La publicidad en el sector no estatal del Consejo Popular Siboney en el municipio Bayamo. Cuba
Enviado por ernesto
Resumen
El presente trabajo titulado: La publicidad en el sector no estatal del Consejo Popular Siboney, persigue analizar el comportamiento de la acción publicitaria que se realiza por parte de los pequeños comerciantes del sector no estatal en este Consejo Popular, perteneciente al municipio Bayamo, en la provincia Granma. Este estudio surge por la necesidad de adentrarse en el tema, después de la aparición de los micronegocios privados, como una posible solución a la solvencia económica de la sociedad cubana actual. A través de este se pudo evidenciar que la variante de la publicidad más empleada por el sector no estatal es el cartel, para así realizar la promoción de un producto que llame la atención a los clientes y por lo tanto genere ventas.
El comportamiento de la publicidad en el contexto cubano actual es expresión de la urgencia de cambios en el escenario económico y social que garantice la estabilidad en estos órdenes. Diversas maneras que responden a intereses estatales o privados marcan la dinámica de la vida, que cada día toma nuevos derroteros.
La publicidad, como herramienta de la comunicación debe cumplir un grupo de elementos para que sea efectiva y al final cumpla con su misión fundamental, que no es otra que convencer al público para que consuma el producto.
La publicidad se ha perfeccionado en los países económicamente más evolucionados y dotados de estructuras de comunicación de masas más avanzadas. Debido a la enorme cantidad de diversos productos y servicios que surgen día a día.
En Cuba la publicidad ha tenido matices diferentes, aunque no ha dejado de perder su esencia, responde a la situación económica imperante. El presente artículo no persigue hacer un recorrido por su historia, sino adentrarse en qué está pasando en la actualidad y qué rumbo la marca, a sabiendas que no se absolutiza una realidad preponderante, constituye una proximidad a una de las regiones del país, Bayamo, especifícamente, en el Consejo Popular Siboney.
Entre las principales transformaciones emprendidas por el gobierno cubano se encuentra la apertura del sector de trabajadores por cuenta propia, como forma de descentralización de la actividad estatal. Así lo reflejan los Lineamentos de la Política Económica y Social, devenido programa económico del proceso de reformas.
El sector privado, inestable en la economía cubana hasta la década de los años noventa y, en menor medida, hasta 2008-2009, comienza a recibir estímulos positivos en 2010.
Este proceso de apertura se diferencia de los procesos predecesores, con anterioridad las categorías aprobadas se concibieron como complementos a la actividad estatal, lo cual las restringía. Hoy se prestan muchos servicios que no estaban cubiertos (o lo estaban deficientemente) por las entidades públicas, mientras otros entran en franca (y a veces desigual) competencia con estas.
Por otra parte, un segmento importante de los suscritos son trabajadores contratados en pequeñas empresas, lo que añade otras dos diferencias: la capacidad de explotar fuerza de trabajo; y la aparición de una forma organizativa superior, equivalente a pequeñas empresas privadas (aún sin personalidad jurídica). Este sector es el que marca el desarrollo de la publicidad.
Algunos enfoques necesarios sobre publicidad
Diversos han sido los autores que han abordado sobre la publicidad, la definen como una actividad en la que interviene activa, pasiva y receptivamente una diversidad de profesiones, ocupaciones, hechos, acciones y funciones. Es además una forma de comunicación masiva, destinada a difundir un mensaje impersonal, con el fin de persuadir a la audiencia, siendo su meta el consumo de productos o servicios específicos.
Es un conjunto de técnicas de efecto colectivo utilizadas en beneficio de una empresa a fin de lograr, desarrollar o mantener una clientela. El objetivo de la publicidad es comercial: suscitar o incrementar la decisión de adquirir un cierto producto o de recurrir a un determinado servicio.
Existen diferentes criterios con relación a las posibles tipologías de publicidad; sin embargo, se considera que básicamente se puede hablar de tres tipos: publicidad comercial, publicidad institucional, que incluye la publicidad de servicio o bien público y publicidad política. Es importante señalar que, a pesar de tal nomenclatura, en la práctica muchas veces estas segmentaciones se diluyen y no es posible discernir los límites estrictos entre una y otra modalidad.
Antes de empezar a crear cualquier producto comunicativo en publicidad, debemos definir nuestra estrategia de mensaje. Ello incluye tres aspectos:
Qué decir y cómo decirlo
Qué mostrar y cómo mostrarlo
Valores de producción, qué se va a crear y cómo se va a crear.
La publicidad es por su naturaleza una actividad positiva y moral. La misma presenta tres ventajas sociales:
Información: difunde el conocimiento de productos y servicios necesarios o útiles.
Bienestar: Incrementa ampliamente la venta de los productos, desarrolla la industria y el comercio en beneficio final de todos.
La publicidad es un elemento muy importante en todo tipo de servicio que se ofrezca a un cliente, pues la misma es la encargada de persuadirlo para que se interese por adquirir el bien o servicio que brindan tanto las instituciones u organizaciones que no pertenecen al sector estatal como los vendedores por cuenta propia del sector privado.
Se asume entonces que:
El principal medio empleado por los vendedores del sector no estatal del Consejo Popular Siboney para el anuncio de sus productos es el cartel, dado su factibilidad para este tipo de negocio. En ellos emplean colores, no siempre relacionados con el producto en venta, pues cada uno de ellos posee un significado, desconocido por el nuevo anunciante, esto trae consigo que se fusionen colores poco o demasiados llamativos, pero lejos de una real expresión de auténtica publicidad, lo que denota es carencia en la creatividad, un elemento inherente a la promoción de un producto, que además debe estar asociado a lo elementos mencionados anteriormente.
Qué decir y cómo decirlo– no siempre los carteles son expresión de un buen trabajo, de un buen pensamiento, en función de la armonía del negocio, hay que pensar bien que se ubicará en el cartel, algo que con una simple mirada, llame la atención del cliente.
Qué mostrar y cómo mostrarlo– no simpre estos carteles son expresión, del empleo de medios idóneos, se valen de los que disponen,quizás lo más fácil, y lo menos elegante, si el comerciante no está en condiciones de hacerlo debe contratar a un profesional para así cuidar otro elemento que pondera mucho el éxito , el aspecto gráfico.
La calidad y la estética de los diferentes anuncios publicitarios depende no solo del presupuesto que tenga el comerciante o vendedor del sector no estatal, sino también del conocimiento sobre cómo lograr una publicidad efectiva, para que se traduzca en un negocio rentable.
Por lo que en el Consejo Popular estudiado se puede encontrar una gran variedad de anuncios publicitarios, la gran mayoría adolecen de estética y son elaborados por el propietario que se lanza a vender porque es lo que está de moda, sin hacer de antemano un estudio de mercado, esto ha incidido en que algunos encuentren como finalidad, la quiebra.
Se muestran algunos anuncios para promocionar el producto de gran valor estético, en tanto adornan y embellecen el local y sus alrededores. Se pudo constatar que en estos casos se llama más la atención de los clientes por lo que favorece las ventas.
De igual manera otros lo realizan con materiales muy comunes, como la utilización de cartón y tiza, éstos siempre son desfavorecidos en el comercio.
También son empleados los plegables, principalmente por los paladares debido a la competitividad existente, a través de esta variante pueden hacer llegar sus ofertas a personas que viven a gran distancia. Otro elemento que no se tiene en cuenta para el desarrollo del cartel publicitario es el componente psicológico, el mismo se utiliza para buscar valores como la reacción que normalmente proporciona un color, la mayor o menor facilidad para retener un slogan, la mayor o menor facilidad de lectura de acuerdo a los diferentes tipos de letra, la determinación y la medida de las reacciones humanas frente a un aviso o parte de él; también para determinar una serie de principios generales que determinan su eficacia.
Partiendo del objetivo de la investigación se pudo llegar a las siguientes conclusiones:
El medio principalmente empleado por los vendedores no estatales del Consejo Popular Siboney, para promocionar sus productos, es el cartel. La estética y los medios empleados para realizar la publicidad no son de gran calidad, elemento que conduce a que no se incrementen las ventas, pues el cliente asocia la calidad del producto a la estética.
Los anuncios publicitarios en el sector no estatal en este consejo no son expresión de un dominio de los elementos que lo conforman, para que sea efectiva y sea un negocio rentable.
Benavides, Juan: El lenguaje publicitario: instrumento de análisis y comprensión de nuestra cultura. Cuaderno Central de Revista Telos, No. 8. Ed. FUNDESCO, Madrid.
Bendezú, Raúl: Comunicación publicitaria, eficacia y lógica cultural. En Revista Diálogos de la Comunicación, No.27.
Clemente, Miguel y Zuleyma Santalla: El documento persuasivo. Análisis de contenido y publicidad. Ed. Deusto S.A. Bilbao. 1991.
García Uceda, Mariola: Las claves de la publicidad. Ed. Especial CINCO DÍAS, ESIC, Madrid, 1995. Volumen II, pp. 66-71.
Joannis, Henri: El proceso de creación publicitaria. Planeamiento, concepción y realización de los mensajes. Ed. Deusto, S.A., Bilbao
Kleppner, Otto: Publicidad. Ed. Prentice Hall Hispanoamericana, S.A., Novena edición, 1996.
Mattelart, Armand: La publicidad. Ed. Paidós, Barcelona, 1991.
Perelló, José Luis: La imagen publicitaria. Facultad de Periodismo, Universidad de la Habana, 1990.
Wells, William, John Burnett y Sandra Moriarty: Publicidad. Principios y prácticas. Ed. Prentice- Hall Hispanoamericana S.A., Tercera edición, México, 1996.
Autor:
Ernesto