Dice Foucalt:"Una sociedad sin relaciones de poder sólo puede ser una abstracción. Por lo que es más políticamente necesario el análisis de las relaciones de poder en una sociedad dada, sus formaciones históricas, sus fuentes de fortaleza o fragilidad, las condiciones necesarias para transformar algunas o abolir otras.El análisis, elaboración y cuestionamiento de las relaciones de poder, y el antagonismo entre las relaciones de poder y la intransitividad de la libertad es una tarea política permanente, inherente a toda existencia."(1)
Se hace imprescindible el análisis del conjunto de relaciones de poder en un momento determinado ya que afecta el total de los relacionamientos que le son propios.
Durante la década de 1960 y 1970 surgen en los Estados Unidos y en algunos países europeos (Inglaterra, Francia e Italia) una corriente de investigación crítica en el campo del conocimiento científico sobre la Condición de la Mujer y la diferencia entre los sexos.En Latinoamérica esta vertiente ha sido denominada Estudios de la Mujer o Estudios sobre la Condición Femenina y ha surgido como campo de estudio hacia fines de los años 70. Como consecuencia de estos estudios se han desarrollado programas de investigación y acción que generaron Centros que apuntaban a la temática de la mujer mayormente por fuera de las instituciones académicas oficiales.
El Estudio de Género es un campo de conocimiento de producción académica, una disciplina que tiene una preocupación política en relación con las prácticas ejercidas por los movimientos feministas y de Diversidad sexual o Movimientos por la No Discriminación para entender la diferencia y la diversidad.
Este campo de conocimiento surge en los ámbitos académicos más importantes de los países centrales durante los años 40. Las precursoras del mismo fueron mujeres que alcanzaron altos campos de conocimiento académico. Mujeres graduadas en Ciencias Sociales y Humanas, influidas por pensamientos feministas que consideran necesaria la mirada femenina en los estudios de la Mujer ya que el conocimiento producido hasta el momento era el generado por la mirada masculina: la mujer como objeto de estudio frente a un sujeto de conocimiento masculino.
Se hizo necesario re conceptualizar el conocimiento existente sobre las mujeres así también como las maneras en que el mismo ha sido construido y transmitido.
Diversos conceptos fundacionales de los Estudios de la Mujer han sido los disparadores de la urgencia de que los mismos sean abordados desde una mirada femenina, a comienzos
de los años 50 se comienzaa ver a las mujeres como nuevos sujetos sociales, acceden al campo laboral, a la educación media y terciaria, a ciertos espacios públicos, se plantean nuevas formas de contratos conyugales, regímenes de fidelidad, diferentes formas de ejercer su erotismo. La mujer trabaja en el espacio público y en el hogar (doble rol que la impacta y la corre del lugar de ser solo ama de casa generándole una doble jornada laboral y lo que ese plus representa.) El planteo de la maternidad y el ámbito laboral.pero por sobre todo el impacto de las relaciones de poder entre hombres y mujeres signado por un sistema macro: el patriarcado, sistema de poder que nos trasciende y determina. Relaciones de hombres y mujeres en las cuales los hombres tienen más poder. Relaciones asimétricas entre los vínculos (eróticos, amorosos, sociales, laborales, etc.)
Durante mucho tiempo el estudio científico fue patrimonio masculino, siendo las mujeres excluidas de la ciencia en tanto productoras y solo se las tuvo en cuenta al ser consideradas únicamente como objeto de estudio dentro de los parámetros de comprensión de los varones. Y así fue que a que esta perspectiva se la confundió con la verdad absoluta. Simone de Beauvoir dice al respecto que la visión de que disponemos es un producto de los hombres.que los hombres representan a la vez lo positivo y lo neutro, y que la mujer aparece como lo negativo. Que el hombre se ha comprendido así mismo como ser genérico, el comportamiento del hombre se ha convertido en el modelo del comportamiento humano" (2)
La forma en que una sociedad selecciona, clasifica, distribuye, transmite y evalúa el conocimiento, refleja la distribución del poder y los dispositivos de control social. La relación de saber y poder refleja una de las cuestiones nodales a tener en cuenta a la hora de hacer una revisión epistemológica de los modelos de la ciencia en el campo de los Estudios de Género.
Se hace imprescindible no perder de vista lo anteriormente dicho, ya que son las relaciones de poder las que producen subjetividades y sus consecuentes efectos en los vínculos. Es por esto que Gloria Bonder propone una vigilancia epistemológica desde la mirada femenina, desde el sujeto femenino, propone un conocimiento científico que se inicie de la experiencia, el cuerpo, la sexualidad femenina. (3)
Desde la Teoría de la Complejidad, es necesario tener en cuenta a la diferencia como problema: este es un concepto nodal en el Estudio de Género. Porqué?? Porque no se puede dejar de lado el hecho mismo de la observación de lo femenino y lo masculino en clave política, en términos de relaciones de poder (patriarcado) y sus consecuencias en la construcción de las subjetividades.
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