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Un proceso de formación en el ámbito de la orientación vocacional

Enviado por Liliana Ponti


     

     

    I. INTRODUCCION

    Partiendo de la necesidad de formación y capacitación permanente y respondiendo a una contínua demanda de los profesionales habilitados para el desempeño en Orientación Vocacional (en adelante O.V.), los Departamentos de O.V. y de Ciencias de la Educación, han generado un espacio de intercambio acerca de la problemática vocacional-ocupacional. El objetivo consiste en contribuir a la capacitación teórico-práctica en O.V..

    En este trabajo, desarrollaremos específicamente, un proyecto de capacitación profesional destinado a egresados de carreras cuyos títulos habiliten para el desempeño del rol de orientador vocacional. El mismo consta de una primera parte referida a los marcos teóricos que sustentan la O.V. y los pedagógicos, desde los cuales se orientarán los procesos formativos de los profesionales a que va dirigido. Luego, una segunda parte en la que describimos el detalle de su implementación, haciendo mención de los objetivos que explicitan la intencionalidad , la modalidad y sus estrategias (de desarrollo y evaluación).

     

    II. PRIMERA PARTE: MARCO TEORICO

    II. 1. Supuestos Teóricos de la Orientación Vocacional

    La Orientación Vocacional es un área especializada que implica un campo de trabajo preventivo, clínico y de investigación que es compartido por la Psicología y la Psicopedagogía, para cuyo abordaje se requieren conocimientos propios de las disciplinas mencionadas, como así también de otras disciplinas como la Pedagogía, la Antropología, la Sociología, la Economía y la Política. El manejo de estos conocimientos posibilitarán a estos profesionales tener una visión más integradora de las problemáticas humanas especialmente a lo que hace referencia a lo vocacional y ocupacional.

    El aprender es para el hombre la posibilidad de vivir, de constituirse como un individuo diferente pero a la vez integrado a una realidad social y cultural que le permitirá un crecimiento que tienda a un sentimiento de plenitud. La elección vocacional será así un aprendizaje de ser uno mismo, persona responsable, como así también de ocupar un lugar social y ocupacional.

    Entendemos al proceso de Orientación Vocacional como un proceso de aprendizaje, espacio de reflexión que conduce a esclarecer quién se es y quién se quiere llegar a ser a través del reconocimiento de su propia historia (personal, escolar), de sus deseos y de los deseos de los demás, en síntesis, contribuir a una toma de conciencia de lo que implica generar un proyecto vocacional y ocupacional. Esta reflexión es complementada con un proceso de información referido a las ofertas educativas, profesionales y posibilidades laborales que el contexto le ofrece, facilitando la confrontación entre quién Soy, quién quiero Ser, qué deseo Hacer y para qué; estos interrogantes le permitirán elaborar un proyecto auténtico el cual supondrá un acto de creación personal sustentando la singularidad de cada sujeto. En esta singularidad se manifestará la originalidad para ser creador de sus proyectos de vida.

    Quién es el Sujeto de la Orientación Vocacional? En su mayoría son púberes o adolescentes que están atravesando situaciones de cambios, los cuales producen desequilibrios que llevan a crisis, las que podemos denominar como vitales porque implican reajustes, nuevas adaptaciones, que estarán significadas por las dudas, los temores, las fantasías que se despliegan a partir de ellas (Fernández Moujan, 1989).

    Las crisis personales, familiares y sociales provocan indiscutiblemente desorientación. Lo importante es crear espacios para que el adolescente pueda plantear y resolver su problemática vocacional, asumiendo ser protagonista de sus elecciones. Así el proceso de O.V. se constituye en un espacio de reflexión, de relaciones vinculares (orientador-orientado, orientado-orientado) con la finalidad de proporcionar recursos al servicio de este encuentro para exteriorizar y elaborar el conflicto vocacional.

    Para su abordaje como proceso sistemático asistencial requiere de una formación específica teórica y técnica, conocimientos que permitirán al orientador comprender y acompañar a los orientados para el esclarecimiento de su conflicto vocacional y para el aprendizaje de las elecciones vocacionales-ocupacionales.

    Por otra parte la identidad vocacional-ocupacional del orientador solo podrá ser consolidada a través de la praxis profesional en permanente confrontación con los conocimientos científicos y técnicos que la misma le demanda. Este proceso de aprehender el rol evidentemente implica la posibilidad de búsqueda, descubrimientos en relación a sus propios límites, como así también afirmar el potencial creativo necesario para la compleja pero apasionante tarea de acompañar a otros en la elección de quién ser y qué hacer para dar un sentido dignificante a la existencia humana.

     

    II. 2. Supuestos Teóricos Pedagógicos

    En el proceso de formación se deberán realizar construcciones cognitivas que aproximen al objeto específico de la O.V. a la par que vivenciar determinadas prácticas que lleven a generalizar los conocimientos pertinentes a posibles situaciones reales. El "aprender" estos objetos específicos involucran procesos muy complejos, pero en este caso en particular, esa complejidad se ve agudizada por la multidimensionalidad de lo que se ha de aprender: a ser orientador (aprendizaje de un rol profesional), el campo propio de la O.V., amplio y complicado, además de comprometido si se tiene en cuenta que, de lo "que se haga en los procesos de orientación", dependerá , en parte, la decisión de la actividad ocupacional o profesional futura de los sujetos. Este aspecto, no sólo requiere de un amplio dominio acerca de las diversas actividades productivas humanas, en un determinado contexto histórico, sino también, conocimientos que permitan coordinar y orientar los procesos interactivos grupales e individuales en los que se conjugan la historia personal, los intereses, las proyecciones, las valoraciones de los sujetos involucrados en estas prácticas orientadoras.

    Esta formación se sustenta en los siguientes principios pedagógicos:

    a) Todo sujeto en formación está cargado de supuestos, creencias, valores, experiencias previas, conocimientos que incidirán en el modo en como signifiquen o resignifiquen el rol profesional y el modo de desempeñarlo.

    b) Aprendizaje es una construcción que compromete una estrecha vinculación entre la teoría y la práctica, en tanto una como otra se asumen como objeto de conocimiento en un proceso de mutua regulación.

    c) El aprendizaje supone un proceso social en un doble sentido, por el objeto de conocimiento que se estudia: O.V. y por el mismo proceso de formación involucrado, basado en la producción y reflexión colectivas y procesos vinculares posibilitantes de intercambios.

    d) Adopción de la propia práctica como objeto problemático, que conlleve a una reflexión sistemática y facilitadora de coherencia y autonomía profesional.

     

    III. SEGUNDA PARTE: DESCRIPCION DE LA PROPUESTA

    III. 1. Objetivo y modalidad de trabajo

    El objetivo general de esta propuesta consiste en contribuir a la capacitación teórico-práctica en O.V., para satisfacer la demanda de formación de recursos especializados.

    Siendo congruente con los supuestos epistemológicos y pedagógicos en los cuales pretendemos enmarcarnos para la implementación de este proyecto, hemos elegido como modalidad de trabajo, al Seminario-Taller. La elección se sustenta en la implicancia misma de esta metodología:

    • el reconocer la importancia del objeto de conocimiento como el elemento convocante de los encuentros;

    • la consideración que en el aprendizaje se comprometen las dimensiones cognitiva y vincular;

    • la relación estrecha entre los planos teóricos y prácticos que inducen necesariamente a una indagación, investigación permanente;

    • la participación de los miembros involucrados en el proceso, desde los aportes individuales y de conjunto para construir un espacio social compartido.

    La implementación se concretará en cuatro fases sucesivas en interacción permanente.

    Primera fase

    En esta etapa se realizará una revisión de los conocimientos y experiencias previas como así también expectativas de los profesionales participantes, en relación a la O.V.. A partir de esa información obtenida, se procederá a configurar de manera conjunta con los participantes, la delimitación de los temas a desarrollar y la modalidad pedagógica propuesta.

    El primer tema sugerido como eje será la Orientación Vocacional como disciplina, como campo de trabajo preventivo, clínico y de investigación, los temas fundamentales versarán sobre el conjunto de conocimientos científicos que sustentan los diferentes modelos de la O.V. y sus modos de abordaje.

    El segundo eje propuesto será la Orientación Vocacional como proceso y el Proceso de Orientación Vocacional, lo que implicará el estudio y análisis de los diferentes momentos de un proceso de O.V., como así también de las técnicas auxiliares para llevarlo a cabo.

    El tercer eje sugerido será la Identidad Profesional del Orientador Vocacional. El aspecto central del mismo estará referido al aprendizaje del rol del Orientador Vocacional, asumiendo la actitud de co-pensor, esclarecedor y acompañante del proceso orientador, contextualizando su tarea en el marco de las problemáticas sociales, culturales del momento histórico en que se desarrolla la intervención profesional.

    En esta fase se preve el desarrollo de los módulos favoreciendo la participación individual y grupal: revisión bibliográfica, discusiones de temas, producciones grupales, integración de núcleos centrales a partir de relaciones significativas entre los conceptos, exposiciones dialogadas, con la utlización de diferentes recursos tecnológicos.

    Segunda fase

    En esta fase, se facilitará un contexto posibilitante de representaciones de procesos de O.V. en base a situaciones creadas a partir de determinadas problemáticas significadas como relevantes por los mismos participantes. La intención es la re-creación de situaciones de O.V. (en los roles orientador-orientado) en base a experiencias vivenciales.

    Estas representaciones serán analizadas por los participantes en el marco de las perspectivas teóricas desarrolladas.

    Tercera fase

    En esta fase, los participantes elaborarán y presentarán un plan de trabajo de proceso de O.V. contextualizado en una situación real y que podría ser implementado a posteriori. Las propuestas serán supervisdas de manera grupal y con una importante participación de los coordinadores del Seminario-Taller.

    Cuarta fase

    Se entenderá a la evaluación como parte del proceso de enseñanza y de aprendizaje, en la formación.

    En esta evaluación se tendrán en cuenta, por un lado, el rendimiento individual de los sujetos de aprendizaje (profesionales orientadores participantes), haciendo hincapié fundamentalmente en el aspecto epistemológico del campo específico de la O.V.. Por otro lado, la evaluación comprenderá el proceso de implementación del Seminario-Taller, acentuando en este caso los aspectos pedagógicos y de funcionamiento grupal, incluidos aquí los coordinadores del mismo, para lo cual se utilizará un instrumento pertinente.

    Los criterios centrales para la evaluación que se prevén, apuntan a la producción individual y grupal, en lo referido a los niveles de conceptualización y generalización a contextos situados. En lo relativo a la implementación del proyecto, apuntan al nivel de efectividad y congruencia con la intencionalidad del proceso de formación y su modo de llevarlo a la práctica.

     

    IV. TERCERA PARTE: PROSPECTIVA

    La propuesta hasta aquí detallada, se implementará durante el año académico 1996. Creemos importante consignar aquí, que está prevista la continuidad en una segunda etapa, a llevarse a cabo prospectivamente durante 1997. En la misma, los orientadores podrán ejecutar en las distintas instituciones previstas, los proyectos ya evaluados y aprobados. La tarea principal consistirá, entonces, en el seguimiento y supervisión de los trabajos en encuentros grupales, con una frecuencia a determinar oportunamente.

     

    Referencias bibliográficas

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    • Müller, M. 1994 Descubrir el camino. Ed. Bonum, Buenos Aires.

     

    Liliana Ponti

    Ana Vogliotti / Araceli Sanchez Malo / Rina Vasquetto