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La respuesta a la frustración en el tirador joven (página 2)


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Estas características constituyen la base de una mejoría del nivel físico, técnico- táctico del deportista pues lo acercan potencialmente a la consecución de las capacidades físicas necesarias para la práctica del tiro. Recordemos que se trata de un deporte que requiere de gran resistencia y muchos de los errores que llevan a bajas puntuaciones se deben a la fatiga.

De esa manera el aumento en las potencialidades físicas llevan al joven tirador a no exponerse constantemente a resultados desfavorables, protegiéndolo del desgaste de sus recursos ante el estrés.

Convenimos con el enfoque Histórico cultural según el cual, los factores biológico y social se dan en unidad e interacción. Por eso, estas modificaciones biológicas son una premisa indispensable pero no suficiente para el desarrollo Psíquico del atleta, convirtiéndose lo sociocultural, dado por la actividad y la comunicación, en un elemento determinante.

Debido a ello no podemos olvidar que cambian también las condiciones externas del atleta, modificación que está relacionada con su inserción social en el mundo, que lo hace miembro de múltiples grupos, aumentando también el número de actividades a realizar y las posibilidades de comunicación junto a la aparición de nuevas exigencias sociales. (2)

El atleta ha acumulado una pequeña experiencia por la exposición a una mayor cantidad de competencias o controles, aspecto este crucial en el desarrollo de su control emocional y volitivo.

Según L. S. Vigotsky, citado por Matilde Sánchez y M. González ¨ La situación social de desarrollo es entendida como aquella combinación especial de los procesos internos del desarrollo y de las condiciones externas que son típicas en cada etapa, y que condicionan la dinámica del desarrollo psíquico durante el correspondiente período evolutivo, así como también las nuevas formaciones psicológicas peculiares que surgen al final de cada etapa ¨. (4)

El joven tirador desarrolla una serie de condiciones internas que forman parte de la situación social de desarrollo, que se traducen en un ¨despegue¨ en las diferentes áreas de la personalidad del joven.

En el área cognitiva se intensifica la atención voluntaria expresándose de manera más eficiente .El joven es capaz de atender incluso a lo que no le agrada pero es importante para él. Existen mayores posibilidades de concentración y distribución, y aumenta la estabilidad e intensidad de este proceso lo que constituye una sustancial premisa psicológica de rendimiento en el Tiro.

La percepción se hace más esencial debido al gran desarrollo de la observación y la profundización del pensamiento teórico –reflexivo. Es capaz de memorizar de manera más voluntaria y avanzada, empleando recursos nemotécnicos y recordando aquello que tiene sentido para él. (2)Este desarrollo cognitivo le permiten ser más eficiente en la actividad deportiva

El elemento más esencial en la esfera cognitiva es tal vez el desarrollo de un carácter más individualizado del pensamiento. Esto supone que el tirador comienza a valorar según sus propios criterios el resultado de sus acciones motrices buscando las explicaciones causales de cada disparo deficiente e imprimiéndole, de manera más personal y activa, cierta dirección a su respuesta ante una frustración parcial. Así le atribuye el origen de sus dificultades a sí mismo, a factores externos o la suerte.

Pérez Lafargue, Alberto plantea que ¨…el atleta debe ser capaz de analizar cada una de sus acciones, tanto técnicas como mentales,  no solo al realizar el disparo como acción final, sino también en el transcurso de las acciones que anteceden al mismo, saber en que momento exacto se encuentra, si debe detenerse, continuar o comenzar nuevamente.¨ (5)

Esto solo es posible de manera eficaz cuando el deportista tiene un desarrollo suficiente de los procesos básicos del pensamiento y la necesaria autodeterminación que se consolidan en la etapa juvenil.

El proceso imaginativo es más creativo debido a ello esta mas capacitado que el adolescente temprano para generar soluciones en las situaciones mas criticas manteniendo su objetivo de lograr cierta marca,lugar o medalla sin caer en la desesperación y en la desorganización de su conducta.

Por otra parte las imágenes se proyectan al futuro y hacia grandes objetivos en la vida que en el caso del tirador pueden relacionarse con la continuación en el deporte, el paso a una selección nacional o el abandono del mismo dedicándose a otra profesión.

Esto se relaciona con los cambios tan significativos que se producen en la esfera motivacional. Aparecen en el atleta la motivación hacia la profesión. La elección de esta constituye un momento esencial y se convierte en el centro psicológico de la nueva situación social de desarrollo. (6). Esta toma de decisión es el resultado de la valoración que hace el joven de sus intereses, capacidades y posibilidades objetivas de hacer realidad sus aspiraciones y de los principales requerimientos de la sociedad. (2). Si el atleta se siente dotado de destrezas deportivas suficientes y tiene a su haber algunos éxitos, puede decidir continuar en esta carrera.

Coincidimos con algunos autores (2), (6) en afirmar que los motivos del joven se hacen estables lo que hace que se centre más en los resultados de su actividad deportiva.

La necesidad de proyectarse al futuro se traduce también en el desarrollo del sentido de la vida. El individuo se preocupa constantemente por sus aspiraciones y su objetivo en la vida. Quedan conformados de este modo algunas formaciones motivaciones tales como los intereses, los valores, las aspiraciones y la Autovaloración.

A pesar de que los jóvenes pueden reflexionar sobre sus atributos como tiradores, ser flexibles e integrar los aspectos disonantes con sus expectativas personales sin dañar su autovaloración, todavía a esa edad, la autovaloración general fluctúa y resulta inconsistente, pues la identidad psicológica aún no se ha logrado plenamente, y el sujeto puede entrar en una crisis derivada de un status impreciso: aún no se ha arribado a la adultez pero tampoco se es un niño. Algunas veces se les trata como niños, mientras en otras ocasiones se les exige una madurez adulta.

Según Savonko, citado por L. G Gonzáles Carballido "… la autovaloración forma la base del nivel de pretensiones, o sea, del nivel de las tareas que el hombre se cree capaz de realizar. Al estar presente en cada acto de la conducta, es un importante componente del control de la misma" (7). Considerar la autovaloración como uno de los pilares fundamentales de la autorregulación, permite comprender que una autovaloración todavía débil no posibilita que el tirador mantenga constantemente una respuesta de persistencia ante los fracasos.

Quizás uno de los aspectos más relevante para el enfrentamiento a situaciones de frustración es el desarrollo de la esfera afectiva-volitiva. El tirador debe manifestar una gran capacidad para autorregularse ante la frustración parcial. Es en la etapa juvenil donde las emociones del atleta se hacen más estables y queda constituida una estructura volitiva que lo habilita para la autorregulación efectiva.

Al final de la etapa quedan conformadas formaciones psicológicas: la concepción del mundo y la conquista de la relativa independencia con relación a las influencias externas, es decir, el desarrollo y la consolidación de la capacidad de autodeterminación.

Conclusiones

Podemos concluir que la edad juvenil se convierte así en una etapa del desarrollo ideal para investigar la influencia de la personalidad en la respuesta a la frustración en el Tiro deportivo debido a que las características del joven tirador deportivo lo acercan a las del tirador adulto. Todavía le resta reafirmar o solidificar las formaciones psicológicas citadas anteriormente y adentrarse en el mundo responsable de la adultez pero esa es una labor que solo el tiempo y un adecuado entrenamiento pueden realizar.

Notas

1. Rudik, P. A. y col. Psicología. Selección de textos., Editorial Planeta.

Moscú, 1990.

2. Sánchez Acosta, Maria. Elisa. y Matilde González García. Psicología general y del desarrollo. Ciudad de la Habana, Editorial Deportes., 2004, pág. 17

3. Sánchez Acosta, M. E. y M. González García op. cit, pág. 18

4. Sánchez Acosta, M. E. y M. González García op. cit ,pág.19

5. Pérez Lafargue, A. Algunos patrones psicológicos en el tiro deportivo. En: Patrón Técnico del Tiro. INDER, Marzo, 2003 Pág.7

6. Domínguez García, L. Psicología del desarrollo: adolescencia y juventud. Selección de lecturas. La Habana, Editorial Félix Varela, 2003.

7. Gonzáles Carballido, L .G La tolerancia a las frustraciones en el deportista Estrés y deporte de alto rendimiento. Art. 6, año8, n. 45, febrero, Bueno Aires. ,2001 Disponible en: .

Bibliografía

Domínguez García, Laura. Psicología del desarrollo: adolescencia y juventud. Selección de lecturas. La Habana, Editorial Félix Varela, 2003

Gonzáles Carballido, Luis Gustavo La tolerancia a las frustraciones en el deportista Estrés y deporte de alto rendimiento. Art. 6, año8, n. 45, febrero, Bueno Aires. ,2001 Disponible en: http://www.efedeportes.com

Gonzáles Carballido, Luis Gustavo. Condiciones internas y actividad deportiva. Variables de indispensable consideración en la preparación psicológica. Revista digital Buenos Aires, año 7, no 43, dic ,2001.Disponible en: http://www.efedeportes.com.

Pérez Lafargue, Alberto. Algunos patrones psicológicos en el tiro deportivo. En: Patrón Técnico del Tiro. INDER, Marzo, 2003

Riera, Maria Antonia. La autovaloración como mecanismo de autorregulación de la personalidad del deportista juvenil, Revista Digital – Buenos Aires – Año 11 – N° 99 – Agosto, 2006. Disponible en: http://www.efdeportes.com/

Rudik, P. A. Psicología. Selección de textos., Editorial Planeta., Moscú, 1990.

Sánchez Acosta, Maria. Elisa. y Matilde González García. Psicología general y del desarrollo. Ciudad de la Habana, Editorial Deportes., 2004

 

Autora:

Lic. Marianela Llanes Valle

Sancti Spiritus, Cuba, 26 de Septiembre del 2006

Biografía: Licenciada en Psicología desde 1999, labora como miembro del departamento de Psicología del Centro Provincial de Medicina Deportiva de Sancti Spiritus y actualmente dirige la Vicedirección de docencia e investigaciones del mismo, además esta diplomada en Bases psicológicas de la actividad física y cursa la Maestría en Psicología deportiva. Ha trabajado con los equipos provinciales de Tiro deportivo y Tiro con Arco

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