Prólogo
Estoy enamorado de la vida; Y, cantando
estoy a la vida. María de los Jazmines no es una
ilusión, ella es una "hembra" pero de tan sólo
veintidós años. ¿Cómo no amarla si yo tengo
cuarenta y cinco años?
Le canto porque le adoro…
Contemplación del Atardecer
Beatitud
Yo vibro con vos, en letanía, en sensibilidad,
Vibro amando tu rostro de lejanía, que no cubre la muerte;
más bien, nos cubre de ardor:
¡Hay árboles y copihues que yacen en vos!
Yo deseo paz para amarnos al descampado.
Estoy tan enamorado, y no disimulo de este enamorar;
Yo deseo besaros el rostro y continuar por la columna vertebral hasta hallarme
con la quebrada de la "Luna" y besar los contornos y embeber de lo "agrio";
ya que yo soy un poeta carnal.
Quiero amar en sencillez y madurar como los tomates,
Quiero bendecir la tierra por donde vos culminas el caminar,
Quiero contemplar vuestro "pubis" y no "culminar" sino perpetuarme dentro de vos:
¡Acabemos en un instante cósmico para amarnos!
¡Acabemos y seamos felices pero de Dios!
Sinceridad del Amor
Eres luna que, en sencillez, oculta sus rasgos.
Eres una estrella y un acantilado.
Eres ternura, eres mi adorada María de los Jazmines.
Yo te propongo amar y te propongo sensualidad.
Hay cosas que no quiero contarte, sé que eres virgen,
Te sonrojas.
Yo soy un poeta salvaje, que quiere amar.
Si yo pudiera entregarte mi vida
Te daría pétalos
De rosas.
Soy un poeta que ama la vida pero esta vida es María de los Jazmines.
Yo no comprendo la realidad sino es culminando en un beso en tus mejillas,
Yo te adoro y no concibo lo real ni lo boreal;
Concibo solamente un beso apasionado en mi buhardilla.
Dilema de Amor
Yo deseo una paloma para besar el contorno de mi "hembra",
Deseo amantar a mi doncella con mi interioridad:
Con mi saliva, con mi "universo".
Yo amo a mi doncella con tanta fuerza que no culmino en deseo
de paz para su cuello besado y contorneado por mis manos
(Pero esto es una figuración ya que aún no nos conocemos).
La vida tiene muchos caminos y amar es significativamente cualitativo:
Mi amada es bellísima, de senos maravillosos y monte "pubiano" de Grecia,
Ella es rubia y tiene los ojos más verdes del planeta.
Yo la amo porque fue obrera, ahora es millonaria y estudiosa,
la adoro y quiero devorarla a besos,
Yo la amo y, como un tigre, habré de rasgarle la piel con mi lengua,
La añoro por las noches y, contemplando la luna,
pienso en una mariposa fugaz.
Noche Hermosísima
Yo deliro con amar, deliro pensando en los tulipanes, que,
enredándose en vos, emergen de tu ombligo;
Yo espío la tierra y tu figura de la tierra emerge:
Eres como Eva de bella pero sin pecado.
¿Cómo habré de amarte entonces?
Yo no te contemplo, ya que, oculta estás entre los bosques,
Eres tan distante, que estremezco de amor,
Eres dulzura, eres candor, eres sinceridad, pero tiemblas, ya que, a tus catorce años,
de obrera tuviste que trabajar, ¡eres aristócrata y multimillonaria,
ahora!, sin embargo, tus manos están dislocadas por el sufrir:
¡Ven a mí!, que yo sabré aconsejarte.
Una mariposa y una abeja revolotean en tu jardín,
Tú eres la mariposa y tengo un aguijón que clava y descueza la vida.
¿Quieres amarme en desnudez?
Yo podría si tú deseas convertirte en nube y llorar hasta ya no padezcas más de tristeza.
¡Conviértete en nube y cúbreme de besos!;
¡Devórame también tú!;
¡Violéntame, "sexualmente"!;
¡No tengas pavor!;
Soy una abeja que ronronea en su panal.
Canela Nupcial
Piel ¡hebrea!, que busca escanciar el vino en la manifestación del "clítoris".
Hay vida de lenguas que se buscan y hay vida de "sexos" que se compenetran:
Una taza de café con canela reconforta el espíritu; Y, de amanecida, un domingo, prometes devorarme.
¿Me habrás de violentar "sexualmente"?
Eres tan "niña",
Que olvidas hasta tu edad.
Yo te pregunto por tu año de nacimiento y respondes piedra sobre piedra.
¡No sabes!, tienes la cabecita pensando en el tamaño se mi "sexo".
¿Qué es lo que te sucede?, ya te conté, ¿no crees acaso?, son dieciocho violes de amor.
Yo busco embriagarme de tu cintura;
Y, en tu "piscina", revolcarnos hasta, que, agua y "semen" sean divinos:
Hay piel canela en cuando en verano te expones a la mirada de los "curiosos";
Yo soy bastante ególatra y sé, perfectamente, que mi "hembra" ha hallado "macho" dominante.
Tengo no barba porque tú lo deseas (ya que me la he rasurado);
¡En la piscina!, pensando en los tres hijos que ahora deseas.
¡Tres hijos más mis cuatro, hacemos multitud de piel canela!
Yo estoy absorto pensando en Dios en la medida que, sumergidos,
ya no podemos más con el "sexo" brutal del amor.
Yo estoy convencido; piscina y locura, no son nefastos para la, procreación:
¡Tres hijos!, realmente te has vuelto loca…
Pero; cómo eres mi "adorada" yo te habré de dar tres hijos,
pero cuando cumplas cuarenta.
Sensación de Amorío
Yo no te conozco, "conversamos" espiritualmente como el jazz.
Yo sé que eres rubia
Porque tuve una imagen de ti.
¿De qué color tienes los ojos?
Verdes me ha dicho Dios.
Del corazón del Padres has nacido.
Yo soy un pecador, un "monje loco".
Yo quiero abrazarte y llorar.
Yo sé que tú quieres arrodillarte y pedirme disculpas por las mentiras;
Pero, yo también te humillé tratándote de "campesina ignorante".
Yo camino por Chile, tú por Barcelona.
En definitivas cuentas nos habremos de hallar en marzo del 2014,
Ya que el Padre considera, que mis hijos
Son demasiado
Pequeños.
Yo marcharé y habré de sufrir horror.
Tú sabes que estoy enfermo por los golpes que en mi cabeza me dieron mis padres.
Yo fui obrero por un corto tiempo pero no culminé mis estudios universitarios,
Ya que quise dedicarme a la poética.
Yo te admiro, amada…
Tú serás feliz, de eso no me cabe duda,
Pero yo no seré feliz, ya que el dolor de la separación es dolor de avispa.
Quiero contarte un cuento pero no puedo:
Tengo epilepsia sicótica y trastorno de la personalidad.
Mario Uribe golpeo demasiado mi cuerpo;
No mi cabeza; que yo recuerde; Sin embargo, los golpes retumbaron,
Yo me escondía entre mis brazos…
Yo no tengo "familia" más que mis hijos, y Sofía de la Luz y María Teresa Valdés (mis ex mujeres).
Admiro tu belleza de atardecer pero también admiro tu entelequia.
Tú eres doctora en literatura y tienes una maestría en gramática y tres maestrías en "altas finanzas…"
Yo camino con zapatos de poeta por el mundo; ¡humillado y malherido…!"
Sofisticada Membresía
Yo admiro cada cutícula que respira aire de vuestro ser:
Eres tan bellísima,
Como si, primavera y otoño, "copularan",
sagradamente en un catre de madera rústica.
Yo amo a María de los Jazmines,
Yo le deseo físicamente. Sin embargo, yo no le conozco,
Es una ilusión para mí.
Haber amado a mi vírgenes es besar el "pubis" de mi adorada,
Haber contenido el "jade" de mi María de los Jazmines significa no morir,
más bien vivir en la eternidad de Dios.
Yo adoro el "sexo" de mi amada, pero etéreamente,
Le adoro en la significancia de las palabras,
Yo sentencio "Amor" en la medida de nuestras posibilidades humanas.
¡Yo le adoro!, ¡yo le adoro…!
Sensación de "Acabamiento"
Tener amor es tener contención de los copihues,
que, adorándose, ya no fluyen hacia el mar.
Yo habré de amar, pero, habré de contenerme:
Hay raíces y "Luna Menguante" que habrá de ser penetrada en el génesis de todo amar.
Más tarde, el "sexo" lamido y el "himen" perdido.
Yo amo la letanía de la laxitud y el éxtasis de la virgen
que ya no llora por encontrar su enamorado,
Yo estoy cantando por María de los Jazmines,
que, enamoradamente,
se entrega como "hembra" sabia en amores,
pero, ella es una niña de tan sólo veintidós años.
¿Podré resistir tanto amor?
Hoy es lunes seis de mayo y mía será cuando la luna
culmina su viraje de continente a continente,
Todavía faltan once meses para que mi ardor se convierta en pureza;
¡Once meses de poesías…!
Dedos
Me huelo los dedos y la tensión es de luna que arde,
El "sexo" es maravilloso cuando la "luna" arde.
Yo invoco los dedos que penetran y socavan la tierra.
Mar de mi corazón, y tengo un secreto y este secreto es lo cósmico:
Tengo que vivir y "lamer" es mi deseo;
Lamer el "pubis" de mi enamorada.
María de los Jazmines enloquece con mi "baba" y con mi "baba" que huele a dedos "acaba";
"orinándose" de pavor. Ella es virgen y pura;
Y este poemario lo escribo de madrugada.
¡Ay de mí!, estoy enloqueciendo de amor.
Fluido "Vaginal"
Yo admiro el sofocamiento de besaros,
A vos, a la más bella del cosmos.
Yo admiro contemplaros,
A vos, la más erótica del planeta.
Vos eres virgen pero yo se vuestros secretos.
A vos habré de amar y habré de besar la
virginidad hasta haceros sucumbir en éxtasis.
Yo soy de vos y de cada ahorcajada
que dais a escondidas después de soñar con mi "erección" infinita.
A vos deseo pureza y deseo plenitud.
A vos deseo "orgasmos" matinales con el fluido que habéis
de "orinar" con vuestro aniversario.
Sois tan ardiente que me "erecto" como Júpiter o como Urano.
Venus de Orión
Eres doncella, María de los Jazmines, pero doncella ardiente de flujo "vaginal",
Yo me admiro de la bella de vuestro ojazos verdes, y de vuestro "busto";
Yo habré de besaros todo el cuerpo en total libertad y en total liberalidad,
ya que, yo no tengo escrúpulo en declararme no humano.
Yo soy un poeta amador y no quiero desobedecer los mandamientos:
"Amar el cuerpo", "Amarte a vos".
¿Qué deseas de mí?, ¿mi sexualidad es pura?
Y, mi "semen" casto a pesar de que he "copulado" con más de mil mujeres.
Yo os amo y yo sé que pronto cumplirás veintitrés,
Te deseo "sexo", ¡sexo!, ¡sexo!,
pensando en mí antes de que nos reunamos en un crepúsculo sensorial.
Ámame en sencillez sirviendo el café y besándome el cuerpo,
Ámame en sabiduría, sé que eres completamente pura y virgen…
Habré de amaros, habré de besaros,
habré de succionar el "pubis" hasta enloquecer a Orión.
Amorío de María de los Jazmines
Yo vivo amando; Y, amando vivo entre las "lunas" de mi María de los Jazmines:
Ella es dulce como si la miel se derramara entre su cuerpo;
Y, de cada beso, un hijo.
Yo le amo con intensidad; Y, de tal manera, le amo,
que, que ya no es bella, ella es la belleza del "cosmos".
Yo le admiro y le beso los pies;
Y, de cada beso,
hay tanta belleza, que el sol colapsa, después de danzar, ya que ella "danza".
Yo le amo, le adoro, le idolatro…
Tengo un deseo inconcluso, amarla; tengo tanto ardor, que, desfallezco;
Ella es inmarcesible y crustácea; ella es adorada por los peces del mar;
Yo soy el océano y soy el obelisco que penetra el "cosmos";
No te detengas; amémonos incansablemente…
Acariciando la "Luna"
Yo vivo la vida en la irrealidad de las palabras;
Y, de esta irrealidad, son los "pezones" de mi adorada;
Yo habré de amarle y habré de acariciarle en la miel del rocío matinal.
Soy de este mundo; Y de este mundo, es ella.
Yo daría mi vida por sumergirme entre sus "aguas";
Y, de sus "aguas" ya no hay vida; hay raíces.
Sin embargo, yo estoy meditando sobre el fin de la vida.
Yo amo a María de los Jazmines con un ardor de avispa que clama por su avispón,
Yo le amo con la adoración de las estrellas, que,
se propagan por el cosmos; que; de mis manos, expira;
¡Mis manos son el término del universo!; Y del universo, hay vida.
Yo acepto las consecuencias; Y, de cada consecuencia,
yo no comprendo absolutamente nada;
solamente el ardor del amor que poseen las "lilas"
que florecen en el corazón de mi amada.
¡Yo le amo!, ¡yo le adoro!
Fantasía de Amor
Yo estoy dispuesto a amar y a "oler" el contorno del "sexo"
que es como un riachuelo que desborda en océano,
Yo estoy dispuesto a "conquistar" el "himen" y a desobedecer a Dios.
Habré de amar y habré de buscar la eternidad,
Habré de cantar como un niño enamorado, que, esconde secretos "perversos".
Soy la "extensión" de mí mismo; Y de amaros: mi amor es como luna de carmesí.
Yo estoy dispuesto a la locura; y mi locura, es María de los Jazmines.
Yo le adoro con tal energía que no comprendo la realidad:
Soy en espectro una dualidad de rosas;
Y mi amada; es una rosa; que no deshoja; ya que ella es virgen.
Cuerpos
Doy mi amor por amar, doy mi sensualidad, que es como río;
Doy mi ritualidad de amante; doy una flor.
¿Me amas…?
Es una pregunta trascendental.
¿Me adoras…?
De cada pregunta, hay una respuesta; Y de cada símbolo, hay amor.
Este corazón mío; arde; Y de arder,
es como una fogata que quema los ojos verdes de mi María de los Jazmines.
Ella tiene ya esperanza en conocerme,
Yo tengo los ojos café y la piel dorada por lo "salvaje";
La habré de amar eternamente pero tened cuidado,
que de "cornudo", he sido en un millar de oportunidades;
Pero; ella es tan tierna que me da pena…
Día de Festividad
Yo sé que cumples veintitrés y me has pedido "barba" y cabello largo,
Hoy cumples y yo estoy tan lejos en una ciudad que no concibe el amor en la totalidad del ser.
Yo tengo tristeza, tú estás festejando y yo estoy en soledad escribiendo este poema de amor.
¿Qué sucederá con nosotros?
Tú me has juramentado fidelidad,
Pero, yo soy poeta y tengo complicaciones con las "hembras".
Te seré fiel hasta la muerte,
Este es mi obsequio de cumpleaños:
"Doy mi vida por amarte en sinceridad,
Doy mi sinceridad por amarte en agonía.
Yo nada sé, sólo amar en espontaneidad.
¿Qué es lo que deseas…? ¿Amor?
Hay voces que cantan; Y de este canto,
Yo no concibo la realidad; concibo amor.
Deseo amar; Y estoy en soledad; Deseo
Parir como un bovino al acecho
Del matadero. Estoy tan triste…
Sé que eres bellísima, sé que estás
En festividad. ¿Qué puedo hacer
Yo que estoy tan lejos?
Nada puedo hacer, sólo pensar
Que la muerte viste elegantemente".
Altercado de Amor
No hay nada entre ambos, sólo palabras y poesía.
¿Qué habrá más allá de ti? ¿Estrellas?, ¿galaxias?, ¿cruces ardientes?
Yo sé de ti porque tú me has declarado amor (desde los quince años);
Yo sé de ti porque me amas y ahora tienes veintitrés.
¿Qué hacer?, la libertad de amar es insólita,
Hay tanta fuerza en el amor.
Yo deseo prolongarme en el tiempo y deseo festividad de amor.
Tú tienes mucho miedo y el miedo es natural en una virgen que "hiede" a pureza.
Yo no soy puro; yo soy un salvaje, pero, quiero cambiar…
Hay un arrozal en mi mente; Y de esta crueldad, nacen poemas de amor,
para ti, mi adorada; para la luna y el "caos" y las campanas que no retumban en Navidad.
¿Qué será de mí?
¿Qué soy un salvaje?
Silencio de Eternidad en mi Amada
Estoy atormentado por amar a mi enamorada,
Tengo ilusión de amar,
Tengo tantas ganas que yo vibro como un océano de tempestad,
Yo vibro y alucino cantando como una gaviota.
Estoy alegre de vivir cantando al silencio de una habitación donde nada hay,
sólo el canto de un poeta qué ama.
¿Qué será de mí?, yo me pregunto, ya que,
amar a María de los Jazmines es amar en "espíritu";
por tanto; yo no la conozco, yo sólo sé que es muy rubia, alta y de ojos verdes,
pero yo no tengo certeza, yo estoy enamorado de su voz "espiritual".
¡Padre!, dadme certeza, que enloquezco…
Yo amo con Locura
Habré de amar y habré de contemplar los ojos
del amor que no sonríen cuando hay
distancia entre amor y desamor.
Yo estoy acostumbrado al desamor, ya que,
muchas "hembras" me han castigado
con su "olvido". "¡Muchas…!"
Yo tengo tristeza; pero, ahora canto como un
jazmín "al aroma" de María, la que
espera por mí en mi propia casa en un
día que yo desconozco ya que yo soy
"ciego, torvo y mudo"; Y estoy como
mal herido ya que mi enamorada es de
otro "continente"; ¿Y qué habré de hacer?
Yo tengo un huerto de flores; pero mi madre las "cremó" al permitir
que mi padre, en mi infancia, me golpeara;
ahora yo arrastro una enfermedad;
Y es como una raíz sin tentáculos o como un océano sin sal.
Yo quiero cantar, quiero besar los labios "femeninos",
quiero contenerme y estallar: pero…
yo estoy sólo esperando un milagro.
Luciérnaga de Amor
Doy mi vida por hallar ternura,
Doy mis sentidos por hallar a María de los Jazmines en una totalidad "salvaje" de amor.
Yo le busco pero no le hallo; de todos modos, le amo y le increpo
dulcemente como una gaviota que devora el cuerpo de una sirena.
¡Cantad!, ¡amad!
Son símbolos de fraternidad y de hermandad.
Yo habré de amar y habré de contemplar la luna,
al tiempo que, mar y tierra, nos socavan en nuestra primera noche nupcial.
Yo estoy enamorado; Y de mi amor, hay canto de paz;
Hay un jardín tremendamente erótico donde la "lengua"
no se consume; la "lengua" está adiestrada y penetra lo boreal.
Yo Estoy Enamorado
Hay que vivir la vida; Y esta vida, es un pétalo de luz…
La vida es para mí
Amar a María de los Jazmines.
Yo habré de amar su cuerpo y besar sus pies, que son como
caderas besadas por un ángel; o como cascadas poderosas de amor…
Yo amo y estoy dispuesto a amar a María de los Jazmines
en la medida de que yo muero de éxtasis.
Amar significa no amar,
Amar en condolencia de los "muertos".
Yo habré de amar y habré de besar la "vulva";
Estoy loco por amar a María de los Jazmines.
Yo la deseo y me sofoco pensando en su "sensorialidad";
Ella es mía como un torrente que destruye las raíces de la tierra
y convierte en "caos" el camastro en donde los amantes pierden su "virginidad".
Yo ya no soy "virgen" pero llevo décadas esperando por "sorber"
el cuerpo de María de los Jazmines…
Enamorado Estoy
Yo busco el amor y busco el éxtasis de amar,
Yo busco enternecerme y amar a mi adorada;
Yo sé de peces errantes y de gaviotas,
Yo sé de un sol que estremece; Y de vida Sensual.
Habré de vibrar con el "himen" de mi adorada;
Sin embargo, ella no se estremece como el mar; ella sucumbe a las cadenas del amor.
Yo estoy dispuesto a las cadenas que nos corroen en éxtasis "sexual" pero el "sexo"
no es lo primordial, sino las palabras, las caricias y los "mimos" de madrugada.
¿Me amas…?
"Sí…"
¿Quién desea el amor?, desea a "otro…"
Vertiente de Amor
Habré de amar a María de los Jazmines en un otoño que no fenece;
más bien, es como primavera; ya que;
María de los Jazmines es de España y yo de Chile.
Ella me ama y yo le adoro; Nuestro amor es eterno como el canto de las águilas.
Quién desea amor, desea a "otro", en la eterna rueda de la vida:
Hay árboles por doquier; Y de este amor,
hay raíces y campanas y una guitarra cantando amor y flujo "vaginal…"
Yo amo a María de los Jazmines y amo su feminidad;
Hay cosas que son inciertas como la despedida de dos gaviotas;
Hay que amar con eternidad; Y hay que penetrar el cuerpo con "optimismo";
Yo sé amar y sé "lamer" los órganos "genitales" hasta que ya no "halla" más fuerza que un "orgasmo" sideral.
"No cierres las piernas, entreábrelas, que yo vengo para sucumbir al pecado de la carne…"
Orgía de las Nubes
Yo sucumbo a los besos de los pétalos al tiempo, que,
María de los Jazmines, es mi adorada águila, que besa mi cuerpo:
Yo sucumbo al néctar y ella me besa sin detenerse hasta que,
cuerpo y espíritu, son en "virtud" como "el ser"
a la totalidad metafísica de Dios;
Nada hay más que espuma de océano en la boca de María de los Jazmines;
Ella me ha provocado éxtasis como una estrella que sucumbe
a un astrónomo que observa contemplativamente el caos de la vida.
Yo sé que amar, significa besar los "órganos" masculinos también;
María de los Jazmines se habrá de arrodillar;
Y, en suma delicadeza, habrá de sostenerse y habrá de lamer mi "tórax"
que late enorme y abismante como un estallido de aerolitos:
Ella pondrá su boca y recibirá mi espiritualidad:
Tienes que tener mucho cuidado, que no soy un riachuelo, soy una tempestad.
Hay mujeres que sucumben y no son capaces de amar.
Espero que tú puedas hacerlo; ya que yo sí sabré contenerte hasta el extremo opuesto de la vida…
"Éxtasis es lo que necesito y "semen" y "semen…""
Prohibición Absoluta
Me pides perder la virginidad de manera "absoluta" ya que ardo como un cometa.
Te contemplo, habré de besar tus labios,
Habré de enseñarte a besar,
Meteré mi lengua y "contemplarás" mi léxico
hasta quitar mis enamoramientos y convertirlos en "sexo";
Te quitaré las bragas y habré de penetrar, lengua y tórax,
dentro de tu ser femenino;
Más tarde, te habré de penetrar, con tu consentimiento: la vida misma;
Y llegaremos al éxtasis de lo "prohibido".
Yo sé que no tienes temor,
Yo sé que las galaxias arden con este poema,
Pero yo tengo permiso de Dios ya que yo amo
con desesperación tus entrepiernas;
Yo amo tu "Luna Ardiente".
Más tarde, habrás de lamer mi "temperamento";
Y con dulzura, serás, ya no virgen;
Y el "himen" sangriento perderás en una penetración que durará mil años.
Mía serás, absolutamente mía, en el "caos"
de los besos que nos conducen al millar de "orgasmos";
¡Mías!; Y tu nombre cambiará a…
Sentimiento de Piedad
Alondra de Costado
Hay un habitáculo
Como un cisne.
Y hay un río
Que no tiene agua.
Yo deseo padecer de paz y no de "vejes"
en los cactus que nos envenenan de amor.
Amar para mí es contemplas el "pubis";
Sin embargo, la carne,
no es besada despiadadamente, por un poeta;
La carne es etérea…
Un cisne se precipita;
Y la ofuscación;
Es de amar a escondidas a María de los Jazmines:
Ella es contemplativa; Y, de su mirar,
yo hallo rojos labios que habrán de besarme muy pronto.
Yo le amo con intensidad:
Le devoro con mis ganas de besar su "pubis".
Ella tiene rubicundo el "pubis"; Y para mí, es sagrado.
Yo habré de besarle los "senos",
que son como de crepúsculo y habré de quitarle el "corpiño";
Ella desea amor
Y yo deseo
Paz.
Sinceridad
Tienes el rostro de campana y los "senos" de celestial olorcillo a membrillo:
Me lo indicas por "carta", ya que yo no te conozco.
Habré de besar la "corola" que huele a sol; Y habré de quitaros las bragas que huelen a "literatura".
Mi vida es vuestra y mis pantalones se humedecen con imaginar el olorcillo a
"secreto femenino"; que vos; describes, en vuestras cancioncillas crepusculares.
Yo no conozco vuestra letanía, yo os desconozco…
La vida tiene su virtud y el gusto a membrillo me encanta:
Habré de lamer todo vuestro salino atardecer y habré de hallar dulcísimo el sol.
¿Qué carestía habrá para mí?; que deseo penetraros en vuestro más bellísimo secreto.
Sin las bragas os descubro, aún más bellas…
Tempestad de los Sentidos
La urdimbre de vuestro tórax es de trigo:
Yo estoy cantando una canción que huele a "bragas" que comen trigo.
A mí me agrada el trigo y me agradan vuestras "bragas" color universo.
Habréis de amarme en cada crepúsculo que hiede a "semen".
Habréis de "aullar" al anochecer en la medida que los astros os penetran sin compasión.
Yo tengo esperanza y yo habré lamer la "manzana" y comer trigo
y acariciar la urdimbre de vuestro tórax: ¡Allí están vuestros "senos" que son como pepitas de uva!
Soy jardinero y agricultor y poeta que besa las "entrepiernas".
De un punto a otro; hay vida; Y de esta vida; hay una luz, que lentamente se apaga;
Al descubrir, el olorcillo a "sexo"; que por la habitación habrá de propagarse…
¡Es la luna!, diré yo.
Vos, el trigo…
Labios que Colindan
Yo admiro la belleza de vuestros labios en el frenesí de los besos:
Yo deseo amar el contorno de la luna; Y, entregarme al frenesí de las "lenguas" gustadoras.
¿Me amarás…?
Yo suplico amor, yo suplico una noche de escaramuzas con los cuerpos henchidos de dolor,
Yo deseo tanta paz, que venero la "serpiente", que nos reúne en mi propio lecho.
Acepto amar y acepto contener el "origen" de la carne en un frenesí de besos.
¿Quién habrá de amarme en una tormenta de celofán?
Hay esperanza en mí; Hay virtud en mí y colapso de los sentidos:
Yo deseo armonía y deseo un beso en los labios que hieden a luna ardiente:
Bésame, María de los Jazmines, ¡bésame hasta ya no soportar más!
Vos eres mía en el contorno de los labios, que, no culminan en desesperanza, culminan en "sexo".
Sinceridad del Amor
Yo deseo amoríos, que yo no contemplo,
ya que, yo suplico piedad por los besos de María de los Jazmines:
Habré de amarle con tal intensidad que el Nazareno no habrá de ser crucificado;
"el Nazareno vivirá mil años…"
Yo deseo amor y deseo paz para las palomas que emigran de Polonia a Roma;
Deseo convertirme en paloma y besar los pies de María de los Jazmines:
Hay una templanza extrema en mí;
Y esta templanza, es la Antártica que nos cubre de alaridos y de gemidos de amor.
¡Búscame, María de los Jazmines!, entre las rocas del desierto.
Yo habré de amar vuestro silencio y vuestro encuentro de todos los huracanes del planeta.
Eres eterna en mi acontecer de poeta, eres María de los Jazmines en un rapto de locura y de besos de escarlata.
¡Bésame!, eso es todo…
María de los Jazmines es mi Adorada
La luna ya no emerge en el cosmos, la luna emerge desde el corazón de mi amada.
Hay vida de "sensualidad" en el corazón de mi amada y hay vida de "espiritualidad".
Yo le amo y le habré de devorar como quien devorar un pan (pero sagrado) en comunión con Dios:
Su "himen" será mío; Y de sangrar; sangrará; pero pétalos de copihues.
Yo le amo y le admiro, porque, mi adorada, es niña genio;
Yo le adoro porque ella es mi luna que ya no emerge desde el cosmos,
la luna se ha desintegrado en el "caos" de los besos.
Hoy es un día de holocausto, hoy habré de amar en la totalidad de los copihues;
Mi adorada es eterna; Y, en su "himen"; muero yo, desangrado…
"Dadme amor por una eternidad y habrás de hallar paz".
Sanidad de los Espíritus
Estoy enamorado pero de las "lilas",
Estoy enamorado de las estrellas pero de las estrellas que huelen a jazmín;
Yo estoy enamorado de las "bragas" de María de los Jazmines;
Y me "excita olfatear" su "motivación sanguínea".
Yo soy muy "erótico"; Y contemplo a la "fémina" no como un "objeto";
más bien, como un cosmos por donde yo vivo en felicidad.
María de los Jazmines es bella pero para mí es reina del "cosmos".
Yo habré de besarla y habré de enseñarle;
ya que es virgen y apenas tiene veintitrés años;
Ella es rubicunda y de unos penetrantes ojos verdes como de turquesa;
Ella es muy alta y extremadamente inteligente;
Es tan inteligente que ha perdonado todos mis "extravíos".
Hay un "ápice" en el centro de mi corazón y este centro motor es mi sangre que bombea:
Yo tengo secretos pero mis secretos son de María de los Jazmines…
Yo habré de enseñarle lo que un hombre maduro ha experimentado en toda su vida;
Y estoy feliz de que ella esté enamorada…
Ella me pidió matrimonio y yo acepté;
Ella quiere "comerme" a besos; Y no sabe besar pero yo sí sé…
Templanza de Amor
Yo vibro con tu rostro de "Querubín",
Yo me consuelo con tus "senos" de manzana:
Las pepitas son para mí el "hado" de Dios.
Hay persistencia en tu mirada, ya que, eres muy inteligente.
Eres de materialidad y de avispa y de sensualidad.
Habré de "coger" árboles cremados por un huracán;
Y de tal actitud; nacerán tres hijos de tu vientre.
Yo estoy enamorado; y de nuestro enamoramiento,
Todo el "cosmos" es un arete que yo te habré de obsequiar
para que las avispas se conviertan en mariposa.
Eres tan hermosa, que, mis versos son de "oro",
Eres tan contemplativa, que mis versos son de "plata",
Eres tan "sexy", que mi propia "carnalidad" de tigre voraz,
se trepida en arete de "cobre",
ya que yo soy pobre y provengo del Cono sur de América.
Habré de amar tu nariz tan respingada,
Habré de amar tu cabello enmarañado y rubio,
Habré de amar tus caderas contorneadas,
Habré de amar tus "manzanas" de exquisito sabor,
Habré de "lamer" todo tu cuerpo en un éxtasis de "poeta salvaje".
"Yo soy el que ama…"
"Querubín"
Te dedico este poema, mi adorada María de los Jazmines;
Te lo dedico con "semen" de amor de estrellas fugaces.
Yo sé que soy muy erótico para escribir poemas.
Pero; es que, ardo de pasión…
Mi "Querubín" con "bragas" diminutas y "senos"
de noventa y tres centímetros:
Yo habré lamer la corola rubicunda y habré de
penetrar tu sensualidad y romper el "himen" de galaxia que estalla en "orgasmos" infinitos.
Eres mi "Querubín" que no sabe besar pero yo, de maestro soy de lamer los labios femeninos:
"los de arriba y los de abajo";
¡Yo soy maestro del cuerpo femenino!
Quiero que seas mi última mujer,
No te prometo absolutamente nada:
Pero te comeré a besos cuando aterrices en mi casa de una sola habitación;
Allí, en medio del "caos", me habré de prosternar y pediros matrimonio:
"¿Quieres casarte conmigo?, te diré; al tiempo que, os beso los "entrepies".
Deseo de Amor
Hay locura en mí pero locura de "himen" de María de los Jazmines.
Ella es una "bomba atómica" de belleza;
Y no habrá de estallar su "virginidad" en Barcelona (en donde vive);
Habrá de estallar en Santiago de Chile (en mi mansarda).
Yo soy muy pobre pero de avispón tengo la "sexualidad" tremenda de un ángel.
Hay mariposas en mi corazón y todas ellas quieren contemplar el "pubis" rubio de María de los Jazmines;
Ella es altísima, yo muy bajo, ella tiene veintitrés y hay más de cien hembras en mi costado.
María de los Jazmines es virgen y tiembla de pavor.
Yo soy muy tímido pero permito a las "hembras" el salvajismo.
Yo quiero cambiar pero no puedo:
¡Quiero "lamer"!, ¡quiero "lamer…"!
María de los Jazmines, te prometo fidelidad;
A condición, de que, no menoscabes mi cuerpo con tu lengua, hasta no querer más,
hasta secar mis "gónadas" (pero, te indico que soy Andrómeda; Y secarme es "harina").
Celeste de Amor
Yo daría mi "alma" y mi vigor de "poeta" por amaros en la virginal noche de los sentidos,
Yo daría mis yemas…
Yo os habré de desnudar en mi habitación en donde mi corazón palpita…
Yo daré mi "contextura" de persona o de transeúnte por pertenecer vuestro cuerpo,
Yo daré el sol que habrá de estallar en súplica de Dios;
Yo habré de da amor…
¿Me deseas?
La pregunta es vacua, ya que, el deseo nace del sol…
¿Me amas?
La tormenta de los sentidos
Es una tormenta tropical
En mi propia habitación.
Yo deseo amar y deseo sostener vuestras entrañas
en mi costado que suplica a Cristo; que es mi heredero;
Yo os deseo pero de pie y no estrangulada por mis besos.
Sencillez de Corazón
La escapatoria no la tienes, de mí serás la novia sin iglesia.
Tu nacimiento es de "hembra" que goza con los sentidos de uva;
Y, de la dialéctica, es el verbo amar; el síndrome de Eva.
Yo te amo pero en el crepúsculo de los enamorados.
Habré de amar y habré de culminar en noche de luna seráfica con rosas espinudas y manzanas de pecado.
Eres de manantial; el beso en las mejillas;
Y la timidez del primer bocado de carne:
Yo habré de amarte; Y, de tus bragas, el olorcillo a "niña" de mí será, ya que yo soy de América pero indiano.
No me habrás de soportar ya que tengo experiencia en el abandono.
Yo habré de amarte; Y tu virginidad; la habré de contemplar sin arroz ni madrigal de iglesia:
Entre los eucaliptos habrás de quitarme las "ropas" y en ardor habrás de aullar como aúllan las lobas en celos.
"Eres María de los Jazmines pero en mi "lecho" eres sencillamente "carne…"
"Erotismo"
Tu "Luna Ardiente" es vapor y el aroma enloquece a los "Querubines";
Yo no tengo piedad y desde Chile te escribo
Poemas simbólicos:
Tu "Luna Ardiente" huele a belleza y tu "pubis" huele a desolación:
Estoy absolutamente loco por arder y por morder y por culminar besando vuestro rostro;
Ya no habrá piedad para vos, yo no tengo piedad, ¡te necesito!
La vida me ha enseñado a enamorar "féminas";
Llevo esperándote más de cuatro años:
No soy monje, estoy enloqueciendo;
Y tus rebaño de cabello dorado,
Son para mí;
Como una manzana que devoro y que adoro
y que habré de acariciar de costado y de espaldas;
Tú eres un acordeón; Y, en desnudez, un piano.
Más tarde, me habrás de suplicar;
Y yo como un demente;
olfatearé tu desnudez de "Luna Candente".
Excitamiento de las Flores
Yo habré de amar los pétalos, que ya no habrán de
germinar en vuestra sensación de amorío:
Yo habré de lamer la virginidad que perturba;
Y, "lamedora", perdura en vuestro vientre de "atleta".
Vos sois una flor que habré de conquistar, ya que,
la conquista, es de pétalos de orquídea.
Hay serafines por doquier; Y de mi propia "carnalidad"
Un tigre acecha en la oscuridad.
Yo soy parte del "cosmos" y os bendigo con mis sensuales
labios que devoran vuestra raíz de "sensualidad".
"Yo devoro y de manera salvaje".
"Amoríos"
Yo vagabundeo por los acantilados buscando "hembra";
En casa está mi enamorada pero yo soy "adúltero".
¿Seré acaso un "loco"?
Habré de vivir pensando en amar a María de los Jazmines, pero,
de amarle, yo le habré de exprimir como quien exprime un "limón";
Pero, ella es dulce; Y de su dulzor, ¡las "bragas" son!, coquetas y transparentes…
Yo busco apaciguar mi espíritu pero busco como
un "loco" a María de los Jazmines que ha escapado de casa:
Ya no quiere más "sexo" y yo estoy enloqueciendo…
¡Viva la naturaleza humana!;
¡Y vivan las "bragas"!
Sinceridad de los "Amoríos"
Habré de vibrar como vibra el "caos" y el "cosmos"
con el primer beso en las mejillas que a mi adora
me dé con intranquilidad de poeta "cachondo"; pero tímido:
María de los Jazmines no es tímida:
Viajará de Barcelona a Santiago de Chile con dos relicarios, pero,
en mi "lecho" yo la ensartaré con cuchillos y le enseñaré ritos antiquísimos de abeja.
Ella no sabe besar y ya tiene edad para "aparearse";
Ella no sabe besar y ya tiene edad para convertirse en madre;
Ella no sabe besar y, yo como un aterrado, tengo compasión por ella,
ya que, si le miento, ella creerá en mis "mentiras";
¿Qué hago con una "púber"?
"Estoy enamorado, es cierto; pero de su "escote…""
Amar
Los "bustos" son elegantes en mi adorada mariposa;
Son estupendos:
Yo habré de besarlos y habré de mordisquear el arete,
que, ella misma se ha incrustado de tanto excitamiento;
Es un arete de poesía…
Ella es muy desarrollada de "bustos" como una mariposa tropical.
Ella danza; Y, de su danzar, hay belleza, hay dulzura.
Tiene los "pezones" más bellos del mundo y yo le mordisqueo
la corola rubicunda ya que soy poeta y marido astral.
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