Aplicación de los 8 habitos, en el deporte de alto rendimiento

Introducción

La vida de los hombres de éxito, de las personas denominadas altamente exitosas, existen normar de conducta, formas de actuar y comportarse, que son comunes independientemente de la actividad en la que hayan triunfado o de credos personales, filiaciones políticas, etnia etc.

Es sabido que las grandes fortunas han tenido como punto de partida la toma de decisión, y que esa toma de decisión llevada a cabo en el momento y lugar adecuado ha propiciado, a los triunfadores, grandes logros en el plano personal, organizacional y de liderazgo.

Los elementos comunes en las vidas de esos grandes líderes fueron profundamente estudiados por el Dr.Stephen Covey de lo que resultó un compendio de los 7 hábitos comunes a las personas altamente exitosas y posteriormente definió un 8vo hábito que según el propio autor, integra a los 7 anteriores, dando el verdadero sentido a todo el estudio realizado alrededor del tema.

Claro está que el modelo de los 8 hábitos descritos por Covey, se ajusta no solo a la actividad de liderazgo empresarial, sino que también tiene aplicación en la vida social y laboral, de los individuos que pretenden tener una vida de exitosa, lo cual se hace extensivo, sin lugar a duda, a la actividad deportiva con fines de alto rendimiento, ya que esta es una de las manifestaciones de la sociedad en la cual los seres humanos van invariablemente en busca de éxito, traducido esto como efectividad en el logro de los objetivos que se proponen.

El deporte de alto rendimiento o de alta competencia como también se le denomina, exige de las personas que lo realizan, un alto contenido de sacrificio y entrega ya que solo a través de la práctica diaria y constante durante largos años se pueden alcanzar los altos niveles de preparación que el triunfo deportivo exige, de hecho, el triunfo en el deporte es una manifestación de gran efectividad en el empleo de las capacidades físicas, técnicas, teóricas y psicológicas de manera que un triunfador en el ámbito deportivo podemos definirlo como, una persona altamente efectiva y exitosa, entendiéndose que estos se encontrarán entre los deportistas y los entrenadores que gestionan desde una posición de liderazgo, el rendimiento deportivo.

Dado este particular podemos ver como la aplicación de esos 8 Hábitos, de la Gente Altamente Efectiva, diseñados por Covey, están presente en los procesos de preparación física, técnica, teórica, psicológica y en todos los aspectos de la vida misma de los mas destacados deportistas y entrenadores, en cualquiera de las manifestaciones atléticas existentes.

El Dr. Stephen Covey definió estos 8 Hábitos de la manera que sigue:

• Primer Hábito: Ser Proactivo.

• Segundo Hábito: Empezar con un Fin en la Mente.

• Tercer Hábito: Establezca primero lo Primero

• Cuarto Hábito: Pensar en Ganar – Ganar

• Quinto Hábito: Procure primero comprender y después ser comprendido.

• Sexto Hábito: La Sinergia.

• Séptimo Habito: Afile la Sierra

• Octavo Hábito: Encuentre su Propia Voz y Haga que su Voz Inspire a Otros para que Encuentren la suya.

Como se Aplican en la actividad Deportiva los 8 Hábitos de las Personas Altamente Efectivas

Primer Hábito: Ser Proactivo

De gran importancia en la actividad deportiva es la capacidad de decidir qué respuesta dar ante cada estímulo competitivo o de entrenamiento, escogiendo entre una variada gama de respuestas posibles la que a nuestro juicio nos dará la ventaja y por ende nos encaminará al triunfo. Siendo proactivo el deportista determina la dirección y resultados de sus acciones, mientras que el entrenador proactivo establece tácticas y estrategias que le permitirán alcanzar el triunfo sin subordinarse a las tácticas o estrategias planteadas por el oponente, él determina la dirección y establece el resultado de sus acciones.

Un corredor de fondo bien preparado y con alto dominio de la actividad no se dejará sacar del ritmo de carrera por las acciones de sus oponentes y determinará cual deberá ser el ritmo que mas le convenga durante la competición,

Un competidor proactivo genera fintas de engaño para imponer el ritmo, distancia y forma en que se desarrolla la competencia y no deja que sus oponentes influyan en la táctica y estrategia preestablecida, en fin no se deja sacar de paso y determina la conducta a seguir en cada momento.

Segundo Hábito: Empiece con un Fin en Mente

Este Hábito está relacionado con uno de los componentes psicológicos mas importantes en la práctica deportiva de alto rendimiento que es, la Motivación.

Los altos niveles de motivación estimulan en los deportistas la realización de grandes esfuerzos y sacrificios en aras de lograr ese fin que se establece en sus mentes desde el inicio mismo de la práctica de un deporte.

Muchos de nuestros atletas mas destacados, empiezan la práctica deportiva con la finalidad de mejorar las condiciones de vida de sus padres, siendo esto un motivo tan fuerte y arraigado que nada los detiene ante el empeño de lograr el anhelado triunfo. Los que tienen bien establecido el Fin en sus Mentes, no permiten que ninguna decisión equivocada los aparte del camino establecido para lograrlo.

Tercer Hábito: Establezca primero lo Primero

Este Hábito es de hecho un imperativo de los procesos de preparación deportiva. Todos los componentes de la Macroestructura de entrenamiento mantienen un orden de precedencia, de manera que de cambiar estos no cumplirían adecuadamente con sus objetivos, este establecimiento crea y refuerza un hábito en los deportistas de alto rendimiento, de hacer siempre primero lo que debe hacerse primero, lo más importante y determinante en el camino que se han trazado. Definiendo sus actividades tal y como las plantea Covey de; Urgentes, no urgentes, importantes, y no importantes.

En numerosas ocasiones los deportistas se ven ante la disyuntiva de hacer o no una cosa y lo primero que estos tiene en cuenta es el nivel de compromiso que esta actividad cualquiera que sea, tiene con su objetivo ya sea entrenar o competir, desde una fiesta, compartir con los amigos, salir con la novia, etc. invariablemente los deportistas exitosos tienen clara la decisión a tomar primero hay que conocer el grado de importancia de la actividad en cuestión y luego darles un orden de prioridad siempre teniendo en cuenta que el objetivo vital es el rendimiento deportivo y que nada puede interferir en eso.

Durante la primera etapa del proceso de preparación lo mas urgente e importante es alcanzar buen nivel de desarrollo de las capacidades condicionales básicas, para crear las condiciones que posteriormente permitirán un desarrollo de carácter mas específico en relación a la competencia, luego en esta segunda fase lo mas urgente e importante es alcanzar la forma deportiva que permitirá alcanzar el triunfo, este orden no puede ser violado por ningún concepto porque daría al traste con los objetivos preestablecidos.

Muchas otras actividades durante este tiempo pueden tener la connotación de importantes pero no serán de urgencia y deberá declinarse su realización o deben ser pospuestas para ser realizada en un momento en que no interfiera con lo verdaderamente urgente e importante.

Cuarto Hábito: Pensar en Ganar – Ganar

La actividades fundamentales en el deporte son entrenar y competir y en ambas se establece una importante interacción con otras personas debiendo estar las acciones dirigidas a lograr el triunfo, ahora bien el triunfo no es posible si no existe el oponente, en este caso la relación ganar – ganar está presente en el hecho de que la intención de la actividad deportiva no está encaminada al solo hecho de ganar porque el contrario pierde sino porque logramos un alto nivel de preparación técnica táctica, física, teórica y psicológica que nos coloca en la posibilidad de triunfar y este triunfo se hace mas importante en la medida que nuestro oponente esté en condiciones de ofrecer la mayor resistencia teniendo las posibilidades objetivas de lograr también el triunfo. Que sentido tendría la competencia si el contrario no tiene la mas mínima posibilidad de triunfo, evidentemente se pierde el sentido de lo justo y los resultados dejan de tener una connotación importante.

Los competidores a nivel mundial y olímpico, logran rendimientos sorprendentes porque a esos niveles llegan los triunfadores, todo finalista de un certamen olímpico es un triunfador poniéndose de manifiesto el hábito de Ganar – Ganar, a esos niveles ya nadie pierde en realidad y el triunfador logra establecer gran performance porque sus oponentes se lo exigen y así todos se llevan el sentido de participar de esa victoria

En una sana competición gana el mas exitoso dentro de su proceso de preparación, "…..las personas con mentalidad ganadora, no necesariamente tienen que querer que algún otro pierda. lo que les importa es conseguir lo que quieren" (Tomado del resumen del libro 7 Habitos de la Gente Altamente Efectiva; del Dr Stephen Covey)

Esta actitud planteada por en el Hábito Ganar – Ganar, está contenida en las reglas del Juego Limpio, que entre otras cosas establece la necesidad de ganar protegiendo al contrario, cuidando de no dañar su integridad física y/o psicológica.

No hay que olvidar que de no haber oponente tampoco habrá competencia y por ende no habrá triunfo que celebrar.

Quinto Hábito: Procure primero comprender y después ser comprendido

Veamos este hábito primero desde el punto de vista de la relación entrenador-deportista-entrenador.

El binomio entrenador deportista es una de las relaciones en las cuales se requiere de mucha comprensión mutua, el entrenador debe comprender profundamente a su pupilo, para lograr que este lo comprenda a él. Las grandes exigencias a que es sometido el deportista son orientadas y dirigidas por el entrenador y si este no comprende el funcionamiento de esa entidad bio-psico-social, difícilmente logrará hacerla funcionar al máximo de sus posibilidades, de la misma manera deberá el entrenador lograr que el deportista entienda las motivaciones que tiene él como entrenador relacionadas con el trabajo en equipo, para someterlo a las grandes cargas de trabajo que requiere la alta competencia.

Un deportista sometido a presiones físicas y psicológicas extremas, se hace muy sensible y fácilmente pierde el equilibrio emocional y es a través de un alto grado de comprensión que el entrenador logra mantenerlo en equilibrio y sacar de él los mejores resultados.

Sexto Hábito: La Sinergia

El Término Sinergia, "…….quiere decir literalmente trabajando en conjunto. Actualmente se refiere al fenómeno en el cual el efecto de la influencia o trabajo de dos o más agentes actuando en conjunto es mayor al esperado considerando a la suma de las acciones de los agentes por separado. (Tomado de la Web, Diccionario de Wikipedia)

Leída esta definición, huelga decir que el éxito del trabajo en la actividad deportiva depende en gran medida de la sinergia establecida ya no solo entre deportista y entrenador sino a todo el equipo multidisciplinario que despliega su labor en función de que el deportista logre sus mas altos rendimientos competitivos en el momento y lugar adecuado.

Curiosamente la sinergia que permite alcanzar logros deportivos incluye no solo a los compañeros de equipo y a los miembros del Equipo Multidisciplinario mencionado, sino que de este importante equipo forma parte indisoluble el oponente, ya que como vimos en hábitos anteriores si no hay oponente no hay competencia y si el oponente no es del nivel de exigencia requerido no habrán grandes resultados. La competencia puede caer en la mediocridad.

Esto se hace perfectamente visible en las grandes competiciones de Ciclismo de Ruta y las carreras de Maratón, en las cuales durante horas se conforman pelotones de competidores que aunque todos parten hacia la victoria se plantean una tácita colaboración durante todo el recorrido en aras de llegar a la meta con un resultado destacado.

Los no triunfadores carecen de ese sentido del trabajo en equipo y pierden el contacto con el grupo de competidores, ya sea porque intentan tempranamente irse al frente en busca de la meta de forma prematura y sucumben luego al trabajo en equipo del pelotón o porque el pelotón los deja atrás por faltarles la capacidad de interactuar como parte del equipo.

Séptimo Hábito: Afile la Sierra

Ateniéndonos al concepto, a lo que se entiende por Afilar la Sierra, queda claro que en la actividad deportiva es de eso precisamente de lo que se trata, de estar siempre en forma, de mantener un estado óptimo de respuesta ante estímulos de entrenamientos o competencias en el caso del deportista. Para los entrenadores esto estaría dado a través de la constante capacitación para acceder a los últimos adelantos de la ciencia, mejorar la capacidad intelectual y por qué no, también la capacidad física de trabajo mediante el ejercicio físico que los mantendrá en forma.

Octavo Hábito: Encuentre su Propia Voz y Haga que su Voz Inspire a Otros para que Encuentren la suya.

Según Covey expresa en su libro "El 8vo Habito de la Efectividad a la Grandeza", animar hacia la grandeza significa actuar con integridad como individuo y ayudar a otros para que hagan lo mismo, según el propio autor este hábito representa la 3ra Dimensión de su modelo. Este es un hábito practicado día a día por los entrenadores de éxito, que tienen que encontrar su propia voz y a su vez ayudar a los deportistas bajo su dirección a encontrar su propia voz para que, con disciplina, autocontrol e independencia como componentes de las capacidades volitivas mantengan el firme propósito de triunfar cumpliendo con los 7 hábitos para alcanzar la grandeza en todas sus dimensiones. Grandeza Personal, Grandeza de Liderazgo y Grandeza Organizacional.

No es casual que en la vida de los grandes deportistas y destacados entrenadores existan tantas cosas comunes, sobre todo la pasión con que acometen sus actividades y la forma disciplinada en que se comportan en dirección al logro ya que, según Covey "cuando se estudian las vidas depersonas que han conseguido logros importantes, se encuentran patrones comunes; ellos tienen visión, disciplina, pasión y conciencia. Tiene visión para ver lo que es posible en la gente, los proyectos las causas y las empresas, Tienen disciplina y pagan el precio para que esta visión se haga realidad. Tienen pasión, fuego, deseo y fortaleza en sus convicciones y esa pasión es la que sostiene la disciplina para lograr la visión. Tienen conciencia, sentido moral interno de lo que es bueno y lo que es malo. Y esta conciencia es la fuerza que guía la visión, la disciplina y la pasión. La propia voz según afirma Covey, reside en el nexo del Talento (los dones naturales y la fortaleza.) la pasió, (aquellas cosas que naturalmente energizan, exitan, motivan e inspiran).

Inspirar a Otros a Encontrar Su Voz

Esta segunda parte nos lleva al dominio del liderazgo, definido por Covey como: Liderazgo es comunicarle a la gente su valor y su potencial de modo tan claro que ellos puedan llegar a verlos en ellos mismos. Es en un equipo deportivo el rol asumido por los capitanes de equipo, líderes entre sus compañeros por sus fuertes convicciones y por la capacidad de inyectar en ellos la fuerza de creer, de encontrar su propia vos para direccionar el triunfo

Según Covey el Liderazgo es una elección, no una posición, implica autoridad moral no formal.

Autor:

Lcdo. Sixto A. Hierrezuelo Ramírez