- Evolución del turismo internacional en Cuba
- Las principales obras para el turismo en cuba a partir del siglo XIX
- En la actualidad
- Actividad no estatal
- Aplicación en el turismo de los adelantos de la ciencia y la innovación
- Bibliografía básica
"la tierra más hermosa que ojos humanos vieran"
Se reconoce al descubridor español como el primer turista en Cuba y también el primer turoperador pues con él trajo a varios visitantes a nuestro país.
En el Diario del primer viaje de Colón recuperado por el Padre de las Casas, expone toda la belleza de la isla expresando sin saber varios componentes del turismo cubano actual:
• La flora y la fauna
• El clima
• La mar y las playas
• Los puertos
• La isla más hermosa
En los siglos siguientes, Cuba fue el centro de tránsito de numerosas flotas de todo el mundo, recibiendo visitantes de diferentes nacionalidades y con diferentes motivaciones.
A partir de 1860 comienza el desarrollo hotelero en los alrededores de la Bahía de la Habana. En esta época se percibe un aumento creciente del número de visitantes y hoteles en la ciudad, así como la implementación del estilo norteamericano de servicios con habitaciones y comidas.
En la década del 50 se desarrolló una importante carrera de construcción de hoteles para el turismo, llegando a alcanzar en 1958 la cifra de 128 instalaciones hoteleras, siendo las mismas significativas por sus modernas características y buena calidad, todo lo que garantizó una posición de liderato en el sector turístico del Caribe
Con el triunfo de la Revolución en 1959 y el establecimiento de medidas de carácter popular se evidenció inmediatamente la contracción del principal mercado emisor de turistas a nuestro país (Estados Unidos).
Es en este año (1959) que se crea el Instituto Nacional de Industrias Turísticas (INIT).
En 1961 EEUU rompe relaciones diplomáticas con Cuba, hasta ese momento el 90% de los turistas eran norteamericanos, lo que hace que el turismo internacional decayera abruptamente reduciéndose a poco más de 4000 y en los años inmediato subsiguientes no pasaban de 2 o 3 millares, extendiéndose esta situación hasta los años 70.
Lo que hizo que partir de 1959 se le diera prioridad al turismo nacional. La dirección del organismo se concentró en garantizar el disfrute de los recursos turísticos por la población cubana con la premisa "conozca a Cuba primero y al extranjero después".
Evolución del Turismo Internacional en Cuba
Década del 70al 80:
· Con un panorama internacional relativamente favorable y bajo la consideración de exponer los mejores atractivos naturales de la isla, se fue concretando el reinicio del turismo internacional en Cuba, pasando de 2646 visitantes en 1972 a 39700 en 1975.
· El turismo ofreció la perspectiva de que ésta pudiera ser una rama importante de la economía y completara el esquema de desarrollo económico que se proponía el país.
· En 1976 se crea el Instituto Nacional del Turismo (INTUR) en aras de dar un nuevo impulso al turismo internacional, haciéndose sentir su gestión orientadora, de capacitación, comercializadora, publicitaria y de captación de mercados.
· En 1982 se aprueba la asociación del Estado Cubano con empresas extranjeras, lo que permitió recibir recursos financieros foráneos para añadirlos a los que ya se invertían en el sector, cuyos resultados comenzaron a percibirse a finales de los años 80.
Años 90
Hacia finales de la década de los ochenta e inicios de los noventa era evidente para Cuba que, al menos en el corto plazo, no serían el azúcar y el resto de las exportaciones de bienes tradicionales las que lograrían un despegue capaz de anular el desbalance comercial existente.
Sobre esta base se enuncia por la dirección del país el desarrollo del turismo como un objetivo de política y estrategia económica. De esta forma, Cuba enfrentó el reto de emprender el desarrollo de la actividad turística, en condiciones muy adversas e insertadas en un área geográfica altamente competitiva, la caribeña.
En los primeros años de la década de los noventa se implementó un amplio y acelerado programa inversionista en diferentes regiones turísticas del País. Se llevaron a cabo importantes obras hoteleras y extrahoteleras, se desarrolló la actividad náutica, el transporte, las comunicaciones internacionales y la construcción o ampliación de varios aeropuertos.
Durante cuatro años consecutivos (1990-94) se produce una contracción de la actividad económica cubana, entrándose en un proceso denominado periodo especial.
Producto de su interacción con el resto de los sectores y su efecto de tracción, al turismo se le consideró como la locomotora de toda la economía, siendo fuente importante para la recuperación y expansión de una buena parte del sistema económico del país.
Sería la primera vez, en más de dos siglos en los cuales la economía cubana se sustentó en la producción azucarera, que el país entrara en un proceso de recuperación sin pasar por ese sector, le correspondió al turismo esta preponderancia (Ayala, 2001). La prioridad otorgada a la actividad turística a partir de esos momentos debe entenderse como una opción tanto para salir de la crisis como para reiniciar un camino de desarrollo.
El reconocimiento de la actividad turística demandó un reordenamiento de la oferta y el sistema turístico empresarial que más tarde alcanzaría su máxima expresión con la creación en 1994 del Ministerio del Turismo.
Para Cuba, las estrategias para el desarrollo turístico en los inicios de los noventa se concentraron en la captación de nuevos mercados y la creación de productos, nuevos y diferenciados, jerarquizando el medio ambiente y la calidad. La estrategia de desarrollo turístico, se basó fundamentalmente en los siguientes criterios:
· ?Importancia mundial del turismo y sus efectos positivos
· Ubicación de Cuba en un Caribe turístico por excelencia
· ?Cuba ha sido un destino turístico tradicional
· ?Aspectos tradicionales y otros nuevos que se han creado, adecuados niveles de educación, salud y seguridad ciudadana
· Condiciones de reducir o eliminar impactos negativos y desarrollar un turismo sostenible
· Fuerza de trabajo altamente calificada.
El desarrollo turístico alcanzado por Cuba en los tres últimos lustros se refleja básicamente en el significativo ascenso de las llegadas de visitantes al país. Tomando como base el año 1990, se aprecia una proyección sostenida del avance del sector de tal magnitud que le permitió pasar del puesto número 23 entre los países receptores del continente americano al ocho al cierre del año 2005.
Al comienzo de los noventa, Cuba se lanzó al mercado turístico como un nuevo destino. En el período 1990 – 2005, el número de visitantes se ha incrementado en un 13.6 por ciento como promedio anual, lo cual supera los ritmos de incremento que han tenido lugar en el mundo y el Caribe.
Mientras que en 1990 Cuba recibió el tres por ciento de los turistas que arribaron al Caribe Insular, en el año 2005 esta participación se elevó al doce por ciento. En los últimos tres lustros, el país ha recibido 19,8 Millones de visitantes, de ellos 19,5 Millones de turistas, los cuales se desglosan a continuación.5 El crecimiento logrado por Cuba en este periodo explica casi la cuarta parte del incremento de los arribos a esta zona geográfica.
En 1996 Cuba se situó en la lista de países del área del Caribe donde arriban más de un millón de visitantes al año, la conquista de la posición fue muy notable si se tiene en cuenta la dependencia de esta zona geográfica con el mercado de los EE.UU. y con las metrópolis coloniales europeas. El año 2004 significó el logro de la llegada de dos millones de visitantes luego de ocho años de alcanzar el primer millón, y ya en noviembre del 2005 se registró la llegada de los dos millones de visitantes, cifra alcanzada con cuarenta días de antelación en comparación con el año anterior.
Al cierre de 2005, las llegadas en el Caribe aumentaron en un 4,7 por ciento, explicado entre otras causas por un trasvase desde las zonas afectadas por el tsunami, amenazadas terrorismo o por graves epidemias, Cuba y la isla San Vicente encabezaron la lista de crecimiento, con un 12,1 y un 16,4 por ciento respectivamente. Se puede apreciar en la Tabla 1 que, en cuanto a la recepción de turistas, ha sido mayor el dinamismo de Cuba que el de los principales destinos del Caribe Insular.
Tabla 1. Llegada de turistas a los principales destinos del Caribe Insular
Países | 2005 en miles | 2005/2004 en % | Ritmo de incremento promedio anual | ||||
2005/1990 | 1996/1990 | 2005/1997 | |||||
Puerto Rico | 3 654.3 | 3.2 | 2.4 | 3.4 | 1.5 | ||
Rep. Dominicana | 3 690.7 | 7.2 | 7.2 | 6.7 | 6.6 | ||
Cuba | 2 260.5 | 12.1 | 13.8 | 20.5 | 8.8 | ||
Bahamas | 1 514.5 | 4.4 | – 0.2 | 0.7 | -0.8 | ||
Jamaica | 1 478.7 | 4.5 | 2.7 | 2.7 | 2.7 |
Fuente: Tomado de Alfonso Gladis: Tres lustros de turismo en cuba
Las principales obras para el turismo en Cuba a partir del siglo XIX
Se puede decir que hasta el siglo XIX no existió el turismo, tal como se conoce hoy día, no obstante había personas que, por distintas razones, viajaban y se albergaban. A partir de que se estableció a mediados del siglo XVI el servicio de flotas a través del Atlántico con escala obligada en el puerto de La Habana, los barcos que iban llegando procedentes de México, Centro o Sudamérica, tenían que esperar el arribo de los demás, lo que obligaba a hospedarse en ocasiones a miles de personas, contando las tripulaciones. No consta en crónicas de la época la existencia de posadas, fondas u hosterías, pero se debe presumir, que los residentes en la Villa daban alojamiento en sus precarias viviendas a los transeúntes.
En el interior del país la situación para los que viajaban por tierra, era más difícil debido a la inexistencia de caminos, por lo que se exigía que en los caseríos y poblados se mantuviera un bohío con agua y leña, al que llamaban "casa de pasajeros" lo que constituyó el primer intento oficial de dar alojamiento a los huéspedes.
Hasta el siglo XIX aunque La Habana continuó recibiendo innumerables visitas, tanto del exterior como de otras partes de la Isla, no existían propiamente hoteles. El hospedaje continuó íntimamente vinculado con las mansiones señoriales, las casas urbanas que alquilaban habitaciones y los conventos.
La mejora en las comunicaciones por tierra a partir del desarrollo de los ferrocarriles, de la navegación con el advenimiento de los buques de vapor y de la telegrafía, crearon condiciones para el incremento de los viajes, turísticos y comerciales, lo que conllevó a que a partir de la década de los años cuarenta surgieran algunos hoteles en casi todas las villas.
Probablemente el Hotel Telégrafo fue el primero en contar con un edificio expresamente construido con esa finalidad. Se encontraba en el Paseo del Prado esquina a San Miguel y se anunciaba como cerca de los mejores cafés y del Teatro Tacón.
En su propaganda resaltaba la ventaja de poseer baños y de su magnífico restaurante llamado La Vizcaína. Existen referencias de la existencia de este hotel en 1835 y en un grabado de Mialhe, realizado en 1840, se ha podido ubicar este hotel.
Hotel Santa Isabel
El norteamericano coronel Lay, de New Orleans, compró la residencia que había sido del Conde de Santovenia y fundó este hotel a mediados del siglo XIX, y lo transformó en un hotel de nuevo tipo.
Este hotel contó con amplias y aireadas habitaciones, con la novedad además de que empleó por primera vez camareras en el servicio a las habitaciones. En su tiempo fue considerado el mejor de Cuba.
Perla de Cuba
También por el año 1835 en la esquina de Águila y Dragones se anunciaba este hotel con 40 habitaciones para 80 pasajeros.
Hotel La Unión
Este hotel se inauguró en el año 1846 en la calle Cuba no 55 esquina a Amargura, y en el año 1905 se reconstruyó y amplió llevándolo a cinco pisos con 120 claras, cómodas y ventiladas habitaciones… el Hotel de construcción sólida y moderna y de un estilo arquitectónico tan sencillo como elegante, con servicio constante de elevadores. Se le dotó también de instalación eléctrica, servicios sanitarios, teléfonos en cada piso, restaurante en la planta baja y un café cantina. Eran sus propietarios Francisco Suárez y Compañía.
Hotel Inglaterra
Este hotel se construyó en el año 1856 en la esquina de Prado y San Rafael. Se dice que era en ese tiempo el más confortable de La Habana y resaltaba que desde sus balcones se disfrutaba de una magnífica vista de la entrada de la bahía y del Prado en toda su extensión.
En él se hospedó el General Antonio Maceo cuando le permitieron visitar La Habana en 1890.
En el año 1900, a un costo de 300 mil pesos, fue totalmente reconstruido y ajustado a las necesidades de la vida moderna y lujosa, sin disminuir su encanto de la época antigua española. Contaba con 100 habitaciones con baño, teléfono y timbre de servicios; su interior se adornó con losas de exquisitos colores importadas de Andalucía. También se anunciaba que todos los dependientes y porteros hablaban inglés y español.
En el año 1974 el hotel se cerró por el mal estado de su construcción y el 24 de febrero de 1981 se reabrió, después de remozarlo completamente. El inmueble es de planta irregular debido a que su crecimiento fue a costa de edificios aledaños. Su bloque principal tiene tres pisos con habitaciones y en la planta baja están el restaurante y demás servicios propios de un hotel moderno. Cuenta con dos bloques secundarios, de dos y un piso, respectivamente, en los que radican la cocina central y otras instalaciones.
La fachada del hotel es ecléctica y en ella predominan los elementos ornamentales criollos propios de la época, tales como balcones con barandas de hierro fundido, guarda vecino y vitrales.
Hotel Pasaje
Este hotel era propiedad de la familia Zequeira y fue uno de los más lujosos de los inaugurados en esta época. Se terminó en 1877 y estaba provisto de una galería o pasaje cubierto con hierro y cristales, que comunicaba la calle Zulueta con el Prado. Fue muy notable el Pasaje por la galería, pero además por haber instalado el primer elevador hidráulico que se montó en Cuba.
En la década de los años ochenta del siglo XX este edificio, que hacía años funcionaba como casa de vecindad, se desmanteló por su deterioro y en el lugar se construyó la sala "Kid Chocolate" para espectáculos deportivos y circenses.
Hotel Saratoga
Don Gregorio Palacio y Pérez, rico industrial y comerciante, mandó en 1879 a construir este edificio en Prado y Dragones, en la zona de la Muralla, habiendo litigado con los ingenieros Fermín de Muzquiz y Adolfo Suarí por causa de la obra. La planta baja era para comercios en el exterior y almacén de tabacos en su interior, el piso intermedio tenía tres casas independientes y el tercero destinado a hotel o casa de huéspedes. Según el uso del local fueron los materiales de los pisos: mármol, losas de San Miguel, de Bisbal, de Hamburgo o Isleñas Blancas. El edificio remataba la esquina con una cresta y se dice que en el mortero empleado para repellarlo exteriormente se utilizó cemento Portland. Con posterioridad, en 1933, este edificio se convirtió todo en hotel tomando el nombre de Saratoga.
Hotel Roma
La viuda de Almagro mandó a construir en 1881 este hotel, en una de las esquinas más céntricas de la parcelación "Las Murallas" en la calle Teniente Rey entre Zulueta y Monserrate. Se consideraba como un hotel de veraneo y contaba con baños y duchas en las habitaciones, comodidades no muy usuales en ese tiempo. Se conoce que recién inaugurado se le hicieron algunas modificaciones a este hotel dirigidas por el ingeniero Francisco de Albear y que en ellas utilizó cemento Portland. Más tarde esta instalación tomó el nombre de Gran Hotel.
Hotel La Isla de Cuba
En la Calzada de Monte no 45, frente al Parque Colón de la Plaza de Marte, se construyó este hotel en 1888. A principios del siglo XX sus propietarios, los hermanos López, lo remodelaron para adaptarlo a las necesidades modernas. Contaba por ese entonces con 45 habitaciones,18 cuartos de baño, duchas, salón comedor y demás departamentos accesorios.
Hotel Trotcha
En 1850 llegó a Cuba el catalán Ventura Trotcha quien se dedicó al comercio hasta el año 1880, fecha a partir de la cual se dedicó a la compra de terrenos donde construía residencias que después vendía a familias adineradas. En 1886 Trotcha abrió un salón en la intersección de las calles Calzada y 2 en la nueva barriada del Vedado, que se convirtió en sitio de moda para las familias habaneras. El auge y crecimiento del Vedado y la buena acogida que tuvo el salón, hizo que en 1890 Trotcha le construyera dos pisos de madera en los altos con 20 habitaciones, una "suite", servicios sanitarios, baños comunes, cocina, restaurante-bar y rodeó la instalación de preciosos jardines.
Hotel Plaza
Este edificio se construyó en la última década del siglo XIX en la esquina de Zulueta y Neptuno. Tenía dos plantas y lo ocupó el "Diario de la Marina", quien en el año 1902 lo vendió al Marqués de Pinar del Río, que también adquirió todos los solares que quedaban hasta la calle de Monserrate. El Marqués contrató de inmediato con la firma Purdy and Henderson la construcción del hotel, aunque respetando la composición arquitectónica existente la cual sirvió de modelo para terminarlo, aunque parece que para aumentar la cantidad de cuartos se redujeron las dimensiones de las arcadas que faltaban. En 1919 se volvió a restaurar y se le añadió un roof garden en el último piso con salón de baile y restaurante, por lo que se elogiaba al propietario al haber dotado de una distracción más a la Capital.
Ya a mediados del siglo XIX casi todas las ciudades importantes del interior tenían hoteles: El León de Oro, El Ciervo de Oro y El Ferrocarril en Matanzas; Cabarrouy y el Bardino en San Diego de los Baños; el Fargas y el Santa Rita en Isla de Pinos; Villa Clara contaba con El León de Oro; Cienfuegos tenía el hotel Unión; en Trinidad el Niágara; Guanajay con el hotel de Carrera y Co.; en Santiago de Cuba había tres: El Comercio, El Suss y el de Madame Adela Lescailles.
Las fluctuaciones del turismo hicieron oscilar la construcción de instalaciones turísticas. A continuación se muestra el comportamiento del turismo entre los años 1924 y 1958.
Año | Miles de turistas | Porciento 1924-100% | ||
1924 | 31, 5 | 100 | ||
1928 | 62,5 | 198 | ||
1934 | 20,7 | 62 | ||
1938 | 60,7 | 192 | ||
1942 | 17.1 | 54 | ||
1945 | 31,6 | 100 | ||
1949 | 150,1 | 476 | ||
1952 | 188,5 | 598 | ||
1956 | 223,0 | 708 | ||
1958 | 211,8 | 672 |
Obsérvese la disminución durante la crisis de los años treinta, con una pequeña recuperación a fines de esa década y la caída en barrena durante la Segunda Guerra Mundial.
La aprobación en 1920 en los Estados Unidos de la famosa ley Volstead, conocida por "Ley Seca", generó un turismo norteamericano ávido de alcohol y también ve crecer otro tipo de hoteles de ocho o diez pisos con planta rectangular y las habitaciones situadas a ambos lados de un pasillo central, todas con vista al exterior. En La Habana se lleva a cabo la ampliación del Sevilla y se edifican el Presidente, el Lincoln y el Palace, éste con una nueva concepción de apartamentos de lujo para alquilar amueblados al que llamarían Aparthotel.
Hotel Nacional de Cuba
A fines de esta década se construye, en estilo colonial español, el que por años ha sido el hotel insignia de Cuba, el Hotel Nacional de Cuba.
En el centro de un área de jardines de 40 mil m2, contaba con piscina, campos de tennis, y una vista inigualable del océano Atlántico, al estar sobre un promontorio que lo realza. Tenía además cabaret, varios restaurantes, bares, cafeterías, salones para celebrar reuniones o conferencias y una suite Presidencial, destinada a dar alojamiento a los huéspedes del Gobierno.
Después de la Segunda Guerra Mundial se reactiva el turismo, esta vez alentado por el juego y el mercado del amor. La mafia italo-norteamericana se había introducido en Cuba desde la década de los cuarenta, cuando el conocido tahúr Amleto Battisti adquirió el Hotel Sevilla.
El desarrollo de construcciones hoteleras ya en la década de los años veinte se había desplazado del paseo del Prado para el Vedado (Nacional, Presidente, Palace) que en los años cincuenta se reafirma con el Habana Hilton, Colina,Vedado, St'Johns, Capri y Riviera y además cruza el río Almendares hacia Miramar donde se construyen el Rosita de Hornedo (hoy Sierra Maestra), Copacabana, Chateau Miramar y Comodoro.
Estos hoteles estaban actualizados con los adelantos modernos, teléfono y aire acondicionado en las habitaciones, cabaret y sobre todo casinos de juego. Muchos de ellos con piscinas, canchas de hand ball, tiendas, agencias de pasaje y parqueo para automóviles.
También en el período se construyen grandes centros nocturnos, donde se ofrecían fastuosos espectáculos, y, además, contaban con casinos de juego donde se podía perder una fortuna en una noche, estos fueron Tropicana, Sans Souci y Montmartre.
En el interior del país también se desarrollaron algunos hoteles importantes en la década del cuarenta, como el Hotel Residencial (después Cuba Socialista), en Camagüey, con la planta rectangular de los años veinte en La Habana y que funcionó al inicio con el criterio de Aparthotel y en los cincuenta el Gran Hotel de Santa Clara, en esa fecha el mejor y a la vez el edificio más alto del interior del país y el Isla del Tesoro en Nueva Gerona. La línea de ómnibus Santiago Habana construyó dos hoteles pequeños pero modernos en Colón y Ciego de Ávila, para mejorar el servicio a los usuarios de esa vía de transporte.
En la actualidad
La organización del sector turístico se fortalece con la creación del Ministerio de Turismo (MINTUR) en 1994 y la aprobación de la ley No.77 de 1995 para la Inversión Extranjera en la Asamblea Nacional. La misión de este Ministerio es diseñar y ejecutar la política turística a seguir para lograr el desarrollo de este sector a través de la competitividad global, la rentabilidad y la sustentabilidad del mismo; en la actualidad se mantienen estos lineamientos adecuándose según las necesidades existentes.
Las principales regionales turísticas de Cuba en la actualidad son:
El país cuenta con más de 20 000 habitaciones distribuidas entre los diferentes destinos turísticos, por ejemplo: Varadero (33,1%), La Habana (22%), Santa María (10%), Cayo Coco y Guillermo (8,4%), Holguín 8,3%.
El MINTUR se estructura de la siguiente forma:
· Un Ministerio con 14 delegaciones.
· Cinco cadenas hoteleras, más Campismo.
· Cuatro entidades extrahoteleras.
· Siete Agencias de Viajes.
· Dos entidades transportistas turísticas.
· Tres entidades de Tiendas Turísticas.
· Dos empresas de Marinas.
· Cuatro entidades de Apoyo.
· Otros de servicios al turismo.
Cuenta además con 12 oficinas de promoción e información turística y 12 empresas de Turoperación de Havanatur. El 60,9% de sus trabajadores posee Nivel Medio Superior y el 23,4% tiene Nivel Universitario.
Conexión por aire
Cuba está conectada con 51 ciudades del mundo a través de 36 aerolíneas.
Conexión marítima
7 Marinas Internacionales y 3 Terminales de Cruceros
Visitantes internacionales, Arribos de visitantes a Cuba (1990 – 2012)
Principales mercados (2010 – 2012)
Participación extranjera
· Existen 27 empresas mixtas, de ellas 5 mil 592 habitaciones en operación en 14 hoteles.
· Existen 62 contratos de administración firmados con 17 grupos hoteleros extranjeros, lo que representa el 46,8% de las habitaciones del país.
Actividad no estatal
Al cierre del primer trimestre del 2013, existen en el país 2 mil 240 paladares, 6 mil 115 habitaciones que prestan servicios de alojamiento y 950 casas que se arriendan
A estas actividades se integran otras que complementan la oferta turística. Ejemplo: taxis, coches coloniales, venta de artesanías, otras
Comienzan a participar en las instalaciones estatales de servicios turísticos de manera incipiente trabajadores por cuenta propia, como son los organizadores y animadores de fiestas, fotógrafos, entre otras.
Las políticas del país van dirigidas a facilitar un desarrollo del turismo no estatal, como complemento del estatal.
Se prevé además el paso de manera gradual a otras formas productivas de la actividad gastronómica extrahotelera, así como la utilización de otros servicios de trabajadores por cuenta propia en las instalaciones turísticas.
Las agencias de viajes podrán contratar con prestatarios de servicios turísticos no estatales. Se ofrecerán diferentes tipos de servicios de las entidades turísticas estatales, a las no estatales, como alquileres, ventas de productos, capacitación, promoción, entre otras.
Dado respuesta al Lineamiento No. 262 de la Poltitica Económica y Social del Partido y la Revolución: La actividad no estatal en alojamiento, gastronomía y otros servicios, se continuará desarrollando como oferta turística complementaria a la estatal.
Aspectos generales del destino
· El 95.6% de los encuestados recomienda el destino Cuba .
· El 94,6% de los encuestados manifiesta su Satisfacción General cn ete destino.
Mercado Interno
Más de 1 millón de ciudadanos cubanos disfrutaron sus vacaciones en diferentes regiones turísticas del país, de ellos se alojaron en instalaciones hoteleras más de 570 mil, mientras que otros 830 mil optaron por el Campismo Popular.
Aplicación en el turismo de los adelantos de la ciencia y la innovación
Actualización de todos los trabajos investigativos y resultados científicos, a fin de controlar cómo ha sido su aplicación y posible generalización.
Intercambio con las Facultades de Turismo del país, aplicación de resultados científicos, trabajos de diploma y las nuevas tecnologías.
Bibliografía Básica:
1. Martín Fernández, Ramón: Principios, Organización y Practica del Turismo. Tomo 1. Paginas de la 120 a la 124.
Bibliografía Complementaria:
1. Alfonso Nichar, Gladys: Tres lustros de turismo en Cuba
2. De las Cuevas Toraya, Juan: Las principales obras para el turismo en Cuba a partir del siglo XIX.
Material Complementario:
1. Abad Alfonso, Annayka: Etapas del desarrollo del turismo en Cuba.
2. CETUR, UH: Glosario Turístico
3. Conferencia del Ministro de Turismo de Cuba a estudiantes y profesores de la Facultad de Turismo de la Universidad de La Habana, 2013.
Autora:
Dra. Lourdes Cisneros Mustelier
Facultad de Turismo
Universidad de La Habana, Cuba