"Estriado" (Estrías son los surcos grabados en el interior del cañón de un arma de fuego).
"Liso", cuando carecen totalmente de estrías.
Las que presentan su cañón estriado se clasifican a su vez en:
"Carabinas", cuando el largo del cañón no sobrepasa los 560 mm de longitud
"Fusiles" cuando se supera esta medida.
Desde el punto de vista legal el régimen jurídico al que están sometidos los fusiles y las carabinas es idéntico.
Las que tienen su cañón liso son las "Escopetas", que pueden ser de uno o dos caños y que se cargan normalmente con cartuchos que contienen perdigones.
Carabinas y fusiles, de carga tiro a tiro, repetición o semiautomáticos:
Escopetas de carga tiro a tiro, repetición o semiautomáticas:
Puño: pistolas, revólveres y pistolones.
B)- Según la carga que proyectan en cada disparo:
1. Armas de proyectil único o bala
2. Armas de proyectil múltiple: metralla, postas, perdigones…
C)- Según la construcción del arma:
- Armas típicas: son las construidas como tales por los distintos fabricantes para los diferentes usos
- Armas atípicas: son las modificadas o fabricadas de forma casera: tuberías, de imitación modificadas, de coleccionista, etc.
E)- De acuerdo al calibre:
1.- Pequeño calibre.- Menos de 20 mm.
2.- Mediano calibre.- Hasta 75 mm.
3.- Gran calibre.- Más de 75 mm.
F)- Por el tipo de cañón:
1. De cañón de ánima lisa: Carece de estriado y son las escopetas, diseñadas para el disparo de proyectiles múltiples (perdigones).
2. De cañón de ánima rayada o estriada: El interior del cañón del arma (ánima) presenta un rayado particular en bajorrelieve, de forma helicoidal, llamado "estriado" y que le suministra a los proyectiles por ellos expulsados un movimiento rotacional sobre su propio eje que le brinda estabilidad direccional a la trayectoria del mismo.
Pistola: Es un arma corta, de puño, el almacenamiento de los proyectiles se realiza introduciendo el cargador en le almacén del cargador que se encuentra en la empuñadura del arma y tiene capacidad para 13 proyectiles a los que sumados se coloca en la recamara haría un total disponible de 14 proyectiles para disparar antes de tener q reponer un cargador. Su sistema de funcionamiento se conoce como de corto recorrido o retroceso del cañón. La pistola podrá ser disparada por la simple presión sobre la cola del disparador. Mecánicamente funciona de esta manera:
1) Con la primera falange del dedo índice, el tirador presiona la cola del disparador, el que comienza a girar sobre su propio eje. La palanca del disparador, al estar colocado el cargador, se desplaza hacia atrás y se eleva hasta entrar en contacto con el extremo anterior de la placa del fiador.
2) La palanca del fiador ejecuta un movimiento de balancín, se eleva en su extremo anterior y desciende en su extremo posterior, donde posee un resalte, que entra en contacto con otro resalte del fiador y lo desplaza su eje, hacia abajo, haciéndole zafar sobre la primera muesca del martillo.
3) El martillo, por la fuerza de su resorte, golpea violentamente en la parte trasera del percutor, que esta dentro del hueco del macizo central, y venciendo la resistencia del resorte lo desplaza hacia adelante para que impacte con fuerza contra la capsula fulminante del cartucho.
4) La carga fulminante, a una velocidad infinitesimal, se incendia, y a través de los oídos del cartucho, incendia la carga de la pólvora, la que instantáneamente comienza a producir gases de enorme volumen y gran energía que se expande en todas direcciones. Siendo la unión del proyectil con el cartucho (gollete) la parte mas débil (tiene una fuerza de apretado 10 a 40 kg), los gases, presionando sobre el culote de la bala, la impulsa a gran velocidad y con gran fuerza al interior del cañón. El proyectil es ligeramente superior en calibre al anima del cañón, lo que motiva que su paso sea forzado, y por efecto del estriado adquiere un movimiento de rotación sobre su eje longitudinal, que lo acompañara durante toda la trayectoria. La pólvora continúa quemándose y acompaña al proyectil hasta que l mismo abandona el caño, luego, cuando esta en contacto con la atmosfera, provoca el clásico estampido y una lengua de fuego.
5) Parte de los gases ejerce también presión sobre el culote del cartucho, originando con ello que se venza la resistencia del resorte recuperador, y la corredera se desplace hacia atrás; al hacerlo, el extractor que esta fijado en ella arrastra la vaina servida, que a medio camino golpea con el culote contra el eyector y sale al exterior por la ventana de expulsión.
La corredera ha completado el recorrido hacia atrás y por la presión del resorte recuperador, regresa a su lugar, habiendo previamente montado el martillo y ubicado un nuevo cartucho en la recamara. Cuando el proyectil penetra en el cañón del arma, lo recorre y sale del mismo, dándole una rotación longitudinal sobre su eje que produce mayor alcance y precisión, así como también mayor velocidad desde la boca del arma, acrecentando la energía cinética. Esto es producido por el estriado del cañón que tiene un giro hacia la derecha de seis rayas con paso de estría de 250 mm y cuenta con un número de seis estrías
Revolver: Es un arma corta, de puño, diseñada para su empleo con una sola mano y por una sola persona. Este tipo de arma tiene un almacenamiento de munición distinto de las armas mas comunes o convencionales, ya que cuenta con un tambor de distinta cantidad de alveolos o cavidades, para colocar la munición. Cuando menor es el calibre, mayor la cantidad de alveolos tiene el tambor. Se carga introduciendo uno a uno los proyectiles, en los alveolos, ya sea volcando el tambor o articulando la empuñadura del resto del arma.
Para accionar el mecanismo y producir el disparo se hace presión sobre la cola del disparador y se pone en movimiento el mecanismo interno que hace accionar el martillo, el que se desplaza hacia atrás, vuelve libre con fuerza y golpea en la púa, la que a su vez percute sobre el fulminante de la munición. El fulminante se enciende y el fluido de calor pasa por los oídos que tiene el cartucho en su parte superior, separando la pólvora del fulminante y encendiendo la primera, que es la carga de propulsión al encenderse, esta produce gases que presiona sobre la parte posterior de la bala, que vence la resistencia de encastre con la vaina y empuja el proyectil a través del cañón.
El proyectil es parte esencial, en referencia a la lesiones de arma de fuego por eso es imprescindible el conocimiento de las mismas. El concepto más ajustado para dar una idea cabal de un cartucho de arma de fuego es el que lo define como "La unidad funcional compuesta por la vaina, el proyectil, la carga de proyección o balística (pólvora) y el fulminante". Los cartuchos utilizados en las armas de fuego se clasifican según el siguiente criterio:
Por la cantidad de proyectiles que portan:
1) De proyectil único: Cada cartucho posee un solo proyectil y responde a los cartuchos utilizados por la gran mayoría de las armas disponibles en el mercado.
2) De proyectiles múltiples: Estos cartuchos poseen en su interior una cantidad variable de proyectiles, generalmente de forma esférica, llamados vulgarmente "perdigones" o "postas", las que pueden ser fabricadas en aleación de plomo, goma o material plástico. Son generalmente disparados por armas de ánima lisa (escopetas), aunque también existen cartuchos diseñados para otras armas, conociéndose estos últimos con el nombre genérico de "cartuchos de supervivencia", ya que están destinados a la caza de animales menores, particularmente pequeñas aves.
Por el tipo de proyectil: Se refiere a los cartuchos de proyectil único y se subdividen en:
1) De proyectil desnudo: El proyectil está constituido por una pieza de aleación de plomo, antimonio y estaño, el que en algunas oportunidades puede presentar un baño electrolítico de cobre. Posee la característica de presentar una serie de muescas dispuestas en una línea alrededor del cuerpo cilíndrico del proyectil, en las que se aplica un lubricante grafitado especial, razón por la cual se la conoce como "cintura de engrase".
2) De proyectil encamisado: Este proyectil posee un núcleo de aleación de plomo recubierto por una placa o "camisa" de latón (aleación de cobre y zinc), la que le suministra mayor dureza y por lo tanto un mayor poder perforante.
3) De proyectil semi-encamisado o punta blanda: Al igual que el anterior este proyectil consta de un núcleo de aleación de plomo recubierto parcialmente con una funda o "camisa" de latón, la que en este caso deja al descubierto el sector correspondiente a la ojiva o "punta" del proyectil que al ser de material más blando, se deforma al impactar sobre el blanco expandiéndose, con lo que aumenta su diámetro, adoptando contornos irregulares, todo lo cual, unido al movimiento rotacional de que esta provisto el proyectil, suministrado por el estriado del cañón, produce lesiones de elevada consideración y alto poder de volteo, por lo que se la recomienda para uso en la práctica de la caza mayor.
El cartucho del revólver se caracteriza por tener punta de plomo cualquiera sea su tipo, la pistola por tener un proyectil encamisado. El culote del revólver tiene una pestaña sobresale y hace tope la recámara
Por la forma de la ojiva: Se subdividen en:
1) De ojiva aguzada: Son proyectiles de punta aguda, recomendados por la Convención de Ginebra para su utilización en las guerras convencionales. Poseen alto poder de penetración y generalmente son del tipo "encamisado" lo que le permite perforar y atravesar los tejidos blandos manteniendo energía remanente que se pierde con el proyectil luego de atravesar el blanco. Responden a los denominados "proyectiles perforantes".(Fusiles "Maúser", FAL, M 16, etc.).
2) De ojiva redondeada o semi-esférica: Como su nombre lo indica el extremo distal de estos proyectiles presenta una forma redondeada o semi-esférica razón por la cual la superficie de contacto entre el proyectil y el blanco al momento del impacto es mayor que en el caso anterior y por ende, más rápidamente se efectúa la transferencia de energía entre ambos cuerpos, a la vez que provoca un mayor efecto de shock hidrodinámico aumentando el poder de volteo. (Pistolas 11,25 mm y 9 mm, revólveres .38, .357 magnum, .44-40, etc.).
3) De ojiva troncocónica o "punta plana": En estos proyectiles la ojiva propiamente dicha no existe ya que su diseño responde a un formato de cono truncado, presentando su punta un plano perpendicular a su eje de simetría con lo que se logra incrementar los efectos descriptos en el punto anterior. Este tipo de ojiva generalmente se combina con proyectiles del tipo "semi-encamisado" o "punta blanda", lográndose incrementar aún más su poder de volteo y la gravedad de las lesiones que provoca. (Revólveres 38 Especial, .357 magnum, 44-40 y .44 magnum.).
4) De ojiva perforada o "Punta Hueca": En estos casos los proyectiles presentan una perforación en el centro de la ojiva, la que responde al subtipo de "Ojiva redondeada", combinándose generalmente con proyectiles del tipo "semi-encamisado" o "Punta blanda". Estos proyectiles, conocidos vulgarmente con el nombre de "Bala Dum-Dum", poseen la particularidad de expandirse al entrar en contacto con el blanco, por los que también se los conoce con el nombre de "munición expansiva", siendo los de mayor poder de volteo de todos los descriptos. Se usa generalmente en revólveres .38 Especial, .357 magnum, .44-40 y .44 magnum, como así también en rifles y carabinas de caza mayor del tipo 30-30, 30-03, etc.
A-Redonda; B-Cilindrica; C-Ojival; D-Cilindro-conica; E-Cilindro-ojival;
F-Aerodinamica
G-Hueca o perforada; H-Tronco-conica; I-Concava; J-Plana; K-Talonada
Por la ubicación del fulminante en la vaina: Se dividen a su vez en:
1) Cartuchos de fuego central: Son los que poseen su fulminante incluido en una pequeña cápsula ubicado en la zona central del culote de la vaina, comunicándose con su interior a través de orificios (generalmente dos) llamados "oídos" entre medio de los cuales existe un resalto del fondo de la vaina que recibe el nombre de "yunque". Este tipo de ubicación del fulminante es el utilizado en la gran mayoría de los cartuchos, conociéndose hoy en día como única excepción a los cartuchos de todo tipo de armas perteneciente al calibre .22.
2) De fuego anular: Son los que poseen su fulminante dispuesto en forma de anillo siguiendo la periferia de la base o culote de la vaina. Este tipo de cartuchos es el utilizado por todas las armas correspondientes al calibre .22.
3) De espiga o sistema "Lefaucheux": Se menciona en la actualidad solo a título ilustrativo ya que corresponde a los primeros modelos de cartucho con fulminante incorporado. En ellos el fulminante se coloca en un pequeño cilindro o "espiga" que va insertado en el sector inferior del lateral de la vaina, lugar donde golpeado directamente por el martillo de percusión ya que este modelo de armas carece de aguja de percusión. En nuestro país este tipo de armas se utilizó hasta mediados del siglo pasado.
BALÍSTICA
El Diccionario Enciclopédico de la Lengua Castellana – Ed. Codex S.A. – Buenos Aires – 1974, define el término "Balística" como "(F.) – Parte de la mecánica que estudia el alcance y dirección de los proyectiles"; por otra parte, el Diccionario Ilustrado de Ramón García-Pelayo y Gross – Ed. Larousse – Buenos Aires 1988, define este mismo término como "(Mil.) – Arte de calcular el alcance y dirección de los proyectiles"
De lo expuesto se desprende que con el término "Balística" se reconoce a la parte de las ciencias físicas, específicamente la mecánica o dinámica de los cuerpos, que trata sobre los fenómenos que afectan el movimiento de los proyectiles en el espacio y que por lo tanto determinan su dirección y alcance; respondiendo a este concepto también los textos, tratados y reglamentos de balística militar.
El concepto que el término "Balística" comprende desde el punto de vista forense, es decir de la aplicación de las leyes, principios, técnicas y procedimientos de las ciencias a la resolución de problemas judiciales, es mucho más amplio, respondiendo, tal como lo define Don Roberto Albarracín en su Manual de Criminalística (Ed. Policial – Buenos Aires – 1971), "Balistica: Es la ciencia y arte que estudia integralmente las armas de fuego, el alcance y dirección de los proyectiles que disparan y los efectos que producen", concepto al que adherimos los especialistas de nuestro medio.
Conforme el concepto expresado en el punto precedente, la Balística Forense, es decir aplicado a la resolución de problemas judiciales, se clasifica en TRES (3) partes, conforme al siguiente detalle:
BALÍSTICA INTERIOR:
Es la parte de la Balística que se ocupa del estudio de la totalidad de los fenómenos que se producen en el arma a partir del momento que el percutor golpea el fulminante del cartucho y alcanza hasta el momento mismo en que el proyectil abandona la boca de fuego del cañón. Esta parte de la Balística se ocupa también de todo lo relativo a las armas de fuego, su estructura, mecanismos, funcionamiento, carga y disparo de la misma.
Todas aquellas piezas del arma de fuego que de una u otra manera entran en contacto con el cartucho antes, durante o luego de la detonación del mismo, transmitirán a las vainas y proyectiles utilizados características peculiares que permitirán su identificación. Producida la deflagración de la carga de pólvora y la consecuente generación de la masa gaseosa como consecuencia de la misma, se incrementa la presión dentro de la recámara del arma la que culmina desprendiendo el proyectil que se encuentra hasta ese momento engarzado en la vaina, impulsándolo a lo largo del cañón.
El proyectil posee un diámetro ligeramente mayor que el ánima del cañón, lo que hace que ingrese a ésta en forma forzada, adoptando la forma del ánima, la que imprime al proyectil su propias características, reproduciéndose en bajorrelieve las estrías y en altorrelieve los espacios inter-estriales . Si tenemos en cuenta que el estriado del cañón de las armas de fuego se efectúa a partir de un tubo de acero, rayando su interior con un maquinado que utiliza una herramienta especial denominada escariador, y que va a introducir desde el momento mismo de la fabricación, un micro-rayado producto de las alteraciones microscópicas de sus filos o partes desbastantes.
Estas características se producen en el momento mismo de la fabricación del cañón, razón por las que podemos denominarlas congénitas ya que nacen con el mismo, que se van marcando aun mas con el transcurso del tiempo, como consecuencia del uso, conservación, defectos de limpieza y muchas otras causas más, se van produciendo otras tales como pequeños núcleos o puntos de oxidación, denominados picadura, los que van a transmitir al cañón nuevas particularidades identificadoras, a las que denominaremos adquiridas y que, en definitiva le suministrarán características que lo harán único y totalmente diferente a los demás, y que permitirá identificar en forma categórica e indubitable a todos y cada uno de los proyectiles disparados a través de un cañón determinado.
En el caso de los revólveres, el tambor se comporta como almacén cargador, mientras que cada uno de los alvéolos del mismo cumple las funciones de la recámara en el momento de producirse el disparo. Si el eje de simetría de cada uno de los alvéolos no coincide exactamente con el eje de simetría del cañón, se producirá un pequeño desfasaje entre ambas piezas, lo que implicará que el proyectil roce con una parte determinada de su ojiva, con uno de los bordes posteriores del cañón, produciéndose lo que se conoce con el nombre de Marcas de abocamiento, las que pueden llegar a suministrar importantes indicios de alto valor identificatorio.
La aguja de percusión transmite a la cápsula fulminante energía de impacto suficiente como para hacer detonar el explosivo que se encuentra alojado en ella, produciéndose así el fuego que es transmitido a la pólvora a través de pequeños orificios. Las huellas o marcas características que deja la punta de la aguja de percusión en el lugar de impacto van a ser únicas y diferentes a las demás, propiedad fundamental para su identificación.
BALÍSTICA EXTERIOR:
A esta parte de la Balística le corresponde el estudio de la trayectoria del proyectil, desde el momento en que abandona la boca del cañón del arma hasta su arribo al blanco, y de los fenómenos que lo afectan en concordancia con las particularidades de cada caso, tales como la gravedad, la resistencia del aire, la influencia de la dirección e intensidad de los vientos y particularmente los obstáculos que se le interpongan y que en definitiva son productores de los rebotes que modifican la trayectoria original.
La trayectoria seguida por el proyectil disparado por un arma de fuego conformará una figura parabólica con nacimiento en la boca del cañón del arma y finalización en el blanco. Esta parábola variará en sus características, principalmente la longitud de su rama ascendente, la altura máxima alcanzada, la distancia máxima a la cual puede ser proyectado, la estabilidad direccional o deriva y toda otra condición que la determine, según una serie de variables que deberán ser tenidas oportunamente en cuenta, cuando trate de determinarse la trayectoria de un proyectil en particular y establecer, conociendo el punto de impacto, el probable origen del disparo.
Las variable se refieren particularmente a: Calibre del proyectil, forma de la ojiva del mismo, tipo y cantidad de carga de proyección del cartucho, velocidad del proyectil en la boca del arma, energía cinética del proyectil en la boca de fuego, ángulo de disparo, velocidad y dirección del viento imperante en la zona al momento de efectuarse el disparo, etc. El tramo de mayor importancia es el comprendido por la primera parte de la rama ascendente de la parábola, la que por su muy escasa variación puede equipararse a una línea recta. Sabemos que una recta estará definida por dos puntos, mientras que por un solo punto pasan infinitas rectas, por lo tanto para establecer en forma precisa la trayectoria de un proyectil debo contar con por lo menos dos puntos por donde el mismo haya pasado.
Los movimientos del proyectil en el espacio estarán influidos particularmente por el tipo y forma de ojiva que posea el mismo, la que será menos afectada por la resistencia del aire cuanto más aguzada sea; la velocidad del viento y su dirección con respecto al eje de la trayectoria, pudiendo producir derivas de consideración; la masa del proyectil, que se verá influida más o menos rápidamente por la aceleración de la gravedad; el paso de la estría, que determinará la velocidad del movimiento rotacional del proyectil y por lo tanto su estabilidad direccional, directamente relacionada con su poder de penetración, la mayor o menor resistencia al avance que le oponga el aire, la velocidad inicial con que el proyectil fuera expulsado de la boca del cañón, etc.
Al efectuar estudios de trayectoria se tendrán en cuenta la existencia de probables rebotes en objetos estáticos (columnas, paredes, techos, etc.) y/o dinámicos (vehículos en movimiento), y se determinará la forma en que estos pudiesen haber actuado en la modificación de la trayectoria original.
Por medio de la trayectoria también podemos determinar la posición del tirador esta determinación implica establecer el punto de origen de la parábola o bien, es decir la ubicación de la boca de fuego, para lo cual debe estudiarse detalladamente las características del orificio de entrada, principalmente si éste está contenido en objetos estáticos, comprobando principalmente su forma: circular u ovoide, y en este último caso la dirección del eje mayor del óvalo y la determinación del ángulo de incidencia, aspectos que nos darán una noción de la dirección de procedencia del disparo. Esta determinación será mucho más precisa en el caso de contar con dos o más elementos que hayan sido afectados por el disparo lográndose en estos casos determinar la posición del tirador con precisión casi absoluta.
BALÍSTICA DE EFECTOS:
Tal como su nombre lo indica, esta parte de la Balística estudia los efectos producidos por el proyectil en el blanco alcanzado, particularmente las características propias del Orificio de Entrada causado por el proyectil y de la zona inmediata que lo rodea, características éstas que permitirán establecer importantes elementos los que avalarán conclusiones relativas a problemas tan complejos como la determinación de la distancia de disparo.
CAPÍTULO II
LESIONES POR ARMAS DE FUEGO CORTAS
Lesión es todo cambio patológico producido en un organismo. Desde el punto de vista legal implica presunción de daño (dolosa o culposo), de origen accidental o voluntario, intencionado o inesperado, por negligencia o impericia en el proceder, por ignorancia o por falta de cumplimiento de los deberes o de funciones de un cargo, que implica un deber y da lugar a sanciones previstas en la ley.
Las lesiones por arma de fuego son lesiones contusas y dependiendo del área del cuerpo en donde hace impacto también pueden ser perforantes de diversa gravedad. También dependiendo de la distancia del disparo puede producir lesiones por quemaduras de primer de primer grado en este caso si el arma es apoyada sobre la piel. Otros tipos de lesiones que produce son fracturas o aspecto de papilla en los tejidos.
El proyectil de un arma de fuego puede producir los siguientes tipos de lesiones:
1.- Herida penetrante: Serán penetrantes cuando el proyectil o los proyectiles ingresen en el cuerpo humano pero finalizan su trayectoria en el mismo, sin producirse su egreso.
2.- Perforante: Serán perforantes cuando entren y salgan completamente del mismo.
Sin embargo debe aclararse que una herida puede ser tanto penetrante como perforante puesto a que, por ejemplo: puede producirse el hecho que un proyectil ingrese al cuerpo quedando alojado en el mismo (lesión penetrante) pero que haya atravesado un órgano íntegramente en ese trayecto, produciendo una lesión perforante en el mismo.
3.- Contusiones leves:
– Equimosis. Por percusión del proyectil con velocidad agotada.
– Erosiones o surcos. Por impacto tangencial.
4.- Contusiones graves.
En este tipo de heridas existen dos tipos de mecanismos de producción que actúan en el cuerpo: 1) el choque del proyectil con el cuerpo (efecto directo) y 2) la transmisión de energía cinética llamado "blast" (efecto indirecto).
Las heridas producidas por los proyectiles en el cuerpo afectarán un primer plano que serán los tejidos que componen la piel (epidérmico, dérmico e hipodermis), para luego proseguir con su trayectoria dentro del organismo. El resultado directo del impacto será el orificio de entrada que presentará particularidades según las circunstancias del hecho (ángulo y distancia de disparo, munición, región a la cual afecte, etc.) El orificio de entrada tendrá signos aportados por el arma, el proyectil y la pólvora que son de trascendencia médico-legal ya que permiten:
1.- Establecer lesión por arma de fuego
2.-Angulo de incidencia
3.-Distancia y
4.-Lesiones ante mortem o post mortem
Cuando el proyectil disparado por un arma de fuego incide sobre la piel y los músculos que se encuentran ubicados debajo de la misma, en razón de la elasticidad de las fibras que componen ambos tejidos, se produce primeramente una depresión con elongación de los tejidos, los que finalmente, al ser vencida por el proyectil la resistencia que estos oponen a su avance, son perforados dejando una herida circular u ovoide de labios dirigidos hacia el interior de la piel. El orificio es en la gran mayoría de los casos de diámetro menor al del proyectil, variando el mismo según el tipo de ojiva, la velocidad, los movimientos del proyectil (rotacionales y de mutación), la profundidad a la que se halla ubicado el plano óseo más cercano, la orientación de las fibras musculares, las ondas sónicas y la turbulencia que siguen al proyectil, la posición y el ángulo de incidencia del mismo sobre la piel, etc.
Al vencer la resistencia de la piel se produce una herida de carácter contuso perforante que tiene características particulares observables a nivel de los bordes, a saber:
Anillo de contusión: es un anillo contusivo-excoriativo producto del impacto del proyectil con la piel. Atestigua el carácter vital de la lesión ya que en su conformación interviene la ruptura de los capilares de la dermis con extravasación hemática y formación de costra serohemática, es decir de los constituyentes de una lesión equimótica y excoriativa.
Anillo de Enjugamiento: se encuentra por dentro y por encima del anterior, y se lo describe como el anillo conformado por el depósito de impurezas que arrastra el proyectil en su salida del cañón del arma.
Halo o anillo de Fisch: se denomina así a la superposición del anillo de contusión y al de enjugamiento. El halo o anillo de Fisch no es constante debido a que a diferencia del anillo de contusión que esta presente siempre, el anillo de enjugamiento no se observará en aquellos casos donde el proyectil en su trayectoria impacte un blanco previo a la piel como puede ser la ropa. En estos casos el depósito de las impurezas se llevará a cabo en este primer objeto limpiando al proyectil sin posibilidad de formarse el halo de Fisch.
El anillo de Fish también nos puede aportar en forma aproximada, el ángulo de incidencia con que penetro el proyectil. Cuando el anillo Fish forma un circulo concéntrico con el orificio de entrada, significa que el proyectil penetro en forma perpendicular al plano del impacto, es decir con un ángulo de incidencia de cero grado; cuando forma una media luna cuyo vértices coinciden con el diámetro del orificio, significa que el proyectil penetro con un ángulo de incidencia de 45 grados; si los vértices de esa media luna están por debajo del diámetro, por lo tanto se nota mayor superficie en su parte media (mas ancha), el ángulo de incidencia es mayor a los 45 grados, y si los vértices de la media luna están por encima de la diagonal o diámetro, el Angulo es menor de 45 grados.
Si el orificio de entrada no es circular, puede ser ovoide por la elasticidad de la piel, se toma como referencia el diámetro menor, cuando el orificio tiene su diámetro mayor en forma perpendicular al suelo, o viceversa, siempre teniendo en cuenta la dirección de penetración del proyectil. En estos casos también se puede notar el círculo concéntrico y las medias lunas que produce el anillo de Fish.
Golpe de Mina o Hoffmann: los bordes del orificio de entrada son en su mayoría regulares e invaginados (hacia adentro). Sin embargo, cuando la boca del cañón al efectuar el disparo se encontraba firmemente apoyada contra la piel en una región del cuerpo humano donde existe inmediatamente un plano óseo, los gases producidos por la deflagración de la pólvora chocan contra este y antes de que se produzca el orificio que permita su continuidad, hacen estallar la piel produciéndose un: orificio estrellado con bordes quemados depositándose negro de humo y granos de pólvora en su interior y en el plano óseo. El campo circundante presenta una ligera contusión circular, producida por la acción quemante del cañón (calentado por la combustión de la pólvora), o bien por la bagueta que, debajo del cañón, poseen algunos revólveres; se denomina signo de Puppe-Werkgartner.
El Signo de Benassi es el anillo de ahumamiento producido alrededor del orificio de entrada, en el plano óseo, cuando el disparo ha sido hecho con el arma aplicada contra el plano cutáneo. Se encuentra especialmente en los disparos suicidas efectuados sobre el cráneo. Su importancia radica que es signo de orificio de entrada y resiste la putrefacción
Golpe de Mina de Hoffmann
Golpe de Mina de Hoffmann (por debajo de la piel, la fractura sufrida por la calota)
La pólvora produce el "tatuaje" que es la suma de la acción de la llama, las partículas de pólvora no combustionada y el negro de humo. Este tatuaje y la aparición de sus componentes dependerán de la distancia que mediaba entre el arma y la persona al momento del disparo. El tatuaje si bien es uno solo, se lo divide en tatuaje verdadero y tatuaje falso. El tatuaje verdadero esta conformado por: la quemadura de la piel producto del contacto de la llama (compuesta por gases a alta temperatura y residuos sólidos que salen junto con el proyectil) y los granos de pólvora que no llegaron a combustiones de manera que resultan ser pequeños proyectiles anexos que se incrustan en la piel (a nivel epidérmico e incluso dérmico, de allí el nombre tatuaje rodeando el orificio de entrada). La permanencia de ambos efectos luego del lavado origina el nombre tatuaje verdadero, el toilette de la zona, eliminada la sangre coagulada, refuerza su evidencia; tampoco se borra con los líquidos fijadores usados en los museos para conservar la piezas anatómicas; resiste a la putrefacción y su presencia es demostrable microscópicamente mientras exista piel para periciar.
El tatuaje falso, pseudotatuaje o ahumamiento es la impregnación de la piel con negro de humo o carbón producto de la deflagración, que a diferencia de los otros componentes del tatuaje, sí desaparece con el lavado. La distancia de producción es de aproximadamente 30 centímetros en pistola y de 25 centímetros en revólveres
La presencia de tatuaje es signo indubitable de orificio de entrada.
Tatuaje alrededor del orificio de entrada
Las quemaduras se encuentran en los disparos a boca de jarro y a quemarropa, la lesión es una quemadura de primer grado, siendo mas amplia la producida con pólvora negra. La distancia de producción es de aproximadamente de 5 centímetro para pistola y de 15 centímetros para revólveres.
Los granos de pólvora forman con la quemadura, el tatuaje propiamente dicho, que resulta de las partículas de pólvora que no deflagraron, es decir que no entraron en combustión y que al salir juntamente con el proyectil y los gases, se alojaron en la epidermis y la dermis. Se disponen en la superficie, de acuerdo con la distancia a que fue efectuado el disparo, para pistola hasta 35 centímetro de distancia, y en revólveres hasta 70 centímetros, como máximo
El disparo a boca de jarro es el disparo efectuado con la boca del arma aplicada contar el cuerpo de la victima, en contacto con la piel de la misma. La trayectoria externa es nula, ya que la boca del arma se pasa al orifico de entrada. Por lo general el orificio de entrada es redondo, regular, pero puede que no lo sea por dos motivos, primero por la influencia de la fibras elásticas de acuerdo a las Leyes de Filhos-Langer y segundo cuando el disparo es efectuado sobre el plano cutáneo pero sobre el plano óseo (golpe de mina de Hoffman). Entonces vamos a encontrar en el disparo a boca de jarro, dentro de la herida quemadura, tatuaje y ahumamiento, desgarro en estrella si tenemos placa ósea debajo del plano dérmico y fuera de la herida sobre la piel encontraremos halo de contusión circular (acción quemante cañón o de la bagueta).
El disparo a quemarropa: es el efectuado dentro de la distancia que para cada arma y carga de proyectil ocasiona quemadura del plano de ropa o corporal. Esta distancia es de aproximadamente 5 centímetros para pistolas cuya munición esta cargada con pólvora blanca y un poco mas si la pólvora es negra. Lo que encontramos en la herida a esta distancia es anillo de Fish, tatuaje, quemadura y ahumamiento.
En los disparos a corta distancia es el realizado a una distancia mayor que a quemarropa, estando dentro del alcance de las partículas forman el tatuaje. Aproximadamente va de los 30 centímetros al metro. La herida es similar que a quemarropa, quitando los efectos que produce la llama. Los restos de pólvora no suelen pasar de los 70 centímetros de distancia, alcanzando poco más los de pólvora no quemada.
El contorno del orificio de entrada presenta un fenómeno especial, de extraordinario valor para determinar la distancia desde la que se efectuó el disparo: el tatuaje causado por la incrustación de la pólvora incandescente o sin deflagrar. Los componentes del tatuaje son la quemadura que en esta zona no se ve y los granos de pólvora que si se ven. A medida que la boca del arma se aleja, los puntos de tatuaje se van dispersando y atenuando su densidad hasta desaparecer. Cuando en una herida se comprueba la existencia de tatuaje, el disparo no se ha efectuado a una distancia mayor de 50 centímetro
El las heridas por contacto anguloso la boca de fuego del cañón se encuentra sostenido formando un ángulo agudo con la piel. Esto hace que la boca de la boca de fuego no entre en contacto directo con la piel, por ende el gas y el hollín se escapan por ese espacio. El hollín puede encontrarse en dos zonas diferentes, la más visible es un área chamuscada y ennegrecida, en forma piriforme, circular u oval. La menos visible es una larga zona de hollín color gris claro en forma de abanico. Puede depositarse también una pequeña cantidad de granos de pólvora producto del espacio creado. La mayoría de las zonas ahumadas y ennegrecidas se encuentran en forma opuesta a la boca de fuego, mostrando la dirección en la que apuntaba el arma.
Larga distancia. Se sitúa del metro hasta donde alcance la bala. No alcanzan los materiales que forman el tatuaje. En la herida no se encuentra el tatuaje, la herida es ovalada o circular y presenta la cintilla erosiva-contusiva y cerco de limpieza
En el plano de la ropa se puede distinguir las siguientes características: a) el signo de desilachamiento crucial de Rojas: cuando el disparo se efectúa a boca de jarro o a quemarropa, el orificio de entrada es irregular , a menudo en forma de cruz y en sus bordes se puede observar quemaduras, grano de pólvora, ahumamiento.
b) signo de la escarapela de Simonin: ocurre con los disparo a boca de jarro y esta formado por una serie de círculos concéntricos producido por el ahumamiento ubicado sobre la cara del plano de la ropa que contacta directamente con al piel, semejando una escarapela. Partiendo del orificio de ropa hacia afuera se tiene sucesivamente un primer anillo de ahumamiento un segundo no ahumado y un tercero nuevamente ahumado.
c) Signo del Calcado: ocurre ene el disparo a boca de jarro cuando debajo de un aplano de ropa existe otro de color blanco. El humo producido por el disparo al depositarse sobre el plano blanco reproduce como si hubiera sido calcado, la trama del que se halla por encima de el.
La Piel
Las características de la piel, su grosor varia de 0,5 milímetros a 3 milímetros, en la practica se clasifica en fina (menos de un milímetro), mediana (entre1 y 2 milímetros) y gruesa (mas de 2 milímetro). La piel normal es lisa, elástica, deslizable y plegable, salvo en ciertas zonas adherentes a los planos profundos, de consistencia blanda, de color, pigmentación y temperatura uniforme, lubricada por la secreción de sus glándulas, pero seca, esta lubricación solo se produce en cuerpos con vida. Según su grado de adherencia a los planos profundos, la piel puede ser fláccida, laxa o adherente. De estas características depende las distintas reacciones, según el disparo haya impactado en el abdomen, en la cara, en el cuello, en los miembros superiores, en los glúteos, en las mamas, etcétera. Las líneas de Langer y de Kraissl es la disposición de las fibras elásticas de la dermis. La piel es solidaria a la aponeurosis, y por medio de esta, a los músculos subyacentes, debido a las trabeculas conjuntivas, al moverse los músculos, la piel los acompaña en su desplazamiento. Por eso es muy importante conocer la posición de l cuerpo, y por lo tanto de los músculos, en el momento de recibir el impacto, ya que la piel, que es por donde ingresa el proyectil, acompaña a ese musculo. Al contraerse los músculos subyacentes, la piel se acorta, mediante finas arrugas, visibles o no, según la región, y son transversales al musculo subyacente. Si el proyectil causa una herida paralela a las fibras musculares, la herida se adherirá a esta, la contracción de los músculos producirá mayor apertura de la herida.
Plano óseo
Los bordes del orificio de entrada en el plano óseo están dirigidos hacia adentro mientras que los correspondientes al orificio de salida están dirigidos hacia fuera. El umbral de velocidad crítica de impacto para la fractura del hueso humano según las experiencias quirúrgicas se encuentra en 61 metros por segundo.
Cuando se produce un disparo con el arma apoyada en la cabeza de la victima se produce el Signo de Benassi que resulta ser un anillo de ahumamiento concéntrico de 2 a 4 Mm. de diámetro (junto con partículas de pólvora sin combustionar) en el cráneo y que resiste a la putrefacción.
El signo del Embudo, señala la dirección de un proyectil al atravesar la calota craneana de lado a lado. Si el proyectil ingresa por la región occipital, a nivel de la tabla externa se encontrara el vértice de un cono truncado con su base en el orificio de salida.
En la región frontal (entrada), la tabla externa va a presentar perdida de sustancia, regular, redondeada en sacabocado y la tabla interna va presentar perdida de sustancia, el orificio va a ser irregular, de diámetro mayor que el anterior y a bisel interno (la irregularidad es por que el proyectil empuja la tabla interna y arrastra pequeñas esquirlas óseas pertenecientes a la tabla externa).
En la región occipital (salida) la tabla interna va a presentar perdida de sustancia, regular, redondeada en sacabocado, de diámetro mayor que los pertenecientes a la tabla externa e interna del orificio de entrada y la tabla externa también va presentar perdida de sustancia, irregular, de diámetro mayor que el anterior y a bisel. La razón reside no solo en el arrastre de esquirlas óseas provenientes de la tabla interna, sino también en que el proyectil se ha deformado.
También el orificio producido por uh proyectil sobre un plano óseo presenta el Signo de las fisuras irradiadas, que constituye presunción de orificio de entrada. En relación a las fisuras tenemos el Signo de Chavigny que consiste en que frente a dos orificios de entrada a nivel de la calota craneana se puede, analizando las fisuras irradiadas de uno y otro, establecer su orden de producción. Entonces, las fisuras que irradiadas de uno de los orificios, se detiene en los correspondientes al otro, son fisuras pertenecientes al segundo orificio
Plano visceral
En su trayecto, el proyectil dilacera y desgarra las partes blandas (serosas, vísceras, estructuras vásculo-nerviosas) y fractura las estructuras óseas El cuerpo humano por su alto contenido en agua intra y extra celular (70% volumen corporal) es un medio no compresivo, el cual, en el momento del impacto recibe la transferencia súbita de energía que se desprende del proyectil en forma radial a su paso a través de los diversos tejidos.
Esa energía cinética del proyectil se transforma en energía mecánica o de movimiento que desplaza a los tejidos y fluidos biológicos interpuestos en su trayectoria ya sea por el choque propiamente dicho del proyectil o debido a la generación de movimiento de las moléculas de agua y demás fluidos que lo rodean sucesivamente en su recorrido.
En el primer caso se generará una cavidad permanente por acción directa sobre los tejidos produciendo en ellos rotura, contusión, aplastamiento y laceración o disrupción por choque, evidenciable en el curso de la autopsia médico-legal y por lo general de menor diámetro al del proyectil que la origina, dependiendo ello de las características particulares del tejido lesionado
Pero además, por la propiedad de deslizamiento de los líquidos y debido a que por la transmisión de la energía cinética se le confiere un brusco aumento aceleración al movimiento de cada molécula hídrica, cada una de esas moléculas se transformen en numerosos proyectiles que chocan violentamente entre sí y contra la superficie de las paredes que las encierran, sobre las que ejercen presión según el Principio de Pascal: "la presión ejercida sobre un punto de una superficie líquida (en este caso el cuerpo), se transmite por igual al resto de la superficie del líquido". Luego esas moléculas hídricas vuelven (junto con los tejidos desplazados) al centro de la cavidad principal, donde se produjo el vacío de toda sustancia hasta que se agota la energía que las anima.
Esta acción indirecta por la energía mecánica, es cedida a la cavidad permanente, que produciría el estiramiento de los tejidos que la rodean llegando los mismos hasta el límite máximo de su resistencia elástica y produciéndose, sobrepasado este límite, la ruptura del mismo según la característica que es inherente y particular a cada tejido atravesado. Este fenómeno es el llamado "Efecto Blast"
Este fenómeno de estiramiento origina como resultado la conocida Cavidad Transitoria o por Estiramiento, de efímera duración, de allí su nombre (entre 5 a 9 milisegundos, según Vincent Di Maio), pero produciendo como consecuencia evidente una lesión de variada magnitud a mayor cantidad de tejidos, vasos sanguíneos, filetes nerviosos, etc., por afectar a tejidos o estructuras relativamente alejados del pasaje directo del proyectil, aumentando así el volumen total del tejido afectado y por lo tanto la gravedad de la herida.
Puesto que toda herida producida por proyectil, depende principalmente de la velocidad, las armas de fuego se deben clasificar como, de baja o de alta velocidad. Las armas que se catalogan de baja velocidad son aquellas que desarrollan velocidades de 2.000 pies/Segundo, e incluyen dentro de este grupo a todas las pistolas, revólveres y algunos rifles. Las heridas que son producidas por este tipo de armas son menores que las que se producen por armas de alta velocidad como son los rifles de asalto (R15- AK-47, M-60 etc.). Las armas de baja velocidad también pueden producir heridas mortales, dependiendo del sitio donde impactan. Un factor importante a tener en cuenta con las heridas que se producen con armas de alta velocidad es que estas traen consigo el factor adicional de la presión hidrostática y este factor puede por si solo aumentar considerablemente la lesión. La velocidad necesaria para atravesar la piel es de 36 m/s. Manejándose cifras de entre 7 y 10
Para atravesar el hueso se necesitan 61 m/s. Entre 20 y 30 perf. se perforan todos los huesos
La velocidad para que sea mortal un disparo se sitúa en los 122 m/s. Entre 30 y 40 perf.
A más de 600 m/s se produce un efecto hidrodinámico, siendo más notable en los órganos llenos de líquidos, en los que aumenta la presión a que son sometidos los líquidos dependiendo de la velocidad de la bala. A 65 perf. o mas, según casi todos los expertos.
A velocidad superior a 800 m/s se puede producir la muerte por el efecto de choque, sin que sea necesario el que dañe un órgano vital
Los factores que inciden o contribuyen al daño tisular son:
1) El tamaño del proyectil: Entre mas grande sea la bala, mayor la resistencia, y mas grande el trayecto.
2) Deformidad del proyectil: la nariz hueca y suave se aplasta al impacto lo que resulta en una mayor superficie involucrada.
a) Punta Blanda o Semicamisa: es un proyectil con su punta plomo al descubierto, la camisa es cerrada en su parte trasera. Al chocar con el cuerpo de la victima, la punta se achata y se deforma, produciendo un doble efecto; primero agranda los orificios que va produciendo a su paso desde el momento de la deformación, y segundo sirve como freno del proyectil, ya que al aumentar la superficie de perforación, la fuerza de acción que tiene que hacer los pliegues del cuerpo que ejercen la resistencia, al tener mayor superficie reparten la fuerza en varios sectores, produciendo de esa manera el frenado y dejando dentro del cuerpo la mayor parte de la fuerza viva que trae la bala
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