Descargar

El Mayo Argentino y el Mayo Paraguayo


Partes: 1, 2

  1. Introducción
  2. El Paraguay hasta 1811. Breve acercamiento a la historia del Paraguay colonial
  3. La Revolución del 25 de Mayo de 1810. Relaciones con la Provincia del Paraguay. Reacciones
  4. Conclusión
  5. Bibliografía

Introducción

El presente trabajo intenta ofrecer una mirada panorámica sobre el Mayo Argentino y el Mayo Paraguayo. En el marco de los Bicentenarios de nuestros países, siempre es importante traer a la memoria la génesis de nuestras revoluciones para poder comprender los múltiples factores que desembocaron en la que serían la Argentina y el Paraguay actualmente.

Si bien el tema central es la gesta revolucionaria del 14 de Mayo que culmina con la Independencia del Paraguay, ofrecemos una breve pincelada sobre la Historia de nuestro país. El trabajo está estructurado en tres partes: la primera es un breve panorama de la historia del Paraguay hasta las vísperas de 1811; la segunda, arranca con al Revolución del 25 de Mayo y las relaciones con la Provincia del Paraguay. En este punto aparece la figura de Manuel Belgrano, "padre de la Patria", quien tuvo una actuación notable e importante para la comprensión de nuestro tema. El tercer punto trata la Revolución del 14 de Mayo, la nota del 20 de julio, que sería "como" la partida de nacimiento de nuestro país y culmina con el tratado del 12 de octubre de 1811.

EL presente trabajo tiene un carácter introductorio, aunque brinda muchos datos y una lectura que intenta ser crítica de los hechos, aun así, es solo una invitación para profundizar en el estudio y conocimiento de nuestra propia historia.

El Paraguay hasta 1811. Breve acercamiento a la historia del Paraguay colonial

Los comienzos de la historia del Paraguay se remontan a 1517, teniendo por supuesto que los Guaraníes habrían sido pobladores de estas tierras aproximadamente 3.000 AC. Tiene como protagonista a unos de los sobrevivientes de la expedición fallida de Juan Días de Solís, quien fuera "comido" por unos aborígenes de la zona del Paraná. Alejo García motivado por las leyendas que le contaron los aborígenes acerca del "Rey Blanco" que tenía inmensas riquezas y posesiones, se aventuró para cruzar hacia al oeste. Así llegó a lo que más tarde sería llamado el Fuerte Ntra. Señora de la Asunción en 1537 por Juan de Salazar y Espinosa. Es decir, trece años antes, a fines de 1524, García había "descubierto" las tierras del Paraguay y cruzado el Chaco.

Desde 1537 en adelante, Asunción fue poblada por los españoles y nacía así la joven ciudad que luego sería "Madre de ciudades", pues de ella saldrían los fundadores de varias ciudades de la actual Argentina, Bolivia y Brasil; uno de los capitanes fue Juan de Garay que acompañado de un grupo de personas se aventuraron a fundar y poblar villas y ciudades. Buenos Aires es una de las ciudades "hijas" de aquella expedición, refundada en 1580. Por cédula real, algo insólito para la América, Asunción pudo elegir su primer Gobernador: Domingo Martínez de Irala. Los asuncenos lograron el singular derecho de nombrar a sus propios gobernadores durante 182 años, hasta 1735. Tradición que seguiría luego con el primer gobernador criollo elegido: Hernando Arias de Saavedra (Hernandarias), 1616-1618.

La llegada del padre Pedro Fernández de la Torre el 2 de abril de 1556, como el primer obispo de Asunción marcó en el Paraguay el establecimiento de la Iglesia Católica. Irala también fue testigo de la construcción de una catedral, dos iglesias, tres conventos y dos escuelas.[1]

Por Real Orden del 16 de diciembre de 1617[2]se convierte en el centro de una provincia colonial española, separada de la jurisdicción de Buenos Aires y otros territorios[3]Luego se crearía el Virreinato del Río de la Plata en 1776[4]y el Paraguay sería agregada al año siguiente. Más tarde, se creó el régimen de las intendencias en 1782, quedando la Provincia o Intendencia de Asunción del Paraguay como una de las ocho creadas en el Virreinato.[5] Con esta configuración administrativa, política, geográfica y socio-económica llegamos a las vísperas de la revolución de Mayo.

Sin mencionar datos que hacen a la historia de la Iglesia Paraguaya, la obra de los Jesuitas, Franciscanos y Dominicos en la evangelización de nuestra tierra, que exigiría un capítulo aparte, mencionamos hechos importantes que hacen a la configuración del Paraguay a tener en cuenta: la larga tradición autónoma de gobernarse y la "conciencia" del pueblo que se sentía depositaria del "poder" que delegaba a sus gobernantes, influencia de las teorías políticas que habrían llegado a través de los religiosos jesuitas, dominicos y franciscanos. Es el famoso adagio "Vox populi, vox Dei".

Partes: 1, 2
Página siguiente