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El teatro de Shakespeare y las etapas de la vida: (I) La infancia

Enviado por Felix Larocca


  1. Las siete etapas de la vida como las viera el genio de Shakespeare
  2. Importancia del discurso
  3. La infancia que Jaques definiera en su discurso
  4. El psicópata
  5. Hospitalismo
  6. El caso de Hunter "El Centauro"
  7. En resumen
  8. Bibliografía

Con respecto al niño y su niñez. Románticamente, para la mayoría de los países occidentales, actualmente ambas se consideran etapas que representan la culminación del amor idílico que une a las parejas (aunque estas sean disonantes, como son, para algunos, los matrimonios homosexuales) y que, como resultado procrean o adoptan, y ungen a su progenie con atributos sentimentales y, a menudo, de aspectos exagerados. FEFL en La niñez y su escolaridad: Historias nunca dichas.Leer más: http://www.monografias.com/trabajos94/ninez-y-su-escolaridad-historias-nunca-dichas/ninez-y-su-escolaridad-historias-nunca-dichas#ixzz3BmtbXc00

Las siete etapas de la vida como las viera el genio de Shakespeare

San Agustín precedió a Shakespeare, a Erikson y a Freud en el estudio del desarrollo sistemático del ser humano, usándose a sí mismo como sujeto de análisis en sus Confesiones. Por su parte, Shakespeare presentaría sus ideas como parte de una obra teatral que el bardo de Stratford-sobre el-Avon quizás en anticipación intuitiva — tipo DNA — a las ocho fases que Erikson concebiría siglos después. A propósito, ya hemos estudiado las de Erikson en detalle habiéndolas presentado a nuestras audiencias y lectores en tiempos recientes. (Véanse mis ponencias relacionadas).

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1564-1616

Las llamadas siete etapas de la vida aparecen en la obra de Shakespeare "Como gustéis" (As you like it).

Escrita alrededor del año 1600 y publicada por primera vez en 1623. Parte de la trama involucra a un duque que ha sido depuesto del poder. En el destierro, es acompañado por el melancólico Jaques. Jaques pronuncia el discurso que comienza con la frase "todo el mundo es un escenario", y describe las siete etapas de la vida de una persona, desde los días desamparados de la infancia a la adolescencia, la juventud, la mediana edad y el envejecimiento y la muerte. El discurso aparece en la escena 7 del segundo acto de la obra. Antes de describir las siete etapas, Jaques dice: "Todo el mundo es un escenario, y todos los hombres y mujeres meros actores; tienen sus salidas y sus entradas, y un hombre en su vida interpreta muchos roles, siendo sus actos siete edades". http://www.ehowenespanol.com/siete-etapas-vida-shakespeare-info_382598/

A continuación describimos las etapas en la manera en que el personaje Jaques las representa:

  • Etapa 1: Infancia

"Primero el infante, gimoteando y vomitando en brazos de la nodriza".

  • Etapa 2: Colegial

"Después el chiquillo quejumbroso, con su cartera, y radiante cara matinal, arrastrándose como caracol, de mala gana, a la escuela".

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Mary, Reina de Escocia y su hijo James

  • Etapa 3: Amante

"Y luego el amante, suspirando como un horno, con una balada doliente, hecha para la ceja de su amada".

  • Etapa 4: Soldado

"Luego un soldado, lleno de extraños juramentos y barbado como el leopardo, celoso de su honor, precipitado y veloz en la disputa, buscando la burbuja de la fama, incluso en la boca del cañón".

  • Etapa 5: Juez

"Luego el juez, que con el vientre redondo relleno de buenos capones, los ojos severos y la barba recortada, lleno de sabios aforismos e instancias actuales, actúa así su parte".

  • Etapa 6: Edad avanzada

"La sexta edad trae consigo al viejo enflaquecido en pantuflas, con gafas en las narices y una faltriquera al costado, con sus calcetines juveniles, bien guardados, ahora demasiado anchos para sus huesudas piernas; y su gran voz varonil, que vuelve a sonar aguda como la de un niño, pitando y silbando al hablar".

  • Etapa 7: Demencia y proximidad de la muerte

"La escena final de todas, con que termina esta singular y variada historia, es la segunda infancia y el simple olvido, sin dientes, sin ojos, sin gusto, sin nada".Importancia del discurso

La frase "todo el mundo es un escenario" es una de las más citadas de Shakespeare. El "escenario" a que se refiere tiene significados matizados. En primer lugar, están las etapas literales de la vida, desde la infancia hasta la muerte. Luego, está la metáfora de que la humanidad se limita a ejecutar una función predeterminada en el marco de una producción mayor. Nuestros papeles, Shakespeare parece haber escrito, en gran parte no son de nuestra propia creación. La humanidad sigue un camino similar, y no importa cómo actuamos nuestros papeles (nuestras vidas), todos terminaremos de la misma manera: en el "simple olvido". Este discurso es un momento oscuro en la que de otro modo se considera una obra de comedia, y contrasta el optimismo de otros personajes con la visión derrotista y melancólica de Jaques.

http://www.ehowenespanol.com/siete-etapas-vida-shakespeare-info_382598/

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No educación formal. Sólo trabajo.

Para quienes dedican sus labores profesionales al estudio del ser humano desde un punto de vista holístico no pueden escaparles hechos que modifican las perspicacias obtenidas acerca del hombre que a menudo, a todos, nos sorprenden.

En el Medioevo, y siguiendo los dictámenes de la Biblia, una persona de siete años ya se consideraba persona de edad madura en todo el sentido de la palabra. Noción, esta última, que iría en contra de los hechos establecidos por la epistemología de Piaget elaborada en el Siglo XX.

En un pasado no muy distante, la pensadora, educadora y psicóloga sueca Ellen Key, vaticinó que el Siglo XX sería recordado como "El Siglo de la niñez", profecía que se cumpliría cabalmente como he detallado en otras lecciones.

En la compilación que aquí hago del pensamiento de Shakespeare con respecto a las diferentes etapas del hombre, lo que deseo lograr es establecer un contraste en su percepción con nuestro discernimiento moderno. Amplificando en la manera por la cual un mundo, como el nuestro, en estado de fluctuación, repleto de acceso a informaciones explícitas y, a menudo horripilantes, puede afectar el desarrollo del infante, desde la cuna hasta el instante de su muerte.

La infancia que Jaques definiera en su discurso

Históricamente la infancia, en tiempos del bardo, era una etapa que favoreciera las clases privilegiadas y que evadía las clases pobres. Como tal, era una infancia inexistente como fueran la niñez y (nuestra invención) la adolescencia.

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Niño expósito

Si Charles Dickens — nacido pos Shakespeare durante la época victoriana — de niño tuvo que ganarse la vida en una fábrica de betunes para zapatos, los personajes de Mark Twain no gozaron por cotejo de mejores prerrogativas. Como no creemos que las hayan disfrutado niños que nacieran en el siglo pasado después de las tantas guerras que han explosionado y que siguen estallando, desde que se librara la famosa "Guerra para poner fin a todas las guerras" (La que fuese eufemísticamente llamada La Primera Guerra Mundial).

Más adelante, para Freud y Erikson la primera etapa de la vida señalaba la fase que nos indica que el niño, habiendo, felizmente, satisfecho sus necesidades orales — producto neuroquímico de ciertas hormonas — puede avanzar hacia las etapas siguientes, sin consecuencias adversas mayores.

Para el monólogo de Jaques en Como gustéis, lo siguiente representa el prototipo de los tiempos de aquél entonces:

  • Etapa 1: Infancia

"Primero el infante, gimoteando y vomitando en brazos de la nodriza".

El infante — en la Inglaterra de clase privilegiada de la época — podría ser coronado soberano o abandonado a su suerte sin resquemores. Para la clase humilde, lo último no constituiría ocurrencia sorprendente.

La niñez — como invención reciente — desde su concepción, aparentemente ha permanecido estática, aunque se crea que haya prosperado, desde la profecía que Key pronunciara.

La infancia, supuestamente, y, desde entonces, debió haber cambiado, acudida por el advenimiento de sistemas de educación universales, de estudios psicológicos, y de entendimientos de las diversas etapas de la vida. Eventos de progreso que, asistidos por sistemas de prevención y tratamiento, nos convencieron que la niñez del Siglo XXI no tendría que detenerse en su progresión hacia un futuro mejor y sin conflictos para beneficio de los niños de nuestro mundo civilizado.

Pero, tristemente, no ha sido así.

Desde el siglo pasado el planeta ha tolerado dos conflagraciones mundiales y una multitud de mini-guerras regionales — aparentemente inagotables — que involucran las vidas de los combatientes y, que, de manera colateral, afectan a los niños. Muchos de estos últimos, son actualmente reclutados como soldados regulares por militantes del (IS) Estado Islámico. Esta última organización extremista, perpetradora de crímenes horrendos y capaces de la mayor salvajería. Comete crímenes de los cuales los niños no son sólo testigos, sino que toman parte activa en las decapitaciones y ejecuciones en masa impuestas a los "infieles" por los mismos fanáticos.

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El musgo que prolifera bajo las sombras frondosas de Putin y Beijing

Pero, para no ser menos, estas atrocidades a las que en este espacio nos referimos no se limitan al "lado bueno", que es el lado que nosotros endorsamos. Ya, que éstas, por su parte, son comunes en estados considerados aliados; que forman parte de nuestro "mundo civilizado" como se dice que es el estado de Israel (implacable en sus conductas cuando se trata de Hamás y los palestinos). Como asimismo las encontramos en los Estados Unidos.

Siempre esperamos, de manera natural, que estas acciones barbáricas hallen su expresión fatídica en otros lugares apartados, como son Siria (véanse mis ponencias al respecto), algunos de los países arábigos del Golfo, ciertas dictaduras religiosas (como es la iraní), la degollina bestial de la Corea del Norte. La última en manos presuntas de una inmadura víctima de Asperger, dotado con una dosis liberal de psicopatía en su rechoncha anatomía y personalidad monstruosa.

Acerca de lo señalado, mucho hemos escrito acerca de los experimentos de Philip Zimbardo, de las crueldades de las prisiones de Abu Grahib, del lavado del cerebro y del efecto nocivo de los cultos. Sin olvidar los crímenes impunes cometidos por el Presidente George Bush II y su secuaz Dick Cheney, cuando estuvieron en el poder.

El psicópata

En otra lección narramos el Caso de Eddy. Ésta historia clínica puede ser localizada en el siguiente lugar: http://www.monografias.com/trabajos74/antisocial-psicopata-sociopata/antisocial-psicopata-sociopata2#elcasodeea

Hoy nos concierne la organización de una ponencia que ilustre los efectos irremediables y nefastos del arresto del desarrollo del niño en una etapa tan temprana como es la primera de su vida.

Hospitalismo

El concepto del hospitalismo atribuido a René Spitz nos provee parte de la perspectiva necesaria para mejor entenderlo:

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Hospitalismo de Spitz es un concepto procedente del psicoanalista René Spitz, discípulo de Freud, a inicios del siglo XX.

Spitz observó que la tasa de mortalidad durante la puericia era mucho más elevada entre los neonatos que carecían de estímulos benignos, particularmente cuando en las maternidades eran aislados de sus madres y las enfermeras sustitutas trataban a los recién nacidos con total desdén.

Ya existía documentación histórica en relación a este fenómeno: se dice que un faraón intrigado había intentado que los infantes fueran criados separados de sus madres, y que los bebes habían fallecido.

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El tatuaje de Hunter

Documentación más concreta es la procedente del experimento ordenado por Federico II de Prusia; éste, imbuido de la tradición militarista que caracterizaba a su linaje, pretendió formar perfectos soldados y para esto opinó que no debían tener ningún afeminamiento o sentimiento de compasión; para prevenir tal afeminamiento creyó que la solución era criar a los niños, desde el parto, sin ningún estímulo afectivo benigno.

Es así que Federico II hizo construir una maternidad cuyo edificio parecía perfecto en cuanto a la higiene material. En tal edificio un grupo de bebés fue dado a cuidar a un conjunto de enfermeros y enfermeras que tenían la obligación de alimentar, asear, etc., perfectamente, pero la orden absoluta era que nadie diera la más mínima muestra de cariño (ni siquiera con el tono de voz) a las criaturas. El resultado de tal experimento es que todos los bebés fallecieron en pocas semanas. La explicación dada entonces para el deceso masivo fue la existencia de una epidemia pese a la absoluta asepsia del lugar.

Más de un siglo después Spitz descubrió el motivo real, que como ya se ha dicho era la ausencia de estimulación benigna para los niños pequeños. (Leer más:

http://es.wikipedia.org/wiki/Hospitalismo).

Para su mejor entendimiento, una viñeta clínica nos servirá de ilustración

El caso de Hunter "El Centauro"

Reingresó al calabozo de la Base Naval de Charleston SC por un récord de la vigésima vez en cuatro meses. La circunstancia fue posible, porque antes de que condujeran al reo a comparecer frente a una nueva corte marcial para disponer de su destino dentro de los servicios castrenses, se la había ingeniado tantas veces para haber escapado sus captores.

Hunter era un individuo sumamente articulado, ladino y dotado de una inteligencia natural excepcional, poseedor de un entendimiento natural y enorme de las estructuras del poder.

Ejemplo de lo aludido: En una ocasión que me viera como paciente en el dispensario de la cárcel me pregunta por la afiliación religiosa del capellán asignado a la instalación naval.

Le respondo que los capellanes son ecuménicos — que sirven a todos los fieles sin importar a qué religión pertenecen — aunque, habiendo respondido sin reflexionar, suministrara la información de que quien ocupara esa posición entonces era católico.

Habiendo obtenido la información solicitada terminaría la consulta abruptamente. Ya que Hunter no se sentía enfermo ni lo aparentaba.

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Poco tiempo después me enteré que Hunter había logrado enrolarse con el capellán en clases de catecismo con fines de convertirse al catolicismo y que fuera de una de esas clases cuando lograría evadir sus captores de nuevo, aunque fuese aprehendido muy poco tiempo después.

Cuando retornó a la galera, insistió en que tenía el derecho a continuar su instrucción religiosa ¿Para intentar una nueva escapatoria? Se presumió, cuando su petición le fuera negada.

"Primero el infante, gimoteando y vomitando en brazos de la nodriza". Dice Jaques.

La vida de Hunter hace del soliloquio de Jaques una expresión fatídica del daño al desarrollo personal que producen la privación, el rechazo y los maltratos sufridos en los dos primeros años de la vida. Etapas éstas, Oral y de Confianza Básica, de Freud y de Erikson respectivamente. (Véanse mis ponencias al respecto).

¿Quién era Hunter?

Hunter nació en medio de la noche en la cercanía de un convento en la ciudad de Ferguson en el estado de Missouri. Su madre, quien se presumió lo rechazara desde el principio del embarazo, había puesto el recién nacido en una funda plástica que depositara en un zafacón de basura cerca del claustro, a fines del mes de noviembre del año cuando éste naciera. De esa contingencia el infante adoptó más adelante a Sagitario como su símbolo del zodiaco y lo de Hunter ("cazador") porque creyera que sagitario — con su arco y flecha — representaba la cacería.

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Gary Gilmore

Careciendo de alternativas, el niño expósito fue acogido por las hermanas de La Providencia cuya misión, entonces, era la de tratar de proveer educación a niños católicos en un colegio de gran nombradía histórica, pero que estaba lindante al cierre de sus puertas por la merma de los números de maestras y vocaciones, entre las religiosas disponibles.

Aún las mismas monjas dieron testimonio de que al niño se le suministró comida y vivienda, pero muy poca atención o cariño.

Lo de darle cariño lo consideraban difícil, porque Hunter era sucio, despedía mal olor corporal, tendía tendencias a ser muy agresivo y sus comportamientos eran tan difíciles que aun los perros guardianes del recinto lo evitaban y le temían porque era él quien mordiera a los propios perros. Como acostumbrara hacer con un número de personas de toda edad.

En la adolescencia, y tan pronto como la oportunidad se presentara, escapó el convento afiliándose con un grupo de delincuentes juveniles que practicaban el tráfico de drogas, el hurto, la prostitución de menores y un surtido de comportamientos delictivos. Por sus repetidas comparecencias ante la corte de juveniles, a la edad de 17 años un juzgado ordenó que el contumaz delincuente fuera ordenado a engancharse en el servicio naval en lugar de confinarlo fútilmente de nuevo a una institución correccional.

Su historia en la Marina fue deplorable, ya que sería caracterizada por desobediencias, incumplimientos del deber, escamoteos de las pertenencias ajenas, tráfico de posesiones robadas a sus compañeros, y otros comportamientos delincuentes que culminaron en su expulsión deshonorable del servicio naval.

Su vida, al egresar de la marina, continuaría con una sucesión ininterrumpida de transgresiones cada vez más descabelladas y de mayor brutalidad, dirigidos preferiblemente contra quienes fuesen débiles o incapacitados.

Como ilustración de lo antedicho, en una lección acerca de la primera etapa de Erikson se estudia un caso similar — aunque de desenlace distinto — al que aquí nos ocupa. (Para leerlo en su totalidad: /trabajos101/teorias-erik-h-erikson-y-sus-aplicaciones-terapia-primera-etapa/teorias-erik-h-erikson-y-sus-aplicaciones-terapia-primera-etapa#dannya).

Prosiguiendo con nuestro propósito

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Base Naval Charleston SC

En este y otros espacios, nuestro intento ha consistido de manera simple, en proporcionar nuestras tesis en forma de drama de teatro. Lo hacemos apoyados en el rol playing, técnica de dramática que Shakespeare con su genio enriqueciera, formando parte de segmentos educativos que se presentan semanalmente en nuestros programas radiotelevisivos Las Cuatro Estaciones.

Al final de los mismos se concluye haciendo una síntesis de las terapias o de las dinámicas de los casos presentados, como éstas sean aplicables.

Concluimos con la historia clínica de Hunter

Luego de haber participado en una serie de robos a mano armada, Hunter de pronto parecería haber eludido el crimen y los agentes de la ley, ausentándose del mapa del sitio donde ejerciera sus transgresiones y fechorías.

Pero las sorpresas nunca faltan

Las noticias que, inesperadamente nos llegaran, eran típicas de las trastadas que Hunter estilizara.

En una ciudad muy distante, se reportó, que la policía allanó el apartamento inmundo del impenitente y empedernido delincuente, donde encontraron los restos disecados de varias mujeres jóvenes cuyas desapariciones, hasta entonces, permanecieran irresueltas.

Para su defensa, Hunter trataría de convencer al cura de la Base Naval y a mí que lo ayudáramos en su aprieto, porque — debido al abandono de su madre — nació huérfano. (Leer más:

/trabajos74/antisocial-psicopata-sociopata/antisocial-psicopata-sociopata.)

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IS, recluta guerrillero juvenil, decapitando su víctima en el nombre de Alá…

En resumen

Nuestro interés en el desarrollo del niño de nuestro género nace de la necesidad de vivir en un mundo que representa una aldea en el sentido geográfico.

Un globo que sufre los estragos de la devastación que infringen al medio ambiente los multinacionales que destruyen el balance ecológico y donde nuestros gobiernos irresponsables se reconoce que utilizan nuestros recursos naturales para enriquecerse a sí mismos y a los políticos que los soportan. Tony Blair, del Reino Unido, representa el santo patrono de estos mamarrachos.

Como consecuencia, nos preguntamos, al inicio de esta nueva serie — basada en el pensamiento del cultivado pensador que fuera el dramaturgo inglés — si es posible reconciliar nuestras concepciones acerca de las etapas del desarrollo y las fases de la vida, sin pensar en el efecto último que nuestras experiencias en el mundo complejo en que vivimos imprimen en las mentes de los niños que nacen en un medio que (parafraseando a Freud) es esencialmente un medio ambiente polimorfo perverso. (Véanse mis ponencias acerca de Winnicott).

Jaques, en su soliloquio, y de un solo golpe (parafraseando el bardo, at one fell swoop), podemos admitir, que nos ha convencido de que necesitamos más conocimientos para entender nuestro género.

Con ese propósito damos comienzo a esta nueva serie de lecciones.

Fin de la lección.

Bibliografía

  • Larocca, FEF: La niñez y su escolaridad: Historias nunca dichas en monografías.com, academia.edu y researchgate.net

  • Larocca, FEF: El determinismo cósmico en monografías.com, academia.edu y researchgate.net

Además, extensivos enlaces (links), bibliografía adicional y referencias de contribuciones a este tema y otros temas mencionados por este mismo autor, pueden obtenerse en los siguientes portales:

  • AcademiaEdu

  • ResearchGate y

  • Monografías.com

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Hermanas de la Providencia

 

 

Autor:

Dr. Félix E. F. Larocca