Descubrimiento de pueblos indígenas en el Cañón del Chicamocha (página 2)
Enviado por Rafael Bolivar Grimaldos
Todos los pueblos prehistóricos fueron nómadas antes de desarrollarse la agricultura y muchos continuaron siendo nómadas un después. Cazadores y recolectores que viajaban constantemente tras los animales de los cuales se alimentaban, guiados principalmente por su intuición. Si partimos del hecho que la prehistoria es el tiempo más largo de la humanidad, se puede decir que el ser humano ha vivido más tiempo como nómada que como sedentario. Numerosos pueblos de la tierra se asentaron después del desarrollo de la agricultura desde que el clima se volvió más estable a principios del Holoceno, hace aproximadamente 10 mil años. Ello no significó la extinción del nomadismo y en la actualidad éste existe en los cinco continentes como recuerdo de los orígenes más primigenios de la humanidad.
Si bien se dice que el nomadismo es el desplazamiento constante de un grupo humano, ello no quiere decir que sea indiferente a un determinado territorio. Por lo general los pueblos nómadas guardan unos ciertos límites por largo tiempo dentro de una región, y por lo mismo no existe en tiempos breves el caso de que una tribu nómada del amazonas termine en las pampas argentinas. El nomadismo está a menudo relacionado con una forma de organización tribal, es decir una sociedad estructurada en linajes, clanes, tribus y eventualmente confederaciones tribales. Ejemplos de estos grupos en la actualidad son las poblaciones amazónicas en Suramérica y chichimecas en México.
Prehistoria
La Prehistoria constituye el tiempo nómada por excelencia. Dicho factor permitió que todos los continentes fueran poblados por el avance gradual del hombre primitivo en busca de nuevos alimentos para su supervivencia, o por alteraciones de fenómenos naturales como migración de las especies animales preferidas, extinción de las mismas, cambios geológicos y climáticos. La diseminación humana se calcula comenzó hace unos dos millones seiscientos mil años desde África. Hace 1 millón 800 mil años se encontraba en el Medio Oriente. Hace 1 millón de años se encontraba en Asia y en Europa. Hace 50 mil años llegó a América y hace unos 40 mil años en Oceanía, estos dos últimos continentes por lo tanto son los de más reciente poblamiento humano. El poblamiento del planeta se dio en un tiempo muy largo y de manera muy lenta. Para que el ser humano pasara de África al Medio Oriente tardó 8 mil años. Las formas de vivir, el desarrollo y la cultura del hombre prehistórico siguen llenos de misterios y es objeto de permanente estudio. Lo que se sabe de cómo vivió la humanidad prehistórica es en parte gracias a los pocos rastros arqueológicos dejados y a la observación del comportamiento de aquellos pueblos nómadas que han seguido fieles a esta milenaria forma de supervivencia.
Sedentarismo
La agricultura, la pesca y la ganadería pueden marcar la separación no siempre clara entre sedentarismo y nomadismo. Ese paso entre el nomadismo y el sedentarismo no es inmediato ni sencillo, es decir, no se puede decir que un pueblo nómada dejó de serlo en el transcurso de una cosecha, tampoco hay una sola vía de volverse sedentario. Ello implica diversos cambios tecnológicos, económicos y culturales que pueden ocurrir en el curso de décadas, siglos o milenios. Todos los pueblos humanos conservan rasgos de ambos estilos de vida y a veces no es fácil clasificarlos. Es posible que un mismo grupo humano se haya divido en uno que prefirió ser sedentario y otro que continuó con el nomadismo. Es posible además que un pueblo nómada haya vivido periodos de sedentarización, pero retornó al nomadismo a causa de algún fenómeno natural o agresión de otro pueblo. Otra causa de sedentarización, de la cual es testigo la época moderna, es la sedentarización forzada. Las sociedades sedentarias ven con frecuencia con sospecha a las sociedades nómadas y en tal caso las obligan a establecerse en un territorio determinado por la fuerza o con promesas, comportamiento que es de cualquier manera arbitraria. Por otra parte, se presentan conflictos entre las nuevas sociedades sedentarias y los antiguos nómadas que llevan a disputas de control y manejo territoriales. El hecho que se diga que el pueblo nómada va de un lugar a otro, no significa que no considere como suya una determinada región. Como las aves migratorias que van de un punto a otro, muchos pueblos nómadas regresan a los mismos sitios. La transformación de ecosistemas en tierras agrícolas o industriales, por lo anterior, no fue siempre pacífica.
Agricultura
Cuando un pueblo nómada desarrolló la agricultura, ésta lo obligó a permanecer en el territorio de acuerdo a los tiempos de cultivos. Al permanecer más tiempo en dicho sitio, poco a poco lo cambió, abundó lo cultivado pero escaseó o desapareció la caza, la madera y las plantas silvestres. El suelo se desgastó y erosionó y disminuyeron las especies que podía cultivar la agricultura nómada. Por tanto cambiaron las costumbres nómadas, encontraron nuevas necesidades, como intensificar el comercio o ampliar y defender el territorio para cultivar. Se vieron entonces obligados a construir centros o fortalezas que fueron el inicio del desarrollo de las ciudades.
En sitios donde las temporadas productivas se alternan con temporadas de descanso muy frías o secas para las plantas, los trabajadores agrícolas realizan una emigracion golondrina que puede desembocar en una verdadera cultura nómada, si se reconoce que ésta es una forma de vida más productiva y eficiente.
Historia
Trazar la historia de un pueblo nómada no es fácil. La escritura, las inscripciones y otros elementos son atributos de las sociedades sedentarias. Aquello que se conoce de los pueblos nómadas en el pasado y en el presente viene de fuentes sedentarias. Uno de los testimonios más antiguos de tribus nómadas lo presenta la Biblia, especialmente en los relatos del Génesis y del Éxodo. A partir de Génesis 12, comienza el relato de Abraham, un personaje que para algunos estudiosos denota más bien el nombre de una tribu nómada del Medio Oriente. Dice el relato bíblico que Abraham partió de Ur de los Caldeos hacia la tierra de Canaán. El relato describe cómo debió ser la vida de las tribus nómadas en la región entre el 2000 a. C. y el 1000 a. C., tiempo en el que se registra una gran actividad humana y un desplazamiento de pueblos entre Mesopotamia y Egipto.
Los descendientes de Abraham, Isaac y Jacob, continuaron siendo nómadas hasta que se asentaron en Egipto, en un intento de sedentarización forzada por parte de los gobernantes de ese imperio. Esto debió suceder en muchas ocasiones con otras tribus nómadas. El Éxodo narra cómo esta tribu nómada, obligada por los egipcios a la sedentarización, regresó al desierto y vivió por 40 años de nuevo como tribu nómada hasta la conquista de Canaán.
La arqueología es otra fuente del paso de los pueblos nómadas por la tierra y su actividad, siempre asociada a la caza. Por último, una fuente vital de estudio y comprensión del nomadismo es el testimonio de los pueblos nómadas contemporáneos, descendientes de aquellos antiguos.
Características
Los pueblos nómadas son tan diversos como sus orígenes, los ambientes donde viven y la forma en que subsisten. Un pueblo nómada tiene por lo general una organización política, administrativa y económica mucho más simple que un pueblo sedentario. No existe por ejemplo un líder absoluto, rey o gobernante, que ostente el poder político por mucho tiempo, dado que el grupo se mueve constantemente y sigue una lógica de autodeterminación de acuerdo a las circunstancias.
Las tribus y clanes son la principal estructura organizativa y las mismas se unen o se alían para responder a situaciones de amenaza, matrimonio, subsistencia y otras circunstancias. Los nómadas poseen por lo general una sociedad patriarcal en la cual el padre y en general el anciano tiene una autoridad vertical, absoluta e incontestable. Es en general el anciano quien dice a dónde ir, dónde asentarse, cuándo partir y seguir su consejo es símbolo de sabiduría.
Cultura
La manera despectiva con que muchas sociedades sedentarias miran a las tribus nómadas asociándolas con lo primitivo o marginal, hace que se subvalore su identidad cultural. Pero las tribus nómadas poseen sus valores culturales, su arte, su música, la tradición oral y un sentido natural por la protección del medio ambiente. Acostumbrados a vivir en lo hostil, los nómadas cuidan de la naturaleza que saben que podrían necesitar en un futuro cercano y que conocen muy bien. Las amenazas contra el medio ambiente vienen por lo general de parte de las sociedades sedentarias. Si bien la escritura no es su característica, las sociedades nómadas tienen un gran sentido de la tradición oral y de allí que el relato ocupe un lugar central en su vida.
Amenazas y Expectativas
En el mundo de hoy las tribus nómadas presentes en los cinco continentes se encuentran amenazadas más que nunca. Conflictos bélicos asociados con la posesión de la tierra, por ejemplo en África, los rápidos avances de la industrialización que reducen los territorios, la incontrolada explotación planetaria de los recursos naturales que amenaza el medio ambiente, la globalización que exige la competitividad y obliga a la capitalización y otros tantos factores, ponen en aprietos la existencia de los pueblos nómadas como tal. Muchos gobiernos del mundo pretenden que sus tribus nómadas se sedentaricen y ponen esto como un ideal de desarrollo. En muchas ocasiones ello se lleva a cabo de manera violenta, en otros casos esto se da de manera coercitiva o prometiendo prebendas.
Derechos humanos
Es necesario recordar que los pueblos nómadas tienen derecho a su integridad e identidad cultural, a desplazarse dentro de sus territorios ancestrales, aún si estos incluyen el territorio político de estados nacionales. Que los niños nómadas tienen derecho a la educación y que ésta debe ser impartida de manera que no les implique separarse de su tribu o clan. Que la sedentarización es una decisión autónoma del grupo nómada y no debe ser impuesta desde la perspectiva sedentaria. Las sociedades sedentarias deben aprender a conocer, apreciar y valorar a las sociedades nómadas. Según estadísticas existen en la actualidad 40 millones de nómadas que se desplazan en busca de pastos y agua, a veces en larguísimas travesías. El nomadismo es la mejor forma de supervivencia en los climas más extremos, desde hace más de 500 años, y es fuente de sabiduría y conocimiento para mejorar la calidad de vida de los que optan por la emigracion golondrina.
Autor:
Rafael Bolívar Grimaldos
Página anterior | Volver al principio del trabajo | Página siguiente |