relación con este segundo. El primero tiene que ver con lo que nos rodea, ahora, este tiene que ver con nuestra imaginación, por ende nuestra acción. Cuando hemos sido influenciados por la idolatría, el segundo paso es la de fabricar o tallar imágenes. En las santas escrituras, especialmente en el Antiguo Testamento, de una manera pedagógica vemos como se presenta antropomorfismos de Dios. Algunos escritores lo presentan con manos, pies, ojos, etc. Según la imaginación de las personas o de los guías espirituales, así presentaban la persona de Dios. Sin embargo se enfatizaban más sus características morales y éticas. Con estas acciones pedagógicas, se tenía que tener un sumo cuidado para no violar este segundo mandamiento. Algunos practicantes de la idolatría fomentaban postrarse ante piedras talladas, recordemos el caso de Arón, quien fabrico un ídolo frente al Monte Sinaí. La ira de Dios no se dejo esperar por mucho tiempo. De allí en todo el peregrinar hacia la tierra prometida estaba siempre la sentencia y advertencia contra la idolatría, san Pablo en su carta a los corintios le llama a la idolatría fornicación, donde varios miles cayeron muertos en el desierto. El caso es que los israelitas dejaron a Dios para servir a dioses ajenos.

En el nuevo testamento se menciona mucho a varios dioses de la mitología griega, a quienes se les veneraba. En los evangelios se cita al dios de las riquezas, Mamon; al dios de la sanidad, escolapio, y otros. También se advertía contra la adoración a ángeles o mensajeros, en el caso de la carta a los gálatas, se les decía: si un ángel bajare del cielo con otro evangelio, del cual hemos predicado, el tal sea anatema. En el caso de Listra, Pablo no permitió adoración ni para él ni para su acompañante. En apocalipsis, el mensajero no permitió adoración por parte de Juan Apóstol.

En los años posteriores, hubo un puñado de fieles que no permitieron la idolatría en la Iglesia, siempre protestaron porque hubiera una ortodoxia donde solo Dios recibiera la honra y la gloria. Fueron desechados por no apegarse a acuerdos de los concilios paganos donde fomentaban la adoración a santos y a las vírgenes locales, ni al santo primado y jefe de la iglesia romana. No cabe duda que en la Reforma se clamo por dar énfasis las santas escrituras y volver a los principios de la palabra de Dios. En la época del avivamiento de los años 1,800 se enfatizo la santidad que incluía darle a Dios el primado y erradicar toda forma de idolatría en sus diferentes manifestaciones. La herencia de la reforma radical incluía, "solo Dios, solo Cristo, solo escritura", tácitamente era un mensaje directo para hacer ver que no se estaba dispuesto a compartir la gloria de Dios con nadie, incluyendo a la diosa razón, o a la diosa ciencia.

CAPÍTULO TRES

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No tomarás el nombre de Dios en vano

Hoy día en muchos países se acostumbra innecesariamente a jurar por Dios. Algunas iglesias ortodoxas han cambiado esta forma por el prometer sin incluir el nombre de Dios. Cuando la palabra personal es válida no hay necesidad de incluir a nadie, ni a Dios en nuestras promesas. Lamentablemente hoy no se cree en la palabra personal, por lo que se ha acudido a tener que firmar documentos ante abogados y notarios. La única forma de jurar en el nombre de Dios es cuando se decía la verdad, o cuando se está hablando de las santas escrituras, allí tácitamente estaba incluido el nombre de Dios. Este mandamiento prohíbe usar el nombre de Dios cuando se está mintiendo, Dios no dar por inocente al malvado, ni porque jure por su nombre divino. Los antiguos Israelitas le tenían mucho respeto al nombre de Dios o Yave, que lo sustituyeron para su uso, utilizando el pronombre Adonaí o el Señor. Los únicos que podían usar el nombre del señor eran los mensajeros, o profetas que predicaban en el nombre de Él. Los profetas falsos tenían una sentencia al ser descubiertos en su falsedad. También se condenaban la actitud de algunos profetas que querían desviar o confundir del camino al pueblo para llevarlos a adorar a otros dioses. Así como hubo falsos profetas en el Antiguo Testamento, también lo hubo en el Nuevo Testamento, y en los años futuros, Hc. 20. San Pablo los llama Lobos rapaces, Jesús los menciono en sus predicas como salteadores asalariados, S. Jn. 10

Hoy día no es la acepción, los llamados iluminados y malos apóstoles, que hacen de la grey mercadería para sus ganancias personales. Predican en el nombre de Dios, engañando a las ovejas sin pastor. Ya Jesús los había denunciado, "Vendrán en mi nombre, pero no les oigas", S. Mt. 24. San Pablo los llama hombres amadores de sí mismos. Y todos estos actúan en el nombre de Dios, o de Jesucristo, haciendo mucho daño al pueblo de Dios y a la humanidad. Instrumentos del Anticristo. No tomar el nombre de Dios en vano es no aprovecharse de las ovejas y de la humanidad utilizando el nombre del Señor. En toda la historia de la humanidad hasta nuestros días ha habido personas e instituciones que se han aprovechado económicamente diciendo cosas en el nombre de Dios, pero Dios jamás les ha dicho a ellos nada. Por eso el señor Jesucristo dijo: "Muchos me dirán Señor en tu nombre.y yo les protestare, no os conozco obradores de maldad", su recompensa será el lago eterno donde estarán Satanás y sus ángeles. Últimamente se han desatados legiones de seudo predicadores, profetas, apóstoles, maestros aprovechándose de la ingenuidad de las personas, y todos ellos lo hacen en el nombre de Dios. Por eso la sentencia es "No Tomaras el nombre de tu Dios en vano". Como se dijo anteriormente ya les espera su castigo.

CAPÍTULO CUATRO

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Acuérdate del día de reposo

Este mandamiento viene desde génesis capitulo uno, cuando Dios termina toda su obra de sus manos. Dice las escrituras que "Dios reposo de sus obras". Y en el séptimo día completó Dios la obra que había hecho, y reposó en el día séptimo de toda la obra que había hecho. Y bendijo Dios el séptimo día y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que Él había creado y hecho. Gen 2:2, 3 Séptimo día: En la Biblia, el número siete representa lo completo y perfecto. Véase Gn 4.18 n. Sin duda el más grande trabajador que ha existido se llama Yave. Después que descansó siguió y sigue trabajando. Jesucristo dijo que mientras el día dura es necesario trabajar porque la noche viene cuando nadie podrá trabajar. Decir que Dios descansó no quiere decir que dejó de actuar, sino que dio por bien lograda su obra. Véase Jn 5.17-18. En la actualidad, el Padre sigue trabajando en pro de la conversión del pecador. El espíritu Santo sigue trabajando en la tarea de redargüir al pecador a que regrese a la fuente de vida que es Cristo. Es necesario que el hombre se dedique a una labor y que repose el día séptimo.

En el aspecto espiritual, religioso, es menester tener un día especial de la semana para dedicarse al área espiritual, en la comunión con Dios. Este día es de muncho beneficio; pues re recuperan las fuerzas o energías desgastadas y se renuevan para seguir la labor escogida. Al pueblo de Israel se le regulo este día atraves de la palabra Shabat, este término tiene varias connotaciones. Shabat en hebreo significa literalmente descanso. Shabat, erróneamente se tradujo a la palabra sábado que viene de la palabra Saturno, pero en su original shabat simplemente significa descanso y nunca sábado, término que le dieron los griegos a Saturno posteriormente a los días.

Existieron varios shabat en el antiguo testamento, entre los que citan el gran shabat, el consistía el año séptimo cuando todos los esclavos eran puestos en libertad, así también la deudas eran perdonadas, y a los terrenos se les daba descanso hasta el siguiente año. Esto último, fue una de las causas porque el pueblo hebreo fue llevado a cautiverio, ligado a la idolatría. Finalmente, este mandamiento tiene una profundidad teología en la persona del salvador del Mundo, nuestro Señor Jesucristo. Los últimos profetas protestaron contra el pueblo, y denunciaron que Dios estaba cansado de sus días de fiestas y sus sacrificios. Hb.10:5-7. El sábado en todo el canon del Antiguo testamento fue una sombra de nuestro redentor Jesucristo, solo en él se podría reposar de nuestras obras y pecados. Ese fue el reposo anunciado anticipadamente. Existe un nuevo reposo para el pueblo de Dios, ¡Jesucristo!.

CAPÍTULO CINCO

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Honra a tu padre y a tu madre para que te vaya bien en la vida

Honrar es dar honor a quien lo merece. Cuando se crea un nuevo ser, un bebé, es consecuencia de la unión de una célula del padre, el espermatozoide, con una célula de la madre, el óvulo. El espermatozoide y el óvulo son células un poco especiales y son las únicas del organismo que solo tienen la mitad de cromosomas.

En el espermatozoide están las características o rasgos del padre. En el óvulo están las características o rasgos de la madre. Cuando estas células se unen, también se unen sus cromosomas; los genes se mezclan, y se forma un nuevo "libro", donde estarán escritas las características del futuro bebé. Por tanto, todos somos una mezcla de los genes de nuestros padres. La mitad de la información genética que contienen tus células viene de tu padre, y la otra mitad, de tu madre. (1)

Si lo anterior es correcto, entonces el nuevo ser que viene al mundo se debe a sus padres, el representa a sus padres en lo que haga y diga. Entonces sus actividades y en si su ser representa a sus padres en eta tierra y delante de Dios. San Pablo en efesios dice que es el primer mandamiento con promesa, vea Ef., 6:2,3. En el antiguo Testamento la rebeldía del muchacho era considerado una rebelión contra el pueblo, por lo que los padres deberían denunciarlo y ser castigado por los ancianos sin misericordia alguna. En la cita de efesios, san Pablo apela a los hijos y luego a los padres a que se conviva en armonía.

El Antiguo Testamento está lleno de nombres de hijos que no honraron a sus padres, iniciando con Caín, llamado el primer criminal. Por otro lado también se mencionan buenos hijos que honraron a sus padres desde Isaac hasta los buenos reyes que registra la historia.

El caso de José es clásico, a pesar de las circunstancias el honro primeramente a Dios y luego a su padre Israel. Al final de la historia se ve como Dios lo hombro en tierra ajena de su parentela rodeado de extraños y de gente que le hicieron la vida difícil.

Curiosamente este mandamiento es el quinto, o sea el mandamiento que está en medio del corazón de Dios. El paradigma del hijo obediente está enfocada en la persona de Jesucristo, el escritor de los salmos le dedica el salmo uno, llamándolo dichoso. En este hermoso salmo se dan pautas para ser un hijo que honre a sus padres en todo momento, la promesa fina es "La bendición y la misericordia de Jehová te seguirán todos los días de tu vida, tu lugar en la casa del Todopoderoso estará segura", vea el salmo uno.

Entonces vale la pena ser un hijo que honre la memoria de sus padres, si estos ya son difuntos, si aun están vivos, con mayor razón debemos honrarlos a cada momento, pues son el regalo de Dios, representan el espíritu paterno de Dios. "Para que te vaya bien, y seas prosperado hasta el fin de tu vida". 1. Microsoft ® Encarta ® 2009. © 1993-2008 Microsoft Corporation.

CAPÍTULO SEIS

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No matarás

La razón porque no se debe matar estriba en que el dador y dueño de la vida es Dios, solo él es tiene potestad para dar y quitar la vida, y darla en abundancia. De allí, nadie tiene el derecho ni la potestad de quitar la vida del ser humano. En varios países se esta considerando esto cuando se aplica a la pena de muerte, siempre hay un perdón por el dignatario de ese país que practica tal decisión. Otra razón es porque Dios es vida y no muerte. El es la fuente de vida, el no tolero al primer asesino sino lo desterró como vagabundo en toda la tierra de esos días; también le reclamo por la vida de su hermano Abel. Y lo condeno a ser responsable por la muerte de su hermano.

Según J. Oswald Sanders, afirma que Jesús en este mandamiento tiene connotaciones más profundas que el acto en sí. El asesinato es un crimen, no de mano sino del corazón, de la motivación, no solo del acto. Jesús coloca la ira en la misma categoría que el asesinato, ya sea que este secretamente guardada en el corazón o expresada apasionada y calurosamente guardada en el corazón o expresada y calurosamente por medio de las palabras. O sea que el alma puede ser asesinada por palabras despreciativas o iracundas como su cuerpo por un cuchillo.

Hay dos palabras griegas utilizadas para ira: una significa ira que se inflama rápidamente pero pronto se apaga, y la otra ira que es alimentada hasta quedar profundamente arraigada. Es significativo Jesús emplea la segunda acepción. El odio y el menosprecio son el semillero del asesinato. Un corazón lleno de odio, resentimiento y desprecio es un corazón asesino. Un corazón lleno de odio, resentimiento y desprecio es un corazón asesino. A los fariseos no les preocupara el estado del corazón del ofensor, pero Jesús va mas allá, a lo profundo, a lo intimo.

Jesús denuncia toda clase de ira, toda palabra despreciativa y apasionada y amplia el concepto de asesinato para incluir la motivación, o las palabras que las presidian. Dejando de lado el acto del asesinato, elevo la norma que rige la culpa, señalando la motivación maligna. También manifestó que hay grados de pecado con sus correspondientes grados de retribución. Entre ellas están: la ira malévola, palabras despreciativas, furor incontrolado.

El antídoto de este pecado es la restitución y la reconciliación, vea Mt. 5:23,24. Dios esta más interesado en relaciones interpersonales correctas que en ofendas. La reconciliación precede al sacrificio.

CAPÍTULO SIETE

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No cometerás adulterio

Quizás la primera razón que justifica este mandamiento es el hecho que el matrimonio es la primera institución creada por Dios. El espíritu de este mandamiento es la fidelidad plena a Dios. El primer adulterio se cometió en el Jardín del edén, cuando nuestros primeros padres le fallaron a Dios. El Señor fue el primer esposo que padeció de infidelidad al cambiar su amor por el amor Satánico. La esencia de aquel amor de las primeras criaturas había sido mezclada. El primer adulterio se cometió contra el mismo Dios. Por lo tanto asecho el primer hogar, la primera familia, y por ende a la primer institución establecida por el mismo. Todo el ciclo desde el inicio hasta la consumación del adulterio se ve en el jardín del Edén. Satanás sedujo, enamoro y conquisto el corazón precioso de aquellos seres inocentes, para cometer adulterio se es necesario usar el método satánico en el Edén. No cabe la menor duda que la inocencia del corazón afectado es violada y llevada al matadero. Como una oveja inocente ante sus trasquiladores. El adulterio atenta contra un hogar establecido, el egoísmo humano se hace relucir cuando se está en ese acto, estado o condición.

Por la dureza de los corazones del pueblo de Israel y por proteger a las mujeres desamparadas, Moisés tuvo que ceder al darles carta de divorcio, se llego a tal extremo que se podían divorciar por cualquier cosa. La violencia intrafamiliar era la práctica de aquellos días, tal práctica ah trascendido hasta nuestros días en algún lugar aislado de nuestra civilización. Sin embargo, hoy en las metrópolis se da con toda la pompa como una de las evidencias de la venida de nuestro Señor Jesucristo por su pueblo.

Jesucristo fue más allá de Moisés en su sermón de la montaña, cuando explicara de una manera acertada el asunto del adulterio. El dijo: "Cualquiera (llámese viejo, joven, soltero, viudo) que mira a una mujer y la codicia en su corazón, ya adultero con ella en su corazón".

El adulterio no se limita a lo legal, es un asunto ético y moral. Va mas allá de donde los testigos ven. Dios no quiere que suframos por este germen que se produce en el corazón, iniciando por los ojos malvados y codiciosos. ¿Cuál es el antídoto ante este mal? San Pablo dice que es mejor cosa no tocar mujer. Pero por causa de la carencia de continencia o abstinencia es mejor casarse que quemarse. A esto hay que agregar lo vital de entrar a un matrimonio bajo la voluntad de Dios. ¿Por qué los casados adulteran?, es porque están mal ubicados. Es necesario sanar el corazón, el espíritu, para que la carne este bajo el dominio de la ley del Espíritu Santo. Lo que paso en el Edén es necesario repararlo con la ayuda de las santas escrituras, la intervención del espíritu santo. Así evitaremos que el adulterio atenté contra nuestro matrimonio y vida.

CAPÍTULO OCHO

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No robarás

El robo o hurto es un atentado contra el mismo prójimo. Eso fomentaba ociosidad y no dignificaba el trabajo diario hecho con esfuerzo propio. Robar fomentaba ganancias fáciles, y esto, era unan practica que no se aprobaba en esos días. El robo apareció juntamente con la violencia, y su paso siguiente era la muerte por el asesinato provocado. Es pecado robar porque no solo se roba los frutos, sino se desprecia el esfuerzo que se empleo para obtener dicha ganancia. Al hombre se le había enseñado desde niño el trabajar y sudar, para ganar el pan de cada día. Se les recordaba el inicio de la raza humana, Adam recibió esa sentencia de trabajar y ganar el pan con el sudor de su frente. Trabajar y ganar el sustento es la antítesis de robar. Pr. 30. Más adelante en Malaquías 3:10 El eterno pregunta; "¿Robara el hombre a Dios?" El añade, en los diezmos y en las primicias.

Desde el punto económico, Dios demanda estas dos cosas para evitar el robo. Es uno de los únicos pasajes bíblicos donde Dios pregunta si el hombre le puede robar, y El Dios mismo contesta por el profeta. El robo mínimo tiene el mismo valor del robo grande ante Dios. Hoy se da mucho robo en el contexto eclesial. Posiblemente muchas personas caen en esta trampa por reconocer esta doctrina. Atraves de la piratería, o robo intelectual; también el plagio se da mucho, especialmente en el internet, donde es fácil cortar y pegar información; pero esto también es robo. Algunos justifican el robo, y argumentan que robarle al rico no es malo, tipo Robín Hood. Sin embargo el robo es robo en todo sentido, atenta contra la integridad de prójimo. Otros dicen que el que le roba al ladrón tiene mil años de perdón, eso no justifica nada la desobediencia de este mandamiento. El robo es pariente de la violencia, porque atenta contra la persona integralmente.

Sodoma y Gomorra, al igual los pueblos de Canaán, se les castigo por ser pueblos donde se practicaba la violencia. Dios no puede tolerar esta clase de pueblos, su justicia es permanente y su castigo inminente. Todo lo que atenta contra la imagen de Dios, que es el hombre, no quedara sin ser castigado. Se justifica las matanzas realizadas por los Israelitas contra los pueblos citados, Dios les había ordenado exterminarlos. Ahora quedaba un ejemplo para ellos, para considerar a su semejante y no aprovecharse de ninguna forma de su prójimo. En el Nuevo Testamento, mostro en su arrepentimiento el deseo de compensar el daño que había hecho a muchas personas al robarles en su puesto como recaudador de impuestos. El prometió compensar con la cuarta parte de lo robado, y devolvérselo a su dueño.

CAPÍTULO NUEVE

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No hablarás falso testimonio contra tu hermano

El Apóstol Santiago le dedica un capítulo a la lengua, como órgano mortal y con veneno satánico. Tiene fuego mortal, gr. Gehena. Solamente el hombre que sabe dominar este mal es perfecto. ¡Cuánto mal ha hecho el mal uso de la lengua!. En todo el recorrer de las santas escrituras se narran males por causa de la lengua, lo poderoso que contiene las palabras que profiere. Que bendición es cuando usamos la lengua para trasmitir la palabra de Dios. Se nos es solicitada que siempre digamos la verdad. Cuando hablamos más que la verdad y solo la verdad nos volvemos personas veraces. Cuan poderosos nos volvemos cuando hacemos uso solo de la verdad, la verdad que edifica a la humanidad, esa verdad que es la palabra de Dios. Jesucristo dijo: "Conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres","Tu palabra es la verdad", S. Jn. 8:32; 17:17. Toda la escritura inspirada es la verdad de Dios.

A los israelitas se les pedía que en todo negocio tuvieran que tener como base o constancia dos o más testigos. Jesucristo lo volvió a recalcar en sus enseñanzas. En el mal uso de la lengua esta; el chisme, el rumor, la difamación, etc. Sócrates tenía un principio cuando alguien quería difamar a algún su amigo, les preguntaba; ¿Es importante lo que vas a contar?, ¿Te consta?. Ante tales interrogantes desistían en contar alguna difamación mal fundamentada. San Pablo le recalcaba a Timoteo; "mantente puro, y no comunique las obras de las tinieblas, mas redargüidlas".

La clave para ser un hombre perfecto está en la lengua, es allí donde hay un gran poder para edificar o destruir las relaciones entre los seres humanos. Vale la pena saber hacer uso de nuestra lengua, con ella podemos bendecir a Dios y a nuestros semejantes. Con las palabras positivas podemos incentivar a una persona desanimada o con baja autoestima.

¿Porque, entonces es pecado andar chismeando o difamando a nuestro semejante?. La respuesta es porque nuestro semejante es la obra de Dios, es el siervo ajeno nuestro, y siervo de Dios. El Señor lo reclama. Daña su autoestima al fomentar propaganda negra contra su persona. ¿Pero si es verdad lo que se dice de él, aunque sea malo?, el consejo sabio es platicar con él a solas, siguiendo el principio de Gálatas 6. "Vosotros que sois espirituales restaurad al tal con el espíritu de de mansedumbre". En génesis 9:21,25, se registra una escena, por causa de la difamación de la desnudes de Noé, un descendiente es maldecido. La difamación trae consigo maldición. Entonces, debemos de trabajar en esta área de nuestra vida y hacernos el compromiso de usar mejor nuestra lengua utilizando palabras para bendecir, no calumniemos, ni chismeemos.

CAPÍTULO DIEZ

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No codiciarás nada ajeno que sea de tu prójimo

"No codiciarás la casa de tu prójimo, no codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su criada, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo." 20:17

Este mandamiento está ligado con el seis y ocho, ya que trata del respeto al prójimo y darle su dignidad como persona. Es vital ver que entre los bines del prójimo estaba su mujer. No por el hecho de ser ella comparado con un objeto, sino como dándole valía, no pasaba desapercibida su persona como parte del hombre. NO se le podía codiciar porque el que la codiciara se le ligaba con el pecado de adulterio. Jesucristo lo dijo en el sermón de la montaña; "cualquiera que mira a una mujer y la codicia en su corazón, ya adultero con ella". Se entiende entonces que el codiciar los bienes ajenos es un atentado contra el mismo prójimo; la ley regulaba acerca de prestar un objeto de labranza, se debía de devolver lo pronto posible. El No codiciar incluía: 1. la casa de tu prójimo, 2. no codiciarás la mujer de tu prójimo, 3. ni su siervo, 4. ni su criada, 5. ni su buey, 6. ni su asno, 7. ni cosa alguna de tu prójimo. El verso citado apunta a siete asuntos o propiedad del prójimo que debía respetarse porque Dios lo demandaba.

En pocas palabras no se debe atentar contra la propiedad privada del prójimo, porque El es un administrador que Dios puso sobre esos bienes, incluyendo a su propia esposa. Como administrador se le demandaría en un momento hacia el futuro, como administrador o cuidador de los bienes del Señor. La postura del hombre es de administrador, y no como dueño. Se demandaba mucho respeto al tener contacto con las propiedades ajenas, ya que el propietario es el mismo Señor. Este mandamiento demanda mucho respeto a la casa, la mujer, siervo, criada, buey, asno, y alguna otra cosa. Si alguna vez se extraviaba algún elemento de esta lista, se debería cuidar y devolverlo inmediatamente. En esta lista aparece la mujer, no como un objeto de uso o de propiedad, sino un elemento que necesitaba mucho cuido, Dios demanda a cada hombre a la mujer que le dio, como de Él, y el hombre debe cuidarla como un administrador y no como una cosa común.

Qué bien se haría si se considerara y obedeciera este mandamiento. Por un lado el hombre como administrador cuidaría estos elementos de una manera especial, sabiendo que no son suyos sino del dueño de todo bien, El Señor Dios. Por otra parte, el respeto por la administración ajena. Reconociendo cual es nuestro rol, y el de nuestro semejante, cada quien debe cuidar lo que se le ha encomendado.

 

 

Autor:

Lic. Ma. Joel Ching Meletz

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