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El mercado del azúcar en el Perú


Partes: 1, 2

    1. La caña de azúcar en el Perú
    2. Ficha técnica
    3. Manejo del cultivo
    4. Composición química
    5. Variedades de Caña de Azúcar
    6. Empresas azucareras en el Perú
    7. Consumo

    LA CAÑA DE AZÚCAR EN EL PERÚ

    La caña de azúcar en el Perú se cultiva en la costa, selva y valles interandinos. Sin embargo, es en la costa donde se localiza la mayor área sembrada, debido a que presenta condiciones climáticas y edáficas únicas, que permite sembrar y cosechar durante todo el año, y obtener rendimientos excepcionales.

    El mayor uso industrial de la caña es para la producción de azúcar; que abarca 90 mil hectáreas sembradas, de las cuales el 65% corresponde a 10 ingenios azucareros y el 35% restante a sembradores independientes.

    Históricamente, la producción de azúcar en el Perú, alcanzó niveles superiores a la demanda interna, lográndose la máxima producción en 1974 con 993,088 t. Los cambios introducidos por la Reforma Agraria en 1969, originaron la caída en la producción y productividad, convirtiéndose el país en importador de azúcar a partir de 1980. La reciente reactivación del sector azucarero, debido en parte a la privatización de algunos ingenios, ha incrementado la producción nacional a 877,566 t en el 2002, aunque la demanda interna alcanzó 953,113 t. Los hogares peruanos constituyen el principal mercado del azúcar nacional, mientras que la industria de bebidas gaseosas y laboratorios industriales consumen la mayor parte del azúcar importado, que en el 2002 fue de 138,363 t. Las exportaciones, que en su totalidad corresponden a la cuota americana, descendieron de 462,171 t en 1974 a 62,816 t en el 2002.

    La productividad en caña (127.59 t/ha) y azúcar (13 t/ha), obtenida en el 2002, se sitúa por debajo de la lograda en 1973 que fue 176 t/ha y 18 t/ha respectivamente; si bien, la edad promedio de corte descendió de 18.6 a 15.78 meses en el mismo lapso. En promedio se obtiene 101 kg de azúcar por tonelada de caña, mientras que Colombia, país líder en la producción de azúcar, en el 2001 obtuvo 119 kg por tonelada de caña de 12.14 meses. La actual sobreproducción de azúcar en el mercado mundial, iniciada a comienzos de la década del 90, ha originado una caída sostenida en el precio internacional a US $ 199 y US$ 273 por tonelada de azúcar rubia y blanca respectivamente, por debajo del costo de producción promedio mundial de US $ 320 por tonelada de azúcar de caña. Se estima que en el 2004 la producción nacional superará a la demanda interna, generando un excedente productivo no competitivo en el contexto internacional, considerando el alto costo de producción por tonelada de azúcar que en el país es de aproximadamente US $ 364. Por otro lado, la apertura comercial en el mediano plazo en los países miembros de la Comunidad Andina de Naciones (CAN), que contempla la reducción de los aranceles, obliga a ser más competitivo, incrementando la productividad o diversificando el cultivo de la caña de azúcar hacia otros usos. Una alternativa es la producción de etanol, que en el 2002 tuvo una demanda de aproximadamente 40 billones de litros, como combustible y aditivo de la gasolina, principalmente en los EEUU, los países de la UE y Asia. La demanda potencial de etanol a nivel nacional, para su uso como aditivo del 10% en la gasolina, se estima en 162 mil m3/año. Otra alternativa potencial, es la producción de azúcar ecológica, que esta teniendo una creciente demanda en países desarrollados, como Canadá, Holanda y Dinamarca.

    Entre los principales problemas tecnológicos que limitan el nivel competitivo de la industria azucarera nacional están el uso de variedades que datan de la década de 1930, tales como ‘H32-8560', ‘H37-1933' y ‘PCG12-745', que ocupan más del 90 % del área sembrada actualmente. Así mismo, las prácticas agrícolas que se utilizan en nuestro medio datan de la década del 70 y son aplicadas en forma ineficiente e inoportuna, y sin tomar en cuenta consideraciones de manejo integrado del cultivo ni buenas prácticas agrícolas, aspectos de suma importancia actual. Por otro lado, no se dispone de variedades adaptadas a condiciones de selva y su respectivo manejo técnico para la producción industrial de etanol.

    En dicho contexto el proyecto Caña de Azúcar del INIA tiene como objetivo general contribuir al incremento de la productividad y rentabilidad del cultivo, en el marco de una agricultura sostenible, competitiva y amigable con el medio ambiente. Como objetivos específicos están el obtener cultivares de alta productividad y resistentes a plagas y enfermedades, para la producción de azúcar y etanol; así como desarrollar y validar tecnologías de manejo agronómico integrado del cultivo.

    Para el logro de los objetivos se han planteado subproyectos de investigación relacionados con la introducción y selección de cultivares modernos para costa y selva, el desarrollo de nuevos sistemas de producción, y el manejo integrado de plagas y enfermedades. La sede del proyecto se ubica en la EEA Vista Florida (Lambayeque) y su red de investigación está complementada por las EEA de Donoso (Huaral) y El Porvenir (Tarapoto). Constituyen metas de corto plazo, lograr en 8 años, la adopción de técnicas modernas de producción integrada en campo y la producción de semilla de calidad a partir de plántulas in vitro, libre de enfermedades sistémicas. A mediano y largo plazo, con resultados para el 2014, se realizará la introducción y selección de nuevos cultivares.

    Los aliados estratégicos más importantes serán las mismas empresas azucareras, en cuyos campos se conducirán principalmente ensayos agronómicos, con la participación de tesistas y practicantes. Para conseguir esto, ya se tienen convenios con algunas empresas azucareras como: Andahuasi, Tuman, Casa Grande y las universidades de Chiclayo, Trujillo, que además permitirá acceso a los laboratorios de fábrica para análisis de parámetros de calidad, y en las universidades para el desarrollo de métodos de diagnóstico de enfermedades y crianza de insectos benéficos.

    A partir del 2006, se obtendrán resultados anuales de experimentos agronómicos, que permitirán en el 2010, contar con tecnologías de manejo integrado del cultivo de caña de azúcar, que incluye el uso de semilla de alta calidad para las variedades que actualmente cultiva la industria azucarera. Para el 2014 se dispondrá de nuevas variedades de alto nivel productivo, mejores atributos agronómicos, resistentes a plagas y enfermedades, adaptados a condiciones de costa y selva para la producción de azúcar y etanol.

    Estos resultados permitirán incrementar la producción, cubrir la demanda interna permanentemente y contar con excedentes exportables, con beneficio directo para aproximadamente 492 mil personas vinculadas directa e indirectamente al cultivo, en los diferentes eslabones de la cadena productiva. Por otro lado, con la producción de etanol en selva se estima una oferta de más de 40 mil puestos de trabajo en 10 años y una reducción en la importación de hidrocarburos estimada en US$ 13 millones anuales, contribuyendo a la reducción de la contaminación del medio ambiente.

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