Descargar

El porqué de la sobre estimulación sensorial en adolescentes

Enviado por oamp1


         

    1. Una teoría sensorial 
    2. El adolescente
    3. ¿Y los jóvenes dónde?

    Cada fin de semana vemos aparecer en la noche capitalina a los jóvenes deambulando por los alrededores de centros nocturnos, cada vez mas aparecen centros de juego para jóvenes donde impera un ambiente cargado de estímulos, visuales y auditivos, y nos preguntamos como es posible que un lugar de aquellas características pueda ser un lugar de esparcimiento y entretención más aun es también descrito como un espacio de relajación.

    En el marco de una investigación* se han hecho observaciones en uno de estos centros de juegos que funcionan todo el día, el lugar es cerrado con luz tenue y de coloridos diferentes, el ambiente esta hipersaturado de ruidos y músicas de diferentes clases emitidas tanto por equipos de sonido como por televisores, sintonizados en diferentes señales, se da entonces el llamado ambiente de discoteca.

    La pregunta entonces es cómo es posible denominar un ambiente de tales características como de relajación, porque donde unos sucumben, se agotan, otros se divierten y relajan.

    UNA TEORIA SENSORIAL  

    El oído interno, se compone de dos partes el sistema vestibular y el sistema coclear, el primero regula las funciones de postura y equilibrio, por tanto igualmente regula los movimientos corporales. El segundo sistema, el coclear se encarga de la transformación de los sonidos (estimulo mecánico) en impulso nervioso (estimulo eléctrico), y por medio de este proceso se nos hace posible la percepción de los sonidos y por tanto la interpretación de estos. La correcta integración de estos sistemas permite que podamos percibir de manera organizada. (Madaule, 1983)

    Desde pequeños todos los sonidos nos permiten ir entretejiendo la función de ambos sistemas para permitir una correcta entrada al mundo del lenguaje y la escucha. Las canciones infantiles armonizan las funciones motoras (movimientos corporales) por su efecto en el sistema vestibular. También aumentan el nivel de conciencia corporal y ayudan en el moldeamiento de la imagen corporal, que les permite a los niños ir poco a poco aumentando su capacidad motora fina. Con esto podemos considerar al cuerpo como instrumento que expresa, y su desarrollo le permite al infante desarrollar su capacidad futura de comunicación (en su más amplio sentido). (Madaule, 1983)

    Alfred Tomatis, fonoaudiologo francés trabajando con cantantes de opera descubrió que en la medida en que estos mejoraban sus conflictos internos lograban captar y emitir sonidos de frecuencias más amplias, esto es aumentaban su registro lo que les permitía desempeñarse mejor en su labor. Estudió entonces el sistema fonológico y el sistema de la audición, descubriendo que el segundo tenia directa relación con los procesos psíquicos internos del individuo, por ello es importante conocer la anatomía del oído. A. Tomates desarrollo entonces el concepto de escucha, en oposición al concepto de oír; "Oír es la percepción pasiva de los sonidos, mientras que escuchar es un acto voluntario que requiere del deseo de usar el oído para enfocar los sonidos seleccionados". (Madaule, 1983 p. 3)

    Podemos encontrar en sus escritos descripciones de niños con poca capacidad de escucha que estarían caracterizados por una percepción poco clara o distorsionada del sonido, lo que se expresa en problemas con la aritmética y con la aprehensión de la lecto-escritura. Según Tomatis estos problemas de escucha se develan por un bajo deseo de comunicar, que se origina en una etapa muy temprana de la vida del sujeto, donde debió ocurrir un rechazo al lenguaje oral y una manera de rechazar esta información es la de cerrar el oído, esto se hace posible por una relajación del músculo del oído medio, así los sonidos serán incorrectamente percibido y mal analizados. (Madaule,1983)

    Otro punto estudiado por el Dr. Tomatis es la predominancia de la audición por el oído derecho, basado en la documentación referente a la especialización hemisférica en tanto la función del lenguaje, que corroboran que es mayormente por el oído derecho por donde se analiza y controlan los sonidos.

    Los niños con un cierre selectivo del oído gustan más de músicas con sonidos de baja frecuencia y muy rítmicos como el rock y la música disco, que tienen un efecto vigorizante, que aumentan las tendencias hiperactivas, agresivas y la irritabilidad. Esta música les atrae porque aumenta el nivel de sensación corporal, pero la calidad del sonido reduce la habilidad del oído para la escucha. Esto sucede por los mecanismos biológicos involucrados, es decir al ser el oído medio un dinamo controlador de los impulsos que pasan al cerebro para ser analizados, cuando se produce un cierre selectivo aumenta la percepción ósea del sonido (las vibraciones que las ondas del sonido producen en los huesos principalmente del cráneo), lo que satura al cerebro de estímulos en desmedro del canal principal de audición.

    Esto significa que baja también la conciencia corporal, y el entendimiento lógico se reduce, aumentando la interpretación emocional de la comunicación, lo que podría redundar en una experiencia afectiva aumentada.

    Dado que la relación del oído con el resto del cuerpo, está dada por la conexión con el "nervio vital neumogástrico (vago), así el oído tiene que ver con casi todo lo que sentimos (desde el cosquilleo en la garganta hasta los latidos del corazón y la respiración)". (Madaule, 1983) La baja capacidad de escucha también afectaría la auto escucha y por tanto la reflexión sobre sí mismo, su entorno y el sentido de la vida (cuestionamiento bastante frecuente en la adolescencia).

    "El oído no es únicamente un instrumento para oír y escuchar, ni solamente un órgano para mantener el equilibrio y la verticalidad. Tomates afirma que el oído es principalmente un aparato destinado a efectuar una carga cortical (es decir, a aumentar el potencial eléctrico del cerebro). De hecho, el sonido es transformado a impulso nervioso por las células ciliadas del oído interno. La carga de energía eléctrica obtenida por el flujo de los impulsos nerviosos llega a la corteza, que a su vez la distribuye a través de todo el cuerpo con el propósito de tonificar todo el sistema e impartir un mayor dinamismo." (Madaule, 1983 p. 16)

    No todos los sonidos producen este efecto de carga, ya que según Tomates las células receptoras se encuentran mas acumuladas hacia las áreas de recepción de sonidos de alta frecuencia, por esto al oír sonidos de más alta frecuencia la cantidad de impulsos que van a la corteza es mayor. Por lo mismo los sonidos de baja frecuencia no dan la suficiente energía a la corteza y pueden agotar, ya que inducen respuesta motoras que absorben energía, más de la que da el oído. (por la conexión nerviosa que existe entre las neuronas del oído con las de toda la medula espinal). (Madaule. 1983)

    En definitiva los estudios desarrollados A. Tomates, no sólo se aplican, (según él) a personas con problemas psicológicos que implican un cierre selectivo del oído, todas las personas estamos proclives desde la vida intrauterina a ser afectados por un trauma o conflicto que nos haga perder el deseo de comunicarnos con el entorno, incluso esto puede suceder sin involucrar a nuestra conciencia de haber sentido el trauma.

    EL ADOLESCENTE

      La adolescencia está determinada culturalmente ya que el inicio y término varía considerablemente de una cultura a otra, así como también varían las características y conflictos de ésta. (Carolina Inostroza, Yanet Quijada y otros, Universidad de Concepción.)

    El adolescente que está pasado por la crisis juvenil está especialmente susceptible a desarrollar una depresión, ya sea por los cambios que está enfrentando o por una suma de conflictos que ahora tiene presente. Se expresa como "un sentimiento vacío, una falta de autodefinición, que se asemeja según su descripción verbal, a un estado de despersonalización", lo que genera un alto grado de ansiedad (Mussen, 1985). Esto también puede deberse a los numerosos cambios que presenta al mismo tiempo la vida de un adolescente (Papalia y Olds., 1998).

    Se espera que el individuo alcance una independencia que le permite dirigirse hacia roles y metas de acuerdo con sus habilidades y posibilidades ambientales (Montenegro y Guajardo, 1994). El adolescente estructura las actitudes y pautas de comportamiento adecuadas para ocupar un lugar en el mundo de los adultos (Hurlock, 1980). La relación con los otros se busca como un medio de referencia para conocerse a sí mismo. Las amistades cumplen en esta etapa variadas funciones, como el desarrollo de las habilidades sociales, como ayuda para enfrentar las crisis y los sentimientos comunes, ayuda a la definición de la autoestima y status, no por lo que dicen, sino por la posición del grupo al que pertenecen (Remplein, 1971; Hurlock, 1980; Craig, 1997). En la adolescencia disminuye el número de amigos, en comparación con la pubertad, buscando características afines; se hacen más estables en el tiempo e íntimas.

    Una de las conductas riesgosas más difundidas en los locales nocturnos respecto de la adolescencia es el consumo de alcohol y drogas, esto se explica por que los jóvenes en su intento de entrar al mundo adulto toman de ellos lo que creen es una marca distintiva de la adultez (Craig, 1997).

    Resumiendo los jóvenes se ven en una búsqueda frenética de apoyo para constituir su identidad y lograr lo que se espera de ellos (desde los adultos). En este proceso necesitan un alivio de las sensaciones discrepantes que se producen al no ser capaz (ya que es un proceso) de establecerse firmes frente a un mundo que tiene altas expectativas puestas en ellos y que al mismo tiempo cataloga como un problema, ¿encuentran los jóvenes este alivio en los centros nocturnos en compañía de sus pares? ¿Por qué es así?

     ¿Y LOS JOVENES DONDE?

    Entendiendo todo la anterior podemos reflexionar ahora sobre los lugares de concurrencia frecuente de adolescentes como pubs, discotecas y centros de videojuegos, que cuentan con una ambientación saturada de estímulos visuales y auditivos, se caracterizan por mucha música, muy fuerte y en general de estilos rock y disco, muchas veces con más de un estilo musical en el mismo espacio. La luminosidad es baja y da un efecto nocturno en estos espacios.

    Sabemos al mismo tiempo que la adolescencia se caracteriza, como etapa de desarrollo, por una pobre motricidad fina (lo que llamamos edad del pavo), una energía mayor que en otros períodos evolutivos y un enfoque hacia su propio cuerpo, en referencia a los cambios corporales. Paralelamente los jóvenes desarrollan un pensamiento más crítico, en cuanto a lo social, el cuestionamiento del sentido de la vida y de su propia posición en la sociedad y en la vida.

    Si pensamos en la actualidad los jóvenes tiene un estilo de vida bastante sedentario donde las mayores actividades oscilan entre la televisión, los juegos de video y el chateo, que poca descarga energética le permiten a este joven lleno de energía.

    En tanto las relaciones este joven vive momentos confusos en la relación con sus padres y con su entorno, bastante problemáticas con los adultos y las autoridades, que están constantemente cuestionadas, y relaciones muy intensas con sus pares.

    Teniendo como referencia lo anteriormente expuesto, y tomando como nuevo referente el desarrollo teórico de A. Tomatis con relación a la escucha, podemos hipotetizar sobre el interés juvenil de frecuentar lugares sobre estimulados, en música principalmente de baja frecuencia lo que por una parte le permite bajar su conciencia corporal y por tanto esconder su propia imagen corporal que es tan oscilante e intimidante frente a sus pares, por otra parte la baja en su capacidad de escucha genera una pobre interpretación lógica y una alta interpretación afectiva lo que redunda en relaciones lábiles y muy intensas. Todos estos hechos se interrelacionan en un circulo causal ya que desde Tomatis sabemos que la capacidad de escucha puede ser bloqueada en cualquier momento de la vida traumático en que no se desea escuchar o comunicar, y la adolescencia es por definición un proceso traumático (dentro de la normalidad), que podría hacer que el adolescente deseara no escuchar o comunicar. Al mismo tiempo los jóvenes comienzan a privilegiar los estilos musicales rock, que como sabemos tienen mas frecuencias bajas, que generarían mayor agresividad e irritabilidad, y una merma en la capacidad de escucha con las consecuencias ya mencionadas.

    Con los antecedentes anteriores podemos llegar a concluir algunas cosas sobre el comportamiento juvenil en lugares saturados de estímulos. Esta situación ambiental les permite, bajar la conciencia de su propio cuerpo, y la intensificación de las relaciones afectivas, esto en conjunto permite que el adolescente baje el nivel de ansiedad en torno a su propio cuerpo y la aceptación de él por parte de su grupo de pares. La baja conciencia también ayudaría a que se apaciguarán las cavilaciones y criticas del joven respecto a si mismo y su sociedad. Al tiempo la baja frecuencia de la música puede permitir la descarga de energía apagada por el desinterés en otras actividades, esta energía reaparece por intercesión de la música y el joven puede descargar su energía.

    De esta forma se genera un efecto de aparecer o desaparecer en la medida en que las interacciones le resulten al joven cómodas y con poca ansiedad. La alta concurrencia a este tipo de lugares tendría igualmente un efecto de permitirles a los jóvenes salir de sus casas en donde se ven aislados e imposibilitados de ejercitar el cómo de su interacción social, que les permite ir configurando su identidad, mostrándose en lo que ellos van descubriendo que son, pero en un ambiente de estimulación seguro que baja los niveles de discrepancia con el medio, y las posibilidades de fracasar en el ejercicio de su socialidad?????

    BIBLIOGRAFÍA

    1. Craig, G.(1997). Desarrollo psicológico. Prentice Hall
    2. Hurlock, E.(1980). Psicología de la adolescencia. Madrid:Paidós
    3. Montenegro y Guajardo(1994). Psiquiatría del niño y del adolescente. Santiago: Salvador
    4. Mussen. P(1985). Desarrollo de la personalidad en el niño. México: Trillas
    5. Papalia y Olds.(1998). Desarrollo humano. México: Mc Graw- Hill
    6. Remplein,H.(1971). Tratado de psicología evolutiva. Barcelona: Labor
    7. Seminario preparado Carolina Inostroza, Yanet Quijada y otros, estudiantes de Psicología de la Universidad de Concepción.
    8. Madaule, P. (1983) El Método Tomatis y La Música, Centro Tomates Chile

     

    Daniela González Olivares.

    Oscar Muñoz

     UNIVERSIDAD ACADEMIA DE HUMANISMO CRISTIANO ESCUELA DE PSICOLOGÍA