BLASÓN DE ARMAS: Tronchado por una banda de sinople, engolada en cabezas de dragones de oro, lampasados de gules, con un castillo de oro y la parte baja de plata, con un león de gules, coronado de lo mismo. Interpretación: Estas son "armas parlantes", porque su mueble alegoriza el origen o significado del apellido del titular. TIMBRE: Tres plumas de avestruz. ORIGEN: España.
La citada descripción aportaba bien poco a mi investigación y venía a corroborar mi intuición sobre la tomadura de pelo. Nos hablaba de tres esposas y sólo citaba a dos; de doña María de Padilla dice que Pedro I tuvo cuatro hijos, tres hembras y un varón sin sucesión y de doña Isabel de Sandoval dos varones, uno sin sucesión y otro, Don Diego de Castilla fundador de la línea de Guadalajara. Si habla de la línea de Guadalajara es que hubo otras: ¿Cuáles? ¿Quiénes fueron sus fundadores? De la misma manera, cita a pasajeros del Catálogo de Pasajeros a Indias: habla de un tal Pedro de Castilla hijo de Francisco Persoa y de Doña Isabel de Castilla.¿Por qué cita a éste en particular, cuando hubo muchos otros apellidados Castilla que embarcaron? Por último habla del general y político peruano Ramón Castilla, sin más datos sobre su genealogía. ¿Y por qué no citar a otras celebridades portadoras de este apellido. Verdaderamente parece muy poco rigurosa la supuesta investigación de esta compañía que no merece ser citada. Desde luego información preparada para ingenuos.
Algo vale que cuando me hice con ese supuesto estudio ya tenía en mi poder información y datos suficientes para poder contrastarlo. Por ejemplo, puedo citar un volumen titulado: "Archivos de Andalucía. El Rey D. Pedro I de Castilla y su descendencia. I. Los Marqueses de la Granja, los Marqueses de Campo Ameno, los Condes del Alamo, los Marqueses de Incar, los Condes del Castillo del Tajo, los Marqueses del Vado del Maestre, Familia Sánchez-Arjona". Sevilla.-Tipografía Española, 1918.-Granada núm. 2. Edición de 300 ejemplares por Don Enrique Piñal de Castilla y D. Fernando Carnevali y de Imaz.
En tal obra se explica que está incompleta y que a medida que vayan completando datos irán publicando las demás ramas descendientes de D. Pedro I de Castilla. Como dato los autores citan: "Servirá de base a nuestro trabajo el publicado por el Heraldo de Armas y Cronista de los Reyes Católicos, Pedro de Gratia Dei, inserto en 1790 en el Semanario Erudito de Valladolid, tomos 28 y 29, páginas 222 y 3 respectivamente, titulado Crónica del Rey D. Pedro y su descendencia, que es el linaje de los Castilla, glosada y anotada por diferente autor, que se dice lo fue el Maestre-Sala de los Reyes Católicos, tercer nieto del referido monarca, D. Francisco de Castilla y López de Zúñiga, y que otros autores atribuyen también al Deán de Toledo y así mismo nieto del Rey Don Pedro, D. Diego de Castilla."
De la lectura y análisis de esta obra son muchos los datos que podemos aprovechar: se nos indica, por ejemplo quienes fueron las mujeres de D. Pedro I; el estudio llega hasta finales del s. XIX confirmando la descendencia de los Castilla (al menos de esta rama) del citado Monarca.
En cuanto a sus mujeres, recogeremos lo que nos dicen los dos autores: "El Rey D. Pedro I de Castilla, único de este nombre entre los Reyes de Castilla y León, hijo y sucesor en el trono de D. Alfonso XI y de su mujer Doña María de Portugal, fue casado tres veces.
Contrajo su primer matrimonio, a decir de algunos historiadores, en 1352, con Doña María de Padilla. Dicho enlace se celebró en secreto, y en él permaneció hasta la muerte de la Reina Doña Blanca, mujer segunda (o primera, según se quiera creer) de D. Pedro (de quien no tuvo sucesión). éste reunió Cortes en Sevilla, declarando ante ellas estar casado con Doña María de Padilla, antes de desposarse con Doña Blanca, no habiéndolo hecho público hasta entonces, por temor a cualquier movimiento en el Reino, testificando todo ello por juramento los Obispos de León y de Astorga, y con esto, fueron declarados hijos legítimos, los Infantes D. Alfonso, Doña Beatriz, Doña Constanza y Doña Isabel, habidos entre ambos."
Por último contrajo tercer matrimonio con Doña Juana de Castro y Ponce de León, en la Iglesia de San Martín, de Cuéllar, en abril de 1354.
Además de estas legítimas esposas tuvo descendencia con otras tres mujeres: Doña María González de Hinestrosa, Doña Teresa de Ayala y Doña Isabel de Sandoval.
Los hijos tenidos por el Rey D. Pedro, de diferentes mujeres fueron nueve, de los cuales, sólo de cuatro hubo descendencia, a saber: Doña Constanza, Doña Isabel, D. Juan de Castilla y de Castro y D. Diego de Castilla y de Sandoval. Así tenemos dos líneas varones que aparecen como sucesores del apellido Castilla. D. Juan fue designado en testamento por su padre como heredero de la Corona, caso de fallecimiento de los hijos tenidos de María de Padilla.
Rama de D. Juan de Castilla y de Castro: hecho prisionero este Infante en 1386 por el Rey D. Enrique, su tío, y encerrado en la fortaleza de Soria, contrajo matrimonio con Doña Elvira de Eril y de Falces, hija del gobernador de la citada fortaleza. De esta unión nació D. Pedro de Castilla (y de Eril), Obispo, cuyos descendientes varones fueron: Alonso de Castilla, el Santo, Luis de Castilla Clérigo (hijos de Doña Isabel Drochelín), Sancho de Castilla y Pedro de Castilla (hijos de Doña María Fernández Bernal).
Rama de D. Diego de Castilla y Sandoval: El Rey D. Pedro I de Castilla tuvo relaciones con Doña Inés de Sandoval, Ama que le criaba al Infante D. Alfonso. Fueron sus descendientes: D. Sancho de Castilla y Sandoval y D. Diego de Castilla y Sandoval. Ambos fueron presos por el Rey D. Enrique III, en Carmona y enviado el primero a Toro, dónde falleció en prisión, sin dejar descendencia, y el segundo a Curiel, en cuya prisión permaneció largos años, hasta el 1434, en que por intercesión del Maestre D. Alonso de Luna, con el Rey D. Juan II, fue puesto en libertad. D. Diego casó con Doña Isabel de Salazar y tuvo como descendiente varón a D. Pedro de Castilla y Salazar.
De momento no resumiré aquí el contenido de este libro, tarea que quizá realice más adelante; sólo diré que me ha confirmado muchos de los datos que ya suponía y me ha permitido dar interesantes pasos en mi investigación. Por otra parte he ido recopilando las diferentes referencias o descripciones del apellido CASTILLA que he encontrado en las publicaciones consultadas. Desde luego, no merece la pena reproducirlas todas sobre todo si tenemos en cuenta que apuntan hacia el mismo sentido (descendientes ilegítimos del Rey Don Pedro I de Castilla). Como ejemplo citaré la siguiente:
- en el diccionario de Fernando González Doria aparece: Castilla: apellido castellano. Descendiente ilegítimo del Rey Pedro I de Castilla con Isabel de Sandoval. Probó nobleza en las Ordenes de Santiago, Calatrava, Alcántara y San Juan de Jerusalém. Trae como armas: escudo tronchado por una banda de sinople engolada en cabezas de dragones de oro lampasados de gules; en la parte alta de gules, un castillo de oro aclarado de azur, y en la baja de plata, un león de gules coronado de lo mismo.
En síntesis, para la mayoría de los genealogistas el origen del apellido está muy claro: descendientes ilegítimos del Rey Don Pedro (1). Sin embargo existe una segunda pista (2), que es la que aparece en la enciclopedia LABOR (solamente aquí he encontrado esta descripción), que sería la de los descendientes de Don Tello primer Conde de Vizcaya y hermanastro de Don Pedro I.
Igualmente, merece la pena tener en cuenta una tercera posibilidad (3) ya que los apellidos no siempre derivan de personas. Hay que recodar que los apellidos se fijan en Castilla paulatinamente durante los siglos XV y XVI finalizando definitivamente este proceso con la creación de los libros sacramentales. Hasta ese momento son muchos los casos de vecinos de una zona que al emigrar a otra reciben como apodo uno relacionándoles con su lugar de procedencia. Así, de la misma manera que a vecinos procedentes de Navarra, Valencia, Galicia o Sevilla se les llegó a conocer como "de Navarra" o "Navarro", "de Valencia", "Gallego" o "Sevillano" por que no pensar que a algún vecino de Castilla que hubiese emigrado hacia otra zona se le conociese como "de Castilla" transformándose con el tiempo el apodo en apellido. Sin embargo y después de haber consultado con algún genealogista, si bien no hay que descartar completamente esta posibilidad, parece poco probable que nadie osara tomar como apellido el mismo que portaba en la época una familia de origen real.
Por último y como cuarta posibilidad (4) me referiré a la nota que aparece al final de la descripción del apellido en diccionario genealógico de García Carraffa: En Aragón moró una familia muy extensa del apellido Ruiz Castilla, que no tiene ninguna relación con los descendientes del Rey Don Pedro I, pues el progenitor de ella tomó el segundo apellido para denotar que procedía de la región castellana. Es decir que no debemos perder de vista esta posibilidad, pues bien pudiera ser que alguna familia lo utilizara para denotar su procedencia y con el tiempo haya perdido la primera parte de su apellido para quedarse únicamente con Castilla. Es así el caso de la familia Alonso de Castilla que he descubierto en el pueblo de Puentearenas (Burgos) cuyos descendientes (me consta) hoy se apellidan Castilla.
(Este texto ha sido escrito en 1997. Desde entonces la investigación ha avanzado y estoy en la medida de ofrecer muchísima más información. Espero que en los próximos meses robando algo de tiempo por aquí o por allá pueda actualizar y completar estos datos. En todo caso si tienes alguna pregunta y quieres aportar información, no dudes ponerte en contacto conmigo)
Apellido Castilla
El apellido Camargo tiene un origen toponímico, derivado del nombre del lugar de procedencia de su primer portador. Este linaje es originario del Valle de Camargo (Santander), cuyo nombre tomó por apellido y donde radicó su casa solar primitiva. Ramas de este linaje se extendieron por Castilla y fundaron nuevas casas en las villas de Santillana (Santander), de Castrogeriz y de Roa, en Burgos, de Agreda, en Soria, de Pozal de Gallinas, en Valladolid y en las ciudades de Plasencia (Cáceres) y de Guadalajara.
De la casa de Castrogeriz (Burgos) fueron Gaspar de Camargo y Melchor de Camargo, residentes de dicha villa, que probaron su hidalguía ante la Real Cancillería de Valladolid en los años de 1545 y 1567. De la casa de Agreda, en Soria, procedió el Capitán Diego Gutiérrez Camargo, quien pasó a América y se estableció en la ciudad de Coro (Venezuela) por los años de 1560 a 1570. Este caballero obtuvo matrimonio en Coro, con doña Angela de Fonseca, y fueron padres de varios hijos, entre ellos, doña Mariana Camargo, quien contrajo matrimonio con Mateo Méndez Dávila, y fueron padres de doña María Camargo o Méndez Camargo, quien contrajo nupcias con Francisco Dávalos Chirino. Un notable portador de este apellido fue, el marino español, Alfonso de Camargo, quien deseó explorar la ruta descubierta por Magallanes, organizó una expedición, que fue costeada por el obispo de Plasencia; la expedición salió de Sevilla en agosto de 1539 y en 20 enero de 1540 enfilaba por el estrecho de Magallanes, y a pesar de problemas de tiempo, llegó a las costas de Arequipa, siendo después de Magallanes, el primero que logró esa navegación. Las armas aquí descritas fueron otorgadas a una familia apellidada Camargo, por las correspondientes autoridades de la corona de España.
Blasón de Armas:De sable, con tres puerco espines, de plata, dos y uno. Interpretación:El color sable (negro) denota en la guerra constancia; el puerco espín es símbolo de fuerza contra el acecho del peligro. Timbre: Tres plumas de avestruz. Origen: España.
Autor:
María Ferrer
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