Modelo de Gestión del Proceso Docente Educativo con un enfoque sistémico (página 2)
Enviado por Carlos �lvarez Llera
En eso radica verdaderamente el lugar privilegiado que las Universidades ocupan en una sociedad en la época actual; es ello lo que ha posibilitado su existencia y desarrollo durante 10 siglos, con independencia de los importantes cambios sociales que en ese periodo han tenido lugar en el mundo.
Para lograr llevar a vías de hecho esta misión, en la Universidad se estructuran diferentes procesos, que en su integración dialéctica le dan su personalidad propia, por lo que una caracterización de la Universidad pasa inevitablemente por la conceptualización de los procesos que en ella se desarrollan.
Sin pretender agotar su diversidad, podemos afirmar que una caracterización esencial puede lograrse a partir de identificar tres procesos que son fundamentales en toda Universidad moderna, a saber:
• Docente
• Investigativo
• Extensionista
Estos procesos, en tanto que procesos sociales, adquieren significación plena cuando se estudian en su interrelación, como elementos componentes de un sistema. Así, cada uno de ellos, aunque revela de alguna manera un elemento esencial que lo connota y distingue de los restantes, manifiesta igualmente, rasgos, características, que son propios de los restantes y en eso radica precisamente la tesis de que conforman un sistema.
Así, el proceso docente se estructura en la Universidad con el propósito fundamental de preservar la cultura. Esa es su especificidad; y a través del mismo las instituciones de educación superior garantizan que la cultura de la humanidad se transfiera de generación en generación.
El proceso docente, en el cual incluimos no solo la actividad de pregrado sino también la de postgrado, con independencia de la forma externa, fenomenológica, en que él se manifiesta a partir de las características particulares que se establecen en un aula entre el profesor y los estudiantes, expresa una profunda relación generacional que connota su carácter social: La generación que enseña transmite a la que aprende aquella parte de la cultura de la humanidad que es necesario aprehender para lograr los objetivos propuestos.
La dirección ha tenido una importancia esencial para coordinar los esfuerzos individuales en función del logro de los objetivos de una organización ya sea de carácter económico, educativo, social o de cualquier tipo.
La actividad de dirección, surge desde que se conformaron las primeras colectividades humanas, para alcanzar metas que no se podían lograr individualmente. En sus primeros momentos esta fue una actividad de cierta manera empírica y espontánea, donde prevalecía la experiencia de las personas más viejas y mejor preparadas, sin embargo, en nuestros tiempos se ha ido desarrollando y perfeccionando hasta adquirir un carácter científico.
El enfoque básico que caracteriza a la escuela de la dirección o administración científica es el énfasis en las tareas, su nombre tiene como origen la aplicación de los métodos de diferentes ciencias a los problemas de la dirección y administración, para alcanzar una mayor eficiencia.
Es bueno señalar el concepto de gestión, para poder entender los antecedentes del problema es:
Acción y efecto de integrar los procesos para el desarrollo o evolución de una Organización o Institución.
Algunos de los problemas que hoy tenemos presentes en la SUM de Pinar del Río, son, entre otros.
- En ocasiones no se cumple con los principios de la planeación (la racionalidad, flexibilidad, la unidad y continuidad).
- No todos los profesores parciales tienen suficiente dominio de la didáctica.
- El chequeo y control de lo que se orienta carece de sistematicidad, provocando reiterados incumplimientos de los recursos humanos por la falta de dominio de las estrategias, metas u objetivos que se trazan.
- No comprensión del modelo de semipresencialidad en la Sede por parte de estudiantes y profesores.
- Necesidad de perfeccionar el trabajo metodológico a nivel de disciplinas y asignaturas.
CONCLUSIONES
Teniendo en cuenta las perspectivas de la Nueva Universidad y los retos que esta impone urge la búsqueda de alternativas que permitan la adecuación del modelo pedagógico a las condiciones de la Universalización en Cuba y que se logre formar un profesional integral, para lo que se hace necesario perfeccionar el Trabajo Metodológico y que el proceso docente educativo preste especial atención a las características del proceso de formación y a los sujetos que en él intervienen en la Sede Universitaria Municipal en cada uno de los procesos, en busca de un eficiente modelo de gestión del proceso docente educativo.
BIBLIOGRAFÍA
. MINISTERIO DE EDUCACION SUPERIOR. Resolución 269/91 (Reglamento para el Trabajo Docente y Metodológico en la Educación Superior). Habana, 1991.
. HORRUITINER SILVA, PEDRO. Principios de la Planificación del Proceso Docente. Revista Cubana de Educación Superior. (Vol.3; No.1).1979.
. ÁLVAREZ ZAYAS, CARLOS. Fundamentos teóricos de la dirección del proceso docente educativo en la Educación Superior Cubana. ( Tesis de Doctorado ), Habana, 1989
. Álvarez de Zayas Carlos M. (1995). La escuela de excelencia. Monografía. Dirección de Formación de Profesionales, Ministerio de Educación Superior de Cuba. La Habana.
. Betancourt Villalba Amneris 2005. Modelo de Gestión Pedagógica del Colectivo de Carera para los cursos regulares diurnos en la UPR. Tesis presentada en opción al grado científico de Doctora en Ciencias Pedagógicas. CECES. Pinar del Río.
DATOS DEL AUTOR:
Carlos Álvarez Llera
Subdirector Docente de la Sede Universitaria Municipal de Pinar del Río, Cuba.
Categoría docente: Instructor
Estudios realizados:
Maestrante en Ciencias de la Educación
Licenciado en Educación Primaria
Curso de Didáctica y Pedagogía
Curso de Ingles
Curso de Computación
Fecha de realización: 7 de diciembre de 2006
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