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Problemática del desplazamiento interno y el desempleo en la ciudad de Cali año 2000 (página 2)

Enviado por jportoca


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Los cambios de comportamiento de los actores armados tienen relación con la dinámica que asume el conflicto, que regularmente se presenta como un enfrentamiento entre combatientes, pero que casi siempre afecta a civiles inermes.

Figura 1

Responsables armados de desplazamiento hacia Cali, 2000

Fuente: Este Estudio.

Hechos causantes del desplazamiento. Las amenazas siguen siendo la principal causa directa de desplazamiento forzado hacia Cali (54.2%), si se tiene en cuenta que en 1997 la participación de este factor era del 50%. Estas amenazas son hechas en forma directa por los actores armados a una persona o a una comunidad para que desalojen una zona so pena de ser ejecutados.

La amenaza es normalmente real, por lo cual la única alternativa es salir. En ocasiones se les intenta imponer la colaboración "voluntaria" o forzada con uno de los actores armados y hay quienes para evitar la salida tratan de adaptarse a la nueva situación. Pero muchas veces, los desplazados asumen la decisión de abandonar las zonas del conflicto y perder sus pertenencias antes de tener que involucrarse en la confrontación.

Las amenazas se realizan por medio de volantes que se reparten en las zonas declaradas como objetivo de agentes del conflicto, en los avisos en lugares públicos, en las notas dirigidas específicamente a una persona, una familia o una comunidad para que desalojen en un plazo determinado la región, o en las advertencias verbales que hacen los sujetos armados cuando realizan un asesinato o participan en una masacre.

Otro factor importante en el momento de tomar la decisión de salida forzada es el miedo que no responde a una amenaza directa o a un evento en particular (10.4%). Este factor debe destacarse puesto que en todas las estadísticas sobre desplazamiento forzado aparece "el miedo" como un hecho generador de migraciones en contextos locales o regionales de conflicto armado y esta circunstancia creciente, que además, denota un subconsciente colectivo de temor ante la violencia, no es considerado en el momento de certificar la condición de desplazado, porque no hay manera de comprobar esta situación. (Arquidiócesis de Bogotá, CODHES, 1999).

Las estadísticas muestran que al igual que en 1997 persisten los asesinatos (12.5%) como causa directa de desplazamiento hacia el municipio de Cali. La participación de los atentados (12.5%) se incrementa en 7.5 puntos con respecto al 97. La coacción para vender o abandonar la tierra tiene una participación del 12.5%, lo cual supone un incremento de este factor como hecho causante del desplazamiento, ya que en 1997 este no fue considerado relevante. (Ver figura 2)

Figura 2

Hechos que motivaron el desplazamiento hacia Cali, 2000

Fuente: Este Estudio.

Procedencia de los desplazados ubicados en Cali. Aunque los desplazados ubicados en

este estudio provienen de diversos lugares de la geografía nacional, es importante resaltar

que el 43.8% de los encuestados se han visto obligados a salir de otros municipios ubicados en el Valle del Cauca. Esta cifra es un poco mayor a la observada en 1997 (37%).

Es relevante la aparición de población desplazada proveniente del Caquetá (10.4%), epicentro del enfrentamiento entre grupos guerrilleros y paramilitares y de una expansión territorial del conflicto armado que empieza a incidir en la capital del Valle del Cauca.

Cabe anotar que tal como lo había previsto el estudio realizado por la Comisión Vida, Justicia y Paz en 1997, la tendencia migratoria de las personas oriundas del departamento del Choco se ha incrementado como consecuencia de la intensificación del conflicto armado en dicha zona, aumentando en 4.3 puntos porcentuales, el número de personas desplazadas de ese departamento.

Los departamentos de Nariño y Putumayo, en comparación con el año 1997 han disminuido su participación como expulsores de población, pasando del 22% al 14.6%. No obstante, esta cifra sigue representando un flujo migratorio considerable hacia la ciudad de Cali.

Risaralda, aparece como un nuevo departamento expulsor de población que tiende a crecer en la medida en que nuevos municipios se incorporan al mapa de las zonas de conflicto armado y/o presencia de grupos al margen de la ley.

A diferencia de 1997, el 4.2 % de los jefes de hogar encuestados se han visto obligados a salir de los departamentos de Guaviare y Meta, como consecuencia de acciones de la guerrilla, de los grupos paramilitares y del temor que originó la zona de despeje de algunos municipios como preámbulo a los diálogos de paz entre el gobierno y la guerrilla de las Farc.

Los departamentos de Antioquia, Arauca, Cauca, Norte de Santander, Santander y Tolima, complementan las zonas de expulsión de los desplazados por la violencia que se identificaron en este estudio. (Ver figura 3).

Figura 3

Desplazados en Cali según departamento de expulsión, 2000

Fuente: Este Estudio.

Edad, Sexo y número de personas desplazadas. Del total de los jefes de hogar encuestados

el 60.4% son hombres y el 39.6% son mujeres. Los jefes de hogar desplazados a los que se refiere este estudio, tienen una edad promedio de 40 años. (Ver figuras 4.4 y 4.5).

Figura 4

Jefes de hogar según sexo, 200

Fuente: Este Estudio.

Figura 5

Edad y sexo de jefes de hogares desplazados en Cali, 2000

Fuente: Este Estudio.

Es importante observar que el 67.2% de los encuestados tiene mas de 6 personas a su cargo, cifra que es bastante preocupante si se tiene en cuenta que en su mayoría son personas desempleadas o con muy bajos ingresos, que con el fin de proteger sus vidas, llegan a la ciudad de Cali generando un aumento de población.

Expectativas de los desplazados. Las expectativas de permanencia, retorno o reasentamiento de los hogares desplazados en Cali siguen determinadas por la persistencia del conflicto armado en las zonas de expulsión.

Quedarse en la Ciudad de Cali como una opción de seguridad frente a la violencia que continua en las zonas de las cuales fueron expulsados, es la decisión de algunas de las familias desplazadas (47.9%), cifra que esta muy por debajo de la observada en 1997 (72%). La decisión de permanecer en Cali depende básicamente de la facilidad de arraigo o asentamiento de estas personas en la ciudad. Un 52.1% de los jefes de hogar encuestados está dispuesto a retornar al lugar de donde fue expulsado por la violencia, aunque la mayoría de ellos lo ven como una posibilidad en el largo plazo.

La explicación de estas expectativas fue aclarada por los propios jefes de hogar desplazados con respuestas que indican la fuerte presión psicosocial que impone el desarraigo.

Hay quienes afirman que desean volver a trabajar en el campo, en tanto que otros se refieren a las necesidades de trabajo, a las dificultades para conseguir vivienda, a la necesidad de buscar otras alternativas y oportunidades, al alto costo de vida en Cali o al aburrimiento, la soledad y la angustia de vivir en la ciudad.

2. CALIDAD DE VIDA PARA LA POBLACIÓN DESPLAZADA EN LA CIUDAD DE CALI, 2000

A continuación se presentan las principales características sociodemográficas y socioeconómicas de la población desplazada en la ciudad de Cali.

Ubicación de la población desplazada en la ciudad de Cali. Los desplazados y en general, los migrantes tienden a ubicarse según su lugar de origen, dando paso a la integración espontánea de "colonias" que reúnen personas cuya identidad es el sitio de partida. Son barrios marginales que se caracterizan por la precariedad de los servicios públicos y el hacinamiento, donde la mayor parte de sus habitantes se dedican al sector informal de la economía, los servicios domésticos, a los servicios varios, a las actividades de reciclaje y a la construcción, entre otras.

El 45.8% de los jefes de hogar encuestados se abstuvo de identificar el barrio de Cali al cual llegó o en el cual se encuentra ubicado actualmente. Esta renuencia puede interpretarse como un signo de miedo o inseguridad dadas las características del desplazamiento. La población que si accedió a identificar su lugar de residencia se encuentra ubicada principalmente en Terrón Colorado (12.5%), San Carlos (4.2%) y Comuneros (4.2%), entre otros. Algunas de estas personas se han instalado en la ciudad por medio de ayudas de familiares o amigos. Estas relaciones facilitan la inserción en la ciudad pues se convierten en los guías principales para el aprendizaje de la dinámica, la distribución y la ubicación urbana.

Nivel de Escolaridad. Los resultados de la encuesta realizada muestran que el analfabetismo caracteriza la mayoría de los jefes de hogar desplazados que se encuentran ubicados en la ciudad de Cali.

No accedieron a ningún tipo de educación formal el 18.8% de los jefes de hogar desplazados, cifra que está un poco por encima de la registrada en 1997 (15%). El 81.3% de los encuestados saben leer y escribir, y el 18.8% no saben leer ni escribir. Es importante anotar que de la totalidad de personas que afirmaron saber leer y escribir, el 69.2% solo tuvieron acceso a los años iniciales de la primaria evidenciándose un nivel de escolaridad bastante bajo y similar al identificado en 1997 (67%).

Las personas que tuvieron la oportunidad de realizar estudios secundarios representan un 20.8% (4 puntos por debajo del registrado en 1997), sin embargo la gran mayoría de estos individuos solamente realizaron los primeros años de esta categoría.

Por otra parte tan solo el 4.2% de los encuestados han realizado estudios universitarios y especializaciones, lo cual tiene su explicación en que la población objeto de estudio, se caracteriza por ser campesinos pobres dedicados a actividades agrícolas.

Se observa que las personas menores tiene mayor acceso a la educación que las personas mayores, debido a que aquellos jefes de hogar que alcanzan los 37 años de edad han realizado estudios de primaria y secundaria y los jefes de hogar con mas de 50 años no han realizado ningún tipo de estudio. (Ver figura 6 y 7)

Figura 6

¿Sabe leer y escribir?, 2000

Fuente: Este Estudio.

Figura 7

Nivel de escolaridad, 2000

Fuente: Este Estudio.

Generación de ingresos. Como lo demuestran las cifras, la mayoría de la población que ha llegado a la ciudad de Cali han sido personas trabajadoras: agricultores (50%), comerciantes (8.3%), jornaleros (4.2%), personas que mantenían un vínculo directo con las labores agrícolas y / o ganaderas y que garantizaban su existencia gracias a su fuerza de trabajo y a los recursos que el medio natural les suministraba. (Ver figura 8).

Su núcleo familiar dependía casi en la totalidad de las labores compartidas donde no había de por medio ningún tipo de formalidad laboral; los menores, así como los adultos tenían muy bien definidas sus actividades.

Figura 8

Ocupación del jefe de hogar antes del desplazamiento, 2000

Fuente: Este Estudio.

El cambio brusco que se presenta en la dinámica urbana se refleja en que la mayoría de las personas no tienen conocimientos, ni experiencias que "les sirvan" en la ciudad. La manera como distribuían el trabajo desaparece y tienen que buscar nuevas formas de vivir y desempeñar nuevos roles. Las formalidades de papeleo que se exigen en la ciudad y en general en los espacios laborales urbanos impide a las familias vincularse a procesos de este tipo que les permitan tener un ingreso constante. Algunas personas han logrado tener vinculación temporal en actividades, principalmente en áreas como la construcción, el acarreo, oficios varios, pero al no mediar ningún tipo de vinculación legal, son fácilmente explotados, quedándose muchas veces sin recibir pago por sus servicios.

De acuerdo con el estudio realizado el 64.6% de los jefes de hogares desplazados no recibió ningún tipo de ingreso durante el mes anterior a la aplicación de la encuesta, cifra que es significativamente superior a la obtenida en el estudio publicado por la Arquidiócesis en 1997.

El ingreso mínimo observado es de $39.000 y el ingreso máximo de $700.000; el ingreso medio es de $223.411,8.

Nivel de desempleo. Los índices de desempleo observados, superan los índices oficiales de desempleo para la ciudad de Cali en el primer trimestre del 2000.

El desempleo de los miembros de hogares desplazados en Cali alcanza el 47.4%, cifra que esta muy por encima de la tasa de desempleo en Cali para el mes de marzo de 2000 (21.4%). Este es el principal indicador de la difícil situación que enfrentan los desplazados en esta ciudad, siendo aun más grave, si se tienen en cuenta las cifras acerca de la vinculación laboral de los jefes de hogar antes del desplazamiento, mencionadas en el numeral anterior.

El empleo informal para los jefes de hogares desplazados es una de las principales alternativas, debido a los bajos ingresos que perciben las familias desplazadas, quienes asumen dinámicas de rebusque como las ventas ambulantes, vigilancia de vehículos y reciclaje.

Estas actividades del rebusque incluyen a todos los miembros de la familia, principalmente a niños, que por otros medios buscan la forma de aportar a los gastos del mantenimiento del hogar.

El hogar, como espacio de trabajo para la mujer, disminuyó del 16.7% al 8.3%, lo que explica el número de mujeres desplazadas obligadas a vincularse a oficios domésticos, ventas ambulantes u otros trabajos informales para garantizar su subsistencia y la de sus hijos.

Nivel de subempleo. La tasa de subempleo para la PEA de los hogares encuestados es del 18.3%. Esta cifra corresponde a la proporción de población desplazada, que cuenta con empleos inestables y / o de baja calidad como las ventas ambulantes, empresas manufactureras familiares, el servicio domestico y los trabajos por cuenta propia.

Dicho fenómeno, se debe a que estas personas, antes de estar en la condición de desplazamiento, se encontraban vinculados a la producción agropecuaria o al trabajo asalariado agrícola, por consiguiente, hoy en día tienen que ejercer labores que no están relacionadas con sus capacidades y habilidades, y que además, se encuentran al margen de las leyes laborales, de la seguridad social, las prestaciones, y en algunos casos sin protección para su integridad física, en adición a la precariedad de sus ingresos.

3. RESULTADOS DE LA ENCUESTA

Ficha técnica. La encuesta dio como resultado una tasa de desempleo del 47.4%, basada en una muestra de 175 personas clasificadas como población económicamente activa, de las cuales 83 se encontraban desempleadas.

Tasa de desempleo: 47.4%

Tamaño de la muestra: 175 personas desplazadas residentes en el área metropolitana de Cali.

Error estándar: 3.77%

Margen de error al 99%: 9.66%

Margen de error al 95%: 7.40%

Intervalo de confianza al 99% nivel de confianza: 37.74% – 57.06%

Intervalo de confianza al 95% nivel de confianza: 40.00% – 54.80%

Aún a los límites inferiores de los intervalos de confianza, la tasa de desempleo de los desplazados no solamente es extremadamente alta bajo cualquier estándar de medición, sino que es considerablemente más alta que la tasa general de desempleo del área metropolitana de Cali.

Comparación de niveles de desempleo. Tal como se ha indicado en el punto anterior, el presente estudio utilizó una muestra de 175 desplazados para determinar el nivel de desempleo existente entre la población desplazada residente en Cali.

El DANE para la determinación de los índices de desempleo y subempleo utiliza un procedimiento similar, tomando al azar una muestra representativa de la población de Cali y su área metropolitana.

La ficha técnica de la etapa No. 107 correspondiente a la encuesta nacional de hogares a Marzo del 2000 es la siguiente:

Tasa de desempleo: 21.43%

Tasa de participación: 65.8%

Tamaño de la muestra: 2262 hogares del área metropolitana de Cali.

Error estándar: 0.67%

Margen de error al 95%: 1.31%

Intervalo de confianza al 95% nivel de confianza: 20.13% – 22.74%

En la medida que los dos procedimientos, el del DANE y el del presente estudio, son similares estadísticamente, es factible comparar las tasas de desempleo, utilizando técnicas de tipo estadístico de amplia aceptación.

Una prueba de hipótesis sobre la diferencia de las dos proporciones, permite desde un punto de vista estadístico establecer si existe una diferencia significativa entre los niveles de desempleo de los desplazados residentes en la ciudad de Cali y la población de Cali como un todo.

Normalmente existe una diferencia de tipo numérico fácilmente observable, lo cual no es necesariamente el caso de la diferencia de tipo estadístico, y por lo tanto se requiere el planteamiento formal de una prueba de hipótesis:

Hipótesis Nula: No hay diferencia significativa entre la tasa de desempleo de los habitantes de la ciudad de Cali y los desplazados por razones de violencia a la misma ciudad.

Hipótesis Alternativa: La tasa de desempleo de los habitantes de la ciudad de Cali es menor que la tasa de desempleo de los desplazados por razones de violencia a la misma ciudad.

Tamaño de la muestra del DANE:

Tasa de desempleo:

Tamaño de la muestra del presente estudio:

Tasa de desempleo:

Tasa de desempleo conjunta:

Estadístico para la diferencia de proporciones:

z* =

Nivel de confianza: 95%

Valor del Estadístico: = -7.838

Región Crítica: z < – 1.645 (basado en la distribución normal para pruebas de una cola).

Decisión: Dado que el estadístico para la diferencia de proporciones se encuentra en la región crítica, se rechaza la hipótesis nula a favor de la alternativa.

Por lo tanto, se concluye que existe una diferencia significativa entre los dos parámetros poblacionales y que la tasa de desempleo general de la ciudad de Cali es en efecto menor que la tasa de desempleo de los desplazados. Consecuentemente, el flujo de desplazados afecta los niveles de desempleo de la ciudad de Cali y es un factor impactante en la determinación de los mismos.

Comparación de los indicadores socio – económicos. El objetivo de aplicar la prueba de homogeneidad es probar si las poblaciones son similares con respecto a ciertas variables o indicadores socio – económicos, por medio de las denominadas tablas de contingencia y de la aplicación de la prueba chi-cuadrado.

Si la similaridad no es aceptada con base en la información estadística obtenida de las muestras, se concluye que ha existido un cambio en el transcurso de los tres años de diferencia entre los dos estudios.

La aplicación de esta prueba requiere el cálculo de un estadístico que se comporta de acuerdo con la distribución muestral chi-cuadrado, la cual tiene un parámetro funcional denominado grados de libertad. Dicho estadístico resulta de comparar las proporciones observadas en las muestras y las proporciones esperadas bajo el supuesto de homogeneidad de las poblaciones. Este cálculo se facilita mediante la elaboración de las denominadas tablas de contingencia.

El estadístico se calcula de acuerdo a la siguiente fórmula:

Donde la sumatoria se aplica para cada una de las celdas de la tabla de contingencia, o representa los datos observados y e los datos esperados.

Hechos causantes del desplazamiento. En el cuadro 1 se presentan los datos observados y esperados para esta variable bajo el supuesto de la hipótesis nula.

Cuadro 1

Datos observados y esperados para la variable hechos causantes del desplazamiento bajo el supuesto de la hipótesis nula.

Datos observados

Datos Esperados

1997

2000

1997

2000

Amenazas

261

26

287

262.79

24.21

287.00

Miedo

57

5

62

56.77

5.23

62.00

Hechos violentos

73

11

84

76.91

7.09

84.00

Otros

130

6

136

124.53

11.47

136.00

521

48

569

521.00

48.00

569.00

0.146780151

X2 estimado

5.367527528

Fuente: Este Estudio.

Región crítica: X2 > 11.34 ( 3 grados de libertad)

Decisión: Como el estadístico calculado con base en las dos muestras no cae en la región crítica se acepta la hipótesis nula y se concluye que los ‘hechos causantes del desplazamiento’ no han variado en el tiempo y continúan mostrando el mismo patrón de comportamiento.

Zonas de expulsión. La prueba de homogeneidad para la variable ‘zonas de expulsión’ se realiza de manera similar a la presentada en el punto anterior.

Cuadro 2

Datos observados y esperados para la variable zonas de expulsión de los desplazados bajo el supuesto de la hipótesis nula.

Datos observados

Datos Esperados

1997

2000

1997

2000

Valle

190

21

211

193.20

17.80

211.00

Dptos cercanos

275

16

291

266.45

24.55

291.00

Dptos lejanos

56

11

67

61.35

5.65

67.00

521

48

569

521.00

48.00

569.00

0.00907

X2 estimado

9.405918472

Fuente: Este Estudio.

Región crítica: X2 > 9.21 ( 2 grados de libertad)

Decisión: Como el estadístico calculado con base en las dos muestras cae en la región crítica se rechaza la hipótesis nula y se concluye que las ‘zonas de expulsión’ han variado en el tiempo y no muestran el mismo patrón de comportamiento de hace tres años. Esto tiene su explicación en la dinámica del conflicto armado, que se ha extendido e intensificado en muchas de las áreas del país.

Nivel de escolaridad. La prueba de homogeneidad para la variable nivel educacional se realiza de manera similar a las presentadas en los cuadros 1 y 2.

Cuadro 3

Datos observados y esperados para la variable nivel de escolaridad de los desplazados bajo el supuesto de la hipótesis nula.

Datos observados

Datos Esperados

1997

2000

1997

2000

Ninguno

78

9

87

79.66

7.34

87.00

Primaria

313

27

340

311.32

28.68

340.00

Secundaria

130

12

142

130.02

11.98

142.00

521

48

569

521.00

48.00

569.00

0.771742802

X2 estimado

0.518207885

Fuente: Este Estudio.

Región crítica: X2 > 9.21 ( 2 grados de libertad)

Decisión: Como el estadístico calculado con base en las dos muestras no cae en la región crítica se acepta la hipótesis nula y se concluye que el ‘nivel ocupacional’ de los desplazados no han variado en el tiempo y muestra la misma estructura de hace tres años. Intuitivamente, no existe razón especial para pensar que el nivel educacional de los desplazados haya variado en tan corto período de tiempo.

Expectativas de los desplazados. La prueba de homogeneidad para la variable ‘expectativas de los desplazados’ se realiza de manera similar a la presentada en el punto anterior.

Cuadro 4

Datos observados y esperados para la variable expectativas de los desplazados bajo el supuesto de la hipótesis nula.

Datos observados

Datos Esperados

1997

2000

1997

2000

Quedarse en Cali

375

23

398

364.43

33.57

398.00

No quedarse en Cali

146

25

171

156.57

14.43

171.00

521

48

569

521.00

48.00

569.00

0.000503249

X2 estimado

12.10358839

Fuente: Este Estudio.

Región crítica: X2 > 6.63 ( 1 grado de libertad).

Decisión: Como el estadístico calculado con base en las dos muestras cae en la región crítica se rechaza la hipótesis nula y se concluye que las ‘expectativas de los desplazados’ han variado en el tiempo y no muestran el mismo patrón de comportamiento de hace tres años. Es muy posible que la situación económica del país haya hecho muy difícil la reubicación y el proceso de asentamiento y ante esa realidad muchos desplazados consideren inclusive regresar a su tierra o lugar de expulsión. Esto le añade un elemento más de dificultad a la ya de por sí compleja situación de los desplazados.

4. IMPACTO DEL DESPLAZAMIENTO EN EL MERCADO LABORAL DE CALI EN EL AÑO 2000.

El efecto que produce el desplazamiento interno por razones de violencia, sobre el mercado de trabajo en el AMC se encuentra determinado principalmente por el comportamiento que ha tenido la población económicamente activa en los últimos años.

El crecimiento de la Población Económicamente Activa. Las cifras de crecimiento de la población económicamente activa, así como las referentes a la población en edad de trabajar y a la población total del AMC reflejan un papel muy importante en el crecimiento de esas variables por el fenómeno de los desplazados. En los tres casos, el AMC presenta tasas de crecimiento mayores al de las otras seis áreas.

En una situación ceteris paribus, se puede concluir que Cali ha recibido una población de desplazados mayor a las de las otras áreas, ya que no existen razones para pensar que las otras variables de tipo demográfico sean significativamente diferentes a las del AMC.

Lo anterior se confirma por lo siguiente:

Los niveles relativos de subempleo son particularmente altos en el AMC, puesto que representan el 29% del total de Colombia, cuando el AMC tiene el 15.6% de la población económicamente activa. La actividad laboral de los desplazados se asocia de manera predominante a la actividad de subempleo.

La composición por genero de la población desocupada indica que las mujeres representan el 23.9% de esa población.

La situación de los desplazados se agrava porque los grupos más afectados por el desempleo son tradicionalmente los menores de edad y las mujeres. Esos dos grupos son particularmente preponderantes dentro de la masa de desplazados.

5. CONCLUSIONES

Los resultados obtenidos en el análisis de la encuesta son concluyentes significativamente, en el sentido que el fenómeno del desplazamiento por violencia genera desempleo en la ciudad de Cali, agudiza el mismo y presenta niveles muy superiores a los del promedio general de la población.

Se pueden determinar claramente los impactos socioeconómicos negativos de las migraciones por violencia como el despoblamiento de zonas agrarias, el crecimiento desordenado de las ciudades y la ampliación de las zonas marginales y urbanas, la recomposición de la tenencia de la tierra y su relación con el narcotráfico, la inestabilidad, entre otros.

El desempleo de los miembros de hogares desplazados en Cali alcanza el 47.4%, cifra que está muy por encima de la tasa de desempleo en Cali para el mes de marzo de 2000 (21.4%). Por lo tanto, existe una diferencia significativa entre los dos parámetros poblacionales. Consecuentemente, el flujo de desempleados afecta los niveles de desempleo de la ciudad de Cali y es un factor impactante en la determinación de los mismos.

Cali ha recibido una población de desplazados mayor a las de las otras áreas metropolitanas, puesto que no hay fundamentos para pensar que las otras variables de tipo demográfico sean significativamente diferentes a las del AMC.

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Palabras clave: Desplazamiento, ciudad de Cali, desempleo, empleo, desplazados, calidad de vida

 

 

AUTORAS:

Luz Adriana Giraldo Yepes,

Paola Andrea Galindo Valdiri,

Economistas de la Universidad de San Buenaventura Cali y Juan C. Portocarrero C.

Docente Universidad de San Buenaventura Cali.

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