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La ciencia, características y clasificaciones (página 2)

Enviado por mariano_davis


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" La ciencia como actividad -como investigación– pertenece a la vida social: en cuanto se la aplica al mejoramiento de nuestro medio natural y artificial, a la invención y manufactura de bienes materiales y culturales, la ciencia se convierte en tecnología. [En cuanto desarrollo cultural](…) como un sistema de ideas establecidas provisionalmente (conocimiento científico), y como una actividad productora de nuevas ideas (investigación científica)".[9]

Y entonces tenemos nuevas definiciones según el punto de vista desde el cual se analiza el concepto de ciencia: la ciencia como actividad, la ciencia como conocimiento, la ciencia como sistema de ideas y la ciencia como actividad productora de nuevas ideas.

Un análisis bastante parecido al que hace Mario Heller, aunque sin conceptualizar las distintas visiones.

Características

Sobre este aspecto de la ciencia hay un criterio bastante uniforme aunque todos los autores hablan de características del conocimiento científico.

Si bien existen algunas diferencias sobre los conceptos utilizados para caracterizar a la ciencia, esencialmente hablan de lo mismo.

Para Esther Díaz, por ejemplo, el conocimiento científico se caracteriza por ser:

"1.descriptivo, explicativo y predictivo.

2.crítico-analítico.

3.metódico y sistemático.

4.controlable.

5.unificado.

6.lógicamente consistente.

7.comunicable por medio de un lenguaje preciso.

8.objetivo

9.provisorio."[10]

Mientras que Pardo enumera las siguientes características:

"- fundamentación (coherencia lógica y contrastación empírica);

– sistematicidad;

– capacidad explicativa y predictiva (mediante leyes) de la realidad;

carácter crítico;

– ambición de objetividad".[11]

Mario Heller por su parte:

"- legalista (busca leyes, con las que explica, retrodice y predice los hechos);

– fundamentado (lógica y empíricamente);

– sistemático;

– metódico;

– provisorio;

– con pretensión de objetividad".[12]

Sobre este tema se podría sintetizar que la ciencia o el conocimiento científico es un saber:

1) Descriptivo, explicativo y predictivo. Porque intenta describir los fenómenos que estudia explicando su funcionamiento y anticipando como se comportaran esos fenómenos en el futuro.

2) Metódico y sistemático. Porque sigue determinadas pautas o métodos para dar cuenta de sus investigaciones y se articula dentro de un sistema de teorías que la sustentan.

3) Contrastable. Ya que sus teorías y sus métodos son públicos.

4) Claro y preciso. Porque sus explicaciones deben estar exentas de toda ambigüedad.

5) Objetivo. Para evitar por todos los medios la visión subjetiva del investigador.

6) Provisorio. Porque el conocimiento probado hoy puede ser refutado mañana por un conocimiento superior.

7) Crítico. Para cuestionar permanentemente el saber provisorio que aun no ha sido refutado.

Clasificación

Existen varias clasificaciones planteadas por distintos autores, con criterios distintos e incluso considerando el ámbito de aplicación de la ciencia.

Muchos, sino la mayoría, hablan de una división entre ciencias formales y fácticas, evaluando para esta división tanto el objeto de estudio, el tipo de enunciados que produce cada una como así también el método utilizado para validar las hipótesis.

En general, se puede decir que las ciencias formales tiene como objeto de estudio entes ideales sin existencia real; mientras que las ciencias fácticas se ocupan del estudio de los hechos, los procesos, los objetos y las cosas.

Respecto del tipo de enunciados producidos por las ciencias formales, se los suele describir como relaciones entre entes ideales; mientras que las ciencias fácticas producen relaciones entre los hechos, los procesos, objetos o cosas, que son objeto de su estudio.

Los métodos si bien tienen aspectos en común, ya que ambas ciencias utilizan la lógica, difieren en el valor que le dan a la misma. Para las ciencias formales la existencia de la lógica es suficiente para intentar deducir hipótesis a partir de ella, que en caso de demostrarse como verdaderas habrán confirmado la hipótesis sin más problemas.

Las ciencias fácticas, por su parte, consideran la existencia de la lógica necesaria pero no suficiente. Es por eso que necesitan contrastar sus hipótesis con la realidad objetiva para comprobar si los enunciados se verifican en la realidad.

Pardo, por ejemplo, explica cada uno de los elementos a tener en cuenta para la clasificación, de la siguiente manera:

" Cuando se trata de clasificar las ciencias se acostumbra a tomar como referencia cuatro criterios: el objeto de estudio, los métodos, la clase de enunciados y el tipo de verdad.

Al hablar de objeto de estudio, nos referimos al sector o ámbito de la realidad estudiada (los seres vivos para la biología, o el movimiento de los cuerpos celestes para la astronomía, por dar solo algunos ejemplos).

Los métodos se relacionan con los distintos procedimientos, tanto para el logro de conocimientos como para su justificación y puesta a prueba.

El tipo de enunciados alude a la diferencia entre proposiciones analíticas o formales, vale decir, aquellas vacías de contenido, y sintéticas, a saber, las que se refieren de algún modo a sucesos o procesos fácticos.

Finalmente, acerca del criterio referido al tipo de verdad involucrado en estos enunciados, diremos que mientras a los primeros les corresponde una verdad necesaria y formal, relacionada con la coherencia lógica, en el caso de los segundos su verdad será contingente y fáctica, dependiente de su verificación empírica."

"Las ciencias formales son la matemática y la lógica, pues su objeto de estudio se caracteriza porque sólo tiene existencia ideal, no existe en la realidad espacio-temporal: (…)los signos [de la matemática y de la lógica] no refieren a una realidad extralinguística, sino que [estan] vacios de contenido."

"(…)las ciencias fácticas [como] la física y la química informan acerca de la realidad extralingüística (…) tienen como objeto de estudio entes materiales y se refieren (…) a la realidad empírica."[13]

Asimismo, Pardo, hace una distinción dentro de las ciencias fácticas entre las ciencias naturales y las sociales:

"(…)Tal distinción pretende fundarse en diferencias en cuanto al objeto de estudio (la naturaleza o el hombre, respectivamente) y, sobre todo, acerca del tipo de conocimiento involucrado en ellas. (…) hay quienes descalifican la cientificidad de las ciencias sociales al argumentar que ellas nunca pueden alcanzar metodológicamente la "objetividad" de las naturales, dando por sentado, desde ya, que [esta propiedad](…) queda acotada la posible y rigurosa aplicación del método de las ciencias naturales, y reduciendo, de modo hiperpositivista, verdad y racionalidad a método." [14]

Esther Díaz hace mención a otra clasificación entre ciencias duras y blandas, y entre débiles y fuertes, basado en el método de validación, fundamentalmente.

"A las ciencias sociales se las suele catalogar como "débiles" epistemológicamente, y a la biología y a algunos desarrollos posnewtonianos de la física, así como a ciertos aspectos de la química, se los denomina "semidébiles". En oposición a esto, la física-matemática es llamada "fuerte", entre otras cosas, porque sus proposiciones son formalizables y corroborables con la experiencia: es decir que cuentan con respaldos epistemológicos fuertes o positivos. También en este sentido se le dice "ciencias duras" a las naturales y "blandas" a las sociales."[15]

Tanto Bunge como Mario Heller describen la misma clasificación que el resto, aunque este ultimo agrega una clasificación entre ciencia aplicada y ciencia pura.

"Al abarcar en su totalidad lo que se denomina ciencia se observa cómo una tarea teórica, como la producción de conocimiento científico, tiene connotaciones prácticas mediante la tecnología. De este modo la ciencia contribuye al bienestar de la humanidad. Aunque también causa perjuicios(…)."

"Se puede distinguir en consecuencia un nivel teórico y un nivel práctico en las ciencias. Esto permite también hablar de ciencia pura cuando la investigación se plantea sólo problemas teóricos, es decir, intenta dar cuenta y explicar la realidad independientemente de su aplicación. Asi como de ciencia aplicada en tanto se estudian, en base a elementos de la ciencia pura, problemas prácticos(…)."[16]

A partir de esta clasificación aparece un nuevo concepto relacionado con la ciencia, la tecnología.

Concepto que Heller define de esta manera:

"Cuando los procedimientos para dominar los fenómenos se originan en la aplicación de los conocimientos científicos, se habla de tecnología(…) La tecnología toma entonces teorías científicas y las adapta para determinados fines."[17]

Por su parte Pardo brinda una concepción muy similar, asociada a la idea de ciencia aplicada.

"(…)atendiendo a cual sea su objetivo primario, teórico o práctico, si se está ante un problema propiamente científico (es decir, de investigación básica) o ante uno de ciencia aplicada o tecnología."[18]

Por otra parte, analizando el desarrollo histórico que han tenido los conceptos de ciencia y tecnología, Alejandro Piscitelli explica lo siguiente:

"Tradicionalmente la tecnología se consideraba como una etapa específica en la modificación del conocimiento. Este podía categorizarse dentro del siguiente continuum (i) conocimiento cuya utilización no es conocida, o es poco conocida en el tiempo y el espacio; (ii) conocimiento potencialmente utilizable; (iii) conocimiento utilizable (desarrollo); (iv) conocimiento utilizado.

En esta tipología, el origen de la tecnología podía detectarse con el surgimiento del conocimiento utilizable producido por el desarrollo, que por primera vez en el continuo creación/innovación otorga alta probabilidad de ser utilizado a escala social.

Está implícita en esta concepción la transformabilidad, es decir, la capacidad de que dicho conocimiento sea apto para producir la transformación de elementos materiales o simbólicos en bienes y servicios. En resumen, la tecnología se concebía como conocimiento utilizable o utilizado a escala social con el objeto de transformar elementos materiales y/o simbólicos en bienes y servicios."[19]

Mario Bunge, utilizando una interpretación similar al resto la define así:

"La ciencia como actividad; como investigación, pertenece a la vida social; en cuanto se la aplica al mejoramiento de nuestro medio natural y artificial; la investigación y manufactura de bienes materiales y culturales, la ciencia se convierte en tecnología."[20]

Teoría

Sobre este tema existe una uniformidad de criterios en cuanto a identificar la teoría con el conocimiento probado, en un momento histórico, que sirve como punto de partida, como base de sustento al desarrollo de la investigación científica y la formulación de hipótesis nuevas para intentar explicar los fenómenos que necesitan ser explicados.

Sin embargo en su libro Métodos de Investigación Social, Goode y Hatt hacen un análisis más profundo de este tema cuando escriben lo siguiente:

" Para la ciencia moderna es fundamental la intrincada relación que existe entre teoría y hecho.

(…)[cuando los hombres de ciencia] están dedicados a la investigación se ve claramente que:

a) teoría y hecho no están diametralmente opuestos, sino inextricablemente entrelazados;

b) la teoría no es especulación, y

c) los hombres de ciencia se ocupan (…)[tanto] de la teoría como de los hechos.

(…)teoría se refiere a las relaciones entre hechos, o al ordenamiento de los mismos en alguna forma que tengan sentido.

[A los sistemas o principios ordenadores] (…)Sin teoría, la ciencia no podría predecir nada. Y sin esta predicción no habría dominio sobre el mundo material.

Por lo tanto, se puede decir que los hechos de la ciencia son producto de las observaciones que no se hacen al azar, sino que tienen un sentido, es decir, que son teóricamente congruentes(…) El desarrollo de las ciencias es una constante acción recíproca entre teoría y hecho.

La teoría es un instrumento de la ciencia en los modos siguientes:

1) define la orientación principal de una ciencia, en cuanto define las clases de datos que se han de abstraer;

2) presenta un esquema de conceptos por medio del cual se sistematizan, clasifican y relacionan entre sí los fenómenos pertinentes;

3) resume los hechos en: a) una generalización empírica, y b) sistemas de generalización;

4) predice hechos; y

5) señala los claros que hay en nuestro conocimiento.

La teoría como orientación. Una función capital del sistema teórico es que reduce el ámbito de los hechos por estudiar.

Cada ciencia y cada especialización, hacen abstracciones dentro de un amplio campo de realidades, manteniendo su atención fija en unos pocos aspectos de unos fenómenos dados(…). Así la teoría ayuda a definir cuáles son los hechos pertinentes.

Teoría como conceptualización y clasificación(…)una tarea fundamental de cualquiera de las ciencias es la de establecer sistemas de clasificación, una estructura de conceptos y un conjunto preciso, siempre creciente, de definiciones correspondientes a dichos términos.

(…)resumir[los hechos en] 1) generalización empírica, y 2) Sistemas de relaciones entre proposiciones.

(…)predice hechos. Si la teoría resume hechos y establece una uniformidad general más allá de las observaciones inmediatas, pasa a ser, también, predicción de hechos. Esta predicción tiene varias facetas. La más manifiesta es la extrapolación de lo conocido a lo desconocido.

[La teoría establece los hechos que cabe esperar]. Esto se convierte en un conjunto de instrucciones para el investigador, que le dicen cuáles datos deberá ser capaz de observar.

(…)señala los claros que hay en nuestro conocimiento.[Asi como] resume hechos conocidos y predice otros que aún no se han observado, tiene que señalar también las zonas que no han sido exploradas.

[La misma teoría que sistematiza y organiza los hechos nos permite encontrar] los puntos en los que nuestro conocimiento es deficiente."[21]

En realidad se puede ver que el concepto alude a la teoría antes mencionada pero haciendo un análisis mucho más profundo y detallado de este concepto.

Conclusión

Se podría concluir de todo lo expuesto que aún entre los mismos investigadores científicos y filósofos de la ciencia, existen diferencias a la hora de conceptualizar los términos que forman parte de su trabajo cotidiano. Términos como ciencia, conocimiento científico, investigación científica, tecnología, teoría, etc. tienen varias definiciones, con un hilo conductor que las mantiene coherentes dentro del ámbito o el contexto de lo científico, aunque en muchos casos puede llevar a equivocaciones la sustitución, por ejemplo, del concepto de ciencia con conocimiento científico.

Sin embargo en otros aspectos, como la clasificación de la ciencia no hay criterios tan dispares, salvo algunas clasificaciones, que se agregan pero que no desvirtúan la clasificación por excelencia entre fácticas y formales.

Lo mismo se puede decir respecto a las características que le adjudican unos y otros a la ciencia, salvo un mayor o menor detalle de estos aspectos.

En definitiva, sería muy apropiado concluir diciendo que así como la actividad científica es provisoria y en constante cambio por la dinámica propia de su actividad, la teorización y conceptualización que se intenta hacer sobre los términos que ella utiliza para comunicar sus trabajos e investigaciones, tiene esas mismas características y por lo tanto no es posible encontrar un criterio cerrado o acabado sobre sus definiciones.

Bibliografía

  • Ciencia en movimiento. La construcción social de los hechos científicos. Piscitelli, Alejandro. Buenos Aires, 1993. Editorial C.E.A.L.

  • Hacia una visión crítica de la ciencia. Díaz, Esther. Buenos Aires. Biblos, 1992.

  • La ciencia, su método y su filosofía. Bunge, Mario. Buenos Aires. Ediciones Siglo Veinte, 1996.

  • Metodología de las ciencias sociales. Díaz, Esther. Buenos Aires. Biblos, 1997.

  • edu.redMétodos de investigación social. Goode, William y Hatt, Paul. México. Editorial Trillas S.A., 1970.

 

 

Autor:

Mariano Davis

[1] Metodolog?a de las ciencias sociales. D?az, Esther. Capitulo III Pag. 67. Buenos Aires. Biblos, 1997.

[2] Metodolog?a de las ciencias sociales. D?az, Esther. Capitulo I Pag. 20. Buenos Aires. Biblos, 1997.

[3] Metodolog?a de las ciencias sociales. D?az, Esther. Capitulo I Pag. 20. Buenos Aires. Biblos, 1997.

[4] Metodolog?a de las ciencias sociales. D?az, Esther. Capitulo I Pag. 20. Buenos Aires. Biblos, 1997.

[5] Hacia una visi?n cr?tica de la ciencia. D?az, Esther. Capitulo V. Pag. 118. Buenos Aires. Biblos, 1992.

[6] Hacia una visi?n cr?tica de la ciencia. D?az, Esther. Capitulo V. Pag. 117. Buenos Aires. Biblos, 1992.

[7] M?todos de investigaci?n social. Goode, William y Hatt, Paul. Capitulo 2. Pag. 16. M?xico. Editorial Trillas S.A., 1970.

[8] La ciencia, su m?todo y su filosof?a. Bunge, Mario. Pag. 9. Buenos Aires. Ediciones Siglo Veinte, 1996.

[9] La ciencia, su m?todo y su filosof?a. Bunge, Mario. Pag. 9. Buenos Aires. Ediciones Siglo Veinte, 1996.

[10] Metodolog?a de las ciencias sociales. D?az, Esther. Capitulo I Pag. 15. Buenos Aires. Biblos, 1997.

[11] Metodolog?a de las ciencias sociales. D?az, Esther. Capitulo III Pag. 71. Buenos Aires. Biblos, 1997.

[12] Hacia una visi?n cr?tica de la ciencia. D?az, Esther. Capitulo V. Pag. 125. Buenos Aires. Biblos, 1992.

[13] Metodolog?a de las ciencias sociales. D?az, Esther. Capitulo III Pag. 72. Buenos Aires. Biblos, 1997

[14] Metodolog?a de las ciencias sociales. D?az, Esther. Capitulo III. Pag. 72. Buenos Aires. Biblos, 1997.

[15] Metodolog?a de las ciencias sociales. D?az, Esther. Capitulo I. Pag. 20. Buenos Aires. Biblos, 1997.

[16] Hacia una visi?n cr?tica de la ciencia. D?az, Esther. Capitulo V. Pag. 119. Buenos Aires. Biblos, 1992.

[17] Hacia una visi?n cr?tica de la ciencia. D?az, Esther. Capitulo V. Pag. 118. Buenos Aires. Biblos, 1992.

[18] Metodolog?a de las ciencias sociales. D?az, Esther. Capitulo III. Pag. 78. Buenos Aires. Biblos, 1997.

[19] Ciencia en movimiento. La construcci?n social de los hechos cient?ficos. Piscitelli, Alejandro. Capitulo VII. Pag. 91. Buenos Aires, 1993. Editorial C.E.A.L.

[20] La ciencia, su m?todo y su filosof?a. Bunge, Mario. Pag. 8. Buenos Aires. Ediciones Siglo Veinte, 1996.

[21] M?todos de investigaci?n social. Goode, William y Hatt, Paul. Capitulo 2. Pag. 16/22. M?xico. Editorial Trillas S.A., 1970.

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