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Pigmalion: Efecto, complejo y, la mujer como objeto

Enviado por Felix Larocca


  1. Intermezzo: El efecto Pigmalión
  2. El Experimento de Rosenthal
  3. Basta de experimentos y de leyendas
  4. Mal de Amor…
  5. Pigmalión
  6. El rey es absoluto
  7. ¿Hombre fuerte? ¿Quién es? y ¿Qué es?
  8. En resumen
  9. Bibliografía
  10. Apéndice

"La violación sexual, el incesto, la pedofilia y todas las condiciones conocidas como las "parafilias", son asuntos acerca de los cuales preferimos no escuchar, aunque, como científicos, no podemos ignorar." FEFL en Neurobiología de la Violación Sexual: Lastimar la Mujer para el Sexo Forzoso.

El mito de Pigmalión, descrito en otras lecciones, aquí se estudia de nuevo.

Resumamos la esencia del relato. Pigmalión era un rey de Chipre que, prefiriendo esculpir mujeres bellas — sobre la tarea de gobernar — se enamoró de una estatua de las que él mismo tallara.

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Pigmalión ve su estatua convertirse en mujer por Françoise Lemoyne

Apasionadamente cautivado por su creación, ya que era indiferente a hembras de carne y hueso, dirigió fervorosas plegarias a Afrodita para que le otorgase vida a su obra.

La diosa, conmovida, dio soplo de vida al mármol inanimado.

Pigmalión, la llamó Galatea (lo que significa, blanca como la leche), la desposó de inmediato, procreando con ella un hijo llamado Paphos y una hija, llamada Metarme.

Intermezzo: El efecto Pigmalión

En el campo de la experimentación científica, también tenemos el Efecto Pigmalión, descrito por nosotros en otras lecciones.

Veamos entonces, de qué se trata este fenómeno:

Las expectativas positivas de los padres con sus hijos, de los profesores con los alumnos, y de los dirigentes con sus subordinados tienden a cumplirse.

El Experimento de Rosenthal

En una escuela se administró una prueba de inteligencia a varias clases.

Luego, sin mirar los resultados, el psicólogo Robert Rosenthal seleccionó un 20% de alumnos de cada grupo y dijo a los profesores que ese 20% era de inteligencia superior y que obtendría mayores calificaciones en sus exámenes.

A final de curso, los seleccionados por Rosenthal, habían mejorado respecto a sus compañeros, en catorce puntos por encima de su coeficiente intelectual.

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Se cree que este resultado fue debido a que, cuando se espera más de una persona, se genera un sentimiento de que el individuo seleccionado, posee atributos superiores, por lo que se le ofrece más soporte y se le mantiene mejor informado.

Además, se le requiere más y se le ofrecen mayores oportunidades para hacer preguntas y recibir consejos.

Conclusión: "tenemos los resultados en las personas que esculpimos con nuestra influencia y confianza".

Basta de experimentos y de leyendas

Prosigamos, entonces, con la contribución de hoy

Reconocimiento breve

Dado el hecho de que nuestros lectores conocen mucho acerca de las relaciones triangulares, de los fenómenos para-psíquicos, de los hologramas, de los ritmos biológicos, de las neurociencias y mucho más…

Nos parece oportuno recalcar, que algunos de quienes leen nuestros artículos, por visitarnos, puede que posean más erudición, en ciertas áreas, que muchas personas, que, supuestamente, son doctos y profesionales.

Lo que nos hace sentir muy consumados y felices…

Retornemos al pasado remoto por un instante

En esta oportunidad hablaremos como si estuviéramos sentados en un círculo, rodeados de amigos tribales, durante una noche muy lejana en medio de la selva en el pleistoceno.

La brisa era fresca, la luna plena, no había mosquitos, el fuego era acogedor y, lógicamente no había qué comer o qué beber — porque en la noche no se comía o se bebía.

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La tribu se agrupaba para escuchar las palabras del Exegeta.

Escuchemos lo que éste nos dijera

El mago comenzó, invocando al fuego, las estrellas, al sol, y a la luna. Como hacen los sacerdotes del vudú haitiano — solo que los haitianos, asimismo exhortan al dios de los cementerios.

Restregándose los ojos con el nudillo de sus dedos índices, al Exegeta sonrió y dio comienzo a sus palabras.

"Yo me he percatado de que algunas de nuestras mujeres han sufrido de nerviosismo, de falta de sueño y comen mucho — lo que hacen clandestinamente, porque está prohibido — o comen poco, aunque haya comida de sobra, lo que es raro. Que se sienten tristes y desganadas. Que lloran y no participan.

"Eso no es bueno, porque las priva de la capacidad de contribuir al bienestar común. Es mi deber como Patriarca y Curandero, sanarlas. Pero, esta enfermedad no es como las otras que dan calenturas o que resultan de heridas. Esta enfermedad no tiene causa visible.

"Yo la llamo: Mal de Amor — y no tiene cura…"

"Mal de Amor, y no tiene cura", nos dice el sabio hombre.

No tiene cura. Hipócrates no la menciona, Galeno, y el Vademécum de Merck tampoco lo hacen, pero las criadas de mi casa, que de niño, a escondidas, escuchaba, la mencionaban entre ellas. Los síntomas eran idénticos a los descritos por el curandero de esta parábola.

Mal de Amor…

Claramente, el Mar de Amor se infiere de manera directa, en el mito de Narciso e indirectamente, en la leyenda, epónima de Pigmalión.

La exégesis y la moraleja de este mito

Veamos

Pigmalión era un rey que ignoraba a sus súbditos mientras se dedicaba a esculpir sin que le importara lo que de él se esperaba — que era, simplemente — que gobernara.

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Mal de amor por Francisco Pradilla Ortiz

Soberano caprichoso, que en lugar de reinar, se dedicaba a tallar.

Cincelaba estatuas de mujeres bellísimas, rehusando creer que alguna mujer viviente pudiera ser merecedora de su compañía.

Porque, para ser digna de su aceptación, la mujer en cuestión debería provenir de sus manos de escultor.

Nada sabemos del originador de la leyenda.

Empero, como persona, el cuento nada nos dice de Pigmalión como niño, ni de sus padres tampoco. Nada conocemos de lo que su vida fuera antes de ser coronado como rey.

Parece ser que quien urdiera la fábula pensó, que con sólo describir el drama de una mujer de piedra adquiriendo vida, para satisfacer emocionalmente a un monarca vano, eso bastaría.

Bueno, basta y sobra, como, a continuación, veremos

Pigmalión

El carácter Pigmalión es un hombre narcisista y absorbido de modo absoluto en sus placeres y aspiraciones estéticas. No tiene que competir para obtener sus logros en la vida, ya que, habiendo nacido rey (aparentemente por generación espontanea) nada le queda por alcanzar.

Llegó a la cúpula de sus éxitos por derecho de nacimiento — como hacen los hijos de los privilegiados.

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Nacido con la cuchara de plata…

No tiene por que superarse, ni tuvo necesidad de hacerlo.

El rey es absoluto

En su dominio, no es posible que hubiesen mejores escultores y, no los habrían, porque nadie se atrevería a superar al monarca, como, nos dice Freud, que es el destino del hijo varón temer a superar a su papá…

Como hombre, Pigmalión, fue controversial en sus inclinaciones psicosexuales.

Sólo esculpía mujeres hermosas…

Como persona narcisista, el soberano satisface la fantasía de algunos niños: Ya que da vida ("pare") a un ser viviente que de él proviene. Lo que concibe sin procrear con otra persona.

Y, no tiene por qué hacerlo. La alegoría es generosa, le da como descendiente, una hembra, y, un varón, de los que todos se olvidan. De tal manera, no tiene por qué abrigar miedo de otro que anhele ocupar su turno en el trono. Como el patético Charles de Windsor.

No existe triángulo de Edipo que lo amedrente.

Tuvo hijos, los cuales se mencionan escasamente en el mito. Poco conocemos del destino de Metarme, como poco sabemos del de Galatea, quien, dicen algunas leyendas, terminó retornando a su estado de mármol original…

Donde quizás le fuera mejor.

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El pecado original por Miguel Ángel

Lo que aquí, la leyenda trata de confirmar, es la realidad de que el niño teme superar al más fuerte de sus dos progenitores, en este caso, superar al papá — como aprendiéramos en las relaciones triangulares — y como Freud, nos enseña en el complejo de Edipo.

Este horrible temor de las represalias posibles, que siguen al hijo exitoso, es debido al hecho de quien es triunfante debe de ser castigado por atreverse a superar al ascendente del propio sexo, representante de la figura de Dios…

¡Pobre Paphos!

O se lo expele del Jardín del Edén o se le penaliza, como con Prometeo se hiciera, por robar el fuego de los dioses.

Muchos individuos no logran superar esta crisis normal del desarrollo y se "gradúan" de hombres, convirtiéndose en personas pasivas y dependientes del afecto incondicional de una mujer a quien controlan y dominan emocional e inmaduramente — Con ella, se hacen enfermos e indefensos para aspirar a ser cuidados como las madres lo hacen con sus hijos acongojados.

Otros, por constitución, más agresivos y altaneros, odian a toda mujer, porque la envidian. La odian, porque quisieran ser ellos quienes fueran admirados por otros hombres — encarnando la homosexualidad latente — mientras que pretenden profesar amor e interés por la mujer. (Para leer más: http://www.monografias.com/trabajos88/homosexualidad-latente-fisico-culturista/homosexualidad-latente-fisico-culturista).

Pero, no pueden hacerlo, porque ellos no saben el significado de lo que es el amor para compartirlo con otros.

Sexualmente se creen superdotados anatómicamente y como amantes se creen superiores — pero, no importa lo que, en realidad pretendan — a pesar de sus ínfulas, son y se sienten inferiores.

Como tales, se consumen en los fuegos fatuos de sus falsedades.

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Narciso y Eco por John William Waterhouse

Las relaciones afectivas las establecen como si fueran dominancias absolutas.

Hacen obsequios, pero lo hacen para que sus presentes se conviertan en esclavitud para quienes son recipientes de sus, presuntas "magnanimidades".

Pretenden ser generosos, pero, lo que no logran dar es amor, porque los cofres de sus afectos están vacíos.

Son seres vanos, prepotentes, quienes asimismo son cobardes, porque el temor los aparta del hombre fuerte.

¿Hombre fuerte? ¿Quién es? y ¿Qué es?

Respuesta: Espécimen de apariencia escasa, eso lo define.

¿Cuántos de estos prototipos hemos conocido en la vida? Muy pocos.

No, no son los guapos del mundo, ni los militares que lucen como árboles de navidad cubiertos de medallas insulsas. (Véase mi artículo El Hábito no Hace al Monje en psikis.cl y en monografías.com).

El hombre fuerte se pasa por alto porque, siendo seguro de si mismo, no hace aspavientos ni pregona sus atributos.

El hombre fuerte ama su mujer, protege a sus hijos y permanece esencialmente dispuesto a dar su vida por aquello que venera, sin hacer alardes públicos para que otros sepan — como hacen los fanfarrones — que ellos existen.

El hombre fuerte conoce el amor y sabe que en éste, el sexo es importante — pero que no lo es todo.

Muchas mujeres, ignorando estos conocimientos, se confunden y creen en los cuentos que escuchan de boca de los "Pigmalión", quienes luego las menosprecian, cuando logran seducirlas, dotándolas de imágenes artificiosas.

En resumen

Mensaje a las mujeres incautas.

Mujeres, cuando confronten al Pigmalión que las anhela subyugar — sean o no figuras pétreas — como lo fuera Galatea, antes de adquirir forma humana, no les permitan que de ustedes se adueñen, haciéndolos recipientes de la admiración y del respeto que de ustedes no merecen.

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El triunfo de Galatea por Luca Giordano

Más que nada, cuídense del "amor" de estas personas, porque siempre termina mal, como concluye todo asunto de naturaleza asimétrica.

Acerca del Efecto Pigmalión. Como psiquiatra de niños he tratado tantos jóvenes autistas, víctimas de Asperger, y de trastornos del desarrollo, a quienes sus papás criticaban, llamándolos maricas y tildándolos de lerdos.

Muchos de estos niños fueron exitosos como resultado de su terapia.

Porque, la buena mamá, los protegía, los guiaba y los hacían sentir que, a pesar de las críticas, de los papás confusos y amedrentados, ellos valían la pena.

Porque, una cosa es poder seducir y comprar, y otra es poder ganar el amor incondicional y sincero de una mujer devota.

Proeza que sólo hombres que son realmente fuertes logran.

Piensen… de este otro Efecto Pigmalión, como dividendo adicional.

Fin de la lección.

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Buen padre…

Bibliografía

  • Larocca, FEF: Neurobiología de la Violación Sexual: Lastimar la Mujer para el Sexo Forzoso en monografías.com

  • Larocca, FEF: ¿Qué el hábito no hace al monje?… en psikis.cl y en monografías.com

  • Larocca, FEF: Nature vs Nurture: El Yin y Yang de la teleología aplicado a las ciencias del comportamiento humano… en psikis.cl y en monografías.com

  • Larocca, FEF: La Homosexualidad Latente… en monografías.com

  • Larocca, FEF: Trilogía del amor: El amor, el odio y los celos en monografías.com

  • Larocca, FEF: El amor como paradigma de los sentimientos humanos en monografías.com

  • Larocca, FEF: El Complejo de Pigmalión: El Poder que la Mujer Posee y Desconoce en mailxmail.com

Apéndice

El efecto Pigmalión es uno de los sucesos que, tanto en el ámbito laboral como en el escolar, social y familiar, pueden ser más productivos o contraproducentes. Esto supone, por tanto, algo importante de conocer y estudiar para los profesionales de cualquier ámbito.

El efecto Pigmalión se puede identificar de las siguientes maneras:

  • Suceso por el que una persona consigue lo que se proponía previamente a causa de la creencia de que puede conseguirlo.

  • "Las expectativas y previsiones de los profesores sobre la forma en que de alguna manera se conducirían los alumnos, determinan precisamente las conductas que los profesores esperaban." (Rosenthal y Jacobson).

  • Una profecía auto cumplida es una expectativa que incita a las personas a actuar en formas que hacen que la expectativa se vuelva cierta. (Para leer más: http://es.wikipedia.org/wiki/Efecto_Pigmali%C3%B3n).

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Pigmalión por Paul Delvaux

 

 

Autor:

Dr. Félix E. F. Larocca