El papel de la contabilidad frente a los diversos problemas de índole social de nuestro entorno
Enviado por javierchacon1984
¿La Contabilidad como ciencia realmente está resolviendo problemas? La Contaduría Publica es una profesión que debería cumplir siempre una función social, dado que desde un principio se hace la categorización de que nuestra contabilidad pertenece o forma parte de las ciencias de carácter social y humano existentes. Frente a la problemática planteada de si realmente la contabilidad como ciencia esta resolviendo problemas, la respuesta va a ser evidente a razón de la inclinación u orientación que ésta está teniendo mediante el favorecimiento y los diversos beneficios que están obteniendo los grupos de poder y de alto rango social como son aquellos que tienen como fin primordial la constante acumulación de riqueza.
Esta orientación vaga que últimamente se le ha querido dar a nuestra práctica contable es la que atenta contra las líneas y principios de igualdad poblacional, lo que en ultimas esta dejando como consecuencia la miseria y el hambre de muchos ante una desintegración social y un desequilibrio en el bienestar y en la calidad de vida de las diferentes comunidades participes en nuestro entorno, en las cuales se reflejan cada día mas las pocas oportunidades para unos y el fortalecimiento financiero y monetario de otros.
Si bien, nuestra ciencia no esta desempeñando ese actuar que se le demanda a gritos, lo mas triste de ello es la pasividad con que nuestros contadores toman esta preocupante situación, inexplicablemente nuestros contables no han sido conscientizados del papel social que su actuar contiene frente a las implicaciones que el mismo conlleva en momentos en que estos solo procuran la protección de intereses particulares ignorando en ellos los colectivos y el bienestar social del pueblo. Es decir, los Contadores Públicos solo le están cumpliendo a sus empresas y al Estado en materia legal y tributaria, hasta tal punto que la existencia de la Contabilidad este radicando en cumplir una obligación impuesta por el Estado de utilidad para el mismo desde la orientación tributaria que se le de, al saber cual será la proporción de impuestos que ira a recibir para cada vigencia fiscal y en velar porque existan unos rendimientos periódicos de gran cuantía para sus socios y accionistas, hablan do ya de los entes económicos, emitiendo de esta manera solo información de utilidad gerencial, entonces; ¿Es así como se contribuye a resolver y a dar soluciones a problemas sociales de índole macroeconómico como los que se están presentando?.
No podemos culpar únicamente a nuestros profesionales de la Contaduría Publica, si bien, hasta hoy solo habían sido unos objetos de la orientación de nuestra ciencia, como lo dije anteriormente, falta en estos un grado de concientizacion en cuanto al vinculo social y humano que tiene nuestra profesión con el entorno evolutivo en que esta opera. Un punto un tanto critico y defectuoso que a la vez debilita el prestigio contable ante otras ramas, disciplinas y ciencias es la ausencia que se esta presentando en los profesionales de nuestra área, al carecer estos de una formación integral con diversas orientaciones que vayan mas allá de lo financiero, de lo gerencial, de lo tributario y de la minimización y maximización de utilidades, se demanda de nuestro entorno características ausentes en nuestros contadores, como lo son una formación ética adecuada con principios y valores, un afán y una necesidad de hacer que cada profesional busque constantemente ese conocimiento que nos hace libres mediante la investigación, y por ultimo, algo totalmente ausente en estos, no es mas que esa mentalidad arbitraria en cuanto a que nunca trabajan en pro de una sociedad, siempre utilizan sus practicas para el beneficio de sus empresas, procurando la generación optima de utilidades, sin prestar gran atención, al asesoramiento de inversionistas para la toma de decisiones acertadas que puedan generar de alguna forma oportunidades para las personas necesitadas.
Mi planteamiento no mas allá de la realidad, no es de pensar que se trata de algo utópico e irrealizable, y mejor aun esta en nuestros manos contadores y en aquellas entidades con facultades para emitir regulaciones que orientan nuestra ciencia social como lo debe ser la Contabilidad.
En este orden , es importante caracterizar nuestra procesión, hacer un examen de sus requerimientos, capacidades y potencialidades, para descifrar de este modo su profundo contenido social, evitando de esta forma que continúe la orientación que ha llevado a que nuestra ciencia no contribuya al progreso de la sociedad, y a que nunca procure el logro de los intereses colectivos, sino a que por el contrario, con su practica solo trate arduamente de obtener e informar los beneficios, rentabilidades y utilidades obtenidas periódicamente por los capitalistas, dueños del poder, a los que solo les importa el que sus recursos económicos arriesgados en cada inversión tengan una supervivencia, un crecimiento y una rentabilidad progresiva en el mercado.
Pretendo con esto, dar argumentos válidos para que con esto, cada contable en su organización genere ideas, sea creativo e innovador procurando siempre el logro de los intereses de sus accionistas, los suyos y los de la sociedad, generando conciencia social, sabiendo de antemano que cada entidad dentro de la sociedad en general cumple como es lógico una función social y conjunta, la cual consiste en combinar los recursos para la producción para que de esa manera se puedan satisfacer las diversas e in cuantificables necesidades humanas.
La contabilidad, como ha sido su tradición a través de la historia, ha tenido múltiples usos, pero siempre se ha privilegiado al comerciante por ser este quien mas la ha necesitado, bien para rendir cuentas a los dueños de capital, o bien al Estado, utilizándose esencialmente como medio de prueba, institucionalizando y dándole prioridad a la información financiera y fiscal.
Es una latente ironía, el que nuestra Contabilidad haya sido reducida para los fines antes mencionados, al poder esta tener una distinta orientación de la que le han dado, sin olvidar que la Contabilidad esta operando actualmente como una disciplina buscando poder convertirse en una Ciencia en la que esperamos, goce de ese carácter social que tanto se le demanda. Es innegable que estamos viviendo en un mundo cada vez más cambiante y exigente. La humanidad a través de los tiempos siempre se ha desarrollado por medio de cambios drásticos, en algunas épocas muy distanciados, y en otras como la actual, muy seguidos. Naturalmente que ese rompimiento constante de paradigmas está enfocado a la búsqueda del mejoramiento de la calidad de vida del hombre, y en ese sentido, la idea actual no es solamente aceptar o adaptarse a dichos cambios, sino también analizarlos, criticarlos y propiciarlos, con el ánimo de participar activamente en la generación de nuevas y mejores posibilidades de subsistencia pacífica.
El Contador Público, en el ejercicio de su profesión, no puede mantenerse al margen de los acontecimientos que se le presentan en un entorno en el que él mismo está inmerso, dado que su perfil no solamente debe ser técnico profesional, sino también humano, espiritual y social.
Por tal razón el área contable, como eje básico de la formación del Contador Público, debe orientarse al desarrollo integral del individuo para despertar su creatividad, su espíritu investigativo y su capacidad de propiciar cambios con un sentido crítico, económico, social y político. La formación integral de las nuevas generaciones de contadores implica hoy la posibilidad de tener una identidad, la posibilidad de desarrollarse en todas las dimensiones humanas y de crecer como pensadores sociales, para entonces sí hablar de un buen ciudadano y del ejercicio responsable de la profesión. El verdadero servicio que puede prestar el Contador Público a la sociedad es anticipar, detectar problemas donde aparentemente no existen; recetar nuevas medidas de higiene tan pronto como sea posible para prolongar la vida saludable y mayor satisfacción de vivir a las empresas.
La cultura contable debe estar enmarcada básicamente en dos dimensiones: · La respetabilidad académica de la contabilidad como saber disciplinal y;· El respeto por la ética en la práctica de la profesión contable, dada la gran responsabilidad social y ecológica que implica hoy su ejercicio. No es suficiente descubrir que tenemos capacidad, talentos y aptitudes con las que nacemos, también debemos contar con una visión clara de formarnos como personas autónomas y buenos ciudadanos, de altas calidades morales, antes que como profesionales que han asimilado solo habilidades y destrezas mediante el aprendizaje y la apropiación de esta u otra competencia aislada de las dimensiones del desarrollo humano. Decir contabilidad hoy no es solo contabilidad financiera; un contador que solo sepa de contabilidad financiera, ni de contabilidad sabe. No es un contador competente, en el marco de la teoría moderna de competencias básicas para aprender a vivir y protagonizar. Hoy más que nunca, el compromiso con la realidad está soportado por la investigación y la enseñanza de la contabilidad como ciencia, cuya misión principal debe ser orientada hacia el servicio de la humanidad y como herramienta política de su transformación dada que su utilidad no debe condicionar intereses colectivos. La meta fijada, a través del proceso educativo, debe ser el conocimiento y no un título.
Los nuevos desarrollos teóricos que la comunidad académica ha realizado, continúan sin apropiación consciente tanto de empresarios como de contadores. Ubicar a la contabilidad en el contexto del conocimiento científico con el fin de que responda a los retos que la sociedad y la actividad económica en su dinámica le plantean, implica concebirla como área del conocimiento y darle coherencia al saber (teorías, técnicas, métodos, etc.) que en ella se maneja y produce para apoyar su conocimiento acumulado y la práctica social". (Contaduría).
Así las cosas, debe aportarse conocimiento y no solo adaptar o adoptar y satisfacer las necesidades sociales de un entorno determinado. En el contexto del conocimiento contable, la nueva investigación empírica presenta deficiencias como única y exclusiva línea de investigación; es necesario entonces considerar otras líneas. Esto indica que debe continuarse con la formulación de hipótesis acordes con el entorno contable con el fin de proseguir la labor de construir la teoría general de la contabilidad.
No hay una línea fija de demarcación entre la investigación pura y la aplicada. Las aplicaciones prácticas requieren de investigación pura adicional y muchas ideas buenas para las investigaciones, provienen de la investigación práctica de las ciencias aplicadas. La contabilidad como ciencia social aplicada, debe generar los satisfactores que le permita al estado, comunidades y empresas, resolver algunos de los problemas más apremiantes de Colombia. Para ello es necesario formar a los nuevos contadores y concientizar a los existentes, para atender las actuales demandas; persistir en el enfoque tradicional de formar registradores de datos, confeccionadores de estados financieros, o calculadores de indicadores, es incrementar la deuda social de la contabilidad como ciencia y la contaduría como profesión solucionadora de problemas. De esta forma no podremos hallar nunca en la realidad calidad de vida. Pienso que para la formación de los Contadores públicos, se deberían incorporar en las academias diversos temas como lo son la conceptualización, la interpretación, y la aplicación, enmarcados dentro de un espíritu consciente de humanismo y de investigación, lo cual necesariamente debe dar como resultado el ejercicio profesional, ético y responsable.
En mi opinión, el proceso de aprendizaje por memorización, información y repetición, nada tiene que ver con el desarrollo del pensamiento crítico ni con la generación de nuevo conocimiento. En todo proceso de transformación, están presentes 3 factores fundamentales que son: Entradas (insumos), procesos (transformación) y salidas (nuevos productos), lo cual también aplica al conocimiento; por eso se espera que la academia, a través del proceso de enseñanza aprendizaje, origine nuevos conocimientos, productos de la interacción permanente de las distintas corrientes teóricas con la aplicación crítica y analítica a la realidad.
La sociedad del conocimiento, hija del siglo XXI, no debe ser solo un discurso, debe ser una actitud y una responsabilidad de frente a las nuevas realidades, a las nuevas y múltiples necesidades de información que demandan los usuarios, tratándose del ejercicio profesional de la contaduría pública. Necesidades y problemas que deben ser permanente preocupación de la comunidad contable, con miras a aportarle las mejores y oportunas soluciones si se quiere contribuir con la búsqueda de mejor calidad de vida y convivencia fraternal, justa y pacífica de la especie humana. El contable no debe ir a la universidad para hacerse rico económica e individualmente, debe hacerse rico en conocimiento para ponerlo al servicio de sus semejantes y coadyuvar a la solución de la problemática social por la que atraviesa el mundo.
Otro punto importante para que se logre el carácter social pretendido por nuestra ciencia, es el relacionado con la ética y la fé publica al momento de la preparación para una posterior difusión de los informes contables y su valor agregado desde una orientación no cuantitativa, sino de características cualitativas. Debemos de saber que el Contador publico juega un rol esencial e indispensable para la sociedad en general, ya que este aparece para cumplir esa tarea vital de dar certificación o dar fe publica sobre la información como artefacto de naturaleza jurídica que permite, con el respaldo del Estado, garantizar una adecuada participación de los diversos agentes económicos a través de la toma de decisiones basada en la información. Es necesario que el Contador goce de confianza pública, ya que esta es a la larga directamente proporcional a la capacidad real de este para desempeñar su función social, y esta capacidad esta directamente relacionada con el nivel de conocimientos generales y específicos requeridos en su profesión. Otro punto un tanto distinto pero completamente relacionado con lo anterior, son los diversos cambios a que se ha visto sometida la Contaduría publica desde la perspectiva eficaz de dadora de fe publica la cual ha tenido esa tendencia negativa a su debilitamiento, por diversas causas se podría justificar esta situación, pienso que una de ellas y la mejor argumentada desde un análisis muy objetivo, es la falta de conciencia social que se tiene, sumándole a esto, encontramos que no se tienen los suficientes argumentos y principios éticos necesarios para el ejercicio de la profesión contable, siendo esto una fuente de practicas erradas que benefician en nada la búsqueda incesante para catalogar a la Contabilidad como una Ciencia Social.
Por ultimo, deseo concluir planteando una preocupación adicional con respecto a nuestro papel en la sociedad, debemos de establecer desde un principio que cuando hablamos de relaciones en sociedad, nunca pecaremos al sobredimensionar el papel que cumple la confianza en la sociedad moderna, así, en la esfera de lo publico y en el contexto de la sociedad moderna, la relación que tiene el contador con esta, esta revestida de un carácter especialmente particular, donde la ética profesional se debe corresponder, desde un enfoque social practico, con una moral humanizante, promotora de valores que contribuyan al proyecto histórico de la equidad, a partir del libre desarrollo de la personalidad basada en la autonomía de acción que posibilite una verdadera libertad humana. Frente a esto considero que la educación deberá brindar los elementos imparciales de juicio para dirimir el singular conflicto ético versus esa búsqueda incesante de la maximización del beneficio privado aquella que nos hace olvidar por un momento los fines colectivos trazados por las ciencias humanas.
Conclusiones Para lograr esa categorización de la Contabilidad como una ciencia social, se deben empezar por construir y formar las comunidades científicas y demás grupos y escuelas de investigación y de estudio del medio en el cual nuestras practicas se iraní a realizar, considerando que todos los entornos y modelos económicos son totalmente diferentes y no universales.
La ciencia contable como tal, es capaz de ajustarse a los medios cambiantes, a los entornos, a las necesidades y a sus requerimientos respondiendo afirmativamente a ellos, considerando como primordial la evolución del pensamiento contable, al plantearse dentro de sus limites ese único afán por la profundización conceptual mediante una incansable búsqueda del tan anhelado conocimiento científico.
El bienestar de la sociedad se empezara a sembrar a partir de nuestra ciencia, catalogando a esta desde el inicio como aquella que se encuentra en capacidad de contribuir al progreso, al crecimiento económico sostenible y al desarrollo social objetivos primordiales de la Contabilidad como ciencia social y humana que es.
Bibliografía Contacto disciplinal FENECOP (Federación Nacional de Contadores Públicos). 15 Congreso Nacional de Contadores Públicos.
Autor:
Javier Eduardo Chacon Galvis
Teoria Contable Armenia de 2003